Andre la llevó a la cama y con cuidado la acostó para no despertar a andre gabriel, ya que el dormía en la misma cama. Después se dieron un beso de buenas noches, luego andre se acostó y se quedaron dormidos.
Mientras tanto en la ciudad de París, lejos de Caen. Alan se encontraba saliendo de la estación de policía, él iba camino hacia su casa. Pero antes él se detuvo en una cabina telefónica para llamar a un taxi, el cual solo tardaría quince minutos. Cuando salió de la cabina, Alan miró las estrellas del cielo, tomando un respiro.
Alan: Me pregunto cómo estarán oscar y andre en estos momentos, ha pasado un mes desde que andre envió una carta.
Es probable que su bebe ya haya nacido, recuerdo que en su última carta andre mencionó que los nueve meses estaban por cumplirse.
En ese momento sonó la bocina del taxi que estaba apunto de estacionarse en una orilla para esperar a que el subiera. Caminó y subió al taxi, durante el viaje Alan solo miraba como algunas personas caminaban por las calles y a pesar de estar lejos, desde la distancia se podía ver la gran luz de la torre eiffel. Solo tomaron unos minutos para llegar a su casa, una vez llegando Alan le pagó al taxista y bajó del taxi.
Dio unos cuantos pasos para abrir la puerta del edificio en donde él vivía. Luego llegó al segundo piso finalmente entrando a su casa, cansado después de un largo día, Alan fue a darse un baño. Al terminar Alan solamente se puso unos pantalones de pijama y seco su cabello. Más tarde fue a su cuarto a acostarse a su cama. Finalmente Alan podía descansar, porque siendo el jefe de policía no era un trabajo fácil, todos los días había que esforzarse haciendo lo mejor por resolver un caso o capturar a un criminal, todo siempre requiere de tiempo completo. Estando acostado en la cama, lentamente Alan comenzó a quedarse dormido en su cómoda cama.
Pasaron unos días, hasta que la carta de Andre llegó a manos de Alan. Cuando él leyó la carta se sorprendió mucho al saber que el hijo de oscar y andre había nacido. Así que cuando terminó de leer pensó en escribir pero prefirió llamarlos por teléfono,
Alan fue a la sala, tomó el teléfono y marcó el número de la casa de oscar y andre.
(Alan agarra el teléfono y marca los números)
En la ciudad de Caen, oscar y andre se encontraban en su hogar cuando el teléfono sonó. Andre contestó la llamada mientras cargaba a su bebe.
Andre: Bueno?
Alan: Andre.?
Andre: Alan.. Hola ¿cómo estás?
Alan: He estado bien, recibí tu carta, me da mucho gusto saber que tu hijo haya nacido. Me imagino que tu y Oscar están disfrutando ser padres.
Andre: Si..jeje. Estamos felices. Realmente disfrutamos cada momento con nuestro pequeñito.
Alan: Me alegro mucho por ustedes.
Andre: Gracias. Pero cuéntame, ¿cómo va todo en París?
Alan: Todo está bien, aunque admito que ser jefe de policía no es tan fácil. Pero aun así adoro mi trabajo.
Andre: Entiendo, te esfuerzas mucho.
Alan: Bueno si, hay algunas situaciones difíciles. Aun así logró seguir adelante.
Andre: Ohh ya veo, es que a oscar y a mí nos gustaría que vinieras a visitarnos.
Alan: Me gustaría hacerlo, tal vez los visite en mi próximo día de descanso.
Andre: Ok, esperaremos tu visita. Sabes que eres bienvenido a vernos cuando quieras.
Alan: Gracias, andre.
Alan noto la hora en el reloj, eran las 10:40pm. Sabiendo que era tarde, decidió terminar la conversación para que todos pudieran descansar.
Alan: Andre creo que ya me despido, es tarde. Fue bueno poder hablar contigo, por un momento.
Andre: Vale, aquí le paramos, buenas noches Alan.
Alan: Buenas noches andre. Bye.
Alan colgó el teléfono, y fue a dormir a su cuarto. Después de unas largas semanas, Alan tomó su día libre y fue hacia Caen para visitar a oscar y andre. Salió temprano de su casa para ir a la estación de tren. Llegando ahí, tomó un tren disponible que iba rumbo a Caen, durante el viaje Alan permaneció tranquilo y callado mirando por la ventana los Campos y el gran cielo azul. Un momento después Alan cerró sus ojos quedándose dormido, el viaje duró casi tres horas.
