El campeón del pueblo, el campeón de Copper

La verdad que no quería que supieras

[HAS INTENTADO HACKEAR EL DRON DE TOBÍAS Y TESSA KENTON]

[NO TE VA A RESULTAR TAN FÁICL]

[TE JODES]

[Y SI ES UN ELLIOTT QUIEN ESTÁ LEYENDO ESTO…]

[NO VALEN NI LA PENA DE TENER SEGURIDAD]

[R1S1T4 C0MPL1C3, TU L0 H4S D1CH0 P4P4]

– ¡estúpido y prodigioso Tobías Kenton! – exclamó Uzi con frustración, los comentarios que recibía en la pantalla sólo la molestaban más.

Desde su primer intento habían empezado a aparecer esos mensajes, y si bien al principio los ignoraba (sus compañeros le habían dicho cosas peores en el pasado), cuanto más aumentaba su preocupación por su amigo menor era su paciencia.

Y lo peor de todo era que de vez en cuando los mensajes parecían volverse personales.

[R1S1T4 BURL0N4, N0 3ST4S 4 L4 4LTUR4]

Uzi estaba segura que su visor debía estar lleno de símbolos de ira y su ojo estaría teniendo el equivalente a un TIC.

Ella sabía que era bajita comparada el resto de drones de su edad ¡pero tampoco como para que se lo eche en cara!

[UN4 PU3RT4 M3 D4R14 M4Y0R D3S4F10]

.

.

.

Bien, eso ya era personal.

Con decisión empezó a teclear con mayor velocidad.

No sólo salvaría a N, sino que le demostraría a ese cuadro de texto quién manda.


– oye Tobías, quisiera preguntarte algo – dijo N mientras ambos caminaban por los pasillos de la mansión.

– adelante –

– ¿cómo es el mundo allá afuera? –

– oh claro, olvidé que ustedes nunca salen – asintió el humano con entendimiento.

Podía entender de qué venía la pregunta, no era lo mismo "conocer" algo por medio de fotos o vídeos, que experimentarlo con tus propios ojos.

Tobías meditó un poco el asunto, tratando de encontrar las palabras correctas para describirlo.

– bueno… hay muchos lugares diferentes para ir, lugares de comida, zonas recreativas, restaurants, zonas comerciales… la verdad no es algo que pueda resumir en pocas palabras – le estaba resultando bastante difícil explicarlo.

Supuso que así se sentía explicarle lo que es el color a un ciego.

– ya veo – dijo el dron, aunque no sonaba decepcionado por la respuesta – y dime ¿has ido a ver en persona un combate de boxeo de robots? –

– oh ¿eso? Un par de veces – asintió.

– debe ser toda una experiencia, poder ver tan de cerca los enfrentamientos –

– lo es – afirmó el veinteañero – el sonido directo de los golpes de metal, los gritos de la multitud rodeándote… es muy fácil sólo dejarse llevar –

– me apena que ustedes ya no puedan continuar con eso – se lamentó.

– oh, no se los dije – reconoció el humano.

N se giró para verlo, encontrándose con una sonrisa.

– vamos a trabajar en un nuevo robot, esta vez uno totalmente Kenton, usaremos piezas de viejos robots junto a algunos nuevos juguetes – explicó con cierta pasión.

– ¿en serio? – preguntó impresionado.

– por supuesto – asintió – y nos aseguraremos de convertirlo en el siguiente campeón mundial, o al menos lo intentaremos… nunca llegamos a tanto – murmuró al final con algo de frustración.

– asombroso – si bien escuchó lo último, no era lo que más atención le llamó – debe ser increíble poder luchar en el ring… – dijo de forma soñadora.

Tobías se giró para verlo, notando la mirada en los ojos digitales del dron.

No pudo evitar esbozar una pequeña sonrisa.

– je, definitivamente eres un Kenton –

Para cualquier otro, esas quizás no habrían sido palabras de gran significado, pero para el dron era diferente.

Tan impactantes fueron, que el pequeño bot se tropezó con sus propios pies y cayó al suelo.

– ow ¿estás bien? –

– s-si – dijo, todavía algo aturdido por sus palabras – p-perdón ¿me repites de lo que acabas de decir? –

– ¿uh? Dije que sin dudas eres un Kenton – respondió confundido.

"eres un Kenton"

Realmente lo consideraba alguien de su familia.

No es que no le creyera antes, pero…

Era un sentimiento diferente oírlo afirmar aquello.

Lo ponía feliz.

– oh, por supuesto, a veces olvido dónde viven – dijo Tobías con una mueca, sabiendo que posiblemente no reciben muchos cumplidos de parte de los humanos de la mansión fuera de Tessa.

Pero eso sólo lo convencía más para darles un gran momento en cada una de sus visitas.

Y de hecho, una idea en concreto llegó a su cabeza.

– hey N, te gusta el boxeo ¿verdad? –

– umm, si – asintió con algo de vergüenza.

– ¿te gustaría algún día luchar en el ring? –

El pequeño dron dejó de caminar cuando oyó eso.

– ¿q-qué? –

– mira N, tarde o temprano yo también voy a entrar en el mundo del boxeo de robots, y quizás también en el boxeo humano ya que estoy… – murmuró, para luego arrodillarse y colocar una mano en el hombro del albino – y cuando lo haga, te prometo que serás tú el primer luchador junto al que subiré al ring –

N no se lo podía creer ¿realmente estaba pasando?

Tobías… Tobías no le mentiría en algo como esto… ¿verdad?

– ¿lo… lo dices en serio? – estaba incrédulo, pero al mismo tiempo emocionado.

– nunca he estado tan serio en algo N – respondió – lo diré de forma clara esta vez… –

Ambos entonces cruzaron miradas.

– N, o entro al ring contigo, o no entraré jamás al ring, te lo juro como que me llamo Tobías Kenton – prometió con una gran seriedad, pero nunca perdiendo su sonrisa.

Entendiendo perfectamente lo que significaba, el albino fue llenado con una gran emoción.

Lo haría.

Pelearía en un ring.

Quizás no ahora ¡pero algún día sin dudas…!

No pudo aguantar más las emociones que empezaban a brotar en su interior, y las manifestó todas en un simple gesto.

Abrazó con fuerza al humano frente a él, quien casi perdió el equilibrio por el repentino gesto.

Pero velozmente lo regresó, acariciándole la nuca de forma paternal.

– e-entonces – comenzó a decir N, su voz quebrándose por la felicidad – t-te juro que cuando luchemos juntos, jamás perderé… c-como que me nombro Designación Serial N – prometió.

