[Luego de recibir aquel sermón por parte de su "querida amiga" asiática, y de que ella se retirara de la residencia dejándole a solas con sus "responsabilidades", el peliblanco permaneció unos momentos más en el patio frontal de su mansión, observando el cielo nublado pero hermoso que se presentaba en ese momento del día. Era común en él realizar esta acción, pero esta vez se quedó pensativo ante las palabras de Sid. Como en ocasiones anteriores, esa reflexión le caló hondo, pero ahora más que nunca, sentía que tenía que poner los pies sobre la tierra, armarse de valor y dejar de creer que evadir los problemas los haría desaparecer. Claro, no siempre se debía estar sumido en la preocupación, pero la situación del albino había escalado a tal punto que ya era una costumbre para él. Además, había algo en su vida, una herida ignorada y menospreciada, que había sido reabierta, y como le ocurre a cualquier ser humano, llegó un punto en el que sería difícil seguir ocultándola.

No obstante, Lincoln decidió dejar de lado lo que comenzaba a sentir y se mantuvo firme. Por el momento, no podía mostrarse vulnerable ante sus hijas, mucho menos ante la mitad de ellas que, tras sus revelaciones sinceras, aunque forzadas por la crítica situación en la que se encontraba, no desaprovecharon la oportunidad para lanzarle comentarios hirientes, como si fueran dardos envenenados. De hecho, se encargaron de dejarle claras muchas cosas que él prefería ignorar por conveniencia.]

- Sala de Estar [1:15 P.M.] -

*Después de su momento reflexivo, el peliblanco finalmente se dignó a volver con sus hijas, las cuales aún permanecían reunidas en la sala de estar. Sin embargo, al querer volver a entablar una conversación más profunda con todas ellas para así tratar de explicarles cómo creía él que tendrían y deberían de ser las cosas de ahora en adelante pues, si ellas habían acordado con Sid que seguirían más tiempo con él, era evidente que también habían aceptado seguir bajo las órdenes y cuidados del albino. Por lo que ése pensamiento erróneo que rondaba en su cabeza, sería una vez más, la gota que derramaría el vaso. Irónicamente, si hablamos de algún parecido entre sus hijas y él, era el evidente hecho de que éstas habían heredado su forma de echarle en cara a sus progenitores los defectos y verdades de éstos*

— De acuerdo, aún no termino de comprender el cómo y el porque es que convencieron a Sid de que les permitiera seguir quedándose aquí conmigo, pero...

— Espero que no que creas que fue por ti... - Mencionó Panther a la brevedad para interrumpir a su padre -.

— Y el "cómo" pues, digamos que no es muy difícil darse cuenta de que por más años de condena que te den o todo el trabajo comunitario que te impongan, no terminarás aprendiendo nada. - Agregó Panther secundando a la pelirroja -.

— A ver, primero, eso me queda más que claro y segundo, ¿Acaso también eres abogada o alguna clase se defensora social? Porque te escucho bastante segura de lo que estás diciendo, supongo que eso se debe a que sólo tú te crees tus mentiras.

— Tú eres el ignorante, no yo. Pero bueno, si te sirve de algo, ¿Quién crees que me enseñó a mentir? - Preguntó de forma irónica mientras alzaba las cejas -.

— Cómo sea, no estoy de humor para comenzar una discusión con todas ni mucho menos con ustedes tres porque siempre termino con dolor de cabeza... - A la par en que mencionaba eso, señaló a Laika, Lyra y Panther - Pero bueno, dejando de lado eso, lo que yo quería decirles era...

— Descuida, nosotras terminamos peor cuando escuchamos tus mentiras y no nos quejamos... Aprendimos a vivir con el dolor, somos una con el dolor. - Mencionó Loth de forma algo poética, pero sin perder su seriedad -.

— Bien por ustedes, se nota que les gusta vivir de esa manera, aunque he de admitir que ese estilo de vida me parece absurdo, el que ustedes mismas se vean cómo las víctimas de la historia no les sirve ni les servirá de nada. Sólo les advierto.

— Mira quién lo dice, él mismo que se victimizó la mayor parte de su vida porque no pudo soportar que sus propias HERMANAS fueran mejores que él. Estoy de acuerdo en que tal vez no sirve de mucho, pero tenemos nuestras razones para tomar ese rol, tú en cambio, no tienes justificación.

— Por supuesto que tenía mis razones y no tengo porque justificarme después de tanto tiempo. Además, el que yo haya hecho eso al menos sirvió para algo muy importante mientras que lo de ustedes pues... ¿De qué ha servido? Dime. - Respondió a Panther, encarándole -.

— ¿Cada día te propones superarte aún más, verdad? Porque si es así, lo haces muy bien. No sólo eres ignorante y mentiroso sino que también eres hipócrita, digo, no es algo que no supiéramos ya, pero de todas formas me gusta remarcarlo cada vez que puedo. - Comentó Lyra en defensa de su hermana de anteojos -.

— Pensé que había dejado claro que no quiero discutir con ustedes. - Dijo en un tono molesto mientras se cruzaba de brazos -.

— Ya es tarde... - Murmuró Lupa encogiéndose de hombros en su asiento -.

— Lo digo en serio, hasta este punto discutir entre nosotros no ha servido de nada, ¿O sí?

— Tal vez te tomaríamos más en serio si tú hicieras lo mismo con nosotras. - Mencionó Terry mientras jugueteaba con su bajo -.

— O tal vez necesito ser más estricto con ustedes, porque una cosa es que no tenga experiencia con la paternidad y otra muy diferente es que les dé todas las libertades posibles.

— Pueden ser ambas, ¿Por qué no se lo preguntas a tu padre, Lincoln? Tal vez así salgas de la duda. - Dijo Laika fríamente -.

— Hey, cuidado con lo que dices.

— ¿Acaso eso hará que sigan vivos?

— Sólo cállate, ¿Sí? No te lo pediré otra vez.

— ¿Por qué? ¿Crees que yo les guardaré el respeto que tú no les tuviste? Ja, ni siquiera los conocí y quieres que haga eso.

— Laika, estoy hablando en serio.

— Yo también. No puedo creer que seas tan iluso cómo para creer que honrando y respetando su memoria se borrará lo que les hiciste, ellos se fueron sin perdonarte y tú nunca podrás cambiarlo porque dónde quiera que ellos estén, tú no irás si sabes a qué me refiero.

— ¿Y eso que tiene que ver con lo que estaba diciéndoles? ¡Lo que pasó entre mis padres y yo no te incumbe, si los mencioné fue porque tenía que decir la verdad, no había otra opción! ¡Mi consciencia está tranquila con eso, así que no trates de usarlo en mi contra!

— Si claro, te creeré eso...

— Además, tú no eres nadie para hablarme de valores ni mucho de respeto cuándo tú eres la más irrespetuosa de todas, así que te volveré a pedir, pero ahora cómo advertencia, quédate callada de una maldita vez.

— Cálmate Laika, no vale la... - Trató de silenciar a la pelirroja, pero ya era tarde -.

— ¿Se supone que eso debe asustarme? Me asustaría más tener que estar viviendo con la culpa de haberle provocado la muerte a mis PROPIOS PADRES y a su vez, mentirme a mi misma diciéndome que todo está bien cuando es claro que siento un profundo remordimiento por saber que soy una asesi...

*Cómo si de un déjà vu se tratase, el ya de por si tenso ambiente se quedó en un completo silencio ante el corto pero sorpresivo instante en el que el ahora "patriarca" hacía valer dicho título para así mostrar que iba en serio con lo que había dicho. Sin embargo, era claro que en ese momento no estaba pensando con claridad, al menos no después de lo mencionado por Laika, la cual le había desafiado con sus comentarios acerca de cómo sus decisiones habían conllevado al deceso de sus padres que, aunque sabía que la pelirroja no estaba muy lejos de la realidad, jamás se atrevería a aceptar dicha verdad. Es así que por instinto la silenciaria tanto a ella como a sus demás hijas, viéndose fuera de sí y teniendo que retirarse del lugar antes de que hiciese algo de lo que también se arrepentiría*

— ¡Te dije que no hablarás sobre eso! - Le mencionó a Laika en un tono fúrico para después dar paso a que el resto de sus hijas se acercaran rápidamente hacía la pelirroja tanto para detenerle cómo para calmarle -.

— ¿¡QUÉ TE HACE PENSAR QUE TIENES EL MALDITO DERECHO DE GOLPEARME!?

— ¡Qué soy tu padre y por si aún no te queda claro, vas a tener que respetarme te guste o no! - Le respondió encarándole mientras ella seguía siendo sujetada por sus hermanas -.

— ¿¡QUIERES RESPETO!? ¡NUNCA LO VERÁS VINIENDO DE MÍ, PORQUE NO ERES MÁS QUE UN IMBÉCIL AMBICIOSO Y ARROGANTE QUÉ NO LE IMPORTARÍA TRAICIONAR A TODA SU FAMILIA CON TAL DE LLENAR SU EGO!

— ¿Ah sí? Bueno, lo repetiré por milésima vez, dime algo que no sepa. - Volvió a responderle, esta vez con indiferencia -.

— ¡¡AAAAH, SUÉLTENME DE UNA MALDITA VEZ, NECESITO...!!

— No te molestes Laika, antes de que hagas cualquier cosa me retiraré de aquí por el bien de ambos. - al decir eso, se dio media vuelta y en un movimiento tomó las llaves de su auto - Pero cuándo vuelva, estaré esperando una disculpa de tu parte.

