Caí ante Gen como Cenicienta, pero sin hacer exactamente el cuento como tal, espero les guste.

Byakuya Ishigami Rey del reino de la ciencia con dos hijos, alfas ambos, ya en edad de casarse, no para dejarles en ese momento el trono, simplemente para tener algo más seguro para el futuro. Senku y Chrome, se llevaban apenas un año de diferencia, pero en apariencia eran muy diferentes, Senku se parecía mucho físicamente a su padre mientras que Chrome lo hacía en personalidad, ambos príncipes se complementaban y estaban cómodos siendo así, jamás pelearon sobre quien era mejor, peleas reales y serias, porque en broma y para presionar al otro a ser mejor llevaban muchas.

Byakuya, viendo que sus hijos se complementaban les sugirió la idea de compartir el trono, no le sorprendió que sus hijos aceptaran casi sin dudarlo.

Pero, el único que se hacía presente en reuniones y fiestas era Chrome, de Senku decían que estaba enfermo o que estaba haciendo algún experimento, por lo que muy pocas personas conocían la apariencia real del otro príncipe. La realidad era que Senku siempre estaba ahí, con un perfil bajo, tiñendo su cabello con carbón vegetal y vistiendo trajes comunes.

Chrome, por otra parte, se le daban muy bien las relaciones sociales, por lo que le gustaba platicar con los demás príncipes y princesas, sabía que Senku se encargaba de los reyes y jefes importantes en un salón aparte, las relaciones diplomáticas definitivamente no le gustaban al príncipe castaño.

Cuando se acercaba el cumpleaños 20 de Chrome, Byakuya les anuncio que organizaría una fiesta en la que estarían invitados todos los y las omegas del reino, incluso de reinos vecinos, para que así tuvieran más variedad de pretendientes. El rey sabía que Chrome había tenido novias e intereses amorosos, pero de Senku no sabía nada, nunca lo había visto interesado en alguien más.

Al terminar el anuncio, Byakuya le pidió a Chrome que saliera, que tenía algo importante que decirle a Senku, el castaño extrañado salió, y de no haber sido por Kinro que custodiaba la puerta del salón, se hubiera pegado a escuchar el chisme.

-¿qué me querías decir?- pregunto el príncipe

-¿recuerdas a los reyes Xeno y Stanley?- pregunto su padre

-los recuerdo, las pláticas con el rey Xeno son las mejores de las reuniones- respondió confundido Senku

-tienen un hijo, omega- comenzó a decir el rey observando con atención las reacciones de su hijo- decidimos comprometerlos- anuncio sin ver algo negativo

-¿lo conozco?- pregunto Senku recordando que tanto Xeno como Stanley mencionaban a su hijo en las conversaciones

Y no era reciente que el hijo del Rey Xeno salía a colación en un tema, haciendo memoria, Senku recordó que siempre lo mencionaban y había varias veces que lo habían invitado a conocerlo o pasar tiempo juntos, a palabras del Rey Stanley, estaba seguro que se llevarían bien.

-es raro que salga de su reino, sin embargo, dentro de él lo conocen y lo quieren, perdí la cuenta de las cartas que Xeno me mando quejándose que su hijo se escapó de nuevo a alguna fiesta del pueblo- Byakuya si conocía al chico y no tenía dudas que se llevaría bien con su hijo

-¿lo puedo conocer antes de la boda?- pregunto Senku

-no soy un dictador, claramente que va a haber reuniones antes de la boda para saber si los dos están de acuerdo- el rey se levantó de su asiento y le dio palmaditas en el hombro a su hijo- si no quieres, nadie te va a obligar

Senku asintió, el aroma a trigo recién cortado de su padre lo tranquilizaba en momentos como ese, porque pudiera tener 21 años, pero en relaciones sociales y románticas era inexperto y mentiría si no dijera que estaba nervioso.

-¿cómo se llama el chico?- pregunto Senku antes de irse

-Gen- respondió sonriendo el rey, ese interés era algo

Por otro lado, Gen había regresado de su cabalgata diaria, dejo a su caballo después de darle una manzana; un sirviente se acercó para anunciarle que sus padres lo llamaban. Extrañado se dirigió directo al salón principal donde sabía que estarían sus padres.

