Dark Loki

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Miró a su alrededor y notó que una vez más estaba en el punto de partida, pero ahora desconectado del telar de la vida de los Loki ¿Cómo era eso posible? Había intentado por todos los medios alcanzar la libertad de los dictados de las normas y ahora, sin saberlo ni buscarlo, lo era.

Seguía teniendo la magia de los Loki, el potente poder de la vida de todos ellos y sus conocimientos radicaban en él, pero no podía conectarse con ninguno ¿estaba realmente fuera de la existencia? No, podía percibir la magia a su alrededor, aunque no podía salir con facilidad, ahora sólo podía retroceder en su propia persona, ir y venir en su propia línea, pero ¿qué Loki era?

Suspiró pensando en el mundo que se había espaguetizado luego de la desaparición de Loki y los Vengadores que lo acompañaban, eso no había sido a causa de una incursión, era como si la rama hubiese sido podada, pero no a causa de la TVA, quizás esa rama nunca debió existir y al ser extraído ese Loki ella desapareció por completo.

Quizás lo mejor era regresar sobre sus pasos, pero ¿A dónde? O mejor ¿A qué momento del tiempo? Y es que acumulaba demasiados fracasos que le encantaría cambiar, pero ninguno haría un cambio real en todo, sería como cuando intentaba arreglar el problema del telar del tiempo, o hablar con Khang o Sylvie para salvar la existencia del multiverso.

- Soy prisionero de mis decisiones, buenas o malas – refunfuñó.

Levantó una ilusión y vio como pasaban lo recuerdos del Loki de la Sagrada línea una vez más, siempre habían sido una sombra; el uno del hermano amado y él, de la necesidad desesperada de tener algo exclusivamente suyo, lo que lo hizo llegar siempre al límite de la maldad, sabiendo que su vida era poco valiosa, más un reemplazo innecesario del heredero de Asgard.

Miró el recuerdo, era un pequeño Loki que estaba aprendiendo a caminar de las manos de su madre y volvía su mirada al pequeño Thor que entraba corriendo hacia ella con un ramo de flores en sus manos, lanzándose hacia ella haciendo que lo soltara y cayera sentado al suelo de golpe, al que ignoró mientras abrazaba a la mujer. El pequeñito levantó su mirada llena de lágrimas antes de manifestar por primera vez su gran poder lanzando a Thor lejos que cayó a los pies de Odín que lo miró con frialdad y enfado.

- Eres un crio malvado – escuchó a Odín murmurar.

- ¡No, no lo es! – dijo Frigga levantándolo del suelo mientras trataba de calmarlo – Thor no quiso hacerte daño, mi pequeño.

- Creo que fue una mala decisión tenerlo aquí – dijo Odín ayudando a Thor que estaba desmayado por el golpe de magia – pudo haberlo matado.

- La culpa en todo caso recae sobre ti – le dijo la mujer molesta – y no voy a permitir que me quites a Loki, sabes perfectamente qué pasará si lo haces.

Dark se quedó pensativo, no recordaba este hecho, seguramente porque era demasiado pequeño como para que ello quedara en su conciencia, pero parecía ser la primera vez en que Odín dejaba ver que él no era en verdad su hijo, que no lo quería de verdad.

- Querida, no vas a provocar una guerra entre Asgard y Vananheim por un chiquillo que no es digno siquiera de su propia raza…

- ¡Loki es digno de ser el gran hechicero que está destinado a ser! – dijo ella echando chispas mágicas por todos lados mientras todo parecía congelarse alrededor de ellos – ¡los vanir lo valoremos por ello!

- Thor es tu hijo…

- Loki también lo es – le dijo con la voz cortante tomando a su hijo con un hechizo desapareciendo hacia vaya saber dónde, porque se cortó el recuerdo.

- Las madres son realmente temibles – suspiró – una leona con sus cachorros, y Odín parecía temerle, de haber sabido.

Un nuevo recuerdo surgió en la pantalla – porque eso era una pantalla ¿verdad? – y vio a un Loki ya más crecidito sentado en el jardín con un libro en el regazo mientras intentaba manipular el sedir tal como decía el texto. Repentinamente apareció a su lado Thor dejando caer un renacuajo todo mojado en su regazo, alcanzando a salvar a duras penas sus apuntes.

- ¡Thor, eres un crío! – le gritó furioso mirando a su hermano que se reía a carcajadas de su cuerpo delgado mojado hasta los huesos.

- Vamos, ven a jugar conmigo – le dijo este riendo todavía.

- No voy a ninguna parte contigo – le dijo agitando sus manos, mientras intentaba recordar el hechizo para secarse – estaba practicando.

