PRÓLOGO
Casarse es una decisión muy importante y el amor es el denominador común en todos los casos. Pero no es el único motivo que lleva a las parejas a dar el "sí, quiero". Las ganas de pasar el resto de la vida al lado de esa persona especial, de crear una familia o de comenzar una nueva etapa de pareja son otras razones de peso.
El acto de contraer matrimonio no solo estabiliza la vida emocional sino que también establece cimientos sólidos en varios aspectos, bueno eso me dijo mi padre en su momento cuando me toco la típica platica padre e hijo.
La madurez lleva a comprender que la felicidad no se busca en otra persona, sino en un compañero de vida que sea un aliado fundamental. Más allá de la dependencia, el matrimonio se percibe como una oportunidad de crecimiento, donde el amor va más allá de las representaciones convencionales y se adentra en valores, la importancia de la familia y la búsqueda conjunta de metas, experimentando tanto sacrificios como recompensas significativas.
El matrimonio va más allá de las tradiciones y obligaciones; eso fue lo que dijo mi abuelo cuando estaba entrando a la edad de casarme y lo culmino mi madre cuando me dijo que casarme con la mujer que escogiera era una elección que refleja la búsqueda de conexión.
Me sabia mas que de memoria cada uno de los consejos que cada uno de mis familiares me dieron, pero aun asi aqui estoy con mis manos me sudan, estoy nervioso...pero cómo no voy a estarlo si estoy a unos minutos de casarme con la hermosa mujer mas cotizada de al aldea.
¿Enamorado?...no lo se
¿Me voy a casar?...si
¿Por que me casó?...ni yo lo se
Yo solo fui a una consulta medica y un mes despues estoy aqui parado en el altar, tratando de no hiperventilar, estaba ya un poco mas relajado cuando entra por la puerta y el aire se me va... agradecia haberme hecho esa maldita operación ocular para poder ver a todo color lo que ahora mis ojos veían.
Todo paso tan rápido ella llego a mi lado, me ve y me sonríe y ¿yo?... yo creo que también porque siento que pongo cara de estúpido y ella suelta una risita refrescante, pero mis nervios comienzan de nuevo cuando escucho la voz del sacerdote.
"¿Han venido aquí a contraer matrimonio por su libre y plena voluntad y sin que nada ni nadie los presione?", pregunta el obispo, el sacerdote, o el diácono.
"¿Están dispuestos a amarse y honrarse mutuamente en su matrimonio durante toda la vida?
"¿Están dispuestos a recibir con amor los hijos que Dios les dé, y a educarlos según la ley de Cristo y de su Iglesia?"
Todas ellas son diferentes maneras de formular la misma pregunta esencial y suspiro porque siento que me estoy ahogando, trago con dificultad... y la ultima pregunta es la que me hace darme cuenta de mi realidad me estoy casando con Sakura Haruno.
¿Estás listo para aceptar a esta persona, y todo lo que puede producir esta unión, completamente y para siempre?.
Sonrió porque me doy cuenta que si yo no hubiera ido a esa consulta medica, no me estuviera casando, pero que mas da, no creo que sea tan problemático un matrimonió ¿o si?, de igual forma ya no concibo la idea de estar una vida sin esa mujer problemática, la cual se gano mi corazón.
¡Si!. Quiero...
Es lo que contesto … y lo demas…bueno... ¿Por qué no mejor les cuento el antes de la boda?