— AQUÍ TIENES TU DISCULPA... - sintiendo cómo le hervía la sangre, le levantó el dedo medio mientras sus hermanas aún seguían tratando de calmarla - ¿Algo más?

— Si te queda tiempo después de que pienses en una mejor disculpa, limpia tu habitación. - le sonrió cínicamente - Eso sería todo. Nos vemos más tarde, no le den problemas a Nathalie. - Al finalizar de decir eso, se daría media vuelta para acto seguido salir por la puerta de la entrada y así dirigirse hasta dónde se encontraba estacionado su auto -.

— Lo odio... ¡Lo odio con todo mi ser! - mencionó con un severo tono rojizo en su rostro, el cual ante los agarres que sus hermanas aún estaban ejerciendo sobre ella para imposibilitar su movilidad, le estaba provocando que este se fuese volviendo cada vez más grotesco - ¿¡LES IMPORTARÍA SOLTARME DE UNA MALDITA VEZ!? ¡NO VOY A MATAR A NADIE!

— Discúlpanos Laika, pero teníamos que actuar de alguna forma... - Mencionó Liby algo apenada -.

— ¿¡Y por qué en mi contra!?

— Bueno, lo que pasa es que...

— Además, ¿Qué demonios pasa con ustedes dos? - fijó su mirada molesta sobre Panther y Lyra - ¿Qué no se supone que deberían ser ustedes quiénes levanten la voz por todas nosotras? Se autoproclaman cómo las "líderes" del grupo y en un momento cómo el acaba de pasar no hicieron absolutamente nada. - Reclamó mientras les señalaba tajantemente -.

— Hey, tranquila rojita. Estoy segura de que habría pasado exactamente lo mismo si Lyra y Pan intervenían. - Mencionó Terry en un tono relajado tratando de que la tensión no siguiese entre sus hermanas -.

— ¿Ah sí? Pues lo dudo.

— Mira Laika, entiendo bastante tu enojo y al igual que tú, estoy bastante consternada por lo que te hizo, pero si estás buscando un culpable por lo que te pasó, déjame decirte que de cierta forma te lo buscaste...

— ¿Acaso lo estás justificando?

— Sabes perfectamente que jamás lo justificaría de nada y que siempre estaré del lado de ustedes, pero creo que en esta ocasión dijiste más de lo que debiste...

— Ah, ¿Entonces debí dejar que empezara a amenazarnos?

— No, mira... Lo que quiero decir es que...

— Lo suponía, ustedes realmente creen que el entenderá con buenas palabras y con segundas oportunidades. Tenerle respeto es aceptar sus condiciones cuándo es él quién tiene que aceptar las nuestras.

— Todas estamos de acuerdo contigo Laika, lo único de lo que nos quejamos es que no sabes controlarte, pudiste haberle dicho lo mismo de un forma más sutil y tal vez te habrías ahorrado la forma tan despreciable en la que él actuó. - Intervino Lyra secundando a Panther -.

— Es que ése es mi problema... ¡¡Ustedes también pudieron habérselo dicho pero prefirieron quedarse viendo!!

— Ay Laika, piénsalo por un segundo, ¿Tú no te sentirías al menos un poco asustada de lo que un tipo cómo él podría hacerte cuando se enoja? Al igual que tú, se nota que tiene problemas de ira. - Mencionó Sonette con claridad, mostrándose algo indiferente a lo que pudiese decirle la pelirroja -.

— ¡Yo no tengo problemas de ira!

— Se nota "fosforito". - Bromeo Terry en voz baja -.

— Y no, no tendría miedo porque yo ya he lidiado con algo así antes.

— Pero nosotras no, o al menos no todas. Eso es lo que deberías enten...

— ¡Lo entiendo, pero ustedes también deberían entender que no me importaría tener que defen...! - se detuvo abruptamente antes de terminar la oración - -derlas... - Se quedó callada con lo ojos bien abiertos mientras sus hermanas le miraban extrañadas -.

— ¿A nosotras?

— ¡Olviden lo que dije, nos vemos más tarde! - Dijo con vergüenza para acto seguido retirarse apresuradamente hacía su habitación -.

*Después de escuchar en cuestión de segundos la semejante revelación de Laika y el posterior sonido de la puerta de su habitación cerrándose bruscamente, provocaría que el grupo de hermanas se quedasen confundidas tratando de buscar una explicación para ello pues, en lo que hasta en ése momento habían convivido entre ellas, la pelirroja se había mostrado inexpresiva ante cualquier cosa, sobresaliendo sólo sus emociones más negativas*

— Emmm... ¿Escuché mal o ella realmente dijo eso? - Preguntó Terry aún atónita de lo que acababa de escuchar -.

— Eso fue... Extraño... - Mencionó Liby confundida -.

— Loth... ¿Sabes si...?

— No, estoy igual de confundida que ustedes...

— Bueno, ahora sabemos que si tiene corazón después de todo... - Bromeó Lupa mientras volvía a tomar asiento -.

— Ay Lupa, obviamente lo tiene, ¿O por qué crees que está viva, tontita?

— Ya lo sé Lacy, pero no me refería a eso.

— Lupa, tú también lo tienes por más que te niegues a aceptarlo. - Mencionó Panther -.

— Sí, pero yo lo hago con gracia.

— Cómo sea, creo que si ella dijo eso fue por algo... Sólo que el problema aquí es que no sabemos ése algo con exactitud...

— ¿Acaso no escuchaste lo que dijo? Está frustrada porque nos quedamos calladas en lugar de apoyarle y tiene razón, pero creo que lo que dijo sobre "ser una especie de escudo humano" es por lo mismo de querer demostrarnos que puede llegar a ser una buena líder.

— Te escucho bastante segura Sonette, ¿Qué insinúas? - Cuestionó Loth -.

— Sólo estoy teorizando, ¿Sí? Lyra y Panther en ningún momento se han pronunciado de la forma en que ella lo dijo, pero si así fuera, al menos yo estaría de acuerdo con qué tomen ese rol, ya que ellas son las más confiables y responsables de todas nosotras. - Respondió con seriedad -.

— Bueno, ¿Y por qué no vas con Laika y compruebas si lo que estás "teorizando" es verdad?

— Porque quiero mantener dentro de mi estómago lo que desayuné esta mañana.

— Cómo sea, más te vale no seguir hablando de eso.

— ¿O qué? ¿Me retaras a un duelo a muerte con cuchillos? Más te vale no subestimarme, ya he lidiado con algo así antes.

— Esto es la vida real Sonette, no uno de tus estúpidos mangas o cómo se llamen, así que ten cuidado con lo que dices, ya que puedo asegurarme de que tengas comer por medio de un sorbete por lo que resta del mes.

— ¿Se supone que eso debe de asustarme? Déjame decirte algo, tú y Laika no son muy diferentes a nosotras, él que estén molestas todo el tiempo y actúen cómo bravuconas no significa que lo sean en realidad.

— ¿Oh, quieres comprobarlo? Te ayudaré con...

— Bien, bien, ya basta. - se interpuso entre ellas para evitar que su discusión se agravara - No lograrán nada si siguen discutiendo - Mencionó con cierto fastidio -.

— Panther tiene razón, siempre discutimos entre nosotras y eso nunca nos lleva hacía ninguna parte. - suspiró - Justo cómo ahora, su discusión sólo hace que nos estemos desviando del tema verdaderamente importante a considerar.

— ¿Y e-ese es? - Preguntó Loan para integrarse a la conversación -.

— Nuestra relación.

— ¿Có-Como? - Preguntó la rubia confundida -.

— L-Lyra... ¿Acaso Loan y tú...? - se levantó de su asiento exaltada - ¡Lo sabía! ¡Sabía que era sólo cuestión de tiempo para que sus hormonas se alterasen y así algunas de ustedes comenzaran a ceder ante sus más bajos instintos! ¡Estamos condenadas, ese rasgo probablemente se nos heredó!

— ¿Qué? ¡Por dios Liby, claro que no!

— ¿Y entonces a qué clase de relación te refieres?

— A nuestra relación cómo hermanas, en general.

— Oh... - Su rostro se tornó completamente rojo de vergüenza al darse cuenta de que ella misma se había exhibido ante sus hermanas -.

— Cielos chica, sabía que eras rarita pero no me imaginaba que lo fueses tanto. ¿Eres paranoica o algo así? - Preguntó Terry -.

— No... Lo que dije fue sólo porque ya tenía un tiempo pensando en ello, digamos que soy algo curiosa... - Respondió Liby mientras entrelazaba sus dedos aún con pena -.

— ¿Lo ven? Esto es más o menos a lo que me refiero. Ya tenemos casi todo un mes conviviendo y aún no hemos terminado de conocernos, sé que eso no se hace de un día para otro, pero ni siquiera lo intentamos. O díganme, ¿Algunas de ustedes sabe cuál es el segundo nombre de Loan? ¿Cuál es la comida favorita de Sonette? ¿El programa favorito de Gloom? ¿El porqué Lupa gusta de las cosas que tengan que ver con abejas? - Conforme mencionaba dichas preguntas, su hermanas indistintamente iban negándolas -.

— Ajá, ¿Y tú si sabes todo eso, no? - Preguntó Loth con ironía -.

— Desafortunadamente no y me lamento por eso, ya que es un claro ejemplo de que ninguna se ha tomado la molestia de conocer a las demás más a fondo.

— No seas ridícula Lyra, ¿Cuándo has visto que los hermanos se pongan a hablar seriamente de eso? Si no nos "conocemos a fondo" no es más que culpa de Lincoln, la mayoría de los hermanos se conocen de toda la vida y es por eso que no necesariamente necesitan hablar de gustos y demás porque después de estar viviendo tanto tiempo juntos ya los saben.

