Mi bello regalo
•
•
•
Al escuchar el sonido del crujir de los troncos de madera conforme el fuego empieza a consumirlos, me hace observar fijamente las llamas de la fogata..
El vago recuerdo de mi madre acariciando mi mejilla viene a mi mente cómo cada noche, aunque es algo curioso, siempre que trató de atrapar ese recuerdo para que no se vaya y saber que más había pasado en ese instante, nada más no puedo avanzar de ahí, ya que cuando lo intento mi cabeza empieza a doler fuertemente conforme me esfuerzo en recordar.
Cierro mis ojos, lo mejor es dejar ese asunto por la paz, después de todo el calor que me brinda esas llamas es lo único que me ofrece una sensación cálida en mi cuerpo..
—Y bien ¿Ahora qué dices?
La voz de Deidara me trae al presente y al abrir mis ojos veo como él señala la cena..
—Supongo que no me queda más que felicitarte s-e-n-p-a-i..
—Así me gusta subordinado..
—Eres un idiota... — al negar con la cabeza ante su sonrisa..
«Vaya que es de no creer, él tiene casi veinte años y parece un niño pequeño y berrinchudo»
—Sinceramente no sé por qué te alegras, el hecho de que lograrás capturar cuatro peces no te hace mejor hombre que yo sabes..
—Claro que lo soy y punto, hoy no voy a discutir contigo estoy agotado..
Deidara se sienta frente a mí y al observarlo..
—Tú y nadie más que tú tiene la culpa, siempre es lo mismo contigo quieres jugar con ellos, cuándo lo único que debes hacer es eliminarlos y punto..
—Hoy estás más gruñón que nunca, ya que ni siquiera por qué te traje la cena quieres celebrarme, te pareces tanto a ese viejito que esperó pronto comparta la misma suerte que el viejo tercer raikage y el huraño kazekage de Rasa..
—No deberías hablar así de tu senpai, si mal no recuerdo me dijiste que él fue quién te enseño he instruyó, ya que tú no sabías nada de este mundo, ni siquiera hacer esa "perfecta trampa" para atrapar los peces..
—Hum, serás idiota, además si por algo hui de mi aldea y me uní a ti y al jefe, es porque estaba harto de las órdenes de Ōnoki-san..
—Él idiota eres tú, ya que de todas formas sigues obedeciendo órdenes..
—Definitivo hoy estás más quisquilloso que nunca, no me digas que tienes nostalgia porque estamos muy cerca de Konohagakure y tus viejos recuerdos de ese lugar, te están afectando..
—Para nada s-e-n-p-a-i Konoha dejó de ser importante para mí desde hace muchos años, lo que vaya a ocurrir ahí no me importa para nada. Sólo es otro lugar más al cual someter y punto..
«Después de todo ahí culminará esta vida sangrienta que he llevado y por fin podré cumplir mi promesa»
—Aquí entre nos sinceramente no te imagino de niño siguiendo al jefe por todos lados, digo no negarás que tú tío sí es que en verdad lo es, es un sádico y dejándonos de cosas, me alegra que tú no seas así, pero ya hablando sinceramente, dime ¿No dejaste algún amigo, novia o algo importante para ti en ese lugar?
—En realidad, no somos familia, o sea pertenecemos al mismo clan, pero no tenemos ninguna gota de sangre en común, aunque a mi me enseñaron que el líder debe proteger a todos los suyos, digamos que nosotros somos algo así como una manada y cuando él me rescato de aquel ataque fulminante contra mi gente acordamos que así lo llamaría y no, no deje NADA importante en ese lugar, ahora deja de decir tonterías y apúrate a preparar esos peces que tengo hambre..
—Hum no eres el jefe aquí sabes..
—Tú tampoco y ya que tanto presumes de ser él mejor aquí, apuesto lo que quieras que esos pescados te quedarán mejor cocinados que a mí— mientras él empieza a repelar, sus palabras se repiten en mi mente y al echar otro tronco de madera a las brasas..
Yo soy un guerrero que debe cumplir órdenes sin detenerme a averiguar el por qué de las cosas, para eso me habían preparado y entrenado, para mí lo único importante es cumplir la misión que se me encomienda lo mejor y más rápido posible y ahora Konoha no es la excepción..
Según mi tío en ese lugar sólo vive gente nefasta que pasa sobre la dignidad de las personas para lograr su objetivo, excusándose en que sólo hacen lo correcto por el bien del pueblo y vivir en paz.
Una paz llena de mentiras y porquerías ya que por culpa de ese viejo anciano a quien los aldeanos llaman hokage..
«Y quién es él único culpable de que yo perdiera lo más importante de mi vida a mis siete años»
Dice sólo patrañas que inventa para justificar su abuso de poder, así que no, no me importa lo que le vaya a ocurrir a ese lugar, si Deidara o mi tío le prenden fuego, con ello estaremos a mano, después de todo él y yo demostraremos cómo es la verdadera paz.
