Saludos a todos y bienvenidos de nuevo a este pequeño rincón del internet y a esta historia. y me alegra ver que les sigue gustando lo que mi socio y yo hemos hecho.
- Vamos mocoso, ¿Eso es todo lo que tienes?
Podemos ver cómo Tannin estaba parado imperturbable en medio del desierto de Menagerie, viendo la figura arrodillada de Issei en su armadura respirando de forma entrecortada.
-Es fácil para ti decirlo Osan. – Respondió el castaño mientras se ponía de pie. – Se nota que tiene mucha más experiencia que yo.
- Jaja, no por nada viví por miles de años mocoso. Pero lamentablemente no disponemos de mucho tiempo, me hubiera gustado entrenarte por unos cuantos meses, así que debemos aprovechar cada segundo.
-Estoy listo Osan.
Sin más el castaño extendió sus alas y voló a toda velocidad con dirección al Ex-Rey Dragón que agitó su garra para apartarlo como si fuese una mosca, pero en el último segundo el castaño logró esquivar el impacto para lanzarle unos cuantos Dragon Shot en la cabeza del dragón.
- Eso está un poco mejor, pero aún estás lejos de hacerme algo.
En eso el castaño vio como de las fauces de Tannin se acumulaba una gran cantidad de fuego que no dudó en lanzarlo en su dirección. No tuvo tiempo de esquivarlo por lo que se envolvió en sus alas para mitigar en algo el impacto, cosa que funcionó en parte, pero aun así podía sentir el calor como si fuese una langosta a la que hierven.
Una vez el torrente de llamas cesó agitó sus alas y se podía ver varias partes negras en su armadura, junto que aún salía algo de humo de esta.
- Nada mal, se nota que tienes una buena resistencia. Pero contra mí, eso no basta. ¡Trata de venir con más fuerza contra mí!
[¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!]
[¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!]
Cargando varios impulso y dando un grito de guerra el castaño reanudó su ataque contra Tannin quien respondió lanzando un puñetazo que chocó con el puño izquierdo del Sekiryuutei, donde ambos parecían en un punto muerto sacándole una pequeña sonrisa al Ex-Rey dragón.
- ¡Eso es, golpea lo más fuerte que puedas! ¡En una batalla a muerte no debes contenerte jamás!
En eso Tannin ejerció más fuerza en su puño, superando con facilidad al castaño que fue enviado a volar hasta impactar en el suelo del desierto.
-Ugh… ¿Alguien apuntó la matrícula del camión? – Sentía su cabeza dar vueltas, sintiendo también que varias vértebras en su espalda parecían estar fuera de lugar. Necesitará un quiropráctico.
- Jajajajaja. Creo que podemos dejarlo por hoy, pero mañana empezaremos cuando salgan los primeros rayos del sol. ¿Entendido mocoso?
-Recibido Osan. – Contestó mientras hacía desaparecer su armadura. Al momento de hacer eso sintió un pequeño mareo, al mismo tiempo que oía rugir su estómago. – Demonios, podría comerme un elefante ahora mismo…
- Ten mocoso, esto te ayudará a sentirte mejor. – Tannin paso a lanzarle una fruta no más grande que una manzana al castaño que la atrapó y la vio con algo de desconfianza. – Esa es la Manzana Dragón. La razón por la que me había vuelto demonio en primer lugar. Vamos cometela, no tenemos todo el día.
-¿Y está bien que me la coma? Digo, creo que habrá dragones que la necesiten más que yo.
- Descuida, por el momento hay suficientes para que coman. ¿En serio crees que iríamos a un viaje de duración indefinida sin tener provisiones de sobra?
Aún estando algo inseguro, pero al final Issei le dio una mordida a la fruta y abrió los ojos por el sabor y no tardó nada en devorarla como si no hubiera comido en semanas.
- Por esa reacción imagino que te agrado el sabor, ¿Verdad? – Tannin sonrió con suficiencia al ver la reacción del castaño que se apeno un poco. – De esperarse. Cómo eres parte dragón sentirías que esta fruta tiene un buen sabor, sin contar que te hace bien y ayudará a reponer energía.
-Debo decir que es lo más rico que probé en mucho tiempo. Aunque no me imagino comer esto todos los días como hacen algunos dragones.
- Es lo que hay supongo. Por cierto, ¿Qué tal te va con Ddraig y esas dos?
Issei pareció desanimarse un poco ante esa pregunta. Lo cierto era que no estaba yendo precisamente bien. Con Ddraig ha logrado volver a hacer que le hable aunque sea un poco, pero con Aile no había logrado ningún avance y menos aún con Davs. Estas dos parecían haberse cerrado en banda a la idea de hablarle… Eso era doloroso para él.
-Esta vez si meti la pata. – Dio un suspiro de tristeza al no saber qué hacer ya que no le agradaba estar así con ese par.
- Aun si no son mujeres de verdad, se comportan como una enfadada en toda regla. – El dragón río un poco al ver la cara que le dio el castaño.
- ¡Oye viejo! ¡¿Terminaste de una vez?!
Una nueva voz se hizo presente, haciendo que ambos se voltearan para ver de quien se trataba. En eso vieron a un dragón bastante similar a Tannin, solo que un par de metros más pequeño. Aparte de usar una especie de taparrabos como hacia el Ex-Rey Dragón, también usaba unos guantes sin dedos de color negro.
- ¿Qué sucede Bova?
- Nada importante, solo el viejo cuervo y el mono me pidieron que fuera a buscarte por no se que. No les presté atención.
- En verdad que… – Tannin se llevó la garra al hocico para después soltar un bufido. – De acuerdo, iré a ver.
-Ammm. – El castaño habló llamando la atención de ambos dragones donde el más pequeño lo miraba con algo de indiferencia. – Puedo preguntar, ¿Quién es él?
- Este es mi tercer hijo. Bova Tannin.
-No olvides, viejo, que soy el más fuerte de los tres.
- Aja. – Tannin hizo lo más cercano a rodar los ojos. – Creó que ya oíste hablar del mocoso.
- Si, el famoso Sekiryuutei. – El dragón estudió con su mirada al castaño que se puso algo nervioso. – No parece la gran cosa a mi parecer.
-Y a mi solo me pareces un fanfarrón.
- ¿Qué has dicho? – Bova lo vio con intensidad, a lo que Issei le devolvió la mirada.
-Lo que oíste salamandra de quinta.
