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Doble engaño
Capítulo 10
California PT. 3
"Disculpe, ¿qué quiere decir con eso?" Yo le pregunte a ella.
"No puedo entender cómo estás embarazada, simplemente no tiene sentido"
"Cambié de médico y me pusieron un tratamiento diferente" La expresión de su rostro se transformó en comprensión, pero luego pareció perpleja.
"Bien, me había olvidado de eso, pero todavía no lo entiendo del todo"
Tratando de controlar mi frustración, respondí. "Tengo entendido que mi nuevo médico se comunicó con usted acerca de los resultados de mis pruebas y usted no estaba muy contenta con eso. Insististe en que estaba equivocado."
"¡El tratamiento en el que estabas no estaba funcionando, estás arriesgando tu vida!" Ella me dijo.
"No según el Dr. Cullen" No quería seguir hablando con ella, no con su actitud.
"No es un buen médico al permitirte quedar embarazada, a veces puede ser muy ingenuo" respondió.
"¡Eso no es cierto!" Dije tratando de mantener la compostura, no queriendo causar una escena.
"Por la forma en que actuaste después de que te dije que cambiaría de médico, estabas totalmente en contra, ¿por qué?"
"Fue en contra de mi voluntad, créeme..."
"Entonces, ¿por qué me dejaste?"
"Porque", suspiró, "tienes derecho como paciente a obtener una segunda opinión"
"Pensaste que no seguiría adelante con esto, ¿no?" Señalé, ella asintió. "O que cuando el nuevo médico viera mi historial se desanimara o me diera el mismo diagnóstico" agregué y ella asintió nuevamente.
"¿Nunca se te ocurrió que cualquier médico al que acudiera querría realizar sus propias pruebas?"
"De verdad no me paso por la mente" respondió con indiferencia. Como si esa no fuera la manera en que ella hiciera las cosas. Todo esto me estaba haciendo dudar de su capacidad como médico.
Me burlé... ¿y ella dijo que Edward era ingenuo? ¡El burro hablando de orejas! Que ella pensara que no me harían nuevas pruebas fue simplemente una estupidez. Necesitaba hablar con Edward sobre esto.
"Tengo curiosidad por una cosa" dijo.
"¿Qué?"
"¿Cómo reaccionó su marido?" pregunto expectante.
"¿Quieres decir por cómo reaccionó ante mi primer embarazo?" Hice una pausa, sin esperar realmente una respuesta.
Mi vida personal no era realmente asunto suyo así que decidí mentirle, aunque no sabía si realmente era mentira. Jacob y yo no hemos hablado de sus sentimientos sobre este embarazo. Parecía feliz al principio, pero después de lo que me hizo, no sé si estaba mintiendo o no. Sus acciones últimamente me han hecho cuestionarlo todo.
"Él está muy feliz por eso", le dije, sonriéndole. "Que tengas buenas noches", le dije despidiéndola. Ella simplemente parecía consternada.
Punto de vista de Edward:
Me reuní con Tanya en una mesa cerca de la barra, le pedí un mojito y pedí mi cerveza favorita. Era gracioso cómo a mi mejor amiga y amante les gustaba beber mojitos, aunque Bella no podía tomar alcohol en este momento.
"Hola" saludó Tanya.
"¿Dónde está tu marido?"
"Lo dejé con sus amigos", me dijo.
Aunque no era obstetra, Alistair, el esposo de Tanya, siempre venía con nosotros a la convención. Cerramos la práctica por la semana y veníamos aquí para refrescar nuestros conocimientos y divertirnos un poco. Aunque este año pasaré todo mi tiempo disponible con Bella y no sabía qué le iba a decir a Tanya si me pedía pasar el rato con ellos. Estaba planeando llevar a Bella mañana a nuestra primera cita oficial.
"Pedí tu favorito" dije, deslizando el vaso hacia ella.
"Un brindis por ti amigo mío, finalmente te divorciaste de la bruja" dijo levantando su copa. Chocamos nuestras bebidas y cada uno tomó un sorbo.