— Estoy de acuerdo con Loth, me parece innecesario y hasta patético ponernos a hablar sobre eso. - Agregó Lupa -.

— Si, creo que yo... - observó la mirada molesta de Lyra caer sobre ella - Ah no, no estoy de acuerdo con ellas. - Mencionó Terry entre risas nerviosas -.

— A ver, ¿Qué parte de "necesitamos conocernos para entendernos mejor" no entienden? Ya sé que lo han escuchado constantemente y ayer en el hotel se los repetí muchas veces, pero por un año completo vamos a tener que estar conviviendo todos los días y esto no va a funcionar sí sólo nos dedicamos a discutir, ya de por sí es un martirio con nuestro padre actuando de la forma en que lo hace.

— Bueno, ¿Y que no sería mejor hablar de eso cuándo papá y Laika estén aquí también? - Preguntó Lacy -.

— Eso sería lo adecuado, pero él siempre nos da largas y ya estoy cansada de eso, mientras que Laika, pues... No podemos obligarla, eso sólo significaría una nueva discusión entre nosotras.

— Oh si, sí, entiendo.

— Aún así, me gustaría que Laika también participe en esto, digo, sé que fue ella quién estuvo más en desacuerdo con la decisión que tomamos en conjunto con la señorita Chang, pero ya no hay vuelta atrás. ¿O cómo creen que le haremos ver a nuestro padre que esto puede funcionar?

— ¿Sabes Lyra? - suspiró frustrada - Tienes razón en que no ganaré nada si te insulto pero, ¿Por qué debemos ser nosotras quiénes hagan "sacrificios" en lugar del imbécil que tenemos cómo padre? - Preguntó Loth con ironia -.

— Porqué es él quién tiene que buscar su propio cambio, está claro que ni nuestras madres ni mucho menos nosotras hemos logrado que lo haga. Y tengo que decírselos, ustedes mismas lo han comprobado, podrá estar hasta el cuello de problemas o en el límite de lo legal pero el siempre priorizará su beneficio.

— En eso también tienes razón, pero aún así estoy en desacuerdo con tu actitud, tienes que ser más fuerte con tu carácter y dejar de querer solucionar todo con tus reflexiones.

— Mira Loth, estoy consciente de que puedo llegar a ser bastante compasiva con personas que no lo merecen, justo cómo en este caso pero, lo que verdaderamente quiero que quede claro es que, aún si nuestro padre no quiere aprovechar las mil y una oportunidades que se le están dando, prefiero estar bien con ustedes y quedarme con esa sensación de que gané más de lo que perdí viniendo hasta acá...

~Mientras Tanto~

*Luego de haberse retirado de su hogar ardiendo en rabia por lo que Laika "le había obligado a hacer", el peliblanco trataría de tranquilizarse un momento ante el latente caos que volvía a atormentar su mente, es así que, para tratar de calmarse, acudiría a su trabajo (siendo fin de semana, cosa que no suele hacer seguido) con la excusa de que necesitaba trabajar en unos cuantos bocetos cuando en realidad sólo quería distraerse dibujando algo. Al llegar, evidentemente sus empleados se extrañarían de su repentina aparición, pero preferirían no darle importancia sabiendo que éste podría molestarse con ellos por distraerse de sus labores, no obstante, su secretaria Jane sería la más confundida ante tal situación puesto que, el peliblanco acostumbraba avisarle si asistiría, pero en esta ocasión ignoró eso*

— "Tengo que asegurarme de que Nathalie las estará vigilando en todo momento, en especial a Laika, esa niña actúa sin pensar cuándo está molesta... - Pensó mientras marcaba el número de teléfono de su asistente -.

— Hola señor, ¿Ocurrió algo? ¿Hay algo en que pueda...?

— Si, sólo escucha. Necesito que por ningún motivo pierdas de vista a las niñas, no te pido que estés con ellas en todo momento sólo que, de ser posible y por precaución no dejes que salgan a ninguno de los exteriores, en especial a Laika, ya sabes porqué, no necesito explicártelo.

— Entendido señor, lo haré al pie de la letra.

— Ah, por cierto, lo olvidaba. También voy a necesitar que te quedes despierta hasta tarde haciendo lo que te pedí, no podría darte la hora exacta en la que regresaré, pero si puedo asegurarte que volveré por la madrugada.

— Muy bien señor, cuente con ello. Sólo tengo una pregunta, claro, si me permite hacerla.

— ¿Y cuál sería esa pregunta?

— Antes que nada, debo aclararle que no tengo ningún problema con quedarme despierta hasta tarde ni mucho menos el tener que cuidar de ellas, pero... ¿Puedo saber si está bien o al menos en qué lugar se encuentra? Sé que usted sabe cuidarse solo, así como también sé que no acostumbra pasar tanto tiempo en la calle. Lo conozco bastante bien y usted a mí, sabe que puede confiar en...

— Tienes razón Nathalie... - le interrumpió abruptamente - Puedo confiar en que harás tu trabajo, así que te pediré que únicamente te dediques a eso. - Y dio por terminada la llamada -.

*Luego de haber terminado de darle a su asistente las indicaciones que él creía necesarias, el peliblanco permanecería sentado enfrente de su escritorio tratando de calmarse un momento puesto que, aunque no lo fuese a aceptar abiertamente, lo dicho por Laika si le había afectado y no podía dejar de pensar en ello*

— "Niña idiota, podré ser todo lo que ella y las demás digan de mí, pero creo que sido lo suficientemente paciente, especialmente con ella, que hasta he soportado casi todas sus faltas de respeto y aun así no cambia su actitud... Quisiera saber que le hace pensar que puede meterse en mis asuntos personales, ni siquiera he indagado en los suyos..." - se quejó mientras soltaba un largo suspiro de enojo - "Sé que probablemente provoqué la muerte de mis padres de forma indirecta, pero yo no soy el principal culpable cómo todos lo creen... Prefieren olvidarse del hecho de que mis hermanas pudieron haberse negado a mis intenciones y no lo hicieron, yo no las obligué a nada. Detesto que se victimicen de la forma en que lo hacen, son igual de culpables que yo, aunque no lo acepten, pero claro... No puedo esperar mucho de ellas, siempre han creído que me agrada hacerme cargo tanto de sus problemas cómo de los míos, nunca ha sido al revés..."

Por unos cuantos minutos más, el peliblanco seguiría reflexionando y quejándose internamente mientras permanecía con sus ojos entrecerrados, así hasta que por coincidencia recordaría algunos bocetos y guiones gráficos (storyboards) que había dejado pendientes desde hace un tiempo, por lo que, con cierto morbo, se dispondría a buscarlos pues pretendía seguir "perdiendo el tiempo" con estos*

— "¿Dónde demonios están esos estúpidos bocetos? Estoy seguro de que no los deseché, así que se supone que deberían de estar guardados entre todos estos archivos..." - soltó un largo suspiro de frustración mientras continuaba su búsqueda - "Maldita sea, aquí no hay nada..." - volvió a suspirar para luego azotar los cajones del archivero en el que estaba buscando - Mmm... Espero que Jane sepa dónde están... - procedería a llamarle a su secretaria, la cual provocaría su molestia al demorarse en contestar puesto que esta lo estaba husmeando - Jane, necesito que vengas un momento, es importante...

— Eh sí, sí. Voy enseguida.

Después de escuchar el tono autoritario y cortante de su jefe, la pelinegra se daría prisa en atender su llamado por la evidente urgencia que este tenía, sin saber que era más simple de lo que sonaba. Al entrar a la oficina, rápidamente recibiría un regaño por parte del peliblanco, el cual corroborada su molestia*

— Ya estoy aquí, ¿Qué necesita señor?

— ¿Terminaste de husmear o necesitas más tiempo?

— Eh... Yo no...

— No te pago para que me estés vigilando, ¿O sí?

— No señor, pero si me permite explicarle, quisiera aclarar que yo no estaba vigilándolo.

— Oh, entonces vi mal, ¿verdad?

— Bueno, si lo hacía, pero sólo porque me parece extraño que siendo sábado venga a trabajar, ni siquiera me llamo para avisarme.

— De acuerdo, tienes razón, pero eso no significa que siempre tenga que hacerlo, es mi empresa, puedo venir cuando quiera y eso no te incumbe. ¿De acuerdo? - la pelinegra le asintió - Cómo sea, no te llamé para eso; te llamé porque necesito preguntarte si tú sabes o recuerdas en dónde quedaron guardados aquellos proyectos que dejé inconclusos... Ya busqué en los archiveros y no hay nada.

— Mmm... ¿Ya revisó en su estudio?

— ¿Mi estudio?

— Si, recuerde que la semana pasada me pidió supervisar la limpieza de su oficina, así que me encargue de que todos esos bocetos y guiones gráficos sin utilizar fueran llevados a los archiveros que están en su estudio. Aquí solo hay archivos sobre la empresa.

— Ah, ya veo. Gracias, sinceramente no lo recordaba.

— No hay problema señor, si necesita algo más no dude en llamarme.

— Lo sé Jane, pero no será necesario. Puedes retirarte.

— De acuerdo. - Asintió para acto seguido proceder a salir de la oficina -.

— Bien... - Entrecerró sus ojos por un momento mientras posaba una mano sobre su frente -.