Era su primer juramento hecho por voluntad propia.

– no –

Ahuecó sus ojos cuando Tobías negó su promesa.

Sintió como si su flujo de aceite se hubiese detenido por unos segundos.

Pero antes de poder decir algo, el humano se le adelantó.

– lo juras… como que te llamas N Kenton – lo corrigió.

N… Kenton…

N Kenton.

¡N Kenton!

Aumentó la fuerza del abrazo antes de siquiera notarlo.

Estaba extremadamente feliz.


V tenía una sensación rara mientras seguía a J.

No sabría explicar qué era, pero había iniciado en la oficina de Tobías.

¿quizás era la culpa de haber estado siempre tan cerca pero nunca haber ido a verlo?

No, no era eso.

No sabía por qué, pero sentía que no era ese el motivo.

Sacudió la cabeza.

Ese no era el momento.

Desconocido para ella, J tenía sus propias inquietudes en la cabeza.

Llevar a V con Tessa era algo arriesgado, más con la dron infectada presente.

Tendrían que ser rápidas para tranquilizar a ambas y evitar que se maten, no tenían mucho tiempo si lo que su hermana dijo era correcto.

Y ella misma no podía explicarle la situación ahora, pues sabía que se negaría a ayudar.

Tenía que ser Tessa quien la convenciera.

Para bien o para mal, la albina de pelo corto fue la que más había cambiado con el paso de los años.

Mientras que antes era amable y tímida, ahora era directa y brutal.

En el pasado hubiera aceptado cualquier sugerencia sin dudar, siempre feliz de poder ayudar.

Pero ahora era precavida.

Desconfiada.

Paranoica.

Comparar a la V del pasado con la actual sería como comparar el día y la noche.

Por eso debían tratar este tema con delicadeza.

O al menos tanta como pudieran con la situación como iba.

Se preparó mentalmente una vez tuvieron la cápsula de aterrizaje a la vista.

.

.

.

Ambas aterrizaron con fuerza sobre la nieve, generando un ligero temblor y alzando una nube de escarcha.

A J no le gustaba realmente hacer eso al aterrizar, prefería ser algo más grácil y dar un buen ejemplo, pero la situación actual era importante y no le convenía perder tiempo con delicadezas.

Menos cuando ya se veía venir perder tiempo con lo que estaba por pasar.

– ¡V! – inmediatamente oyeron a Tessa exclamar.

La albina de pelo corto apenas tuvo tiempo para reaccionar cuando la humana corrió hacia ella para envolverla en un abrazo.

Usualmente como drones de desmontaje tienen instintos y capacidad de reacción sobrehumana (¿sobredron?), pero el momento en que sus ojos se enfocaron en la placa de identificación su cuerpo quedó tieso.

Era más alta sin dudas, su voz era más madura, y el traje de astronauta imposibilitaba notar sus rasgos físicos… pero no había duda.

Ella era Tessa Kenton.

Memorias del pasado que no estaban relacionadas directamente con su padre volvieron a su cabeza.

Con manos temblando ligeramente, aun no creyendo del todo lo que estaba pasando, devolvió el gesto que le daba la mujer.

Tras todo lo ocurrido, su abandono en Copper-9, la creación del Absolute Solver y de los tratos recibidos en la mansión, probablemente lo último que haría sería confiar en un humano recién llegado.

Pero esta calidez…

Ella era Tessa.

Ella era una Kenton.

Ella era la prima de Tobías.

Eso era suficiente para V.

Podría disfrutar de ese momento por un buen tiempo…

Tiempo…

Tiempo.

¡Tiempo!

¡no tenían tiempo!

– ¡e-espera! – exclamó con un ligero tartamudeo mientras se separaba de Tessa – ¡no hay tiempo para esto! –

– es cierto, J me dijo que hay un problema con N ¿verdad? – preguntó la humana.

– ¿sólo eso te dijo? – V miró incrédula a su hermana.

– créeme V, si le decía exactamente lo que pasaba hubiéramos perdido más tiempo – afirmó con un suspiro – en serio que no se puede lidiar con una Tessa alterada y volar recto al mismo tiempo –

Si bien la Kenton se sintió ligeramente ofendida por ese argumento (¡ella no era tan intensa!), la duda sobre lo que pasaba con N tomó prioridad en su cabeza.

– ¿qué está pasando en realidad? – preguntó mirando a la dron "menor".

Esta hizo una mueca, no sólo por el asunto que se debía tratar, sino también porque Tessa realmente fue influenciada por su primo a la hora de mostrar su lado serio (y eso le generaba cierta nostalgia).

– no estoy segura de cuál es el motivo… pero aparentemente todos los recuerdos de N están siendo borrados mientras hablamos – explicó.

– demonios ¿otra vez? – murmuró Tessa mientras adoptaba un porte pensativo – pero de todos modos, eso no suena tan serio –

– a simple vista no… sino fuera porque gracias a una am-ejem – se interrumpió a sí misma – una compañera que está tratando de interrumpir el proceso me reveló que no son sólo sus memorias las que están siendo borradas, sino todo su "ser" – reveló.

Un silencio inundó la zona en la que estaban.

– me estás diciendo que… ¿N va a desaparecer? –

Un escalofrío recorrió los hombros de ambas albinas al escuchar el tono de la mujer.

Era un tono al que estaban más acostumbradas a oír en otra persona, no en quien fue en su momento una niña inocente.

Demostraba realmente cuánto habían afectado a Tessa los eventos del pasado.

– eso parece – dijo V tras poder recuperar su voz – por eso necesito tu ayuda Tessa, no hay nadie que conozca el funcionamiento de N mejor que tú –

Ella lo había reparado y reconstruido después de todo, y por lo que sabía estuvo por su cuenta (J supervisó, pero afirmó que nunca ayudó de forma directa).

– nadie que siga vivo – murmuró la humana desviando la mirada.

Era cierto, ella reconstruyó y reprogramó a N, puso su alma en ello… pero nunca creyó que eso se comparara a lo que su primo había logrado.

Siempre lo admiró, le traía felicidad cuando estaba triste, la apoyaba cuando se sentía atrapada, le mostraba algo nuevo cuando se sintiera estancada.

Quería ser como él.

Ser capaz de pararse recta por decisión propia, de mantenerse firme a lo que ella deseaba.

De estar dispuesta a recibir los golpes que le daba la vida (a veces de forma literal) sin tambalearse.

Fueron esos pensamientos (y también la presencia de J y su tío) los que la motivaron a tomar esa espada y confrontar a Cyn aquella noche.

Pero al final fue para nada.