"Gracias", respondí.
Mi amiga se quedó en silencio por unos segundos, "Tanya, quiero disculparme por todo", comencé, Tanya puso su mano en mi hombro y negó con la cabeza.
"No eres tú quien tiene que disculparse conmigo, Edward." Es Leah quien tiene que hacer eso. No tenía derecho a decir las cosas que dijo, a tratarte como lo hace", dijo Tanya.
"Tú y yo somos amigos desde hace años, te considero un hermano y me duele ver el hombre en el que ella te convirtió, Edward. Siempre fuiste tan feliz, despreocupada, extrovertida y responsable, pero sabías cuándo divertirte. Ver morir la chispa de tus ojos cada día que pasa fue una pesadilla para mí. Estoy muy feliz de que finalmente haya tomado la decisión de irse", dijo aliviada.
"Lo sé Tanya, no fuiste la única que lo dijo. Simplemente estaba ciego, supongo que sólo quería casarme una vez y cuando me casé con Leah, no planeaba divorciarme de ella"
"Lo sé, pero no ibas a seguir siendo su felpudo, Edward", rebatió ella.
"Tanya, realmente lamento todo, las cosas que dijo sobre ti, todas las veces que insinuó que querías ser más que mi amiga"
"Edward, sabes que todo eso eran mentiras. No sé lo que estaba pensando Leah, pero sabes que yo nunca pondría en peligro nuestra amistad ni mi matrimonio. Alistair y yo llevamos muchos años juntos, incluso antes de que conocieras a Leah" se defendió.
No tenía dudas de que estaba diciendo la verdad, ella y Alistair han estado juntos desde la secundaria. Aun no tienen hijos ya que Tanya fue abusada sexualmente por su tío cuando era una adolescente y a causa de eso tuvieron que extirparle el útero. Afortunadamente ella tiene sus ovarios y hace unos años congeló sus óvulos, solo están en busca de un vientre para alquilar. Ha sido un proceso largo y tedioso para ellos.
Lo único en lo que Leah permitió que Tanya participara fue en ser la madrina de Hayden, una tarea que se toma muy en serio. Ella es la única persona, además de mis padres y la señora Biers, en quien confiaría a mis hijos. Pensar en Hayden me hizo recordad nuevamente en cuando me dejaron en el aeropuerto. Necesitaba saber qué pasó con él y porque reacciono de esa manera cuando le mencione a Leah.
Tanya y yo hablamos animadamente durante unos minutos más hasta que la vi entrar a la habitación. Bella llevaba un vestido rojo que abrazaba su cuerpo como un guante. El vestido acentuaba perfectamente su busto y luego se ensanchaba, pero aún se podía ver que estaba embarazada.
"Oye, ¿no es esa tu nueva paciente, la señora...?"
"Swan" terminé por ella.
"Sí, es ella" Bella entonces me vio y se acercó hacia mí, pero se detuvo cuando vio a Tanya a mi lado. Su sonrisa vaciló y bajó la mirada y fue a sentarse en una de los sillones que tenía cerca de ella.
"Veo que tu tratamiento funcionó" comentó Tanya mientras tomaba otro sorbo de su bebida.
"Sí, sabes que soy minucioso" respondí, también tomando un trago de mi cerveza, con mis ojos en dirección general a Bella.
"Ella es muy hermosa" mencionó.
"Deberías salir con alguien como ella" añadió Tanya. Puse los ojos en blanco, "está casada" dije, ocultando mi sonrisa tomando otro trago de cerveza.
"¡No me refiero a salgas con ella idiota!" dijo en broma.
Si tan solo supieras…
Unos minutos después, Alistair nos encontró y se llevó a Tanya. Fui al bar y pregunté si tenían cócteles sin alcohol. Me dieron una lista de lo que tenían, por suerte tenían mojitos vírgenes, así que pedí uno con otra cerveza. Después de tomar las bebidas me dirigí hacia donde estaba sentada Bella, ella estaba distraídamente acariciando su vientre.