*Después de quedarse estático por unos minutos el albino finalmente se dirigiría a su estudio, en dónde rápidamente se pondría a buscar aquellos guiones gráficos, encontrándolos al instante para así disponerse a observarlos plácidamente desde su restirador*

— "Éste siempre fue un buen material, no era muy difícil de financiar y muy probablemente hubiese sido redituable... ¿Debería retomarlos? - se preguntó a sí mismo mientras veía dichos bocetos con cierta melancolía y molestia a la vez - Qué pregunta tan estúpida, claro que no y es una pena, pero no voy a dejar que piensen que estoy recurriendo a cosas del pasado porque me quedé sin ideas o porque quiero mandarles una señal de arrepentimiento..." - reflexionó con molestia mientras seguía observando los bocetos, en los cuales se podía leer lo siguiente: L.L, Título: El Planificador Nocturno "Recluta al Mazo Completo" - Storyboard - página 1 - "Por mi pueden irse al demonio..." - Les maldijo mentalmente mientras dejaba de lado lo que estaba leyendo para tomar un cigarrillo y encenderlo, mismo con el cual procedería a quemar dichos bocetos -.

[...]

*Luego de su discusión y a pesar de sus notables diferencias, Loth aceptaría la petición de Lyra y junto a sus demás hermanas se dispondrían a convivir entre sí para pasar el rato y sobre todo, para detenerse un momento a escucharse y así poder conocerse más a fondo cómo ya les había comentado la castaña anteriormente. Es así que, a excepción de Laika, que permanecería encerrada en su habitación por al menos un momento más, el resto de las hermanas formarían un gran círculo en medio de la gran sala sentándose una al lado de la otra para finalmente ponerse a conversar*

— ¿Y bien? ¿Estaremos todo el tiempo viéndonos las caras o empezaremos con esto? - Preguntó Loth -.

— Empecemos, por supuesto. Sólo que antes, ¿No creen que deberíamos de intentar traer a Laika? - Preguntó Lyra -.

— ¿Y quién será la afortunada que irá a intentarlo? - Contrarrestó Lupa, a lo cual la mayoría de sus hermanas se negaron -.

— Tal vez una botella del más fino y puro vodka le haga pensarlo dos veces... - Mencionó Sonette -.

— No Sonette, no haremos eso. Queremos hablar con ella, no alcoholizarla. - Mencionó Panther con cierta molestia -.

— Oh bueno, sólo era una opción.

— En fin... ¿Cómo quieren que llevemos esto? ¿Quieren que directamente hablemos sobre nuestras vidas antes de venir aquí o simplemente quieren que respondamos preguntas de datos que desconocen? - Dijo ante las miradas expectantes y dudosas de sus hermanas -.

— Creo que sería mejor que tú tomes la iniciativa y elijas lo que mejor te parece, ya está comprobado que somos pésimas eligiendo.

— Oh bueno, está bien, no se preocupen. ¿Qué les parece si nos turnamos para hacer una pregunta en general sobre algo en específico que queremos saber sobre las demás? - le asintieron - De acuerdo, yo empezaré... ¿Cuál ha sido la peor discusión que han tenido con sus madres? En mi caso, la peor discusión que tuve con mi madre fue cuando me enteré que se había gastado mi fondo educativo de la preparatoria para financiar su nuevo álbum musical, aún no se lo perdono... - Dijo Lyra con cierta molestia al recordarlo -.

— Mmm... - se quedó pensando por unos segundos - No recuerdo haber tenido alguna discusión con mi mami, sinceramente no me gusta pelear con ella. - Respondió Gloom -.

— Yo no suelo cruzar diálogo con mi madre muy seguido, ya que cómo les dije anteriormente, hay días en los que ni siquiera la veo. Sólo recuerdo haber discutido fuertemente con ella un par de veces, ya que me quería utilizar cómo sujeto de pruebas para sus conjuros y yo obviamente me negué. - Comentó Lupa para finalizar haciendo una mueca -.

— Si bien tenemos la misma madre, yo he discutido considerablemente más con ella a pesar de que pasé la mayor parte de mi vida en un orfanato y evidentemente he convivido menos con ella... - suspiró algo molesta al recordar ello - El motivo de nuestras discusiones es ése precisamente y aunque suelen ser frecuentes, nunca pasa de gritos y quejas, así que supongo que todas han sido similares. - Secundó Loth al comentario de su hermana menor -.

— Por mi parte, yo he tenido bastantes discusiones con mi madre, pero la peor que tuve con ella fue cuándo me dio el "consejo" de darle un mejor uso al dinero que tenia ahorrado para mi prótesis. No me pude quedar callada y discutí con ella. - Comentó Panther -.

— Sé que va a ser una pregunta tonta, ¿pero realmente había un mejor uso para ese dinero? - Preguntó Liby confundida -.

— Pues para ella sí lo había. Me dijo que fuese una buena hija y que le comprara un buen regalo de cumpleaños con ese dinero, ya que mientras ella dejaba el físico en sus partidos de fútbol para que no me faltara nada, yo ni siquiera se lo agradecía. Cosa que es mentira, puesto que yo no quería generarle más gastos y es por eso que busqué empleo; además de que estaba harta de estar encerrada casi todo el tiempo en mi habitación por ser inválida.

— Oh, lamento eso... ¿Pero al final si aceptó que usaras tus ahorros para pagar tu prótesis, verdad?

— Oh sí, descuida, después de nuestra discusión se dio cuenta de su error y se disculpó conmigo.

— Me alegro por eso.

— ¿Y ustedes? - Preguntó al resto de sus hermanas que faltaban de responderle -.

— Mi mamá es bastante reservada y misteriosa por lo que no es muy común que me ponga a discutir con ella, así que en este momento sólo se me viene a la mente aquella vez en la que se fue de viaje y no me avisó, me quedé casi dos semanas completamente sola en mi casa. - Dijo Sonette con un tono molesto ante dicho recuerdo -.

— ¿Dos semanas? Eso no es nada, mi mamá se fue de gira cuándo tenía 10 años y no volví a verla hasta que regreso de ella. Fueron casi 6 meses en los que no tuve supervisión alguna. Digo, no es queja, pero...

— ¿¡Qué!? ¿"Cómo que no es queja"? Al parecer no se tomó la molestia de buscarte una niñera o algo... - Dijo Lyra con cierta alteración -.

— Nah, no fue necesario. Además, eso no fue lo que me molestó.

— ¿Y entonces que fue?

— Me molestó no haberla acompañado a esa gira, porqué... ¿Sabes todo lo que hay detrás de escena? Estar en los backstages es grandioso y es por eso que me gusta ir de gira con ella... Aunque últimamente su carrera va en decadencia y no ha estado en muy buenos términos con la prensa... Ah, y su banda no ha sacado buen disco desde hace años... - suspiró melancólica - Cómo sea, deben vivir esa experiencia. - Finalizó Terry mientras su mirada denotaba añoranza de repetir lo vivido -.

— Y-Yo... Creo q-que nunca he discutido con m-mi m-mamá...

— Si, creo que yo tampoco... - Dijo Lacy secundando a Loan -.

"¿En serio?" - Preguntaron con incredulidad al unísono -.

— Con todo respeto, dudo que eso sea cierto... - Mencionó Panther -.

— E-Es la v-verdad, n-no me gusta discutir con ella...

— A mi tampoco...

— No sé qué les sorprende, es más que obvio que ambas le tienen miedo a sus madres. ¿O me equivoco? - ambas negaron con la cabeza - Supongo que al menos alguna vez trataron de encararlas, pero no salió cómo esperaban y hasta el día de hoy prefieren seguir evitando discutir con ellas. - Dijo Loth con perspicacia -.

— Si... No es muy bonito ver molesta a mi mamá, créanme...

— T-Te entiendo Lacy... - Dijo soltando un suspiro -.

— Lamento escuchar eso hermanas, entenderé si tienen sus motivos para no hablar sobre eso. - Mencionó Lyra ante las miradas y sonrisas nerviosas que estas dos transmitían -.

"Gracias..." - Agradecieron el par de hermanas al unísono -.

— Muy bien, ¿Quién quiere continuar?

— Oh, ¿Puedo? - Lyra le asintió - Bueno, yo quisiera saber si... ¿Ustedes... han tenido pareja? No quiero incomodarlas jeje, sólo tengo esa duda. - Preguntó Liby con torpeza -.

— ¿En serio esa es tu pregunta? ¿Qué tienes, cómo 13 años? - Preguntó Loth con un tono burlón -.

— Si, 14... - Soltó una risa nerviosa -.

— Oh, pues eso lo explica... - suspiró - Cómo sea, volviendo a tu pregunta, ¿Qué acaso no ves a tu alrededor? ¿Qué te hace pensar que alguna de ellas ha tenido novio... o novia?

— Ajá, ¿Y tú sí? - Cuestionó Panther -.

— No, pero eso se debe a que yo no necesito a nadie con quién compartir mi tiempo y no por algún otro motivo.

— Si, claro...

— Sólo contesten la pregunta de Liby, ¿quieren? - Mencionó Loth rodando los ojos -.

— Eh, bueno... Yo no he tenido pareja... - Mencionó Terry apenada -.

— Y-Yo t-tampoco... - Concordó Loan -.

— Yo sólo tuve una novia... virtual... Eh, olvídenlo... - Mencionó Sonette mientras se encogía en su asiento de la vergüenza -.

— Creo que... Yo tampoco, no soy buena ligando ni hablando con chicos... - Respondió Lyra mientras jugueteaba con sus dedos debido a lo avergonzada que estaba -.

— Concuerdo con Loth, yo tampoco estoy interesada en tener pareja. - Dijo Lupa de forma cortante -.

