Cuando Félix se abrió camino a su asiento, sabiendo que había dejado a un Adrien reflexivo -aunque sea un poco- atrás, Nathaniel le llamó suavemente la atención.

—Olvidé preguntar antes —explicó el pelirrojo — ¿Marinette le dijo a Luka lo que pasó?

Félix negó con la cabeza —le pregunté si quería hablarle. Ella dijo que no quería abrumarlo.

Nathaniel suspiró, medio se lo esperaba. Sin embargo, sabía cuánto Luka se preocupaba mucho por Marinette. Puede que no fueran amigos muy cercanos pero la música de Luka lo decía todo. Y si había una forma en que Nathaniel entendía las emociones, era a través del arte.

—Le enviaré un mensaje al respecto. Entiendo a Marinette, pero no debería esconder esto de quienes se preocupan por ella —era algo que Alix solía repetirle constantemente, por lo que Nathaniel tenía esa lección bastante grabada en la cabeza.

Félix simplemente asintió y se sentó en su silla antes de sacar un libro.

Nathaniel también se dirigió a su propia mesa, sacando su teléfono y buscando el contacto de Luka en el grupo que usaban para escuchar las prácticas de la banda cuando no podían ir en persona. Se aseguró de resumir lo que había pasado y asegurarle a Luka que Marinette estaba en casa y descansando en este momento.

El salón empezó a llenarse lentamente. Mientras tanto, el artista pelirrojo no pudo evitar que su mente regresara al momento en que Marc tomó la llamada de Félix en la cafetería.

Flashback

Marc y Nathaniel acababan de terminar sus respectivos almuerzos y estaban, junto a Mireille y otros estudiantes de la clase de Mendeleiev, escuchando a Aurore explicarles algo sobre las decoraciones para el baile, cuando Marc recibió la llamada de Félix.

El pelinegro se disculpó y se levantó a un lado de la mesa para tomar la llamada. A Nathaniel le llamó la atención que respondió de modo vacilante, ya que la timidez de Marc generalmente se perdía por teléfono. A menos que fuera un número desconocido.

Y-yo, sí, estamos almorzando en la escuela y… —Nathaniel le hizo pequeñas señas en silencio, curioso sobre quién se trataba. Marc puso una mano sobre entre su boca y el teléfono, y le susurró la respuesta. La mirada de Nathaniel se dirigió inmediatamente a la mesa de sus compañeros, donde Lila y Nino estaban alrededor de una aturdida y molesta Alya, con el chico tratando de apoyarla mientras Lila hablaba Dios sabe que cosas. Tras seguir su mirada, Marc decidió que debería encontrar un mejor lugar para hablar —espera un segundo.

Nathaniel se disculpó también con el grupo cuando vio a Marc dirigirse a la salida de la cafetería, y se apresuró a alcanzarlo, pidiendo a su compañero que preguntara por Marinette en un susurro. Entraron al primer salón vacío que vieron y Marc volvió a hablar Ahora. Estamos en un salón vacío —el pelinegro no pudo evitar sonrojarse cuando Nathaniel se acercó mucho y miró con expectación —voy a poner el altavoz porque Nathaniel empezó a preguntar si estás con Marinette y si ella está bien —el escritor esperó la aceptación del otro antes de hacer lo dicho —ya está.

Inmediatamente, la voz de Nathaniel se hizo cargo — ¿Marinette está bien? Vi a Alya salir tras ustedes y luego Nino le dijo a las chicas que ella había ido a hablar con Marinette, pero hace unos minutos se formó un alboroto en la puerta de la escuela ¡y están diciendo que Alya casi fue akumatizada! —Marc estaba un poco sorprendido de que Nathaniel hubiera podido decir todo eso sin detenerse a respirar.

La clase akuma definitivamente había formado un alboroto sobre eso.

En efecto. Cesaire vino e irrumpió groseramente en el departamento, gritándole a Marinette y reclamándole por una cantidad de tonterías y cosas de las que no tiene derecho a exigir —Félix resopló —por supuesto, Rossi no podía no ser mencionada en la discusión. Marinette trató de decirle la verdad sobre ella, pero Cesaire no escuchó una palabra y rompió su amistad —los ojos verdes y los aguamarina se ensancharon al oír eso. Por un lado, era una buena noticia para Marinette en general, pero la conmoción que eso debía traer… no podían ni imaginarlo —sus padres y abuela tuvieron que venir e irrumpir para que se marchara.

