Campo de batalla del Hotel "Gran Ecruteak", 5:29 A.M


Era una fría, silenciosa y triste mañana en la antigua y misteriosa Ciudad Ecruteak. Tanto el cielo como también las nubes presentaban depresivos y opacos colores, mientras que las titilantes estrellas brillaban con poca intensas debido al más que inminente ascenso del sol en el horizonte.

Gold, el joven y talentoso entrenador prodigio de Pueblo New Bark, estaba tranquilamente acostado en medio del solitario campo de batalla, localizado en la parte posterior del famoso hotel donde se hospedaba, y en silencio contemplaba, con mucha melancolía y tristeza, el oscuro cielo para tratar de despejar su angustiada mente.

-¿Qué demonios sucedió conmigo ayer?- Se preguntó Gold, al ahora recordar vívidamente lo ocurrido frente a la Torre Quemada con Silver. -¿Acaso ese es mi verdadero yo?-

Por la mente de Gold pasaban en ese momento miles de interrogantes las cuales, para su desagrado, no tenían respuesta alguna por el momento. Más sin embargo, sola una cosa era segura para él y era que la primera de las visiones de Morty se estaba cumpliendo y la persona que lo abandonó fue Kelly.

"La primera de ellas de un momento a otro desapareció sin explicación alguna a algún lugar cercano al mar…"

-Si el resto de la visión de Morty resultara ser cierta, entonces Kelly debería de estar camino a Ciudad Olivine en este preciso momento…-

Gold colocó ambas manos sobre sus agotados ojos y soltó un gran y sonoro suspiro de frustración e impotencia, acción que provocó que le volviera a doler con suma intensidad su amoratado abdomen por breves instantes.

Su mente desea con todas sus fuerzas salir en ese mismo momento por Kelly. Pero su cuerpo, a pesar de estar mucho mejor que hace unas horas atrás, aún le dolía y no estaba en condiciones para poder afrontar un exhaustivo viaje de búsqueda. Lo que menos Gold deseaba en ese momento era ser una carga para los demás.

-¿Qué se supone debo hacer ahora?- Volvió a preguntarse Gold, pero esta vez en voz alta y con notable frustración. -Arceus, por favor protégela de todo mal y no dejes que ella cometa alguna estupidez.-

-¿Tu no deberías de estar en cama descansando o algo así?- Se escuchó preguntar a alguien de manera agria y desde la mismísima entrada del campo. -Si sigues esforzando tu cuerpo de esta manera, pronto acabarás muerto, Gold.-

-Tch… ¿Y no se supone que tu deberías de estar durmiendo a esta hora o algo asi?- Contrainterroga Gold al inmediatamente reconocer el apático tono de voz de Silver. -Es muy temprano para que incluso tú estés despierto.-

-Lo mismo podría decirte yo a ti.- Vociferó el pelirrojo antes de soltar un enorme bostezo. -Tú más que yo deberías de estar durmiendo junto a tu harem para recuperar fuerzas y descansar tu cuerpo.-

-Ya te lo he dicho más de mil veces. No tengo un maldito harem y en serio ya me siento mucho mejor.-

-Heh, eres realmente terrible para mentir.- Señaló el pelirrojo, quien sin titubear, se acercó lentamente a dónde estaba Gold, para después sentarse a su lado. -¿Lo sabes, verdad? Realmente terrible y algo patético.-

-Tiendo a escuchar eso de vez en cuando.- Admitió Gold luego de haber retirado sus manos de encima de sus ojos. -¿A qué debo tu presencia en este lugar tan temprano por la mañana?-

-Siempre me ha gustado levantarme temprano por las mañanas para entrenar al menos un par de minutos antes de desayunar. -¿Y tú cómo terminaste aquí?-

-Uhh… N-no podia dormir, así que decidí salir para despejar mi mente un poco. Pero termine por acostarme aquí para apreciar el cielo y también disfrutar de la fría brisa mañanera. Digamos que necesitaba algo de espacio para mi mismo.-

-Sabes, comprendo perfectamente lo que debes de estar sintiendo en este momento.- Reconoce Silver con algo de melancolía y soltando un suspiro. -Siempre es difícil ver a una persona que amas irse.-

-Supongo que lo dices por experiencia.-

-Así es.-

-Sé que te sientes un poco culpable por lo que sucedió con Kelly. Pero no es tu culpa que ella decidiera irse de ese modo. Tu solo fuiste el catalizador para una exagerada reacción en cadena que ya se venía formando desde mucho antes de que la derrotaras.-