"Me alegro de encontrarte aquí esta noche" le sonreí. "Te mandé a hacer esto" le dije, entregándole el cóctel. Ella lo tomó mientras yo me sentaba en la silla junto a la de ella.
"¿Con quién estabas? Es muy hermosa", dijo Bella, su tono plano.
"Esa es la Dra. Denali" dije, notando su tono y actitud, ¿estaba celosa?
"¿Tu amiga la Dra. Denali?" Asentí.
"Pensé que era un hombre" dijo sonrojada.
"¿Estás celosa?" ella asintió.
"No tienes por qué estarlo cariño, sólo tengo ojos para ti"
"Lo siento" se disculpó. No quería nada más que tomar su mano y consolarla, pero no podía.
Bella todavía parecía incómoda, "¿Pasa algo más?" le pregunte.
"Vi a la Dra. Lee"
"¿Y?" Insti.
"Ella se sorprendió al verme embarazada. Dijo que eras un mal médico al dejarme quedar embarazada, también dijo que podía morir" ¿Qué carajos?
"No sé por qué dijo esas cosas, Edward" Las lágrimas comenzaron a acumularse en sus ojos.
"Oye, por favor no llores amor. Eso no es cierto, Bella, tienes que creerme. Nunca he arriesgado la vida de una paciente. Si algo ha salido mal es porque el paciente no ha seguido mis instrucciones de tratamiento, no porque la haya puesto en peligro deliberadamente" dije con sinceridad. "No sé por qué te dijo eso, pero estoy decidido a descubrirlo. Todo esto es muy inusual" le prometí.
Bella terminó su bebida, colocó el vaso en la mesa y se levantó, "Tengo que hacer un poco de relaciones públicas" dijo y me dejó sentado allí reflexionando y pensando en todo lo que había dicho.
No entendía por qué la Dra. Lee le daba tanta importancia a esto. ¿No sabía que esos resultados en el expediente de Bella no eran suyos? ¿No vio la diferencia en los úteros? Quiero decir, la mayoría de los úteros tienen aproximadamente el mismo tamaño, pero dependiendo de si han tenido hijos u otros factores, el tamaño cambia. Cuando regresemos a Seattle, miraré el expediente de Bella otra vez y consultaré con Tanya nuevamente. Algo está pasando aquí, tengo la sensación de que la Dra. Lee le estaba mintiendo a Bella y estoy decidido a descubrir por qué.
Me quedé allí sentado un rato. No sé cuánto tiempo había pasado, pero quería otra cerveza así que volví al bar. Miré alrededor de la habitación y encontré una mesa vacía. También fui y tomé algunos entremeses. Mientras comía miré alrededor de la habitación buscando a Bella, pero no la vi, estaba demasiado lleno el salón.
Algunos colegas me vieron y comenzaron a caminar en mi dirección, "Hola Cullen, ¿qué hay?" Preguntó James quien a veces se olvida de actuar según su edad.
"No mucho y tú" dije en general.
"¡No mucho, eres un mentiroso!" dijo Mike. "No sé a qué te refieres"
"Fui a tu habitación anoche para ver si querías pasar el rato con nosotros, pero estabas, um... ocupado", dijo.
"No pensé que lo tuvieras en ti, Edward" dijo Jared.
"¿Qué diablos están insinuando?" Estaba un poco molesto por sus payasadas.
"Nunca hubiera pensado que vería el día en que engañaras a tu esposa" dijo James con toda seriedad.
"¿Esposa? No estoy casado" dije.
"Joder, como que no Edward, llevas cinco años casado" añadió Jared.
Cierto, ¡no lo sabían!
"Chicos, no estoy engañando a nadie", dije. Me miraron como si me hubieran crecido dos cabezas.
"Estoy divorciado" confesé finalmente. Ahora estaban definitivamente sorprendidos.
"¿Te divorciaste de Leah?" Preguntó Jared, yo asentí. "¡Joder!" exclamó.
"¿Desde cuándo?" preguntó James.