-una disculpa por no cambiarme antes- menciono Gen entrando, notando que no había ningún otro sirviente o guardia

-no te preocupes, acércate- dijo Xeno quien jugaba ajedrez con su esposo

-¿sucede algo?- pregunto parándose al lado de Stanley mientras veía los movimientos

-recuerdas al Rey Byakuya?- pregunto el rubio sin quitar la vista del tablero

-si, es muy agradable, aunque de humor algo simple- respondió Gen extrañado

-tiene dos hijos, alfas- Xeno despego la vista del tablero para ver a su hijo- te comprometimos con el mayor

-¿qué?- pregunto Gen pestañeando varia veces por la sorpresa

-te comprometimos con el príncipe Senku- repitió Stanley apagando su cigarro- de cualquier manera, vamos a reunirnos varias veces antes de la boda, si no te gusta será un no- el rubio tomo la mano de su hijo para calmarlo

-¿y porque no con el príncipe Chrome? He oído que le agrada a todo el mundo- Gen estaba nervioso, no había oído nada del príncipe Senku en el pueblo, alguna vez oyó algo por parte de sus padres y del Rey Ukyo, pero nada que llamara mucho la atención

-Byakuya cree que ya hay alguien que le gusta, organizo un baile más que nada para el príncipe Chrome y para que el pueblo no se sienta desplazado en la decisión- respondió Xeno- nadie se puede quejar delo que decida Senku, es el médico del reino, tanto sabe curar como matar

Y eso a Gen le despertó curiosidad. Tanto Stanley como Xeno conocían a Senku y Xeno estaba encantado de que su hijo se fuera a casar con él, su sentido del humor era muy similar y sabía que le faltaba alguien a su lado para hacerlo salir más del castillo y vivir la vida fuera de las paredes de su laboratorio, además Gen tenía las habilidades diplomáticas que le faltaba al otro príncipe.

-¿y cuando seria al primer reunión?- pregunto Gen apretando la mano de su padre haciéndole saber que estaba más calmado

-en un mes, en dos semanas van a celebrar la fiesta, aunque dudo que Senku se presente- Xeno estaba dando los datos que sabía, su hijo no dejaría pasar

-¿no está en las fiestas?- pregunto el príncipe

-no tiene muchas habilidades sociales, habla más con los otros reyes y nobles importantes, su plática es de temas diferentes a los que habla el príncipe Chrome- Stanley dejo la mano de su hijo volviendo al juego- le gusta mucho hablar con Xeno, es con quien más habla, además de los reyes Ukyo y Ryusui

-¿alguna pareja conocida?- pregunto Gen sabiendo que su padre sabría

-ninguna, por eso Byakuya sugirió el compromiso, no sabe de nadie, ni el príncipe Chrome sabe, pero al no salir mucho no saben si es porque realmente nadie le gusta o es porque no ha convivido con más personas-

-¿y quieren que lo seduzca o algo así?- bromeo Gen

-puede haber algo de cierto en eso, pero no para unir reinos, solo para saber si van a tener química, claro, si el compromiso sigue- Xeno sonrió maquiavélicamente, sabía que cuando Gen se lo proponía cualquiera caía a sus encantos, pero no por eso iba a imponer el compromiso

-bien, esperare ansioso la reunión- sonrió el príncipe

Gen salió tranquilo del salón, una vez se cerró la puerta y doblo la esquina del pasillo corrió con Luna, ella le diseñaba los trajes para las fiestas y esta vez tenía un plan en mente.

-va a escaparse a la fiesta- menciono Stanley

-lo sé, y estoy seguro que Senku también asistirá a esa fiesta buscando lo mismo que Gen- Xeno movió al caballo para hacer jaque mate

-¿crees que sea asexual?- pregunto el rubio guardando las piezas

-probablemente está en el espectro, tampoco es como si Gen fuera muy activo- Xeno se levantó- además la sexualidad es fluida, no sabemos si con Gen a su lado algo cambie, te recuerdo que tu causaste que tuviera un horario limite en el laboratorio- el peliblanco rodeo la mesa para sentarse en las piernas de su esposo

-no me arrepiento- murmuro antes de besarlo

Los días pasaban y Gen seguía con su plan, el cual consistía en vestirse como mujer, teñir la mitad blanca de su cabello para hacerlo completamente negro, ir hasta la fiesta en su caballo y conocer a su prometido sin que los padres de ambos intervinieran, regresaría antes de las 2 de la madrugada, hora que sabía que había noches que sus padres se asomaban para saber si estaba en su cuarto o se había fugado, de nuevo.

El día llego, Gen nervioso se bañó, ceno con sus padres aparentando estar calmado y subió a su habitación en donde su vestido estaba oculto en su armario, no supo como ni quien dejo carbón vegetal en su mesa de noche, supuso que había sido Luna al momento de llevarle el vestido.

