Hey hola a todos ¿Qué tal?.

Pues gente, estoy preocupado la verdad, no soy de este fandom y de ningún otro la verdad, ¿pero que esta pasando?, ha estado últimamente todo muy desatado, es cierto que apoyo a los que me han estado ayudando pero la verdad que desastre sinceramente, gente que no conozco y que a pesar de haber dejado mis mas sinceros pensamientos peleándose por dos bandos, una tremenda critica escrita por uno de mis mas grandes lectores, ademas de ello, gente falsa mostrando verdaderos colores, aun así este fic seguirá existiendo y hasta terminar con el.

Ahora responder reviews.

El Redentor 777: Tenia que hacerlo la verdad, es extremadamente distinto la verdad, este será para abrirme mas puertas a otros lugares mas adelante, obviamente por ahora ando por aquí, gracias por tu comentario.

Jose Cena 23: Es cierto, mi especialidad son las peleas y las guerras, ya que la acción es algo que me da la adrenalina y de hacer historias, pero tambien se un poco de lo que es vida escolar y diaria, me alegro que te guste y no como dicen otros, que Touya destaque y no sea uno del montón, gracias por tu comentario.

Criticas Fics 15: Ya vi de que hablabas, fue intenso, la verdad duele y mucho pero bueno solo hay pocos que dirán cosas ahí por defender cosas que ni siquiera se pueden defender, la directora desde el primer capitulo en el anime ha mostrado ser uno de los mejores adultos, siempre apoyando a su hija en todo, pues la verdad tenia que hacerlo, por el bien de la trama, ya veras, mas adelante jajaja, gracias por tu comentario.

Sagawa Subaru: Pues la supremo kaio-sama (Kaio-Shin o Kayochin) ha encontrado a alguien que es amable y aparte que quiere acercarse a ella para ayudar no solo en el ámbito del estudio si no social, Touya lo hizo, como dije antes lo saque de un manga el manga se llama "Need a Girl", no recuerdo que capitulo fue, pero lo vi ahí, gracias a los buenos amigos, gracias por tu comentario.

Darkersouth: Me alegro que te gustara, intentare hacerlo mas seguido, creo que a muchos esa fue la escena favorita, pues Joan lo hizo bien, por Dimitri quien no lograba hablar con Nozomi por que esta estaba cercas, gracias por tu comentario.

CON ESTO DOY CONCLUIDA EL RECIBIMIENTO DE LOS O'C PARA LA NUEVA HISTORIA, GRACIAS A LOS QUE VAN APARTICPAR :).

Esto ha sido todo de los comentarios, es hora de leer este nuevo capitulo.


Los fines de semana, aquellos días que son los sábados, días en donde la gente está descansando para de esta manera seguir el día a día, algunos negocios no podían si quiera tener reposos esos días, empresas, restaurantes, hasta a veces algunas academias las cuales preparaban a los estudiantes de preparatoria para hacer el examen de admisión a la universidad, también eran días que algunos no disfrutaban tanto como otras personas.

Sin embargo, aquí era distinto en muchos casos, pero quitando el enfoque de la actualidad y concentrándonos en este fin de semana, un joven caminaba por las calles de la gran Akiba, el cual iba a tomar su tren bala para dirección a un lugar específico, este miraba su celular móvil, el cual debía lo siguiente.

"Hoy no podré jugar, mi mama llegara a Japón el día de hoy"

El mensaje era claro y conciso, por lo que el fin de semana para este joven iba a ser difícil, en especial por qué su plan era muy típico y repetitivo, jugar videojuegos hasta a hartarse, solo que en esta ocasión parece ser que ni siquiera eso podrá hacer, pero aun así este esperando su vehículo para que lo llevará hacia la dirección que le correspondía ir.

Ante ello vio como el potente tres a la hora exacta y especificada había llegado, la puntualidad que tenían los asiáticos, en especial los japoneses le sorprendían bastante, el joven no era muy puntual en su horario, pero siempre intentaba hacer todo a tiempo, aun así, las costumbres de otros países eran algo que le impresionaba bastante.