Llegando a la estación de tren de Caen Alan despertó cuando sintió el tren detenerse, se sorprendió mucho al darse cuenta que había llegado a su destino ya que al dormir se sintió como media hora.
Al bajar del tren y dar unos pasos, una muchacha accidentalmente chocó con él haciendo caer su bolso en el suelo.
Annie: Lo siento mucho ¿está usted bien?
Alan: Estoy bien no te preocupes, fue un accidente.
(Alan se agacha para recoger el bolso del suelo)
Alan: Me parece que esto es tuyo.
Annie: Ahh! gracias. Perdona si te lastime, iba corriendo a toda prisa. Me llamo Annie.
Alan: Yo me llamo Alan. Una vez más, está bien, no me pasó nada. Solo ten más cuidado.
Annie: Si, eso haré gracias.
En un momento ambos quedaron mirándose uno al otro, pero en un instante se oyó la llamada de un tren, que estaba a punto de partir.
Annie: Ohh.! Ya tengo que irme, esa es mi llamada.
Alan: Por favor déjame llevarte, así no tendrás otro accidente.
Annie: Jejeje.. gracias.
Llegando a la entrada del tren, Alan tomó la mano de la muchacha para ayudarla a subir.
Annie: Adiós Alan, fue un placer y gracias.
Dijo ella, antes de dar unos pasos para alejarse.
Alan: Adiós annie, cuidate mucho
Dijo él, despidiéndose al besar la mano de la muchacha, la cual se sonrojó.
Un momento después ella se subió al tren, una vez ahí, Annie y Alan alcanzaron a mirarse por la ventana dándose un último adiós. Más tarde tomó un taxi para así llegar a la casa de oscar y andre. Durante el viaje, Alan se preguntaba muchas cosas, por ejemplo cómo será el hijo de andre. No faltaba mucho para saberlo, unos 30 minutos después llegó a la casa.
Alan: Parece que aquí es. Se ve que es un lugar tranquilo.
El camino hacia el porche de la entrada y toco la puerta. En unos segundos la puerta se abrió, era oscar quien lo había recibido.
Oscar: Hola Alan, bienvenido.!
Alan: Hola oscar, ¿cómo estás?
Oscar: Muy bien gracias. Pasa porfavor.
Alan: Gracias oscar.
Cuando el entró a la casa, andre bajo las escaleras cargando a su hijo, en ese momento Alan vio por primera vez al nuevo miembro de la familia grandier.
Andre: Alan.! Que gusto que hayas llegado.(Andre camina hacia Alan y le presenta a su hijo) Mira te presento a nuestro hijo, se llama Andre Gabriel Grandier.
El pequeño miró a Alan con sus enormes ojos azules, pero en unos segundos Andre gabriel comenzó a llorar.
Andre gabriel: Waah.. waah.. !
Oscar: Ayy.. mi amor, no llores. Alan es nuestro amigo. (Oscar mira a Alan) Lo siento Alan.
Alan: No, está bien, él no me conoce, Es la primera vez que me ve.
Andre: Shh ..shh.. esta bien, no llores mas.
Dijo andre, a su hijo.
Cuando el pequeño se calmó todos fueron a la sala de la casa, Alan se sentó en una de las sillas, oscar y andre se sentaron en el sofá.
Alan: Ahora que lo veo, se parece mucho ti andre.
Andre: Si, es igual a mi cuando era pequeño. La única diferencia es que saco los ojos azules.
Alan: Es verdad.
(Oscar se levanta del sofá)
Oscar: Volveré en un momento con café y galletas, no tardó. Andre por favor carga tantito a andre gabriel.
Andre: Sí mi amor.
(Andre toma al pequeño en brazos)
Andre gabriel: Mmm…
Andre: Shh..shh..
Mientras la mama se alejaba el bebe miró a Alan con mucha curiosidad, llegando a querer tocar su cara. Al ver esto Alan dejó que el pequeño lo hiciera.
Un momento después oscar regresó con las tazas de café y las galletas en una charola. En unos minutos los tres amigos comenzaron a conversar sobre todo lo que les había pasado, reían y bromeaban.