¿La señora Dupain está aquí? —Nathaniel murmuró. La mujer no había estado en Paris desde el último cumpleaños de Marinette. Era difícil de pasar por alto, con su llamativa y genial moto en el frente de la panadería.

Al fin que se marchó echa una fiera y tan groseramente como entró —ambos co-autores hicieron muecas de simpatía durante la tensa pausa del británico. Alya podía ser muy alborotadora cuando quería. Lady Wifi era un gran ejemplo de ello — … y un minuto después teníamos a Marinette gritando y sosteniéndose la cabeza.

Ahora… se esperaban muchas cosas… pero no eso.

Marc sintió que perdía el aliento como si le acabaran de golpear el estómago —Oh… Dios… Mío.

Al mismo tiempo, Nathaniel negó con la cabeza. Los dedos deslizándose bajo el flequillo, hasta que se enredaron en las raíces de su pelo Dime que no.

Ella le gritó a Shadow Moth que no quería hacer daño a nadie y que saliera de su cabeza —les confirmó, y solo… wow.

¿No estaba llena de sorpresas esta llamada?

¡¿Ella rechazó a Shadow Moth?! ambos gritaron, atónitos, para luego mirarse a los ojos ¿eso era siquiera posible? ¡Jamás se había sabido de alguien rechazando a ShadowMoth!

Su conmoción les impidió notar un sonido fuera del aula.

Fue un poco complicado, pero al final ella lo rechazó y, aparentemente, fue tras la siguiente persona más emocional en ese momento —la cual, por supuesto, había sido Alya.

Pero el dúo de artistas estaba demasiado aturdido aún para dejar ir el tema ¡¿Marinette casi fue akumatizada pero lo rechazó?! ¡¿Eso es siquiera posible?! —de nuevo, preguntaron a la vez.

Ambos habían pasado por la experiencia de ser akumatizados, y sabían lo difícil que era luchar contra la influencia del villano. Objetivamente, sabían que no querían hacer un daño real, pero una vez que la voz de ese hombre se metía en tu cabeza, y jugaba con el dolor, la tristeza, la ira o cualquiera que fuese la emoción negativa, simplemente tus convicciones se iban deteriorando hasta que ya no eras dueño de tu propia mente o voluntad.

Lo más cerca que podían pensar sobre lo que Félix acababa de decirles fue el Día de los Héroes del año pasado, justamente después del almuerzo, cuando HawkMoth les hizo pensar que había logrado akumatizar a Ladybug, y una lluvia de mariposas rojas había caído sobre la escuela (y la ciudad en general)
Algunos de sus compañeros habían logrado no ser re-akumatizados con pura fuerza de voluntad, anteponiendo la esperanza de que no todo estaba perdido por encima del miedo y la desolación.

Y ambos sabían que Marinette podía ser muy terca pero también era muy emocional. Esto hablaba de una voluntad muy fuerte.

¡¿Marinette qué?! ahora, esa era una nueva voz. Y, en retrospectiva, alguno de ellos debería haber puesto más atención a la puerta del salón. Pero, en su defensa, Félix les había soltado una bomba.

¡Alix! —Nathaniel exclamó primero, dándose la vuelta hacia ella. Marc tuvo el pensamiento rápido de quitar el altavoz mientras hacía lo mismo.

Alix caminaba hacia ellos con pisadas fuertes, las manos hechas puños y un ceño fruncido, como la pequeña furia de pelo rosa, y metro cuarenta y cinco que era.

Marc la superaba por casi veinte centímetros de estatura. Aun así, se encogió detrás de Nathaniel, como reacción instintiva.

Alix… —el pelirrojo bajó la voz, esperando que su mejor amiga lo imitara por reflejo y empezara a calmarse.

Sus esperanzas fueron en vano.

Empieza a explicar —la niña exigió, con una sorprendente mezcla de molestia y desolación. Como si nada de lo que escuchó, o de lo que sabía, tuviera sentido en este momento.

Solo por eso, Marc se alegró de que fuera ella y no Alya Lo siento, no pensé que Alix estuviera escuchando. Nath la está conteniendo ¿Qué necesitas que hagamos? —preguntó en voz baja, retrocediendo un par de pasos, para no llamar la atención de Alix sobre el resto de su conversación.