De hecho, en ese instante vio como gente en orden bajaba del vehículo tren bala para así este al igual que un montón de personas comenzarán a subir al vehículo, en ese instante al estar arriba el joven sería de los pocos que llegaron a alcanzar un lugar para sentarse, en ese momento el joven quiso ponerse sus audífonos para escuchar música, sin embargo, se había dado cuenta de que no llevaba su dispositivo para escuchar la música.

Quiso maldecir en voz alta, pero recordó que en él tren bala donde estaba no podía decir nada, por lo que solo rodó sus ojos y se puso a indagar en sus redes sociales para entretenerse a sí mismo, mientras el vehículo comenzaba a cerrar sus puertas y a proceder a moverse a dirección a la calle donde debía estar.

Curiosos, sobre todo, Japón tenía a Tokio, una de las capitales más famosas del mundo, obviamente no se comparaba al turismo de Nueva York pero sí que tenía lo suyo, sin importar la época del año en la que se encontrasen, siempre había uno que otro extranjero ahí indagando en las calles de la ciudad del sol naciente.

Más que nada por qué el castaño desde una distancia vio a una señora que parecía estar entre los treinta y cuarenta años, con un cabello rubio el cual lo tenía en una larga cola peinada y ojos azules, esta vestía con una blusa blanca y unos jeans que le quedaban bien, se notaba de inmediato cuando alguien no era asiático, como esa mujer ahí presente en sus ojos, la cual ni siquiera se había dado cuenta de que la mirada del muchacho estaba sobre ella.

El joven sabía que iba a llegar así destino en minutos, por lo que no había razón por la que este debía estar sentado, este vio a los alrededores y no había embarazadas, ancianos o personas con alguna incapacidad física que les dieran algún impedimento como lesiones o falta de extremidad alguna, por lo que el joven sin hablar hizo señas, en donde un sujeto que estaba alado de la señora le tocó el hombro, está cuando vio a donde le señalaba el hombre vio al joven haciéndole señas.

Ella entendería a que se refería, que le iba ceder su lugar y esta con una sonrisa comenzó a acercarse al lugar este se procedió a levantar y entregarle su lugar a la señora la cual acepo con gusto el asiento, el joven ante ello siguió revisando sus redes sociales, hasta que el vehículo se detuvo, el joven miro y escucho a donde estaban parados y este se dio cuenta de que faltaría otra parada más para llegar hacia su destino.

Ante ello solo siguió esperando, el tren bala era rápido y de hecho muy pocas personas llegaban a desmayarse, tenía un excelente control el vehículo en sus movimientos, además de que no era común que la gente en el vehículo moderno llegase a tener problemas de salud, pero aun así estaban precavidos algunos.

No fue hasta que sucedió algo malo como se estimaba en algunos momentos del día a día.

El joven de reojo vio a un típico pickpockets, aquellos tipos que robaban carteras o objetos de valor a las demás personas, uno de ellos no muy inteligentemente intento estirar su mano discretamente hacia la bolsa de la señora quien no parecía darse cuenta de lo que estaba sucediendo, en especial por el hecho de que esta estaba más enfocada viendo el paisaje en la ventana como si se tratara de algún momento nostálgico.

Sin dejar pasar esta acción el joven de inmediato cuando vio como el ladrón estaba sacando la cartera de la señora de su bolsillo actuaría de inmediato agarrándole del ante brazo, esa acción brusca e inmediata, hizo que muchos ojos se posaran en el joven y el pickpocket quien al notar cómo alguien le estaba agarrando con tanta fuerza el antebrazo miraría con miedo hacia la persona quien lo había atrapado, de hecho la señora ante ello miro como alguien estaba intentándole robar y el joven que le cedió su lugar había detenido a alguien de una.

En cuestión de segundos alguien del lugar apretaría el botón de urgencias el cual llegaría unos oficiales, de hecho, el ladrón no quiso hacer mucho show, de hecho el sujeto se veía muy joven, casi de la edad del muchacho, ahí sería este atrapado de inmediato y cuando llegaron a la siguiente estación el joven también bajaría con calma del lugar, algunos que estaban abordó decidieron testificar todo lo que habían visto con el pickpocket.