- Tengo que mencionar que en el inframundo me había ganado el apodo de "Bova el destructor", no por ser un debilucho si no por pelear con varios seres fuertes. Más fuertes que tú enano.
-¿Y qué tal si lo comprobamos? ¿Puedo partirle la cara a tu hijo Osan?
- Hagan lo que quieran, solo no destruyan de más este lugar. Le dijimos a los lugareños que haríamos de este lugar un mejor sitio para vivir, no que lo borrariamos del mapa.
Tannin se encogió de hombros. Si ambos querían romperse la cara a golpes él no los iba a detener, además esto pueda que les sirva a ambos.
- Jejeje, esto no durará más de 3 minutos.
- Eso ya lo veremos desgracia. – Los ojos de Issei se volvieron verdes al mismo tiempo que daba una sonrisa retadora.
[Boosted Gear Balance Breaker]
Al momento que el comando sonó, el castaño se vio envuelto en su armadura y fue directo contra Bova. Este se cubrió con los brazos y sintió el impacto del Sekiryuutei en estos, siendo arrastrado por la fuerza del empuje.
Tannin vio esto y sólo negó con la cabeza, pero se podía ver una pequeña sonrisa en su rostro. Después emprendió vuelo, dejando a esos dos en su "pequeña riña".
Por su parte Bova estaba ligeramente sorprendido, pero lo dejo de lado y logró tomar distancia del castaño alzando vuelo y aprovechó para lanzar un par de bolas de fuego que apenas si logró esquivar sintiendo el calor de estas.
-¡¿Eso es todo lo que tienes bastardo?!
Bova solo gruño y voló con dirección al castaño lanzando un zarpazo que logró rozar el pecho de la armadura, dejando una marca algo profunda en la gema de ahí. En eso giró sobre su eje y utilizando su cola le dio un potente golpe que lo mandó de regreso a tierra.
En eso vio como el dragón se dirigía con toda la intención de aplastarlo como un insecto. El Sekiryuutei se apresuró a retomar vuelo usando sus alas y propulsores logró evitar ser convertido en calcomanía.
[¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!]
[¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!]
[¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!]
[¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!]
Acumulando varios impulsos el castaño disparó un Dragon Shot que le dio directo al hijo del Ex-Rey Dragón que fue arrastrado varios metros antes de ser consumido por el ataque.
Cuando esté se disipó dejaba ver a un Bova con varias marcas de quemaduras alrededor de su cuerpo. Cabe mencionar que el dragón no se encontraba muy feliz por el ataque.
- Esa me la vas a pagar hijo de perra.
-¿Y a qué esperas? ¡¡¡AQUÍ TE ESPERO!!!
Bova no tardó ni un segundo en lanzarse al ataque en una rápida sucesión de zarpazos que el castaño apenas si podía esquivar. Se notaba que el dragón ya no se estaba conteniendo. En eso recibió un manotazo que lo hizo salir volando varios metros, pero logró estabilizarse usando sus alas.
Pero no tuvo tiempo de descansar ya que pudo ver como una gran llamarada se dirigía a su dirección. En eso se dejó caer al suelo dejando que el fuego pasará sobre él y en eso giró para ver que en el lugar donde había impactado el fuego la arena se había convertido en cristal.
-(El fuego de este tipo es tan fuerte como el de Osan.) – Si bien ese pensamiento le hizo sudar un poco, debajo de la armadura tenía una sonrisa marcada.
[¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!]
[¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!]
[¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!]
[¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!]
No perdiendo tiempo volvió al ataque solo que esta vez notaba como Bova estaba poniendo más fuerza en bloquear sus puñetazos, muestra clara que los impulsos estaban sirviendo, pero tenía que admitir que era fuerte. Tal vez igual de fuerte que ese extraño Grimm que enfrentó hace unos días.
- ¡¡Vamos Sekiryuutei!! ¡¿Qué no dijiste que me demostrarías tu poder?!
[¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!]
[¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!]
[¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!]
[¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!] [¡Boost!]
Gracias al impulso extra logró superar la defensa del dragón y logró conectar un poderoso derechazo en la cara de su oponente. Lo suficientemente fuerte para hacer que caiga de espaldas levantando una nube de arena.
-¿Decías "Bova el apaleado"?
- ¡¡Yo te mato!! – El dragón se levantó de un salto y cargó directamente contra el Sekiryuutei, logrando embestirlo como si fuera un toro.
Issei en eso agarró uno de los cuernos del dragón y con un impulso de sus propulsores logró hacer un giro horizontal sobre la cabeza del dragón al cual elevó sobre sí mismo antes de estamparlo contra el suelo.
Tomando distancia comenzó a cargar un nuevo Dragon Shot pero tuvo que esquivar una vez más el mar de llamas que se le fue lanzado para que a los pocos segundos tuviera cara a cara al dragón que no dudó ir un poderoso puñetazo que logró dañar gran parte de su armadura.
- Se acabó Sekiryuutei. Yo gano. – Bova se enderezó en su sitio, viendo al castaño con superioridad.
-Jajaja. ¿Realmente crees eso? – Hizo desaparecer el casco, mostrando una sonrisa que amenazaba con partirle la cara. – Pues no Bova. Si quiero cumplir con mi misión, no puedo dejarme vencer por nadie. Y tú… – En eso los ojos de parecieron soltar energía en forma de llamas verdes. – No serás la excepción.
- Hijo de puta… – En eso el dragón fue consumido por una gran explosión que si lo daño.
Y el castaño aprovechó el momento acercándose al dragón que seguía desorientado por la explosion.
[¡Transfer!]
Mando todos los Boost que había acumulado hasta ahora a su abdomen y tráquea. Sintiendo como si se hubiera tragado lava mientras su boca empezó a echar mucho humo. Bova vio eso y se preparó para lanzar la llamarada más fuerte que pudiese.
- ¡¡¡GREAT BLAZE!!!
- ¡¡¡DESAPARECE!!!
Las llamas chocaron contra las llamas, provocando que el suelo a su alrededor en un radio de 30 metros se convirtiera en cristal. Ambos ataques estaban parejos sin indicios de que alguno fuera a superar al otro. Al final una gran explosión se originó entre ambos ataques, haciendo que Bova perdiera de vista al castaño por unos segundos.
¡Slash!
Y esos segundos fueron los que marcaron la pelea. Issei no dudó en abalanzarse contra el dragón aún si tuvo que atravesar las llamas residuales, sacó a Ascalon Zero de su cola y lanzó un corte vertical al pecho del dragón quien dio un rugido al sentir su cuerpo ser cortado.