Al ver que Deidara sigue con su labor al preparar la cena..
—Dime ¿Te divertiste matando al Kazekage?
—Obviamente, no ves que ahora todo el lugar es cenizas, claramente nuestra huella está plasmada ahí y hacía dónde vamos tendrán la misma suerte, así que por última vez ¿No te arrepentirás de lo que vas hacer?
—Ya te dije que no y más vale que te calles y apures, recuerda que por todos lados hay oídos que te pueden escuchar y si lo hacen, podrías meterte en problemas— ante mis palabras, él pone sus ojos en blanco y continúa preparando los pescados.
Al amanecer, la orden que nos había llegado es que nos reuniremos a las 7:00 am cercas del puente Tenchi ubicado en Kusagakure con el líder de escuadrón llamado Shamon, ya que él y sus tropas están listos para atacar.
Habíamos dormido muy poco y el camino hacia allá había sido silencioso y eso me alegra, ya que hoy no tengo humor para aguantar a Deidara hablar de su estúpido arte perfecto.
Al llegar al punto de reunión y nos expliquen la estrategia a seguir, es hora de atacar. El hombre encargado despliega a sus hombres, Deidara y yo nos despedimos al compás de..
Esperó que ahora sí haya suerte y que alguno de los dos muera y así poder cobrar la recompensas que hay por nuestras cabezas.
Es un juego tonto lo se bien, pero eso es precisamente lo que lo hace divertido. En este mundo cada segundo estamos expuestos a un ataque sorpresa, ya que las aldeas que atacamos se pueden reagrupar y tomar venganza, pero como dicen por ahi la vida es un riesgo y el ver cómo terminará este juego, es muy atrayente.
Al ponerme de acuerdo con los hombres que me acompañaran en esa emboscada. Llegó al claro de un lago por el lado sur donde hay muchos árboles de bambú ideales para un ataque sorpresa..
Los hombres bajo mi cargo me señalan la entrada, la cual está vigilada por dos hombres. Atacaremos por todos lados dejando sin posibilidad de que ellos puedan avisar a Konoha antes de tiempo y al darles la orden de atacar, ellos se adelantan llegando hasta los vigilantes, yo los seguiría, pero un extraño sonido atrapa mi atención y al enfocarlo..
Una misión fácil y sencilla se me encomendó, llevar unos pergaminos al país del arroz..
Es la segunda o tercera vez que el equipo ocho se separa. Shino se había unido a otro equipo ninja para ayudar con alguna búsqueda y Kiba aún se recupera de la última misión tras lastimarse una pierna, él sigue en cama, así que, al verme sola, me anime al decirme que yo puedo con eso y más..
Debo demostrar que no soy solo la tonta e inútil intento de herrera de Hiashi Hyuga. Aunque a decir verdad ya ni eso es mi destino, mi padre, abuelo y el resto del consejo nos habían reunido para anunciarnos que Hanabi será la futura líder del clan, yo sí tengo suerte me pondrán el sello, tal vez me casen con alguien de la rama secundaria para así seguir sirviendo a mi clan o en su defecto me quedaré directamente bajo las órdenes de mi hermana menor..
Es algo tan irónico y sin duda alguna un triste desenlace y de ahí el que se acerque mi cumpleaños número diecinueve no me emociona para nada, ya que ese día me dirán el destino que me espera.
Desde niña fui rechaza y al quedarme el sobrenombre de inútil, había deseado con todas mis fuerzas ser mayor y poder defenderme de tanta crueldad, pero ahora que lo soy, comprendo cuál equivocada estaba, ya que desde que nací mi destino fue decidido, ellos habían cortado mis alas incluso antes de que supiera volar y todo porque nací débil...
Ya que según mi abuelo y padre "un eslabón débil, debilita la cadena de mando" y el hecho de que quien los fuera a dirigir en un futuro careciera de carácter o en su defecto se preocupe por su sangre es algo indigno..
Yo no pedí nacer o mejor dicho ser la hija mayor de Hiashi Hyuga. Al ser pequeña casi había sido secuestrada por el entonces jefe ninja de Kumogakure, quien estaba de visita en Konoha con el pretexto de firmar un tratado de paz en ambas aldeas. Mi padre al darse cuenta lo que ocurría mato a ese hombre y me salvo.
El desde entonces ya era el líder del clan Hyuga. Al ser su primogénita fui criada para ser su heredera, de hecho mi familia esperaba grandes cosas de mi persona. Pero desde muy chica mi padre pensó que yo no era adecuada para el papel de futura líder.
Mi clan desde que tengo memoria se ha regido bajo un régimen espantoso de entrenamiento, ademas ante mi carácter tímido y bondadoso, me impide sobresalir verdaderamente.