El joven por su lado no quiso meterse en problemas, ya que tenía cosas que hacer aparte de aburrirse todo el fin de semana sin hacer nada, ante ello este vio hacia atrás que alguien le estaba llamándole, este al voltear a dirección del a voz, se dio cuenta que se trataba de aquella señora de hace unos momentos.

-Te agradezco mucho lo de hace unos momentos-a muchos le parecería raro escuchar a un extranjero hablar fluido el japonés, aún que a este no le extrañaba mucho ya que era uno de los pocos que dominaba el idioma con fluidez.

-No hay nada que agradecer, al fin acabo independientemente el país, siempre habrá gente que intente aprovecharse de uno, solo estaba en estado de alerta en mis alrededores-el joven diria mientras rascaba la parte trasera de su cabeza.

-Hablas muy bien Japonés, pero no pareces es serlo, ¿eres extranjero?-

-En efecto, lo soy, vengo de México-la mujer al escuchar la nacionalidad quedó pensativa y luego sonreiría ante ello mientras se veía amigable con este.

-Me alegro de que haya gente de afuera con buen corazón, me gustaría saber tu nombre antes de que nos vallamos-el joven quedo extrañado, este sabía que lo más probable que nunca más la iba a ver, en este mundo tan grande y en este país el cual, si de por sí tenía la misma cantidad de población que su país nativo, pero sobre todo pero que está parecía que tarde o temprano regresaría a su país de origen y nunca más iban a verse.

-Me llamo Joan-diría este con calma mientras se despedía de la mujer, curiosamente esta iba hacia la misma dirección a donde este iba, aun así, no le cuestionó nada, al fin acabo no tenía por qué sospechar de la mujer.

De hecho, en el trayecto sin perderse la vista del uno al otro Joan vio extrañado a la señora la cual seguía mirando los alrededores de la ciudad.

-¿No es la primera vez que viene para aca?-al escuchar la pregunta del joven la mujer negaría con amabilidad sin perder su gesto cálido.

-No, de hecho, mi esposo es de aquí, mis hijos estudian aquí en Japón-diría está con naturalidad, como si Joan se tratara de alguien que ya conocía desde antes, cosa que dejó muy extrañado al castaño, en especial por la gentileza con la que se dirigía a este.

-Interesante, por cierto, nunca me dio su nombre-al decir Joan eso la mujer asistió con mucha calma mientras hablaba con un tono calmado.

-Me llamo Elena, pensé que no ibas a preguntar por mi nombre-ella manifestaría con calidez aún presente en su aura maternal, ante ellos la rubia miraría unos momentos al joven quien se pondría nervioso unos momentos-¿Eres estudiante de intercambio?-

-En realidad llevo 1 año viviendo aquí con mi papá-mencionaría el joven mientras e corría las calles familiares para su entorno y también las que este ya tenía en su mente conocidas para llegar a su hogar.

-Eso es bueno, Japón es un lugar grande, aún que la verdad es demasiado caro-diría mientras ambos estaban llegando hacia una calle que a Joan le parecía familiar por ver una casas a lo lejos de este mientras resolvía algún incógnita.

-Un momento, usted es…-cuando este vio como la señora se detuvo en frente de la casa Joan diría en voz alta, pero sin gritarlo-Ayase Elena-

-Ha sido un gran placer en conocerte Joan Carlos-la rubia diría mientras mostraba amabilidad, era como si está ya hubiera sabido quién era este en un principio, el joven se quedó de pie unos momentos antes de que la señora entrara a la casa con sus llaves-Mi hijo tenía razón, eres un muchacho-

La reacción del había sido nula y calmada, este solo sin decir nada vio como la rubia entro a su casa, ahora entendía por qué el aspecto tan familiar, se parecía mucho a la presidenta del consejo estudiantil, eran casi idénticas solo con edades distintas, el joven en ese caso solo tendría una moraleja, como también un recuerdo más en este país, este fin de semana había acompañado a la madre de su mejor amigo a casa.