-Tch… Yo se muy bien eso. Pero de todas formas me siento parcialmente responsable y deseo ayudarte a encontrarla. N-no me malinterpretes ni nada por el estilo.-

-Descuida, Silver. No es necesario.-

-¿Huh?-

-No es necesario que nos ayudes a encontrarla.- Vuelve a repetir Gold en un tranquilo tono. -Tu lugar en este momento es en Goldenrod con Lucía para cuando despierte.-

-Aprecio mucho el noble gesto, pero ya tome mi decisión.- Aclaró velozmente Silver, mientras que forzaba una leve sonrisa en sus labios. -Luego de ayudarte a encontrar a la rubia psicótica, regresare a Goldenrod y después seguiré mi investigación sobre los verdaderos planes del Equipo Rocket.

-Enserio preferiría que regresaras a Goldenrod en este mismo momento y me dejes encargarme de encontrar a Kelly. Pero se muy bien que eres demasiado obstinado y testarudo como para seguir mi consejo. Heh, eres un maldito cabeza dura sin remedio…-

-Pues, tú no te quedas muy atrás que digamos.- Señala el pelirrojo al observar de reojo a Gold. -Ayer tu casi-…

-Lo sé y en verdad lamento mucho todos los problemas que te cause.- Reconoció Gold, breves instantes antes de colocar su preciada gorra de la suerte sobre sus ojos. -No sé qué rayos sucedió conmigo ayer. Pero lo único que sé es que no pude controlar mi ira y me deje llevar demasiado por mis emociones.-

-Descuida. No te culpo ni tampoco te guardo rencor por lo sucedido.- Aseguró Silver. -Se que es un poco difícil de creer, pero a mi también me sucedió algo parecido una sola vez en el pasado. Solo que de peor manera…-

-¿E-enserio?-

-Así es…-

-¿Fue cuando intentaron asesinar a Lucía, verdad?-

-Tiene que ver con eso…-

-¿Quisieras contarme lo que pasó?-

-Tch… Preferiría no tener que hacerlo.- Admitió Silver de mala gana y al poner automáticamente cara de pocos amigos. -Es doloroso tener que recordar eso qué sucedido cada dia de mi vida.-

-Vamos, Silver. Insisto en que deberias de hablar de eso para sacarlo de una vez de tu conciencia.-

-Ya te dije que-...

-Cuando tu y yo entrenamos, te hable de mi padre y varias otras cosas qué se suponía no debería de haber hecho porque, en cierta retorcida forma, empezaba a confiar en ti, mientras que tu apenas si mencionaste a Lucía y no me hablaste sobre los detalles de lo que sucedió.-

-¿Si te cuento sobre todo lo que sucedió, prometes dejar de ser tan irritante?-

-Podría intentarlo.- Admite Gold con una sonrisa. -Pero no te prometo cumplirlo.-

-Tch… Supongo que eso es mejor que nada.-

-S-solo habla de una maldita vez, Silver. Soy todo oídos.-

-¿Sabes cuál es la diferencia entre las promesas que hacemos y los recuerdos que tenemos?-

-Uhhh… P-pues no. Ni idea…-

-La diferencia radica en que nosotros rompemos las promesas, mientras que los recuerdos nos rompen a nosotros después de un tiempo…-

Posterior a lo dicho por Silver, Gold no pudo evitar apartar su gorra de la suerte de sus ojos para mirar con una mezcla entre asombro, tristeza y lástima al pelirrojo.

-Sabes, yo prometí que siempre estaría a su lado para protegerla de todo peligro. Se suponía yo tenía que acabar con el Equipo Rocket para hacer de este miserable mundo un lugar un poco mejor para todos. Pero todo se salió de mi control, sin siquiera saberlo, y termine siendo utilizado cómo una maldita marioneta en un triste show de circo.-

-Silver…-

En cuestion de milesimas de segundo y muy para el asombro y preocupación de Gold, el semblante del rostro de Silver paso a uno más rígido y depresivo. -Hace cinco (5) meses atrás yo cometí el error más grande de mi vida.- Confesó el pelirrojo con notable tristeza y arrepentimiento. -Casi todas las noches veo el rostro de esas tres (3) personas, Gold. No hay dia en que no me sienta culpable por lo que sucedió.-

-¿Q-qué fue lo que hiciste?- Pregunta el de New Bark al ver al pelirrojo reaccionar de esa forma tan poco convencional en el. -Puedes contarmelo…-

-En cierto modo te envidio, Gold. Tu ayer pudiste controlar hasta cierto punto tus deseos de ira y desesperación por ir a buscar a Kelly cuando aparecieron Crystal y tu prima. Pero yo a diferencia de ti, si pase la linea y me deje llevar aún más por mi odio.