Cuando oyó que sus padres cerraban su puerta, las luces de las habitaciones se apagaban y solo quedaba el silencio, Gen se apuró, con ayuda de agua tiño su cabello, se lavo sus manos y se puso el vestido, era azul cielo, con volantes que lo hacían ves como si flotara, en la parte superior tenía un corset con mangas que se detenían en sus hombros, un collar de zafiros y una diadema negra, además de guantes del mismo color del vestido, no usaba zapatillas, el vestido era lo suficientemente largo como para ocultar sus botas. Encima de todo, una capa negra para que no lo vieran escabullirse.

Xeno y Stanley esperaron y cuando oyeron que su hijo había salido de su cuarto esperaron unos momentos antes de abrir la puerta sin hacer ruido y asomarse por el barandal de la escalera para ver cómo se iba.

-estábamos en lo correcto- murmuro Xeno victorioso

-te agradezco que les hayas dicho a todos los del castillo que tenían la noche libre- el ambiente comenzó a oler a pólvora, intensificándose poco a poco

-eso no lo hice solo por Gen, Stan- el peliblanco rodeo el cuello de su esposo con sus brazos comenzando el beso

El olor a sándalo de Xeno inundaba las fosas nasales del alfa quien no resistió más, lo levanto sintiendo como enrollaba sus piernas en su cadera, sintiendo así su erección. Entre besos y risas gracias a varios tropezones terminaron encerrándose en su cuarto teniendo total libertad para hacer el ruido que quisieran, así como de dejar sus aromas libremente.

En la fiesta, Chrome sonreía y platicaba con un grupo de omegas, no perdiendo de vista a su hermano, quien en un rincón bebía una copa de champagne manteniendo bajo su perfil, pero el sabia la verdad de porque estaba presente Senku cuando podía no estarlo, estaba esperanzado a que su prometido llegara.

Byakuya les había dicho que al estar ellos comprometidos, el príncipe Gen no fue convocado, pero que existia la probabilidad de que asistiera, lo que no les dijo fue que Xeno le mandó una carta emocionado por el interés de Gen hacia Senku, claro que Byakuya le contesto igual de emocionado por el interés de su hijo.

Normalmente Senku usaba trajes no tan vistosos y elaborados, pero algo lo llevo a pedirle a la modista de la familia un traje blanco con detalles plateados, no quería que brillara mucho, solo que no se viera tan común. Yuzuriha, modista y amiga de Senku oculto su sonrisa tras una tela, su amigo estaba emocionado e interesado por alguien, estaba preocupándose por verse bien.

Claro que aun así tiño su cabello y lo amarro en una coleta baja, se aseguró que el carbón estuviera bien fijado para que no manchara su traje, pensando mientras lo hacia que si todo salía bien con el otro príncipe, ya no tendría que esconderse, porque la verdad detrás de su disfraz habitual era que no quería ser acosado por omegas buscando el trono.

Gen llego y analizando desde la lejanía donde guardaban los carruajes se escabulló y amarro a su caballo en un establo, estaba casi seguro que un chico rubio lo había visto pero estaba más nervioso por su encuentro que preocupado por cubrir sus huellas.

Ginro fue quien vio al príncipe, en ese momento princesa, pero el Rey le había avisado que era probable que llegara alguien en caballo y que si eso sucedía le avisara a la brevedad, el rubio corrió emocionado para avisarle al Rey, quien estaba en el primer piso, alejado de la fiesta, pero viendo todo. Cuando vio llegar a Ginro con la noticia sonrió victorioso, Xeno y el estaban en lo correcto, había un interés ahí.

Gen llego y dejo su capa escondida en los arbustos cerca de la entrada, entro a paso lento quedando encantado con la decoración de la fiesta, era en tonos amarillos y dorados, había muchos omegas, pero abundaban más las omegas. De inmediato noto que en una bolita de gente sobresalía un traje color crema con detalles dorados, seguramente de oro.

Al empezar a caminar por el salón las miradas se dirigieron hacia él, eso no lo tenia planeado, no le molestaban las miradas de envidia, pero las de enojo lo hacían estar mas alerta; molestándolo, pero no perturbándolo siguió su camino hasta llegar a donde se encontraba el príncipe Chrome, ahora viéndolo.

-su alteza- Gen hizo una reverencia

-me permiten un momento señoritas- Chrome hablo y se acercó a Gen extendiéndole su mano y dirigiéndolo a la mesa de bocadillos.