Tras esta entrar así casa sería recibido primero por su hija más joven la cual la pequeña Alisa se abalanzó hacia ella dándole un fuerte y cálido abrazo, por supuesto la madre de la pequeña oji azulada aceptaría su cálida bienvenida.

-Te eche de menos mama-tras esas palabras la mujer se apartaría unos pocos centímetros de su hija para darle un beso en la frente.

-Igual yo-diría está con calma mientras veía como bajaban Dimitri y Eli para recibir a la recién llegada en el hogar de los Ayase.

-¿Cómo te fue en tu viaje mama?-Dimitri dirá con una sonrisa en su cara al ver a la mujer sana y salvo, sobre todo por el hecho de que la mujer había llegado más temprano de lo anticipado.

-Me fue muy bien, aún que todavía no me acostumbro a los largos viajes de Moscú hasta aquí en Tokio-está diría mientras dejaba su bolso de lado.

-la abuela como se encuentra madre-el vínculo entre la primogénita de la casa y su abuela era fuerte, de hecho, la madre lo sabía, por supuesto esta respondería con calma.

-Mi mama se encuentra bien, de hecho, te compro este regalo-cuando ella dijo eso de su bolsillo sacaba unas galletas de chocolate que harían los ojos de Eli brillar-Se nota que mi mama sabe de tus gustos hija-

-Aun así, me alegro de que esté bien la abuela-diría Eli con calma mientras se dirigía a la sala.

-Por cierto, Dimitri, que buen amigo te conseguiste-eso ultimo dejó extrañado al rubio, por su puesto Eli también había escuchado eso, se le hacía raro, ella sabía que su madre no ha conocido a ningún amigo de su hermano, pero sí ha conocido a Nozomi-Es muy agradable y también es bastante apuesto, deberías de invitarlo algún día a la casa-

-¿De qué amigo hablas?-al fin acabo Dimitri tenía varios, estaban los chicos de primer y tercer año y el único de su edad era Joan, eso eran siete en total.

-Creo que lo sabrás más adelante-diría esta mientras dejaba extrañado al único varón que estaba en la casa-¿Tu papá está trabajando?-

-Dijo que tenía viajes de negocio el día de hoy, por eso no se encuentra aqui-diria Dimitri con calma ya que era costumbre que el señor de la casa trabajará también fines de semana.

-Entiendo, en ese caso será mejor que nos arreglemos, hoy iremos a comer juntos-cuando la mujer dijo eso los chicos estaban cambiándose para ir a donde su madre los pudiera llevar.


En otra zona más metropolitana, se observaba como una cabeza rojiza estaba paseándose por las calles, esta cabeza roja en realidad no era su cabeza, más bien pertenecía a la cabeza esta parte del cuerpo que lo hacía ver rojo, era su cabello.

Paseándose por las calles de Tokio estaba Nishikino Maki tranquilamente, de hecho, la hija de los dueños del hospital japonés estaba deambulando en los alrededores con mucha calma, desde que se juntaba con Rin y Hanayo de manera menuda la chica en casa la notaban más diferente, de hecho, su madre le había dicho esto muchas veces, que la notaba distinta, más libre y calmada, no tan presionada como anteriormente.

De hecho, la joven Nishikino en ese entonces sin prestarle mucha atención a los alrededores caminaba mientras fijaba su mirada en su móvil, sin embargo, al hacerlo escucho a alguien hablar, una voz familiar para ella.

Al mirar hacia una calle vio a un chico quien estaba ayudando a una anciana cruzar la calle, la cual en ese momento estaba ya para que las personas caminarán en ellas, pero cuando vio al chico entendería de quién se trataba y también la anciana, esta guardaría su celular y se dirigió hacia ellos dos.

-No se preocupe Oba-san, ya casi llegamos-la voz del chico diría mientras tenía del brazo agarrado a la señora quien con bastón estaba caminando.

-Los niños de hoy en día son tan atentos-diría sonriendo la anciana mientras andaba caminando y cuando llegaron hacia su destino de la calle.