Si tan sólo Tobías hubiese estado presente en aquel entonces, definitivamente habría podido hacer algo.

Él siempre era capaz de lograrlo todo.

– incluso si Tobías estuviera aquí, seguramente diría lo mismo – las palabras de V la sacaron de sus pensamientos.

– ¿qué? – fue lo único que pudo decir en respuesta.

– él confiaba más en ti que en cualquier otra persona, probablemente más que en nosotras – afirmó – ¿por qué crees que te enseñó tanto? –

– pero él… – intento contradecirla, pero la ojiamarilla menor no se lo permitió.

– él confiaba en ti – la interrumpió – te enseñó tanto porque confiaba en que le darías un buen uso, sabía que podía confiarte nuestro mantenimiento y reparación –

Tessa no pudo decir anda en respuesta a eso.

– él confiaba en ti Tessa – habló J finalmente – más de lo que tú pareces hacerlo –

Ella siempre se comparó a sí misma con Tobías, de un modo u otro… y siempre llegaba a la misma conclusión.

No le llegaba ni a los talones.

Lo admiraba, pero también lo envidiaba.

Y esa mezcla de emociones provocó que siempre se sintiera insuficiente.

Porque su primo era genial ¿verdad?

Él era un prodigio ¿no es así?

Comparado con él… ¿qué era ella?

Un niña atrapada, eso es lo que era.

Siempre fue así… ¿verdad?

Un pequeño recuerdo salió a la luz de golpe.

vamos Tess, eres una Kenton ¿sabes lo que eso significa? le preguntó su primo con un sonrisa sólo hay dos cosas capaces de detenernos a nosotros: el propio apocalipsis, y nosotros mismos; ¡fuera de eso somos imparables! exclamó con el puño en alto.

Sonrió ligeramente.

Era verdad.

La única en este momento que creía que no podía ayudar… era ella misma.

– muy bien, iré por mis herramientas – asintió – ¿tienes siquiera una idea de por qué pasó esto? ¿si fue por un error o acaso un extraño programa interno? –

– no lo sé la verdad – confesó – esta mañana lo encontré en medio de un supuesto "reinicio", pero al mirar de nuevo me di cuenta que más bien era un formateo –

– demonios – maldijo por lo bajo.

– Tessa – la llamó J – creo que será mejor que no atrasemos más este asunto – sugirió – ni tampoco el otro asunto –

– oh… – se le había olvidado completamente.

– se te olvidó ¿no es así? – preguntó la dron de coletas.

– pfff ¿queeeeeee? Claro que no ¿cómo se te ocurre? – respondió Tessa mientras llevaba sus manos a la espalda.

(realmente son familia) – pensaron al unísono ambas albinas al ver el gesto, igualito al de su primo.

Sin embargo, más pronto que tarde (y con escalofriante facilidad), la mujer adoptó un semblante serio.

– varias cosas pasaron estos días V, y conocimos a alguien de quien nos hicimos aliadas – empezó a explicar – es una obrera infectada, pero hasta el momento ha logrado controlarse y no sucumbir ante el Absolute Solver –

Los ojos de la albina de pelo corto de ahuecaron.

– ¿otra más? –

– J me informó que habías conocido a un dron infectado antes, así que te pido que no la ataques en cuanto la veas… más considerando que te tiene rencor en específico –

Instintivamente la dron menor dio un paso para atrás, eso estaba sonando demasiado familiar.

– puedes salir – llamó Tessa mirando a la cápsula.

Entonces, como si de un fantasma se tratase, cierta dron muy conocida por V se manifestó.

BANG

Y ella inmediatamente disparó.

La bala, sin embargo, fue fácilmente desviada por el Absolute Solver que la obrera usaba con fastidiosa habilidad.

– ¡V, espera! – la humana se puso en medio de ambas.

– ¡quítate del medio Tessa! – advirtió, con una "X" remplazando uno de sus ojos.

– ¡no V, escúchame! –

– ¡esa obrera es peligrosa! –

– ¡está controlada! –

– ¡si, controlada por ese condenado programa! –

– ¡no, quiero decir… argh! – Tessa pudo notar su mala elección de palabras – ¡J! – pidió ayuda.

Inmediatamente la exlíder se puso también en medio, indirectamente también frenando a Doll cuando esta empezaba a considerar que estaba en peligro.

– baja el arma – ordenó.

– ¿¡tú también J!? – exclamó incrédula.

– baja… el arma, V –

– …tú eras la que más insistía en acabar con los obreros para evitar el nacimiento de drones zombis ¿y ahora defiendes a uno? ¡¿uno que intentó acabar conmigo y con N!? –

– la situación ha cambiado –

– ¡¿cómo pudo haber cambiado!? –

J cerró los ojos por un momento y tomó aire.

No quería revelarle esto a V todavía, sabiendo que no la dejaría en un buen estado mental.

Pero parecía que no le quedaba otra opción.

– desde que Tobías se involucró – respondió.

Toda la ira que la menor estaba sintiendo hasta ese momento fue remplazada por sorpresa.

Su brazo tembló y sus hombros se tensaron.

– ¿qué…? – preguntó en un susurro.

– V, te dije que Tobías había interactuado con drones infectados, y las notas que leímos lo confirmaron – le recordó.

Ella no respondió, pero la "X" que remplazaba su ojo derecho desapareció.

– esta obrera, Doll… es la hija de uno de ellos –

– mientes… – murmuró – ¡eso no puede ser verdad! –

– viste el nombre en las notas ¿verdad? – le recordó – "Yeva", aquella dron que había perdido el control –

V empezó a temblar ligeramente, entendiendo por dónde iban las cosas.

El por qué ese nombre le resultaba familiar…

– ella es la hija de "Yeva", a quien Tobías salvó –

TRUP

V no pudo más y cayó de rodillas sobre la nieve.

– n-no… es mentira… –

Se negaba a creerlo.

Se negaba a creer que realmente asesinó a una conocida de Tobías.

– no te culpo por no creerlo – dijo J con un tono suave mientras se acercaba – por eso debes ver esto – le entregó un pedazo de papel.

No.

Era una fotografía.

En esa estaba Tobías junto a una dron demasiado familiar para el gusto de V, su padre guiñaba un ojo a la cámara mientras la obrera tenía una pequeña sonrisa. Debajo de la foto tenía escrito "amistad lograda".

Con cuidado tomó la foto, y pasó suavemente una de sus manos sobre la imagen del humano.

Era real.

Era verdad.

Asesinó a una dron a la que Tobías ayudó.

Una obrera que probablemente tenía problemas igual que ella cuando fue enviada al desmontaje, y él la salvó de igual forma.