"Alrededor de un mes" dije, tomando un trago de mi cerveza.
"Wow Edward, no sé qué decir" murmuró Mike.
"No tienes que decir nada" le aseguré.
"Lo siento hombre, sé que estabas enamorado de ella. ¿Qué pasó?" Preguntó James, bromas a un lado.
"Nos peleábamos mucho, ella me menospreciaba y abusaba verbalmente" admití un poco avergonzado. Me miraron, pero no dijeron nada, no necesitaba su lástima, lo pude ver en sus expresiones. Me estaba cabreando, quería volver a la habitación con Bella.
"¿Cómo estás realmente?" preguntó James.
"Estoy bien chicos, no tienen que preocuparse por mí, todo termino amistoso entre nosotros. Todavía tenemos a los niños en común" les recordé y ellos asintieron.
"Tres hijos tienen verdad?" Pregunto Mike, yo asentí.
Hacían días que no veía a los gemelos, Leah siempre los tenía con ella o estaban con su mama. Los únicos días que se los dejo a mi mama yo estaba en cirugía y luego de guardia y cuando llegue a verlos estaban dormidos. Al despertarme a la mañana siguiente ya no estaban.
"Bueno, si necesitas hablar de eso, debes saber que estamos aquí para ayudarte, Edward" dijo Jared, los otros dos asintieron con la cabeza.
"¡Me alegro de que hayas dejado de ser un mojigato!" Dijo James, dándome palmaditas en la espalda.
"Encontraste un pedazo de trasero y lo follaste" aclaró Mike.
No me gustó la forma en que hablaban de Bella, pero la verdad es que no sabían toda la historia y realmente no quería contarles nada.
"¿La conocemos?" Preguntó Jared, negué con la cabeza.
"Está bien, creo que ya hemos torturado lo suficiente al hombre por una noche" dijo Mike elocuentemente, todos estuvieron de acuerdo y se despidieron.
Sabía que solo estaban jugando, pero no éramos tan cercanos como antes, así que no me sentí cómodo contándoles todo lo que me había pasado, realmente no podía decir nada sin exponer a Bella.
Miré la hora y vi que eran más de las diez y media, fui a donde estaban los camareros y pregunté si podían servirme algunos de los aperitivos en una caja para llevar. Uno de ellos asintió y fue a buscarme la caja. Revisé todas las opciones y comencé a poner cosas en la caja para Bella. El camarero llegó incluso a conseguirme salsa de chocolate para la fruta que había cogido. También me dio otra caja para que no mezclara la fruta con el resto de la comida.
También pedí otro mojito virgen para llevar. El barman lo hizo y lo colocó en un vaso de plástico de 32 onzas cubierto con una tapa. Yo me tomé tres cervezas y estaba un poco picado, pero no completamente borracho. Estaba más que listo para regresar a la habitación. Sólo necesitaba encontrar a Bella. Le di propina al camarero y fui a buscarla.
La busqué por todas partes. Bella, ¿dónde carajo estás?
Salí del salón de baile y finalmente la encontré, estaba en un rincón, la Dra. Lee frente a ella, y no parecía amigable. Cuando me acerqué noté que el rostro de Bella estaba manchado de lágrimas. Este es el colmo, no necesito que Bella esté estresada, ¿qué diablos le pasa a esta mujer? Me pregunté mientras caminaba hacia donde estaban.
"Señora. Swan, ¿está todo bien?" Pregunté mientras me acercaba.
Bella me miró, sus ojos color chocolate llenos de lágrimas, "¿Estás herida o tienes dolor?" Pregunté cambiando al modo médico, ella no era cualquier mujer embarazada ni ningún otro paciente, esos eran mis bebés en su vientre.
"Sí, parecía un poco débil y por eso vine a ver que le pasaba" dijo la doctora mirándome. Miré a Bella por encima de su cabeza y ella sacudió la cabeza ante la declaración de la doctora Lee.
Sabía que estaba mintiendo: "¿Estás mareada?" pregunté.
