Memorias de un lugar alto

—Muy bien, este es el lugar.

Anunció Frisky mientras apagaba el motor.

Abrió la puerta y dejó que el aire frío y fresco de la noche entrara en la cabina, rozando su pelaje y el de su acompañante.

Para la cocker spaniel inglés, si había algo que quería mostrarle a su novio, Radley, en los pocos meses que llevaban saliendo, era el mirador del monte Coot-tha.

—¿El mirador? —preguntó Radley, confundido.

—Sí. —Frisky se asomo fuera del vehículo, haciendo que Radley la siguiera.

La pareja comenzó a caminar por el pequeño estacionamiento bajo el tenue resplandor de las farolas y un cielo lleno de estrellas. Una brisa fresca soplaba sobre la montaña, creando una manta tan perfecta que Frisky y Radley no necesitaron una chaqueta para cubrirse.

No tardaron mucho en pisar los ultimos escalones hasta llegar a la amplia y vacía zona principal, donde podían observar con asombro los brillantes suburbios cercanos y las luces de la ciudad de Brisbane en el horizonte.

La boca de Radley se abrió ligeramente debido a la vista, pero Frisky… se sintió como en casa.

—Así queeee —Frisky se adelantó y se volteo hacia Radley—. Este es mi lugar para "pensar".

—Pff —dijo Radley con aire de suficiencia—. No soy tan inocente, nena. Sé que la gente sube aquí para hacer otras cosas.

—Sí, tienes razón... Pero lo digo en serio. Este lugar es mi favorito en la ciudad.

—¿Cómo asi? —Radley entrecerró el ojo izquierdo, dubitativo.

—Solo escucha.

Frisky y Radley se quedaron quietos mientras el viento agitaba las hojas y los árboles a su alrededor, creando silbidos suaves y relajantes que ahogaban el tráfico distante.

—¿Lo ves? —susurró Frisky—. Este lugar es muy tranquilo.

—Ya veo... —susurró Radley con asombro.

—Este lugar me ayudó mucho cuando no me sentía bien —contó Frisky, mientras se daba vuelta lentamente para prepararse para caminar hacia la cerca—. El silencio se convirtió en mi amigo aquí.

—Guau —reaccionó Radley cuando Frisky comenzó a caminar hacia la cerca metálica, una acción que él imitó y siguió de cerca hasta que ambos adultos pusieron sus antebrazos sobre la fría barandilla superior y miraron el horizonte.

Después de observar cómo las pequeñas luces pintaban el paisaje, Frisky fue la primera en romper el silencio.

—Me acuerdo de todas las veces que solía ir aquí y reflexionar profundamente con Chilli cuando era más joven.

—Entonces, este es realmente tu lugar para beber.

—Shush. —Frisky golpeó el brazo de Radley con su codo.

—Ay.

—Jajaja.

—Deja de ser agresiva.

—Me estás forzando el codo, tontito.

—¿Pero mentí?

—Como sea. —Frisky puso los ojos en blanco juguetonamente y miró hacia el horizonte.

…

—Continúa, por favor —añadió Radley, avergonzado, como un cachorro regañado.

—Jajaja —se rió Frisky en voz baja antes de decir—, solíamos hablar de todo aquí, especialmente cuando alguno de nosotras se sentía mal después de un largo día en la escuela o con nuestros padres.

—Asi que….

—Este lugar se convirtió en mi espacio seguro —finalizó Frisky por Radley—. …Pero eso fue hace mucho tiempo.

Radley levantó las cejas y se quedó en silencio para seguir escuchando.

—Cuando nos hicimos mayores... —dijo Frisky en voz baja—, cuando nos graduamos, dejamos de venir aquí tan a menudo. A veces intentábamos revivir viejos tiempos, pero una vez que teníamos nuestros propios hogares, pasábamos más tiempo en ellos... Pero nunca dejé de venir aquí.

—¿Por qué? —preguntó Radley suavemente, animándola a continuar.

—No lo sé… —Frisky lo miró fijamente, insegura. Se quedó callada y dejó que el aire corriera sobre su pelaje para darle una respuesta, hasta que finalmente respiró aire fresco y dijo—. Supongo que… hay algo terapéutico en estar sola con tus pensamientos.

Radley puso los ojos en blanco, asimilando sus palabras, hasta que dijo:

—Tienes razón… A veces, solo necesitamos desconectarnos de la realidad.

—Exactamente. —Frisky finalmente se giró para mirar a Radley—. A veces solo quiero tener tiempo para mí, alejarme de los problemas y pensar las cosas.

—Sí —asintió Radley.

—Y este mirador —continuó Frisky— es perfecto porque no está tan lejos de la ciudad y es lo suficientemente tranquilo como para pensar...

—Y beber.

—Calla. —Frisky golpeó el brazo de Radley con su puño.

—Ay. —Radley se frotó el brazo, disipando el dolor del golpe—. Lo siento.

—Jajaja.

—Eres cruel.

—Eres gracioso.

—No te adelantes.

—Demasiado tarde.

Frisky se volteo con picardía hacia el horizonte, moviendo la cola mientras reía. Radley siguió su ejemplo y se volteo para ver las luces de la ciudad en silencio. Después de contemplar el paisaje, Radley rompió el silencio.

—Entonces, ¿cuál es tu historia favorita del mirador?

—Vaya. —Frisky se apartó de la barandilla y puso ambas manos en las caderas para pensar en una respuesta—. Es una buena pregunta.

—Tenemos toda la noche —le aseguró Radley.

—Está bien, tengo una. —Frisky regresó a la barandilla y comenzó a contarle mientras lo miraba.

—Una noche, estaba pasando el rato con Chilli y Trixie. Trixie nos dijo que había invitado a una de sus compañeras de clase a pasar el rato con nosotras y, más tarde, su amiga llegó con comida india porque conocía restaurantes indios muy buenos. Era comida india auténtica: tikkas, biryanis, parathas... de todo. Chilli pidió pollo tikka masala y, cuando lo probó, no toleró el picante, así que lo vomitó por la barandilla.

—Guau.

—Sí. —Frisky rió—. Fue divertidísimo.

—¿Chilli no soportaba el chile? Eso es nuevo.

—Eso fue hace mucho tiempo. Ahora puede comerlo, pero Trixie y yo no permitiremos que olvide esa noche.

—Con amigos como tú y Trixie, ¿quién necesita enemigos?

—Sí… —Frisky giró la cabeza hacia el horizonte y murmuró—, espero que a ese tipo le vaya bien.

—Sí. —Radley se giró para ver el horizonte y, aprovechando el momento de alegría, puso un brazo sobre los hombros de Frisky sin pensarlo demasiado y la acercó más a él, abrazando su suave pelaje—. Deberíamos pasar el rato aquí más a menudo.

—Estoy de acuerdo. —Frisky inclinó la cabeza hacia el pecho suave y cálido de Radley—. Te amo, cariño.

—Yo también te amo. —Y juntos apreciaron el hermoso paisaje nocturno de Brisbane.

Lo hice para un intercambio de fics de San Valentín, y el chico al que se lo regalé me dio permiso para subirlo. Es la primera vez que participo en algo así, pero fue muy divertido y obtuve mucha experiencia. Que tengas un buen día.