Sus manos empezaron a temblar.

Todo el autocontrol que todavía podía manifestar en su cuerpo se concentró en no apretar sus manos para evitar dañar la foto.

– l-lo siento… papá… – murmuró con la voz quebrada.

.

.

.

Doll estaba sin palabras.

Igual que el resto de drones de la colonia (por no decir del planeta), veía a los drones genocidas como seres brutales sin sentimientos.

Esa percepción se tambaleó ligeramente el día que ambas albinas lograron entrar a la colonia, y fueron detenidas por Uzi, el coloso metálico y aquel dron asesino de nombre N.

Aquel evento había despertado la curiosidad de Doll, pero no le dio demasiadas vueltas antes de dejarlo de lado.

Uzi de todos modos de autodesterró ese mismo día, y junto a los otros dos drones se marchó, por lo que era imposible saber a qué trato habían llegado, si fue por la amenaza del robot gigante o incluso si fue sólo porque ese dron tenía algún tipo de fallo.

No fue sino hasta el baile escolar que notó lo cercanos que eran realmente.

No sólo Uzi estuvo dispuesta a enfrentarla a ella con su poder (que ahora sabe que se llama "Absolute Solver"), sino que incluso se dispuso a enfrentarla antes de que su robot mascota apareciese.

Y aquel dron asesino masculino, N, también demostró genuina preocupación por ella, hasta el punto de cuidar más a la obrera que a sí mismo.

En un principio pensó que era una excepción, un dron defectuoso que se reveló ante su naturaleza homicida (como ciertas novelas humanas que había en el planeta).

Pero interactuando los últimos días con J (por medio de Tessa), vio que literalmente no eran tan diferentes.

Podían ser felices o sentir dolor de igual forma, sus reacciones a las fotografías no podían ser falsas.

Pero incluso con todas esas evidencias frente a ella, Doll no podía imaginar a alguien como V sintiéndose herida.

Y sin embargo, ahora estaba presenciando eso mismo.

Siempre imaginó a V como un demonio de metal, un ser incapaz de sentir pena ni remordimiento.

Y ahora la tenía delante suyo, arrodillada en el suelo mientras lloraba como una niña pequeña.

La sorpresa realmente hizo que su mente se pusiera en blanco por unos instantes.

Sin embargo, eso no significaba que la perdonase.

La veía arrepentida sin dudas, pero eso no era suficiente.

Nada iba a ser suficiente para que la perdonara.

Pero quizás, sólo quizás…

– знай, что я ненавижу тебя, Ви (sepas que te odio V) – dijo finalmente mientras se acercaba a la asesina de su madre.

Tessa y J se habían acercado para consolarla en el tiempo que Doll reorganizó sus pensamientos.

La obrera era honesta, de hecho, si pudiera ahora mismo intentaría acabar con ella.

Siempre pensó que así sería la siguiente vez que se encontraran, ambas mirándose con odio y listas para luchar a muerte.

Pero incluso aunque ahora estaban frente a frente, Doll no podía notar odio en la mirada de la albina de pelo corto.

Sólo tristeza y desesperación.

Una parte de ella quería deleitarse con su sufrimiento, echar tanta sal o limón como fuese posible a esa herida.

Pero otra parte, aquella conciencia que creyó haber enterrado bajo sus deseos de venganza, le decía que no debía hacerlo, todo porque el padre de esa dron genocida fue el salvador de su madre.

Pero una cosa no quitaba la otra.

– Если бы это зависело от меня, я бы убил тебя прямо сейчас (si por mí fuera te asesinaría en este preciso instante) – por la molestia que empezó a sentir en su ojo derecho, supo que inconscientemente activó al Absolute Solver.

Debía controlarse, pero le estaba costando.

Notó las miradas de advertencia de la humana y la otra dron en ella, pero las ignoró.

Una reacción así era de esperarse.

Lo que no se esperaba era ver a V ponerse de pie y acercarse a ella.

Inmediatamente Doll se puso en guardia, lista para responder a cualquier acción hostil que realizara la albina.

Pero nuevamente sus expectativas fueron destrozadas cuando la vio simplemente sentarse frente a ella.

Y sus siguientes palabras fueron el remate.

– adelante –

– ¡¿V!? – exclamó Tessa.

La obrera también se sorprendió.

Conocía lo resistentes que eran los drones genocidas, así como era consciente de sus capacidades regenerativas (las presenció claramente durante su pelea), por lo que no era descabellado escuchar eso como una burla.

El asunto era que V no sonaba condescendiente en estos momentos.

Su tono era plano, sus ojos vacíos (tan vacíos como unos ojos digitales pueden ser) y sus labios se curvaban hacia abajo.

Doll instintivamente dio un paso para atrás.

¿esta era la misma dron que asesinó a sus padres con una gran sonrisa en sus labios?

No podía creerlo.

¿todo ese cambio sólo por conocer a un solo humano?

¿qué clase de ser puede causar tal contraste de comportamiento en un individuo?

La incredulidad de su interior rápidamente empezó a deformarse, convirtiéndose en frustración.

¿se hubieran salvado sus padres si tan sólo hubiesen mencionado el nombre de Tobías Kenton?

¿sólo con eso las cosas habrían cambiado?

¿o si su madre de casualidad enmarcaba alguna de esas fotos en la sala?

¿tan fácil hubiera sido?

E incluso ahora, sabía que sólo estaba recibiendo este trato debido a que su madre conoció a aquel humano.

De lo contrario seguramente seguiría insistiendo en matarla.

Pero también…

Ahora mismo parecía desear que Doll la asesine.

Parecía querer morir.

Igual que ella tras perder a sus padres.

Meditó por unos segundos qué hacer.

Si acababa con ella, entonces era posible que Tessa y J se negaran a ayudarla, incluso si antes habían dicho que la ayudarían, seguramente no le perdonarían por asesinar a su "familia".

Tendría que lidiar con ese poder maldito por el resto de su vida.

Le dio un vistazo más a la asesina.

Esos ojos huecos y deprimidos…

– я не собираюсь тебя убивать (no voy a matarte) – terminó diciendo.

Notó que la humana relajó los hombros al oírla, pero mantuvo su enfoque en V.

Vio su visor notando una mirada sorprendida pero aún deprimida.

Podía aceptar eso.

– ты желаешь смерти (tú deseas la muerte) – continuó – Убить тебя в этот момент было бы проявлением вежливости... которую я не собираюсь тебе оказывать (asesinarte para este punto sería una cortesía… una que no voy a darte) – dijo, para entonces volver a avanzar hacia la albina.