- Pero no vas a entrar a la academia hasta dentro de muchos años – se quejó Thor.

- La academia Einsenhar, tal vez, pero Madre quiere que vaya a aprender magia antes de eso a Vananheim – se secó con su magia y sonrió complacido al ver que había hecho el conjuro correctamente – además, a mí no me gustan tus juegos.

- Eres un hermano muy aburrido – volvió a quejarse – quería que fuéramos con mis amigos a ver los potrillos nuevos…

- ¡Pues llévatelos a ellos! – gritó furioso – no me necesitas para esas cosas.

- Nunca compartes nada conmigo, siento que no me quieres – le dijo alejándose molesto.

Dark se quedó pensativo, el recuerdo era vago, pero si sabía, o al menos eso creía, que hubiese estado en la biblioteca buscando algo para mostrarle a Thor que de verdad lo amaba, sin tener muy claro lo que pretendía hacer.

El chiquillo estaba ahora en la biblioteca sentado leyendo un libro cuyo título no alcanzaba a traducir, las runas estaban algo borrosas en la tapa, pero también los hechizos allí escritos eran complicados hasta de pronunciar.

- Esto no funciona con el All Speak – se puso de pie y se acercó a la estantería y sacó un diccionario antiguo – asgardiano real, en completo desuso fuera de la familia real de Asgard – el chiquillo parecía intrigado porque no estaba entre sus dones, puesto que creía que era un príncipe asgardiano por derecho propio – tiene que haber una manera… - se escucharon ruidos fuera de la biblioteca y apagó la luz de su escritorio instintivamente.

- Les digo que Loki tiene que estar por aquí – decía Thor – no voy a ninguna parte sin mi hermano.

- ¿Para qué quieres a ese monstruo a tu lado? – decía una voz de niña detrás de Thor, estaba muy seguro que era Sif.

- Loki no es un monstruo – dijo Thor en su defensa – lo dices porque eres una niña que sólo tiene piojos.

Loki no pudo sino soltar una risita divertida por lo que lo descubrieron entre los estantes con un libro contra su pecho. Dark pudo ver el libro que tenía entre las manos y recordó el hechizo que había recitado en aes ancestral sin saber qué era lo que decía.

- "Livet flettes sammen og binder, det krysser mellom sjeler, forener definitivt det skjebnen allerede har forent, gjør to sjeler til én, og verken den ene eller den andre vil være i stand til å forlate denne verden uten sin følgesvenn".

- La vida se entrelaza y amarra, se cruza entre las almas uniendo definitivamente lo que ya el destino ha unido, volviendo dos almas en una sola siendo que ni una ni la otra podrán partir de este mundo sin su compañera – repitió Dark para sí.

- Suena muy bonito – dijo Thor sonriendo abrazándolo y una luz dorada los unió.

- ¿Qué has hecho Loki? – escucharon a Odín decir preocupado apareciendo por otro lado y vio como el chiquillo ahora podía leer el libro en aes real.

- Padre – dijo este preocupado y asustado, para él había sido sólo un poema bonito, pero ahora Dark sabía que era un hechizo vinculante.

- ¿Por qué estos recuerdos? – dijo sabiendo que no habría respuesta.

Ahora se veía adolescente, frente a los examinadores en la academia de Einsenhar luego de realizar todas las pruebas para graduarse como guerrero. Era cierto que no tenía la apariencia física de los demás guerreros en la academia, lo que siempre había sido una burla entre sus compañeros, pero ello los hacía menospreciar su destreza y caer derrotados por su astucia. Además, era más elástico en sus movimientos y podía evitar sus golpes asestando los propios con gran fuerza, derribando a cualquiera.

No a mucha distancia podía ver a Thor sonriendo orgulloso por haber obtenido la máxima puntuación en una dura contienda. Pero Odín se veía molesto por algo, así que le mostró que todavía tenía puestas las muñequeras que le impedían hacer magia, como diciéndole "no hice trampa, padre".

Claro, Dark recordaba que la actitud del rey lo había herido, nunca conseguía hacer que se pusiera orgulloso con sus logros, cuando con Thor se hinchaba como rana toro hasta por la mas mínima tontería, por eso cuando Odín lo felicitó por su magia y le dijo que estaba orgulloso de él lo tomó tan por sorpresa.

- En hora buena, príncipe Loki, te gradúas con los máximos honores en la academia – le dijo uno de los maestros – no podías ser menos que tu hermano ¿verdad?

Dark recordaba que por dentro bullía de ira, pese a que se veía sin emociones delante de todos, siempre comparado, sin que nadie viera sus esfuerzos por ser el mejor, no otro Thor.