Los tres amigos pasaron una tarde agradable.
Alan: Bueno, creo que ha llegado la hora de irme. Gracias por todo.
Oscar: Gracias a ti, Alan, por venir a vernos.
Dijo oscar, cargando a su bebe.
Alan: De nada. (Alan camina hacia la puerta)
Andre: Espera, ¿quieres despedirte de Andre gabriel antes de que te vayas?
Alan: Si, gracias.
Oscar dio unos pasos hacia donde estaba Alan y le dejó cargara a su bebe para poder despedirse. Poco después Alan se retiró dando un último adiós. El tiempo pasó, Alan se volvió muy cercano convirtiéndose oficialmente en el padrino de Andre Gabriel.
Desde ese día, oscar y andre vivieron una vida tranquila y alegre, pasaron unos meses, andre gabriel fue creciendo y con el tiempo él fue aprendiendo nuevas cosas.
Cuando el pequeño cumplió un año, comenzó a dar sus primeros pasos, claro que con algo de práctica y la ayuda de sus padres andre gabriel fue aprendiendo poco a poco.
Un día, oscar y andre estaban sentados en la alfombra de la sala con andre gabriel jugando y ayudandolo a caminar. El pequeño hizo un esfuerzo al ponerse de pie y mover las piernas para caminar. Andre se puso atento extendiendo sus brazos por si acaso andre gabriel llegara a caerse. Pero finalmente, el pequeño logró avanzar sin ningún problema.
Oscar: ¡Mira mi amor, Gabriel está caminando!
(Oscar y andre observan al pequeño caminar)
Andre: Eso es hijo, puedes hacerlo.
El pequeño andre se sentó de rodillas mirando a su papá y dijo su primera palabra.
Andre gabriel: Pa..pa.
Oscar: ¿Oíste eso? Dijo papá.
Gabriel escuchó la voz de su oscar y dijo mamá.
Andre: Que lindo, ahora dijo mamá.
El pequeño andre camino hacia su papá.
Andre gabriel: Papa..
Andre: Así es, yo soy papá.
El pequeño ve a oscar y dice mamá.
Andre gabriel: Mamá..
Oscar: Si mi niño, mamá y papá están aquí.
El pequeño se levantó y dio unos pasos más.
Oscar: Cuidado mi niño, no te vayas a caer.
Justamente cuando Oscar dijo eso, el pequeño andre dio un mal paso y estaba a punto de caerse. Andre se levantó rápidamente del suelo, logrando alcanzar a Andre gabriel antes de que cayera al piso.
Andre: Ohh.!
Andre gabriel: Waah..waah.! Papa..!
Andre: No llores hijo, estas bien, no te paso nada.
(El pequeño abraza a su papá)
Andre gabriel: Papa..!
Para que su hijo dejara de llorar Andre le hizo cosquillas en la barriga, al hacer eso el niño se rió a carcajadas, olvidando el motivo de su llanto.
Oscar: Andre, creo que ha sido suficiente práctica por hoy. ¿Qué te parece si te traigo algo de fruta para comer juntos?
Andre: Si mi amor, gracias.
Oscar: Ok, ahora vuelvo.
En lo que oscar iba a la cocina a traer la fruta, gabriel se sentó en la alfombra y comenzó a jugar con sus juguetes de madera en forma de animales. Su juguete favorito era un elefantito de madera.
Un momento después oscar llegó a la sala con un plato lleno de diferentes gajos de fruta naranja, manzana, y kiwi. Ella puso el plato en la mesa de centro de la sala, después sentó a su hijo en el sofá ofreciendo un poquito de fruta en un platito para bebés.
Oscar: Come manzanita hijo, te hará bien.
Gabriel agarró un gajo de manzana dándole una pequeña mordida, poco a poco comiendoselo. Oscar y andre también comenzaron a comer fruta.
Andre: Mmm.. La naranja está muy dulce.
Oscar: Es verdad. Y eso es por que siempre compramos la fruta más fresca.
Después de terminar la conversación andre volteo y se dio cuenta de que ya era tiempo de finalizar el cuadro que estaba arriba de la chimenea de la sala.
Andre: Mi amor, ¿crees que ya deberíamos terminar el retrato familiar?
Oscar: Si, ha llegado el momento de hacerlo.
Continuara...