Una vez quedaron frente a frente, Doll se inclinó hacia adelante con sus manos en la espalda mientras la observaba con una mirada seria.

– Если ты сейчас чувствуешь так много боли, я не собираюсь забирать ее у тебя (si tanto dolor sientes ahora, no voy a ser yo quien te lo quite) – dijo con seriedad – Живи с этой агонией внутри себя, как мне приходится жить без родителей (vive con esa agonía en tu interior, así como yo debo vivir sin mis padres) –

Fue satisfactorio decir esas palabras.

Fue satisfactorio volver a sentir que tenía el control.

Fue satisfactorio ver que la que una vez fue una sádica asesina estaba al borde del llanto.

– Doll – Tessa la llamó con un tono de advertencia.

La rusa cerró los ojos mientras se enderezaba con un suspiro.

– Им было кого спасать, верно? (tenían a alguien que salvar ¿verdad?) – les recordó.

Eso finalmente hizo reaccionar a V.

– oh cielos ¡N! ¡perdimos mucho tiempo! –

– voy por mis herramientas – Tessa corrió hacia la cápsula.

La obrera se dio la vuelta, dispuesta a dirigirse a lo que fue su hogar por estos días.

– puedes venir si quieres – dijo de repente J.

– Я убил там многих (asesiné a muchos ahí) –

– también mis hermanos, y por lo que sé, los aceptaron bien – contradijo – además ¿no tienes amigos ahí? –

Nuevamente Doll se puso a pensar en sus "amistades" dentro de la colonia.

Supuso que volver a ver a Lizzy estaría bien.

Quizás podría pedirle perdón por lanzarla por los aires durante el baile.


Año 3049.

4to año de la creación de N.

5to año tras la reparación de V.

6to año desde la reconstrucción de J.

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Y el año de la partida de Tobías.

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Ese día había comenzado con normalidad, con Tessa y el trío de albinos felices por la visita de Tobías.

En los últimos meses los Kenton habían empezado a recuperarse de su anterior derrota (que las noticias siempre catalogaron de "humillación", pero así eran los reporteros) gracias a su nuevo robot.

Y ahora mismo estaban viendo uno de esos combates.

En el ring se veía un robot boxeador plateado con una tonalidad azulada de quizás 2,2 metros de alto. Era de contextura robusta con placas móviles en su torso, colocadas para amortiguar mejor los golpes, y en el centro de su pecho había una pantalla transparente hecha de un material extremadamente resistente que dejaba ver su núcleo, el cual brillaba con una luz naranja. Su cabeza era redonda y pequeña, careciendo de cuello, mientras que portaba dos ojos pequeños de color naranja.

– ¡yahoo! – exclamó N.

– ¡golpéalo como si te debiera dinero! – gritó Tessa lanzando un puño al aire.

– ¡arráncale la maldita cabeza! – exclamó V con las manos empuñadas.

– *snif* crecen tan rápido – dijo Tobías con orgullo paternal mientras le daba palmaditas en la espalda a la albina de lentes, provocándole un pequeño sonrojo.

– el nuevo robot Kenton es tenaz – reconoció J mientras comía unas pilas (siempre era la que más comía durante las noches de box).

– ¿cómo era que se llamaba? – preguntó el pequeño mayordomo.

– Newton – respondió el adulto joven – se llama Newton, y es nuestra forma de honrar el pasado mientras abrazamos el presente –

– ¿cómo así? – el dron masculino se confundió.

– lo creamos combinando piezas, digamos, "clásicas" y piezas nuevas – explicó – tiene un software más actualizado, y basamos su aspecto en uno de los antiguos robots de los Kenton –

– ¿en cuál? – preguntó curiosa V, despegando por primera vez su mirada de la TV.

El varón sólo sonrió en respuesta.

– algún día los llevaré a conocerlo, hasta entonces lo dejo de sorpresa – le acarició los cabellos, muy para su disfrute.

J hizo una mueca ante el gesto, ella también quería recibir esos mimos... ¡pero no podía sólo pedirlos!

– oh ¿hablas de-? –

– si Tessa, hablo de él – la interrumpió – no les arruines la sorpresa a los pequeños –

– entendido capitán – respondió la adolescente con un saludo militar.

– descanse soldada – bromeó su primo, ganándose las risas de las chicas.

N por su parte volvió a concentrarse en la pelea que se mostraba por la TV.

Sus ojos trataban de observar cada movimiento que hacían los boxeadores.

La promesa de Tobías de hacía unos meses seguía en su memoria.

En el futuro sería un robot boxeador, y estaría en ese mismo ring luchando.

Tenía que saber perfectamente lo que le esperaba.

Unas palmaditas en su espalda llamaron su atención, y al girarse se encontró con la sonrisa de Tobías.

N le regresó la sonrisa.

Ambos recordarían esa promesa.

Una promesa de amigos.

No.

Una promesa de familia.

.

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.

Fue un día divertido, como generalmente era cuando Tobías llegaba de visita.

Además de la maratón de boxeo, compartieron anécdotas y jugaron unos cuantos juegos que tenían (Tobías siempre perdía en las cartas por tener una pésima cara de póker cuando no estaba enojado, incluso N era mejor que él en ese aspecto).

Pero desgraciadamente la diversión debía terminar tarde o temprano.

– ¿no puedes quedarte más tiempo? – preguntó Tessa.

– lo lamento, pero no – respondió su primo – tengo responsabilidades que atender –

– entendible – comentó J con un tono neutral, pero se le notaba inconforme.

– pero al menos podremos verte en la siguiente ocasión – trató de animar el ambiente N.

Normalmente eso funcionaba gracias al cómico comentario en respuesta del adulto joven, con el que usualmente afirmaría lo que dijo y les sacaría unas últimas risas antes de marcharse.

Pero en esta ocasión sólo silencio hubo en respuesta.

– ¿Tobías…? – preguntó V preocupada por el silencio.

– si, sobre eso… – incómodo, el varón se rascó la nuca – no sabía cómo decirles esto, pero mi viejo me consiguió un trabajo en uno de los exoplanetas bajo el cargo de la compañía JCJenson, y abordaré una cápsula en 2 semanas – reveló.

– t-tú… ¿te vas…? – preguntó la niña humana.

– si… trabajaré como asistente y quizás como mecánico para reparar drones, así que conseguiré mayor experiencia y probablemente noten mejor mis talentos – intentó verle el lado positivo.

Los drones se vieron entre sí, sus reacciones siendo bastante similares.

Todos se sentían tristes por la noticia.