-¿Q-qué me estás intentando decir con esto, Silver?-

-Para salvar la vida de Lucía de una muerte más que segura, yo termine por tomar la vida de tres (3) ex compañeros del Equipo Rocket.-

-¿Tú… asesinaste a tres (3) personas?-

Por breves instantes, Silver apretó sus labios hasta el punto de estremecerse. -No los asesine yo.- Confesó súbitamente el pelirrojo. -Pero prácticamente fue cómo sí lo hubiese hecho. Yo fui quien los orillo hasta ese punto de no retorno y no puedo evitar sentirme responsable.-

-¡E-explicate por favor!- Exige rápidamente Gold. -¿Qué rayos fue lo que sucedió?-

-Hace cinco (5) meses atrás, el actual líder del Equipo Rocket personalmente asignó a Lucía a una pequeña misión en Ciudad Goldenrod junto con otros tres (3) miembros de élite. Pero…-

-¿P-pero?-

-Pero extrañamente a mí no me asignaron a esa misión a pesar de ser su compañero y también ser considerado uno de los miembros élite del Equipo Rocket por mi alta habilidad en combate.-

-Entiendo. Era obvio que algo estaban tramando…-

-¡Exactamente!- Afirmó Silver, a la vez que esté fruncia activamente su ceño. -Lucía también sospechaba que había Meowth encerrado en cómo se estaba manejando la misión. Pero a pesar de mis muchas protestas, ella decidió ir con ellos para averiguar qué se traían entre manos.-

-¿De qué se suponía se trataba esa misión?-

-Antes de continuar… Tengo una pregunta para ti, Gold.-

-¿S-sí?-

-¿Qué sabías acerca del ahora colapsado y abandonado túnel subterráneo de Ciudad Goldenrod? ¿Alguna vez escuchaste hablar de él?-

-Solo conozco lo que escuche en las noticias hace ya bastante rato.- Informó rápidamente el de New Bark. -Se que ese túnel colapso debido una explosión por una fuga de gas. ¿Pero a qué viene todo-...?

-Esa era su misión. Un simple, sencilla y rápida inspección dentro de ese abandonado y solitario túnel. El Equipo Rocket deseaba verificar si eran ciertos los rumores sobre sí existía un pasadizo que conectaba ese lugar con la famosa Torre de Radio.-

-Espera… ¿Una simple misión de reconocimiento utilizando a sus miembros de élite?- Preguntó Gold, cuando esté alzó inconscientemente una de sus cejas. -E-eso no tiene sentido alguno… ¿Porque utilizarlos a ellos para ese tipo de trabajo?-

-Eso fue exactamente lo mismo que pensé cuando Lucy me informo que la habían elegido junto con los otros para esa misión.- Testifico reaciamente Silver, mientras que esté se cruzaba de brazos y soltaba otro desganado suspiro lleno de melancolía. -Toda esa maldita mision me dio un muy mal presentimiento desde un principio, por lo que decidí escabullirme de la base del Equipo Rocket para seguir a Lucía y a los demás a Ciudad Goldenrod en secreto. Pero no sin antes arreglármelas para interceptar sus transmisiones de radio.-

-¿Y así fue cómo te enteraste de que dentro de sus planes estaba asesinar a Lucía?-

Silver asintió con tristeza con su cabeza. -Todo al principio transcurrió con relativa normalidad. Ellos exploraron de pies a cabeza ese túnel, tal cómo se les había ordenado, pero al final no encontraron rastro de aquel tan rumorado pasadizo. Lo unico que habia dentro de aquel lugar era polvo, uno que otro pokémon salvaje y varias abandonadas tiendas departamentales llenas de antiguos articulos, ropa y demas cosas.-

-Y-ya veo…-

-Yo asumí que ese sería el final de todo y que el mal presentimiento que tenía fue solo eso, un simple e infundado mal presentimiento debido al miedo latente que tenía por la seguridad de Lucía. Pero fue en ese momento en dónde ocurrió. Yo logre escuchar con total claridad una breve transmision privada en donde el actual líder del Equipo Rocket les ordenó explícitamente a los otros miembros de la misión que provocarán una explosión y que dejaran a Lucia morir para hacerlo ver cómo un accidente cuando salieran a la superficie.-

