Capítulo 19: Regreso a clases, prefiero luchar contra un titán, de nuevo.

El regreso a Hogwarts fue con un lloroso Nico que no dejaba de abrazarlo, similar a Percy cuando se fueron de casa de los Jackson. Es increíble, pero las lágrimas de Nico lograron convencer a sus padres de tenerlo al menos dos días más del inicio de clases (abuso de poder que Draco apoyó de todo corazón, si lo tienes, es tonto no usarlo a conveniencia). Lucius parecía incluso encantado con la idea de fastidiar a los profesores tomando esos privilegios, aunque solo significara que Draco debería correr para ponerse al día de los días que había faltado. Nico había estado encantado de tenerlo dos días más, hablaba mucho de Percy, incluso con el poco tiempo que tuvo de conocerlo.

Su madre se deleitaba con eso, diciendo que Draco era igual con Potter cuando era niño.

No sabe cómo sentirse al respecto.

Pero no es agradable.

—¿Te gusta Potter? Pensé que estaba mal que un chico le gustara un chico —había dicho Nico un día antes de irse.

Draco se había tirado del pelo molesto y estresado por toda la situación.

—No me gusta Potter. —No entendía por qué todos hicieron esa pregunta—. Pero no está mal que te gusten los niños, a mí me gustan solamente los niños —exclama un poco tranquilo, sorprendido de lo fácil que era decirlo a otros, aunque solamente se lo había dicho a Percy.

Bueno, Lavender sabe, pero Lavender es Lavender.

Y Annabeth parecía saberlo, porque era Annabeth, era la lista después de todo.

Nico había estado pensativo un buen rato, como si todo su mundo hubiera sido replanteado esa noche por algo diferente.

—Tus padres quieren que te cases con una niña.

—Sí bueno, eso es porque soy sangre pura, pero incluso entonces no importa, me seguirán gustando más los niños, aunque tenga hijos; eso no significa que no quiera a mis hijos, para mí es complicado.

No hablaron más del tema, pero notaba la mirada curiosa de Nico y probablemente cuando regresara a Hogwarts este preguntaría más al respecto.

Bien por él.

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Severus lo recibe en la chimenea luciendo de mal humor, el bastardo no esperó a que estuviera cómodo para entregarle muchos pergaminos (sigue pensando que los cuadernos y libros de la escuela muggle son más prácticos, buu por los magos ortodoxos que no saben las ventajas de los muggles) de todas las clases que se perdió por la semana antes que se marchó y los días que tiene ahora en deuda. Flint le dispara dagas cuando lo ve llegar a la sala común. Al parecer el próximo sábado habría un partido contra Ravenclaw (Hufflepuff parece haber tenido un problema con uno de los jugadores y un dementor de último segundo, nada grave, pero sí suficiente para que exigieran que participación antes de tiempo) y estaba enojado de la idea de que Draco no apareciera para antes de la fecha.

Exagerado.

Ocuparía entrenar un poco, pero sus habilidades estaban en perfectas condiciones.

Probablemente más afiladas ahora por su última misión al borde de la muerte, jugar al quidditch comparado con la lucha contra Atlas no debería ser difícil.

—Llegaste tarde. —Es todo lo que dice Theo levantando una ceja, los otros chicos no le dan muchas miradas y Draco se deja caer sobre su cama.

Quiere dormir.

Pero tiene mucho material que necesita cubrir, dormir estos días probablemente no sea más que una fantasía. Además de que tiene que mejorar sus relaciones con algunos Slytherin, bueno, eso podría esperar para después del partido, cuando ganen gracias a él sin duda todos estarán de buen humor y deberá atacar; no es un idiota.

Las reuniones con niñas podrían esperar a que su padre las planee, va a ir, no significa que deba querer ir.

—¿Me dejarías copiar tu tarea? —pregunta casi esperanzado, Theo es inteligente.

Este le da una mirada curiosa.

—¿Qué me darás a cambio?

Se ve tentado, pero niega, prefiere no dormir a tener que deberle algo a Theo Nott.

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—¡Draco! —El grito chillido de Lavender en el medio del comedor es bastante ruidoso y provoca que todos volteen a verlo.

Gimotea cuando esta se ha levantado para correr y casi estamparlo contra el suelo, por suerte Draco es fuerte, pero admira que la fuerza de Lavender también se fortalece. La niña salta a su alrededor emocionada, pero también preocupada, y es solo por eso que no se opone cuando ella lo arrastra a la esquina de la mesa Gryffindor, recibiendo miradas dudosas.

Longbottom lo saluda tímidamente y es tanto el impacto, que Draco lo saluda incómodo.

Es un sangre pura.

Debería funcionar de forma extraña para su padre, incluso si sus padres lucharon contra Voldemort, sigue siendo uno de los sagrados 28.

Uno de los gemelos hizo un comentario grosero, pero Lavender le sacó el dedo del medio. Nadie dijo nada más, Lavender le recordó que salvó a Potter y Draco lo había olvidado. En realidad, eso fue antes de vacaciones y las vacaciones claramente habían traído muchas más cosas que pensar en el idiota de Potter.

Como pensar en mantener vivo al idiota de Percy.

Y Bianca.

Y Annabeth.

Y cuidar de Will.

Y de Nico… bueno, ya podrán entender.

En la esquina de la mesa Lavender rápidamente comienza a sisear.

—Estaba hablando con Silena, ya sabes, cómo Drew tiene ese cabello en tirabuzones, bueno yo quería saberlo porque Mitchell una vez comentó que se veía linda así —inicia Lavender rápidamente, pero Draco la detiene.

—¿Mitchell no es ese chico lindo de cabellera castaña? —susurra apresuradamente y Lavender se olvida un momento de que hablaban.

—Oh Draco sabía que lo notaste, digo todos en la cabaña 10 son bastante apuestos y tienen esa estúpida idea que tienen que romperle el corazón a alguien como iniciación, pero no importa, no voy a intentar nada con Mitchell, pero eso no es lo importante. —Parece regresar al pensamiento original—. Hablando con Silena, ella me contó sobre lo que sucedió. ¿En serio?, no puedes tener unas vacaciones normales, luchar contra Atlas y lo de las cazadoras —susurró esta de forma enojada, a lo cual Draco suelta un suspiro sujetándose la frente con cansancio.

Es verdad, solo pasaron unos cuantos días, parece una eternidad desde que se fue de vacaciones con todo lo que pasó.

Vacaciones demasiado largas.

—Todo fue jodidamente rápido, primero Annabeth se pierde y Percy era un desastre, luego estaba lo que pasó con Bianca. —Mueve su mano restándole importancia.