Pero no tuvo tiempo de hacer algo ya que casi al instante sintió como algo afilado apuntaba a su cuello. En eso su ojo derecho captó la figura del Sekiryuutei que estaba agarrado a su cuerno, mirándolo fijamente con esos ojos verdes que vieron directamente su alma. O al menos así lo sintió.
-Se acabó Bova. Yo gano.
- Tú…
-Ni se te ocurra. – Dijo mientras acercaba más la espada al cuello del dragón, el cual había movido sólo un poco su garra.
- Tch, lo admito, tu ganas… Por esta vez.
-Bien.
El castaño se alejó del dragón e hizo desaparecer su armadura. Después pasó a verlo con una mirada seria.
-Al menos puedo reconocer que eres alguien fuerte. – Una sonrisa apareció en su cara al momento de decir eso. – No veo el momento de volver a enfrentarme a ti.
- Je. El sentimiento es mutuo.
Al igual que el castaño, Bova parecía sonreír al castaño ya que hace un tiempo que no había podido tener una lucha así de intensa. Básicamente desde que todo eso del fin del mundo inició.
-En fin… Creo que nos pasamos un poco. – Comento con una pequeña gota de sudor al ver los grandes parches de cristal esparcidos por todo el terreno. Solo esperaba que Ghira no le llamé la atención o en el peor de los casos Blake… Eso si le da miedo.
- Meh, los he visto peores. Además, ¿Qué tiene de malo? Serían una buena atracción turística.
-Dudo que se vaya a hacer algo así aquí…
- Meh, da igual. Lo hecho, hecho está. – Bova se encogió de hombros restándole toda la importancia cosa que le saco una gota de sudor al castaño.
-...Tienes toda la actitud de un delincuente juvenil. ¿Te lo han dicho?
- Más de lo que puedo recordar.
Una vez más contestó sin darle mucha importancia, sin duda la actitud de este dragón era… Interesante.
-En fin, yo volveré a Kuo Kuana.
- Por mi parte iré a ver qué era lo que querían el mono y el cuervo con el viejo. Tal vez con suerte podamos pelear en otra ocasión, Sekiryuutei.
En eso Bova extendió su puño en dirección del castaño quien sonrió y devolvió el gesto chocando su puño con el del dragón con una sonrisa en su rostro.
-Je. Igual regresaremos aquí a ver a la familia de Blake a ver cómo van las cosas, así que es un hecho que volveré a patear tu trasero.
- Sigue soñando. – Fue todo lo que dijo antes de extender sus alas y volar en dirección por donde se fue su padre.
Al ver esto Issei dio una pequeña risa antes de extender sus propias alas y volar en dirección a Kuo Kuana. En poco rato logró llegar a lo que sería la "frontera" entre la zona habitable del continente y el desierto, lo cual sería raro ya que aún volando a toda velocidad aún tardaría un rato en llegar.
La razón de esto se debía principalmente a que gracias a la ayuda de los Youkais y su senjutsu, la zona habitable había aumentado de forma notoria en los 3 días que pasaron desde la última reunión en Arcadia.
Al principio los Faunus se habían sorprendido bastante de la llegada de otra nueva raza y no era para menos. Si bien algunos de ellos tenían rasgos animales como ellos, tenían más de uno y además se podían convertir en animales completamente o ocultar sus apéndices extra. Y claro, ver a seres como los Karakasa que eran paraguas vivientes… En fin, se hacen una idea.
Con eso el castaño vio desde lo alto la mansión Belladonna que ya estaba como nueva así que descendió sin más soltando un suspiro mientras se masajeaba uno de sus hombros. Luchar contra dos dragones en un día sí que es agotador.
- [Pero no negarás que es algo estimulante. Las peleas entre dragones a veces simplemente son para ejercitar, para divertirse y en algunos casos para conseguir pareja.]
-¿En serio os peleáis con las dragonas para eso?
- [Los dragones somos seres simples, hacemos lo que queremos siguiendo siempre nuestras convicciones.]
Issei no tenía que ver a Ddraig para saber que se estaba encogiendo de hombros… Aunque él tampoco es quien para hablar. Después de todo él también vive según le parezca correcto.
-Por cierto Ddraig. ¿Qué tal van las cosas por ahí dentro?
- [Aile sigue de morros si es lo que quieres saber.] – Gracias genio. No quería ser tan evidente. – [De nada compañero.]
-Te odio… –Ddraig solo río, sabe que no lo dice enserio.
- [En cuanto a Davs, ella también está enfadada contigo por hacer llorar a su hermana. Pero parece que está más ocupada discutiendo con el Boosted Gear por la Juggernaut Drive.]
-¿Han encontrado algo? – Si bien saber que Davs también está enfadada con él lo pone mal, sabe que es una propiedad saber lo que planea esa cosa.
- [Me temo que nada. Esa cosa sabe ocultarse bien. Incluso yo no tengo pistas.]
-Tch, esto no es bueno. En ocasiones siento como si esa cosa estuviera viéndome, aguardando un descuido para tentarme.
- [No lo dudo. De cierta forma eso era lo que hacía antes. Pero ahora que tiene conciencia propia es incluso más peligrosa.]
-Nunca es fácil ¿No?
- [Pero así es más divertido también. A los dragones siempre nos gustan los retos. ¿O no?]
-...Odio darte la razón y más te vale borres esa sonrisa que sé que tienes en tu escamosa cara.
- [¿Yo? Como crees…] – No sabes cómo odia que te pongas sarcástico. – [Me hago una idea jajajaja.]
-...Gracias por siempre estar aquí compañero.
- [Lo dije, lo digo y lo diré siempre. Juntos hasta el final.]
-Je, no lo quisiera de otra manera. – Y era cierto. Ddraig era sin duda el mejor compañero que podría desear jamás. – Bueno, si hay alguna novedad avísame. Tu eres el único que me habla por ahora.
- [Jajaja, está bien compañero, tú déjamelo a mi. Preocúpate más en cómo lograr que esas dos te perdonen. No tuviste avances en estos días.]
-Ya se, ya se… – Cuando la comunicación se cortó Issei soltó un suspiro que no sabía que se guardaba. – Las mujeres son unas criaturas tan bellas y a la vez tan complicadas.
-La verdad es que son los hombres los que son unos idiotas que no nos entienden.
El castaño dio un brinco al escuchar esa voz detrás de él. Se llevó una mano al pecho tratando de regresar su pulso a la normalidad mientras encaraba a la dueña de esa voz.