-E-entiendo.- Fue lo expresado por Gold, quien ahora tenía una seria y triste expresión. -¿Y entonces qué fue lo qué hiciste después de escuchar esa transmisión?-

El pelirrojo volvió a expulsar sonoramente el aire que estaba en sus pulmones, acción que terminó por espantar a un par de Pidgeys que se habían colocado cerca de las graderías del campo de batalla. -Y-yo perdí instantáneamente toda capacidad para razonar y decidir dejarme llevar por la ira y por el odio.- Confesó Silver al encogerse de hombros. -También recuerdo perfectamente cómo los tome por sorpresa dentro de aquel túnel. Ursaring se encargó de dejarlos muy mal heridos a todos ellos, sin ningún tipo de excepciones o misericordia. Pero justo antes de rematarlos, Lucia me detuvo y me hizo entrar en razón. Ella, muy a pesar de que iba a ser ejecutada por esos malnacidos, me convenció de perdonarles la vida. Sin embargo, cuando ella y yo nos disponíamos a irnos de ese maldito lugar, uno de ellos optó por la opción más cobarde y miserable de todas justo antes de desfallecer.-

-¿Qué fue lo que ocurrió?-

-Con las pocas fuerzas que le restaban, uno de ellos lanzó una pokebola contra nosotros qué contenía a un Electrode, quien inmediatamente y sin mediar palabras, realizó una explosión suicida. Pero en el último segundo, Lucía y Ursaring utilizaron sus cuerpos para cubrirme de la explosión, mientras que los otros tres (3) murieron al instante junto al resto de sus pokémon.-

-E-espera… ¿O-osea que lo que sucedió allá abajo no fue una explosión por una fuga de gas, sino que fue-...?-

-Así es, Gold. Todo fue obra del Equipo Rocket. Pero gracias a sus varios infiltrados en la policía local, el incidente fue catalogado cómo una desafortunada explosión por fuga de gas.-

-En serio lamento mucho todo eso.- Indicó el de oscura cabellera antes de colocar por breves instantes su mano derecha en el hombro izquierdo de Silver. -Se que todo esto debió de ser muy difícil para ti.-

-No tienes ni idea por el infierno qué tuve que pasar. Ursaring quedó bastante mal herido y no fue hasta después de nuestro encuentro en las Ruinas de Alph que él se logró recuperar completamente de sus heridas. Pero Lucía fue la que se llevó la peor parte de todo y terminó en coma por intentar salvarme.- Declaró Silver, al mismo tiempo en que esté apretaba con furia sus puños. -Obviamente luego de todo lo que sucedió, el Equipo Rocket dio por muerta a Lucía junto con los otros involucrados en la explosión. Yo por mi parte, nunca más regrese con ellos y decidí seguirles la pista. Ya que nunca tuve la oportunidad de conocer sus verdaderos planes y objetivos. Pero obviamente manteniendo un bajo perfil para no poner en riesgo a personas inocentes.-

-No creo poder comprender por lo que debiste de pasar en aquella oscura época.- Reconoció Gold de un triste suspiro. -Tampoco soy quien para juzgarte ni te voy a mentir a la cara diciendote que te entiendo o alguna de esas cursilerías baratas. En lo que a mi respecta, todo fue culpa del Equipo Rocket.-

-Gracias, Gold… Realmente aprecio tus palabras.-

-Solo que hay algo que no logro comprender del todo…-

-¿Qué cosa?-

-¿Por qué rayos el Equipo Rocket intentaría asesinar a uno de los suyos de esa forma?- Cuestionó Gold enérgicamente y con algo de impaciencia. -¿Acaso descubrieron que los querías traicionar o que?-

-Ellos nunca sospecharon nada de mis verdaderas intenciones.- Aclaró Silver sin titubear. -Su principal "objetivo" y la razón del porque me reclutaron fue para traer de regreso a su antiguo líder. Ellos deseaban que con el regreso de Giovanni, las cosas fueran cómo antes de su derrota a manos de Red, Blue y Green.-

-Ok… ¿Pero por qué demonios Giovanni regresaría si tu-…?-

-Porque Giovanni es mi padre.-

-¿¡Q-Q-QUE!?-

-Así como escuchaste, Gold. Giovanni es mi padre.-

-¿G-giovanni es tu padre?- Repitió Gold lenta y comedidamente, mientras que sus ojos parpadeaban repetidas veces de manera involuntaria. -P-pero entonces tu-...