Lavender parece confundida.

—¿La cazadora?

—Si ya sabes, lo que pasó antes de Navidad.

—¿Qué cosa?

—Bueno, sobre ella y… —Draco deja de hablar, porque Lavender parece confundida, no tiene sentido—. Olvídalo —susurra pensativo.

Su mente había imaginado que, a estas alturas, Potter le diría a alguien sobre cómo apareció de la nada en Hogwarts con una niña mestiza, claro que otro tipo de mestizos de los que ellos conocen. Si bien Bianca y Nico habían prometido (algunos con chantaje) proteger el secreto del mundo mágico en el mundo mestizo, no había hablado con Potter (tampoco le importó mucho) sobre la idea de mantener el secreto de Bianca; por eso la había presentado como mestiza.

Pero no había dicho nada.

Potter no dijo nada.

¿Por qué?

Draco había tenido planes, ideas sobre qué decir cuando los rumores se esparcieran. Al Nico ser presentado por su padre como un familiar lejano, Bianca entraba en su categoría, solamente que Bianca estaría en otra parte del mundo estudiando con otros magos; en lugar de decir que corría con un grupo de niñas inmortales cazando monstruos.

No era un favor, Draco no solicitó una petición, así que no se hizo culpable de que Potter guardara esa información.

Aunque no tenga sentido.

Volteó el rostro para buscar a Potter en la misma mesa, solo para encontrarlo unos metros alejados, viéndolo fijamente; al verse atrapado este desvió la mirada intentando aparentar indiferencia, pero Draco entrecerró la mirada.

¿Por qué lo estaba viendo?

Extraño.

—Tienes que contarme todo, o hablaré con Percy, ambos sabemos que lo cuenta mejor… y por qué rayos tienes mechones de pelo blanco —gruñe lo último incrédula.

Oh cierto, en la noche no se notaba porque su pelo era naturalmente rubio platinado, pero a la luz del día, era mucho más notorio. Sujetó uno de sus mechones blancos frente a él, el recuerdo lo hizo estremecer, con Percy a su lado mientras por unos instantes ambos sostenían el peso de los cielos sobre ellos.

Había parecido una eternidad.

El dolor insoportable.

Sonríe con cansancio.

—No vas a creerlo.

—Pruébame.

Lavender le da una sonrisa descarada, la cual Draco imita con una más perezosa que hace a la niña chillar emocionada.

Casi llegan tarde a clase, pero al final del día Lavender está sujetándose de la almohada en su habitación Slytherin para que le cuente la historia. También recuperó a su hurón, Goldstein, al igual que la mayoría en Hogwarts que se acercaban, se quedó viendo demasiado rato su cabello; pero era un Ravenclaw y no preguntó nada, chico listo.

Sparky parecía triste de volver con Draco, lo cual hizo que se resintiera con su estúpido hurón.

—Fue tan romántico, ambos sosteniendo el cielo, ambos con un vínculo —dice soñadoramente, abrazando la almohada y dejándose caer sobre su cama de lado.

—Sí bueno, el único problema es que ama a Annabeth y ella también lo quiere, tal vez no estoy destinado para el amor —dice dramáticamente, recuerda lo que dijo Afrodita, pero lo ignora, probablemente la diosa se olvide de él como suele hacerlo con todos.

Lavender gruñe.

—El amor es algo interesante, pero si no quieres luchar por Percy —dice de forma como si fuera fácil, cuando lleva casi un año entero luchando contra sus sentimientos—. Tal vez podrías intentar salir con alguien, no como esas reuniones de matrimonio de tu padre, podrías intentar invitar a algún chico lindo por ahí. —Ella guiña un ojo emocionada a lo cual Draco levanta una ceja.

Sí, eso no va a suceder.

Pero cuando Lavender se marcha, Draco se queda mirando el techo con Sparky a su lado, aunque no se agraden del todo, el hurón le gusta dormir al lado de otro ser viviente.

Salir con chicos.

No podría ser, tiene una imagen que mantener y salir con un chico (si alguien lo quisiera), significaría que tendría que decirle a los demás que es gay y eso es aterrador. Puede que le dijera a Percy y Nico, que algunos otros como Lavender lo sepan, pero eso no significa que quiera que todos lo hagan.

Abraza a su almohada pensativo.

—Solo sé tú mismo.

Sonríe al sentir su interior a Percy, no habían probado mucho su vínculo, pero debió sentir su inseguridad y eso le hizo sonreír.

Su amigo era genial.

Era un idiota.

Pero era su genial e idiota amigo.

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Los días siguientes fueron un poco aburridos y cansados, pasó la mayor parte del tiempo en la biblioteca intentando ponerse al día, Lavender lo acompañaría los primeros días, pero lo dejaría luego de aburrirse. Usualmente, Theo era quien pasaba más tiempo con él y en ocasiones Goldstein tomaría asiento casual; todos los Ravenclaw siempre estaban ahí, como si ser listos fuera parte de su currículum o algo así. No hablaban mucho, pero las notas del niño hicieron maravillas para apresurar su trabajo atrasado. En las noches no pudo entrenar como quisiera porque había una práctica de Quidditch que Flint le obligó a participar porque ocupaba que estuviera al día con el partido.

El día del partido.

Draco se estiró de forma tranquila, había una extraña sensación emocionante en sus venas bajo su piel.

Volar era emocionante.

Era su momento, su hábitat e iba a destrozar a cualquiera frente a él.

Esta vez no habría algún Potter que rescatar, no, esta vez sería solo Draco.

Sus pensamientos quedaron en segundo plano cuando al salir al campo de quidditch y voltea a ver a la zona de profesores, su sorpresa inicial es porque sus padres volvieron asistir a otro de sus partidos, pero la mayor sorpresa es que no estaban a solas. Nico di Angelo está al lado de Narcisa dando pequeños saltos, cuando nota su mirada comienza a mover sus brazos emocionados para ser notado y Draco levanta la mano congelado.

Es Nico.

Nico está aquí.

Mocoso, molesto y odiado Nico.

—Tenemos que destruirlos —dice Draco con ojos flamantes a Flint, quien levanta una ceja emocionada, pero Draco lo ignora.

Tienen que ganar, destrozar Ravenclaw y le dejará en claro a Nico que es mejor que Percy Jackson, pueden llamarlo celoso, pero quiere pavonearse frente al mocoso que es casi como de su familia; un hermano menor.

Sonríe emocionado cuando ve a la niña que es buscadora de la casa Ravenclaw.