— Yo he tenido cómo 3 novios, pero mi mamá siempre los ahuyenta porque dice que son una distracción para mi... - Dijo Lacy soltando una risa al recordar brevemente dichas ocasiones -.

— Mmm... Yo sólo he recibido muchas cartas en San Valentín, ¿eso cuenta? - Preguntó Gloom inocentemente -.

— Supongo que si Gloom jeje. - Le respondió Liby algo incomoda -.

— ¿Y tú, Panther? - Preguntó Loth con ironía mientras levantaba las cejas -.

— Yo... Mi condición me ha limitado en ciertos aspectos, ese es uno de ellos... Así que, no. - Dijo cabizbaja -.

— Y eso confirma lo que dije. - Mencionó Loth orgullosa -.

— Lo aceptaría sólo si no fueses tan prejuiciosa.

— Mira, sin ofender, pero, ustedes no son lo que la sociedad consideraría cómo lo suficientemente atractivas para entrar en sus estándares. - Mencionó Loth con insensibilidad -.

— Oh vaya, no sabía que teníamos entre nosotros a "Miss Universo". - Dijo Terry rodando la mirada -.

— Si Loth, ¿Qué te hace pensar que puedes juzgarnos de esa forma? - Cuestionó Lyra -.

— Pues, quitando a Gloom, Lacy, Lupa y Laika, el resto de ustedes desprenden un olor a "virgen" muy peculiar. No digo que sean feas del todo porque son raras más que nada, sólo que deben de admitir que sus aspectos y personalidades no les ayudan.

"¡Hey!" - Se quejaron al unísono las antes mencionadas -.

— Es que en serio, no hay que ser un genio para darse cuenta de eso. Sólo véanse; una antisocial, una otaku con olor a humedad, una perfeccionista, una coja, una irritante fanática de rock y Liby, entre todas ustedes no se hace una.

— ¡Oye! Yo si he tenido varios novios.

"¿¡Qué!?" - Cuestionaron atónitas al unísono -.

— Eh, p-pues si, cómo lo o-oyen... Si he llegado a tener novio... Pero lo digo sin ofender.

— Descuida Liby, sabemos que lo dices sin esa intención.

— Gracias... - Le agradeció con una leve sonrisa, tratando de ocultar su inmensa felicidad ante el hecho de que, al menos por una vez había superado a sus hermanas mayores en algo -.

— Vaya Liby, quién lo diría, a diferencia de las adolescentes aquí presentes, parece que tú sí has sabido vivir plenamente tu juventud... - sonrió de forma burlona - Y antes de vuelvan a decirme que no puedo opinar, les recuerdo que existe la libertad de expresión. - Dijo Loth cruzándose de brazos y mostrando una sonrisa orgullosa en su rostro -.

— Eh... Si me permiten, me gustaría aclarar que, aunque me parece sumamente curioso el hecho de que por el momento ustedes no hayan conseguido pareja, eso no quiere decir que crea que no son lindas, al contrario, creo que sólo han tenido mala suerte. - Comentó Liby en un tono que denotaba nerviosismo, pero manteniéndose firme, lo cual le valió para que sus hermanas mayores le agradecieran el gesto -.

— No les mientas Liby, ellas saben que no son agraciadas.

— Muy bien, mi turno de hacer una pregunta. - mencionó en voz alta mientras se ponía de pie - ¿Qué se siente ser abandonada la mayor parte de tu vida en un internado? - Preguntó Terry en tono de burla -.

— ¿Ya se pueden hacer preguntas individuales? Oh bueno, entonces mejor responde mi pregunta, ¿Ya has recibido tratamiento ante tu notable déficit de atención?

— ¡Hey! Yo pregunté primero. Además, no sé de qué hablas.

— Si, eso pensé.

— ¡Lyra, dile algo!

— Loth, ¿Puedes responder su pregunta? Por favor...

— Si claro, ¿ahora resulta que tenemos que contestar todas y cada una de las preguntas que se nos hagan, no?

— Es parte de la dinámica. Pensé que había quedado claro.

— Cómo sea... - suspiró resignada - Mis años en el internado no fueron gratos por distintos motivos, principalmente porque desarrollé un trastorno alimenticio del cual aún no me he podido recuperar. ¿Estás satisfecha, eso querías saber?

— Eh... - recibió un leve codazo por parte de Lyra - Disculpa Loth, no debí preguntar eso... - Mencionó Terry algo apenada -.

— Ahórrate el pobre intento para ocultar tu hipocresía, ¿si? Preguntaste lo que que preguntaste... - suspiró molesta - Cómo sea, no es necesario que digas nada, estoy segura de que no soy la única con traumas y trastornos por aquí...

— Emm... ¿Estás segura de eso? - Preguntó Sonette -.

— Puedes preguntarles...

— Oh... ¿Ustedes tienen algún trauma o miedo? - Preguntó la pelinegra a sus hermanas -.

— Y-Yo l-le tengo miedo a muchas cosas...

— ¿En serio? Dime algo que no sepa, Loan... - Mencionó Loth con molestia -.

— Dale tiempo, ni siquiera había terminado de hablar. - Intercedió Sonette -.

— P-Pero mi m-mayor miedo son las p-personas... - Ante su revelación, sus hermanas se miraron confundidas entre si, a excepción de Loth a la cual le dio gracia -.

— ¿Se puede saber por qué? - Preguntó Lupa -.

— B-Bueno, no les t-tengo miedo como tal... Por ejemplo, a u-ustedes no les t-tengo miedo, bueno, sólo a Laika... - soltó una pequeña risa nerviosa - Es sólo q-que... M-Me da miedo cada vez que t-tengo que salir a-al exterior, el simple hecho de p-pensar que las p-personas me observan y me juzgan, m-me aterra... - Respondió con los ojos llorosos -.

— Mmm... ¿Y siempre ha sido así? - Preguntó Loth -.

— Desde que t-tengo m-memoria, si... Desde n-niña, mi mamá m-me ha inculcado sobre los peligros que hay en el e-exterior y m-me ha hecho imaginar t-todo lo que p-podría llegar a pasarme si salgo... E-Esa es la razón del p-porque le tengo miedo al exterior. - Después de dar su explicación, la rubia abrazó sus piernas al sentirse ansiosa -.

— Interesante... ¿Alguna vez te pusiste a pensar en el motivo que a llevó a tu madre a inculcarte esas ideas? Digo, ahora ya lo sabes por papá, pero quiero saber si lo habías pensado antes.

— Si, v-varias veces... Lo gracioso es que n-ninguna se acercó a lo que r-realmente fue... - Dijo cabizbaja y aún en posición fetal -.

— Ay Loan, no me gusta verte así... ¿Te gustaría que te ayudemos a superar ese miedo? - asintió a medias, pues no estaba segura y el simple hecho de pensar en ello le causaba pánico - Tranquila Loan, no te obligaremos si no quieres. Además, Loth tiene razón, no eres la única que tiene temores, así que puedes estar segura que ninguna de nosotras te juzgará.

— Oh Sonette, ahora que lo mencionas, ¿Tú tienes miedos? - Le preguntó Lacy con curiosidad -.

— Eh... No estamos hablando de mi jeje... - miró a su alrededor tratando de evitar la pregunta, pero fue Loth quién, siguiendo las indicaciones de Lyra, le obligó a responder - Bueno yo... Le tengo miedo a la soledad... Simplemente no me gusta estar sola... - Respondió Sonette avergonzada -.

— Y antes de que estuvieras aquí, ¿Qué hacías para evitarlo? - Preguntó Liby -.

— Trataba de estar con mi madre todo el tiempo, pero obviamente ella tenía que irse a trabajar, pasé muchas tardes de sufrimiento hasta que me vi en la necesidad de tener que rogarle a mi madre para que me dejara trabajar con ella...

— Oh... ¿Y no tienes amigos? Si se puede saber... - Volvió a preguntar Liby -.

— No soy buena relacionándome. Además, deje de estudiar hace casi dos años, así que tampoco tengo compañeros de escuela con los cuales hablar.

— Descuida Sonette, nosotras no te dejaremos sola.

— Gracias Liby... - Le agradeció mientras esta le sonreía -.

— Además, no tienes porque sentirte mal, después de todo, no eres la única que tiene miedos... - soltó un pequeño suspiro - En mi caso, yo tengo miedo a ser ignorada, vivo constantemente con ese temor...

— ¿Y se puede saber porqué? - Preguntó Lupa finalmente interesándose en la dinámica de sus hermanas -.

— Por mi mamá... Ella me ha dejado en claro que si no sigo bien sus pasos, nadie va a recordarme. Eso es horrible, ¿sabes? Porque yo no quiero ser cómo ella ni espero ser lo que la gente espera que sea, pero... ¿Y si tiene razón? No quiero fracasar...

— Pero Liby, ¿por qué nadie se acordaría de ti? - Preguntó Lyra con preocupación -.

— Porque a veces siento que no destaco en absolutamente nada y que sólo nací para ser una copia exacta de mi mamá... No tendré nada si no sigo con su legado...

— Pero nos tienes a nosotras, ¿no es cierto? - Preguntó Panther, a lo cual el resto de sus hermanas asintió -.

— Si, por ahora... - bajó la mirada - Pero cuando pase un año nos tendremos que separar y muy probablemente jamás nos volveremos a ver... - Mencionó desanimada ante las miradas de sus hermanas -.

— ¿Por qué estás tan segura de eso?

— Porqué ya me ha pasado antes, no puedo encariñarme con nada, siempre lo termino perdiendo... - Respondió al cuestionamiento de Panther -.

— Oh, lamento oír eso Liby...