-Soy el legítimo heredero del Equipo Rocket. ¿Irónico, verdad?-

Gold realizó una breve pero forzada pausa para organizar sus ideas. -S-supongo que eso explica porqué tanto interés en reclutarte específicamente a ti.- Indicó Gold, poco antes de levantar su espalda del suelo, para de ese modo sentarse y mirar de mejor manera al pelirrojo. -T-todo tiene un poco más de sentido ahora.-

-Como te había mencionado la primera vez que nos vimos en la torre quemada, yo accedi unirme a ellos para volverme más fuerte y luego destruirlos desde dentro. Pero lo que no te conté fue que hice todo eso para, de cierta manera, rectificar todo el daño que causó mi padre al haber creado al Equipo Rocket. Sin embargo, descubrí a las malas qué ellos ya tenían sus propios planes…-

-¿Como por ejemplo?-

-Al principio ellos querían usarme solamente para localizar y traer de regreso a Giovanni. Pero luego de ver mi potencial cómo entrenador pokémon, ellos decidieron-...

-Hacer de ti un arma para su beneficio. ¿O me equivoco?-

-E-es correcto.- Reconoció el pelirrojo, quien estaba ahora visiblemente sorprendido por lo intuitivo que era Gold. -Qué yo me hiciera cercano a Lucía y su posterior muerte fue todo parte de un elaborado plan para acabar conmigo psicológicamente hasta el punto de llevarme a la locura y a la desesperación absoluta. Ellos lo que realmente deseaban era volverme su fiel marioneta…-

-N-no puedo creer que existan personas tan viles y malvadas en este mundo. Lo que ellos deseaban hacer con ustedes es imperdonable.- Exclamó Gold en un agresivo tono de voz. -Jugar con la vida y los sentimientos de las personas es algo demasiado bajo incluso para escoria cómo ellos…-

-Por eso es mi deber el acabar con ellos de una vez por todas.- Reitera enérgicamente el pelirrojo. -Quiero evitar que lo que me sucedio a mi y a Lucía se vuelva a repetir con alguna otra persona.-

-No olvides que yo te ayudare a derrotarlos, Silver. Para poder proteger a las personas que amo, debemos de destruirlos.-

-Aprecio mucho tu apoyo, Gold. ¿Pero estas seguro de querer ayudarme?-

-¡Completamente!-

-Según me habías comentado, tu padre es miembro de la policía internacional y-…

-No te preocupes por ese pequeñísimo detalle. Lo mejor es que lo pases por alto por el momento.-

-¿Pequeñísimo detalle?- Repite Silver luego de automáticamente levantar una de sus cejas. -No creo que este se pueda considerar como-...

-¡S-solo olvida eso y enfoquémonos en encontrar a mi Kelly!-

-Ohhhh… ¿Tu Kelly?- Repite burlescamente el pelirrojo, mientras que ahora una pícara sonrisa se le empezaba a dibujar en los labios. -¿En serio dijiste "tu Kelly"?-

-Ehhh… Y-yo… Uhhh… C-creo que ahora es el momento adecuado para regresar a mi habitación y dormir un par de horas más.- Declaró nerviosamente Gold al fingir un exagerado bostezo, para de ese modo intentar ocultar lo sonrojado que estaba. -T-te veré en un par de horas.-

-Tch… Definitivamente qué eres terrible para mentir.- Murmuró el pelirrojo posterior a cruzarse de brazos. -¿Me pregunto que diría Crystal si le comentará sobre esto?-

-¡D-d-deja a mi Crystal fuera de esto!-

-¿"TÚ" Crystal?- Volvió a repetir Silver. -Vamos, Gold. Me estás haciendo esto demasiado fácil.-

-Ehh… Y-yo… Grrr… ¡E-eres despreciable!-

-Hahaha, ahora que lo pienso, siempre quise saber a cuál de ellas dos (2) prefieres.- Indicó súbitamente el pelirrojo al clavar su mirada en Gold. -¿Prefieres a la rubia bipolar y psicótica o a la intelectual sabelotodo de las coletas?-

Luego de haber escuchado la pregunta hecha por Silver, Gold terminó por sonrojarse con notable intensidad hasta el punto en que su pulso aumentó descontroladamente. El muy bien sabía que fuese cual fuese su respuesta, esta le traería graves y terribles consecuencias a futuro, por lo que su mejor opción era en mantener su boca cerrada.