De cuarto año, asiática (piensa un momento en Drew Tanaka de la cabaña de Afrodita, pero Drew, aunque un poco altiva, es mil veces más bonita de forma objetiva) y que lo ve de forma seria. Draco sonríe de forma depredadora cuando ambos equipos se saludan, porque piensa arruinar a esa niña y ser el mejor.

No pensaba jugar tan intensamente.

Pero ahora, joder, iba a dar una paliza.

El partido inicia de forma bastante regular, el clima no es malo y Draco se eleva por el cielo sin dudarlo, cuando jugó con Potter el clima era peor y ahora sería una blasfemia no ver la Snitch. Cho parece mantener la distancia, pero suele verlo a cada rato y Draco la ignora, no importa para nada y observa cómo su equipo parece tener un poco de dificultades.

Se burlaría de ellos luego.

Snitch, la maldita no aparecía.

Se puso tenso cuando el juego comenzó a avanzar media hora, hay partidos que pueden durar horas y aunque quiso pasar volando más de una vez cerca de Nico, decidió concentrarse más en su juego y… dejó sus pensamientos cuando una mancha dorada apareció. La notó antes que Chang, lo cual es obvio, porque era demasiado genial y se abalanzó sin dudarlo.

La niña no era del todo mal, debe admitirlo, no era mejor que Potter, pero era difícil perderla a su lado.

Draco hizo movimientos bruscos, pero Chang supo seguirle, pareciendo decidida a ganar; lástima, si fuera una lucha de voluntades la tiene asegurada.

Su voluntad de ganar.

Debe ganar.

Quiere ganar.

Iba a ganar.

Su vuelo se vuelve más atrevido, dando vueltas e ignorando cuando pasa cerca de la gradería, sus ojos solamente puestos en la Snitch y solo el pensamiento de ganar. Hay un recorrido casi total por el estadio, esquivando bugles y compañeros de equipos, pero por esquivar a un golpeador de Ravenclaw, Chang se adelanta y Draco gruñe antes de acelerar. Está solamente unos centímetros detrás de Chang cuando la Snitch vuela rápidamente hacia el suelo.

Es peligroso, Chang desacelera un poco y Draco la pasa sin dudarlo.

Es peligroso, susurra sus instintos bien entrenados por luchas cercanas a la muerte, pero su deseo de ganar lo aplasta.

Estira su mano porque puede ver la Snitch, pero también ha dejado de ver el suelo tan lejos como antes, lo que significa que está cerca.

Peligro.

Toma la Snitch en sus manos, justo cuando la punta de su escoba se incrusta en el suelo y eso provoca que la inercia del movimiento haga que Draco salga volando. También estaban cerca de la gradería de los Hufflepuff, por lo cual luego de algunos giros bastante desagradables en el suelo, que provocan cortes, raspones y probablemente moretones, si no es que alguna herida de gravedad, se estrella contra uno de los pilares de la gradería.

Gimotea sin aire, pero su mano sigue sujetando la Snitch.

Jadea unos momentos, viendo su mano adolorida, con cortes por el movimiento brusco, y se ríe encantado cuando ve a la pequeña Snitch en esta.

Hay gritos en todos lados, de la gradería de los jugadores.

Con dificultad se pone de pie, es absurdo que en sus dos partidos ambos terminasen en el suelo, levanta la mano algo temblorosa y enseña la Snitch lo que hace que la gradería de Slytherin se alce en ovaciones. Camina algo lento, su espalda arde un poco, pero el dolor no es nada comparado con sujetar el cielo en sus brazos; incluso si no había estado solo.

El pensar en Annabeth haciéndolo sola, le hace estremecer.

Camina con torpeza hacia su escoba, aun sin estar rota, hay varios chicos de Slytherin que han bajado de sus escobas como los Ravenclaw, pero cuando se acercan para celebrar los ignora tomando su escoba. Flint bufa cuando alza el vuelo y aunque sabe que todos los espectadores deben estar viéndolo, los ignora para volar a una buena velocidad hacia el palco de profesores.

Hay un jadeo cuando ágilmente se baja en la diminuta barrera que los protege de caer, es delgada, pero ha hecho ejercicios peores en el campamento mestizo.

Nico lo está viendo con enormes ojos llenos de admiración.

Chupa esa Jackson, Draco es el hermano genial.

—¿Mejor que Percy? —pregunta, aunque siente un poco de sangre en su boca, no parece perder ningún diente.

Escucha a Severus suspirar detrás de sus padres, su madre le da una mirada que indica que debería ir a la enfermería y su padre tiene el mentón en alto, fanfarrón por los logros de su hijo.

—No, Percy es mejor que tú. —Jadea de forma ofendida al ver al mocoso—. Estuviste media hora sin hacer nada. —Se encoge de hombros y Draco está por ahorcarlo, se detiene por la sonrisa divertida de este—. No eres mejor que Percy, pero eso fue bastante genial —añade ahora emocionado.

Bien.

Ganaste esta Jackson, lo hiciste, pero aun así está orgulloso de su logro.

Toma la Snitch que parece haberse calmado, la arroja hacia Nico que parpadea sorprendido, pero la sujeta entre sus manos y ve la pequeña bolita dorada con incredulidad. Su primera Snitch se la había regalado a su madre, de reojo le da una mirada de disculpas a su padre, había querido dársela, pero este solamente se encoge suavemente de hombros.

La próxima, es una promesa, que su padre parece entender por su sonrisa.

—¿Vamos? —pregunta montado su escoba y ofreciéndole la mano a Nico, el niño ahora parece un poco dudoso, pero su propio deseo infantil de probar cosas nuevas parece tentarlo.

—Joven Malfoy, no debería llevar a un niño en una escoba —salta rápidamente McGonagall, pero Draco la ignora.

Nico salta y aunque se tropieza un poco, Draco lo sujeta fácilmente entre sus brazos, el niño se ríe sin aliento susurrando algo sobre lamentar no poder decirle esto a Will; aunque Percy podría escucharlo y ambos saben que se morirá de envidia.

Incluso si Percy no es un gran fanático del cielo.

—Iré un rato a celebrar con los Slytherin, prometo ir pronto a la oficina del profesor Snape —dice viendo a sus padres, Narcisa parece querer luchar con que vaya a la enfermería, pero Lucius solamente asiente con confianza y Draco baja rápidamente en picada ante las quejas de otros profesores.

Sus padres son los mejores.

Nico suelta un chillido alegre y algo asustado ante el vuelo rápido, Draco se detiene frente a su equipo, quienes ven con duda al niño que parece encantado. En sus vacaciones deberá aprovechar para usar un poco la escoba con Nico, no demasiado alto, Zeus probablemente no quiera a un hijo de Hades en su zona; que se joda el viejo senil.