— No te preocupes, como dije, ya estoy acostumbrada.

— Hey lil'girl, si te sirve de algo... la razón por la que me gusta tanto el heavy metal es porque en toda mi vida, la única cosa que me ha acompañado siempre he sido la música... - suspiró - Creo que es lo mejor que mi madre me pudo heredar después de tantas malas experiencias, también podría decirse que de cierta manera fue lo único que papá me dejó después de irse. - Dijo Terry con seriedad -.

— ¿Entonces escuchas esa basura sólo porque te hace pensar en lo feliz que pudo haber sido tu vida si tus padres no se separaban? Patético. - Comentó Loth -.

— ¿Me permites? Aún no terminaba de hablar... - la peliplateada rodó los ojos - El verdadero motivo por el que escucho esa "basura", es porque me ha permitido bloquear ciertos recuerdos negativos de mi infancia...

— ¿A qué clase de recuerdos negativos te refieres? Si puedo preguntar... - Cuestionó Lupa -.

— Oh, pues tú sabes... El hecho de tener un papá ausente y una mamá "famosa" provocó que yo tuviera problemas de aprendizaje y bastante acoso por parte de mis compañeros de clase.

— Ah ya, entiendo...

— Gracias por compartir eso con nosotras Terry, por supuesto que me sirve y eso lo aprecio mucho. - Dijo Liby con una sonrisa -.

— No es nada. - Respondió devolviéndole la sonrisa -.

— Además Liby, eres demasiado joven e inexperta, te falta mucho por vivir. Con esto no quiero decir que seas una inútil o que no sabe nada, por el contrario, pienso que puedes destacar en cualquier cosa que te propongas y que tu desees. El preocuparse es normal, pensar en el futuro es angustiante pero ni siquiera sabemos con certeza si pasará eso que estamos pensando, sea negativo o positivo. - tomó un poco de aire - Así que por el momento puedes estar tranquila, tienes mucho potencial que explotar y muchas cosas que vivir. Además, créeme que después de esto, aún seguiremos en contacto. Al menos yo trataré de mantenerlo con todas y haré lo posible por apoyarles, aún si sus madres o Lincoln no lo hacen. - Dijo Panther con solemnidad -.

— También agradezco mucho tus palabras Panther, lo que ustedes me dijeron es lo mejor que me han dicho en toda mi vida.

— Lamento que no te lo hayan dicho antes.

— Descuida, que una hermana tan inteligente y genial cómo tú me lo haya dicho es suficiente.

— Nah, sólo soy una simple estudiante que intenta ser dibujante y que espera no quedarse sola el resto de su vida. - dicho comentario levantó las miradas de sus hermanas, las cuales no se lo esperaban -.

— ¿Por qué dices eso? ¿No acabas de decirme que mantendremos contacto? Yo también haré lo posible por seguir en contacto con ustedes. Cuestionó Liby confundida -.

— Es que no me refiero a eso Liby... Es algo tonto, un estúpido miedo que a veces no me deja dormir. - soltó un largo suspiro - Si te lo digo, parecerá que estoy contradiciendo lo que te dije, pero créeme, no miento cuando te digo que tienes un gran potencial y que espero logres lo que deseas.

— Ningún miedo es tonto o estúpido por más mínimo que parezca, así que puedes contarnos Panther, nadie te juzgará, por el contrario, te apoyaremos con ello. - Se pronunció Lyra mientras le abrazaba por los hombros -.

— Es que es tan patético que me da miedo decírselos... - volvió a suspirar - Pero está bien, se lo diré, ustedes están siendo honestas y es lo menos que puedo hacer... Tengo... Tengo miedo a quedarme soltera, a no formar una familia...

— Oh... Pero eso es normal Panther, todas en algún momentos nos hemos sentido o nos sentiremos con ese miedo. No puedo decirte cuando encontrarás pareja, ése momento tendrá que llegar por si sólo, no lo fuerces. - Mencionó Lyra con sabiduría -.

— Además, así cómo se lo dijiste a Liby, tienes una vida por delante y no sabes que te depara el futuro. Entiendo que ella sea menor y con menos experiencia que nosotras, pero no somos adultas y es normal que tengamos miedo de algunas cosas que nos esperan en esa etapa, sin embargo, eso no debe de impedirnos estar tranquilas, ya que preocupaciones siempre va a haber. - Mencionó Terry -.

— Estaremos para apoyarte, no dudes de eso Pan. - Agregó Liby mientras se unía al abrazo que tanto Lyra como Terry le estaban dando a su hermana inválida, la cual les agradeció con una voz entrecortada -.

— Vaya, hasta que las pocas neuronas de Terry se conectaron para decir algo coherente, estoy sorprendida. - Dijo Loth mientras veía el abrazo de sus hermanas a la distancia -.

— ¡Tengo las mismas neuronas que tú! - Le respondió molesta -.

— Pues no lo parece...

— El que yo tenga lento aprendizaje no significa que yo sea...

— Bueno, bueno, ya entendimos. - le interrumpió con descaro- ¿Alguna tiene algo más que decir? - preguntó Loth en un tono ciertamente amenazante - Más les vale responder, recuerden que es parte de la dinámica, ¿no es así, Lyra? - Mencionó mientras codeaba a la castaña incitándole a hablar -.

— Bueno... - respiró hondo - Creo que es evidente que la mayor parte del tiempo tiendo a ser perfeccionista y a tratar de resolver problemas que, aunque parecen irresolubles, la mayor parte del tiempo no me incumben...

— Una entrometida, en pocas palabras. - Interrumpió Loth -.

— De cierta forma tienes razón, pero créeme que no lo hago a propósito... - suspiró con pesar - Hace tiempo estuve en terapia y en ese tiempo fue diagnosticada con el trastorno obsesivo compulsivo, producto de ciertas experiencias traumáticas y tensas que me generó el estilo de vida de mi madre... Y bueno, se supone que no debería contárselo a nadie por recomendación de mi terapeuta, pero creo firmemente que para superar tus miedos, revelarlos es parte del proceso.

— Me gustaría saber a qué clase de experiencias te refieres, ya que la madre de Terry tenía un estilo de vida similar al de tu madre y sin embargo, a comparación de tu situación, Terry no generó el mismo trauma que tú. Sé que obviamente cada persona reacciona de diferente manera a experiencias traumáticas, pero de todos modos es fascinante escuchar como un estilo de vida cómo ése les afectó más que a sus madre que fueron quienes lo vivieron. - Mencionó Loth fascinada con lo que estaba escuchando, puesto que la psicología humana siempre le había interesado -.

— Eh... - miró a sus alrededores con incomodidad, pues al estar Gloom, no se sentía cómoda respondiendo eso - No estoy segura de querer responder eso...

— ¿¡Qué!? ¿¡Por...!? - Dejó de quejarse al percatarse del lenguaje visual de Lyra, la cual señalaba a Gloom con la mirada - Ah... Ya entiendo. Gloom, ¿puedes traerme un poco de agua de la cocina?

— ¡Oki, enseguida vuelvo! - Accedió con amabilidad para proceder a dirigirse hacía la cocina -.

— Listo.

— Debe de ser algo grave como para que Loth haya tenido que deshacerse de Gloom... - Mencionó Lupa con incertidumbre -.

— ¡Por Mustaine! ¿¡Es cierto eso!? - Terry sólo pudo quedarse boquiabierta ante la afirmación de Lyra con la cabeza -.

— Si... Es un tema delicado y no me gustaría que ella escuchara...

— Puedo darme una idea sobre a qué te refieres, pero espero estarme equivocando... - Dijo Panther preocupada -.

— Bueno, no quisiera entrar en muchos detalles, pero la raíz de mis traumas surge debido a que, por diferentes cuestiones, yo estaba obligada a tener que acompañar a mi madre en las giras de sus discos, lo cual conllevó a que yo estuviese varias veces en riesgo de sufrir un abuso sexual... - soltó un largo suspiro al recordarlo - Eso también me ha generado una desconfianza muy grande hacía los hombres adultos, no puedo quedarme a solas con uno porque entro en pánico...

— Dios mío, justo lo que pensaba. Por favor dime que al menos tu mamá hizo algo ante tal situación, no es posible que no lo haya hecho a sabiendas de que era ella quién te estaba arrastrando a ese estilo de vida. - Dijo Panther con enojo -.

— De hecho, la única razón por la que mi madre actuó cómo se debía fue hasta que su novia Sam habló seriamente con ella, ya que estoy segura que lo habría dejado pasar, pues la mayoría del tiempo estaba fuera de sí.

— Damn girl, sabia que eras un encanto, pero no que despertaras bajas pasiones... - sus hermanas le miraron con extrañeza al escuchar sus palabras - Perdón, no debí haber dicho eso. Fuera de bromas, nadie debería de pasar por algo así. Yo te entiendo, ya que tuve que lidiar con fanáticos de mi madre que encontraron mis redes sociales y me comenzaron a acosar.

— Fanáticos, pervertidos, personas del staff, integrantes de la banda de mi madre, entre otros tipos de acosadores con lo desgraciadamente me crucé... - Finalizó soltando un suspiro -.

— Gracias por tener el valor de contarnos esas experiencias tan traumáticas, nadie debería de pasar por algo así. - Mencionó Liby mientras se acercaba hacía su hermana mayor para darle un abrazo, el cual sería correspondido -.

— ¡Ya volví! - mencionó alegremente mientras procedía a entregarle a Loth un vaso de agua - ¿De que me perdí?

— Oh, de nada... - le sonrió para disimular - De hecho, estábamos pensando que aún no te hemos preguntado si tienes algún miedo. - Comentó Panther -.