Félix les pidió que pasaran por la casa de Marinette con Aurore y Mireille antes de que terminara el almuerzo, a lo que Marc no dudó en responder afirmativamente. ¡Por supuesto que Marc quería ver a Marinette y cerciorarse de que estaba bien! ¡La pobre chica seguramente necesitaba un abrazo! Y que lo condenen sí él no estaría ahí para ella después del mal momento que seguramente pasó con quién ella había considerado su mejor amiga. Marinette siempre había sido muy dulce y comprensiva con Marc, y él quería hacer lo mismo por ella.

"Solo quiero que Marinette esté bien" fue la respuesta que Félix le dio ante su agradecimiento por notificarles lo sucedido.
Fue un poco sorprendente, y a la vez no, para Marc. Obviamente entendía el tipo de persona reservada y poco cálida con los demás que era Félix.
El británico no era inherentemente cruel de una forma malvada, más como cruelmente honesto sin importar lo que los demás pensaran. Y aún con eso, tenía una clara debilidad por Marinette. Se acercaba a ella de un modo que no hacía con nadie más. Marc había visto todo eso casi desde el principio y se preguntaba constantemente en qué derivaría, especialmente con la forma en que Marinette parecía haber superado a Adrien recientemente.

Lo sé. Nos vemos allí —respondió con una sonrisa suave. A fin de cuentas, Félix no era el único que parecía contento en esa nueva amistad. Marinette ciertamente tenía un aprecio especial por él.

Después de colgar, Marc se volvió a sintonizar con Nathaniel y Alix —Alya y Lila siguen diciendo lo mal que ha influenciado ese tipo en Marinette —se quejaba la chica — ¡Y Marinette con Alya nunca habían discutido hasta ahora! ¡No a esa escala!

¿Y por qué automáticamente la culpa es de Marinette? —Nathaniel contraatacó —solo has escuchado la versión de Alya. Pero ella misma admitió colarse en la casa de Marinette y empezar a regañarla ¡Eso no está bien, Alix! Ni siquiera entre mejores amigos —el pelirrojo se detuvo y respiró profundamente tras darse cuenta que, en lugar de calmar a su mejor amiga, él estaba empezando a alzar la voz.

Alya es la más cercana a Marinette. Y se ha visto que ella ha estado actuando extraño el último mes —Alix argumentó.

¿De verdad? ¿Se ha visto? —Nathaniel insistió —porque lo que yo he visto es a Marinette siendo acusada de intoxicar a alguien injustamente, siendo empujada al agua desde un tejado ¡Y casi acusada de tener un objeto robado de Lila! —enlistó — ¡Y tú también lo has visto!

Eso pareció hacer el truco para que Alix bajara sus humos y se detuviera. Recordó ver a Marinette cayendo del tejado de la escuela cuando Kim y Ondine estaban akumatizados y la piel se le erizó con un desagradable escalofrío. Recordar ese suceso se sentía como cuando fallaba una pirueta y sabía que estaba a punto de golpearse contra el suelo.

Marc colocó una mano en el hombro de Nathaniel —Félix preguntó si podíamos ir a ver a Marinette. Deberíamos ir por Aurore y Mireille, contarles e irnos —le explicó en un susurro, ignorando que su cercanía y aliento contra la oreja del pelirrojo lo hizo enrojecer y luchar contra un estremecimiento —Nettie merece mucho apoyo y cariño en este momento —añadió.

Y Nathaniel tenía que estar de acuerdo —tenemos que irnos. Solo… piénsalo ¿Está bien, Alix? —pidió, con un tono mucho más suave del que cualquiera de ellos había usado en los últimos minutos.

La pequeña pelirrosa no se opuso. Dejando que el dúo de artistas saliera del salón mientras ella se sacaba la gorra y se revolvía el cabello con frustración.
Había demasiadas cosas corriendo por su cabeza. Entre lo que sabía, o creía que sabía, lo que había escuchado y lo que había visto.
Después de un minuto, decidió irse a la sala de arte.

Tenía mucho en que pensar.

Fin del flashback


Nathaniel salió de sus pensamientos cuando su celular zumbó con la respuesta de Luka, siendo un mensaje de agradecimiento por el aviso.

Justo a tiempo para ver a Bustier entrando. Y, tras de ella, Lila y Alya. La primera disparó su mirada automáticamente a la banca de Félix y sonrió con malicia muy mal disimulada cuando lo vio solo, sin Marinette.

Nathaniel sintió un pequeño vacío en su estómago ante el deleite casi malvado en ella, por lo que bajo la mirada y se concentró en los bocetos que estaba haciendo para el próximo volumen de su cómic.