—¿Quién es ese? —pregunta uno de los golpeadores, pero Draco solo baja de la escoba, con Nico aún sobre ella.

No aparta la mano del mango y eso es lo que mantiene la magia fluyendo para mantener la escoba en el aire, el niño parece torpe en ella, pero se sujeta con valentía.

Ve a Nico quien voltea a verlo.

Sonríe.

—Es un miembro de la familia de mi padre, es como un hermano para mí. —Sonríe de manera lenta y divertida, lo que provoca que Nico lo vea con ojos brillantes también.

Antes de irse a celebrar, Lavender llega corriendo y saltando sobre su espalda, gritando lo genial e idiota que era. Luego de una presentación rápida de Nico y Lavender (Nico asiente encantado cuando le dice que Lavender va también a ese campamento), todos caminan a la sala común Slytherin, Draco pavoneándose por ser la estrella de esa noche.

Nico salta todo el tiempo emocionado por todo el lugar, Lavender no deja de abrazarlo y decir que es genial, hay algunas niñas de Slytherin que lo ven interesadas y por la mirada de Pansy sabe que pronto pedirá su favor.

Theo saluda a Nico, pero Nico solo salta sobre Draco y aunque es presentado a otros, parece no tan receptivo como con Lavender.

En fin.

Draco lo mantiene cerca toda la noche y le muestra toda la sala común de Slytherin.

Cerca de la noche va con este a la oficina de Severus, donde pasa el tiempo con sus padres antes que se deban de despedir con Nico, quien se aferra a él como si no quisiera dejarlo ir.

—Tienes personas cercanas, muy… interesante —señala Severus con incredulidad cuando todos se marchan, luego de un suspiro, lo envía a la enfermería.

Pomfrey se porta bastante duro con él por no ir de inmediato.

Cuando se acuesta a dormir medita sobre el partido, sobre su día y lo genial que es ser él.

Tal vez si no hubiera estado tan enfocado, se habría dado cuenta de unos ojos verdes que lo vieron todo el tiempo a la distancia durante el partido.

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—¿Te gusta la Mitomagia? —pregunta Draco, horrorizado una semana después del partido.

Para su sorpresa Goldstein no parecía tan enojado por la idea de que su casa perdiera ante los Slytherin como los demás, para su sorpresa no solo los chicos de su casa admiraron su buen desempeño, algunos chicos de otras casas también lo hicieron.

Especialmente niñas.

Fue raro.

Usualmente era ignorado o despreciado por otros, algunos lo envidiaban, pero no lo admiraban.

El mundo era raro.

Se aprovechó, por supuesto, había estado regodeándose discretamente con todos en su casa, pero también hablando suave y dulcemente con herederos en otras casas; menos en Gryffindor, su padre no podría obligarlo y no lo haría. Incluso tenía charlas continuas con Daphne Greengrass, ambos sabían que era probable que ella terminara comprometida con Theo, pero al no ser nada oficial podrían hacer algunas reuniones con esa intención.

Las reuniones son en primera fase con los padres, pero siempre se hacen algunas previas con los involucrados para que el que tenga mayor importancia en la relación del visto bueno o no con su padre, para continuarlas más adelante. Draco era el importante, quien era el mejor postor y realmente no pensaba decirle que sí a nadie, pero eso no importa mucho.

Había dado su palabra.

Así que Daphne sería una chica con la cual probablemente tendría una especie de "cita" aunque en realidad sería una salida para ver su compatibilidad, que como sangre pura, no era muy importante dependiendo tu clase.

Regresando el tema, cuando llegó a la biblioteca y vio al niño con esa aberración en sus manos, esperando a Draco para trabajar en su proyecto de Runas; maldijo que Lavender no decidiera tomar runas y que Theo se hubiera apresurado para trabajar con Blaise. Goldstein parecía dispuesto a trabajar con él.

Pero ahora…

—¿Sabes que es Mitomagia? —pregunta el niño con ojos brillantes, Draco gruñe sentándose frente a él.

—Mi… hermano. —Es raro llamar a Nico así, pero de alguna forma se siente así—. Es fanático de la Mitomagia, es un juego raro, pero me ha obligado a jugarlo con él todas las vacaciones; tengo un mazo en mi habitación —dice con duda cuando los ojos del niño brillan emocionados.

La próxima cita de juegos de Sparky y el extraño hurón ("Thorin"), Goldstein obliga a Draco a quedarse para jugar unas partidas, el niño ganó y obligó a Draco a usar su nombre como lo habían prometido.

Maldijo a Goldstein por convertirse en Anthony.

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—Potter te está viendo, mucho, ya ni siquiera disimula —habla una mañana Theo, mientras caminan a su siguiente clase, Draco estaba haciendo malabares en sus manos con el cubo Rubik que le había quitado a Anthony el día anterior.

Percy y él estaban en un reto de quien lo lograría primero la próxima vez que se vieran, luego de ser humillados por Annabeth al comentar que ella era la más veloz de todos; Nico lo llamo nerd, Will sabiamente lo estaba ayudando mientras hablaba sobre su último viaje a la playa.

La idea de viajar todos a la playa fue tentador, no entraría al mar, pero jugar en la arena sería divertido con todos.

—Sí, lo que sea —gruñe cuando mueve el cubo, pero no da el color que quiere.

Maldice en griego, atrayendo la atención de Theo.

—Eso es muggle. —Señala como si quisiera advertirle que hizo algo mal, pero no lo critica demasiado.

Draco toma asiento en defensa en la parte de atrás, pensando que Lupin se horrorizaría sobre otra clase que ignora. Es verdad que ahora tiene que estudiar el doble por su cuenta, a veces envía cartas a Amos suplicando por consejos y este no responde tan rápido como quisiera. Aprovecha esta clase también para hacer sus otros proyectos, para cuando tenga tiempo libre poder estudiar defensa.

También ocupa entrenar algunas noches, Lavender gruñe, pero se acostumbra y se está haciendo hábil esquivando sus ataques.

Sigue hablando sobre conseguir un hacha.

Genial.

—Sí, me lo dio Goldstein, estoy en un reto con mi amigo, no me interrumpas —farfulla de forma enojada, Lavender toma asiento a su otro lado.

—Ohh, escuché que Annabeth lo puso como reto, de verdad, Percy y tú deben tranquilizarse —habla encantada, saluda vagamente a Theo y nota levemente sorprendido que este le regresa el saludo.

Ambos son raros.

No son amigos, pero hablan, raro.