Pero al mismo tiempo, era una gran oportunidad para Tobías, una que sin dudas su padre debió negociar bastante para conseguir.

El renombre de su familia en el mundo del boxeo tenía un límite respecto a cuán lejos lo podría llevar.

– p-pero… – Tessa trató de decir algo, pero no podía, le fallaba la voz.

– Tess… – el veinteañero se agachó ligeramente para estar a la misma altura que su prima – sé que será duro lo que se viene, y créeme que quisiera estar ahí para apoyarte… pero eres fuerte Tessa, más de lo que crees –

– no tanto… – respondió desviando la mirada mientras se frotaba el brazo, recordando lo fácil que sus padres la controlaban.

– vamos Tessa, eres una Kenton… ¿sabes lo que eso significa? – le preguntó suavemente su primo con un sonrisa – sólo hay dos cosas capaces de detenernos a nosotros: el propio apocalipsis, y nosotros mismos; ¡fuera de eso somos imparables! – dijo, extendiendo su puño y colocándolo suavemente sobre el pecho de la niña, justo encima de su corazón.

Ella inhaló con fuerza, tratando de aguantar las lágrimas que empezaban a formarse en sus ojos.

– te he dicho esto muchas veces primita, eres más capaz de lo que crees, sólo necesitas confiar en ti misma – dijo con suavidad – y si no puedes creer en ti misma, entonces cree en el mí quien cree en ti –

No pudo soportarlo más, con fuerza atrapó a su primo en un abrazo y comenzó a sollozar en su pecho.

¿cómo podría seguir aguantando sus sentimientos tras escuchar esas palabras?

El trío de drones observó eso con empatía, y no tardaron en unirse al abrazo familiar.

Tobías hizo todo lo que pudo para poder tenerlos a todos entre sus brazos, pero estos tenían un límite.

Duraron así un buen rato, hasta que finalmente se separaron cuando Tessa pareció terminar de desahogarse.

– antes de irme, tengo un par de regalos para ustedes – sacó de su mochila unos cuatro paquetes, y le entregó uno a cada uno.

J recibió un cuaderno de notas marca JCJenson, V obtuvo una linda bufanda roja, Tessa consiguió un nuevo moño (este de su color favorito, en lugar del color que le compraban siempre sus padres), y finalmente N se encontró con un par de guantes de entrenamiento de boxeo.

El dron masculino vio sorprendido al humano, quien le guiñó un ojo.

– no voy a olvidar mi promesa N, tú no olvides la tuya –

– ¿qué promesa? – preguntó J.

– perdón J, secreto de bros ¿cierto bro? –

– por supuesto bro – respondió N animado, a lo que ambos chocaron puños.

Tessa y V rieron ligeramente, mientras que J rodó los ojos con una sonrisa.

– ahora bien, quisiera pedirles un favor a ustedes 3 – dijo de repente Tobías con un tono un poco más serio.

Los 3 se enderezaron y se acercaron, sabiendo que lo que sea que fuera a decirles era importante.

Nuevamente, el humano se puso a la altura de ellos para verlos directamente a los ojos/visores.

– cuiden a Tessa por mí ¿si? – les pidió – este lugar va a quitarle toda la felicidad que ahora tiene… cuento con ustedes para que eso no pase –

– Tobi… – murmuró la mencionada.

– por favor – dijo – no estaré aquí para darle apoyo, así que confío en que ustedes se lo den… no como sirvientes, sino como familia –

El trío estaba sin palabras ante la confianza que él estaba demostrando en ellos.

No iban a decepcionarlo.

– sin dudarlo – dijo N animado.

– por supuesto – respondió V con una sonrisa.

– ni que tuvieras que pedírnoslo – fueron las palabras de J.

Tobías sonrió, feliz por esas palabras.

– muchas gracias… J Kenton, V Kenton y N Kenton –

El albino sonrió al volver a escuchar que lo llamaba así, pero vio entonces que sus hermanas se paralizaron al ser la primera vez que se refería así a ellas.

– t-tú… –

– p-papá… –

Invadidas por la emoción, ambas fueron hacia él para abrazarlo de nuevo.

Tessa y N no tardaron en unírseles.

Ese último abrazo familiar duró más que el anterior.


– ¿qué tal esto? – preguntó Uzi intentando un nuevo enfoque.

[R1S1T4, QU3 P3N4]

– ¿y esto? – probó un nuevo método.

[M4L4 SU3RT3]

– grrr, me estás colmando la paciencia –

[N00B]

– ¡AGH! ¡¿QUIÉN DEMONIOS ERES!? –

[4LGU13N 3DUC4ND0 4 UN4 N1Ñ4 TR4V13S4]

– ¡AHORA MIRA TÚ HIJA DE-! – estaba por insultar al cuadro de texto cuando unos golpes a su puerta la interrumpieron.

Knock knock knock

– emm, Uzi, lamento interrumpirte mientras le gritas a tu amigo, pero ¿recuerdas a tu amiga dron genocida que salió hace rato? Pues regresó con compañía y- – trató de preguntarle su padre, pero fue interrumpido.

– ¡sáquese anciano! – oyó a V exclamar junto a un ligero golpe y abriendo la puerta con prisa.

– ¡V! ¿Encontraste alg-? – se trabó cuando vio entrar también a Doll y J – ¡¿qué hacen ellas aquí!? ¡Atom! –

El gigante inmediatamente se puso de pie y levantó la guardia.

– ¡espera Uzi! ¡están de nuestro la-! –

– ¡OH POR DIOS ES ATOM! – la persona desconocida para Uzi (alguien con traje de astronauta) gritó emocionada interrumpiendo a la asesina mientras se acercaba al boxeador.

– ¿pero qué…? – preguntó incrédula la pelivioleta.

– ¡REALMENTE ERES TÚ! ¡ESPERÉ TODA MI VIDA PARA CONOCERTE! ¡DESDE QUE MI PRIMO ME MOSTRÓ ESE VÍDEO TUYO ENFRENTANDO A TY-PHON! – siguió exclamando feliz mientras examinaba al boxeador sin tener el más mínimo respeto por su espacio personal.

– ok ¿quién es esta loca? – la dron edgy estaba realmente desconcertada.

– más respeto tostadora – advierte J.

bite me ¿cómo siquiera sigues viva? –

– los drones eficientes tienen clones – dice simplemente, para luego mirarse a sí misma – aunque no puedo evitar sentirme inferior a antes ¿sabes dónde quedó mi cuerpo? –

– fue vaporizado por la explosión de mi railgun – dijo satisfecha.

– demonios – murmuró frustrada.