- ¡Vamos, hermano, hay que celebrar tu graduación! – se acercó Thor y lo atrajo a su costado – ya está todo esperando en casa.

Dark recordaba perfectamente esa tarde, Thor lo había cogido por la muñeca y lo había llevado al comedor casi a rastras, en donde lo esperaban todos los amigos de Thor – al parecer Sif esperaba que fracasara por la mala cara que tenía – junto con su madre, a quien si apreciaba ver.

- Mi niño ha crecido mucho – dijo ella orgullosa tomando sus muñecas retirando las amarras de su magia – te felicito, Loki.

- Gracias, Madre – se dejó abrazar por ella y se dejó llevar a la mesa principal.

- ¿Qué hice esa tarde que es tan importante este recuerdo?

Miró a todos los que estaban en la fiesta, toda gente que rodeaba siempre a Thor, esas mozas locas que siempre estaban tratando de llamar la atención del príncipe dorado y meterse en su cama, Fandrall intentando llevarse a alguna mientras Volstag y Hogun parecían competir por quien comía más.

Sentado en el centro de la fiesta, estaba entre su madre y su hermano, quien contaba una historia de cuando era niños antes de atraerlo hacia su pecho haciéndolo perder el equilibrio cayendo contra él. Thor sonrió complacido y lo besó en la boca delante de todos antes de dejarlo ir y seguir bebiendo como si no hubiese pasado nada, pese a la cara molesta tanto de Sif como de Madre.

Ahora lo recordaba, era como si algo lo hubiese golpeado en medio del pecho, anudando algo en su alma, empujando un fuerte fuego que se encendía en sus entrañas con gran violencia, era como tener un volcán a punto de hacer erupción. Se apartó de todo y corrió a su habitación corriendo hacia el baño para mojarse la cara, el calor era enorme…

Dark detuvo el recuerdo, sabía de sobra qué venía a continuación y no quería ver una película porno con él como protagonista de una fantasía sexual que proyecto para saciar el hambre que lo había invadido. Claro, no había quedo satisfecho y se sentía culpable por haberse dejado llevar por sus impulsos con una de sus copias mirándolo con la cara de su hermano antes de que su magia desapareciera.

Había llorado con amargura largo rato luego de darse cuenta de lo que había hecho, tanto que hasta se había quedado dormido abrazado a su almohada, hasta que sintió ruidos provenientes de la habitación de su hermano, cansado como estaba había querido seguir durmiendo, pero escuchó claramente los gemidos de la mujer junto con los de su hermano ¡El maldito estaba en su cama con una de esas perras que lo único que quería era ser la siguiente reina de Asgard!

Al final, pese a su enfado, no había hecho nada, había bloqueado el sonido y decidió dormirse sin sentirse culpable, Thor se lo merecía porque era un idiota.

Años más tarde se burlaría de Thor por no poder tener una novia estable, nunca se decidía por ninguna y fastidiaba a Sif sobremanera.

Claro que recordaba la última antes del intento fallido de coronación, la muchacha de la cual no recordaba el nombre, se había presentado ante él creyéndose ya la próxima reina de Asgard, estaba claro que la muy tonta estaba convencida que Odín la iba a aceptar sólo por el hecho de haberse metido en la cama de su hermano, diciéndole casi las mismas palabras que le había dicho Sif durante su última pelea, cuando fuera la esposa de Thor haría que lo desterrara de Asgard.

Loki se había reído de la mujer y le había replicado burlonamente:

- No sabes ya cuantas me han dicho lo mismo, cuantas han salido de la habitación de Thor creyéndose su reina, pero ninguna ha vuelto a sus aposentos, porque, puesto a tomar la decisión entre ella y yo, ¿sabes quién gana? – se mostró ante ella riendo – exacto, el hermoso hermano – vio que ella lo miraba furiosa – yo estaré siempre junto a Thor – le dijo alejándose.

Claro, no había sido la última, de la humana no había sido tan fácil deshacerse, ella contaba con el apoyo de Madre quien creía que la relación de ellos era un mero capricho por su parte, pero no era así, ahora lo sabía, aquel hechizo infantil había amarrado la vida de ambos…

- Espera – se dijo a si mismo – si ninguno de los dos puede morir sin que muera el otro ¿Cómo fue que morí en la línea sagrada? Eso habría provocado la muerte de Thor, o este me habría mantenido vivo – volvió hacia el pasado del Loki de la TVA y entró en la biblioteca silenciosa de la antigua sede, recordaba que el Loki que había escapado del Estadista se había ocultado por siglos en un planeta desierto y sólo cuando regresó fue podado por la TVA.