—Siempre habla de ese tal Percy. ¿No es imaginario? —bromea Theo, pero Draco lo empuja, faltan algunos minutos para que Lupin aparezca y Draco solo se siente lívido.

Comienza a hablar en griego y solamente Lavender se ríe al entenderlo.

—Kataraménos gios tis skýlas (Maldito hijo de perra) —gruñe por bajo.

—Ypomoní agapité Ntráko, den théleis o agapiménos sou Pérsi na se vlépei étsi (Paciencia querido Draco, no quieres que tu amado Percy te vea así) —habla Lavender con fluidez que le hace sisearle como si fuera un hurón, pero esta solo se ríe encantada.

—Eso fue griego —dice una nueva voz, que congela a Draco un instante y levanta la mirada con el ceño fruncido.

Theo y Lavender rápidamente levantan las cejas sorprendidos, cuando Hermione Granger toma asiento al lado de Neville Longbottom, que no había notado estaba frente a ellos. Escuchó de Lavender que había pasado una discusión con Granger y Weasley como Potter por una escoba, estaba demasiado ocupado ese día hablando con Percy sobre que era imposible que un caballo cruzara nadando el mar solo porque Poseidón era afable con los equinos.

Los puntos de Percy habían sido ridículos y lo tuvieron todo el día distraído.

De reojo notó a Potter sentado lejos con Weasley, viéndolos fijamente y eso lo impresionó.

¿Por qué nadie le dijo que Potter lo miraba?

—¿Sabes griego? —preguntó Lavender con falsa dulzura. Sabe que no le agrada Granger, pero es posible que ocupen saber eso para no hablarlo frente a ella.

Odia que otros sepan eso.

—No —admite Granger ligeramente sonrojada—. Sé un poco de francés, pero no sé mucho sobre griego, aunque mi padre había ido algunas charlas donde escuché el idioma, solamente lo reconocí.

—Entonces querías fanfarronear que sabías algo, qué sorpresa —dice Draco antes de poder controlar la boca, maldiciéndose cuando ve el rostro de Granger cerrarse luego de eso, pensando que la estaba ofendiendo.

Lo cual sí, puede que hiciera, pero eso hace con todos.

Llamó a Percy el día anterior «idiota amante del agua», llama a Annabeth «idiota nerd de mierda», llama a Nico «chicle en su zapato» y a Will «bombilla viviente»; a veces llama a Lavender «chismosa insoportable» y Theo es «idiota ratón de biblioteca».

—Lo que sea —gruñe Granger desviando la mirada, recibe una mirada divertida de Lavender y Theo, pero es la mirada ligeramente decepcionada de Longbottom lo que lo hace gemir.

Percy también habría hecho esa mirada.

—Mira Granger —inicia, esta lo ve de reojo y Draco se ve tentado a patear su silla, no lo hace—. No te tomes a pecho lo que digo, es mi forma de ser, mira. —Voltea a ver a Lavender quien, aunque parece molesta, sonríe encantada a él—. Eres una perra chismosa, pero eres la amiga más cercana que tengo y daría mi vida por ti, aunque no iré a traer un libro de la biblioteca, aunque supliques —dice de forma dramática, haciendo que Lavender estalle en una sonrisa encantada.

—Oh querido Draco, sabes cómo hacer estallar el corazón de una dama.

—Qué asco, no saldría contigo, aunque no tuvieras piojos.

—Sigue diciendo eso de mi cabello rubio oxigenado y te delataré con Percy sobre cómo te comiste el panecillo que Goyle guardó con tanto añoro, le partirás el corazón.

—Era azul, se pondrá de mi lado.

Lavender se ríe encantada antes de ver a Granger con una expresión ligeramente molesta, pero acercándose más a Draco acariciando su mejilla demasiado duro.

Hace intento de morder su mano, Lavender la quita rápidamente.

—Lo que mi amado amigo quiere decir, es que es un idiota, sus insultos son su forma de hablar, pero lo creas o no, no quiere insultarte… tanto, solamente es un idiota. —Le lanza un beso, que Draco hace el gesto de espantar haciéndola reír.

Granger hace una expresión contrariada, pero suspira.

—Supongo, no me has dicho sangre sucia en todo este año. —No parece afectada por las palabras, aunque Longbottom se estremece—. También ayudaste a Neville y Harry, lo que me hace querer saber, ¿por qué? —Esta mocosa es demasiado lanzada.

Draco la admira unos momentos, pensando que él hubiera tomado un camino más sutil, pero ella fue una Gryffindor imprudente y no una mansa Ravenclaw por algo.

Se encoge de hombros.

—Es lo que hubiera hecho Percy. —No es una respuesta que la satisfaga, ve su rostro contrariado, pero es la verdad.

Eso haría Percy, eso hizo que Percy se sintiera orgulloso, eso hizo sonreír a Percy y Draco, aunque no fuera nunca su amante, quisiera ser alguien que hace sonreír a su mejor amigo.

—¿Quién es Percy? —vuelve a preguntar Theo ahora con interés y la sonrisa de Lavender es gigante.

—Créeme Nott, no quieres saberlo, harás que Draco hable horas y horas sobre Percy Jackson —dice Lavender trágicamente, con una mano sobre su cabeza—. Oh Lavender, la semana pasada Percy logró obtener una buena puntuación en el taller. Oh Lavender, Percy me dijo que debería mejorar mi barrida derecha. Oh Lavender, sabes que Percy ama la comida azul, si claro no importa que lo diga 7 veces al día es aún perfecto. —Estalla de risa al terminar.

Theo parece sorprendido.

—Eso es lo que hacía con Potter de niño —susurra y espera que fuera el único que lo escucha, así que lo patea bajo la mesa y este se queja audiblemente.

—Deja de decirlo así —farfulla indignado y sonrojado de lo mismo.

Lavender sonríe de forma depredadora.

—Lavender te hablé de cómo tuve que ver la Sirenita con Percy por quinta vez porque es su película favorita.

—Cierra la boca.

—Luego estaba la película de Spirit y no hablemos sobre su cosa rara entre ambos, sobre su tiempo juntos durante el verano.

—Estábamos entrenando.

—Si claro.

Draco le gruñe, a lo cual Lavender se ríe y cuando voltea a ver, nota la mirada intensa de Granger frente a él; levanta una ceja, a lo cual ella solo niega curiosa.

—Las películas son algo muggle —dice pausadamente y con cuidado, lo cual, nuevamente, es algo que Draco utilizaría mejor en solitario, cuando fuera necesario y no en el mismo momento que fue encontrado.