Gracias a eso, se perdió el hecho de que la mirada de Lila pasó de Félix a él, con un ceño fruncido.


.


Marinette escuchó en silencio cada comentario que los kwamis en su habitación decidieron compartir, hasta que algunos de ellos se distrajeron y empezaron a jugar por la habitación.

Cada uno tenía cosas agradables que decir. Mullo y Trixx sobretodo, estaban contentos con sus portadores actuales, mientras que el resto de ellos mencionaba sin recato cuál sería elegido para las dos chicas, algo que ni siquiera la misma Marinette se había planteado.

También tenían cosas que decir de Félix. Wayzz, Longg, Stomop, Barkk y Pollen parecían estar de acuerdo en que era 'un protector adecuado para su guardiana' lo que sea que eso significara.

Marinette frunció el ceño, mientras Pollen y Mullo se sentaban en sus hombros —no necesito protección. Soy Ladybug, se supone que es mi trabajo proteger a las personas —declaró, lo que ella suponía que era una verdad evidente.

En lugar de estar de acuerdo, Tikki flotó delante de ella, dándole una mirada de preocupación —todas las personas necesitan protección en su vida Marinette. Sin importar la edad, las responsabilidades, o los poderes que tengan —ella le dijo —Luka te ayudó a entender que está bien pedir ayuda. Ahora, necesitas entender que mereces ser protegida.

La palabra enfatizada hizo eco en la mente de Marinette.

Merecer.

¿Ella realmente lo merecía?

Dos años atrás ella no habría cuestionado una declaración como esa. Diablos, hace dos años atrás Marinette ni siquiera se habría cuestionado el hecho. Pero su vida había cambiado mucho después de recibir los pendientes de Tikki. Ella había cambiado mucho.
Se había convertido en una de las cosas que más odiaba: una mentirosa.
Ella mentía a su familia, a sus amigos, a sus maestros. Casi cada día de su vida. Por supuesto, había una razón válida y altruista detrás de eso, pero ¿era una justificación suficiente?

¿Cómo tenía ella la audacia de querer exponer a Lila cuando ella tenía su propio armario lleno de secretos y mentiras a su espalda?

Una voz débil en su cabeza protestó débilmente, o quizás ella había pensado en voz alta sin darse cuenta y esa era Tikki. Marinette no lo sabía. Su cabeza se sentía llena de algodón.

"Nunca has mentido para hacer daño a las personas" fue el argumento.

Los pensamientos catastróficos de Marinette tenían algo que decir sobre eso.

Tal vez no con intención, pero aun así había hecho daño de todos modos.

Había causado varias akumatizaciones, ni siquiera quería contarlas.
Había dejado atrás a conocidos y seres queridos, en medio de la multitud o el pánico, para poder transformarse.
Había preocupado a tantas personas por desaparecer durante los ataques, y ser casi imposible de contactar.
Había propiciado que el Maestro Fu perdiera décadas y décadas de recuerdos.
Llevaba más de un año dejando que HawkMoth/ShadowMoth perpetuara su reinado de terrorismo emocional y aún no había encontrado una forma de detenerlo.
Incluso, en alguna línea de tiempo, había sido la causa de que su compañero fuera akumatizado y perdiera toda cordura.

Era una terrible persona.

Ella no merecía nada. Ni protección. Ni amor.

Nada.

—Marinetta ¿Estás despierta, mi hada?

Marinette ni siquiera escuchó a su abuela llamar a la puerta. El correr de su sangre ensordecía su audición y se sentía como inmersa debajo del agua fría de Syren nuevamente. Su pecho dolía, y casi no podía respirar.

Algunos kwamis empezaron a llamarla por su nombre en voz baja, mientras que la mayoría volaban a ocultarse —Marinette respira —Tikki suplicó con preocupación, antes de tener que arrastrar a Mullo y Pollen para esconderse también, a la vez que Gina abría la trampilla para entrar.

— ¿Marinetta? —Gina subió para encontrarse a su nieta hecha una bolita sobre su diván. Estaba pálida y parecía tener problemas para respirar mientras se enterraban los dedos en el cuero cabelludo desordenando su pelo — ¡¿Marinette?! —aturdida y preocupada llena corrió rápidamente a su lado y la envolvió sus brazos —mi pequeña ¿estás bien? —empezó, angustiada — ¿qué tienes? —la niña apenas pudo balbucear algunas cosas, aunque nada tenía sentido, incluso si las hubiera dicho lo suficientemente alto para que su abuela la escuchara —está bien, mi pequeña hada. Todo estará bien. La abuela está aquí. Respira conmigo ¿De acuerdo? —ella empezó a hablar con firmeza, pero amor. Sacó cuidadosamente una mano de la niña de entre su pelo y la colocó sobre su corazón —lo haces bien, Marinette, continua así.

