Entre Líneas
Capítulo 5
¿Qué es un amigo?
Disclaimer: Los personajes de Naruto son propiedad de Masashi Kishimoto, esta historia es de mi total autoría no está permitida su publicación en otros sitios sin previa autorización. -Azulen-
Summary: ¿Qué harías si pudieras volver a empezar? Sasuke despierta de un largo sueño a punto de tomar una decisión que podría cambiar el destino de todos. SasuSaku. Fluff Romance.
•••
-¡No!- exclamó Sakura tocando su cabeza preocupada- ¡Mi cinta!
Ino le miró con interés reparando en que efectivamente no tenía su cinta atada en el cabello como siempre, comprobó que no estuviera caída cerca de la entrada del salón de prácticas y devolvió su mirada azul hacia su recientemente recuperada amistad.
-Ven aquí- le dijo dando golpecitos al asiento junto a ella y sacando de su mochila algunas ligas transparentes y una pequeña peinilla mirando su cabello con concentración y pensando en la mejor opción de peinado para Sakura decidiéndose por una rápida media cola que dejaba su cabello suelto y peinándole los flequillos de manera que enmarcaran su bonito rostro- ¡Ya está! - exclamó orgullosa de su logro pasándole un pequeño espejo a la niña.
- ¡Gracias Ino! - le dio una amplia sonrisa agradecida- me veo genial- rio sonrojada.
-Te ves bonita- halagó la pequeña de ojos azules y le dio una sonrisa cómplice justo antes de sentarse correctamente para atender a la clase viendo a la maestra entrar con unos cuantos ramilletes en sus manos para una demostración de arreglos florales.
•••
- ¡Eso Sasuke!
- ¡Demuéstrale a ese perdedor quien manda!
Naruto observó a su alrededor furioso habiendo sido inmovilizado por Sasuke con una velocidad de vértigo, solo recordaba haber estado de pie un segundo y al siguiente tener el puño de su compañero muy cerca de su nariz sin oportunidad de defenderse Iruka dio por finalizada la batalla.
Lo había vencido sin siquiera despeinarse... Más.
Patético.
Hace un año había pasado exactamente lo mismo… parecía no avanzar en absoluto incluso cuando ponía todo su esfuerzo en entrenar duro para alcanzar a aquel chico a quien había declarado su rival.
Resignado, pero no derrotado se puso de pie gritándole que la próxima vez el le partiría la cara comentario que solo provocó que Sasuke le lanzara una mirada cargada de superioridad y desprecio sin dirigirle la palabra antes de darse vuelta y quedarse de pie en un sitio más apartado observando el resto de combates de entrenamiento mientras él era regañado por Iruka como siempre.
Se sentó en el suelo observando con aburrimiento a Shikamaru vs Choji en un intento patético de pelea, después de ese combate con Neji estaba ansioso por ser promovido a una clase de superior, acercándose la hora del recreo vio a las niñas salir de la torre de los salones de prácticas y sus ojos se fijaron en los brazos de Sakura e Ino entrelazados mientras reian ajenas a los combates de los niños, a diferencia de las demás niñas que corrieron a observar las batallas las dos no parecían haberse dado cuenta y siguieron su camino a paso calmo enfrascadas en su conversación.
Bueno… si era promovido a otra clase… no volvería a sentarse con Sakura ¿verdad?
La idea dejó de parecerle atractiva, y apoyó su mejilla sobre la palma de su mano aburrido, cerró los ojos ensimismado en sus pensamientos sobre por qué esa niña parecía estar evitandolo como la peste ese día si todos los anteriores se dedicó a seguirlo como todas las demás ¿Es que le había dicho algo malo ayer? ¿Por qué tenia el rostro golpeado? ¿Su madre la habría golpeado?
No, no parecía esa clase de persona.
La presencia de alguien bloqueando la luz solar ensombreció su percepción y abrió los ojos encontrándose con la cara de Naruto muy cerca de la suya por lo que se echó hacia atrás fastidiado con la invasión repentina de su espacio.
- ¿Q-qué crees que haces tarado? No te me acerques- protestó observándolo enfadado.