— Oh si, es mi turno jeje... - se quedó pensando unos segundos - Y pues... Yo le tengo miedo a la oscuridad, no me gusta estar en lugares muy oscuros ni pequeños, empiezo a entrar en pánico cuando estoy en un lugar así.

— ¿Y hay alguna razón por el que tienes esa fobia? - Preguntó Loth -.

— Mmm... Creo que es porque mi mamá suele encerrarme en el armario cuando está enojada o cuando no quiere verme... Afortunadamente aquí no hay ningún armario... - se quedó sonriendo por unos segundos mientras que sus hermanas le veían con preocupación - ¿¡No hay ninguno, verdad!?

— No Gloom, descuida, aquí no hay ningún armario.

— Pero si hay un sótano y si quieres...

— ¡Lupa!

— ¿Qué? Sólo iba a ofrecerme a ayudarle a superar su miedo...

— Ajá, si claro. ¿Y tú por qué no dejas que Gloom haga lo mismo?

— ¿Eh?

— Si, cuéntanos tu miedo o trauma para que ella pueda ayudarte.

— No tengo porque hacer eso. - Dijo Lupa cruzándose de brazos -.

— Hey, eso no es lo que acordamos abuelita. - Mencionó Loth haciendo burla -.

— Si Lupa, no tienes otra opción.

— Les digo que no tengo que hacer eso porque yo no tengo miedos.

— Si claro, y Terry tiene más de 5 neuronas. Sólo dilo Lupa, no es tan difícil. - Le dijo Loth -.

— Les estoy diciendo la verdad, ¿Qué ganaría yo con mentirles? ¿Mantener mi dignidad? Por favor, ocultar algo así no sirve de nada. - Respondió con seriedad -.

— De acuerdo... - observó dudosa a la peliblanca por unos instantes hasta que optó por creerle - Eso sólo nos deja a Lacy.

— Y a Laika... - Murmuró Sonette -.

— Obviamente. Me gustaría que ella estuviese aquí, pero por más que lo intentemos no haremos que salga de su habitación. - Respondió Lyra con pesar -.

— Buen punto. Aunque sigo creyendo que deberíamos convencerla con algo de alcohol... - Mencionó en voz baja -.

— ¿Dijiste algo?

— No, no.

— Oh bueno... En fin, ¿tienes algo aje contarnos, Lacy? - Preguntó Lyra en un tono amigable -.

— Eh... Pues yo le tengo miedo a mi mamá... ¿Eso cuenta?

— Si, pero tienes que darnos una razón. - Respondió Terry -.

— Oh bueno... Supongo que le tengo miedo a sus gritos, no, no, a sus regaños... Esperen, ¡No, no! A sus castigos... Mmm... Creo que le tengo miedo a todo lo relacionado con ella... - les sonrió con nerviosismo - Aunque, no hay nada que me dé más miedo que pensar en lo que me hará si no logro lo que ella espera de mí...

— ¿Y exactamente qué espera?

— Qué sea igual o incluso más exitosa que ella en su carrera deportiva.

— ¿Y lo eres, no? - Lupa volvió a preguntarle -.

— Supongo, siempre me esfuerzo al máximo y aún así ella nunca está satisfecha. ¿Y sabes que es lo peor? Estoy empezando a odiar los deportes...

— Oh... ¿Entonces se podría decir que los prácticas a la fuerza? - la castaña le asintió - Debe ser horrible. - Reaccionó Lupa con desagrado -.

— Lo sé. Al menos voy a descansar un año de cualquier entrenamiento o eso creo...

— Si tu mamá no te obligara a practicar deportes, ¿Qué te gustaría hacer? - Le preguntó Liby -.

— Creo que a la pintura o al patinaje artístico...

— Bueno Lacy, estoy segura de que sobresaldrías en cualquier actividad deportiva o artística, así que no tengas miedo en realizar lo que quieras, nosotras te apoyaremos en ello. - Mencionó Lyra en un tono maternal -.

— Además, tenemos todo un año para pensar en cómo convencer a tu madre de que te deje de forzar a practicar deportes. - Agregó Sonette -.

— Oh, pues muchas gracias hermanas. Son cómo las mejores amigas que nunca tuve. -Les agradeció sonriente mientras se acercaba hacia ella para abrazarles -.

"DIOS, pero que homosexuales son... Ojalá que no sean iguales a cierto peliblanco que conozco..."

"¡Laika!" - Dijeron algunas al unísono -.

— Hasta que te dignas a salir de tu cueva...

— No te emociones Terry, el único motivo por el que salí fue porque Loth me prometió una botella de vodka y cigarrillos.

— ¡JA, SE LOS DIJE!

~Mientras Tanto~

[A pesar de que su intención inicial al refugiarse en su oficina era "reflexionar" y "calmarse" tras el altercado con sus hijas, el peliblanco terminó haciendo todo lo contrario. Pasó el resto del día, hasta el anochecer, sumido en pensamientos cargados de amargura y rabia. Recordaba con añoranza los días en que su vida era más sencilla, libre de preocupaciones, una ironía para alguien como él, que nunca se había arrepentido de las decisiones que había tomado ni de las acciones que había cometido. Sin embargo, ahora era consciente de que todas esas elecciones comenzaban a pasarle factura. Su frustración radicaba en aceptar que ya no podía continuar con su estilo de vida extravagante, despreocupado y exento de responsabilidades. El ejemplo más claro de ello eran sus once hijas, a quienes había evitado por años y con quienes, para su desdicha, ahora compartía techo.

Fiel a su costumbre, buscó cualquier excusa para no enfrentarse a la culpa. Así, tras encargarse de cerrar el edificio de su empresa, una tarea que asumió después de perder la noción del tiempo y recibir la solicitud de su asistente, subió a su auto. Sin dudarlo, se dirigió a un bar. Podría haber elegido cualquiera, pues lo único que deseaba era ahogar sus penas en alcohol, pero, como era típico en él, optó por buscar un bar apartado de la ciudad en lugar de uno recurrente o de baja reputación. Por ningún motivo permitiría que alguien conocido lo viera en un lugar así.]

- Afueras de Detroit, Michigan -

[Tras un trayecto de treinta minutos hacia las afueras de la ciudad, el peliblanco llegó finalmente al primer bar que encontró en su camino. A primera vista, el lugar parecía bastante decente, al menos en comparación con los bares habituales de esa zona. Al ingresar, agradeció comprobar que el interior también estaba en buenas condiciones, y se sintió aliviado al notar que no había demasiados clientes. Con esa tranquilidad en mente, decidió acomodarse y pidió un whiskey, un hábito que repetiría numerosas veces durante la noche, pues su único propósito era evadirse de las preocupaciones que lo atormentaban.

Sin embargo, por mucho que intentara ahogar sus pensamientos en alcohol, no lograba apartarlos del todo. Muy en el fondo, aunque le costara admitirlo, deseaba reconciliarse con las madres de sus hijas, especialmente con aquellas que también eran sus hermanas. Llevado por ese impulso, tomó su teléfono y comenzó a marcar los números de todas y cada una de sus hermanas, con la esperanza de entablar una conversación sincera, algo que no había hecho en mucho tiempo, salvo con Loan. Para su sorpresa, y muy a su pesar, la única que respondió fue la persona que menos esperaba: Lisa.]

— Disculpe, creo que se equivocó de persona. No tengo registrado su número.

— ¿En serio no lo tienes registrado?

— ¿Perdón? No entiendo porque tendría que tenerlo registrado.

— Voy a suponer que estás fingiendo, Lisa...

— ¿Cómo es que sabe mi...? - se quedó en silencio por unos segundos - ¿Lincoln?

— El mismo. ¿Sorprendida?

— Bastante...

— Bueno, también me sorprende escuchar tu voz... ¿No se supone que estabas con las demás de vacaciones?

— Me invitaron, pero la verdad es que no quería ir.

— Entiendo... - suspiró - ¿Cómo... Cómo has estado?

— Bien, no me quejo. He hecho bastantes investigaciones y he ayudado a numerosas instituciones científicas, lo de siempre. ¿Y tú? Escuché que por fin te estás haciendo responsable de tu "caótica descendencia".

— Je, si... No he hecho mucho además de eso...

— Qué extraño, en otro momento me habrías presumido tus logros y las gran fortuna que has acumulado. ¿Qué pasa? ¿Recuperaste tus valores? - Mencionó con ironía -.

— No estoy de humor.

— Eso no es nuevo, tampoco lo estuviste en las últimas interacciones que tuvimos...

— Me conoces Lisa, ya sabes como soy...

— De hecho no, hace tiempo que te desconozco.

— ¿Qué? ¿Cómo es posible que digas eso?

— Sabes la respuesta.

— Sé que en estos últimos años mis acciones y decisiones no fueron las mejores, son cuestionables y egoístas, lo sé, ¿me arrepiento? Si, en el fondo. ¿Servirá de algo? Lo dudo. ¿Lo ves? Nada cambiará si me muestro arrepentido o culpable de lo que hice.

— Mira Lincoln, no es necesario ser psicólogo para darse cuenta que todo lo que eres hoy en día es producto de un trauma. Está claro que sabes perfectamente cómo olvidar el pasado, sin embargo, este no se olvida de ti.

— Oh, si "conoces" eso de mi. - Mencionó con ironía -.

— Vivimos más de 10 años juntos, hermano mayor. Hay algunas cosas que son imposibles de ocultar.

— Si claro, ¿Se puede saber cuál es ése trauma que supones que yo tengo?