Se tensa, Lavender se ve horrorizada al saber que ha cometido un error, mientras que Theo parece querer comerlo con la mirada al parecer descubrir algo. Hay un minuto entero de silencio entre ellos, aunque todos en el salón parecen seguir hablando y la mirada de Potter sigue firme desde el otro lado del salón. Su cuerpo respira un poco lento unos momentos, antes de que se calme, no por él.

—¿Draco?

Lo siente, Percy envía olas de preocupación y deseo de calmarlo, no solo él, puede sentir débilmente a Annabeth también intentando tranquilizarlo y casi se ríe al sentir a una confundida Bianca que no se había visto afectada por el vínculo hasta ese momento.

Su pánico debió no poder controlar sus emociones.

Incluso en el quidditch o con sus amigos se controlaba para no dejar sus emociones fuera, pero se había asustado un momento y…

¿Qué importa?

Percy le había dicho, que fuera solamente Draco, que no se valiera solo de su apellido y aunque hay una gran probabilidad de escándalo si saben que el sangre pura Draco es un amante de muggles y sus cosas pudieran causar un caos.

Es lo que es verdad.

¿Es parte de él?

No es ser gay, lo cual era, pero ser parte del mundo muggle ahora también era parte de él. Las risas y experiencias con Percy durante su año en el mundo muggle. Los momentos con Will viendo películas en el campamento. Las charlas de Annabeth y el funcionamiento del mundo. Grover hablando de mejores parques. Silena diciendo sobre productos del cabello.

Sus padres estaban intentando entender.

Puede que no estuviera dispuesto a dejar que otros vieran sus preferencias, pero al menos esto, esto era algo que no debería tener miedo.

Era él.

Aun cuando Lupin lo intimidó, aun cuando se siente algo expuesto, aun cuando podría salir mal.

—Estoy bien Percy, solo un poco asustado, creo que acabo de sacar un poco de mi conocimiento muggle y se supone es secreto.

No han hecho esto tan seguido, solo lo hicieron una vez cuando estuvieron sosteniendo el cielo, ambos con el vínculo más unido que nunca.

Tal vez el mensaje no llegue completo.

—Sé tú mismo Draco, eres genial, eres mi mejor amigo y si alguien dice algo malo, iré hasta ahí para darle una patada porque nadie se burla de mi amigo; propiedad de Percy Jackson, eso debería estar tatuado en tu frente para que nadie te haga nada.

La respuesta es larga, inmediata y honesta.

Suelta una risa casi sin aire, sorprendiendo a sus cercanos, especialmente a Granger.

—Sí, las películas son algo muggle —admite Draco con una sonrisa casi libre, que no sabe si es suyo, es de Percy o es de la misma Bianca que intenta enviar sus emociones positivas con duda.

Annabeth parece aliviada, lo siente a la distancia, no habló con ella, pero lo sintió mejor.

Granger entrecierra sus ojos con muchas dudas.

Ve de reojo a Longbottom, quien lo ve curioso, pero sonríe levemente antes de voltear al frente cuando Lupin llega a clases. Vuelve a su cubo Rubik y le escribe una nota a Lavender que no hizo nada malo cuando esta parecía casi al borde de las lágrimas por hacer algo mal.

Todo está bien.

Sale de clase con Lavender sonriendo un poco aliviada porque siguen siendo amigos, Theo no dice nada, pero que se quede a su lado puede que fuera su mayor muestra de apoyo, o curiosidad. De reojo nota al finalizar la clase, cómo Potter se abalanza hacia Granger apenas se marchan, jura que ve el rostro de la chica exasperada dándole una mirada enojada como si fuera su culpa.

¿Qué ha hecho Draco?

Nada.

Idiota.

.

.

—Duró cinco minutos.

—Maldito seas Percy, es imposible, eres un idiota.

—Tus palabras me duelen.

—Hiciste trampa.

—…

—…

—Le pedí ayuda a Annabeth.

—Hijo de puta, no me mires así, Sally Jackson es una santa, hablo de tu padre.

Percy se estalla de la risa, lo que hace a Draco sonreír también. Detiene su llamada porque hoy le toca entrenar con Lavender, Percy se queda quejándose cual esposa dejada atrás por su amante y Draco finge que eso no le importa como lo hace.

.

.

Intenta ignorar a Anthony lo más que puede, ya se había vuelto loco ante el comentario de su madre el día anterior, luego que explicara que Nico desaparecía por unas horas sin poder ser encontrado, para luego aparecer con cara de "inocencia", que estaba preocupándolo. Su madre tenía la idea de que se escabullía algún lado y suele hacer preguntas, de temas de viajes de magos y si los semidioses pueden teletransportarse o viajar de formas similares; algo oculta y para sacarlo tuvo que hablar toda una noche sin detenerse sobre Mitomagia. Nico parece igual de celoso que Percy, cuando comenta que Anthony es un amante del juego y ahora tiene que convencerlos de que Anthony es solo un amigo.

No es que fuera desagradable a la vista.

Bien.

Draco tuvo que verlo varias veces, prestarle verdaderamente atención para notar que Anthony no era horroroso u otra persona más del mentón. El niño tenía cabellera rubia oscura casi castaña y ojos claros, no era más alto que Draco, pero tenía características del rostro bastante normales; no todos destacaban como un hijo de Afrodita, eso está claro.

Era alguien promedio.

Pero era inteligente, y Draco puede admirar que la inteligencia agrega puntos, además que solamente ha pensado en eso porque Lavender lo había señalado casualmente. El niño claramente era heterosexual, hay rumores que está detrás de Padma Patil, así que no piensa en nada raro; pero Lavender era un pequeño gusano mental que tenía poderes de manipular.

No iba a intentar nada.

No estaba desesperado y tenía planes este fin de semana. Era salida a Hogsmeade y Pansy había cobrado su favor, como esperaba, una locura. Quería ser la primera en su lista de citas planeadas para posibles compromisos, ser la primera le daría un estatus entre las demás familias, como la chica más interesante que podría obtener la familia Malfoy. Su padre había parecido curioso cuando solicitó a Pansy, ya que cuando era niño apenas si la soportaba, pero su padre aceptó.

Tenía que tener esas reuniones, Pansy subiría su estatus, todos ganaban.

—Espera por favor, solo dime si en verdad tiene la figura de Hades, es como super rara —señala Anthony con emoción cuando habló por error de Nico.

No entiende por qué Nico está tan a la defensiva, si pudiera hablar con Anthony, serían mejores amigos frikis o algo así.

—La tiene, su hermana se la… ¿Encontró? —dice Draco con amargura, recordando que gracias a eso casi mueren ambos.

Una locura.