El pequeño rubio le contemplaba fijamente con su ceño fruncido y sus ojos entrecerrados como si tratara de desentrañar un misterio y se cercioró de que alrededor no quedara nadie antes de decir en voz baja.
- Tú… todos están diciendo que eres bueno… y yo uhm… no quiero reprobar…
Con una ceja encorvada le lanzó una mirada arrogante intuyendo por donde iría el asunto y se adelantó a responder:
-No voy a ayudarte Naruto- le dijo fríamente- para eso está Iruka- puso los ojos en blanco tan antipático como siempre y se puso de pie de un salto dispuesto a largarse de ahí.
- ¡S-si me ayudas con las shuriken averiguaré que pasó con Sakura-chan por ti!- juntó sus manos en posición de plegaria sintiéndose profundamente humillado por tener que pedirle ayuda a él.
Su mayor rival.
- ¿Y cómo harás eso? Ella parece odiarte- se burló recordando como en alguna ocasión Sakura había rechazado sin piedad a Naruto.
-¡Puedo preguntárselo a Shikamaru y Choji! Son amigos de Ino seguramente saben por qué tiene la cara así.
Sasuke le miró de soslayo pero recordó las habladurías del día de ayer y lo imprudente que era Naruto así que retrocedió algunos pasos y avergonzado le espetó:
- ¡No sé por qué crees que me importa lo que le pasó a esa niña, pero no voy a ayudarte! Ten por seguro que si quisiera saber lo que le pasó a su cara ya lo sabría- se dio media vuelta enojado y confundido por el movimiento frenético de un enmudecido Naruto señalando a su espalda y chocó de frente con el objeto de todos sus líos mentales de ese día.
- ¡Ay! - exclamó tocando su frente justo antes de caer de sentón por el impacto.
-Oye… ¿No crees que eso fue un poco grosero? Deberías disculparte – Naruto se adelantó tendiéndole la mano con gentileza y Sakura desvió su mirada apenada antes de tomarla y ponerse de pie con ayuda del rubio.
-Gracias Naruto- prácticamente susurró dándole una sonrisa pequeña para despreocuparlo acto que sonrojó al rubio de los pies a la cabeza a punto de babear por ella.
-¡D-de nada Sakura-chan! ¡Y-yo siempre te protegeré!- declaró heroico- ¿Q-quieres ir a jugar? - la invitó apresurado intentando abarcar toda la atención de la niña quien desvió su mirada entristecida de Sasuke a Naruto y asintió con suavidad.
-Si, solo dame un momento- se rascó la nuca algo nerviosa- es que… estaba buscando mi cinta roja ¿De casualidad la vieron por aquí? Creo que se me cayó antes de llegar al salón de prácticas…
-Yo la encontré- informó Sasuke- pero la dejé en la mesa de nuestro salón, te la daré cuando las clases terminen.
-¡Oye niño! ¡Se más amable con Sakura!
Amable…
Se amable con tu compañera.
Eres el orgullo del clan Uchiha, Sasuke.
Las palabras de su padre hicieron eco en su mente y pasó su mano cerca de su codo antes de girar hacia ellos nuevamente.
-Lo siento Sakura, no vi que estabas ahí- su disculpa acompañada de un tenue sonrojo en sus mejillas consiguió atenuar la decepción que Sakura había sentido la tarde anterior y con una pequeña sonrisa le respondió:
-No importa Sasuke-kun.
Elevó sus ojos negros posándolos sobre su redondeado y sonrojado rostro entregándole una pequeña sonrisa agradecida, a su lado Naruto parecía impresionado por haber conseguido doblegar a Sasuke Uchiha sintiendo que había conseguido que se disculpe con Sakura, disfrutando de su pequeña aparente victoria no pudo resistir las ganas de saltar y reír alejándose de ellos para presumirle a Shikamaru que había hecho que Sasuke se disculpara.
Sasuke lo observó alejarse presumiendo su "hazaña" con la mirada entrecerrada y un mohín molesto en sus labios, escuchó a Sakura suspirar y alejarse de él sin decir más con claras intenciones de alcanzar a Naruto y los demás niños que ya se encontraban organizándose para jugar a algo.
¡No sé por qué crees que me importa lo que le pasó a esa niña!
