-Como siempre, ni la historia ni los personajes me pertenecen en lo absoluto sino que son de la exclusiva propiedad de Masashi Kishimoto, yo solo oriento y/o narro la historia en la medida que me es posible, aludiendo lo que creo que podría haber tenido lugar entre Sasuke y Sakura después del fin de la guerra hasta lo que aun sigue sucediendo hasta ahora. La narración, sin duda alguna, es de mi absoluta responsabilidad.
El motivo exacto por el que todos estaban reunidos era un misterio, y con todos se referían a él, Naruto, Hinata, Tsunade y Kakashi, así como Sai e Ino. La festividad en cuestión era obra de Ino que había intentando aligerar el ambiente ante el regreso del Uchiha y habiendo escuchado de la propia Sakura que esta deseaba hacer un anuncio importante, más no había aclaro el que exactamente. Naruto se encontraba abrazando a Hinata con una sonrisa mientras Ino le comentaba algo a Sai de manera cómplice, y Tsunade intentaba tentar a Kakashi de apostar como siempre, más el Hatake no se dejaba convencer.
Sasuke no solo no se sentía cómodo en esa clase de ambiente, sino que además se sentía extrañamente inquieto con tanto secretismo de parte de Sakura quien aún no se hacía presente. ¿Qué deseaba transmitirle a todos como para tenerlos ahí reunidos? Él, al menos, no conseguía comprender o cuestionar que exactamente y eso era lo que más lo tenía nervioso, la incertidumbre. El repentino eco de pasos lo hizo levantar la mirada hacia la puerta que y de por si se encontraba abierta de par en par anteriormente, encontrándose con Sakura.
La mirada de la pelirosa se clavó en la suya con inusual seriedad.
-Sasuke—pronuncio con voz clara y fuerte.
Todos detuvieron sus quehaceres y conversaciones en cuanto la vieron entrar, esperando que dijera aquello que planeaba emitir, más su silencio resultaba inusualmente inquietante. Sabiendo, producto de las propias palabras de ella, que lo que iba a tratar era sobre su persona, Sasuke avanzo dos pasos había ella que en ningún momento se parto de las puertas, marcando una distancia que no le agradaba en lo más mínimo. Ella jamás actuaba de esa manera y estaba comenzando a hacerlo sentir nervioso.
-Llevo demasiado tiempo guardándome esto, todo por el bienestar de la aldea, de los Shinobis, siempre guardando silencio, emitiendo lo necesario—inicio Sakura haciendo vagar sus palabras. El Hokage presente frunció el ceño con confusión ante sus palabras, más Tsunade fue quien bajo la mirada al saberse aludida. -Esta vida es cruel y no me refiero solo a nuestras expectativas sino a lo que vivimos, a lo que somos; a lo que pretendemos ser—la seriedad en el rostro de la pelirosa se vio obstaculizada por un repentino reflejo triste en su mirada y una solitaria lagrima que resbalo por su mejilla. -Ocultar los sentimientos es lo que dictan las normas y principios Shinobi…- pronuncio al saber que todos la elogiaban por mantener sus emociones al margen cuando era requerido, -pero yo ya no puedo hacerlo, mi corazón no aguanta más—chillo Sakura con la voz quebrada. La mirada del Uchiha en ningún momento la abandonado, preocupado y asustado por el tono que estaba usando y el camino que estaban tomando esas palabras, más ocultando sus emociones. -¿Alguien pensó siquiera cuantas veces llore o sufrí?, ¿Les importe realmente siquiera?, ¿Acaso alguien llego a imaginarse el dolor que sentí?—lloro Sakura con la voz totalmente quebrada. Hinata quebró su expresión al escucharla, consiguiendo empatizar con lo que ella estaba pronunciando. -Yo responderé por ustedes; no—sentencio la pelirosa.
De manera instantánea, bajo la apertura de su traje, exactamente a la altura del fajín en su cintura que enmarcaba su figura, Sakura extrajo un Kunai que sostuvo entre sus manos peligrosamente. La mirada confusa de todos se transformó en miedo y angustia en cuanto la vieron con aquella arma en las manos y no con intenciones de agredir a alguno de los presentes, sino a sí misma y ese era el problema en cuestión.
-Sakura…- intento hacerla desistir Kakashi, de pie tras Sasuke, avanzando un paso hacia ella.
