[Annniversary]
El errático sonido de la plata sobre la copa hizo eco en la habitación y Sora se puso de pie, con una sonrisa pícara en el rostro mientras alzaba su copa de vino casi vacía, tosiendo por atención.
"¡Un brindis!" dijo, su voz llegaba a ambos extremos de la gran mesa. "¡Por el aniversario de Mimi y Yamato!" su mirada se movió a los dos que estaban sentados a su lado mientras los gritos resonaban alrededor de sus amigos.
Yamato sonrió y movió ligeramente la cabeza y giró viendo una especie de diversión desesperada en el rostro de su esposa. Su pulgar empezó a frotar los nudillos de Mimi rozando el aro de plata en su dedo anular, sus manos reposaban juntas en su muslo.
Mimi aún estaba masticando, había un poco de salsa en la comisura de sus labios. Llevaba también el brillo después de beber dos copas de vino - Yamato pensó - y había ese característico alce en sus cejas cuando estaba feliz...devastadoramente irresistible.
Y sin advertencia, se inclinó y lamió la mancha en su boca, sonriendo cuando se alejó para ver aquellos ojos mirándolo grandes. "Feliz sexto aniversario, amor." Yamato susurró, inclinándose para otro beso.
Justo antes de encontrarse, Mimi respondió con un, "Feliz quinto aniversario, cariño."
Oh bueno, ya pueden discutir eso después, Yamato aún estaba terco en contar su compromiso de un año. Por ahora solo optó por juntar sus labios, con sabor a albahaca y Pinot.
"Por favor, acabamos de comer." La improvisada y olvidada MC agita su mano indignada, fingiendo arcadas todo el tiempo.
Yamato le recuerda a su casi ebria amiga que nadie le pidió que hiciera un brindis, pero Sora mueve su muñeca con desdén, prosiguiendo, etiquetando a Yamato como un 'cachorro domesticado y enamorado' y a Mimi como su 'adorable dueña' en su borroso tributo. Terminando con un, "Así que alcemos nuestras copas por esta pareja. ¡Que tengan una larga y próspera vida, y porque algún día dejarán de someternos a sus demostraciones públicas de afecto anuales!"
Todos se ríen y beben en el momento justo, mientras la noche vuelve a convertirse en bromas generales y ponerse al tanto de todo lo que se hayan perdido de la vida del otro.
Fin