-Sasuke-kun- regresó sobre sus pasos bajo la mirada interrogante del chico- ¿P-por qué tú…?
- ¿Eh?
-B-bueno… ¿Por qué?
¿Por qué guardaste mi asiento ayer? ¿Por qué esperaste que guarde tu asiento hoy? ¿Por qué dijiste "nuestros"? ¿Por qué les dijiste a esos niños que no te importo?
-N-no ¡Ja ja! No es nada, olvídalo- susurró y se dio la vuelta corriendo hacia donde los demás ya le esperaban para jugar con sus bracitos al aire agitándose para llamar su atención.
-¿Invitaste a Sasuke Uchiha?- le preguntó Shikamaru con un ademán de su cabeza señalando al chico que intentaba ocultar su avergonzada expresión mientras se acercaba a paso lento a ellos.
-Creo que quiere jugar con nosotros…- le susurró Ino en el oído.
-¡Oye niño! ¡¿Quieres jugar a las escondidas?!- Naruto fue el primero en saltar ilusionado usualmente solo Choji, Shikamaru y Kiba jugaban con él, los demás en espacial las niñas, solían evadirlo como si tuviera sarna, pero hoy Sakura parecía particularmente dispuesta a jugar con ellos viéndose también muy cercana a Ino durante todo el día.
Algo grande había pasado y presentía que ese niño amargado y presumido por el que babeaban todas las niñas de la escuela tenía algo que ver pues jamás se le veía si quiera en los recreos hasta ese momento en el que incómodo se acercó a ellos con clara intención de integrarse a jugar, a Naruto no le importaba, de cierto modo podía entenderlo, ese niño lucía casi tan solitario como él, incluso si a diferencia de él que anhelaba que los demás le invitaran a jugar su soledad era por elección propia.
- ¿Juegas con nosotros? - inquirió Sakura con esa alegre expresión de siempre, parecía que lo que sea que la tenía evadiéndolo ya se le había pasado.
-¡Si, juega con nosotros Sasuke-kun!- esta vez Ino Yamanaka no se colgó de su brazo si no que le sonrió ampliamente de un modo más bien amistoso.
¿Qué estaba pasando?
¿La pelea contra Neji había sido tan buena que ahora hasta Yamanaka respetaba su espacio personal?
Ino le miró de reojo con las mejillas ligeramente tintadas, pero en seguida volvió su vista al niño nuevo cuya silenciosa presencia no había notado hasta el momento y se llevó unos mechones de cabello tras la oreja.
¡Oh! Entonces por fin… las niñas lo dejarían tranquilo…
Casi deseó sonreír emocionado, el niño nuevo había acaparado parde de la atención de las niñas que lo perseguían y ahora, aunque seguía siendo en general popular por su pelea contra Neji por alguna razón que le alegraba de sobremanera su popularidad entre la población femenina de acosadoras de la academia había disminuido radicalmente.
Jugaron a piedra papel o tijeras hasta que el duelo quedó entre Choji y Naruto siendo Naruto derrotado aplastantemente y con amargura recurrió a contar contra un árbol, las reglas eran sencillas, solo podían esconderse en el patio y incluyendo los baños, y el primero en ser descubierto sería el siguiente en contar.
Todos huyeron corriendo a esconderse en cuanto Naruto contó el uno y Sasuke rápidamente localizó un arbusto muy grande para meterse segundos después alguien le cayó encima tirándolo boca arriba contra el suelo.
-¡Oye yo llegué primero!- se quejó el pelinegro dispuesto a echar a quien sea que esté ahí con él notando primero el cabello rosa y luego ella elevó su rostro sonrojado encontrándose con sus grandes ojos verdes asombrados, sus rostros estaban tan cerca que podía sentir su respiración agitada chocándole en la cara y su corazón se aceleró coloreando su rostro de rojo, ella con rapidez se quitó de encima dispuesta a salir huyendo despavorida pero Sasuke notando los pequeños pies y la voz irritante de Naruto llamándolos muy cerca de ahí le sujetó firmemente por la mano atrayéndola hacia él de nueva cuenta.