Entró en la zona que mostraba a Thor y volvió a revisar su vida, había sobrevivido al Estadista, se había enfrentado a la creación de su hacha guerrera soportando la radiación de un sol en su cuerpo, se había enfrentado a Thanos y había perdido la cabeza, había intentado matarse en varias ocasiones sin conseguirlo, pese a su depresión asgardiana, lo único que había conseguido era ser más ancho que Volstag. Había luchado contra sus demonios durante cinco años y volvió a enfrentarse a Thanos, batalla en la que vio caer a Ironman y al Capitán América ser un nuevo Thor – por las normas, siempre había sospechado que el hombre tenía algo de asgardiano – para luego marcharse abandonando la corona de Asgard, luchando contra muchas cosas durante diez siglos, cuando apareció Aquel que Permanece en la Tierra y cayó fulminado bajo un extraño poder que no era con nada parecido a lo que había soportado en el pasado. Volvió a tomar el expediente del Loki solitario, las fechas coincidían, cuando ese Loki fue podado y Thor fue atacado fue al mismo tiempo y ambos murieron.

- Lo has descubierto, Dark – le dijo una voz a sus espaldas y toda la biblioteca de la TVA desapareció a sus espaldas – la vida de ningún ser debe ser debe ser controlada por los caprichos de nadie, ni siquiera de un Dios.

- Yo sé quien eres: el Hijo del Eterno – le dijo y este le sonrió amablemente.

- Te ofrezco la libertad, pero aún tienes una misión que cumplir, rompe las cadenas de las tejedoras, acaba con su soberbia y podrás ir donde quieras, incluso ese mundo en el que soñabas.

- Espera… - pero el hombre desapareció y vio el lugar en dónde lo había colocado, estaba claro que él si podía interferir sin hacer daño en la vida de los seres a su alrededor. Suspiró y sintió su conexión con el resto de los Loki, las Normas seguían intentando manipular su telar de la vida, pero este se reparaba con cada Loki que se unía a la vida.

Avanzó en silencio escuchando el sonido de la rueca que tejía las vidas de los seres pensantes, había hilos largos y gruesos, otros cortos y delgados, otros apenas unos brotes de hilo, pero todos representaban una vida.

- Humano, no puedes estar aquí – le dijo una voz cascada y antigua, que se sintió tétrica a sus oídos, estaba claro que era una de las normas ya que tenía una tijera en la mano. Cerró los ojos y concentró su magia antes de sentir que ella intentaba usar la tijera como arma contra él, en una finta la esquivó y la vio abrir grande el ojo que la unía a sus hermanas, había apuñalado y dado muerte a la Norma que veía el futuro. Eso la hizo enojar sobremanera y volvió a intentar apuñalarlo, pero acabó apuñalando a su otra hermana, la que veía el presente.

- ¡No, la profecía del hechicero no debe cumplirse! – gritó ella desesperada y se lanzó nuevamente, pero tropezó y cayó contra la rueca soltando la tijera que se quebró al golpear el suelo, oxidándose y convirtiéndose en polvo.

Sintió el tirón de la vida y el tiempo llevándolo de regreso al comienzo…

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Dark abrió los ojos y vio a Loki sentado en el árbol del tiempo ¿Qué había pasado? ¿Por qué había regresado su conciencia a su cuerpo real?

- Lo hiciste ¿verdad? – le dijo molesto – consigues evitar que controle tu poder ¿Por qué salvar a todos esos idiotas si nunca sabrán de ti? Puedes tener a Thor desde el comienzo, jamás nos sería infiel, no viviríamos las humillaciones que pasamos en Asgard.

- Pero yo lo sabría – le recordó mirando el tronco de árbol, ahora más grueso y lo vio soltar algunas ramas viendo que ellas ya no morían sin su magia – sufres lo mismo que yo toda esa amargura, lamento tanto haber tratado de sacarte de mi alma, porque sin ti dejaba de pensar en mí mismo y trabajaba por los demás, pero sigues siendo una parte importante de lo que soy.

- ¡No deseo dejar de sentir! – le dijo molesto, era grato saber que aún podía amar.

- Y no tienes que hacerlo – le dijo poniéndose de pie dejando el trono que ahora brillaba por sí mismo, lo que le sorprendió, quizás a eso se refería el Hombre cuando le dijo que podría ser libre – vuelve a casa, Loki, y recibe el amor que te mereces – lo abrazó con fuerza y ambos desaparecieron en una brillante luz verde que los volvió uno y aparecieron en una mano extendida con el teaser acto frente a Thanos.