-Tengo cuidado la próxima vez-el peli negro dijo amablemente mientras la anciana se retiraba lentamente a la lejanía de la calle y este con su mano seguía despidiéndose.

Mientras hacía eso este intento ir a otra dirección, pero al mirar vio de inmediato a Maki a unos cuantos metros de donde él estaba, de hecho la peli roja no tenía reacción como tal.

-Nishikino-san-el peli negro mencionaría en voz baja y calmada, mientras la chica al escuchar su apellido actuaría como ella misma.

-Hey…-está diría con algo de calma mientras apartaba un poco su mirada de él.

-¿Vas al hospital?-

-Esta vez no, nunca voy al hospital los fines de semana-diria está con calma mientras miraba hacia donde se fue la anciana-La señora que ayudaste hace unos momentos es paciente del hospital, ella acude al módulo de rehabilitación-

-Oh, por eso viniste hacia acá-diria Shun un poco incómodo al tener a la peli roja en frente suyo, de hecho, el joven en ese instante vio que Maki estaba con ropa casual al igual que el.

-¿Qué sucede?-está parpadeo un par de veces para sacar a Shun de su trance quien se había quedado mirando a Maki por unos momentos, pero esta no pareció darse cuenta de ello.

-No es nada, de hecho, me preguntaba qué es lo que harás el día de hoy-

-Iba de regreso a mi casa, mi mama me pidió que trajera algunas de la plaza, fui a buscarlas, pero no había-la peli roja diria con calma a pesar de que no obtuvo lo je encontraba.

-Está bien, tal vez en la siguiente lo puedas tener-Maki ante ello solo asistió mientras que en ese instante con algo de desinterés, pero al caminar los dos irían más al centro de Akibara, al ir caminando los dos escucharían un poco de música clásica, como si alguien tocara el piano, eso hizo que los dos se detuvieran unos momentos.

Estos verían un restaurante de tipo italiano en donde había música clásica, en ese instante Shun se había tocado la barriga, no había comido nada en la tarde, por lo que este vio como Maki entro al restaurante como si nada y este quedaría confundido.

-Nishikino-san espérame-diría el peli negro mientras entraba junto con la hija de los médicos, al acceder el olor a la comida del país se sentiría en l aire, además de que tenía un toque algo elegante, el lugar se miraba caro, ya que los que estaban ahí presentes eran personas entre los cuarenta y cincuenta años de edad, aparte de que estos se notaban que tenían una muy excelente situación económica en la clase alta.

-Buenas tardes, mesa para cuantos-diría un joven atendiendo a Maki.

-Mesa para dos por favor-diría la pelirroja mientras dejaba al joven extrañado-Yo invitó-

-Pero no creo que sea buena idea gastar tanto dinero en una comida tan cara-diría el joven mientras veía como Maki caminaba y llegaba está junto con Shun aún lugar para ambos.

-No te preocupes, mi papá me depósito lo de este mes-diría está con calma mientras veía el menú con calma y el chico de cabellos negros al ver los precios quedaba impactado, todo era tan costoso, jamás había estado en un restaurante cinco estrellas.

-¿Ya saben que ordenaran?-preguntó uno de los meseros.

-Quiero un plato de espaguetis con extra-tomate-diría la peli roja, el peli negro se veía indeciso mientras que Maki en ese momento diría-Que sea la orden grande, compartiremos platos-

Ante ello Shun solo pudo mirar con miedo a los alrededores, por alguna razón Maki estaba con mucha calma, como si esto no fuera nada del otro mundo, pero más que nada por qué las personas iban muy bien vestidas, de hecho no parecían darse cuenta de la presencia de ambos adolescentes, estaban en sus propios mundo, pero más que nada como es que la peli roja estaba muy natural alrededor de este.

-Este…Nishikino-san…-diría el peli negro por la chica no le respondió de inmediato, esta suspiraría mientras sacudía un poco su cabello.