"Un poco, pero creo que es porque todavía no he cenado nada" dijo.
"Creo que voy a ir a mi habitación y pedir algo del servicio de habitaciones" dijo Bella.
"Gracias Dr. Cullen, por todo" dijo con indiferencia.
"No, no, necesito asegurarme de que está bien. Necesito comprobar su presión y demás, por favor" le rogué.
"Claro" dijo Bella, y se alejó de la esquina.
"Gracias Dra. Lee por su preocupación, pero prefiero ser la paciente del Dr. Cullen" dijo y comenzó a alejarse de nosotros.
Me quedé allí atónito por sus palabras, miré a la Dra. Lee y ella tenía una mirada serena, pero la conocía lo suficientemente bien como para saber que era solo una fachada.
"Buenas noches, doctora Lee, tengo una paciente que atender" dije y me apresuré a alcanzar a Bella.
Tomamos el ascensor en silencio, las puertas finalmente se abrieron y para mantener nuestra mentira entramos a las habitaciones contiguas por separado. Dejé todo en la mesita de noche en la habitación de Bella y fui a buscar el manguito de presión, iba a revisarla de verdad. Crucé la puerta contigua abierta y encontré a Bella sentada en la cama, con la cabeza entre las manos llorando.
"¿Qué pasó realmente Bella? ¿qué te dijo?"
"Ella me dijo lo mismo que antes, que eras un mal doctor, que no debería haber quedado embarazada, que había una razón" dijo Bella.
"¿Te dijo ella el motivo?" Pregunté curioso.
"No", respondió ella.
Todo esto me parecía raro, definitivamente llegaría al fondo del asunto.
"No sé por qué dijo esas cosas, Edward" dijo Bella nuevamente mientras las lágrimas brotaban de sus ojos.
"Oye, por favor no llores amor" le dije, agarrando sus mejillas y secándole las lágrimas con mis pulgares.
"Te puedo asegurar que no te pasará nada a ti ni a los bebés, Bella. Eres una joven sana de veinte años, llevarás a estos bebés a término, darás a luz y serás la mejor madre del mundo" le aseguré.
Bella cerró el espacio entre nosotros y me abrazó. La abracé con fuerza contra mi cuerpo e inhalé su aroma, siempre olía tan bien. Le acaricié la espalda y le susurré palabras tranquilizadoras al oído.
"Confío en ti Edward" susurró Bella en mi cuello.
Ella rompió el abrazo y revisé su presión, afortunadamente estaba normal. Me senté a su lado después de colocar el manguito de presión en una silla cercana. Bella me miró a los ojos y comenzó a besarme. La rodeé con mis brazos y le devolví el beso efusivamente. Besar a Bella es una experiencia religiosa, me encantaba perderme en sus deliciosos labios y su dulce abrazo. Solté sus labios cuando empezó a gemir y bajé con mis labios hasta su cuello y clavícula expuesta, Bella gimió y arqueó su cuerpo hacia mí. Mis manos se dirigieron a su cremallera, la bajé hábilmente y ella rápidamente sacó los brazos de las mangas y levantó las caderas para dejar caer el vestido al suelo.
Ella atacó mi boca nuevamente y comenzó a quitarme la ropa, la ayudé a completar la tarea y pronto solo estaba desnudo solo con mi ajustado bóxer negro. Agarré su cintura y nos acerqué a las almohadas, luego suavemente recosté a Bella de lado y continuamos besándonos y acariciando el cuerpo del otro. Unos minutos más tarde me aparté de su boca y miré su cuerpo en ropa interior.
Llevaba un conjunto de lencería rojo que abrazaba sus curvas a la perfección, el conjunto no dejaba nada a la imaginación. Acaricié sus costados y me incliné para besar su abdomen donde residían mis bebes y luego continué besando el resto de su cuerpo. Agarré sus senos y masajeé sus montículos hasta que sus pezones se endurecieron y ella comenzó a jadear. Luego me estiré la mano detrás de ella y le desabroché el sujetador, liberando sus tetas.
