¡Hola gente! Volví con un segundo capítulo, esta vez me voy a enfocar más en la vida de Gale, y quiero hacer una aclaración sobre el personaje. En esta historia, Gale va a comenzar como una personara muy machista y con pensamientos muy firmes al respecto, pero mi intención es ir cambiándolo poco a poco, haciéndolo entrar en razón, pero sin alterar el núcleo del personaje, esa va a ser parte de su evolución, así que téngale paciencia.

Espero que les guste el capítulo, nos vemos al final.

¡Besos!


Capitulo Dos: Las Vueltas De La Vida.

Gale Hawthorne no se consideraba un tipo romántico, no lo entendía. Era un tipo sencillo, practico, si te gusta una chica, vas y le habrás, si la chica te acepta, entonces la invitas a pasear un rato como excusa para seguir coqueteando con ella, si ella sigue estando dispuesta, la llevas al montón de escoria para cerrar el trato. Después de eso cada uno toma su camino, a veces volvía con unas de ellas debes en cuando si de verdad le gustaba, pero en su mayoría solo las llevaba una vez. Esa era su rutina en cuanto a las "citas", aunque hubo ciertas chicas en las que ni tuvo que proponer un paseo antes de ir al montón de escoria. Como dijo, era así de fácil, ir directo al grano y no dar vueltas. Después de todo ¿Por qué molestarse en más? ¿Enserio importaba que les llevaras flores, que la lleves a diversos lugares y decirles cosas lindas sin la intención de seducir? Ellas ya sabían que eran hermosas, por algo él se interesó en ellas, y no era muy difícil de adivinar si un montón de chicos te piden salir ¿Por qué hacer tanto escándalo sobre eso? ¿Por qué hacerle creer que serían las únicas e indicadas, cuando claramente no era así? Él por lo menos era sincero, no juraba lealtad incondicional o prometía que nunca se sintió así con nadie más. Tampoco entendía por qué los chicos se esforzaban tantos para saber todo de esas chicas ¿De qué servía? No eran almas gemelas, o por lo menos muchos no lo sabían, como para estar interesados por todo de su cita, era una pérdida de tiempo y no creía que a ellas no le importaba conocerlo como a él tampoco le interesaba.

Para él era una cuestión de ser sencillo, si sentías la "comezón" en tus partes a causa de una chica, solo búscala, coquetea con ella y si ella lo acepta, te rascas tu "comezón" junto con la de ella. Ese había sido su juego desde que tuvo trece, donde una chica de diecisiete años lo sedujo para llevarlo al montón de escoria. Fue un evento confuso en realidad, y nunca entendió que vio esa chica en alguien que claramente era tan joven e inexperto como él (hubo momentos en los que pensó que ella creía que tenía quince, ya que incluso a esa edad él ya era más alto de lo que debía y eso ayudo a que se viera más mayor en comparación a los chicos de su edad), pero por algún motivo ella lo disfruto a su forma, parecía demasiado orgullosa por hacerlo "hombre". Tiempo después, cuando adquirió más experiencia en el tema del sexo y los fetiches, descubrió que ella tenía el fetiche de estar con los niños más lindos y enseñarles a ser "hombres", y siguió con eso incluso cuando a ella ya sobrepasaba la mayoría de edad, algo un poco siniestro para él, tanto que lo comparaba con la obsesión que tenía el Jefe de los Agentes de la Paz, Cray, por las jovencitas.

El caso era que esa experiencia abrió un mundo nuevo para él, uno mundo desconocido en ese momento, porque si bien él había experimentado el placer de explorar su propio cuerpo, nunca había entendido de toda la dinámica de la masturbación, y gracias a ella lo logro entender. Experimentar ese nivel de placer fue una de las cosas más fascinante en la mente de un Gale de trece años, la sobre carga de sensaciones acumulándose en él hasta llegar a explotar en millos de pedazos, dejándole la mente en blanco, donde no tenía que pensar en nada más que en lo fantástico que se sentía. Para ese entonces su padre ya había muerto en el accidente de la mina, y si bien su madre trato de hacerse cargo en alimentar a su familia, no podía hacer mucho por estar cerca de dar a luz; Gale al ser el hermano mayor y el que más años le llevaba a sus hermanos (Rory tenía ocho y Vick seis) tuvo que tomar un papel activo en la lucha para la sobrevivencia de su familia. Eso lo obligo a madurar de golpe, a ser el responsable de su familia, a saber, lo que era el estrés de llevar la comida en la mesa, y a preocuparse por todos los integrantes de su familia. De golpe se encontró siendo junto con su madre cabecilla de la casa, y todos lo tomaron con naturalidad, sin pensar que solo tenía trece años, aunque, de nuevo, la gente se confundía porque se veía de quince. El único momento en el que se pudo liberar de todo lo que le angustiaba, fueron esos minutos con esa chica en el montón de escoria.

Entendió que era una buena forma de sentirse bien de nuevo, por lo que intento de repetir la experiencia más veces. Por suerte contaba con amigos bastante mayores que él, que lo guiaron en el arte de la seducción y la prevención de embarazos (ya tenía que mantener a su madre y sus tres hermanos menores, no quería sumar un hijo propio a la ecuación); y con el tiempo fue desarrollando sus propios métodos, y con cada chica que veía, descubría más cosas de él mismo, qué le gustaba, cómo le gustaba que le tocaran, cómo le gustaba tocar, y sobre todo, descubrió que tenía cierta obsesión a estar al mando, ser él quien las guiaba hacia el placer, hacer que ellas fueran las que explotaran en millones de pedazos, como le había pasado a él aquella primera vez. Y no era que no buscaba su propio orgasmo, pero se sentía más pleno cuando encontraba los puntos débiles de ellas y las hacia enloquecer, verlas perder el control y dejar que él se hiciera cargo, confiando en él lo suficiente como para hacerlas sentir más que bien, lo llevaba a que su propio orgasmo fuera más fuerte y placentero.

Quizás fue por eso que nunca tuvo problemas en convencer a las chicas a ir al montón de escoria, sabía que tenía cierta reputación con las chicas, sumado a su apariencia atractiva y muy varonil, hiso que siempre tuviera a alguien dispuesta a que lo acompañara. Es por eso que nunca necesito ser romántico, por lo que no sabía serlo y no entendía el motivo de tanto escándalo. Supuso que era una de esas cosas en la cual la gente le daba más importancia de la que debía tener, a él le había ido bastante bien si necesidad de esas cosas, y nunca sintió que las necesitara o que naciera de forma natural en él.

Ni siquiera pensó que lo necesitaría con su alma gemela, ella ya estaba destinada a él, por lo que no necesitaban toda esa tontera romántica para conocerse, solo tenían que ser ellos mismo y las cosas saldrían con naturaleza. Él estaba seguro de eso. Siempre creyó que no tendría ningún problema con su alma gemela porque ¿Qué podría salir mal? Todo estaba hecho para que saliera bien tarde o temprano. Desde pequeño, había querido conocer su alma gemela, estar con ella y hacer una familia, tenerla para él solamente; y a pesar de su reputación digiera todo lo contrario, él estaba dispuesto a dejarlo todo por ella, a hacerla feliz y velar por su bienestar.

Cuando cumplió quince años, que es la edad en la que oficialmente recibes una marca del alma, estaba más ansioso que nunca. Lo primero que hiso cuando se levantó ese día, fue correr al único baño de la casa para tener algo de privacidad mientas se desnudaba para buscar su marca frente al espejo. Fue fácil de encontrar, estaba en su mulo derecho, demasiado cerca de su entre pierna, solo lo pudo ver cuando se sacó su ropa interior, era la cabeza de un ciervo macho con astas grandes, mirando al frente con ojos majestuosos, la marca abarcaba la cabeza y el cuello del ciervo, era de un marrón claro, y lo curioso del ciervo era que rodeando la marca se veía una estela que salía del animal, de color naranja claro y parecía que formaban flores a su alrededor, era bastante bonito. Pero además le daba una sensación muy erótica tener su marca en el muslo y muy cerca de su ingle. Movió sus dedos para pasándolos por su marca, y al instante se sintió muy sensual, como si fuera un cazador divirtiéndose con su presa antes de devórala, lo hacía sentir poderoso, imponente, y sin embarga también sintió paz y le dio claridad mental, como si su mente pudiera enfocarse en una cosa puntualmente y lo demás desaparecía de su enfoque. Era increíble sentirse así, de solo pensar que su alma gemela tuviera esa marca ahí, le hiso fantasear en lo bien que se sentiría tocarla en la piel de ella, en lo íntimo que seria.

Feliz con su descubrimiento, se vistió y uso el baño antes de volver a su habitación a cambiarse. Su habitación la compartía con sus dos hermanitos, por lo que la privacidad era un lujo que no tenía, pero como era el primero en levantarse y el ultimo en irse a dormir, generalmente no le molesta cuando se cambiaba de ropa. Esa vez, sin embargo, se despertó tan emocionado y al ir al baño hiso tanto escándalo, que despertó a sus hermanos por accidente, Vick se fue a dormir inmediatamente, indiferente al entusiasmo de su hermano mayor; pero Rory no se durmió tan rápido, dio vueltas en la cama que compartía con su hermanito, tratando de volver a dormir, y cuando estuvo a punto de lograrlo, escucho a su hermano mayor de nuevo, esta vez entrando a la habitación. Se quedó mirando a su hermano con odio por interrumpir su sueño por segunda vez, mientras que Gale, ignorando la mirada de su hermano, fue al armario donde tenían sus ropas, ubicado al frente de las dos camas de la habitación, se desvistió de nuevo dándole la espalda a sus hermanos, y se cambió con ropa de diario. Y fue en ese momento que Rory vi algo raro en la cadera de su hermano, su mente medio adormecido, y con la escasa luz, no supo distinguir que era, pero de la distancia parecía una X marrón. Era raro, y curioso por saber que era, se asomó a Gale en silencio para verla mejor, una vez que estuvo lo suficientemente cerca, distinguió que era un arco y una flecha, pasos sus dedos para tocarlo asiendo que su hermano pegara un salto que casi parecía que iba a colgar del techo.

_ ¡¿Qué haces?! _ se le escapo un sube grito asustado a Gale, dándose la vuelta para encarar a su hermano.

_ ¿Te hiciste un tatuaje? _ pregunto Rory en lugar de responder, todavía estaba soñoliento y no atrapa las ideas bien.

_ ¿Qué? _ pregunto confundido.

_ ¿Qué si te hiciste un tatuaje? Es lindo, pero no creo que a mamá le guste que te hayas hecho uno.

_ ¿De que estas hablando? _ Rory puso los ojos en blanco por la falta de cooperación de su hermano.

_ Oye, sabes que yo no le voy a decir nada a mamá, pero ten más cuidado, Vick todavía es muy chiquito para mantener la boca cerrada. _ dijo encogiéndose de hombros, sin relacionar que solo le llevaba dos años a su hermanito, y que por más que le gusta refregándoselo a la cara a su hermano, no era tanta diferencia de edad como le gustaba creer. Gale por otra parte seguía sin entender a lo que se refería su hermano.

_ Enano, mejor vuelve a dormir, porque nada de lo que dices tiene sentido.

_ Estoy hablando del arco y la flecha que tienes en tu espalda, tonto.

_ ¿De estas…? _ se interrumpió al pasar su mano por donde su hermano le había tocado antes, donde fue abrumado por una corriente de emociones.

Esta vez las emociones que lo recorrieron fueron mucho más intensas, mientras que en el baño había sentido control y paz, ahora era un descontrol total, era desquiciante el caos que se cerraba sobre él, donde no importaba cuanto trataba de poner orden, todo seguía siendo una locura. Se lo tomo como un desafío, ver quien iba a ganar, su control o el caos que sentía, una competencia para saber quién era más fuerte y más capaz de sobresalir. Era como un juego en que no quería perder, donde lo tentaban a dejarse llevar, pero sabía que no podía o se perdería para siempre, e igualmente era delicioso sentir esa tentación, tocando cada rincón de su cuerpo y exponía sus puntos débiles. Era tremendamente atractivo y juguetón. Se obligó a sacar su mano para volver a la normalidad, posando su mirada en su hermano, que todavía lo miraba atentamente, confundido porque Gale estaba actuando tan raro. Sin decir palabras, volvió al baño, busco algún espejo en el camino y se posiciono frente al espejo del baño de nuevo, esta vez uso el otro espejo para ver qué fue lo que le dio todas esas emociones. Y tal como su hermano dijo, en el centro de su cadera, al borde de su ropa interior, tenía un arco y una flecha marrones en forma de X.

Gale no lo podía entender, él no se había hecho un tatuaje como había insinuado su hermano, y ya tenía una marca del alma, en su muslo, por lo que no entendía que era esa cosa. Pero al tocarla otra vez volvió a experimentar las mismas sensaciones, de la misma forma que sentía cosas cuando tocaba el ciervo, lo que solo se podía concluir en que era también una marca del alma. Eso era muy raro ¿Acaso tenía dos marcas de alma? ¿Qué quería decir eso? Nunca en su vida había escuchado algo como eso, las personas tenían uno o ninguna, no dos ¿Qué significaba eso? ¿Era algo que debía preocuparlo? No sabía que pensar de todo esto.

Mientras se examinaba de nuevo, no noto que su hermano estaba en la puerta del baño mirándolo, esta vez ya se sentía más despierto y pudo pensar con más racionalidad.

_ Perdón, cierto que hoy cumples quince, estaba tan dormido que no me di cuenta. Es una linda marca. _ Gale giro la cabeza para mirar a su hermano, asistiendo en reconocimiento. _ Por cierto, feliz cumpleaños hermano. _ se metió al baño para darle un suave abrazo, que su hermano mayor respondió con un poco más de fuerza.

_ Gracias, Enano. _ le dio unas palmaditas en los hombros mientras se separaban. _ Deberías ir te a dormir, todavía falta un poco para ir a la escuela.

_ Ya da igual. Hasta que vuelva a quedarme dormido, ya va a ser la hora de despertarme, mejor que quedo esperando a que mamá también se despierte y así la ayudo a hacer el desayuno. _ dijo indiferente.

_ ¿Quieres acompañarme al bosque? _ no se sabía que lo motivo a preguntar eso, supuso que, con la sorpresa de tener dos marcas, no tenía mucho espacio para pensar, lo que más necesitaba en eso momento era salir al bosque, pero tampoco quería estar solo para estar con sus pensamientos. Y se sintió responsable de que Rory estuviera despierto, al fin y al cabo, él hiso un escándalo que lo despertó, además de que su madre no se levantaba hasta dentro de un par de horas, y no quería que su hermano tuviera que esperar tanto tiempo. Por otro lado, Rory ya tenía nueve, estaba a una buena edad para que lo acompañara al bosque y le ayudara con algunas cosas, a Gale le serviría tener unas manos extras y su hermano podía empezar su entrenamiento para sobrevivir al bosque, el padre de ellos le había enseñado a Gale desde esa edad; de esa forma se aseguraba de que siempre hubiera alguien en la familia que cazara.

_ ¿En serio puedo acompañarte? _ sus ojos brillaban con ilusión.

_ Claro.

_ ¿Y qué pasa con Katniss? _ Gale negó con la cabeza.

_ Ella no va a ir, tenía cosas que hacer con su familia, no me acuerdo qué ¿Quieres venir o no?

_ ¡Si! _ y con eso salto hacia su hermano de nuevo para otro fuerte abrazo. Gale soltó una risita por el entusiasmo de su hermano.

_ Ya, ya. Ahora vete a cambiar. Ponte algo cómodo porque vamos a caminar mucho. Y un abrigo, hace bastante frio ahí en el bosque. _ con eso su hermanito salió corriendo a la habitación, dejándolo solo en el baño.

Gale se miró al espejo tratando de reorganizar sus ideas, pero al no tener éxito decidió mojarse un poco la cara para lavarse el poco rastro de sueño y volvió a la habitación para terminar de vestirse.

Una vez que ambos estuvieron listos, dejaron una nota a su madre para avisarle que salía con Rory, y salieron de la casa, yendo al punto de la cerca que podían pasar. Caminaron hasta la línea de árboles, donde se detuvieron en uno que estaba medio hueco para sacar el arco y las flechas que tenía, si bien no iba con intención de usarlas, quería estar listo por si pasaba algo, el bosque podía ser peligroso a veces. Rory le laso una mirada con curiosidad.

_ ¿Qué? _ interrogo Gale.

_ Es que es raro verte con un arco… ¿Sabes al menos como usarlo? _ medio bromeo y medio pregunto con curiosidad, con una sonrisita traviesa en sus labios. Su hermano mayor solo rodeo los ojos, mientras le daba un empujoncito como castigo por su atrevimiento.

_ Te are saber, Enano, que soy bastante bueno.

_ ¿Seguro? No quiero que me dispares una flecha por accidente. _ siguió con la broma.

_ ¿Y quién dice que sería un accidente? _ pregunto con una ceja alzada y una sonrisa malvada.

_ Ambos hermanos se miraron desafiantemente unos momentos, antes de soltar una fuerte carcajada.

_ Vamos, Enano. Tenemos mucho que hacer. _ dijo Gale después de un rato, todavía riéndose, continuando con su camino hacia la línea de trampas que tenía.

_ Pero ya en serio ¿No es raro que tengas un arco?

_ ¿Y por qué sería raro?

_ Es que eres más de las trampas, hasta que conociste a Katniss nunca usaste uno. Quiera saber que tan bueno eres.

_ Soy bastante bueno, aun que Katniss es mucho mejor, pero me las arreglo para dar en el blanco la mayoría de las veces. _ y era verdad, a pensar que solo aprendió a usar el arco hace solo unos meses, era bastante bueno, según Katniss, quien lo había elogiado al respecto. La pequeña niña de doce años tenía un carácter fuerte para ser tan pequeña, era una maestra dura, o tal vez él era un alumno malo al resistirse que una niña tan pequeña lo regañara.

Lo cierto era que fue toda una sorpresa haber conocida a Katniss hace tres meses atrás, nunca imagino que la niñita que atrapo mirando su trampa hubiera resultado ser una buena compañera de caza. Ambos llegaron a un acuerdo, él le enseñaba todo lo que sabía de hacer trampas y ella le enseñaba a usar el arco para cazar. Fue un buen acuerdo y resulto que los dos eran un buen equipo, teniéndose más confianza poco a poco, compartiéndose sus cargas. De verdad que le caía bien esa niña, había una fuerza y valentía en sus ojos grises que solo se podía ver en una sobreviviente, en alguien que no estaba dispuesta a dejarse vencer. Él se identificaba mucho con eso, es por eso que despertaba en él unos instintos protectores que trataba de contener, no creía que a Katniss, con la poca paciencia que tenía, le alegrara eso que se pusiera sobreprotector con ella. Y aunque era todavía una niña, podían compartir juntos las durezas de ser los principales proveedores de sus familias, no expresaban mucho eso con palabras, pero podían entenderles con solo simples gestos. Con la colaboración de ambos, pudieron sobrevivir bien al invierno en el que se encontraban, sin duda mejor que el invierno del año anterior, justo después de las muertes de sus padres en las minas.