La mujer se aseguró de continuar hablando de forma pausada pero firme, sabiendo que su nieta necesitaba un pilar firme para apoyarse.
Gina podía arriesgarse a suponer lo que pasaba con ella. Había tenido pesadillas con La Befana después de verse a sí misma en las noticias parisinas. Quizás la voz de ShadowMoth le había causado pesadillas a su nieta también, o el recuerdo pudo desencadenar el ataque de pánico.

Mientras Marinette se calmaba paulatinamente en su agarre, sin embargo, Gina sabía que el problema no estaba tanto en ese desagradable monstruo como en la situación que condujo a Marinette hacia una discusión tan acalorada con su mejor amiga.

—Marinetta, mi ángel ¿Qué ha estado sucediendo por aquí? —Gina preguntó al aire, pensando que la niña se había vuelto a quedar dormida.

—Cosas horribles, Nonna —Marinette, sin embargo, respondió. Perfectamente quieta y acurrucada en el abrazo protector de su abuela.

Solo otra persona que amaba, a la que debía mentir y a la que había preocupar.

Que horrible era ella, de hecho.


.


Lila ignoró felizmente lo que sea que la profesora Bustier estaba balbuceando sobre una poesía dramática-romántica mientras usaba el libro como tapadera para su teléfono celular.

Cuando supo de la escuela a la que entraría, había investigado a las dos clases de su año. Ambas eran unidas entre sí, por lo que conocer a un solo estudiante ya profería un hilo a seguir para conocer a los demás, con la facilidad de las redes sociales.
La, impopularmente llamada, clase akuma lo era aún más. Tantos eventos, tantos talentos en bruto, y una maestra blanda. Había sido un blanco perfecto. Un castillo con una supuesta reina caprichosa y altiva, muy fácil de derribar. Convencer al blandengue director panzón de que ella pertenecía totalmente a esa clase, hija de diplomáticos importantes y con conexiones famosas, había sido pan comido.

Una vez que estuvo inscrita, se le dio acceso al blog privado de la escuela. Lo cual era aún más información que aprovechar.

Una búsqueda rápida sobre Nathaniel había revelado bastante. Claramente tímido e introvertido que no sobresalía en el ámbito académico ya que prefería pasar el mayor tiempo posible en sus dibujos: cómics de superhéroes que había empezado a publicar en el apartado del club de arte en dicho blog.
Lila no veía el revuelo en ello. Eran sólo dibujos tontos. Especialmente despreciables cuando el niño había empezado a centrarse -obsesionarse, en su opinión- en la estúpida de Ladybug.
Hace unos pocos meses atrás había disminuido la cantidad de sus publicaciones, cambiando a ser carátulas de cómics que aparentemente estaba haciendo en conjunto con otro estudiante.

Entonces, el niño era claramente un pequeño inadaptado, que se refugiaba en pasar desaparecido al fondo del grupo, siendo protegido por la unión de la clase, pero sin llamar la atención.

Sin embargo, eso no iba acorde con lo que había pasado antes de iniciar las clases. El pequeño mocoso había desarrollado agallas de la nada y alzado la voz en favor de Mari-tonta.
Lila sí había notado que el pelirrojo constantemente se unía al grupo de la otra clase que generalmente gravitaba hacia la santurrona, pero no le había dado mucha importancia.

Ella iba a corregir ese error ahora.


.


Conteo de palabras: 3411


Somos… más de 700 rws. O.M.G!

Pues… Bueno… ¿Qué les puedo decir? Feliz navidad, I guess.
Sé que no es un capítulo muy largo, tomando en cuenta el tiempo desde la última actualización, pero bueno… Son fiestas. El tiempo puede pasar demasiado lento o demasiado rápido. Y no estoy segura de retomar el ritmo hasta entrado enero.
No estoy segura de si habrá otro antes de finalizar el año. El diciembre pasado publiqué para mi cumpleaños, el 30, pero los animos de escribir no me acompañan últimamente. Espero que el 2023 traiga un aire más despejado para mí.