Anthony asiente emocionado, están entrando a la biblioteca porque es el único lugar donde en realidad charlan juntos, fuera de las reuniones semanales de sus hurones donde juegan Mitomagia; el maldito juego lo perseguirá eternamente. Nota que Granger sigue estando a solas en una mesa, luciendo de mal humor, parece ser que cualquier cosa entre sus amigos está delicada por culpa de una rata y el gato peludo que tiene.

No le da más que una mirada, pero al notar que ninguna mesa aparte de la suya parece tener sillas vacías, está tentado a irse. Pero Anthony camina a la mesa ignorándolo, gruñe porque este tiene algunos resúmenes que realmente quiere; podría hacerlos, pero últimamente su entrenamiento con la lanza consume mucho de sus noches.

Gruñe un asentimiento a Granger, quien solamente saluda sin importarle su presencia metida en sus libros.

Rayos.

Y tiene que ganarle ese año.

—Debe ser bastante impresionante, dejaron de fabricar esas figuras hace años, son super caras —musita Anthony con un puchero, un poco más abierto de lo que fue inicialmente al conocerse—. Tengo una figura de Zeus que consiguió mi papá antes de morir. —Otra cosa interesante era como hablaba de su padre muerto sin parecer tan adolorido como… bueno… en el campamento hay muchos niños con Mommy o Daddy issues para elegir.

—Zeus es el peor de todos —dice Draco moviendo su mano indiferente, sonriendo cuando Anthony le pasa sus pergaminos que rápidamente comienza a copiar con velocidad.

Nota la mirada de Granger que es un claro: «estás haciendo trampa», que ignora.

Es un Slytherin por el amor de Hestia, no un Hufflepuff.

—En la mitología griega, Zeus es una divinidad a la que se denomina a veces con el título de «padre de los dioses y los hombres», que gobierna a los dioses del Olimpo como un padre a una familia, de forma que incluso los que no eran sus hijos naturales se dirigen a él como tal. Es el rey de los dioses y supervisa el universo. Es el dios del cielo y el trueno y por ende de la energía —habla Granger como si hubiera sacado la información de forma de un libro, curioso ya que casi no ven sobre los olimpos en Hogwarts.

Debe ser un nerd solamente por voluntad.

Qué asco.

—¿Quieres puntos por eso Granger? —pregunta con diversión, a lo cual ella gruñe, pero parece no tomarlo tan personal como en clase de defensa hace unos días.

—En realidad tiene razón, es el Olimpo más fuerte —añade Anthony pareciendo un poco ofendido de que hablen mal de su Olimpo favorito.

Ve.

Por esta clase de razones, aunque no fuera totalmente heterosexual, claramente hay diferencias demasiado grandes como para si quiera pensar que podrían tener algo.

Escuchó que le gustaba Star Wars.

Es una extraña combinación de Will y Nico que daba miedo.

—Un asco de padre en lo que podría indicar. —Recuerda a Thalia, la convirtió en un puto árbol—. Aunque no es culpa de este, todos en el Olimpo probablemente son malos padres, egocéntricos e idiotas… menos Hestia, ella es agradable —añade con un pulgar en alto, haciendo que Anthony ría ligeramente y Granger le dé una larga mirada antes de suspirar para volver a su libro.

Eso parece ser una señal para estudiar, curioso. Granger un Gryffindor que estudia tanto como un Ravenclaw, un Ravenclaw como Anthony que hace honor a su casa y Draco, quien está obsesionado con ganar.

Es adictivo.

Cuando ganó su partido de quidditch, fue una sensación de euforia total.

Estaba tan acostumbrado a su desastroso primer año en Hogwarts, además del campamento mestizo donde no suele… ser bueno en algo. En general es Percy arrastrándolo por ahí para mantenerlo con vida, aprendiendo todo sobre este nuevo mundo, descubriendo personas y quien es solamente siendo él.

Sin sus padres o los magos.

Ganar algo, ser bueno en algo, es adictivo.

—Este ensayo de runas es bastante asombroso —musita Anthony ligeramente asombrado y solo un poco celoso, que hace a Draco festejar de forma evidente.

Lo sabe.

Es totalmente asombroso ahora.

Granger no tiene sentido de la prudencia o decencia, piensa amargado cuando arrebata el ensayo de runas para leerlo rápidamente. Puede ver sus ojos seguir las palabras con una velocidad bastante impresionante, mira un poco preocupado a Anthony, quien tiene una mirada similar cuando Granger musita unos gruñidos regresando su ensayo.

Para luego buscar entre sus papales, claramente buscando algo y Draco nota de reojo que es su propio ensayo.

Voltea a ver a Anthony con una sonrisa divertida, cuando este desvía la mirada ligeramente sonrojado, ladea la cabeza curioso.

.

.

Al igual que las otras veces, esta vez no fue nada diferente, caminaba con Lavender hacia los lavados porque tenían un momento libre y Draco casi se estrella contra la pared cuando al esperar a que la niña terminara (pasaba demasiado tiempo viéndose al espejo en el baño de niñas); fue cuando lo vio. Mira hacia todos lados, alegre de no ver a nadie cerca, camina temeroso hacia el ventanal que, en lugar de reflejar el exterior, muestra la imagen de Percy Jackson. El chico parecía estar moviendo sus manos sentado frente al escritorio, con lo que parece un trabajo escolar frente a él, puede que suene ridículo, pero casi puede jurar que lo escucha cantar una canción.

¿Lady Gaga?

"…You're so fine, I want you mine, you're so delicious

I think about you all the time, you're so addictive

Don't you know what I can do to make you feel alright? (Alright, aright)

Don't pretend, I think you know I'm damn precious

And hell, yeah, I'm a motherfucking princess

I can tell you like me too and you know I'm right (I'm right, I'm right) …"

Draco lo ve lentamente con rostro en blanco, sin saber cómo decir que lo está escuchando y gracias a un olimpo (probablemente Hestia o alguien agradable) no tiene que hacerlo, este girando en la silla, suelta un chillido cuando al voltear su silla giratoria parece verlo.

Bien.

Eso probablemente es o una buena imaginación de su parte o no está loco.

—¿Draco? —Por el bien mental de ambos, va a ignorar lo que acaba de ver, para concentrarse en otra locura más.

¿Por qué ve a Percy en Hogwarts?

Mirando la imagen parece que el niño está en su habitación, lejos de él, como por diferentes continentes, y estaba vestido con ropas cómodas.

—Creo que me estoy volviendo loco —susurra Draco confundido, pero al sentir el vínculo entre ambos, sabe que hay confusión de parte de Percy.

¿Esto puede ser real?