Tras el nacimiento de mi hermana menor y ella empezara a tener el conocimiento del entrenamiento por el que nos guiamos y se mostró superior a mi, nuestro líder y progenitor empezó a reconsiderar la futura selección del título de heredera, llegando al punto de enfrentarnos para determinar quién sería la futura líder del clan Hyuga.
Obviamente como hermana mayor no estaba dispuesta a dañar a mi sangre. Un pensamiento que Hanabi no comparte, así que al darse el duelo fui derrotada y decepcionado así a mi clan.
Lo que ellos nunca entendieron es que para mi el deber primordial de un líder es ver por el bien de tu gente, peleando pero a su lado yendo al mando en las adversidades, no entre nosotros mismos, ya que incluso a pesar de tener la misma sangre nos dividimos en amo y sirviente.
Al ser tan pequeña y no poder expresar mis ideales fui desheredada y entregada como si fuera un simple objeto al cuidado de mi sensei Kurenai Yūhi
Pero sí algo había aprendido de mis compañeros al unirme al equipo ocho hace unos años, es que debo buscar el lado bueno de la vida, sin importar que el panorama fuera gris. Tal vez al pasar los años y ellos tuvieran la heredera que tanto desean, a mí me dejaran vivir en paz. Por eso cuando salgo de Konoha así fuera sola disfruto la libertad que aún tengo.
Ahora para ser sincera y al saber que había logrado cumplir mi misión con éxito, una gran satisfacción me inunda, así que en cuánto me despido de los lugareños, agradeciendo todas sus atenciones, es hora de volver a casa.
Empiezo a caminar lentamente, el aire fresco del alba me recibe haciéndome agradecer por un nuevo día y aunque mis pasos son lentos, cada vez me acerco más a Konoha.
Un par de horas después el sol sale y a pesar de estar cerca de la temporada de invierno, este se siente cálidamente..
El sonido de un riachuelo se escucha no muy lejos de mi posición, así que iré a refrescarme. Empiezo a buscarlo y al encontrarlo, remojo un pañuelo y lo paso por mi cara y cuello, al terminar llenare mi cantimplora, ya que aún queda camino por recorrer, pero el sonido del crujir de una rama me alerta y..
—Vaya, vaya, pero que tenemos aquí un lindo pajarito..
Frente a mi aparece una persona enmascarada y al observarlo detenidamente..
¿Quién es ese hombre que me hace sentir atemorizada? Y no precisamente por su aspecto, si no por su aura maligna..
«No importa quien sea, debes concéntrate Hinata, no es momento para pensar eso»
Al ignorar mi pensamiento y ponerme en guardia, empiezo analizar su ropaje, este es oscuro, no lleva alguna banda o algo que lo identifique de dónde es y al estar por preguntar ¿Qué hace aquí?
El sonido de los gritos lastimeros de la gente me indica quién puede ser, un enemigo, así que mi misión es atacar e intentar derribarlo para ir ayudar a los lugareños, pero un ligero pinchazo en el cuello me hace darme cuenta de que él no está sólo y al querer caminar mis piernas no me responden, sólo siento como alguien me toma por el brazo evitando que caiga..
—Mū, uno de mis subordinados había atacado a la chica dejándola fuera de combate y lo agradezco, ya que a diferencia de muchos yo jamás atacó mujeres, ni niños— al observar que él la carga —llévala a mi carpa, ya me encargaré de ella más tarde..
Mi cuerpo se siente tan cansado y al empezar a cerrarse mis ojos y sentir que caigo a un vacío, definitivamente tengo muy mala suerte, ya que siempre llegó al lugar menos indicado en el peor momento.
El ver cómo esa tranquila villa cercana a Konoha es atacada, me hace sentir extraño, pero el pensamiento de que en la guerra muchas veces gente o lugares son sacrificados aparece en mi mente, por desgracia esta villa esta en nuestro camino para poder entrar a Konohagakure.
Hay que acabar con la posible ayuda que ellos puedan brindarles y eso es atacando todas sus fronteras. Cuando los lamentos parecen cesar y ver a mis compañeros abandonar el lugar que había derrotado fácilmente llevándose su botín, he ir hacía dónde acampa nuestro ejército..
No deja de sorprenderme como cada vez se aniquila más rápidamente un blanco. Al llegar a mi destino, tras entrar a mi carpa..
—Al abrir mis ojos tratando de enfocar el lugar donde estoy, al intentar moverme veo que estoy atada, pero un hombre entra al lugar. ¿Quién puede ser? El viste la misma ropa de quien me capturó, pero ahora su cara no está cubierta y al cruzarse nuestras miradas..