Y es que ahora era Loki, no una sombra de si mismo, pero aquí se separaba del otro Loki, ambos merecían amor y ambos tenían conciencias distintas. Así que sería el Loki que cayó en el Estadista, renacería para salvar el futuro, se dijo mientras se la iba el aire con su cuello entre las enormes manos de Thanos hasta que sintió en carne propia el sonido de su cuello rompiéndose, el mismo que vio en la grabación de la TVA.

- Jeg elsker deg for alltid, alltid 1– fue su último pensamiento antes de caer.

- Esta vez no habrá resurrecciones – escuchó a Thanos cayendo al suelo.

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Silencio, estaba rodeado de silencio, el cuerpo adolorido ¿acaso no estaba muerto? ¿Era acaso producto del volver a nacer? No, no lo creía porque no tendría conciencia de sí mismo hasta mucho más adelante, al menos eso señalaban los libros sobre los renacidos asgardianos.

Abrió los ojos e intentó moverse, el dolor fue grande, pero pudo invocar parte de su sedir y curar sus heridas más superficiales, algo que lo agotó enormemente. Se sentó y miró sus manos, gran parte de su encanto glamour había caído y su piel estaba azul, pero estaba vivo ¿Qué había pasado? Podía sentir las marcas en el cuello de donde Thanos lo había ahorcado, seguro que si se veía en un espejo notaría los moretones en su cuello.

- Algo pasó, estoy seguro – suspiró tratando de hacer memoria de esos últimos momentos. Thanos lo había cogido por el cuello cuando intentó apuñalarlo, con la mano que portaba el guantelete con las gemas, había intentado defenderse y había rozado una de las gemas, ella brilló antes que el gigante le rompiera el cuello y de allí no recordaba más.

Suspiró, intentando recordar la sensación de la gema que tocó con sus dedos, no era la piedra del espacio, tampoco la del poder, de ambas conocía su poder, esa tercera piedra había provocado la confusión y lo había protegido de la muerte.

- Por las barbas de Odín, el roce con la piedra creó una nueva rama, pero no puedo viajar a Asgard, no tengo tanta magia – suspiró sintiéndose condenado, al menos tenía la certeza que Thor seguía vivo, pero tenía que encontrar la manera de regresar a Midgard y ayudar a los Vengadores.

Finalmente se calmó al recordar que aún tenía un recurso, aún era el Señor del Tiempo, sólo tendría que concentrarse en sanar y buscaría el aura de su hermano viajando en el tiempo y el espacio, después de todo ¿no era acaso un tempad humano?

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Claro que pese a viajar en el tiempo y el espacio, la cosa no había sido fácil, necesitaba el tiempo correcto para regresar para no causar una incursión, ya no era ese ser que quería venganza de su hermano, era Loki y nada más.

Pero había algo que lo distraía, era como si hubiera dos Thor deprimidos en Midgard, quizás Steve Rogers estaba en las mismas condiciones que su hermano y los sentía a ambos.

- Es mucho más fuerte cuando están juntos – se dijo y se trasladó a la Tierra.

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Fue un horror lo que vio, Thanos estaba luchando contra los tres Vengadores más poderosos, había derribado a Ironman, estaba con el hacha de Thor contra el pecho de este, pero Mjolnir golpeó al gigante al ser invocado por la mano de ni más ni menos que del Capitán América.

- Lo sabía – dijo Thor desde el suelo y Thanos lo golpeó dejándolo inconsciente.

Loki aprovechó la distracción de la pelea de Thanos con el nuevo Capitán Thor para correr al lado de Stark, el sistema estaba bien, pero el hombre había perdido la consciencia, así que sanó sus heridas lo mejor que pudo y sacó a Thor de la zona en que Rogers luchaba, viendo como casi conseguía detener a Thanos, pero este consiguió romper el escudo del rubio y lo hizo caer. Admirado, vio como el hombre, herido y todo, se volvía a poner en pie y decididamente avanzaba hacia el titán, quien hacía bajar a todas sus fuerzas desde el cielo.

Sintió escalofríos, no había conseguido curar por completo las heridas de Thor y Stark apenas estaba recobrando la consciencia, pero vio al hombre llevar su mano a la oreja y luego vio los círculos mágicos del Sanctum Santorum, con lo que miles de guerreros se unieron a la batalla, incluidos muchos asgardianos.

Los gritos de guerra de los soldados del rey gato – Pantera Negra, así se llamaba – se propagaron y Rogers se puso al frente con los dientes apretados, soportando el dolor de las heridas y los golpes en su cuerpo mientras gritaba:

- Vengadores – extendió su mano y Mjolnir llegó hasta ella – Unidos – y un grito de batalla se extendió por el campo de batalla.