Se quedaron quietos muy cerca del otro en un tenso silencio en el que solo podían oír el palpitar de sus corazones rebotando en sus oídos con la respiración contenida, en cuanto le perdieron la pista a Naruto se permitieron soltar el aire en sus pulmones con una larga exhalación y sentarse detrás del arbusto con las piernas recogidas, Sakura abrazó sus rodillas en silencio y Sasuke volteó sobre su hombro tratando de ver si Naruto regresaba.
-Ah Ume… no vino porque Sakura le dio una paliza ayer, la frente de marquesina esa trae la cara destrozada hoy, se cree la gran cosa desde que Sasuke-kun sale con ella- las voces de dos niñas en el bebedero junto al arbusto se hicieron escuchar.
Los ojos de Sakura se abrieron como platos volteando tan rápido que pudo romperse el cuello, miró de reojo la reacción de Sasuke observándole con su cara de "nada" y enrojeció sin saber como salir de ahí para callarle la boca a esas niñas chismosas.
Sintió la mano de Sasuke sobre la suya impidiéndole moverse y entonces una risotada se hizo escuchar por parte de la niña que estaba bebiendo agua tras un corto silencio.
- ¿Me estás tomando el pelo no? ¿Esa enana ganándole a Ume? ¿Qué? ¿En serio?- volvió a reír- vaya vaya… no me lo esperaba…
-Si, dicen que tomó una escoba y le pegó con tanta fuerza que la partió en su cabeza hueca- se burló la que estaba más cerca de ellos.
-¡Ja ja ja! Ya era hora, esa perra de Ume se lo merecía- ambas rieron divertidas, pero Sakura estaba a punto de desmayarse con su rostro enrojecido contraído por la vergüenza deseando que la tierra se abra y se la trague.
- ¿Entonces por eso ya ninguna acosa al niño bonito de segundo?
- Ah si… al parecer ahora que la niña del pelo rosa le dio una paliza a Ume nadie quiere quitarle al novio.
¿Sakura se había peleado por él?
- ¿Es cierto? - le preguntó en voz baja cuando las chicas de último año estuvieron lo suficientemente alejadas.
-Uh... uhm…- Sakura boqueo como un pez sintiéndose acorralada por esos ojos como el carbón que le miraban expectantes por una respuesta.
-Está bien- asintió el pelinegro- estamos a mano…- desvió el rostro apenado antes de decirle en voz baja- yo también le di una lección a ese niño que te insultó…
"A ese niño que te insultó"
Sakura se sonrojó y una enorme sonrisa comenzó a crecer en su rostro ilusionado entonces eso que había dicho Sasuke ayer… eso que dijo sobre no importarle y eso… que le dijo a Naruto también… y…
Su sonrisa lentamente fue decayendo, siendo reemplazada por un gesto de confusión que Sasuke imitó, no esperaba que su rostro se ensombreciera de ese modo después de sonreírle tan contenta.
- ¿Entonces por qué les dijiste que no te importo? - sin poder reprimirse más soltó la pregunta reprimiendo el volumen de su voz, pero soltándola en un chillido resentido dejando entrever su carácter natural.
- ¿Por qué me importarías? - le respondió girando su cabeza con la más pura inocencia reflejada en sus ojos negros.
Sakura se dejó caer derrotada y el "ploff" de su caída sumado a su largo cabello rosa ahora visible desde el camino llamó la atención del pequeño rubio que los buscaba junto con Kiba quien también había sido encontrado y sería el próximo en contar.
- ¡Te vi Sakura-chan! - gritó el pequeño torbellino naranja acercándose peligrosamente al sitio.
Rápidamente y buscando salvaguardar el honor de Sasuke, Sakura saltó del escondite alejándose del arbusto y persiguiendo a Naruto acusándolo de tramposo, volteó sobre su hombro cuando nadie más se dio cuenta notando como Sasuke se arrastraba y refugiaba en el interior del arbusto nuevamente.
Rio con suavidad recordando su bonito rostro al hacer aquella hiriente pregunta comprendiendo que Sasuke no tenía ni la más mínima idea de cómo relacionarse con las personas.