-¡¡Blake¡¡ ¿¡Quieres matarme de un susto mujer!?
Blake solo se encogió de hombros mientras tenía una mirada divertida en su rostro.
-No, pero recuerda que te dije que me gusta ver tus reacciones, Cielo.
-...Tienes tendencias sádicas, estoy seguro de eso.
-Creo que con esa noche que pasamos juntos no demostré eso~. – Ella le dio una mirada seductora al castaño, el cual solo sintió un escalofrío.
-Ajam y bueno… ¿Han sabido de Ilia? Ya hace unos dos Días que se fue con el Team CFVY.
-Ahhh~ Tratas de cambiar el tema, eso es lindo. – Blake solo río al ver la cara sonrojada del castaño quien murmuraba algo entre dientes. – Y respondiendo a tu pregunta Cielo, primero Coco y los demás se sorprendieron con su llegada y hasta el momento siguen en las mismas con respecto a su búsqueda de ese grupo.
-Ya veo. ¿Hay algo más?
-Bueno, Coco y Neptune trataron de coquetear con Lavinia. A la primera le dio un rechazo formal y al segundo… Por poco lo manda a la era de hielo.
-Dime que grabaron eso te lo ruego Blake… – Issei tenía una sonrisa que amenazaba con partir su rostro por la mitad.
Ella simplemente levantó su Scroll con una sonrisa felina en su rostro. Tomará eso como un si.
-Maravilloso. Simplemente maravilloso-.
-Eres un caso… Aunque no niego que es algo gracioso y satisfactorio de ver jajaja.
-Por cierto, ¿Cómo van los youkais? ¿Los faunus ya se adaptaron a su presencia?
-Pues sí, bastante bien debo decir. Uno incluso trató de coquetear con una de esas youkai que tiene el cuello super largo…
-...No soy quien para juzgar los gustos de los demás pero…
-Si… Eso es algo bizarro. Aunque la reacción de la chica era algo linda. No parecía saber cómo reaccionar.
-Bueno como dije no soy quien para juzgar los gustos. Solo espero que les vaya bien. – En eso el castaño recordó algo. – ¿Y qué tal va Kunou-chan? ¿Sigue de buen ánimo?
-Esta bien. – Ella respondió secamente. Eso le sacó un pequeño suspiro a Issei.
-¿Sigues teniendo problemas con los caninos?
-No tiene nada que ver.
-¿Entonces? – El castaño se rasco la cabeza en señal de confusión a lo que la pelinegra rodó los ojos.
-Ains… Por eso dije que los hombres son unos idiotas que no nos entienden. – Dijo mientras se sostenía el puente de la nariz. – Ella está abajo. Mi madre parece haberle agarrado cierto cariño.
-¿Será que la quiere adoptar? Digo, no me sorprendería nada viniendo de Kali.
-No tengo idea, pero la cosa es que con mi madre nunca se sabe… Tal vez sí llegué a ser mi hermana menor. – Blake puso un rostro complicado ante esa idea. No solo porque llevaba 18 años siendo hija única, sino porque sabe que esa mocosa planea algo.
Sin más bajaron y pudieron a todos reunidos en la sala de estar. Nora y Yang estaban haciendo un duelo de vencidas, pero en eso Nora salió disparada cuando Yang desacopló su brazo robótico a propósito y río por ello. Neo, Ruby, Pyrrha y Penny estaban viendo un programa de televisión. Ciel, Neo y Weiss parecían trazar la ruta para llegar a Haven rápidamente con la ayuda de Ren. Por último pudo ver a Kali sentada al lado de Kunou quien estaba comiendo algo. Ver cómo la mujer le limpio con cariño la mejilla a la chica después de que esta se manchara un poco con el jugo encendió algunas alarmas en Blake.
-Oh Issei, ¿Cómo te fue en tu entrenamiento con Tannin? – Preguntó Kali con una sonrisa llamando la atención de los demás que no se habían dado cuenta de su presencia.
-Creo que me fue bien, aunque no pude hacer que se pusiera serio. Sin contar que pega duro. – La mujer río al ver como el castaño se sonaba la espalda con una mueca de dolor. – Además que después de eso tuve un pelea con uno de los hijos de Osan.
Eso llamó la atención de todos ya que no sabían que el Ex-Rey Dragón tuviera hijos. Bueno, casi nadie.
-¿Peleaste con Bova "el destructor"? – Kunou preguntó con sorpresa filtrándose en su voz a lo que el castaño asintió. – ¿Estás bien? ¿No te hirió de gravedad?
-Tranquila Kunou-chan. Si bien el tipo era fuerte, no fue nada que no pudiera manejar.
El castaño caminó hasta donde estaba la pequeña youkai y acarició su cabeza con una sonrisa cosa que le sacó un pequeño sonrojo, pero también una sonrisa cosa que no pasó desapercibida por las demás chicas en la habitación quienes estaban viendo con fastidio al castaño y a la mocosa aprovechada.
-En todo caso. – Yang habló llamando la atención del castaño quien detuvo su caricia sacándole un puchero a Kunou. – ¿Qué es eso de "Bova el destructor"?
-Fue el apodo que le dieron en el inframundo. O al menos eso es lo que dice.
-¿Y por qué el apodo? – Fue Pyrrha la que habló con su mirada fija en la kyubi quien le regresó la mirada. Se podía notar la tensión entre ellas.
-Según escuche de… Mi madre cuando hablaba con su amiga, la Maou Leviathan, es por qué bueno… – Todos vieron con una ceja alzada el cómo parecía luchar por encontrar la forma de expresarse. – Causaba muchos destrozos por todo el inframundo buscando contra quién luchar.
-...Vale primero que nada… ¿Un Maou se llamaba Leviathan? Y segundo. ¿Qué pasa con ese tipo?
-Era un título. Si recuerdo bien su nombre era hmmm… ¡A sí! Serafall Sitri y visitaba de vez en cuando a mi madre. Eran buenas amigas y a lo segundo él es… Bueno en palabras de ambas un delincuente juvenil.
-Puedo corroborar esas palabras… – Issei dijo de manera monótona sacándole una gota de sudor a los presentes. – Y como dije el tipo es fuerte. No al nivel de Tannin, pero si estaba a la par con el Dragonor.
-¿Era tan fuerte como un Grimm Clase Infernal? Eso dice mucho.
-¿Clase que? – Issei pasó a ver a la heredera con una ceja alzada ante el nuevo término.