-¿cuál es su nombre?- pregunto el castaño

-Galia, su alteza- respondió Gen sonriéndole, no estaba seguro si ese era su prometido o era su hermano

-oh suena como el galio, un metal blando- Chrome recordó cuando Senku se lo enseño, era casi líquido y mancho sus manos por días

-no sabía que era conocedor de química- se sorprendió Gen

-mi hermano me lo enseño, él sabe mucho más que yo de esos temas- Chrome tenía el presentimiento de que esa chica era mucho más, su padre le había dejado ver entre líneas que el prometido de su hermano no sabía quién era quien- por cierto, soy el príncipe Chrome- el castaño beso el dorso de la mano de Gen haciéndolo reír con coquetería

-gracias por la presentación, aunque ya lo sabía- mentira, Gen suspiro al oír que no era su prometido, sería su cuñado, por lo que aun así decidió seguir la plática, tenía temas interesantes y él era agradable

Tras charlar unos minutos, donde Gen se desenvolvió con más confianza, lo dejó para salir a tomar aire, las miradas lo estaban asfixiando y ni qué decir del olor amargo de las omegas molestas.

-la señorita rubia que no ha dejado de ver esta sola, su hermana la dejo libre un momento- susurro en el oído del príncipe antes de salir

Chrome se sorprendió y vio con felicidad que era cierto, sin perder un segundo se acercó a Ruri, habían sido amigos de la infancia, pero se habían separado por el trabajo de los padres de la chica, cuando la volvió a ver cayo flechado por ella.

Gen dejo al príncipe y pegándose a la pared vio que detrás de unas pesadas cortinas había un balcón, intentando que nadie lo viera se escabulló, respiro profundamente el aire fresco de la noche.

-creí que nadie descubriría el balcón- murmuro una voz a su lado

Gen se quedó quieto un momento, el viento atrajo un suave aroma, olía como a té verde, cerró los ojos un momento disfrutando del olor, le calmaba ese olor de una forma extraña, al abrirlos y voltear se encontró a un chico de cabello negro y un traje que no parecía de materiales baratos, o era el príncipe o era un omega, y por su olor dudaba que fuera la segunda.

-el olor adentro es asfixiante- respondió Gen acomodando su cabello detrás de la oreja coqueteando un poco

-lo sé, aunque creo que el príncipe ya se decidió por alguien- Senku se acercó moviendo ligeramente la cortina dejando ver a Chrome quien avanzaba con Ruri al centro de la pista de baile

-me alegro mucho por él- sonrió Gen

Al estar cerca con el viento soplando, Senku percibió el aroma del omega a su lado, era un aroma extraño, entre café y chocolate, pero no del todo dulce, era un poco amargo.

-nuez de cola- murmuro recordando que su padre le había llevado ere fruto de uno de sus viajes por África

-¿disculpa?- pregunto Gen

-no es nada- Senku se sonrojo levemente, el aroma de ese omega era el mas raro y delicioso que había olido en toda su vida

-¿sabe bailar? No quiero interrumpir ahora al príncipe, aunque si quiero un baile - Gen soltó, sabía que si el chico frente a él era el príncipe sabría bailar

-hay suficiente espacio aquí- Senku extendió su mano- ¿me aceptaría este baile? - pregunto sonriéndole

-con gusto- Gen tomo la mano de Senku queriendo quitarse el guante y que fuera piel con piel, no sabía porque había pensado eso, solo lo había hecho

Senku tomo con seguridad la cadera de la chica y acomodo su otra mano notando que la mano de la chica no era tan pequeña y delicada, sintiendo como ella acomodaba su mano en su hombro comenzó a bailar.

-no se mueve tan mal- sonrió Gen

-no es de mis pasatiempos favoritos- "hasta ahora" pensó Senku sin saber porque estaba tendiendo esos pensamientos, no estaba seguro que esa omega fuera realmente su prometido- ¿cuál es su nombre?

-Galia- respondió Gen, queriendo decir su nombre real

-como la versión femenina del Galio- respondió el príncipe

-lo dijo también el príncipe- Gen se rio- dijo que era un metal blando

-lo es, y se hace liquido con facilidad- Senku sonrió como no lo había hecho nunca, coqueteando y sintiendo como los pies de la chica perdían el ritmo- igual que usted- se burlo

-me distraje un momento con la flor que tiene en su cabello- se escuso Gen dejando de bailar y haciendo un truco de magia apareció una margarita

Senku se quedó un tanto sorprendido, si bien la chica frente a él se había sonrojado, había respondido con la misma coquetería sin dudar.