-¡Ino! La llamó sacándola de su escondite- sabes nunca pensé que diría esto, pero creo que Sasuke-kun es un poquito… tontito…- rio sin malicia e Ino le correspondió ocultando su risa con las palmas de sus manos y codeándola amistosamente cuestionándola por decir algo como eso.
-Las niñas son muy raras ¿verdad?- preguntó Sai observando la interacción entre sus dos nuevas amiguitas.
-Las niñas son fastidiosas- bostezó Shikamaru- y dan miedo…
-Si, las niñas son molestas… bueno ellas no, ellas son bonitas ¿Verdad Naruto? - afirmó el chico mordisqueando sus papitas.
-¡¿Cómo crees?! ¡Sakura-chan es la niña más bonita de la escuela! - afirmó en voz alta siendo escuchado por todos a su alrededor incluyendo a la mencionada.
Shikamaru lo codeó con fuerza cuando vio a Sasuke acercarse con una media sonrisa arrogante pintada en su rostro y le lanzó a Naruto una significativa mirada de "cállate" para estas alturas del día los rumores de Sakura partiéndole una escoba en la cabeza a una niña de ultimo año por perseguir a su pequeño noviecito ya se habían esparcido como el polvo siendo temida por unas y respetada por otras, su más reciente amistad reconstruida con Ino Yamanaka y su cercanía con el más pequeño de los Uchihas no hacia más que fortalecer los rumores.
-¿Qué? ¿Por qué me pegas? ¿A ti también te gusta Sakura-chan? - le miró confundido, como siempre Naruto era un despistado.
-Basta- la dulce voz de Sakura calló todo el ruido a su alrededor y viendo juntos a ambos objetos del qué hablar de los últimos dos días todos los ojos en el jardín se ciñeron expectantes sobre ella y lo que estaba a punto de decir- Sasuke-kun y yo…- aferrándose a su normalmente firme carácter Sakura tomó aire profundamente y pronunció con firmeza- ¡Dejen de inventar rumores sobre nosotros! Sasuke-kun solo estaba haciendo amable conmigo y en cuanto a Ume… ella me pegó primero así que ¡No se metan conmigo! O los voy a dejar igual- amenazó a todos con el puño en alto haciendo reír a Ino a su lado, su tierna expresión al tratar de verse amenazante se quedó grabada en las pupilas de Sasuke, a su alrededor todos rieron y continuaron jugando como siempre.
Sakura suspiró profundamente y Naruto se le echó encima felicitándola para instantáneamente recibir un coscorrón.
-¡Ja! ¡Ja ja ja!- repentinamente la dulce risa divertida de Sasuke flotó en el aire llamando la atención de todos haciéndoles girar la cabeza hacia él como robots, pues la gran mayoría nunca había escuchado a Sasuke reír o tan siquiera componer una pequeña sonrisa por su acostumbrara seriedad y mal humor, por no decir que únicamente una persona le había escuchado reír entre todos ellos.
Sakura se sonrojó recordando que él había reído de ese modo con ella ayer también cuando estaban solos en la cafetería y sintió un agradable cosquilleo en la barriga que le provocó secundarle estallando en carcajadas divertidas, las carcajadas fueron contagiosas como la gripe y en cuestión de segundos todos estaban riendo sin parar otra vez durante un momento hasta que las campanadas que anunciaban el fin del recreo los interrumpió haciendo que todos emprendieran camino hacia sus respectivos salones.
•••
- ¡Padre! - llamó en voz alta de esa forma respetuosa que solía usar de vez en cuando estando en público y corriendo hacia el mayor quien le miró con su habitual expresión seria, pero ablandándose en cuanto el pequeño llegó frente a él - ¿Qué haces en la escuela? – preguntó curioso e ilusionado.
-Sandaime-sama tenía algo que consultar conmigo- le dijo con un asentimiento- no todos los niños que se forman aquí se dirigen a escuadrones shinobi, algunos optan por tomar las clases de formación de la policía militar en su último año- explicó con su tono pacífico y sintió el cálido tacto de la mano de su hijo pequeño tímidamente buscando la suya.
Él le observó con esos grandes ojos negros que había heredado de su madre y suspiró permitiéndose tomarle con firmeza de la mano percatándose de qué era lo que el niño buscaba imitar de los demás padres e hijos a su alrededor.