-¿O es que acaso prefieres a alguna de tus primas?- Volvió a preguntar Silver. Pero esta vez en un tono más serio y frio. -No te voy a juzgar por irte por ese camino si ese fuera el caso.-

-¡P-por supuesto que no prefiero a alguna de mis primas!- Replicó Gold al instante y con molestia. -Osea, ellas son lindas, inteligentes, muy elegantes y refinadas. P-pero-...

-¿Acaso mis hermanas o yo tenemos algo de malo cómo para no quieras estar con alguna de nosotras?-

De manera inmediata y cómo si se tratara de un acto reflejo en una áspera situación de vida o muerte, Gold y Silver se pusieron de pie de un brinco y luego notaron como Zuki estaba parada detrás de ellos con una enorme y pícara sonrisa.

-¡Estoy esperando una respuesta, Gold!-

-¿P-p-pero qué rayos haces aquí a esta hora?- Cuestiono rápidamente el joven entrenador de New Bark con palpable nerviosismo, luego de ver a su prima parada detrás de Silver y de él. -¡D-demonios! Ni siquiera escuché o note cuando llegaste.-

Hehe, pues resulta que hoy es mi turno de ayudar en el hotel y-…

-¿Acaso no sabes que es de muy mala educación el escuchar conversaciones ajenas?- Interrumpe reaciamente Silver. -¿Cuanto escuchaste?-

-Hmmm…. Pues, creo que escuché mucho más de lo que debería, señorito príncipe del mal.- Replicó la menor de las chicas kimono con una coqueta y juguetona sonrisa. -Mi intención nunca fue la de escucharlos. Pero ustedes estaban tan entretenidos en su conversación, que ni siquiera se percataron de mi presencia y no quise interrumpirlos.-

El pelirrojo miro de pies a cabeza a la recién llegada y luego se sonrojo con notable intensidad. -E-espera… ¿C-cómo qué p-p-príncipe del mal?- Repitió Silver al sentir cómo una extraña mezcla entre vergüenza y molestia empezaba a recorrer su cuerpo.

-¿Acaso no te gusto el apodo que tan poco trabajo me costó pensar para ti?- Preguntó Zuki en modo de burla. -¿Qué te parece entonces señorito heredero del mal?-

-Tch… Yo paso. P-prefiero que solo te refieras a mí por mi nombre.-

-¡Que aburrido eres!- Vociferó la menor de las chicas kimono de mala gana, para luego enfocar su atención en su primo. -Pero en todo caso, aun estoy esperando una respuesta de tu parte, Gold. ¿Prefieres a Kelly o a Crystal?-

-Y-yo… N-no pretendo caer en tu macabro juego.- Aclaro Gold, al instantaneamente darle la espalda a Zuki y a Silver para qué estos no notaran que nuevamente él se había sonrojado. -¡M-me rehusó a responder a esa pregunta!-

-Hahaha, eres tan lindo cuando te sonrojas.- Resaltó Zuki. -¿Pero estas seguro de no querer responder? Yo soy excelente para guardar secretos y también soy una magnífica consejera del amor.-

-Ughhh… ¡Me largo a dormir!- Anuncio el de New Bark al fingir, por segunda vez en lo que va de la mañana, un exagerado bostezo. -T-tendremos un largo día por delante y lo mejor es que descanse lo más que pueda.-

Antes de que Gold pudiera retirarse del lugar, Zuki velozmente tomó de la mano a su primo, ante la atenta y curiosa mirada de Silver. -Oye… Espera un momento.- Ordenó la chica en un tono mucho más serio que antes. -Yo también deseo ayudarlos.-

-¿Ayudarnos en qué cosa exactamente?- Pregunta ahora Silver con frialdad y suspicacia. -¡Explicate!-

-¿Acaso no es obvio? Yo también deseo ayudarlos a destruir al Equipo Rocket.-

Gold tragó pesadamente saliva y después intercambio por breves instantes miradas con Silver. -D-de ninguna manera permitiré algo cómo eso.- Replicó Gold con igual frialdad en sus palabras cómo Silver antes que él. -En verdad lo lamento, pero no voy a permitir algo así, Zuki. Esto es algo entre Silver y yo. Y preferiría que lo mantuvieras en secreto de Crystal y Kelly.-

-¿Pero porque no, Gold? Osea, yo soy considerada la entrenadora más fuerte de toda esta ciudad, incluso por encima de Eusine y Morty. Además, soy inteligente, linda, talentosa, me se manejar muy bien en situaciones peligrosas y-...

-No se trata de si eres o no una buena entrenadora.- Señala rápidamente Gold. -Realmente aprecio mucho tu interés por ayudarnos. Pero es que-...