-quisiera seguir bailando o le aviso a…al príncipe- Senku casi decía su hermano, Gen noto ese momento de duda y solo pudo voltear hacia otro lado, se había sonrojado, el chico con el que había estado bailando y jugueteando era su prometido y no tenía ni una queja

-si usted quiere podemos seguir bailando, a menos que quiera bailar con alguien más- sugirió Gen viendo como negaba con fuerza el chico

-no se me ocurre alguien más para bailar toda la noche- Senku no dudo en acercarse y tomar de la cadera a quien estaba casi seguro era su prometido

-me alegro, aunque no será toda la noche, tengo que regresar a casa antes de las 2- respondió acomodando sus manos en el cuello del príncipe

-yo te avisare cuando falte una hora- respondió Senku comenzando un vaivén lento

Entre risas por las bromas de Senku hacia las pretendientes del príncipe Chrome, miradas de Gen que en lugar de hacer sonrojar solo a Senku los hacia sonrojarse a los dos y cortas pláticas sobre sus pasatiempos el tiempo se pasó volando, en menos de lo que ambos esperaban (y querían) llego la hora de Gen de irse.

-te acompaño a tu carruaje- no era una pregunta, Senku no quería solar la mano del chico

-no vine en carruaje, vine en caballo- respondió Gen apurado

Regresaron al salón y sin fijarse en nada salieron por la entrada principal, Gen suspiró con alivio al ver que su capa seguía ahí, se la puso y camino rápido hacia las caballerizas.

-ve con cuidado- Senku acomodo la capa colocando la capucha

-lo hare- Gen aún no se subía al caballo

Estaban uno frente al otro, oyendo de fondo la música de la fiesta, Gen mandando al diablo su toque de queda se aventuró a darle un beso rápido en los labios al chico frente a él, Senku se sorprendió, nunca había besado a alguien y solo sabía que quería volver a sentir los labios contrarios.

-20 minutos- murmuro Senku antes de volver a besar a Gen quien respondió enredando sus brazos en el cuello contrario

Senku agradecía estar recargado en la madera que separaba cada caballeriza, sus manos en la cintura contraria los mantenían juntos, los besos pasaron de ser besos inocentes a besos con ganas de algo más, los suspiros de Gen comenzaban a taladrar la mente del príncipe quien se aventuró a meter una de sus manos a la capa acariciando la espalda descubierta del contrario.

-ya fueron 20- aviso Senku separándose de los labios contrarios

-10 más- sugirió Gen casi rogando

-después- Senku dejo un corto beso y ayudo a que montara el caballo

Gen salió del establo justo cuando alguien le gritaba a Senku.

-su alteza- era el chico rubio quien llegaba corriendo

Senku vio a Gen con los ojos abiertos de la impresión, no le había dicho quién era, Gen sonrió y paro un momento su caballo.

-espero verte en unas semanas Senku-chan- grito Gen mandándole un beso con la mano

-como si me hubiera creído tus trucos baratos- sonrió Senku

Gen rio con un sonrojo en las mejillas antes de salir cabalgando con velocidad, no quería terminar muerto por llegar después de lo planeado. Senku vio cómo su prometido se perdía en el obscuro horizonte, no veía la hora de volver a verlo.

-perdón por interrumpir- Ginro se disculpó después de ver que seguramente había interrumpido algo importante

-ayudaste mas de lo que interrumpiste- rio Senku

-su padre lo llama- el rubio recordó el por qué su prisa

Senku sonrió, su padre lo sabía, y estaba casi seguro que el Rey Xeno estaba también dentro de esa conspiración, sin embargo, ninguno intervino, fueron solamente ellos.

-¿qué te pareció el príncipe Gen?- pregunto Byakuya cuando su hijo llego a su lado

-podemos hacer menos reuniones antes de la boda- Senku se sonrojo al oír reír a su padre

Byakuya no solo se reía por lo que había dicho su hijo, también porque tenía los labios rojos, producto del labial que llevaba puesto Gen y que Senku ni cuenta se había dado.

-¿con quién te besaste hermano?- Chrome llego y sin delicadeza soltó aquello haciendo que Senku se pusiera más rojo

-nadie- pero al intentar limpiarse con su pañuelo no lo tenia

Tras terminar la fiesta, Senku se lavó su cabello y al quitarse el traje descubrió que tenía los guantes de Gen, no recordaba ni en qué momento se los había quitado, pero tenían su olor.