Los Uchiha jamás fueron personas muy expresivas, y él en particular no se caracterizaba por ser un padre afectuoso pero Fugaku con el tiempo había comprendido y gracias al enorme cariño mutuo que se guardaban sus dos hijos que los pequeños momentos eran cruciales para fomentar el afecto y la confianza en la familia, para no crear rencor y mucho menos el odio que durante tantos años había atormentado a su gente, así que decidió tragarse su vergüenza y tomar de la mano a su hijo de nueve años empezando a caminar hacia su casa igual que todos los padres a su alrededor.
Sonrojado por el repentino acto de consideración de su padre al no apartarlo de su lado y sintiéndose orgulloso de sí mismo empezó a contarle con emoción lo mucho que había avanzado en su misión de reunir aliados.
- ¡Hoy conseguí reunir más aliados! - casi saltó de emoción, pero se contuvo pues no quería que su padre le viera como a un chiquillo inmaduro, quería su respeto y confianza como un valioso miembro del Clan Uchiha.
- ¿Aliados?
-Si, me dijiste que era importante reunir aliados ¿no? - le miró confundido y Fugaku le devolvió la mirada sin ninguna expresión en particular intentando recordar cuándo le dijo eso.
-Ah… ¿Te refieres a tu compañera la del cuaderno de matemáticas? – una profunda risa suave emergió de su garganta- ¿Qué pasó con ella? ¿Se están llevando bien?
-Se peleó con una niña- soltó de sopetón y se encogió de hombros- dicen que le rompió una escoba en la cabeza con su fuerza de monstruo- explicó como si nada.
Fugaku detuvo su paso en seco lanzándole una mirada preocupada y preguntándose internamente cómo es que ningún escuadrón de la policía había notado un alboroto de esa magnitud.
- ¿Y ella está bien? Digo… tu amiga…
- ¿Mi amiga? Ah… bueno ella si… y al parecer la otra niña no vino a la escuela, pero Sakura solo tenia unos cuantos moretones ¿Sabes? Se veía muy ruda amenazando a todos por molestarnos - Sasuke rió alegre imitando la pose de la pelirrosa con su brazo libre, sus ojos inocentes se posaron sobre Fugaku quien mentalmente empezaba a medio comprender la situación.
- Papá ¿Sakura es mi amiga?
- ¿Uhm? ¿No lo es?
-No lo sé- admitió pateando una pequeña piedra en su camino y viéndola rebotar- ¿Qué son los amigos?
- ¿No tienes amigos en la escuela? - le preguntó mirándole como si a su hijo repentinamente le hubiera crecido otra cabeza.
Sasuke se sonrojó sin saber cuál era la respuesta correcta a esa pregunta y se limitó a asentir nerviosamente, pero de todas formas tener la valentía de preguntar:
- ¿Cómo es un amigo de verdad?
-Bueno…- comenzó Fugaku con su mirada contemplativa fija en una nube- Los amigos son personas que se apoyan y defienden incondicionalmente, son personas importantes en nuestras vidas en quienes podemos confiar y luchar hombro con hombro, hace muchos años tuve un buen amigo- le sonrió- él solía ser el cuarto Hokage- se detuvo un momento, haciéndole voltear hacia las caras talladas en la montaña para mostrarle el rostro del cuarto sin soltar su pequeña mano.
-Ohh…- susurró Sasuke asombrado- su esposa solía ser una muy buena amiga de tu madre también, sonrió con un deje de nostalgia en la mirada y volteó a mirar a su hijo- su legado es la paz de esta aldea y su gente- se acuclilló sobre una rodilla para poder estar a su altura- haz amigos con quienes puedas contar Sasuke, quizás Naruto sea una buena adición a esa lista ¿Por qué no intentas llevarte bien con él?- sugirió riendo con suavidad mirando un poco más adelante al pequeño rubio charlando emocionado con el dueño de Ichiraku.
- ¿Por qué Naruto? ¿Y cómo sabes quién es? - preguntó disgustado- no sabe ni lanzar una shuriken decentemente- infló los mofletes fastidiado tirando de la mano de su padre quien ensanchó un poco su sonrisa viéndole actuar tan infantil.
