Los personajes de S.M. no me pertenecen, yo solo los tomo prestados.
Capítulo 14
1.-
—... Y este el Eilan, mi hijo —dijo Isabella a Edward, presentando al pequeño niño, que jugaba muy tranquilo con sus carritos. Ya le había presentado a Alice, que estaba de lo más agradecida de por fin tener quien les ayudara... Aunque también pensó, como Isabella, que aquella muchacha era muy delgada como para tener la fuerza para cargar un saco de harina—. Si no es mucha molestia, sería perfecto que empezaras desde ahora.
—Lo siento —explicó Edward—, pero debo estar a las tres de la tarde en el colegio de mi hija.
Isabella asintió en compresión. Se le había pasado por alto el motivo de haber contratado a la rubia. Lo que le hacía recordar...
—Lo siento, no te he preguntado el nombre.
Edward se puso nervioso, no habiendo pensado un nombre de mujer para su plan. Finalmente, dijo el primero que se le ocurrió.
—Adriana... Mi nombre es Adriana.
—Mucho gusto, Adriana. El mío es Isabella. Y está bien, puedes comenzar mañana. —le dijo, y luego pensó un poco—. Por cierto, aquí se trabaja hasta la seis. Pero te daré permiso de ir a buscar a tu hija, a las tres, y venir con ella para que continúes trabajando. A Eilan le hará bien tener con quien jugar.
Edward se emocionó al oír esto, tanto, que no se contuvo, y abrazó a Isabella, quien sintió de repente cierto confort sobre su piel, pero no le dio importancia, al deducir que era porque le había tocado de sobre manera que, quizás, Adriana era una madre abandonada, como ella.