– Ты не забываешь-? (¿no se están olvidando de-?) – trató de decir Doll, notando que la pantalla del visor de N mostraba un "80%", pero fue interrumpida.

– ¡ERES INCLUSO MÁS IMPONENTE EN PERSONA! – exclamó la humana aún en su pequeño mundo.

– ¡¿V QUÉ DEMONIOS ESTÁ PASANDO!? – preguntó la inventora.

– AGH ¡TESSA! – gritó finalmente la asesina de pelo corto.

– ¿uh? ¿V? – se giró confundida.

– ¡J! – gritó luego para pedirle ayuda.

– Tessa – regañó la exlíder.

– ¿J? – la humana no entendía.

– Doll – miró Uzi con rencor a la rusa.

– уззи (Uzi) – la ojirroja le devolvió la mirada.

PUM

Todas las chicas guardaron silencio en el momento que un fuerte golpe se oyó en la habitación.

Se giraron al mismo tiempo para ver el origen, sólo para notar el gigantesco puño de Atom contra la pared, dentro de una notoria abolladura.

Al parecer, tanto griterío colmó la paciencia del gigante, suponiendo que tuviera una.

– gracias Atom – asintió V en dirección al boxeador.

Este sólo le dedicó una mirada, para entonces despegar el puño de la pared y darle una pequeña mirada a Uzi.

– no te preocupes, luego lo reparo – dijo ella, entendiendo la preocupación del mastodonte.

J y Doll compartieron una mirada, ambas preguntándose entre ellas cómo era que entendían al goliat, mientras que Tessa sólo se veía fascinada.

– miren, sé que la mitad de los presentes tenemos historia aquí, y no de la buena – prefirió no mirar a nadie en concreto en ese momento – pero ahora mismo tenemos cosas más importantes que hacer, N es más importante que nuestros rencores –

– oh cierto, N ¿dónde est-? – Tessa trató de buscarlo con la mirada, sólo para encontrarlo sentado contra una cama volteada, con un imán conectado a su cabeza y una pantalla de carga en su visor – ¿N…? – trató de acercarse a él.

Pero cierta dron bajita se puso en medio.

– ¡oye! ¿Qué haces? – preguntó Uzi de forma agresiva.

– a un lado – advirtió la humana de forma monótona pero ligeramente amenazante, sorprendiendo a V por ese tono.

– ¿y dejar que hagas lo que quieras con mi amigo? ¡olvídalo! –

– sólo quiero ayudar a mi pequeño –

– ¿"tu pequeño"? ¿de qué estás…? – los ojos de la pelivioleta se ahuecaron cuando notó la placa de identificación en el pecho del ser frente a ella.

Tessa Elliott Kenton

– ¿Kenton…? – no se lo creía ¿una Kenton? ¿Una humana?

Espera ¿no era el nombre que Tobías dijo en el recuerdo de Atom que pertenecía a su prima?

– ¿reconoces ese nombre? – preguntó Tessa sorprendida.

– ¿tú eres… familiar de Tobías? –

– ¡¿conoces a mi primo!? – exclamó incrédula la humana – espera… ese aspecto… ¿acaso tu madre estuvo con él? –

– ¿de qué hablas? – Uzi estaba confundida ¿su madre conociendo a Tobías? Ese era más o menos un sueño que tenía.

¿qué sabía esta humana que ella no?

– ¡oigan! ¡N está formateándose! – el grito de V las sacó de su trance.

– ¡cierto! ¡déjame ver cómo vas! – sin dejarla acceder, la mujer se sentó en la silla frente al monitor y empezó a teclear.

– ¿realmente sabe lo que hace? – pregunta la obrera.

– ella es quien por su cuenta reconstruyó a N – dijo J – NADIE conoce sus sistemas mejor que ella –

Uzi frunció el ceño, pero concedió que probablemente la humana era la más indicada para la tarea.

Eso no la detuvo de acercarse para observar mejor sus acciones.

Siempre precavida, la exlíder se puso en guardia al ver a la obrera tan cerca de su jefa, pero V la tomó del hombro.

No era el momento para eso.

[ERROR]

[INGRESO DE ADMINISTRADOR INCORRECTO]

– ¿qué? Peros si yo soy la… oh no… – empezó a teclear con más velocidad – no… no me digas que… –

– ¿qué pasa? – preguntó la pelivioleta con preocupación.

– no es cualquier programa el que está formateando a N… es uno colocado por el Absolute Solver –

– ¡¿qué!? –

– ¡maldita seas Cyn! – exclamó la asesina menor.

– ¿quién es Cyn? – preguntó Uzi.

– la dron con el AS de la que te hablé, habrá dejado eso ahí en caso de que algo pasara… ¿pero qué? –

– "estas memorias no deben regresar" eso dice el mensaje – responde Tessa, para entonces darle un golpe al escritorio – ¡carajo! ¡no hay humano capaz de superar el Absolute Solver! –

Es entonces que ambas albinas de miran entre sí, recordando su descubrimiento previo.

– hay una forma – dijo V, ganándose la mirada de la humana y la obrera.

– cuando nos encontramos yendo hacia la oficina de Tobías, encontramos unas notas suyas – J continuó mientras sacaba unos papeles de la caja metálica que trajo consigo – según lo que él descubrió, la mejor forma de lidiar con un programa impulsado por el Absolute Solver… es con otro Absolute Solver –

– Uzi, sólo tú puedes salvarlo – terminó la desmontadora menor.

– ¿qué? Pensé que me dijiste que no usara este poder –

– al parecer papá descubrió una forma de que se controlen los portadores, pero eso será luego, primero hay que salvar a mi hermano – en su tono de voz empezaba a notarse cierta desesperación.

Uzi la miró por unos segundos, pero antes de responder Doll habló.

– Если ты этого не сделаешь, то это буду я (si no lo haces tú entonces seré yo) –

– ¿qué? ¿desde cuándo te importa N? – cuestionó la ojivioleta.

– Это не так, я просто возвращаю услугу (no lo hace, sólo devuelvo un favor) – contradice la rusa – Тобиас Кентон помог моей матери, а N творение его кузена, это справедливо (Tobías Kenton ayudó a mi madre, y N es creación de su prima, es lo justo) –

Eso era una avalancha de información repentina que Uzi deseaba tener más tiempo para procesar, pero había cosas más importantes en ese momento.

bite me, yo entraré – terminó aceptando, queriendo salvar a su colega.

Además que, por algún motivo, realmente le desagradaba la idea de que Doll se "conectara" con N.