A modo de respuesta, Sakura retrocedió un paso y acerco de manera inmediata el Kunai a su pecho, apuntando el filo contra el punto exacto donde estaba su corazón con aquella desconsoladora expresión de dolor en el rostro que estaba haciendo que el corazón del Uchiha se viera oprimido por la más insólita incertidumbre y pánico que hubiera sentido jamás, temiendo lo que ella pretendía hacer y que de realizar habría de ser lo más doloroso que pudiera presenciar.
-Atrás—protesto Sakura con la voz quebrada pero inusualmente serena, -no evitaran esto—garantizo sosteniendo firmemente la empuñadura del Kunai entre sus manos.
Los pasos se escuchaban cada vez más cerca, o eso percibió Sasuke, de espalda hacia todos los demás mientras sus ojos se clavaban en Sakura, casi rogándole de manera omnisciente que no hiciera aquello que parecía tener muy claro en su mente, pero la mirada de la pelirosa distaba totalmente de cualquier arrepentimiento posible.
-Sakura, ya basta—protesto Tsunade en voz alta, temiendo por la vida de su alumna.
Naruto estaba mudo ante aquella escena, conociendo bien a Sakura y sabiendo además que nada la haría desistir de la idea que tenía en mente, intentar confundirla para evitar lo que ella tenía en mente era absurdo, era demasiado necia y terca como para permitir que evitaran su actuar. Hinata por el contrario, de pie a su lado, temblaba mientras se sentía al borde del llanto al ver flaquear a Sakura de esa manera, ella que siempre había parecido fuerte y digna, toda una Kunoichi y alumna de una Sannin…ahora mostraba cuan herida estaba realmente
-Esto no vale la pena, Sakura—murmuro Hinata con la voz quebrada por el miedo y la tristeza de empatizar con la Haruno que la observo de igual modo, haciendo chocar ligeramente el filo del cunai contra la tela de su ropa. -No lo hagas, por favor.
-Ya me canse de cerrar los ojos y aguantar. Esta vez hare lo que quiero—pronuncio Sakura, observando Hinata, sintiendo que era la única que etaba enteidndo sus dolor pro medio de su empatía.
De manera seca e inmediata y con un ligero chirrido metálico que se produjo al cortar a través de la tela, Sasuke contemplo con horror con Sakura se apuñalaba a sí misma en un intento por evitar el dolor que decía sentir y del cual él se sentía completamente responsable, y lo era realmente. Un jadeo de sorpresa y terror abandono los labios de todos los presentes ante aquella secuencia que, como una visión, se repitió en la mente de todos.
-¡Sakura!—grito Sasuke en cuanto la vio cerrar los ojos por el dolor.
Olvidándose por completo de lo que lo rodeaba, de la presencia de Naruto, Hinata, Kakashi, Tsunade y cualquier otra persona, Sasuke corrió hacia Sakura tan rápido como se lo permitió su cuerpo, evitándole una segura caída, sosteniéndola entre sus brazos, demostrando su miedo al verla al borde de una muerte vaticinada por la herida que se encontraba en su pecho y que no cesaba de sangrar. Pese a la tórrida escena en frente suyo, el Uchiha era incapaz de extraer el Kunai del pecho de la Haruno por temor a que la herida se abriera más de lo debido, pero sabiendo a su vez que no podía hacer nada.
La mano de la pelirosa cayó al costado de su cuerpo, chocando contra el suelo de manera inmediata en cuanto sus ojos se cerraron y su pecho dejo de emitir respiración alguna, haciéndolo alejarse mentalmente de aquello que lo rodeaba, únicamente escuchando los desgarradores sollozos de Hinata, Ino y Tsunade a su espalda…
El Uchiha abrió los ojos de manera sorpresiva en cuanto aquella escena fue demasiado para su psique, removiéndose incomodo contra el tronco del árbol a su espalda. Sus ojos recorrieron su entorno de manera inmediata, encontrando a Sakura recostada a su lado, cubierta con su capa de viaje y utilizando su bolso como almohada, teniendo una expresión de completa serenidad en su rostro. Suspirando al darse cuenta de que aquello no había sido sino una pesadilla cualquiera, Sasuke se apartó ligeramente el flequillo de la frente.
Pocas pesadillas podían afectarlo de semejante manera salvo si se trataban de Itachi, sus padres o cualquier evento del pasado, pero ahora Sakura era parte importante de su vida y de su existencia, ella era la mujer más importante de su vida en ese instante y a lo largo de los años, su presencia era netamente necesaria en su vida. Un te amo específicamente claro habría de tardar en salir de sus labios por culpa del miedo a perderla. Había perdido a su familia; su hermano, su madre, su padre…¿Cómo no temer revivir aquello? Perder a Sakura era algo que no podría tolerar, no otra perdida de semejante importancia en su existencia. Perderla a ella sería demasiado y esa pesadilla ya lo había alterado lo suficiente como para hacer desaparecer todo rastro de sueño en su semblante.