Loki vio como un hombre gigante emergía de los escombros llevando consigo a tres seres – uno de ellos era un mapache con un arma – quienes se unieron a la batalla generalizada.

Suspiró, lo que menos quería era meterse en la batalla, pero era un Asgardiano y debía estar a la altura, así se vengaría de los idiotas hijos de Thanos.

- Necesitas curar ese brazo – le dijo a Bruce que se sorprendió al reconocerlo – después de la batalla explicaré todo – lo acalló y extendió su magia curativa sanando la mayor parte de sus heridas – no soy tan buen curador como mi madre, pero al menos podrás luchar con todas tus fuerzas.

- Gracias, Loki, pero Thor se va a enojar contigo cuando sepa que estás vivo.

- ¿Eres el famoso hermano de Thor? – dijo el Mapache armado.

- Creo que estoy vivo por culpa del mismo Thanos – suspiró – voy a tratar de curar a Rogers, tiene varios huesos rotos por enfrentar directamente a Thanos.

Corrió hacia Steve y detuvo el tiempo, colocando sus manos en las costillas, la pierna y el brazo del Capitán, retirando los restos del metal del arma de Thanos de las heridas del hombre. Se alejó y besó a Thor en la boca antes de curar sus heridas más graves. Luego fue por Stark y limpió su armadura mientras sanaba sus heridas.

Liberó el tiempo y se topó con los ojos de Strange que lo miraba asombrado, había visto lo que era capaz de hacer.

- La gema del tiempo y yo somos uno – le dijo saltando hacia el campo de batalla en donde Clint estaba herido, quien lo miró preocupado, pero se dejó curar sin hacer preguntas – lleva lejos esa cosa – le señaló el guante y se enfrentó a Corvius Glave que lo miraba furioso – ahora te enfrentarás al verdadero poder de Loki – invocó el sedir verde en sus manos.

La pelea era grande, Thanos se enfrentaba con la Bruja escarlata y ordenó que atacaran la Tierra con las armas de la nave, sus lugartenientes se asustaron, ellos también estaban en el medio, pero fue perentorio, los disparos se sucedieron, pese a los escudos mágicos levantados por los hechiceros, Loki no tenía magia suficiente para detener el tiempo, pero los disparos se volvieron hacia el cielo, en donde una mujer entró desde el espacio y se dirigió a enfrentar a Thanos.

- ¡No debemos dejar que tome las gemas! – gritaba Rogers por los comunicadores, todos buscando una camioneta rara entre los escombros del destruido complejo.

Loki volvió a acercarse a Thor y curó nuevamente sus heridas.

- La última vez que te vi tenías un solo ojo – le dijo mirándolo a la cara.

- La última vez que te vi estabas muerto – le reclamó este.

- Bueno, tengo una conjetura de cómo es que no lo estoy, pero no sé nada de tu ojo – le acarició la barba – te ves muy guapo así, te asienta estar más rellenito ¿sabías?

- Déjate de burlarte y cura a Steve – le dijo molesto.

- No miento – le dijo y se volvió hacia el otro rubio – veamos tus heridas, Capitán Thor – él le extendió el brazo y Loki extendió su sedir reparando los huesos y la herida en el tendón – cuida a Stark, va a intentar una locura, eres su alma gemela y puedes mantenerlo con vida – le susurró – abrázalo y pon tu alma en ello.

Steve lo miró asintiendo, había prometido mantener a Tony vivo para su hija, y se jugaría su vida en ello.

La lucha por las gemas fue una locura, el guante había pasado de mano en mano y Thanos se hizo con este, usando las gemas para vencer a cuanto se le puso por delante, incluso a Ironman.

Loki miró a Rogers quien saltó en pos del hombre viendo como Thanos intentaba chasquear los dedos.

- Yo soy inevitable – dijo, pero el chasquido no funcionó, volteó la mano y descubrió que las gemas ya no estaban.

- Y yo… soy Ironman – dijo Stark chasqueando los dedos justo en el momento que Rogers pasaba su brazo izquierdo por su pecho y sujetaba con su mano derecha la del ingeniero, tomando para sí toda la energía repelida por las gemas.

Thanos se volvió hacia los hombres y se sentó mientras todos sus guerreros comenzaban a volverse polvo siendo él el último en desaparecer.

- Cap, puedes soltarme – le dijo Stark sintiendo en su espalda el peso del rubio, que no lo soltaba.

Loki se levantó de donde había caído en la batalla y corrió hasta ellos, tocó al rubio y tomó su mano.

- Te amo eternamente, siempre – dijo este mirando a Ironman antes de perder la consciencia.