-Bueno al ver qué era más fuerte que los Clase Gaea que se conocen, decidimos crear un nuevo nivel para poder clasificarlos. Y como este fue creado para acabar contigo, un Dragón Celestial, pensé que sería lo más indicado.
-Tu solo quieres llevarte el crédito en los libros de historia Ice Queen.
-¡No puedes probar nada! – Dijo mientras señalaba acusadoramente a la rubia que solo pudo rodar los ojos.
-Como sea, el caso es que las cosas están llendo bien… O por lo menos la mayoría.
-Sigues sin poder hablar con esas dos, ¿No? – Kali pregunto a lo que el castaño se tenso un poco, cosa que hizo a todas las féminas soltar un suspiro de exasperación.
-No es como si no hubiera intentado hablar con ellas… Simplemente me están haciendo la ley del hielo.
-Solo dales tiempo Issei. – Kali lo vio con una pequeña sonrisa comprensiva. – Necesitan su espacio y se que a pesar de todo esas dos aún te aprecian mucho. Confía en mí.
-Gracias Kali. Por cierto, solo por curiosidad… – La mujer pasó a verlo con una ceja alzada. – Se que estas deseosa de tener nietos para consentir… Pero cuidado con lo que haces con Kunou-chan por favor.
-Hablas como si fuera a hacer una locura. – No dudó en mostrarse ofendida por las suposiciones del castaño.
-Ya… ¿Y ese portafolios que tienes al lado que tiene?
-¡¡Nada!! – La mujer cubrió dicho objeto con su cuerpo para que nadie lo vea. Cosa que le sacó una gota de sudor a todos menos a Blake quien se cubría la cara con ambas manos.
-...Solo no cause algún problema diplomático con los Youkais, ¿Vale?
-Bien… Vamos Kunou, de seguro ya tienes que tener hambre, deja que te prepare algo.
-Gracias Belladonna-sama.
-Vamos tutéame, no soy de formalidades. Llámame Kali cariño. – La mujer vio con una sonrisa a la pequeña que se apenó un poco pero asintió con la cabeza. Sin más ambas partieron con rumbo a la cocina ante la mirada de todos.
-Una familia de felinos adoptando un canino. Eso no se ve todos los días.
-¡No tiene ninguna gracia Nora! – La faunus le gritó a su amiga quien se escondió detrás de Yang.
--
Mientras tanto, en el interior de la Boosted Gear.
Davs y la manifestación de la Boosted Gear se encontraban hablando acerca de su nuevo problema conocido como manifestación de la Juggernaut Drive.
- ¿Has tenido suerte en averiguar dónde se oculta?
La AI pelirroja frunció el ceño mientras negaba con la cabeza. Puede ser que ella sea la que maneje el sistema, pero al parecer ni ella tiene el acceso total.
- Lamentablemente no. Es como si ni siquiera estuviera aquí dentro.
- ¿Cómo es eso posible? – A pesar de no tener rostro uno podía notar que estaba frustrado. – Sabemos que nació de los vestigios de la maldición combinado con la data que habíamos sellado. Es claro que debe de estar aquí adentro.
- Te digo que no lo sé. Hice un barrido de toda la Boosted Gear 3 malditas veces y no encontré nada. ¡Esto es una mierda!
La armadura solo miraba como la pelirroja respiraba de forma agitada después de su arrebato. Notaba la frustración en ella por la situación y también por…
- Sabes que ninguna puede seguir de esa manera por siempre. Tarde o temprano tendrán que hablar con el.
- No te metas donde no te llaman. Lo que yo y mi hermana tengamos que hacer con Issei es solo nuestro asunto.
-Me meto porque al final del día todos estamos en el mismo barco, pero como quieran. – En eso se dio la vuelta y comenzó a alejarse de la pelirroja. – Iré a buscarlo por mi cuenta, pero deja que te diga esto.
Davs vía la espalda de la armadura con una mirada molesta mientras apretaba sus puños. Pero guardó silencio, señal de que hable de una vez.
- Deben resolver esto lo más pronto posible, ya que no me cabe duda de que esa cosa se aprovechará de la situación entre ustedes tres para tentarlo y hacer que caiga en el camino de la dominación una vez más. A no ser que quieran que el chico desaparezca para siempre, traten de hablar.
Sin más la armadura desapareció dejando a Davs en un silencio profundo mientras seguía apretando los puños.
- Tch, metiches. – Comenzó a caminar sin dirección aparente. – Se muy bien que esto puede ser perjudicial para él, pero no es como si quisiera sentirme así… A veces me pregunto por qué Elohim me dio la capacidad de sentir emociones…
Sin que ella lo supiera, esta charla fue vista por alguien más oculta en las sombras dejando ver sólo un par de ojos rojos que brillaban de forma tétrica.
- Jejeje. Con que hay problemas en el paraíso. Por mí mejor jejeje.
Sin más desapareció ocultándose entre las sombras, esas que nunca han dejado a la Boosted Gear. Solo tendrá que esperar su oportunidad para volver a hablar con su "majestad".
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En alguna parte del continente Anima se puede ver un campamento en medio del bosque. Esta era la tribu Branwen, uno de los mayores y sanguinarios grupos de bandidos en todo Remnant.
En la entrada del campamento habían cuatro bandidos montando guardia, conversando entre ellos. De repente, una voz grita desde el bosque.
-¡Oye, feo!
Con la atención de los bandidos, Mercury y Emerald salen del bosque hacia la entrada del campamento.
-¿Está Raven Branwen en casa? – Dijo Emerald con su tono de siempre.
-He tenido una semana muy mala. Así que creo que voy a desquitarme contigo...
Uno de ellos dijo pero se detiene a mitad de la oración cuando se da cuenta de que Cinder sale del bosque y se une a los dos.
-Hmph, no parece que quiera cooperar, jefa.
-Entonces hazlo Mercury.
-Esperaba que dijeras eso.
Emerald avanza, pero los bandidos se mantienen firmes. Emerald desenvaina sus armas, haciéndolas girar antes de que se transformen en sus formas de hoz.
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Al mismo tiempo en una de las tiendas podemos ver cómo una mujer estaba limpiando su espada mientras parecía sumergida en sus pensamientos. Ya van 18 años desde que está en este lugar… 18 años sin poder verla directamente.