Parpadeando ligeramente, luego de haber percibido el sutil cambio en la respiración del Uchiha, Sakura abrió los ojos, levantando su mirada hacia Sasuke quien se encontraba ligeramente tenso y con su mente lejos de ella. Llevaban, aproximadamente, media semana viajando juntos y en ningún momento se habían arrepentido de tal decisión, complementándose perfectamente el uno al otro, y durante todo ese tiempo Sakura había conseguido aprender a leer a Sasuke como un libro, leyendo sus emociones perfectamente camufladas pero notablemente sinceras, comprendiendo sus pensamientos y aludiendo la forma ne que respiraba y lo que ello significaba, y en ese momento Sasuke parecía estar frustrado o molesto consigo mismo.
Apartando su capa, que hasta entonces había cubierto su cuerpo para evitarle percibir el frio, la pelirosa se enderezo, clavando su mirada en el Uchiha. Tal era la concentración que rondaba la mente del Uchiha para con sus propios pensamientos que este se sorprendió en cuanto la sintió posar una de sus manos sobre su mejilla.
Las miradas de ambos, sin necesidad de emitir palabra alguna, se entrelazar de aquella forma tan especial que conseguía suceder, leyendo los pensamientos del otro, tormento y serenidad, sufrimiento y melancolía que brillaba en los ojos de ambos mientras se observaban. Sakura no quería sino evitar que Sasuke fuera abatido por pensamientos tan negativos y tristes que lo hacían rememorar un pasado tan doloroso para él mismo, claro, ninguno de los dos podía evitarlo puesto que era parte importante de su vida y de quien era, su pasado y su familia, Sakura no deseaba que el olvidara todos los momentos que había tenido en aquel pasado inocente, pero solo quería que Sasuke recordara aquello que no le era doloroso, lo cual era muy difícil.
De vuelto a la realidad y contemplando el sereno y apacible rostro de la pelirosa, cuyos ojos permanecían clavados en él, Sasuke consiguió serenarse tanto como él fue posible luego e lo sentido y visto en su pesadilla que, por más que no fuera real, había conseguido desencadenar su miedo. Si, puede que un criminal como él, con tamaña lista de errores no admitiera el sentir miedo pero lo sentía, temía que nuevamente le fuera arrebatada aquella persona insólita e incuestionablemente importante en su vida, por eso no pronunciaba te amo como seguramente el Usuratonkachi habría de decirlo, pero era porque tenía muchos enemigos y por qué arriesgar a Sakura era lo que menos deseaba hacer. Sumido en aquellas divagaciones que azoraban de vez en vez su mente, maravillado con el brillo sincero e inocente en los ojos de Sakura, Sasuke comenzó a darse cuenta de la proximidad que tenían los rostros de ambos y de cómo se acercaban conscientemente a cada segundo que pasaba, haciendo entrelazar las respiraciones de ambos.
-Sakura, yo…- titubeo Sasuke.
La mirada se la pelirosa se entrecerró, dirigiendo su mirada desde los ojos a los labios del Uchiha quien estaba haciendo acopio de cada fracción de su autocontrol para no hacer aquello que llevaba tiempo conteniendo realizar. A conciencia, Sakura acerco a un más su rostro marcando una escasa distancia entre los rostro de ambos provocando que los labios de ambos casi se rozaran de manera intermitente.
-Lo sé—murmuro Sakura con una sonrisa.
En un choque tremendamente suave y sutil, perfecto y tan escaso que los hizo temblar ambos por un breve instante, los labios de ambos se encontraron de manera escasa pero lo suficientemente necesaria en ese momento, haciendo que sus miradas se encontraran de manera inequívoca.
Envolviendo sus brazos alrededor del cuello del Uchiha, Sakura bes la frente de Sasuke, sonriéndole como siempre para conseguir alejar esos pensamientos tan melancólicamente tristes de su mente, haciéndolo recostar su cabeza por sobre su pecho, jugando cuidadosamente con su cabello mientras su mirada se perdía en el horizonte, percibiendo como los primeros rayos del sol decoloraban el oscuro cielo cubierto de tinieblas para dar paso a la luz, sintiendo a Sasuke abrazándola de aquella forma tan protectora y única que la hacía sentirse al borde del llanto producto de la alegría y plenitud que sentía y que jamás había considerado posible, ninguno de los dos.