- ¡NO, CAP! – gritó Tony abrazándolo con fuerza – ¡NO TE ATREVAS A MORIR!

Loki extendió su sedir por el cuerpo del guerrero, no estaba contento, pero debía constatar si…

- Un latido – dijo asombrado – su corazón late, ha bajado sus signos vitales, está demasiado grave, pero se curará – le puso la mano en el hombro – es como uno de los sueños de Padre de Todo, estará bien.

- ¿Cómo lo sabes? – dijo Clint habiéndose acercado a ellos.

- Steve levantó a Mjonir porque era digno del poder de Thor – le dijo este – lo pudo usar tal como yo lo uso, aunque sin mucha práctica, así que, al ser yo el siguiente rey de Asgard, tengo ese poder y es suyo también.

- Lo que no sabemos es cuánto tiempo le tomará reponerse – dijo Loki – pero de que lo logrará, lo hará.

- Has alterado el tiempo – dijo Strange entrecerrando los ojos – debías estar muerto.

- El tiempo no es lineal, hechicero supremo, no viste todas las realidades, son demasiadas para cualquiera, sólo el Eterno sabe cuantas hay y estoy seguro que pueden nacer muchas más.

- Si tú estás vivo… - empezó Tony.

- Las gemas del infinito son caprichosas ¿sabes? Pero ya les explicaré todo… - y se desmayó.

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Loki despertó acostado en una enorme cama blanca, a su lado dormía profundamente Thor, con el cabello y la barba desordenada. Movió la cabeza negativamente, siempre había pensado que su hermano perdería todo sentido de la moda si se le dejaba solo, pero esto era casi un acto de rebeldía en su contra.

- No tengo magia para arreglarte – le susurró – así que vete a tomar un baño o me enojaré contigo.

- No seas pesado, Loki.

-Te bañaré yo, sol de Asgard – le dijo burlón.

- No tienes magia, lo acabas de admitir – dijo volviendo a acomodarse.

- Es que hueles a pijama de león – se quejó – me niego a tener en mi cama a alguien que huele tan horrible.

- De acuerdo, pero esta no es tu cama, es la mía – se levantó y se dirigió hasta el baño refunfuñando cosas que no alcanzaba a entender.

- Veo que conseguiste tu propia realidad – dijo una voz conocida.

- Vigilante – dijo deteniendo el tiempo – veo que esta es otra línea ¿verdad?

- No, al sacar a Khang de la ecuación, cualquier realidad creada luego de la desaparición de las piedras del infinito se vuelve una línea sagrada – le dijo – y esta es la más cercana a la que ese hombre destruyó con su incursión.

- Seguiré viéndote, entonces.

- Tal vez – le dijo y desapareció.

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Un mes más tarde estaban todos sentados en el jardín del complejo que lentamente comenzaba a reconstruirse, Steve estaba repuesto, aunque aun le dolía un poco el brazo cuando lo flexionaba; Bucky tenía un brazo nuevo y menos dolores en el cuerpo cuando lo extendía; Tony estaba más tranquilo ahora que sus pesadillas parecían haberse detenido; Thor estaba más recuperado ahora que Loki lo obligaba a bañarse y cuidar su barba como buen asgardiano; Clint estaba contento porque tenía a su familia de vuelta, y Bruce, bueno, parecía estar recuperando la pérdida.

- Creo que finalmente es la hora de las explicaciones – dijo Loki – con las gemas de vuelta en su lugar de origen, ya no existe el peligro.

- Dijiste que las piedras eras caprichosas – le recordó Tony.

- Cada piedra, como pudieron ver al enfrentarse a ellas, tiene una mente propia, cada cual haciendo lo que se le antoja – hizo un holograma – la primera es la del espacio, la menos molesta pero la más sensible, ella es la que causa esos dolores que rompen los tendones y los huesos, es más bien física – hizo aparecer otra – la de la mente, la más peligrosa, es ambiciosa, destructiva, controladora, se alimenta de los sentimientos, cuanto más oscuros son estos, más fuerte se hace – hizo aparecer otra – poder, fortalece a su usuario, pero contamina el alma de su usuario, se vuelve una droga, te hace dependiente de ella, es lo que le pasó a Malekit – mostró otra – la piedra del tiempo, la que no puede se manipulada directamente, te puede volver loco al llevarte a cualquier lugar del tiempo sin control si no tienes la fortaleza para detenerla – miró la siguiente – la realidad, ella altera lo que sucede alrededor de su usuario, puede alterar las cosas y la precepción de quienes las miran cuando quiere – mostró la última – alma, una que se cobra la vida de alguien importante de quien quiere usarla.

- Para obtenerla debió morir Natacha – dijo Clint.