– perfecto, intentaré ayudarte desde aquí – dijo Tessa sin despegar su mirada de la computadora – pero también sería bueno que alguna se conecte también, así podré retrasar el formateo al reescribir sus memorias con las suyas – explicó.

– iré yo – se ofreció V.

– ¿estás segura? – le preguntó su hermana.

– tengo que ser yo, tú ayuda a Tessa con cualquier cosa – respondió, para entonces mirar de reojo a Doll – además, habrá menos incidentes si yo no "estoy" aquí –

– …de acuerdo – asintió la exlíder.

Tanto Uzi como V se sentaron contra la cama, cada una a cada lado de N, y se colocaron los imanes sobre su cabeza.

– sepas que estoy confiando en ti, humana… no me decepciones – advirtió la obrera.

– no te preocupes – respondió Tessa sin alejar su mirada del monitor – como le dije a Doll, haré lo posible para que ningún dron inocente sea destruido –

– …bien – acepta la dron edgy.

Compartió una mirada con su amiga albina, y ambas asintieron.

Esperaban que todo resultara.


– siempre que ese pequeño inculto llegaba traía otro desperdicio del vertedero a nuestro hogar – habló James Elliott frente a varios colegas suyos mientras observaba a N.

El pequeño albino se mantuvo firme con una bandeja llena de copas vacías, su trabajo era recolectar todas las que los invitados terminaran de usar para luego llevarlas al bar y limpiarlas.

– incluso corrompió a mi bella hija – dijo de forma dramática el adulto – ¿de dónde siquiera saca el cabello que les colocan? Es aterrador – agregó, para entonces lanzar su copa vacía al aire.

El mini-mayordomo trató de acomodar la bandeja para que cayera encima del resto de copas, pero la inercia hizo que se perdiera el equilibrio.

Gracias a sus grandes reflejos robóticos, pudo mover la bandeja de tal forma que las copas volvieran a estar en equilibrio.

Con una ligera reverencia, se retiró.

Caminó por los pasillos de la mansión, dirigiéndose al bar de la familia.

Ese era su lugar de trabajo durante las visitas.

Se tomó un momento en el camino para observar una ventana, notando la intensa lluvia del exterior.

Los días se sentían más negros desde que Tobías se había marchado a uno de los exoplanetas humanos (nunca les dijo a cuál, quizás él mismo no lo sabía).

Era como si el propio clima lamentara su ausencia.

Agitó la cabeza, no era el momento de pensar en eso.

Ahora mismo, cualquier error suyo repercutiría en Tessa.

No iba a ser la causa de su sufrimiento si podía evitarlo.

Continuó su camino, su mente divagando ligeramente.

Su meta de ser boxeador a futuro seguía vigente.

El padre de Tobías, Bénjamin, llegaba de visita de vez en cuando.

No era lo mismo que con el humano joven, pero los alegraba a todos ligeramente.

N también aprovechaba para que le enseñara algo de boxeo durante sus visitas.

Desafortunadamente, por no prestar atención terminó chocándose con V, provocando que ambos cayeran y que él tirara los vasos.

– ¡oh! Lo siento… – dijo N mientras se apresuraba a levantarlo todo.

– ¡está bien! Iba distraída – respondió ella mientras trataba de ayudarlo.

Quisieron apresurarse para que nadie los viera, pero en su apuro terminaron chocando cabezas.

– ¡auch! – dijeron a la vez, para entonces mirarse entre ellos y soltar una leve carcajada.

El lindo momento de hermanos fue interrumpido por J, quien apareció dándole una patada al dron masculino.

– muévete, idiota – lo regañó.

N no dijo nada en respuesta.

Sabía que J fue la que más en serio se tomó el pedido de Tobías.

Siendo ella la mayor de los 3 (al menos en lo que respecta a la reconstrucción), ella sentía que debía ser la que los guiara.

Incluso si eso significaba ser algo brusca con sus métodos.

– hola Tessa – saludó de repente su hermana mayor con alegría, para entonces cambiar su tono – espera ¿otra? – sonó sorprendida.

El albino se levantó y miró a la humana, quien tenía detrás suyo a una dron algo más bajita que él.

Ella tenía pelo blanco como ellos, pero este estaba bastante más largo y tenía dos colas gemelas, vestía un uniforme de sirvienta bastante similar al de sus hermanas.

– chicos, quiero presentarles a Cyn – dijo Tessa animada – ella llegó aquí y dijo que Tobías la reparó –

– H0L4, UN GUST0 C0N0C3RL0S – habló de una forma bastante curiosa.

– ¿Tobías te reparó? ¿hace cuánto? – preguntó J con sospecha.

– P4P4 M3 R3P4R0 H4C3 UN0S 4Ñ0S, P3R0 4L P4R3C3R N0 M3 C0NS1D3R4B4 L1ST4 Y S1GU10 TR4B4J4ND0 3N M1 – explicó – 3L M3 C0NT0 S0BR3 UST3D3S, T3SS4, J, V, N… ¿S4B3N D0ND3 3ST4 P4P4? –

Ambas albinas mayores se mostraron algo incómodas por su forma de hablar, pero N se acercó con confianza.

– hola pequeña, al parecer ya nos conoces, pero por mi parte es un gusto hacerlo – dijo con amabilidad – y bueno, permíteme explicarte ¿me acompañas mientras llevo esto? – levanta la bandeja con los vasos.

– D3 4CU3RD0, H3RM4N0 N –

Ella de forma un tanto tambaleante se acercó a él, para entonces agarrarlo del borde de su uniforme para seguirlo más fácilmente.

El albino le sonrió, y entonces empezó a caminar junto a ella.

Una nueva hermanita acababa de unírseles, y debía hacer todo lo posible para que se sintiera bienvenida.


Capítulo 16 terminado.

Finalmente ambos grupos se reunieron, con sus altos y bajos, pero pudieron ver lo que era importante en el momento y empujar sus rencores para más tarde.

Tengo que decir que pensaba que este "arco" me duraría unos 3 capítulos, pero me está resultando un poco más largo dado que tengo que dejar claras varias cosas debido a los cambios en el universo de Murder Drones, y ni siquiera estoy seguro si terminará en el siguiente o si habrá uno más (lo averiguaré mientras escribo).

Uzi y V han ingresado a la mente de N justo a tiempo para contemplar el evento más importante en aquella mansión ¿serán capaces de ayudar? ¿Las cosas pasarán de la misma forma? ¿La ayuda de Tessa desde el exterior les facilitará las cosas? ¿dejaré de hacer preguntas dramáticas el final de cada capítulo?

Averígüenlo en el siguiente capítulo.

Ya sin nada más que agregar.

Hasta la próxima.