-¡Esto no es justo, Gold! Primero dices que no nos prefieres a mis hermanas o a mi, y ahora tampoco quieres que te brinde mi tan necesaria ayuda para acabar con el Equipo Rocket. ¿Acaso eres tan denso cómo para no saber qué ustedes dos (2) solos no podrán hacerles frente?-

-N-no pongas palabras en mi boca.- Manifiesta Gold soltando un sonoro suspiro. -Y creo que me estas malinterpretando…-

-¿Entonces porque no quieres que te ayude?-

-¡Porque no deseo ponerte en peligro!- Señaló el de Pueblo New Bark, a la vez que colocaba una tímida sonrisa. -Tus hermanas, tus padres y tu son ahora parte de mi familia. Y cómo tal, no deseo correr riesgos innecesarios.-

-P-pero-…

-No es no, Zuki. Y nada en el mundo podrá cambiar mi opinión.-

-Tch… Está bien, Gold, tu ganas.- Reconoce Zuki al encogerse de hombros. -Solo te diré que sería una verdadera lastima que tía Sakura o Crystal y Kelly se enteraran de alguna forma de tus intenciones. ¿No te parece?-

-¿Q-que mi madre o Crystal y Kelly se enteren de mis intenciones?- Repitió de manera lenta el de New Bark. -¿Acaso me estas amenazando?-

-Por supuesto que no te estoy amenazando, primito- Vociferó Zuki al entrecerrar sus ojos y luego colocando una malévola y cínica sonrisa. -Sólo hacía un simple, inocente y alegre comentario.-

Poco después de haber escuchado el comentario de su prima, Gold permaneció visiblemente perplejo por breves instantes. Luego de esto, el se limito a mirar a Zuki con una mezcla entre asombro, desconcierto y traición.

-Hahaha, tu prima es realmente diabólica y manipuladora.- Comenta Silver en voz baja para Gold. -Me esta empezando a caer realmente bien.-

-¡T-tú cállate!- Ordenó súbitamente Gold, para después volver a fijar su atención en su prima. -Esto que haces es jugar sucio. ¿Lo sabes, cierto?-

-Hehe, quizás si sea jugar un poquito sucio. Pero cuando vives con tantas hermanas como yo, eres extremadamente susceptible a aprender uno que otro truco de esa naturaleza.- Alegó Zuki, mientras que ahora caminaba en dirección a las escaleras de piedra que conectaban el campo de batalla con el hotel. -En fin… Los veré a ambos más tarde. Tengo un par de cosas qué hacer-

-¡O-oye… Espera un momento!- Exclamó Gold. -Tu "brillante plan" tiene un gran defecto.-

-¿Y cuál se supone que es?-

-¡Tu madre!- Informa Gold con una confiada sonrisa. -Dudo mucho que tía Asuka te deje venir conmigo en mi viaje.-

-Hahaha, es adorable lo ingenuo que puedes llegar a ser.- Indica rápidamente Zuki en un tranquilo tono de voz. -¿En serio creíste que no tomaría ese detalle en cuenta?-

-¿Huh?-

-Eso ya lo tengo perfectamente cubierto.- Informó la de ojos color esmeralda, antes de volver a sonreír malévolamente, para entonces empezar a subir las escaleras de piedra. -Durante el desayuno te darás cuenta de mi brillante plan.-

-¡D-demonios! Al menos dime qué se supone haras.- Exclama Gold ya con notable resignación. -Q-quiero estar preparado en caso de-...

-Lo siento, mi querido y dulce primo. Pero no me divertiré si estás preparado. Solo espero me sigas el juego y cooperes.-

Posterior a la partida de su prima, Gold nuevamente volvió a exhalar el aire de sus pulmones con pesadez y desasosiego. -Tengo un muy mal presentimiento sobre todo este asunto.- Reconoció Gold, a la vez que esté se cruzaba de brazos. -No tenía idea de lo obstinada y manipuladora que ella podía llegar a ser cuando se lo propone.-

-Supongo que lo obstinado corre en tu familia.- Teoriza Silver al ahora estar igual de asombrado que Gold por lo ocurrido. -Aparentemente ahora seremos tres (3) en nuestra futura cruzada contra el Equipo Rocket.-

-Por desgracia, así parece.-


Comedor del Hotel "Gran Ecruteak" 10:13 A.M


-¡Buenos días a todas!- Saluda enérgicamente Gold, mientras que lentamente se acercaba, entre bostezos, a la enorme mesa llena de comida en dónde estaban reunidas sus primas, su madre, su tía y Crystal, quienes aparentemente ya tenían un largo rato de estar desayunando en el concurrido comedor del hotel.