- He estado pensando en ellas – suspiró Loki – Thanos tenías las piedras del poder y de la realidad cuando nos atacó en el Estadista, con la primera venció a Hulk, pero la otra fue activada por mí cuando quiso matarme, ella alteró la realidad e hizo todo lo contrario a lo que quería Thanos ¿recuerdas sus palabras, Thor?

- No habrá resurrecciones.

- Exacto, y la piedra estaba enojada, así que nos hizo creer a todos que yo estaba muerto, pero no era verdad.

- Vaya, así que las piedras están locas.

- Hay algo más que debo contarles, pero no se enojen – suspiró al ver la intriga en los ojos de todos los que los rodeaban – Su viaje en el tiempo causó estragos, en especial ustedes dos – señaló a Tony y a Steve – crearon una rama paralela en el tiempo cuando dejaron caer el Teaser Acto a los pies de Loki en 2012.

- ¿Cómo sabes de eso? – dijo Tony espantado.

- ¿Conoces la teoría de los multiversos?

- Universos superpuestos que se crean a partir de una decisión importante – dijo Bruce pensativo.

- Exacto, eso es lo que pasó cuando fueron en el atraco en el tiempo. Steve no debió toparse con su yo del pasado, ni Tony con el suyo – suspiró – no crearon una paradoja, sino que alteraron ese presente, allí vive otro Loki ahora.

- Vaya – dijo Clint.

- Sin embargo, existió un Loki que se robó el Teaser Acto y desapareció con él, aunque la línea que de él se creó fue borrada, él ha permitido que todos los que somos Loki tengamos un mismo poder, unidos para ser uno entre todos, pero diferentes a la vez, cada cual con su propio glorioso propósito.

- Y eso quiere decir…

- Que debemos rehacer a los Vengadores, porque del otro Loki pude ver que mi hermano es pésimo maestro, los necesitarán en el futuro y ustedes no estarán aquí.

- ¿Me quieres decir que habrá más guerras? – se quejó Sam.

- Los humanos se parecen demasiado a los Asgardianos, nunca pararán las guerras, siempre encontrarán un motivo para meterse los unos con los otros.

- Jefe, hay una comunicación desde el Milano – dijo Viernes – piden autorización para aterrizar.

- Dales autorización – dijo Steve suspirando, esperaba que no trajera malas noticias del espacio.

- Viene con buenas noticias – dijo Loki.

El Milano aterrizó en la zona despejada del complejo y Loki sonrió, lo que le habían mostrado las piedras era cierto, ellas no volverían porque se habían cobrado la vida de muchos y se habían dispersado en el silencio, en especial porque se había dado el trabajo de buscarlas hacia adelante y dejarlas fuera del tiempo, en un lugar que ningún humano común y corriente podría llegar, en las raíces del árbol del tiempo, en donde sostenían las vidas de todos los universos y se complacían es ser útiles y no meras herramientas en las manos ambiciosas de algún loco destructor de mundos o universos.

- Nos queda sólo evitar que abran portales a otros universos – dijo más tranquilo a la nada viendo como los Guardianes de la Galaxia descendían de su nave y junto a ellos bajaba una pelirroja que caminaba hacia los Vengadores tan majestuosa como debía ser una Viuda Negra.

- ¡Nat! – gritaron los Vengadores originales y cada uno la abrazó con fuerza mientras reían y lloraban a la vez.

- Si, todos han regresado a casa – sonrió mientras Bucky lo miraba intrigado.

- Tú sabes mucho más de lo que nos has dicho – le dijo este.

- Es posible, pero el futuro no es inmutable como mi Madre pensaba, la vida no se escribe en piedra, sino en la carne de los seres que habitan los diferentes mundos, para bien o para mal.

- Eres bastante extraño – le dijo – pero me temo que en este grupo todos lo somos.

- Y lo seremos más – le sonrió divertido.

- Al menos nadie podrá quejarse que somos un grupo aburrido – le palmeó el hombro y caminaron hacia los demás.

- ¡Vengadores Unidos! – dijo Steve extendiendo su puño hacia adelante y los demás lo imitaron

- Eternamente – dijo Loki.

- ¡Siempre! – corearon los demás.

.

Fin

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Lo que les parezca se me quedó el en tintero, me avisan y haremos otra historia, este Loki me ha agotado las ideas, realmente lloré con él, pero eso no quedó plasmado, lo amo demasiado y cada uno de sus dolores son privados

Gracias por leer, mis más sinceros agradecimientos por ello, por dejar sus kudos y comentarios, me ayudan a publicar.

Shio Zhang.

1 Te amo eternamente, siempre