La mujer en cuestión se podría decir que era una versión mayor de Yang, solo que su cabello era negro, su piel era significativamente más blanca y sus ojos de un carmesí oscuro. Su atuendo consistía en una blusa estilo abrigo negra y roja con cuello en V con una falda plisada negra que tiene pantalones cortos negros debajo, con una serie de collares de cuentas. Ella también usa una faja obi roja alrededor de su cintura junto con una cinta roja envuelta alrededor de su cintura que lleva la vaina de su arma. Adjunto a él hay un objeto largo y negro que es piel o plumas, con un material de bandana rojo y blanco que cuelga detrás de ella. Sus antebrazos llevan guanteletes blindados rojos que sobresalen y guantes negros sin dedos. Llevaba botas altas negras con una suela y tacón rojos.
A la par de dónde estaba sentada se podía observar una máscara que se asemeja a la cara de un Grimm. La máscara tiene cuatro hendiduras que aumentan su imagen intimidante. Las rendijas son negras y rojas por dentro.
La mujer se mostraba que era una belleza con un aire maduro a pesar que ya mostraba algunos signos leves de la edad como unas pocas arrugas bajo los ojos pero no disminuían su atractivo.
-Tenemos problemas Raven.
-¿Qué pasa Vernal?
La mujer llamada Raven pasó a ver a la chica que había entrado a la tienda.
La identificada como Vernal era una mujer joven de piel bronceada, cabello castaño corto y ojos azul hielo. Tenía un tatuaje de un pájaro que se levantaba de las flores en su brazo izquierdo. Llevaba un chaleco de color marrón claro con paneles de color marrón oscuro en la parte superior y una correa con hebilla de color marrón oscuro en la espalda, sobre una camisa blanca rasgada que estaba parcialmente desabrochada y revelaba lo que parecía ser un sostén negro, junto con un cuello que parecía estar ligeramente doblado. detrás de su cuello.
Vestía jeans de color granate con el lado derecho enrollado hasta el muslo, revelando el forro rosa oscuro junto con un cinturón marrón con una bolsa atada al lado derecho. También vestía pantorrillas de color marrón oscuro, una de las cuales tenía una correa estilo liga que iba debajo de la pernera del pantalón enrollada. Llevaba un par de botas con cordones de color beige y marrón oscuro con los lados doblados, mostrando sobre el forro blanco acompañado de un par de calcetines granate que cubrían parcialmente las pantorrillas. Llevaba guantes sin dedos de color marrón oscuro de diferentes tamaños, el derecho le llegaba a la muñeca con un puño grande, mientras que el otro le llegaba al codo y estaba cubierto con un brazalete de color marrón oscuro. Por último, llevaba una gargantilla estrecha de color marrón oscuro alrededor del cuello.
-……Salem nos encontró. Tres de sus seguidores esperan hablar contigo.
Raven abre los ojos con sorpresa… Con que es hora. Muy bien. Era el momento de… Ver si todo lo que hizo, ha valido la pena.
-El casco… Como lo planeamos.
Hora de afrontar algo que ha alargado 18 años, de una buena vez.
Raven salió de la tienda con su máscara y su espada lista por si tiene que luchar. Nada más salir encaró a los tres adolescentes, reconociéndolos de inmediato.
-Cinder Fall, Emerald Sustrai y Mercury Black. ¿Qué hacen tres de las personas más buscadas en el globo en este lugar olvidado por los dioses?
Era notorio el sarcasmo y el desagrado de tenerlos parados frente a ellos.
Los 3 no pudieron evitar fruncir el ceño cuando menciono lo de ser parte de los más buscados, recordando que sus coartadas fueron arruinadas por…
Raven alzó una ceja bajo su máscara al ver como los tres parecían temblar y agitaban la cabeza tratando de alejar algún recuerdo de sus cabezas.
-Deberías saber muy bien por qué estamos aquí Raven Branwner.
Ante esas palabras la tensión en el ambiente creció con los demás bandidos algo nerviosos de lo que podría pasar en cualquier segundo.
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De vuelta en Menagerie.
Eran ya altas horas de la noche, por lo que sería raro que alguien estuviera despierto. Pero ese era el caso, pues Issei estaba en la cocina tomándose un vaso de agua. Estas últimas noches han sido algo frías y solitarias, pues las chicas habían quedado en que no intentarían ser muy cariñosas con el castaño hasta que arreglara las cosas con las IAs. Se notaba que todas ellas las aprecian.
-Y pensar que mañana también tendré entrenar con Osan tan temprano… Espero que no me rompa ningún hueso.
- [No te quejes compañero, tenemos poco tiempo. Hay que aprovechar este entrenamiento todo lo que podamos.] – Lo sabe Ddraig, pero aún así su pobre espalda… – [Eres afortunado, no muchos pueden decir que entrenaron bajo el ala del que fue el rey dragón más fuerte de los 6.]
-Ya entendí, ya entendí… Y pensar que Osan se contiene es algo frustrante, lo entiendo pero…
- [¿Qué parte de "él más fuerte de los 6" no entiendes? Claro que se contiene. Si bien te esta entrenando para ser más fuerte no quiere pulverizarte, cosa que pasara si usa su verdadera fuerza.]
-...Gracias por la más que gráfica imagen mental compañero.
- [De nada.] – El dragón sonó burlón.
-Payaso.
- [Al menos ve el lado positivo. Lograste vencer al hijo de Tannin que puedo decir su nivel sería de un demonio de clase alta muy bien entrenando, casi tirando a clase suprema.]
-Supongo… Debo decir que Bova parece un buen tipo, dejando de lado toda su actitud de delincuente por supuesto. – El castaño dijo eso con una pequeña sonrisa. Al final parece que se ganó un futuro compañero de entrenamiento.
- [Jajajajaja. Supongo que tienes también. Lo bueno es que de aquí podría nacer una sana rivalidad.] – Curiosamente la voz de Ddraig salió algo… Melancólica al decir eso de rival.
-¿Extrañas pelear con ese tal Albion? – Ante su pregunta Ddraig guardó silencio unos segundos, como si estuviera pensando en sus palabras. Luego de dar un suspiro respondió a la pregunta.
- [Mentiría si dijera que no. Antes de conocerlo mi vida era… Bastante solitaria. Todo debido a que era demasiado fuerte y ni que hablar del miedo que generaban mis llamas… Pero entonces apareció él, quien pudo resistirlas.]
-Suena que fue algo duro para ti.
- [No existe nada más triste que tener tanto poder y aún así estar completamente solo compañero.]
-Ya veo…
- [Descuida, no creo que este llegue a ser tu caso. Dejando de lado que estoy atrapado contigo y no tengo más remedio que aguantarte.]