Sabía que, y pese a todo lo mencionado por ella hasta hacia muy poco, Sasuke seguía considerándose completamente inmerecedor de los sentimientos que ella le profesaba, sintiendo que no era lo suficientemente bueno para los ideales que ella tenía de su persona, considerando que ella estaría mejor con alguien más pero no consiguiendo concebir aquella idea siquiera. Pero lo cierto es que estaba indudablemente enamorada de Sasuke y sabía que él lo estaba de ella. Muchos de sus amigos, en sus nuevas relaciones y/o matrimonios en el caso de Naruto y Hinata, habrían de necesitar ese "te amo" en uno que otro momento fugaz del día o del tiempo en que estuvieran juntos, pero ella no lo necesitaba porque conocía a Sasuke y sabía que más que palabras lo que valían al tratar con el eran las acciones y la sinceridad que podía transmitir ese lazo que los unía a ambos. Escuchar un te amo de parte de él era algo que deseaba oír, pero que estaba más que dispuesta a esperar cuanto fuera necesario. Lo había esperado a él durante años, ¿no?, ¿Qué más frustrante o exasperante podía ser esperar solo una palabra que había de corroborar aquello que sabían que latía en el corazón del otro?
No lo necesitaban porque los corazones de ambos pronunciaban ese te amo, latiendo al mismo tiempo por la persona que evocaba su completa devoción y honestidad.
Pretendían partir en cuestión de solo unos segundos ya que todo estaba claramente listo y dispuesto para continuar con el viaje.
Sakura termino de revisar sus cosas muy meticulosamente en caso de que algo estuviera faltando más corroborando que eso no era así y, además asegurándose que la fogata encendida la noche anterior estuviera completamente extinguida. Sasuke se encontraba de pie esperando pacientemente a que ella estuviera lista para seguirlo. Viendo a la pelirosa corroborar el tener todo lo necesario para seguir, el Uchiha se acercó a ella que terminaba de acomodarse la capa por sobre su ropa. La pelirosa, una vez estuvo perfectamente lista, levanto su mirada hacia Sasuke, más que dispuesta a ponerse de pie, encontrándose con la mano de él que le ofrecía ayudarla.
El beso ocurrido la noche anterior, corrección, el primero beso ocurrido la noche anterior seguía plena y completamente latente en la mente de ambos, era palpable cada vez que sus miradas se encontraba y esa cercanía se producía nuevamente, conduciéndolos a un espiral de emociones y sensaciones que, si bien comprendían, era la primera vez que vivían o se daban la oportunidad de vivir.
Sujetándose certeramente de la mano del Uchiha, Sakura se sorprendió en cuanto sintió a Sasuke haciéndola levantarse con un solo movimiento. Notándola ligeramente aturdida por su velocidad, Sasuke no tardo en envolver su brazo alrededor de la cintura de la pelirosa quien se sostuvo de sus hombros. La repentina cercanía de sus rostros y sus respiraciones ineludiblemente volvió a hacerlos revivir los recuerdos de aquella madrugada y amanecer que había sido testigo de un momento tan inmensamente importante para ambos. Pero esta vez era diferente; la noche anterior habían sentido temor y añoranza de por medio al compartir ese primer beso, esta vez se palpable el deseo y la necesidad del otro, algo que ya no podían eludir.
Prácticamente leyendo los pensamientos del Uchiha, y de la mera más rápidamente posible, Sakura deposito un corto y sumamente breve beso sobre los labios del Uchiha que frunció el ceño ante esto, haciéndola sonreír todavía más. En ese momento y a plena luz del día, teniendo el propósito de seguir con su viaje, no tenían oportunidad de volver a vivir lo que había tenido lugar la noche anterior, más no significaba que no lo desearan.
Ya habría tiempo para seguir las cosas su propio ritmo, no había prisa alguna que implorara que las cosas fueran de otra forma.
PD: tomando en cuenta lo aludido por ryomaysakuno93, quizá lo haga pero requiero tiempo y agradecería que ustedes me den alguna idea porque me serviría y mucho :3 cambie de parecer y el matrimonio tendrá lugar en uno o dos capítulos más para desarrollar la relación de Sasuke y Sakura como yo creo que avanzo durante el viaje. De cualquier forma, nuevamente, pido su opinión para que comenten aquello que tengan en mente tanto para los próximos capítulos como para la boda :3 quiero que todo salga lo mejor posible ya que Pierrot no nos ha dado momento SasuSaku y, sin ofender a nadie, dudo que lo haga. (pero si lo hiciera seria maravilloso) :3 gracias y hasta la próxima.