Pase una terrible noche de Velitas gracias a una persona en mi familia que simplemente es un feliz ignorante de las complejidades de la salud mental y de lo que significa un trauma. Me hizo llorar gran parte de la noche, casi tener un ataque de pánico (por eso el de Marinette está tan detallado aquí) y luego me condujo a zamparme un sixpac de cerveza casi uno tras otro. Recuerdo haberle enviado un mensaje a mi mejor amigo sobre eso, preguntándole si la ingesta de alcohol tan rápida me ayudaría a morir, porque eso era lo que quería en ese momento.


Laurenlmprincess: Hola! Me alegro que hayas podido arreglar el problema. Aunque me sorprende verte comentar también en ao3.
Félix burlándose de Adrien es mi diversión absoluta xD Lamento la demora, y lo corto, pero espero que te haya gustado aún así el capítulo.
Saludos! Y felices fiestas!

Viper Couffaine: Hola! Gracias por siempre leer y comentar. Felices fiestas!

Cerimonia Rossa: Hola! Gracias por leer y dejar tu lindo comentario. De verdad me anima mucho saber qué exactamente les gusta de los capítulos, y que me comenten cómo se sintieron al respecto. Me ayuda mucho a continuar.
Saludos y felices fiestas!

Manu: Hola. Gracias por leer y comentar.
Con respecto a lo de tu cuenta aquí, no entiendo que tendría que ver la poca memoria de tu PC. No es como si tuvieras que descargar nada. Te registras en internet con un correo, y eso al fin nada tiene que ver con el espacio de memoria o almacenamiento de un dispositivo.
De cualquier forma, suerte con todas las historias que planeas hacer. Debería ir escribiéndolas en tu PC o en tu teléfono o en una libreta si no tienes espacio en un dispositivo electrónico.
Sobre Kwamis Choice, para mí que el cataclismo que Gabriel recibió ya le está pudriendo el cerebro peor de lo que ya lo tenía :v a ese loco ya no hay por donde tenerle lástima.
La película? Ah sí. Han pasado 84 años…. xD ya, hablando en serio, espero que la saquen pronto en enero. Y me encantaría ver a Félix en una segunda película.
Como ya dicho antes, tengo en mente un par de historias Felinette más en mente, el Daminette, y un fic adjunto al crossover con pokémon que explica cómo se juntó el LukaFeliNette. También quiero intentar hacer un Felinette de almas gemelas, pero no estoy segura de cómo hacerlo.
Sí, ya supe del final de Ash. Me dolió más verlo separarse de Gou (Gou literal le dice 'terminamos' cuando se entristece! Eso es material de shippeo duro, CARAJOS!) Pero eso de que Ash crece, no te lo tomes muy a pecho, nunca lo hacen, dudo que lo hagan. Es más, dudo que le funcionen mucho estos nuevos protagonistas. De hecho, le estoy guate morada antes de que tengan que volverás porque el público ha bajado abrumadoramente.
Felicidades por lo de tu compañero. Felices fiestas.

Gezeniaquintero: espera ¿Eres de Colombia también? ¿Táchira está en Santander o me estoy fumando algo? y lamento mucho que no haya podido poner tus velitas este año.
Me hace muy feliz saber que te gustó el capítulo, gracias por siempre de comentar.
Un abrazo y felices fiestas para ti!

RilaZou: ¡Tienes razón! Dioses, no sé hasta donde vaya a parar está historia, entre capítulos y rws, pero agradezco muchísimo cada uno de ellos (inserte muchos corazones)
Gracias por siempre leer y comentar.
Saludos y felices fiestas para ti!

Karen Agreste: ¿En serio? Estoy segura de haber mencionado mi lugar de origen antes en las notas de autor, pero da igual.
A mí también me gustaría mucho ir y experimentar una noche de muertos allá en México.
Lamento mucho no poder darte una buena respuesta, pero en este momento no soy la persona adecuada para preguntarle cómo se siente una festividad. En cuanto al significado, religiosamente hablando, esa la noche conmemora la 'inmaculada concepción de la virgen María'. Se celebra el 8 de diciembre porque ese mismo día, en mil ochocientos y… algo, un Papa publicó una carta apostólica donde se habla sobre cómo la virgen María no fue alcanzada por el 'pecado original' y por eso es la figura de La pureza… o algo así. No soy religiosa así que tiendo a olvidar los detalles.
No te disculpes por preguntar. Gracias por siempre leer y comentar.
Abrazos y felices fiestas para ti!