— Bueno... De acuerdo a varias actitudes y comportamientos que tenías cuando vivíamos en la casa de nuestros padres, así cómo tu constante búsqueda por la aprobación de estos, puedo asegurarte con certeza que, tu sueño frustrado es formar una familia amorosa y estable, así como ser un gran ejemplo de tus hijos, sin embargo, por tu mente siempre pasó la duda de si podrías llegar a ser igual o mejor que nuestro padre. Es por eso que hiciste lo que hiciste.

— Ja... - rio nervioso - Buen intento Lisa, pero eso es lo último que me traumaría.

— Oh, pues... Supongo que me equivoqué... - Dijo en un tono ingenuo para engañar a su hermano, puesto que este se lo había confirmado con su negación -.

— Cómo sea, lo único que deseo en este momento es reunirme con todas, necesito hablar con ustedes y tratar que todo vuelva a ser cómo antes.

— Sabes que no es tan fácil Lincoln. Recuerda que algunas apenas si están en bueno términos contigo mientras que, Lola por ejemplo, no quiere verte siquiera, siempre dice que le das asco y vergüenza.

— ¿¡Qué!? ¿Eso dijo la estup...? ¿¡Por qué sólo yo le provoco eso!?

— Sin ofender pero, a diferencia de ti, no evadieron sus responsabilidades.

— ¿Qué? ¡Yo tampoco, siempre cumplí con las pensiones alimenticias cuando las necesitaban!

— ¿También le cumpliste a tus demás ex-mujeres?

— ¡No estamos hablando de ellas!

— Podemos seguir así toda la noche Lincoln, pero tú lo dijiste, no cambiará absolutamente nada. Si quieres tener la oportunidad de que al menos nos reunamos para hablar, demuéstralo con tus acciones no con palabras ni subiendo tu tono de voz.

— Perdón Lisa, yo sólo estoy...

— No, cállate un segundo y escúchame. Lo primero que tienes que hacer, es aceptar tus errores y tratar de corregirlos a la brevedad, sé que no lo harás, ya que algunos son imborrables, sin embargo, puedes hacer que las personas que te rodean o que se preocupan por ti, vean tu intención por cambiar la percepción que tienen sobre ti. Estoy segura que ya te lo han dicho incontables veces y sigues ignorándolo, ¿no es así?

— Si, lo es...

— Bien, entonces hazte un favor y obedece lo que te estoy diciendo. En este momento no sólo tú dependes de ti mismo, hay 10 niñas que también lo hacen. Si estás seguro de que no tienes ningún trauma, entonces honra la memoria de papá y cuida a esa niñas cómo él lo hubiese hecho. No diré nada más, saca tus propias conclusiones.

— De acuerdo Lisa. - suspiró con profundidad - Pero por favor intenta convencer a las demás, en verdad necesito hablar con...

— No puedo asegurarte nada Lincoln. Lo único que te diré es que cumplas primero y después yo lo haré, ¿Está bien?

— Si...

— Bueno, me tengo que ir. Mi mente funciona mejor de noche y no puedo seguir perdiendo tiempo. Nos vemos.

— Está bien Lis, adiós. Me dio gusto hablar contigo... Te qu... - se decepcionó al darse cuenta que su hermana había colgado 3 segundos atrás - Maldita sea...


Su vida, lo es todo.

Lo que alimenta su sed, causa el pecado.

Sus deseos son lo único que le importa. No le avergüenza ni se siente culpable, nada de eso.

Mira profundamente hacía su cara, puede engañarte sin dejar ningún rastro. No temas de lo que puede hacer, a menos que quieras que te lo haga a ti.

Mientras trepa por tu espalda, prometerá no picarte. Te dirá lo que quieres oír pero no significará nada. Entonces te tratará como a un perro mientras te introduce su veneno. Finges no saber que él era un escorpión.

Sólo está interesado en si mismo. no hay nadie más, nunca lo hubo. Sueña con quedarse solo, con la tristeza y la demencia que habita en él.

Mira profundamente dentro de su alma, es negro cómo el carbón, cómo el agujero causado por una bala.

No temas, deja de estar de rodillas, no te podrás defender, harás lo que él quiera, porque todo el tiempo supiste que él era un escorpión.

Sus mentiras, siempre serán para llegar a la orilla, sólo lo engrandecen y nada más.

Sus esperanzas, serán llevarse todo lo que amas. Pronto te traicionará.

Mira profundamente hacia su pasado, el dolor que sintió es insuperable. No es un humilde escorpión. Es mucho peor...


[...]

*De regreso con los retoños del albino, éstas aún se encontraban conviviendo entre sí, contando finalmente con la presencia de Laika, la cual no se limitaba a únicamente estar sentada escuchando lo que sus hermanas decían sino que, de manera genuina estaba participando al igual que sus hermanas. Obviamente esto se debía al rápido efecto que el alcohol hizo sobre su organismo, pero de todas formas, se le notaba cómoda. La pelirroja habría revelado algunos datos personales sin mucha importancia, así como una pequeña parte de su vida, recordando como había sufrido en su infancia por la ausencia de una figura paterna*

— Tengo otra pregunta para Laika... - dijo mientras levantaba la mano, a lo cual la pelirroja le asintió - ¿Es cierto lo que nos dijiste hace unas horas? - Preguntó Lacy -.

— ¿Te refieres a lo que dije sobre que no me importaría tener que defenderlas? - la castaña le asintió - Si, no me importaría defenderles de cualquier cosa. Incluso a Panther o a Lyra.

— ¿Por qué? - preguntó Terry confundida - Si no hace mucho decías que ninguna de nosotras, a excepción de Loth te importaba. Es más, dijiste que no querías estar aquí.

— A veces sólo hablo por hablar, actúo por instinto y después no sé cómo tranquilizarme... - soltó un largo suspiro - Pero les seré sincera... La razón por la qué dije eso fue porque de niña me hubiese gustado tener a alguien que me cuidara y defendiera de todas las burlas y del acoso que sufrí en mi época escolar, así cómo de la violencia doméstica que sufrí con mis padrastros... - Narró con un tono quebradizo en su voz, producto de la tristeza que sentía al recordarlo y del efecto del alcohol -.

— Lamentamos escuchar eso, Laika. Gracias por tener el valor de contárnoslo. - Dijo Lyra con solemnidad -.

— También te agradecemos por tener esa consideración hacia nosotras. - Agregó Sonette -.

— Ciertamente te juzgamos mal, discúlpanos por ello. - Comentó Panther -.

— No hay problema, yo las juzgo todo el tiempo, así que estamos a mano.

— Dejando de lado eso. Ahora que lo pienso, ¿Lincoln te ha hecho revivir tus traumas con el par de golpes que te ha dado, no es así? - Preguntó Loth con enojo -.

— Mentiría si dijera que no.

— Es un maldito imbécil.

— Bueno, todas nos hemos dado cuenta de eso... - rodó lo ojos - Cómo sea, lo único que me detiene para devolverle los golpes es mi madre, ella estaría muy decepcionada si supiera que hice eso, sería una falta de respeto hacía ella, digo, ella está consciente de que él es un idiota, pero no justificaría mi comportamiento.

— Aún si se vuelve a atrever a golpearte, no me importará decepcionar a mi madre, ella ya lo está de todos modos. - Dijo Loth con una sonrisa -.

— Gracias Loth.

— No hay de qué.

— Por cierto, hablando del susodicho, ¿Tiene alguna idea de a dónde pudo haber ido? Casi es media noche y no se ha dignado en volver después de... - Lupa se vio interrumpida por el sonido de la puerta de le entrada abriéndose -.

*Cómo si el universo hubiese escuchado a la peliblanca, la puerta de la entrada se abrió lentamente. Se trataba de su padre, al cual se le notaba algo ebrio, con un semblante que denotaba seriedad y angustia. Al entrar no dijo una sola palabra, así cómo tampoco lo hicieron las niñas, ninguna se atrevió a decirle algo, sólo se quedaron calladas mirándose entre sí. Es por ello que, quedarían totalmente confundidas al escuchar las inesperadas palabras que su padre tenía que decirles*

— Eh... Niñas, ¿tienen un segundo?

— S-Si claro... ¿Qué sucede?

— Bueno, yo... - Soltó un largo suspiro tratando de darse valor -.

— Tú... ¿Qué? - Preguntó Loth -.

— Yo, la...

— El alcohol no es para todos, eh. Nos queda claro. - Dijo Laika en tono burlón -.

— Hey dude, será mejor que vayas a...

— Les debo una disculpa a todas. Lamento no ser el padre que esperan que sea... - mencionó en voz alta interrumpiendo a Terry - Yo... ¿Sólo perdónenme sí? No tengo más que decir. - Dijo cabizbajo para después darse media vuelta y dirigirse hacia su habitación -.

*El peliblanco se retiraría a su habitación, dejando un mar de cuestionamientos que muy seguramente sus hijas le harían al día siguiente ante la confusión que dichas palabras generaron en ellas*

— Eso fue... Extraño... - Dijo Liby mientras se rascaba la cabeza -.

— Él es todo un enigma... Jamás pensé escuchar esas palabras. - Agregó Sonette -.

— Sé q-que no está en sus cinco sentidos, p-pero... ¿Creen q-que en el fondo lo lamente de verdad? - Preguntó Loan -.

— Sinceramente no lo sé, eso fue inesperado de su parte... - Contestó Lyra -.

— Creo que no debí beber tanto, tengo náuseas... - Dijo Laika con los ojos muy abiertos -.

— Creo que a todas nos dieron náuseas...- Concordó Loth -.