Por otro lado, Gen llego intentando ser sigiloso, guardo su caballo y se metió por la puerta de servicio, quitándose sus botas para no hacer ruido subió las escaleras lentamente.

-fue una buena noche, ¿verdad?- pregunto Xeno quien lo esperaba escondido detrás de una columna

-casi me matas del susto- murmuro Gen dramatizando

-el príncipe casi te mata a besos, no quedo nada del labial- se burló su padre haciendo sonrojar a su hijo

-buenas noches- Gen grito y se encerró en su cuarto

Ni siquiera se cuestionó por qué no lo regaño o le dijo algo de escaparse, y menos aun se dio cuenta que tenía algo extra, entre su ropa un pañuelo cayo al quitarse el vestido, extrañado lo recogió y al olerlo sonrió, era de Senku y no sabía en qué momento se lo había quitado.

La semana siguiente Senku y su padre estuvieron ocupados con la proposición de matrimonio de Chrome a Ruri, al principio la hermana de Ruri se oponía, pero al ver lo enamorada que estaba su hermana se resignó a aceptar.

El día de la reunión oficial llego, Senku acomodo su cabello en una coleta baja mas arreglada que la de aquel día en la fiesta y ahora sin teñir nada, se puso uno de los trajes que más le gustaban, era color plata con decoraciones de oro, zapatos blancos y tras verse varias veces en el espejo respiro profundamente.

Ambos se habían visto con disfraces, pero era la primera vez que se verían sin ellos, si bien sus personalidades encajaron y ni que decir de sus labios, Senku estaba nervioso por cómo se vería Gen sin el vestido, si ya con el lo había tenido a sus pies no se imaginaba con traje.

Gen vestía un traje lila con zapatos café claro, su cabello bicolor resaltaba, sus padres aguantaban la risa al ver como su hijo jugaba con un pañuelo en sus manos, pañuelo que sabían que era del príncipe.

-Stan, cariño, si te ríes yo no voy a resistir- murmuro Xeno viendo como Stanley fingía fumar

-debimos hacer esto hace mucho tiempo- respondió entrelazando sus dedos

Los reyes bajaron primero del carruaje, al final Gen bajo, le temblaban las manos de los nervios de ver a Senku con su traje de príncipe, no con un disfraz.

Frente al carruaje se encontraba Byakuya quien no dudo en saludar a su amigo y a su pareja, Chrome esperaba para ver al prometido de su hermano.

Cuando Senku vio a Gen bajar del carruaje se quedó sin palabras, era aún mejor sin vestido, su cabello bicolor le quedaba mucho mejor que completamente negro y ni que decir de lo bien que se ajustaba el traje a su cuerpo, en ese momento supo que Gen no era ni por asomo el estereotipo de omega, si bien no tenía músculos marcados y desarrollados, no tenía una construcción débil y delicada.

Gen se detuvo un poco de la puerta del carruaje, Senku se veía mucho mejor de lo que recordaba, su cabello blanco con las puntas verdes, el traje correcto, y lo que coronaba todo, se veía igual de nervioso que él.

-acaso te comió la lengua le ratón, Senku-chan- hablo Gen queriendo controlar los nervios

-quisieras, eres capaz de sacar uno de entre tus ropas- respondió Senku relajándose

-podría, pero eso arruinaría el traje- Gen camino hasta quedar frente al otro príncipe

-vamos adentro- anuncio Byakuya

Todos comenzaron a entrar dejando hasta atrás a los dos príncipes quienes con un sonrojo en sus mejillas se tomaron de la mano.

-así que te gusto aun sin vestido- soltó Gen medio burlón

-ese día te hubiera podido ver si el- respondió Senku

Eran torpes coqueteando por lo que terminaron riéndose.

No pasaron ni tres meses cuando ya estaban casados, desde su primer encuentro no habían querido separarse y estando casados, Gen viviendo con Senku, confirmaban cada día que había sido la elección correcta, Senku tenía miedo de que sus experimentos y el pasar tanto tiempo encerrado le molestaran a Gen, cosa que no paso, incluso le ayudaba a veces y él era quien lo sacaba a citas por todo el pueblo.

Por otro lado, Chrome tardo casi un año para casarse con Ruri, fue una fiesta más grande, donde por primera vez, Senku no se tuvo que disfrazar ni escaparse temprano, con Gen no tenía prisa de salir corriendo cual cenicienta.