-Buenos días, cariño- Replicó de manera alegre Sakura, a la vez que la misma se levantaba de su asiento y se acercaba a su hijo para abrazarlo. -Veo que aun sigues durmiendo tanto como cuando estabas en casa.-

-Ma-… Me estas asfixiando… D-de nuevo… M-me duele…-

-Ohh… L-lo siento.- Exclamó Sakura al inmediatamente soltar a su hijo, para lugar volver a sentarse junto a Asuka. -Es que apenas si te he visto desde que llegué aquí.-

-Lamento mucho no poder estar tanto tiempo contigo, Madre.- Reconoció Gold con tristeza y al sentarse en un espacio vacío de la mesa junto a Crystal. -P-pero ayer estuve… Uhh… Un poco ocupado con ciertas otras cosas.-

-Descuida, Gold, yo entiendo perfectamente.- Asegura su progenitora con tranquilidad. -Se que estas en tu viaje como entrenador y tienes otras cosas más importantes que hacer.-

-Prometo que cuando acabe este viaje, regresaré lo más pronto posible para estar contigo y con papá en New Bark.-

-Hahaha, eso espero, Gold. Pero ahora que lo noto… ¿Dónde está Kelly?.- Señaló inesperadamente Sakura, mientras que empezaba a mirar de un lado al otro en el comedor en busca de la pequeña y dramática rubia de lentes. -¿No se suponía que ella estaba viajando con ustedes?-

-P-pues… E-ella… Ehh…-

-Ella se adelantó a nosotros y está ahora mismo de camino a Ciudad Olivine.- Indicó Crystal cómo por acto reflejo. -Ella estaba bastante deseosa por conseguir su próxima medalla, así que decidió adelantarse a nosotros.-

-¡Ohh! Bueno, en verdad es una pena que ella no esté aquí.- Manifestó Sakura con algo de tristeza. -La última vez que la vi fue hace más de un año atrás antes de que se mudara con su abuela…-

-Madre… Te prometo que la volverás a ver.-

Sakura replicó a lo dicho por su hijo con una efímera sonrisa llena de tranquilidad. Posteriormente, ella empezó a servirle a Gold un poco de té en una fina taza vacía hecha de porcelana.

-Cambiando el tema. Zuki me comentó qué fue lo que finalmente decidiste pedir cómo recompensa por haber ganado la batalla contra mis hijas en el anfiteatro.- Vociferó ahora Asuka. -Debo decir que estoy tremendamente impresionada por esta petición tan peculiar de tu parte.-

-¿Ehh?-

-¿Acaso no lo recuerdas, Gold?- Pregunta Zuki de forma retórica y al sonreír malévolamente. -Ayer me informaste que deseabas como recompensa por tu victoria que yo te acompañará en tu viaje por Johto y Kanto.-

-¿Es cierto eso?- Preguntan a la vez las gemelas Sayo y Kuni.

-Uhh.. P-pues s-sí. A-así fue.- Afirmó tímidamente Gold, mientras que ahora observaba de reojo a Zuki. -E-eso fue… Exactamente lo que pedí como recompensa…-

-Me alegra mucho que ustedes dos (2) se lleven tan bien.- Exclama Asuka con evidente alegría. -Si en verdad eso es lo que deseas como recompensa por ganar, entonces debo de aceptarlo y dejaré que mi querida, dulce e inocente Zuki te acompañe en tu viaje.-

-Estoy muy orgullosa de ti, Gold.- Aseguró alegremente Sakura. -Primero fue tu padre quien ganó hace veinte (20) años atrás y ahora tú también.-

-¿Cuándo partirán?- Pregunta ahora Naoko con curiosidad.

-Probablemente después de desayunar.- Declaró Zuki de manera triunfal y sin titubear. -Se que esto es algo muy repentino, por decir lo menos. Pero sí mi adorado primo desea conseguir todas las medallas de Johto y Kanto, entonces debemos de partir lo antes posible tal cómo hizo Kelly.-

Sin mediar más palabras y ante las curiosas miradas de los muchos huéspedes del hotel, Sakura inesperadamente se volvió a levantar de su asiento, posterior a lo dicho por Zuki, y luego abrazo a Gold cómo si no hubiese un mañana.

-Ughhh… Auxilio… me duele…-