-Maki-por supuesto eso hizo que el joven se sintiera extrañado-Llame Maki-

-¿Estás segura?-

-Tanto Hanayo y Rin me llaman por mi nombre, por qué tú no lo harías-ante ello el peli negro estaría pensando un poco, lo raro es que había otro detalle más que este mencionó a la heredera del hospital Nishikino.

-¿Qué hay de Takeda y Akechi?, ellos dos nunca han podido referirse a ti con tu nombre-

-Yo decido quienes pueden llamarme a mi nombre, yo quiero que tú seas una de esas personas-diría ella con mucha calma mientras veía como llegaba el enorme plato para ambos.

-Está bien…Maki-cuando este dijo el nombre de la peli roja está sonreiría un poco mientras que Shun ni siquiera se había dado cuenta de ello, ahí sería cuando ambos agarrarían de la comida sin necesidad de usar platos apartes, usando sus tenedores y comiendo.

Esto parecía como escena de película, idéntica a la película de La Dama y el Vagabundo, siendo Maki una dama en toda la palabra, en la clase social es Shun estaba debajo de ella, siendo este un vagabundo, de hecho, el joven peli negro se sentía algo extraño, ¿por que ella estaba siendo así de amable con el?, será que todavía se siente agradecida por lo de la otra vez.

Sin decir más este como Maki comenzaron a comer del espagueti que nisiquiera los dos se dieron cuenta de que este era tan extenso, largo que tanto la peli roja y el muchacho estaban comiéndolo al mismo tiempo, de hecho, ambos sin darse cuenta se estaban acercándose, pero el primero en darse cuenta y reaccionar fue Shun.

Este de inmediato mordería la patata y cuando Maki vio esta acción se pondría algo roja de la vergüenza, casi se besaban los dos en ese momento, muy parecido a una película de romance o de esas series de drama.

-No fue apropósito, lo juro-diría el chico mientras que Maki solamente se encogía un poco de la vergüenza que está había sentido.

-Está bien…no fue nada-esta diría mientras jugaba un poco con su cabello, y ante ello los dos en silencio estarían comiendo, pero cuando ya estaban por terminar el palto el joven vio algo en la cara de Maki, más que nada en cercanía de su labio.

-Maki, no te muevas-diría este con una servilleta y este se acercaba con esta y limpiaba la boca de la chica quien ante el tacto quedaría un poco avergonzada por esta acción-Listo, ya no hay nada más-

-Podía hacerlo yo misma, no era necesario que lo hicieras por mi-esta diría cruzándose de brazos mientras tenía una actitud distinta y Shun sonreía, esta era la Maki que conocían todos.

Ante ello la cuenta había llegado y con su tarjeta de crédito Maki pagaría la comida, hasta que llegó el momento del piano y está al mirar el escenario se quedaría mirando y disfrutando de la música unos momentos, por lo que cuando terminó el pianista de tocar la música todos aplaudirían, así que la peli roja se levantaría y Shun le seguiría.

-¿Te gusto como toco ese pianista?-al decir eso el peli negro, haría que Maki estuviera en silencio sin decir nada, pero esta hablaría aun así después de esa pregunta.

-Soy mejor que el-ella hablaría desde el fondo de su sincero corazón con gran calma y Shun quedaría sorprendido.

-No sabía que tocabas el piano, es increíble, tienes mucho talento-diría el joven mientras que Maki se ruborizaba de los halagos de parte del chico.

-Si quieres puedo tocar algunas notas para ti cuando regresemos a clases-diría está con algo de timidez en su voz y el peli negro con una sonrisa asistió.

-Me encantaría escucharte-mientras caminaban por las calles en el restaurante alguien estaba mirando unas fotografías en donde se observaba a Maki con Shun, este sujeto tomo fotos donde estaba pan los dos comiendo y como el peli negro limpio la boca de la chica.

Ante ello el siento mandaría la foto hacia un contacto por ahí que era desconocido.


Termino este capitulo, que creen que pasara con Shun y Maki ahora que un sujeto les tomo una foto en una cita, ademas de ello el tipo lo mando a alguien de quien desconocemos, pero sobre todo, que hara Dimitri y Eli cuando se enteren que Joan fue el que acompaño a la mujer a la casa.