-¡Hey!
- [Tienes a tu lado a tus amigos y a esas chicas que no me caben dudas que nunca se alejaran de tu lado. Después de todo están aquí contigo, en una lucha contra una bruja inmortal.]
-Je, gracias por las palabras Ddraig. Las parecio… Enserio.
- [Sin problemas compañero.] – Y con eso el dragón cerró la comunicación.
Issei dio una última sonrisa antes de beberse toda el agua de un trago. Después de dejar el vaso en el fregadero camino de vuelta a su cuarto, pero cuando pasó cerca del balcón pudo ver a alguien ahí.
-¿Pyrr?
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Momentos antes en el balcón, se podía ver a la pelirroja del Team HVNL apoyada en la barandilla de madera. Esta soltó un profundo suspiro.
-Otra noche con esa pesadilla… Esto apesta.
Desde hace unos días ha estado teniendo pesadillas donde se repite una y otra vez el momento exacto donde golpeó a uno de los hermanos Albain y a causa de eso…
Sacudió la cabeza tratando de alejar ese recuerdo. Sabe que puede hablar con sus amigos de esto, confía en ellos, pero hay cosas más importantes de las que tratar. Comparado con eso, este problema no es nada. Justo cuando está apunto de irse a tratar de descansar aunque sea un par de horas el sonido de una voz la hizo voltear.
-¿Pyrr? – El castaño se encontraba en la entrada del balcón. – ¿Qué haces aquí tan tarde?
-Yo ammm… Solo necesitaba tomar aire.
-¿Estás segura de que estás bien Pyrr? – Tuvo que morderse el labio al ver la mirada preocupada del castaño. – Sabes que puedes decirme si algo te molesta, ¿Verdad?
-En serio Issei, estoy bien. Solo necesito regresar a la cama y-.
-¿Sabes que cuando mientes te da un tic en el ojo derecho?
-¡¿Qué?! – Ella se llevó la mano a dicho ojo.
-Es mentira. – Él le dio una sonrisa burlona antes de pasar a verla con seriedad. – Pero eso me demuestra que me estas mintiendo.
La pelirroja maldijo haberse descubierto ella sola y la mirada fija del castaño tampoco le ayudaba. Sin más remedio soltó un suspiro y con la mirada le indicó al chico que se acercara.
-Yo… Desde hace unos días he estado teniendo pesadillas y bueno… No sé lo he dicho a nadie.
-¿Y de qué tratan esas pesadillas? – Dejará pasar el hecho de que no hablo de esto con nadie para saber el origen de estas.
-Es sobre… Lo que pasó durante la invasión de White Fang… Uno de los hermanos Albain estaba por atacar al padre de Blake, pero reaccione rápido para apartarlo de él. – Ella se tensó ante la continuación del recuerdo. – Pero eso provocó que enviará al tipo hacia una zona donde se estaba derrumbando la casa y…
-Él fue sepultado bajo un montón de escombros en llamas. – El castaño terminó el relato por ella al entender el problema.
-Si… Se que fue para salvar a alguien, pero no puedo quitarme de la cabeza que tuve que quitarle la vida a otro para lograr ello.
El castaño pudo ver como la pelirroja temblaba un poco, dejando caer esa imagen de chica fuerte e invencible que le da al mundo. Justo en este momento solo hay una chica normal quien no sabe cómo hacerle frente a esta situación.
Pyrrha seguía temblando, pero de repente sintió como algo la envolvía. Issei la había abrazado con ternura, apoyando su cabeza en su pecho. Pudo escuchar el sonido del corazón de su compañero y de alguna forma eso la hizo sentir más tranquila, devolviendo así el abrazo a los segundos.
-Lo cierto es que te entiendo Pyrr. Yo también maté personas. Inocentes para ponerlo peor. – Ella sabía de qué hablaba y se puso triste por ello. – Pero creo que tratar de olvidar lo ocurrido no lograría nada.
-Issei…
-Lo que quiero decir es que mejor concentrémonos en lo que importa. Gracias a ti el padre de Blake sigue con ella, Kali aún tiene a su esposo y está isla sigue teniendo a su buen linder y todo gracias a ti.
-Lo sé… Lo sé bien… Pero…
-Como dije, con olvidar no lograrás nada. Creo que lo mejor que puedes hacer… Es tratar de vivir con ello. Tal como hago yo. – Comenzó a acariciar la cabeza de la chica en un intento de consolarla.
Y pareció funcionar, pues sintió como la pelirroja lo abrazaba más fuerte mientras la oía sollozar un poco.
-Ya Pyrr, aquí estoy contigo y nunca te dejaré sola. Lo prometo. – Dijo con una voz suave mientras pasaba a frotar la espalda de la pelirroja.
Y siguieron en esa posición un rato hasta que Pyrrha se quedó dormida en sus brazos. Eso le sacó una sonrisa al castaño que le quitó unos mechones de su rostro para después darle un beso en la frente, sacándole una sonrisa entre sueños a la espartana.
-Descansa Pyrr.
-( Siempre ayudando a los que te rodean sin pensarlo 2 veces.)
-(¡Aile!) – Issei habló en su mente con alegría de al fin escuchar a la IA. – (¡Cuánto me alegro de oírte!)
-( ¿Es así? Vaya, ¿Debería sentirme halagada?)
-(Por favor Aile, solo déjame explicarte.)
-( ¿Explicar? No hay nada que explicar Issei. Ya tengo claro cuál es mi lugar aquí.) – La chica sonaba molesta. Maldición, eso no es buena señal.
-(Por favor Aile, solo dame una oportunidad para-.)
-( Como dije ya todo está claro. Me queda claro que solo seré una asistente que te ayuda y ya.)
-(Por favor no digas eso.)
-( ¿Qué tiene? Es la verdad. Total, ni darte hijos podría. Solo soy un montón de 1 y 0 con la forma de la mujer que te mato. Así que-.)
-(¡¡Basta!!) – El grito del chico la detuvo. – (Haré que escuches lo que realmente siento por ti.)
-( ¿Y qué tienes que decir? ¿Que en estos dos días mágicamente descubriste que me amas? No juegues conmigo Issei… Se que solo soy un apoyo como lo es un GPS. Ni más ni menos. Solo dejemos esto así.)
-(...Ya veo que no quieres escuchar mis palabras… Pero no importa, no me oirás a mí.)