-Nunca subestimes a tus compañeros, Sasuke o podrías llevarte una gran sorpresa después- rio suavemente con su mirada en el cielo como si guardara un secreto que solo él entendía- ¿Y bien? ¿Quiénes son tus nuevos amigos entonces?
-Uhm… bueno… supongo que por ahora Sakura Haruno podría ser mi amiga… y Naruto también ¿verdad? Quizás Neji…
- Ya veo- asintió pensativo- Sasuke pasaba mucho tiempo con Itachi, así que nunca le había parecido extraño que no saliera a jugar con los demás niños de la aldea.
Sakura Haruno, la hija de Mebuki y Kizashi Haruno, ahora todo tenía más sentido, entonces era la niña de la denuncia de la tarde anterior en la que dos madres enojadas llegaron hasta la estación denunciándose mutuamente porque sus hijas habían tenido un altercado quedando una peor que la otra, Kotonoha las había recibido en la recepción y mediado entre ellas por lo que no se quedó escuchando más de esa historia y se retiró hacia su casa justo antes de encontrarse con el combate de Sasuke y Neji.
-El mundo es un pañuelo- pensó en voz alta con su mano libre acariciando su mentón.
- ¿A qué te refieres papá?
-No es nada Sasuke- le dio una suave sonrisa cómplice- sigue siendo un buen niño ¿sí? – acarició sus cabellos alborotados con suavidad justo antes de llegar juntos a casa y las mejillas de Sasuke se tiñeron de rosa con una mezcla de emoción y vergüenza.
Su padre aún lo veía como a un niño pequeño…
•••
Para el final del día Sakura había recuperado el respeto y buen trato de toda la escuela y todo parecía haber vuelto a la normalidad, desde el segundo piso del edificio de prácticas observó por la ventana el bonito día que hacía y se refugió en su cárdigan color verde jade a juego con sus ojos preguntándose si a Ino le apetecería ir a recoger flores al prado esa tarde, los cabellos revoltosos de Sasuke en el exterior corriendo para alcanzar a un hombre que llevaba el uniforme de la policía llamaron su atención, vio su sonrisa y el tenue sonrojo que cubrió sus mejillas al saludarle, sentía que estaba viendo algo que no le correspondía mientras recogía sus herramientas de bordado.
Bueno… Sasuke no se daría cuenta de que ella estaba observándole…
A la mayoría de las niñas les gustaba mucho Sasuke, porque tenía un rostro bonito y una actitud de chico frío y solitario que las volvía locas, pero a Sakura le gustaba algo más de Sasuke, algo que había notado hace cinco años cuando escondida en el bosque le vio jugar con su hermano mayor.
Le gustaba verle sonreír.
Cuando Sasuke sonreía su sonrisa alcanzaba sus ojos y dos pequeños hoyuelos se le formaban en las mejillas dándole un aspecto realmente adorable, cuando le vio sonreír así con su hermano Sakura supo que quería ser la persona que le hiciera sonreír de esa manera y cuando estaban en la cafetería el día anterior y escuchó su risa por primera vez, notó en sus ojos un brillo distinto a esa mirada afilada que siempre les lanzaba a las niñas para mantenerlas lejos y se sintió especial.
Le había dolido de sobremanera escucharle decir que ella no era importante, pero ahora comprendía que no se trataba únicamente de eso, Sasuke tomaba todo de forma muy literal, importante era importante, importante en la vida de Sasuke Uchiha según su percepción del mundo, significaba algo único y especial, reservado para las personas más allegadas a él, algo demasiado personal como para ser tomado a la ligera y no podía aspirar a estar en ese escalafón con solo haberle sacado un par de sonrisas con sus rarezas siendo que aún ni siquiera podían reconocerse abiertamente como amigos.
¿Cómo le había llamado él?
Ah si… su aliada.
Sonrió con ternura y rio discretamente terminando de recoger sus cosas de la clase de bordado sin despegar los ojos de la linda sonrisa de Sasuke.
-Si… definitivamente me gustas mucho Sasuke-kun- ¡Oh! Sasuke-kun olvidó devolverme mi cinta…
.
.
.
.
Notas de la autora:
