¡Saludos, queridos lectores!

Como les he mencionado en el capítulo anterior, hoy subiré dos capítulos de esta historia y este es el segundo n.n

Espero que la historia siga siendo de su agrado. Los dejo con la continuación n.n


Cuando iba a protestar con los niños por la hora, recordó que ellos se habían dormido mucho antes que él, por lo que era normal que, a pesar de ser domingo, los gemelos estuviesen despiertos a esa hora y con hambre.

—Denme un momento, niños —pidió el hombre.

Él se había quedado despierto hasta las… ni siquiera sabía la hora. La última vez que miró el reloj eran las dos de la mañana cuando colgó la llamada con su mujer y estuvo un rato más recibiendo mensajes de ella.

La larga llamada y el montón de mensajes, le hicieron ver a Sasuke lo mucho que deseaba tener a su lado a Karin. Es decir, en otras ocasiones ambos se separaban por viajes de negocio, momentos que podían durar días o incluso, el más largo fue de un mes, y aunque la extrañaba, podía mediar sus emociones. Sin embargo, en esta ocasión no pudo evitar buscar mantenerse en contacto con ella.

Si lo pensaba bien, su estado no era tan raro, ya que en los viajes de negocio, él se sentía muy seguro y confiado en lo que iba a hacer, pero estando con los niños, se sentía inseguro y tomaba decisiones sobre la marcha, así que el deseo de tener a su esposa cerca, era porque necesitaba apoyo, y aún si era sólo en llamada o mensaje, ella se lo estaba brindando.

—¿Qué vamos a desayunar? —preguntó el hermano menor.

—Onigiris —respondió Sasuke notando que había recibido mensaje de Sakura.

—¿Por qué no mejor cereal? —preguntó Haru.

—No tenemos cereal en la casa.

—¿No te gusta el cereal, papá? —preguntó de nuevo el hermano menor.

—No, no me gusta. Karin es la que come a veces —comentó el azabache— Vayan a lavarse las manos mientras sirvo el desayuno.

Al parecer los niños de verdad tenían hambre pues obedecieron sin protestar, y antes de levantarse, miró el mensaje de Sakura.

Sakura: Saldré de mi turno a las nueve

Sakura: Estás seguro que quieres quedarte con los niños hasta la una?

Rápidamente, Sasuke respondió: "sí. Pero si tienes algo que hacer que impida que se queden, puedo llevártelos temprano".

Sasuke se levantó del sillón y fue a la cocina a sacar los onigiris ya preparados que había comprado en la tienda el día anterior, así mismo, puso a calentar agua para hacer té y en poco tiempo, los niños ya estaban sentados esperando el desayuno.

—¿A qué hora vendrá mamá por nosotros? —preguntó el hermano mayor cuando los niños se sentaron a la mesa.

—¿Comeremos todos juntos? —el hermano menor preguntó alegre.

—No vendrá a la casa. Probablemente nos encontremos con ella en el parque —respondió Sasuke sirviendo el desayuno— Necesito que me confirme la hora, pero será antes de la comida. No comeremos juntos.

—¿Por qué? —preguntaron los niños en coro.

—Tengo cosas qué hacer y su madre acaba de terminar un turno, así que querrá descansar.

—Pero es domingo —protestó Haruo.

—Queremos comer contigo, papá —dijo Haru— A menos que sean zanahorias.

—No íbamos a vernos este fin de semana, así que ya tenía planes con Karin. Con su visita no podremos hacer todo, pero hay un par de cosas que no podemos dejar para otro día.

Los niños se miraron y antes de que pudieran decir nada, el celular de Sasuke notificó un mensaje. Era de Sakura.

Sakura: Tengo que atender algunos asuntos a esa hora

Sakura: Pero no quiero interferir si quieres quedarte más tiempo con los niños

Sakura: Puedo recogerlos después de las cinco, si te conviene

No, Sasuke no podía quedarse con los niños hasta esa hora, especialmente cuando tenía la charla pendiente con su esposa. También ya se sentía abrumado por los niños.

"Tengo pendientes por la tarde. Será mejor que te lleve a los niños cuando salgas. Avísame dónde y a qué hora te veo", Sasuke le respondió.

—¿Es Karin-san? —preguntó el hermano mayor.

—No. Es su madre —respondió el hombre— Los llevaré con ella pronto.

—¿Qué tienen qué hacer? —preguntó el hermano mayor.

—¿Qué? —preguntó Sasuke que se había distraído con los mensajes.

—Karin-san y tú. ¿Qué tienen qué hacer?

—Hay unos problemas que tenemos que resolver.

—Karin-san había ido a solucionar los problemas del trabajo. ¿No? —señaló el hermano menor y Sasuke agradeció que los niños pensaran que se trataba de problemas del trabajo, ya que cuando respondió, había olvidado que los niños podrían querer hacer más preguntas al respecto.

—Tengo que supervisar las soluciones a las que llegaron en la empresa. Eso debe estar listo para mañana.

—Pero tú eres el CEO, papá. Tú sólo ordenas y los demás tienen que hacer las cosas bien —dijo el hermano menor.

—¿De dónde sacaron eso? —preguntó Sasuke confundido.

—¡Así es como trabaja Yoshio! —exclamó Haru.

¡Ah! ¡Claro! Ese estúpido programa…

Cuando Sasuke se sentó a verlo, sólo le prestó atención lo suficiente para saber por qué sus hijos se emocionaban, pero se daba cuenta de tener vagos recuerdos de lo que supuestamente consistía el puesto de CEO en ese programa y sus actividades estaban muy alejadas de la realidad.

El tal Yoshio tenía un asistente que, con sólo ordenarle, le resolvía todos los problemas que aparecieran y él ni siquiera se molestaba en verificarlo. También había escenas del hombre supuestamente muy ocupado, pero en cuanto la protagonista tenía un problema, hacía todo a un lado y el mundo se detenía esperándolo.

—Así no funciona el trabajo de CEO. Hay que verificar y hacer retroalimentación.

—Pero Yoshio es el mejor, y por eso puede sólo dar órdenes —insistió Haru.

—Las telenovelas son pura fantasía. Están arregladas para que pasen las cosas a conveniencia de los protagonistas y…

Sonó su celular notificando mensajes, así que hizo una pausa para mirarlos, ya que intuyó que se trataba de la madre de sus hijos.

Sakura: Está bien. Recogeré a los niños en el parque

Sakura: Te aviso cuando salga del hospital. Llegaré en diez minutos tras mi salida

—Desayunen. Los llevaré con su madre en un rato más. No puedo quedarme con ustedes, pero nos veremos en otra ocasión.

Los niños expresaron su desánimo ante la declaración de su padre, y él no sabía por qué ellos querrían quedarse más tiempo. Es decir, él estaba intentando convivir con ellos y crear un lazo, pero no creía que los niños de verdad se hubiesen divertido únicamente haciendo preguntas y mirando la televisión.

Daba igual si se hubiesen divertido o no porque tendría que devolver a los niños pronto, y si pensaba en las palabras de su esposa, quizá debía sentirse satisfecho con esa primera noche juntos, ya que si hubiese hecho todo mal, ellos no pensarían en querer quedarse más tiempo.

"Sakura no puede recibir a los niños más tarde, así que se los entregaré cuando salga del trabajo", Sasuke le escribió a su esposa cuando los niños, tras expresar su desánimo, dejaron de hablar y hacer preguntas.

Recibió respuesta casi de inmediato, algo que lo sorprendió, ya que después del desvelo, esperaba que ella siguiera durmiendo. Quizá acababa de despertar.

Gatita: Al menos lo intentaste

Gatita: A qué hora le llevarás a los niños?

"A las nueve y diez. De igual forma te aviso cuando salga de la casa. Si no sigues acostada para ese momento, entonces espero verte cuando vuelva a la casa", respondió.

Sasuke no recibió respuesta de su esposa, lo que le hizo pensar que tal vez sólo se levantó al baño y volvió a quedarse dormida.

No hubo más contratiempos durante el desayuno, ni cuando Sasuke preparó a los niños para salir, así que sin ningún problema, pudo llevar a los niños al parque, no sin antes avisarle a su esposa por mensaje que entregaría a los niños.

Por supuesto, Sasuke sabía que si su esposa seguía dormida, no vería el mensaje hasta después.

—¡Mami! —los niños exclamaron al ver a Sakura y corrieron a abrazarla.

—¿Cómo están? ¿Cómo se la pasaron con su papá? —preguntó Sakura abrazando a sus hijos.

—¡Bien! —exclamaron los niños.

—¡La casa de papá es muy grande! —dijo el hermano menor.

—Papá nos preparó de comer —siguió el hermano mayor.

—Me alegra. ¿Se llevaron bien con la esposa de su padre?

—Ella tuvo que atender asuntos del trabajo, así que no estuvo en casa —Sasuke al fin intervino y ofreció las mochilas de los niños a Sakura.

—Espero que todo esté bien —comentó la mujer.

—Lo resolveremos.

—¿Cuándo volveremos a pasar la noche contigo, papá? —preguntó Haruo.

—No lo sé. Me pondré de acuerdo con su madre en otro momento.

—Espero que los niños no te hayan dado muchos problemas, Sasuke-kun.

—¡Nos portamos bien! —exclamó el hermano menor.

—Hay algunos asuntos que me gustaría hablar contigo sobre su crianza, pero lo dejaremos para otro momento.

—¿Hicieron algo malo? —Sakura se veía sorprendida.

—¡No hicimos nada malo! —Haru hizo pucheros.

—Haru no quiso comerse sus zanahorias y agarramos sin permiso las cosas de la esposa de papá —confesó Haruo.

—Lo siento mucho, Sasuke-kun. Hablaré con ellos. Si rompieron algo lo pagaré. Espero que tú esposa no se enoje —dijo Sakura para después mirar a sus hijos— Tienen que disculparse con ella cuando la vuelvan a ver. No deben tomar las cosas que no son suyas.

—Sí, mami.

—No rompieron nada, pero quiero hablar contigo sobre las posturas de crianza —respondió Sasuke— Debo irme. Estaremos en contacto para hablar y la próxima cita con los niños.

—Sí, claro. Muchas gracias por cuidar de los niños.

—Adiós, niños —Sasuke se despidió tras dar un asentimiento con la cabeza a Sakura a modo de respuesta.

—Adiós, papá.

Sasuke dió media vuelta y entró a su auto.


Ahora que los niños han regresado a casa con su madre, ¿Sasuke y Karin podrán hablar del tema que tienen pendiente o tendrán más obstáculos? ¿Qué tanto impactará ese secreto a su matrimonio? ¿Será tan grande que incluso afecte la relación que ella y Sasuke puedan tener con los niños y Sakura? ¿Qué otras preguntas les han nacido al leer el capítulo?

Me encantará leer sus preguntas y teorías en los comentarios n.n

Como les mencioné, hoy sólo actualizaré esta historia, pero la próxima semana estaré subiendo al menos actualizaciones de dos historias, pero haré lo posible para que sean más n.n

Sin más por el momento, me despido por ahora.

¡Hasta la próxima actualización!