-( ¿Qué quieres decir con…?) – Antes de que pudiera terminar su pregunta, vio cómo en el pecho del castaño se formaba una luz carmesí. – ( Eso es… ¿Pero cómo…!)
- Todo lo relacionado a ti es como una montaña rusa, ¿Sabes? – La voz del alma de Issei era audible para la IA. – Al principio maldecía tener que verte cada maldito día por el recuerdo de Yuuma, Reynare o como se llamara. Después empecé a verte como una buena compañera como Ddraig, siempre estando ahí para darme apoyo.
-( Y eso es lo que soy, ¿No? ¡No tienes que usar el Soul Symphony para decir lo que ya sé!)
- Pero es que dejé de verte así hace mucho. – Esa respuesta dejó a la IA muda. – Poco a poco empecé a verte… Como veo a las demás. Sin embargo, no me di cuenta de eso porque tenía muchas cosas en las que pensar… Y por qué no creía que sintieras lo mismo. – La voz pareció soltar un suspiro antes de continuar. – Por supuesto, esto también aplica para Davs también. Se que creeis que al veros solo veo a las chicas en las que se basan vuestra apariencia.
-( ¿Y no es así…?) – La voz de Aile sonó algo temblorosa.
- Al principio. Pero cuanto más interactuaba con ustedes, más me daba cuenta de que ustedes no son ellas. Ahora ya no veo a Reynare, la mujer que me asesino o a Rias Gremory, la chica que me gustaba. Solo veo a Davs y Aile, dos de las personas más importantes de mi vida y… Os quiero.
Fue al momento de decir esto último que la comunicación se cortó. Issei se sorprendió un poco por eso, pero solo cerró los ojos y suspiró. Dijo la verdad, directamente desde su alma, ahora sólo queda ver cuál será la respuesta de ellas. Sin más tomó a la espartana entre sus brazos y la llevó a su habitación.
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Aile por su parte estaba flotando en medio del interior de la Boosted Gear, abrazando sus piernas mientras ocultaba el rostro en estas.
- ¿Tratando de ocultar tu vergüenza hermanita? – Davs, que siempre estuvo ahí escuchando todo, le preguntó a su hermana al ver sus orejas algo rojas.
- ¡Ca-cállate! ¡No es como si tú tampoco sintieras vergüenza de lo que dijo!
- N-no se de que hablas. – Ella volteó la mirada para evitar que la pelinegra viera su sonrojo.
-Eres pésima mintiendo. – Aile vio con una sonrisa burlona a su hermana que le saco la lengua en respuesta, a lo que ella río. – Pero… ¿Realmente será cierto? Ya sabes… Lo que dijo…
- Uso el Soul Symphony en el mismo. Lo que oímos vino directamente de su alma… Y ambas sabemos que el alma no puede mentir… ¡Ese hijo de perra sí que fue listo esta vez!
-Lo se pero… ¿Está bien esto? Al final sabemos que si bien él nos puede tocar y nosotras a él, no somos reales.
Ante esas palabras Aile volvió a ocultar su rostro en sus piernas. En cuanto a su hermana soltó un suspiro con ella haciéndose la misma pregunta. ¿Esto tendrá algún futuro? Bueno, solo el tiempo lo dirá…
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En uno de los bares de las partes bajas de Mistral, donde White Fang aún no tenía todo el control. Se podía ver en una mesa a un pequeño grupo, pero los rostros de estos apenas eran visibles por la poca luz del local.
-Tch, vaya mierda de local. El sake apenas es decente. – El dueño de esa voz masculina habló mientras se servía una copa más de sake.
-Ya deja de quejarte pulgoso. Cielos, ¿Cómo hacen para aguantarlo? – Ahora hablo una mujer o mejor dicho una chica joven dado el tono de voz.
-Jejeje, te terminas acostumbrando nya. – Otra voz femenina que se notaba bastante coqueta le contestó con gracia.
-¡Hey! ¡Los dos sabemos que tú compañía tampoco es un paseo lleno de rosas!
-¡Al menos yo no apesto a bananas podridas! – Contestó con una clara molestia. – Además yo soy tierna nya.
-...Onee-sama, todos sabemos que eso es mentira. – Una nueva voz femenina replicó y por el tono se notaba que era también joven y bastante calmada.
-Jeje. ¿Qué tal si todos nos calmamos? – Alguien trató de calmar los ánimos del grupo. Por su tono de voz también parecía ser una mujer joven. – Digo, no queremos llamar mucho la atención.
-Creo que llamaríamos menos la atención si una de nosotros usará ropas más normales hermanita. – Una nueva voz masculino se unió a la discusión y se podía notar cierto toque de elegancia, como si fuera alguien de clase alta.
-¡Sabes que me gusta mi ropa! – Por su voz parecía algo avergonzada. – ¡Y ustedes dos no se rían, que su vestuario es más llamativo que el mío!
-'Al menos a mi no me confunden con una prostituta.'
-¡¿Qué mierda dijiste yakitori?!
-¿¡Cómo me llamaste!?
-¡Basta! – Una nueva voz masculina se impuso. El tono molesto y de mando que usó era señal más que suficiente de que ya estaba harto de todo ese circo. – Estamos aquí por una sola razón, así que no lo olviden.
-L-lo sentimos. – Ambas chicas se mostraron arrepentidas.
-Bien.
Tras decir eso el dueño de la voz se levantó. Al hacerlo la luz le dio un poco mejor. No lo suficiente para verlo por completo, pero sí para ver su ojo derecho el cual era de color dorado y parecía emanar poder.
-Nos marcharemos de aquí lo más pronto posible. Lo último que quiero es meterme en problemas con otro grupo terrorista.
-También tenemos que buscar información de este lugar. No podemos estar a ciegas todo el tiempo.
Todos tuvieron que darle razón a la que parecía ser una de las más tranquilas del grupo.
-Sin contar que aún tenemos que encontrar a la persona que ese viejo nos pidió ayudar.
-¿Realmente tenemos que hacer eso nya? Simplemente podemos ignorar eso y seguir con nuestra vida. Dudo que alguien en este mundo nos pueda hacer frente.
-No te confíes. – El que se notaba era el líder le dio una mirada seria. – Ya nos preocuparemos de eso luego. Ahora tenemos que irnos y conseguir información de este mundo.
Ante esas palabras los demás asintieron y comenzaron a salir del establecimiento. Cuando estaban a una distancia en la que estaban seguros de que nadie los seguía desaparecieron en un destello de luz como si nunca hubieran estado allí.