_ Y si eres tan bueno con el arco ¿Por qué todavía pones trampas? _ cuestiono con curiosidad.

_ Porque el invierno todavía no acaba, no hay muchos animales dando vueltas, y cazar así nos llevaría mucho tiempo, es mejor poner las trampas así ahorramos algo de tiempo, y no terminamos tan tarde y podemos ir a la escuela. _ explico Gale con paciencia. _ Además, si bien estoy mejorando, me falta bastante para arreglármelas yo solo, no puedo recargar lo suficientemente rápido, es ese tiempo es fundamental para cuando cazas. _ Rory asistió comprendiendo lo que estaba diciendo.

_ Y cuando seas mejor ¿Me enseñaras a mí a usar el arco? _ pidió mirándolo con ojotos de cachorrito. Su hermano mayor soltó una risa pequeña antes de pasar su mano por el pelo de Rory despeinándolo.

_ Ya lo veremos cuando seas más mayor, por ahora concentrémonos en las trampas y en lo que podemos recolectar. _ Rory volvió a asistir, esta vez con entusiasmo.

Recolectar las trampas no les llevo tanto tiempo, por lo que Gale aprovecho a darle una introducción rápida sobre cómo hacer trampas. Estaban pasando un lindo momento, y mientras Rory practicaba, se le vino a la mente la marca del alma que le había visto a su hermano mayor y pensando en eso no pudo evitar preguntar.

_ ¿Qué se siente tener una marca? _ Gale se sorprendió por la pregunta repentina.

_ No lo sé, todavía no logro acostumbrarme.

_ Debe ser lindo saber que estas destinado a alguien.

_ Si es lindo, pero… _ no sabía que lo estaba motivando hablar, pero sentía que tenía que sacarse este tema de encima, y si bien no podía contarle todo a su hermanito, si podía hablar lo suficiente sin confesar lo que le pasaba

_ Pero ¿Qué? _ lo miro con curiosidad.

_ Es que ¿No es raro que estés destinado solo a una persona?

_ ¿Por qué lo dices?

_ No lo sé, es solo que me estaba preguntando si todos solo reciben una marca, si no hay otras personas que tengan más.

_ ¿Más de una marca? Eso ya es codicioso. Pero igual será fantástico.

_ ¿Tú crees?

_ ¡Si! Seria súper divertido, tendría a dos personas con las con las que pueda jugar sin que Vick intervenga. _ era dulce ver la perspectiva infantil de Rory.

_ ¿Vick?

_ ¡Si! Él siempre interrumpe cuando estoy con mis amigos y no nos deja en paz.

_ No deberías ser tan duro con tu hermanito, él solo quiere jugar contigo. _ regaño con suavidad.

_ Puede ser, pero aun así todavía es muy niño, y no puede jugar con nosotros a muchos de nuestros juegos. _ dijo con aires de ser mucho más mayor que su hermanito. Gale lo miro con ternura, pero un poco preocupado, no quería que Rory creciera antes de tiempo, sus años de infantiles deberían ser aprovechadas al máximo antes de crecer, no era bueno adelantar etapas; Gale mismo sabía lo duro que era eso.

_ Solo tenle un poco de paciencia, ya crecerá y será tan grande como tu ¿Okey?

_ Okey.

_ Pero volviendo al tema ¿Qué pensarías si yo tuviera dos marcas?

_¿Las tienes?

_ No, solo tengo la que me viste, pero me dio curiosidad saber que pensabas. _ contesto rápidamente, tratando de disimular que nada le estaba pasando. Su hermanito se lo quedo mirando con duda antes de contestar.

_ Bueno, creo que sería asombroso que tuvieras dos marcas. Significaría que hay dos personas que te van a amor muchísimo, y si hay alguien que se merece que la amen mucho, ese eres tú. _ Gale se conmovió ante eso.

_ ¿Enserio lo crees?

_ ¡Si! Eres el mejor hermano. Desde que papá se fue, las cosas no se han visto bien en casa, sé que tú y mamá se esfuerzan mucho para que tengamos comida en la mesa y podamos salir adelante. Sé que para ti no fue muy fácil venir aquí al bosque a buscar comida, pero aun así lo haces de todas formas, todos los días, y te admiro por eso. Eres el mejor hermano mayor que podríamos haber tenido, incluso si seas una molestia gruñona la mayor parte del tiempo.

_ ¡Oye! ¡No soy una molestia gruñona! _ fingió indicación Gale.

_ ¡Si lo eres! ¡El otro día te enojaste con Vick y conmigo porque estábamos tratando de ayudar haciendo la comida!

_ ¡Fue porque confundieron el azúcar en polvo con la sal!

_ ¡No es nuestra culpa que se parezcan!

_ Además del hecho de que son blancos ¡Son muy diferentes! _ Rory rescindió a esa acusación sacándole la lengua y ambos volvieron a reírse. _ Ya enserio Enano, no sabía que pensabas así de mí.

_ Vick y yo siempre pensamos eso de ti, y si Posy pudiera hablar, también diría lo mismo. Te queremos hermano. _ su hermano mayor le dio una cálida sonrisa.

_ Yo también los quiero, Monstruitos.

Pasaron el resto del tiempo hablando de otras cosas, a Gale le sirvió para darse cuenta que la verdad no estaba interactuando mucho con su familia desde la muerte de su padre. Él amaba a cada integrante de su familia, sin importan lo molestos que fueran (Rory), tremendamente traviesos (Vick) o llorones (Posy, pero porque todavía no llegaba al año, así que la perdona más rápido, y no tiene nada que ver con que sea su favorita, la nena de sus ojos; porque eso no era cierto, no importa cuánto Rory y Vick se quejaran de eso o cuanto su madre se riera de él) que eran. Había estado tan ocupado buscando tantas formas en las que podían sobrevivir, que ya casi no hacía nada más, excepto ir al monto de escoria; incluso su amistad con Katniss fue casi a la fuerza, motivados por la sobrevivencia, y los amigos que conservaba solo los veía en la escuela ya que no podía escapar de ahí incluso si lo quisiera. Su hacharla con Rory le mostro que se había estado perdiendo de cosas que les pasaba a sus hermanitos, y se regañó porque no podía seguir así, era momento de volver a reconectar con su familia, no solo ser el proveedor indiferente, sino ser de verdad un hermano mayor que ellos tres se merecían. Se juró que lo iba a hacer mejor mientras volvían a la casa pasa para desayunar con el resto de su familia (donde su madre y Vick lo felicitaron también por su cumpleaños, y Posy hiso una carita hermosamente tierna para llamar la atención de su hermano mayor) e ir juntos a la escuela después. En el camino Gale hablo más con sus dos hermanitos, tratando de ponerse al día con ellos, prometiendo estar más ahí para ellos.

Fue un buen cumpleaños, para cuando termino y se encontró en su cama, escuchando los suaves ronquidos de sus hermanitos en la otra cama, tuvo la oportunidad de pensar en sus marcas de almas gemelas. Quizás Rory tuviera razón, quizás tener dos almas gemelas no fuera algo malo, sino todo lo contrario. Tener a dos damas amándolo, tenía que admitir, sonaba tremendamente atractivo y sexy. Nunca se había imaginado por obvias razones el tener dos parejas a la vez, pero puede que sea algo bueno, hasta divertido, estar unido a dos personas que lo acompañaran en la vida. Y aunque sabía que la sociedad no lo iba a ver con buenos ojos, él descubrió que no le importaba nada de eso, nadie se podía interponer entre él y sus almas gemelas, él encontraría la solución para que los tres pudieran ser felices. Pero esto le sumo otra duda ¿Y si sus almas gemelas no estaban felices en compartirlo? Es decir, el destino había decidido que debía unirse a dos personas, pero no estaba seguro si pasara lo mismo con sus parejas ¿Cómo podían llevar una relación así? ¿Qué sabia el sobre relaciones en general? La verdad no tenía ni idea de nada, aun así, se volvió a decir que pase lo que pase, él se aseguraría que lo lograría, él estaba convencido. Además, no tenía sentido pensar más en eso, lo que tuviera que pasar, pasara, él no podía adelantarse; y hasta puede que no sea tan malo, puede que incluso sus almas gemelas también comparten dos marcas del alma también, uno para él y otro entre ellas, y si eso sucedía podía hacer las cosas más sencillas. Lo importante era esperar a ver qué pasaba, él enserio tenía fe en que todo saliera bien al final.

Se fue a dormir con esos dulces pensamientos en la cabeza, con fantasías de cómo serían sus almas gemelas, cómo se encontraría con ellas y cómo sería la vida para los tres. Y esa fue la primera noche de muchas.

Con el tiempo, Gale fue creciendo más y más, tratando de cumplir los propósitos que prometió en su cumpleaños, trato de estar más presentes en la vida de su familia, pasar más tiempo con sus hermanos, hablar más seguido con su madre, mostrar más facetas que la gruñona y seria que tenía desde la muerte de su padre. Resulto muy satisfactorio para él, el abrirse un poco más a su familia lo hiso disfrutar más de la vida, ya no necesitaba ir al montón de escoria para sentirse satisfecho y contento, y si bien todavía tenía preocupaciones y era un sostén importante para su familia, ya no lo sentía tan sofocante como antes, no lo agobiaba tanto. Otras de las razones por las que no fue al montón de escoria era porque se había decidido esperar a que sus almas gemelas se rebelaran, él realmente quería iniciar bien con ellas cuando se conocieran por primera vez, y con el buen ambiente que se generaba en la familia, no le fue difícil permanecer lejos. Pero eso cambio a los pocos meses.

Todo comenzó cuando Posy enfermo de golpe, la pobre beba de apenas un año tenía una enfermedad sin precedentes. Ni Gale ni su madre supieron cómo fue que paso, pero una noche notaron a Posy media mal antes de dormir, y para la mañana siguiente estaba ardiendo de fiebre. Fueron a la casa de los Everdeen corriendo, ya que la Sra. Everdeen era la curandera de la Veta, ella trato de explicarle que le pasaba a su pequeña hermanita, pero la verdad es que no entendió mucho, la medicina nunca fue lo suyo, pero lo que si entendió fue que si no hacían algo rápido, Posy podía morir. Gale le pidió a la Sra. Everdeen que hiciera todo lo que pudiera por ella, y por un tiempo pudo estabilizar a su dulce hermanita, pero los recursos que contaba la Sra. Everdeen no eran suficientes para curarla, por lo que comenzó a recaer un poco cada día. Él se sentía totalmente desesperado, ya no sabía qué hacer, así que tomo a su débil hermanita y fue al pueblo a hablar con el médico. Este le dijo lo que ya sabía, pero además dijo que la forma de curarla era con una inyección hecha por el Capitolio junto con un tratamiento que se tenía que hacer una vez a la semana por unos dos meses aproximadamente. Era muchísimo dinero. Era difícil recaudar ese dinero, pero Gale estaba decidido, no iba a dejar que su hermanita muriera.

Logro conseguir el dinero con mucho esfuerzo, pero le quemo los pocos ahorros que tenían. Las cosas se complicaron tanto que ya no bastaba lo que cazaba y recolectaba en el bosque para alimentarlos, así que tuvo que sacar muchas teselas para alimentarlos. Lo peor es que estaban cerca de la Cosecha, por lo que todo el Distrito estaba de los nervios como era común en esta época del año. Su hermanita estaba fuera de peligro, pero estaba recuperando lentamente, no tenían dinero, su familia tenía hambre y con la cantidad de tesela que había sacado tenía más miedo de lo normal a ser cosechado. Y como todas las veces que sentía miedo, este salió en forma de ira, ira hacia la mala suerte porque se enfermó su hermanita, ira había el medico que les cobro una fortuna el tratamiento, y lo que más ira le causaba era el Capitolio, por cobrar tan caro un medicamento tan necesitado y que de seguro no costaba tanto en realidad, ira por el maldito sistema en el que vivía que no le permitía mantener su familia sin hambre, ira por los malditos Juegos que era una amenaza para todos. Él solo podía sentir ira, y la única forma que encontró de desquitarla fue yendo al montón de escoria.

En retrospectiva, no estaba muy orgulloso de esa vez en particular, él había ido muchas veces antes de su cumpleaños número quince (que fue casi unos cuatro meses antes), pero siempre fue con la intención de divertirse, quizás indirectamente burlarse de una chica Comerciante por ser demasiado arrogante hasta que él les explora la cabeza, pero nunca fue con sentimientos tan negativos. Esa vez había sido brutal, solo quería descargar todo lo que sentía, y aunque la chica le aseguro que también la paso bien y que no se había excedido, de todas formas, se sintió sucio y malo. No estaba bien hacer esas cosas enojado, no era justo para las chicas y él no se sentía bien al final. Ese día aprendió esa valiosa lección, nunca hacerlo enojado, él tenía que tener la mente clara cuando lo hacía, no podía perder el control.

Después de eso trato de bajar los decibeles, y enfocarse en su familia, refugiarse en ellos. Les tomo un tiempo recuperarse de todo, pero lo lograron como familia.

A pesar de sus mejores intenciones, no pudo evitar volver con diversas chicas al montón de escoria, aunque nunca volvió con esos sentimientos tan negativos. Pensó que una raya más al tigre no iba a ser la diferencia, él ya tenía una reputación después de todo, y si bien él sabía que cuando encontrara a sus almas gemelas iba a romper el ciclo e iba a serles sumamente fiel, nada impedía que se divirtiera mientras tanto, no era como si fuera raro que uno disfrutara de los placeres de la vida con otras personas antes de encontrar a sus almas gemelas. También lo podía tomar como juntar experiencia que le sacaría mucho provecho cuando conociera a sus parejas, pero todo eso sonaba como una excusa para calmar la culpa que a veces aparecía en su conciencia. Tuvo un especial cuidado de que no vieran sus dos marcas del alma, por suerte la que tenía en la espalda era más fácil de ocultar, ya que solo tenía que tener especialmente cuidado de no dales la espalda estando desnudo, pero la mayoría de las veces ni siquiera se desnudaba, solo se bajaba lo suficiente los pantalones y la ropa interior, por lo que lo único que queda en evidencia fue su marca en el muslo derecho, y aun así no era como si estuvieran prestando mucha atención en eso cuando estaban en acción. De esa forma las chicas con las que salía solo sabían de la marca en forma de ciervo, mientras que su familia solo sabía de la marca en forma de arco y flecha de su espalda (su hermanito se le escapó a frente de su familia que él fue el primero en notar la marca del alma de su hermano mayor, incluso antes que Gale, ahí fue su supuesta capacidad para mantener la boca cerrada que tanto presumía que tenía Rory y que Vick no era capaz de hacerlo); de esta forma se aseguraba de que nadie supiera de que tenía dos marcas.

Otra cosa que cambio a causa de la enfermedad de Posy, fue se relación con Katniss. Si bien ellos eran unidos cuando salían a cazar, esto los había acercado bastante, ya que antes su costumbre era que una vez que pasaban la cerca y hacían sus intercambios en el Quemador o con los Comerciantes, cada uno se iba por su lado y no se hablaban ni concedían hasta que se juntaban de nuevo en el bosque. Pero con el estado delicado de su hermanita, le dio la posibilidad de ver más de la vida de su pequeña amiguita de lo que ella dejaba ver. Le dejo ver la situación depresiva en la que se encontraba la Sra. Everdeen, sus ojos azules eran los más apagados que había visto en su vida, y si bien él sabía que había hecho todo lo que estuvo en su poder para ayudar a Posy, no puedo evitar notar lo retraída que se veía cuando no estaba en modo sanadora, una vez que salía de ese modo, era una mujer muy callada, que nunca tomaba la iniciativa en nada de su vida. Era Katniss la que se ocupaba en no solo de llevar la comida a la mesa, sino que también era la encargada de hacer la comida, alimentar tanto a su hermanita como a su madre, cuidar de Prim, veía que estuviera bien vestida, que hiciera la tarea, que fueran a la escuela, si estaba enferma, y un montón de cosas más.

Katniss era la que hacía que la casa funcionara, era mucha responsabilidad para una niña que en ese momento tenía trece, y lo había estado haciendo desde los once. Esto lo hiso pensar en lo afortunado que era, puede que él tenía más bocas que alimentar, pero siempre conto con el apoyo de su madre, ella había ayudado con su pequeño negocio de lavandería en la Veta, y si bien eso no evito que Gale tuviera que salir al bosque, sirvió mucho para curar a Posy. Él no sabía a donde hubieran estado sin ese pequeño trabajo que realizaba su madre, a pensar de que estaba embarazada y había perdido a su marido en ese momento. Este no era el caso de la Sra. Everdeen, quien dejo a su hija de once años tuviera que hacerse cargo de su familia ¿Cómo pudo hacer eso? Es lo que se preguntaba siempre, una vez hasta se lo pregunto a su madre, donde comparo el comportamiento de las dos mujeres después de enviudar.

_ Es más difícil de la que parece, Gale. Yo no estaba muy lejos de ser como ella, en realidad. _ admitió su madre.

_ ¿Qué quieres decir? Tu no actuaste de la misma forma. _ su madre se quedó mirando a la nada, perdida en sus pensamientos, antes de míralo y responder.

_ Cuando tu padre murió, creía que moría con él. Perder a tu alma gemela de forma tan abrupta, sentir como una parte de ti se va con él, es una de las cosas más desgarradoras que he experimentado. No creí que sería lo suficientemente fuerte para vivir sin tu padre, pero cuando estuve a punto de encerrarme en mi cabeza, Posy me dio una patada, como si ella sintiera que estaba a punto de rendirme, pero no estaba dispuesta a que yo hiciera eso. Con esa patada me recordó que una vida se formaba dentro de mí, una vida que era mía y de tu padre, y no podía rendirme cuando ella me necesitaba tanto, me ayudo a recordar que al igual que ella, tenía a otros tres hijos fruto del amor que compartí con tu padre, y que él no hubiera querido que los dejara, que los abandonara cuando me necesitaban tanto.

Gale miro sorprendido a su madre, nunca espero esa convención de su parte, lo asusto lo cerca que estuvo de perder no solo a su madre con la tragedia de su padre, sino también a su dulce hermanita.

_ Aun así, hubo momentos que me costó seguir adelante, pero Posy al parecer es la niña más perseverante del mundo, porque cada vez que me estaba cerrando, ella me daba patadas hasta que saliera de mi mente. Casi parecía que me estaba regañando. _ soltó una pequeña risa al recordarlo. _ Fui muy afortunada al tenerla. Pero otras viudas no pudieron decir lo mismo. El caso de Violet no fue extraño, puede que a ella le cueste más porque la unión que compartía con Mart fue unas de las más fuertes que he conocido, y tenía que serlo si ella dejo atrás una vida más cómoda como Comerciante para estar con su alma gemela. Tener una unión tan fuerte tiene sus cosas buenas, como que casi puedes sentir lo que el otro siente, están tan coordinados que no necesitan mucho para entenderse, pero también tiene sus cosas no tan buenas, y una de ellas era que cuando uno muera, el otro se siente totalmente perdido, algo dentro de ellos desaparece con su alma gemela, dejan un vacío que nunca se llena. _ le dio una mirada seria a su hijo antes de continuar. _ No quiero justificar a Violet, porque eso sería injusto para sus hijas que fueron las que más sufrieron de todo esto, pero lo que paso no se sale sola, se necesita ayuda para eso, lamentablemente esa familia no cuanta con nadie más.

Pensó en las palabras de su madre, tenía mucho sentido, pero era muy injusto. Por eso tomo la decisión de relacionarse más con Katniss, se dijo que podía ser su amigo no solo cuando estaba cazando, sino también cuando estaban lejos de la cerca. Aquí su hermano Rory jugó un papel importante. Resulta que su hermano tenía la misma edad que la hermanita de Katniss, por lo que eran compañeros de cursos, gracias a él se enteró de cosas muy curiosas que le pasaba a la pobre Prim en la escuela, cosas que no le decía a su hermana para no preocuparla. Algo en lo que distinguían a las hermanas Everdeen es que eran tan distintas como el sol y la luna, tanto físicamente como en sus personalidades, mientras que Katniss era una más de la Veta, con sus cabellos castaños, ojos grises y tez trigueña, la otra podía pasar por una Comerciante con sus cabellos rubios y sus ojos azules. Mientras que Prim no paraba de hablar y ser amigable con todos; por otro lado, si le sacabas más de cinco frases cortas a Katniss, podías sentirte afortunado. Tenían más diferencias todavía, pero esas fueron vitales para encontrar una forma de juntarse más con Katniss.

Rory le conto que contrario a lo que uno pensaría, Prim no se juntaba con nadie en la escuela. El motivo era simple, por los prejuicios que tenían tanto la gente de la Veta como los Comerciantes. La pequeña niña se encontraba en el limbo de la escala social del Distrito, era muy rubia y pálida para la comodidad de los niños de la Veta, y demasiado pobre para los niños Comerciantes. Esto tenía mal a Prim, ya que otra diferencia con su hermana mayor, era que ella era una niña que adoraba hacer amigos y tener una vida más social. No le dijo nada a su hermana porque no tenía sentido ya que no podía hacer nada y solo la preocuparía más. Cuando Rory le menciono todo eso, trato de convencer a su hermano para que le diera una oportunidad a la niña para ser su amiga, y contrario a lo que pensaba, no necesito mucho para convencerlo; al parecer Rory ya estaba muy interesado en la pequeña Prim y estaba buscando la oportunidad de hablarle. Por la forma que él se sonrojo mientras Gale le pedía el favor, le dio a entender de donde venía todo este interés. El que Prim y Rory fueran amigos le abrió la puerta a la niña para conocer a otros chicos de la Veta, y con eso pudo hacer su propio grupo de amigos, en el cual Rony seguía siendo parte del grupo al considerarlo su mejor amigo. La niña estaba más feliz que nunca.

Toda esta situación género que Katniss y Gale se juntaran más seguido en sus casas para que sus hermanos pasaran el rato jugando o haciendo la tarea juntos. Sus familias se reunían cada vez más, uniéndolos a todos, hasta la madre de Katniss estaba mostrando mejoras, ya que la madre de Gale ayudo a que la Sra. Everdeen a que saliera de su depresión y pudiera enfocarse en cosas como su pasión a ser sanadora y ayudar a la gente, el haber atendido a Posy fue un buen recordatorio de la emoción que sentía cuando atendía a un nuevo paciente. Eso ayudo a que saliera de la casa, que hablara con más personas, todo con el apoyo de la madre de Gale, y con estas nuevas actividades hiso que hubiera cosas para relacionarse con sus hijas, sobre todo con su hija menor quien resulto tener la misma pasión por curar a los enfermos como su madre, con Katniss fue más difícil, ella todavía estaba muy rencorosa con su madre, pero por el bien de Prim no hiso más lio y le siguió el juego buscando las plantas y las hiervas que necesitaba.

Por otro lado, Katniss y Gale se fueron haciendo cada vez más amigo, compartiendo más de sus vidas, generando más unión entre ellos. Tanto así que Gale ya la tomaba a Katniss y a Prim como su familia, por lo que se propuso a protegerlas de los peligros de los que Katniss no era consiente. Él sabía de las miradas que recibían las dos chicas, sobre todo Katniss ya que era la mayor, ya había escuchado a muchos de sus amigos hablar de ella, no importaba que todavía tuviera trece y muchos de ellos tenían dieciséis. Él trataba de dejar en claro que la defendería de cualquiera que quisiera sobre pasarse con ella, pero los chicos de la escuela no le preocupaban, con un mensaje claro dejaron de molestar con eso; lo que le preocupaba eran los hombres adultos, quienes tenían intenciones más depredadoras. Las chicas estaban muy expuestas, eran dos niñas solos, no tenían familiares directos y con lo único que contaban era con una madre que no estaba en posición de defenderlas, no es que creyera que Katniss no pudiera defenderse con un arco, pero en su casa no tenía nada de eso y todavía era una niña pequeña. Hiso todo lo que estuvo en su poder para espantar a esas personas, sin alterar a ninguna de las chicas, puede que allá sido un poco paranoico, pero mejor prevenir que lamentar. Por suerte no pasó nada, Katniss en serio era una chica intimidante y no aceptaba la basura de nadie.

El tiempo siguió pasando, y para cuando quiso darse cuenta, Katniss ya estaba cumpliendo los quince años. Para Gale fue muy rápido, un día conoció a una niña molesta que fisionaba en sus trampas y al siguiente esta niña ya reviviría su marca del alma. Le dio nostalgia al pensar en todos esos años, como sus familias se fueran uniendo, apoyándose entre ellos, cómo las Everdeen encajaban tan bien con ellos. Ya era común para Gale volver a su casa y encontrar Prim jugando con sus hermanitos más pequeños mientras Rory fingía desinterés (aunque no les perdía la vista en ningún momento), o que su madre fuera a visitar a la Sra. Everdeen para pasar la tarde hablando o compartiendo chismes (y puede o no que Gale allá prestado más atención a esas charlas cuando podía, no porque le gustara el chisme como Katniss insinuaba, sino porque le gustaba estar informado por si pasaba algo en el Distrito). Habían pasado tantas cosas en esos pocos años que pareció que el tiempo había pasado volando.

Y todo hubiera estado bien como estaban las cosas, si no hubiera sido por una cierta tarde de verano, donde fue sacado de su eje y nunca volvió a su lugar.

Ese día ocurrió después de la Cosecha de las 73o Juegos del Hambre. Estos todavía no habían terminado, pero para al 12 ya le era igual, ya que sus tributos habían muerto hace rato en el baño de sangre, y todo tiraba a que iban a ser como la mayoría de los Juegos donde el ganador sería dado después de una pela final entre dos tributos profesionales, nada emocionante para el público cada vez más exigente del Capitolio. Pero eso no era algo en lo que pensara el Distrito 12. Los días después de la Cosecha son más alegres en el 12, para todos menos los familiares de los tributos obviamente, pero para el resto era un pequeño descanso hasta que tenía que preocuparse de nuevo por los Juegos del año que le seguía. El pequeño Distrito triste y desolado, por un mes se volvía más alegre, como si tuviera más color, donde la gente se relacionaba más, los que podían se deban el gusto comiendo cosas más caras, muchos jóvenes después de dejar de ser elegibles para la Cosecha decidían hacer sus uniones o sus matrimonios, otros simplemente celebraban el seguir vivo todavía. Era en esos días en que Gale y Katniss tenían más clientes, hasta recibían encargos especiales para algunos.

Ese día en particular no fue diferente a cualquiera otro, particularmente a un domingo cualquiera, habían tenido una mañana muy productiva, ya habían hecho sus intercambian en el Quemador y decidieron descansar tomando un almuerzo en el puesto de Sae la Grasienta, compartiendo un silencio cómodo entre ellos, cada uno en sus pensamientos. Todo era tranquilo y pacífico, hasta que Darius aperción a comer cerca de ellos.

Si Gale era sincero, de verdad que no le caía tan mal Darius, era un agente de la paz, pero a diferencia de los otros, este no era violento por naturaleza y tampoco era un abusador como muchos otros agentes. Era bueno para hacer tratos ya que era muy justo (consiguiendo un precio que solo estaba por debajo de Cray al ser el Jefe de los agentes), y trataba de ayudar a cuantos pudiera sin que los otros agentes lo vieran, y siempre que era totalmente necesario involucrar a los agentes era algo era bueno si él estuviera para ayudar. En general era un buen tipo, el único problema para Gale es que era un agente de la paz, sino fuera por eso hasta podían ser amigos y ganarse el respeto de Gale. Pero lamentablemente era un agente, y eso hacía que Gale se preguntara porque un tipo como Darius se haría un agente, quienes eran los responsables de reprimir a los Distritos en nombre del Capitolio, quienes oprimían a todos, quienes eran los que le entregaban al Capitolio los pobres niños para el entretenimiento de estos. Y por más que sabía que Darius no hacia esas cosas directamente, era parte del grupo que sí lo hacía, por lo que para Gale era igualmente responsable. Aun así, era el que menos odiaba de todos los agentes de la paz. Hasta ese día.

Darius le había pedido una porción a Sae la Grasienta y fue a comer cerca de ellos, todo estaba bien hasta que se los quedo mirando a los dos. Al principio lo ignoraron, sin querer prestarles atención, pero su mirada cada vez era más incómoda, y Gale no aguantando más, lo miro también, tratando de intimidarlo a su vez. Al mirarlo bien se dio cuenta que no estaba mirando a los dos, sino más particularmente a Katniss, eso lo inquieto aún más por algún motivo. Darius era muy inofensivo, nunca se le había escuchado en un escándalo con jovencitas como Cray, quien era conocido por "comprar" los servicios de las jóvenes de la Veta que se encontraban desesperadas por comida, obviamente seguía siendo un hombre y tenía sus amoríos con diversas mujeres, algunas casadas, otras por casarse, pero nada que incriminara al hombre como un pervertido o un depredador. Pero de todas formas a Gale no le agradaba como miraba a su amiga. Antes de que él tuviera que intervenir, Darius dirigió su mirada a él antes de darle una sonrisa traviesa.

_ Hey Katniss ¿Cuánto tiempo? _ salido Darius sin quitar su estúpida sonrisa para el disgusto de Gale.

_ Darius. _ contesto ella de forma cortante y sin interés.

_ Estuve sacando cuentas, querida, y ¿Puede ser que hallas cumplido quince en mayo? _ pregunto con aires de inocencia. Ante esto tanto Katniss como Gale se tensaron.

_ ¿Cómo sabes cuándo cumplo? _ contrataco ella con sospecha.

_ Oh querida, soy un agente de la paz, se muchas cosas. _ dijo queriendo hacerse el misterioso. _ Y porque lo escuche de tu madre el otro día. _ dijo con una media sonrisa por verlos tan nervios.

_ Como sea. _ ella miro a otro lado, para terminar con la charla.

_ Pero no has contestado a mi pregunta. _ dijo con tono juguetón. Ella solo rodeo los ojos.

_ Si, cumplí quince en mayo.

_ ¡Oh! ¡Que maravillosa noticia! Eso quiere decir que ya tienes una marca del alma ¿Verdad?

_ Puede ser. _ se volvió más cortante, hablar de su marca era algo que la incomodaba muchísimo y no hablaba de eso con nadie, ni con él.

_ ¡Qué cosa más increíble! Pensar que ya no eres la pequeña niña que venía para hacer sus intercambios. Ahora ya eres casi una mujer, de seguro de tendrás un montón de jovencitos babeando por ti. Espero que tu alma gemela no sea un celo. _ lo último lo dijo mirando a Gale y dándole un giño, como si él supiera algo que Gale no supiera todavía.

_ Nadie se fija en mí. _ no había pena en su tono, más bien alivio, era sabia el desinterés de ella por el romance.

_ Eso es lo que tú crees. _ volvió a usar un tono juguetón. _ Pero sé de unos cuantos chicos que matarían por ser tu alma gemela, o por simplemente tener un momento a solas contigo, si sabes a lo que me refiero. _ agrego con sus cejas moviéndose de arriba hacia abajo un par de veces para dejar en claro a qué se refería. Ella se sonrojo al entender. Gale al verla así entendió lo que Darius quería hacer, estaba jugando con ella, lo cual era muy divertido porque ella se ponía muy nerviosa cuando le hablabas de esas cosas. Decidió ver hacía donde iba todo esto.

_ No sé de qué estás hablando.

_ Pero querida, seguro que eres consciente de eso. _ estaba vez él se inclinó hacia ella, estirando la mano para juguetear con su típica trenza. Ella aparto su mano con un golpe en esta mientras le daba una mirada fulminante. Gale tubo que contenerse para no soltar una risa. _ Si yo fuera unos años menor y tu unos años mayor, de seguro que competiría por ti, bella. _ le dio un guiño juguetón. Katniss se puso aún más nerviosa de lo que ya estaba.

_ No me digas bella ni querida. _ Darius cerró los ojos con fuerza, pasando sus manos por su pecho, fingiendo que tenía un gran dolor en el corazón.

_ ¡No! ¡Eso dolió mucho! ¡Que cruel que eres! ¡Lastimando así los sentimientos de tu pobre admirador! ¡Eres toda una rompe corazones! ¡Ya conocerás un día a quien pueda ablandar a tu cruel corazón! ¡Ya verás! _ dramatizo él, casi gritando y llorando, haciendo se la victima mientras hacia un esfuerzo sobre humano por no reírse. Katniss estaban tan avergonzada por atraer las miradas de la gente de alrededor que se levantó sin más y salió casi corriendo del Quemador. Gale y Darius no pudieron evitarlo más y se largaron a reír con fuerza mientras ella salía enojada y avergonzada.

_ No puedo creer que todavía se incomode por eso. _ dijo Gale a Darius.

_ Si, puede verse como una jovencita, pero todavía sigue pensado como niña.

_ Igual todavía no es tan grande, tiene solo quince.

_ Puede ser… pero a esa edad ya comienzan los cortejos entre los jóvenes.

_ A Katniss no le importan esas cosas. Dice que no quiere casarse ni tener hijos.

_ Si, bueno… eso lo dice ahora, que tiene quince, puede que al conocer a su alma gemela cambie de opinión.

_ No lo creo, es muy terca cuando ella quiere. _ dijo con tranquilidad Gale. Darius lo miro un rato estudiándolo.

_ Gale, sin ánimo de ofenderá las creencias de Katniss, pero como tú lo dijiste, tiene quince años, tiene un montón de tiempo para cambiar de opinión, por lo menos en lo de tener pareja. Cuando somos jóvenes creemos que nuestros planes son infalibles, pero lo cierto es que todavía no conocemos mucho al mundo, y tampoco podemos saber las vueltas del destino, y estas cosas puede hacernos cambiar de opiniones, otras veces las afirman más. A lo que voy es que, si bien Katniss de verdad cree que quiere eso en la vida, todavía es muy joven, y siempre puede pasar que alguien le haga cambiar de opinión, sea o no su alma gemela, puede que conozca a la persona correcta que la ayude a enfrentar a sus miedos y traumas de otra forma, puede que sea más personas la que la ayuden. O como mínimo puede que despierte la "curiosidad" de Katniss.

_ ¿Su "curiosidad"?

_ Sí, ya sabes, siendo una chica tan hermosa, con esa actitud desafiante y autoritaria, atrae la atención de todo tipo de chicos.

_ Eso ya lo solucioné, nadie se le va a acercar con intenciones de aprovecharse. _ dijo con firmeza.

_ Tu no lo sabes, chicos jóvenes no son conocidos por ser sensatos particularmente. Y de todas formas no vas a poder impedir que ella se sienta atraída por alguien. _ Gale abrió los ojos sorprendido ante ese comentario.

_ ¡Por favor! ¡Ella no es así! ¡Todavía es muy niña para eso! _ Darius tenía una mirada divertida, pero cuando hablo sonaba serio.

_ Gale, tiene quince años.

_ ¿Y? Todavía sigue siendo una niña para pensar en eso.

_ Sí, claro, porque tú estabas esperando a ser más grande antes de involucrarte con chicas. _ comento sarcástico mientras rodeaba los ojos. El chico se sonrojo ante la mención indirecta de sus escapadas al montón de escoria, no era un secreto para el Distrito, todos lo sabían, incluida su madre y sus hermanos, pero nadie le reclamo nada al respecto, esta es la primera vez que lo hacían.

_ Eso es diferente… yo soy hombre. _ ante ese comentario, Darius soltó una carcajada y palmeo su hombro, como si le estuviera contando un buen chiste.

_ Niño, te voy a dar unos consejos y deberías escuchar o podían traerte muchos problemas en el futuro. El primero es que nunca excuses un comportamiento porque eres hombres, y muchos menos lo hagas frente a una mujer porque si lo haces puede que ese día pierdas tu derecho a tener hijos, si sabes lo que quiero decir. Las mujeres y los hombres no somos tan distintos como nos gusta creer, y tu deberías saberlo mejor que nadie, estas rodeado por mujeres asombrosas, y no solo estoy hablando de Katniss que encabeza la lista de mujeres increíbles por todo lo que hace por su familia. Estoy hablando también de tu madre. Dime niño, cuantas personas conoces que se negaron a entrar en depresión después de la muerte de alma gemela, yo los puedo contar con los dedos de una mano. Creo que nunca entenderás, con suerte, lo horrible que se siente perder a tu pareja de forma tan abrupta y repentina; yo tampoco lo he experimentado, pero es visto las consecuencias, la gente cambia después de eso, no son las mismas y si bien con el tiempo hay algunos que se recuperan lo suficiente para seguir, no siempre llegan a ser tan funcionales e independientes como lo es tu madre. Tienes mucha suerte que tu madre sea tan fuerte emocionalmente, otros niños no tuvieron la misma suerte que tú y tus hermanos, nunca subestimes la fuerza emocional, la que te da la voluntad de no solo sobrevivir, sino de vivir bien. Hay gente mucho más fuerte que no pude soportar un golpe emocional y se derrumba con eso, es importante ser fuerte de mente y corazón. _ paro para tomar un sorbo de agua.

_ Otra cosa que también debes saber _ continuo Darius. _ es que las mujeres sienten los mismos deseos que cualquier otro hombre. Es muy claro, si ellas no sintieran placer en todo esto, se negarían totalmente a tener sexo. Lo único diferente es que a ellas se les exige que no hablen o no muestren sus deseos tan abiertamente como nosotros, pero nunca dudes de que en sus cabezas no se puedan generar las imágenes más eróticas que se te pueda imaginar, hasta puede ser que sean más creativas, ya que muchas son beneficiadas con el don de una imaginación demasiado creativas. Una vez, cuando era más joven y estaba en otro Distrito, salía con una chica buena, era tierna y muy femenina, se avergonzaba si la alagabas mucho, tenía perfil bajo, la veías y nunca te imaginabas todas las ideas que tenía en su cabeza. Dios, aprendí muchas cosas con esa cosita bonita, cosas que jamás hubiera pensado. _ recordó él con una sonrisa. _ El punto es que, las mujeres también sienten la "comezón" desde temprana edad, por algún motivo llevas a tantas chicas al montón de escoria, y dime cuantas de esas chicas eran vírgenes cuando estuvieron contigo. _ Gale pensó en eso un momento, nunca se lo había planteado de esa forma, pero tenía razón, a él nunca estuvo con una virgen, todas tenía más o menos experiencias, y a pensar que nunca había ido con chicas más pequeñas que él, si salió con las que tenía su misma edad, algunas ya tenían quince cuando estaban con él y se notaba que tenían bastante experiencia.

_ Lo quieras creer o no Katniss sigue siendo una persona joven, y como todo joven, está llena de hormonas, por más que ella aun no lo sepa. Solo va a bastar que alguien le llame la atención, no importa quien, y la haga querer explora un mundo nuevo, un mundo que tú conoces demasiado bien. Y quieras o no, no vas a poder evitar que salga a explorar o con quien lo hagas.

Darius termino su discurso, dejando que Gale pensara en sus palabras, era mucho que asimilar, pero debía admitir la verdad de sus palabras. Katniss ya tenía quince, él mismo tubo su despertar sexual a los trece y no paro hasta entonces, él más que nadie sabía lo bien que se sentía y sabía que había chicas más jóvenes que ella que también sabían lo bien que se sentía, pero en su cabeza no podía sacar a la niña que él conoció hacía como hace tres años. Era imposible que esa niña creciera tanto en tan poco tiempo ¿Cuándo paso? Dentro de unos tres años más tendrá poco más de dieciocho y será su última Cosecha, ya tendrá la edad en la que los chicos se comprometen una unión o un matrimonio. No sería raro que al poco tiempo de eso ella cambiara de idea sobre casarse y decidiera hacer su vida con alguien. El pensamiento le sonaba totalmente mal en su cabeza, el imaginar a Katniss saliendo con alguien y que ese alguien la hiciera sentir cosas tan intensas que la hiciera tener su despertad sexual, lo inquietaba un montón de formas que no podía describir.

_ Pero ella sigue siendo una niña. _ insistió él, pero no sabía si para Darius o a él mismo.

_ Amigo, despierta, ya no es una niña, abre bien los ojos o te vas a perder algo frente a tu nariz. Ella no solo ya no es una niña, sino que también se está convirtiendo en una mujer hermosa, con una forma de ser impresionante, no bromeaba cuando dije que es una rompe corazones, y que hay muchos chicos que harían lo que fuera para que ella le dé una solo oportunidad, incluso hay algunos hijos de Comerciantes que son capases de tirar a la mierda todos sus prejuicios por ella. De verdad que, si no fuera por la diferencia de edad, no tendría miedo en admitir que estaría loco por ella. Mirarla bien y lo entenderás. _ Darius se levantó, le dio una pequeña palmada de despedida antes de irse a hacer sus cosas.

Gale trato de no darle vueltas al asunto ¿Qué sabía Darius de todo esto? Él solo estaba metiéndose por donde no le incumbía. Katniss no era de lo que él describía, ella no era así, era demasiado inocente para eso y además no confiaba en nadie, así que era imposible que alguien se le asomara lo suficiente para que ella se abriera. No había nada de qué preocuparse, Darius no sabía nada. Con eso en mente se apresuró a buscarla, ya que todavía tenían cosas que hacer antes de terminar el día. La encontró fuera del Quemador, todavía se le veía un poco molesta por la broma, pero no parecía que quería sacarle la cabeza, así que se le acerco con una sonrisa de disculpa, la cual ella respondió rodeando los ojos, soltando una pequeña risita y negó con la cabeza. Con eso supo que estaban bien.

Fueron al pueblo para hacer negocios con los Comerciantes, pero en el camino él seguía sin poder sacar de su cabeza su conversación con Darius, por más que no quiera pensar en eso. Con eso en la cabeza, se atrevió a seguir un de los consejos que dijo, y la miro, pero esta vez la miro como la miraba cualquier otro chico. Y era cierto, Katniss era muy atractiva. Con sus cabellos castaños en sea trenza que la caracterizaba tanto, sus ojos gises que miraba a todos con desafío, parecía invulnerables, pero él ya había visto como todo eso desaparecía cuando estaban en el bosque los dos solos, cuando era otra persona en esos momentos, sus ojos eran más cálidos, seguían siendo peligrosos, seguía siendo ella, pero ya no sentía los pesos que tenían en el Distrito, solo era ella misma. Era casi divino verla así, ni él se sentía tan cómodo en el bosque como ella, era como ver a un ser mítico mezclarse entre los árboles, siguiendo el rastro para su presa, con arco y flecha en mano. Su tez trigueña solo acentuaba su encanto místico, la hacía más fácil camuflase con el ambiente, la podías perder de vista en un instante sino prestabas la suficiente atención, solo para luego apareciera de golpe sin que te des cuenta. Mirándola bien, admira su cuerpo, y debía admitir que no tenía que envidiarle nada a ninguna chica, aunque era un poco pequeña en comparación a otras, su figura está bien distribuida, sus pechos pequeños pero firmes, sus caderas más anchas dándole forma de reloj de arena, su trasero también era pequeña, pero firme y redondo. Su figura estaba hecha por años de caza en el bosque, puede que en el Distrito no resaltará mucho, pero de nuevo, su lugar ideal era el bosque, donde encajaba tan bien que era difícil de explicar, y su contextura era un beneficio ahí, ya que podía escalar, correr o permanecer agachada por horas sin sentir incomodidad ni ser detectada.

Él podía dar crédito a que Katniss era muy hermosa, cada parte de ella atraía a cualquier chico. Era difícil saber el por qué no lo había notado hasta ese momento, estuvo tan metido en su visión de la niña de doce que conoció que nunca se atrevió a ver más allá de eso, omitiendo a la bella joven que se estaba formando frente a él. Pero ahora gracias a Darius podía apreciarla, y se avergonzó al admitir que podía sentirse más que atraído por ella, no solo por su cuerpo, sino por la forma de ser de ella. Katniss no era la chica dócil que seguía a todos los demás porque debía hacerlo, ella era todo lo contrario, era terca, independiente, autosuficiente, no toleraba la mierda de nadie, era alguien de pocas palabras, pero de muchas acciones, era el tipo de chica que demostraba que eras parte de su familia cuando te tomaba para su protección, porque si había algo en lo que se caracterizaba Katniss era en proteger. Una vez que ella sentía que alguien era importante para ella, no podía dejarla ir sin su protección, siempre tuvo ese instinto, pero con la muerte de su padre ese instinto se hiso más fuerte, principalmente con su hermanita, pero en cierta medida también se transfirió a otras personas, como a Gale y su familia. Llegaba a ser tan fuerte que era capaz de cualquier cosa con tal de que todos ellos estuvieran bien. Ese era un sentimiento en que Gale también se identificaba y hacia que fueran tan buenos amigos, pero ahora que la estaba mirando con otros ojos, no pudo evitar apreciarlo de otra manera. Era realmente un orgullo saber que ella se interesaba en él lo suficiente para querer protegerlo y cuidarlo, y de solo imaginar que eso podía significar algo más que amistad hacia que algo en su corazón se calentara.

Por un momento se permitió fantasear con esa idea ¿Cómo sería su vida si estuviera con Katniss? Se imaginó a ambos siendo más grandes, él volviendo de su trabajo en las minas mientras ella lo esperaba con sus hijos, contándoles las cosas que hicieron en el bosque juntos o como les fue en el colegio, o si visitaron a sus familias, todo ese tipo de cosas. Se imaginó besando a Katniss mientras los niños hablaran ¿Cómo serían sus besos? Gale era consiente que tenía más experiencia en el tema de los besos mientras que creía que ella tenía nula experiencia, él tendría que enseñarle, mostrarle como se hacía, como a él le gustaba y averiguar el como a ella le gustaría. Esa idea lo estudiamos más de lo que debía, ser él el que le enseñara todo eso a ella, mostrarle todo lo que se había perdido, pero ahora dependía de él mostrarle todo eso, y esta vez seria especial, ya que no sería solo por atracción o por curiosidad, seria por amor, porque los dos querían estar el uno con el otro, formal una vida juntos. Soltó una sonrisa embobada ante ese pensamiento sin darse cuenta, pero Katniss si lo hiso.

_ ¿Qué tienes?

_ ¿Eh? _ Gale salió de sus fantasías.

_ Comenzaste a sonreír como idiota, te estaba preguntando qué te pasaba.

_ Nada, nada. Solo estaba pensando en… cosas. _ respondió sintiendo que sus mejillas se calentaban al ver que casi fue descubierto por ella. Por otro lado, Katniss rodeo los ojos, decidiendo que no quería saber en lo que pensaba su amigo, lo último que necesitaba era escucharlo babear por una chica que podría ser su compañera de clases, no quería sentirse incomoda con esa chica.

Gale se relajó al sentir que ella no iba a insistir más en el tema, de verdad que no quería admitir lo que de verdad estaba pensando. Esto le permitió seguir divagando en su mente.

Lo cierto era que ella era totalmente su tipo, nunca lo había pensado de esa forma hasta hoy, y una vez que abrió esa puerta no pudo dejar de pensar en ella así, ver cada cosa que ella hacía con una visión completamente nueva, ella era especial y tenía la capacidad de volverte loco si no tenías cuidado. Pero era imposible que ella se interesara en alguien, Katniss era una chica simple, no era el tipo que se fijara en los chicos y suspiraba en silencio por ellos, ella era del tipo directo, no le gustaba el drama innecesario, tampoco la consideraba una chica romántica, una a la que le gustara ese tipo de detalles. Ellos eran muy parecidos en ese sentido también, Gale tampoco era alguien romántico, no lo entendía y no veía su razón, no era algo que le fuera natural. Él pensaba que a ella le pasaba lo mismo, que apreciaría más a alguien que fuera directo, que no la agobiara con detalles sin sentidos, que la conociera tan bien que supiera lo que le pasara con solo verla. Analizándolo bien, ellos harían una muy buena pareja, ellos coordinaban como nadie más, se entendían como nadie y serían increíbles como pareja.

No sabía por qué seguía pensando en todo eso, no era como si él le interesara Katniss como algo más que amigos y fuera a cortejarla o algo así. Ellos eran solo amigos, mejores amigos. Sin embargo, algo dentro de Gale se sentía diferente, algo se rebelaba ante ese pensamiento, como si ya no fuera suficiente. Trato de ignorarlo y no pensar en eso, concentrándose en los intercambios que tenían en curso, negociando con los Comerciantes, queriendo desentendiéndose todos estos nuevos sentimientos que lo ahogaban.

Pero no importaba cuanto lo intentara, con solo mirarla se quedaba embobado por su belleza que ahora no podía evitar admirar, haciendo que esos sentimientos se hicieran más fuertes y más confusos. Tratando de no ser tan obvio o incomodarla, desviaba la mirada para ver a su alrededor, y fue entonces que se dio cuenta que no era el único que la miraba. Gale sabía que ella atraía la mirada de muchos chicos, él mismo había espantado a muchos, pero ahora él no estaba en modo "defender a su pequeña amiga", esta vez los vio como posibles competencias por la atención de Katniss. Era alarmante el notar la cantidad de chicos que claramente estaban interesados en ella y los cuales ella no notaba, muchos de estos ni siquiera disimulaban su atracción, dando miradas lujuriosas y hasta un poco asquerosas. Gale se puso nervioso con esas miradas, todos querían algo de ella, algo a lo que ninguno era digno de tomar ¿Qué les hacía creer que tenían el derecho de siquiera insinuar estar con Katniss? Y mientras más los miraba, más odio se formaba dentro de él, odio y otros sentimientos negativos, que lo iban amargado lentamente.

Trato de consolarse con el hecho de que ella no les estaba prestando atención o simplemente los ignoraba, totalmente desinteresada en todos ellos en general, pero hubo uno que si llamo su atención. Puede que para cualquiera hubiera pasado desapercibido, pero él que la conocía mejor que cualquiera y pudo notar que por un momento ella le devolvió la mirada a uno de los chicos. Al buscar quien era el chico, lo encontró casi medio escondido entre los edificios, con su mirada perdida en ella, era un hijo de Comerciante, de tez pálida, cabellos rubio ceniza y ojos azules, parecía tener la edad de Katniss. Lo curioso de este chico, es que, a diferencia de los otros, los ojos de él reflejaban admiración, respeto y amor, parecía embelesado con ella y su mirada se tornaba ensoñadora, como si estuviera totalmente perdido en ella. Y Katniss trato de parecer indiferente a él, pero algo en él le llamo la atención, y esto hiso temblar a Gale ¿Qué pasaría si este chico se animaba a hablarle? ¿Y si la invitaba a salir y ella aceptaba? ¿En dónde lo dejaba a él y estos nuevos sentimientos que estaba comenzando a entender?

Eso no podía pasar, no cuando por fin se estaba abriendo a sentir algo de verdad, no podía perderla ante de incluso de ver así adonde podía ir todo esto. No importaba si era este chico Comerciante o cualquier otro de la Veta, no podía perderla, ni siquiera entendía el por qué estaba tan desesperado, no debería, ni siquiera sabía si ella era una de su alma gemela…

Su alma gemela…

¿Y si ella era una de su alma gemela? No sería una locura, ambos eran tremendamente compatibles, tenían las mismas motivaciones de salvar a sus familias, ambos buscaban refugio en los bosques, donde se sentían libres y más alegres, pero también adoraban sus hermanitos y harían cualquier cosa por ellos. Él ya pensaba que harían una pareja increíble, pero si eran almas gemelas, su unión sería totalmente asombrosa, ya que tenían un vínculo demasiado fuerte, y una vez que decidieran unirse ese vínculo solo podía ser más grande, tan grande que hasta podría calmar los miedos de Katniss sobre hacer una familia con él. Sería una maravillosa coincidencia, que su mejor amiga, la persona fuera de su familia quien en más confiara, fuera su alma gemela. Coincidencia o destino… cualquiera de las dos tenía mucha lógica y explicaba todo lo que estaba sintiendo en estos momentos, que podía ser que estaba sintiendo amor por su amiga, que podía ser que quiera ser más que su amiga, formar una vida junto a ella. El imaginar de nuevo una vida así lo emocionaba y lo entusiasmaba, solo tenía que verificar si ella compartía su marca del alma.

Y ahí comenzó su problema, a ella no le gustaba hablar de su marca del alma, trato de preguntarle, pero ella fue muy esquiva con eso, era algo de lo que no quería hablar. Solo sabía que tenía una porque una vez escucho a Prim y la Sra. Everdeen mencionarlo, fue un día en él que estaba yendo a buscar a Katniss para ir al bosque, estaba parado en la puerta y de pura casualidad escucho que estaban hablando de su marca del alma, solo escucho que lo mencionaron, como preguntándose que podía significar, pero la verdad es que no pudo escuchar mucho, así que tampoco sabía de qué hablaban sobre su marca, pero sabía que Katniss tenía una. Lo que lo hiso pensar en otra cuestión, Gale tenía dos almas gemelas, todavía no sabía bien lo que significaba, pero tenía dos marcas, lo que muy probablemente quería decir que tenía dos almas gemelas, de eso estaba casi seguro ¿Cómo se tomaría Katniss eso? ¿Qué pensaría al saber su corazón se dividiría en dos? ¿Y qué pasaría si su otra alma gemela aparecía en algún momento? No podía simplemente rechazarla, no parecía justo para la otra chica. A no ser que Katniss también la aceptara a ella también ¿Eso sería posible? ¿Qué Katniss permitiera que otra chica fuera parte de su familia? Gale siempre fantaseo con eso, era lo lógico, tenía solo diecisiete años y qué adolescente hormonal como él no fantaseaba con eso, tener a dos hermosas mujeres para él solo, en todas las cosas que podrían hacer y experimentar. También imagino el cómo sería vivir con dos mujeres, amarlas por igual, como podían vivir los tres juntos. Él pensaba mucho en ello, pero ahora se le habría una posibilidad real de conocer una de sus almas gemelas y estaba comenzando a cuestionarse si sus fantasías no serían demasiadas ficticias.

Pero estaba divagando, ni siquiera sabía si Katniss compartía una de sus marcas de alma gemela, mucho menos cuando conocería su otra alma gemela, primero tenía que saber lo primero, saber si estos sentimientos dentro de él estaban bien destinados a Katniss, y luego tenía que ver como convencería a Katniss para que fueran parejas, para luego darle la noticia que tenía otra marca. La verdad, ahora que pensaba en las cosas, parecía toda una locura y no sabía si iba a funcionar, pero tenía que encontrar la forma en que las cosas resultaran.

Con eso en mente, siguió caminando con Katniss, tratando de pensar en formas de averiguar su marca de alma.


¿Qué les pareció? ¿Les gusto? Admito que me deje llevar en este capítulo y lo corte antes de lo que yo me había planteado originalmente. Es curioso, pero en un principio quería que Gale tuviera celos de Darius, pero luego me sentí incomoda al imaginar eso, por lo que decidí encararlo para otro lado, pero sin embargo, Gale sí siente celos, solo que de un chico del pueblo ¿A que no adivinan de quién?

En fin, espero que lo hayan disfrutado, y nos vemos la próxima semana.

¡Besitos! ¡Besitos! ¡Chau! ¡Chau!

Nota: ese saludo raro al final es de un canal de YouTube que se llama "Te Lo Resumo Así Nomás", por si no se entendió la referencia ;)