—Joder, yo pensaba que me volvía loco, pero no, realmente estás ahí. —Percy salta emocionado de la silla, si no se equivoca está caminando en dirección del espejo de su habitación, el que fue colocado ahí por petición de Draco quien era un poco diva a la hora de su apariencia—. Creo que te había visto una o dos veces, pensé que me golpee la cabeza o algo —añade luciendo bastante aliviado al respecto.

Sí bueno, eso podría explicar el incidente en la clase de pociones a inicio del año escolar, Draco admira nuevamente la imagen.

Toca el reflejo, pero no es como si pudiera pasarse como si fuera algo mágico.

—Debe ser el vínculo —determina al final de pensar sus posibilidades, Percy asiente como si hubiera llegado a esa conclusión.

—Hablar mentalmente ya era algo raro, pero esto es incluso más. ¿Puedes hacerlo con otros? —pregunta desbordando en curiosidad, a lo cual Draco niega.

No tiene que intentarlo para saberlo, hasta el momento solamente habían ocurrido estos incidentes con Jackson, así que debe ser porque su vínculo de alguna manera siempre ha sido más fuerte que los demás; para bien o para mal.

Primero las emociones.

Luego la magia que lo apareció.

Hablar mentalmente y ahora… esto.

—Creo que deberíamos hablarlo con Quirón. —Esto se está saliendo de las manos, Percy hace un puchero pareciendo que le cancelaron la Navidad.

—¿Por qué? Ya tengo planes para bromas a los hermanos Stoll. —Y es un poco genial poder verlo hacer esas muecas, sin necesidad de mensajería Iris.

Esto podría ser más económico, después de todo, con quien más habla es con Percy todo el tiempo.

—Tú no duermes con ellos todo el verano —se queja Draco pensando que, si sabe que están involucrados, los hermanos Stoll eran vengativos e ingeniosos.

Percy se encoge de hombros.

—Te quedas en mi cabaña si quieres, Poseidón me debe unas, así que no debería quejarse.

—No estoy interesado.

—Tengo mi propia ducha.

—Actualización de estado, ahora estoy muy interesado.

Percy sonríe de manera radiante ahora, lo cual hace que Draco sonríe de regreso, era imposible que alguien que conociera a Percy no sonriera cuando este lo hizo; podría ser un hijo de Apolo por sus usuales sonrisas que levantan el ánimo de cualquiera.

Las sonrisas de Will solían ser cálidas como el sol también.

La sonrisa de Percy disminuye un poco, antes de hacer la vista como si quisiera ver sobre su espalda, pareciendo solo ligeramente divertido; no parece para nada afectado por este nuevo avance en su vínculo, como si ambos ya no pudieran sorprenderse más de las cosas que ocurrían a su alrededor.

—Hay un chico en tu espalda con un trozo de papel en sus manos —señala Percy con sonrisa divertida.

Draco salta alarmado de ser atrapado, como si estuviera haciendo algo mal, no es que fuera malo, solamente muy raro. Su rostro se vuelve pálido cuando ve que se trata de Potter guardando un viejo pergamino doblado en su túnica, viéndolo con los ojos ligeramente molestos y algo confundidos. Voltea rápidamente a su espalda, pero el reflejo de Percy ha desaparecido y ahora solamente se ve el exterior del castillo.

Típico, abandonándolo en el peor momento.

Idiota.

Voltea a ver a Potter con apariencia calmada, totalmente fingida. Tiene una suposición de que si es por el vínculo, nadie más había prestado atención a Percy, solo él; ante los ojos de los demás solo era un loco hablando solo con un ventanal.

Su interior está horrorizado.

¿Por qué de todos tenía que ser él?

Su respiración era ligeramente más rápida, pero nadie podría reconocerle, incluso Percy no debería ser capaz de notar sus nervios.

El maldito idiota parecía burlarse de él por el vínculo de emociones y su pánico.

Lo asesinaría lentamente cuando lo volviera a ver, era una promesa.

—Potter —saluda, aunque nunca lo hiciera, por el rostro levemente sorprendido e incrédulo de Potter, debe saber que eso es algo que nunca hacen.

Pero bueno, acaba de quedar como un loco que habla con cristales sin nadie presente, todo porque Lavender dura mucho en el baño.

—Malfoy —dice este luciendo tan incómodo como él, así que Draco desvía la mirada, librándolo de cualquier conversación innecesaria entre ambos.

Sigue adelante, camina y ve a lo que sea que haya ahora mismo. Draco disfrutó con mucha atención las telas de araña de la pared un buen rato. Pero cuando volteó a ver, Potter seguía ahí, frente a él, a una sana distancia entre ambos, con el rostro serio como si estuviera tomando aire para hacer algo que no quiere.

Oh no.

Iba a preguntarle por el reflejo.

¿Habría visto a Percy?

Prefería mil veces luchar contra titanes, piensa alarmado.

Qué pensamiento más deprimente.

—La verdad Malfoy, necesito decirte algo —habla lentamente el niño, como si estuviera sobre pensando la mejor manera de decirle que estaba loco.

Las alarmas comenzaron a sonar en su cabeza y cuando Lavender salió del baño luciendo tranquila, esta se detiene para ver a ambos sorprendida. Draco no le importa parecer de forma descuidada cuando se abalanza hacia ella como si fuera su salvavidas, Potter hace un pequeño sonido irritado, pero cuando lo ignora olímpicamente para arrastrar a Lavender lejos de este, no dice nada.

Solo sigue su camino, como debió haber hecho siempre.

Draco jadea un poco aliviado cuando están en otro pasillo, Lavender le mira con ojos bastante intrigados, pero la ignora.

—Tengo un problema.

—Con Potter.

—No, con Percy.

Ahora las cejas de la niña se levantan, como si hubiera dicho algo que no tiene sentido, y cuando Draco sabe que lo mejor sería desviar su atención, suelta su nuevo problema.

Lavender comienza a reírse ante su problema.

Sí.

Necesita nuevos amigos y mantenerse alejado de Potter todo lo posible.

Continuará…

Las locuras de Draco y Percy no tienen final, me encanta Nico en Hogwarts, ha estado desapareciendo de la mansión Malfoy.

Nico ten cuidado.

Por otro lado, vemos los problemas adolescentes de Draco, el primer arco tuvo un total de 10 capítulos, calculo que con este probablemente mantengamos los 10 capítulos o uno más con suerte. Vamos a ver que tanto se alarga el final del segundo arco y pasa algo que todos habían estado esperando por un tiempo.

¿Harry no es adorable?

Si bien aún no le agrada Draco, bueno, ya veremos un poco más de este en el siguiente capitulo.

Lección aprendida: nunca retes a un fandom.