"Qué hermosa" susurré.
Me aventuré por su cuerpo y alcancé las cajas de comida. Las coloqué sobre la cama y las abrí cuando una idea apareció en mi cabeza, bueno en realidad llevaba unas horas pensando en ello. Agarré una de las albóndigas con parmesano y la sostuve delante de ella. Bella dio un mordisco y gimió, el sonido fue directo a mi polla. Sabía que estaban buenos, ya que comí muchos esta noche.
"Estoy un poco molesto contigo" le dije.
"¿Por qué?" Ella preguntó con la cabeza gacha.
"No cenaste nada"
"Lo siento" se disculpó.
"¿Te saltas comidas con frecuencia?" Pregunte.
"La cena, a veces" admitió. Le levanté la barbilla, "ya no puedes hacer eso, Bella, estás embarazada"
Ella asintió, "incluso si no tienes hambre, necesito que comas" le dije.
"Sí, Edward, no volverá a suceder, lo prometo" dijo.
Después de eso, tomé algunos pastelitos de carne Wellington y me reí entre dientes mientras ella devoraba cada uno de ellos.
"Joder, esto esta delicioso" dijo con la boca llena.
Antes de tomar la caja de frutas, le di los bocados de arándano y queso brie que estaban para morirse, mamá los prepara todo el tiempo para cualquier reunión y yo siempre me comía la mayoría de ellos.
Abrí la caja de frutas, ahora es cuando comenzará la diversión, pensé.
Agarré una fresa, la mojé en el chocolate y la llevé a la boca de Bella. Se lamió los labios y me miró con los ojos entrecerrados mientras sus labios se cerraban sobre la jugosa fruta. Parte del jugo corrió por su barbilla, me incliné hacia adelante y lo lamí. Tomé otra fresa y repetí el mismo proceso, esta vez ella no derramó nada de jugo, pero me comí el resto de la fresa y luego nos besamos. ¡Joder, sabía increíble!
Agarré una tercera fresa y cuando ella la mordió, parte del chocolate goteó sobre sus pechos desnudos, me reí entre dientes y me incliné para lamer el chocolate que convenientemente había caído sobre sus pezones, Bella gimió y su pecho se agitó mientras arqueaba su espalda hacia mí.
Se comió las dos últimas fresas, pero aún quedaba algo de chocolate, así que mojé dos dedos en la salsa y pinté líneas de chocolate sobre sus tetas, boca y estómago. Con los dientes, le quité las provocativas bragas y las arrojé al suelo. Mojé mis dedos en el chocolate nuevamente y continué mi obra de arte en su cuerpo mientras mis dedos recorrían su clítoris y labios esparciendo chocolate por todo su sexo. Lamí mis dedos mirándola a los ojos, Bella respiraba con dificultad, las sábanas estaban apretadas en sus puños mientras intentaba contenerse.
"Te ves tan deliciosa, cariño" le dije mientras presionaba mis labios contra los de ella y la besaba apasionadamente. Al mismo tiempo le limpié el chocolate de los labios.
Después de que le limpiaron bien la boca, continué el camino por su cuerpo, lamiendo la salsa dulce de su piel cremosa. Sabía aún más dulce con el chocolate, lamí hasta su ombligo. Finalmente llegué a sus labios inferiores, donde su clítoris cubierto de chocolate se asomaba entre sus labios.
"Edward, por favor" gimió.
Acaricié sus muslos y ella los abrió más para que yo pudiera acomodarme entre ellos. Con una sonrisa maliciosa, bajé la cabeza entre sus piernas y comencé a lamer y mordisquear su carne cubierta de chocolate. Me cautivaron sus gemidos y gritos de placer con cada movimiento de mi lengua sobre sus labios.
No cedí en mis movimientos sobre su carne, la comí como un hombre hambriento. Las caderas de Bella se arquearon de la cama mientras yo continuaba lamiendo y chupando su coño…
Que creen que hizo Edward despues? Los leo...
Nos vemos en el proximo capitulo!