—Ya me dijeron que intentaste huir, eres una chica mala— avanzó hacia ella y al llegar, le quitó la mordaza que cubre su boca y después de ver que mueve su boca un par de veces, al querer revisar que esté bien, ya que yo no soy de los hombres que piensa que debe someter, golpear o incluso violar a una mujer..
—No me toque, dígame ¿Quién es usted? ¿Por qué estoy aquí? Incluso le exijo me deje ir... — me doy un golpe mental ya que esas últimas palabras suenan algo tonto de mi parte —ustedes son unos bárbaros, en esa villa solo había gente que se dedica a la pesca y al..
—Silencio— tras interrumpirla —mira que no te di permiso para hablar ahora eres mi prisionera y tienes que hacer lo que te diga, si lo cumples prometo que nada malo te pasará..
—Él se pierde tras una cortina y al escuchar el sonido del agua, supongo se está lavando la sangre de su cuerpo, sinceramente no entiendo por qué hay gente así como él en el mundo, pero definitivamente sí tengo muy mala suerte y al parecer mi destino es ser una esclava siempre.
Salgo del espacio que es el baño, tras lavar mi cara y brazos, me cambiare de ropa, nunca me ha gustado el olor a sangre, a diferencia de mi tío quien se baña con la sangre de sus enemigos derrotados, pero no es hora de pensar en eso y al ver a esa chica..
Y ahora ¿Qué hago con ella? Si la traje aquí fue para salvarla, pero la pregunta del millón es ¿Cómo hacerlo?
—Compañero ¿Estás ahí?
La voz de Deidara llamarme me hace salir de mis pensamientos..
«Así que sigue vivo, eso me alegra aunque algunas veces sea alguien insoportable»
Tras mi pensamiento, debo evitar que entre y vea a mi rehén, así que le hago la seña de guardar silencio a la mujer con mis dedos y le respondo que ya voy. Es obvio que mi tío está aquí, no creí que viniera, pero al estar tan cerca del objetivo final es algo lógico, así que tengo que actuar rápido..
Me acerco a la chica y..
—Déjeme ir..
—Escucha hablaremos despues ¿De acuerdo? Por ahora te quedarás aquí callada— cubro su boca nuevamente para que no haga ruido. Sus bonitos ojos perlados reflejan miedo y es una lástima, además de ser tan diferentes a los míos, son parecidos a la luna y eso me gusta, ya que nunca había visto unos así, todos son llenos de odio y siendo tan fríos.
Ignoro mis pensamientos y salgo de ahí. Al avanzar hacia la carpa principal, más noche veré cómo alejarla de este lugar, no es bueno que esté aquí. Al llegar a mi destino, ese donde se que él me está esperándome, entró y..
—Bienvenido Óbito, que bueno que llegaste, ya me entere que realizaste un excelente ataque en el país de Sunagakure, que hubo muy pocas bajas obviamente de nuestra parte, así que mis más sinceras felicitaciones..
Madara Uchiha, alias mi tio esta sentado viéndose tan temido y malvado, ya que sus armas lo acompañan.
Tras sus palabras y observar a mi compañero, quien está en el mismo lugar que yo. Imagino que ya le contó todo lo ocurrido en nuestra última batalla con lujo de detalles.
—Sabes bien que siempre trató de cumplir al pie de la letra lo que me pides..
—Esperó así sea siempre, ahora Deidara déjanos solos..
El nombrado sale del lugar y al observar al pelinegro mayor, él parece tranquilo, pero es obvio que me va a pedir algo que no me va a gustar.
—Sabes muchacho a mí nada se me escapa, incluso creí que el botín siempre se comparte entre camaradas..
—¿Y con eso te refieres a...? — Él hace una seña, Zetsu aparece a los segundos con esa chica y al ver su mejilla hinchada y con un color rojizo, el cual pronto sera morado..
—Es hermosa no lo negaré, imagino que por eso estaba escondida en tu carpa, sin duda alguna puede ser una bella prisionera durante el día y por las noches una encantadora sumi..
—¡Suéltala! — Se que esa palabra puede causar un problema, no solo por el hecho de haberlo interrumpido, más que nada por que él es mi superior y al verlo levantarse del lugar que él llama trono..
—¿Cómo dices?
—Ella no es un botín, ella es mi..
«¿Qué le digo?»
—I-invitada... — una estupidez, lo sé, pero fue la primera palabra que cruzó por mi mente ante tal situación..
—¡¿Invitada?! ¿Desde cuándo tenemos eso?
—Desde hoy... — debo mostrarme firme y al observarla. Tengo que salvarla, después de todo por mi culpa esta en esta situación, intenté protegerla y la había traído a la boca del lobo. —Tío nunca te he pedido nada y creo que al cumplir todas tus órdenes al pie de la letra, tengo ese derecho de hacerlo, déjala ir y..
—Maldita sea Óbito, eres un Uchiha, no ruegues, dime ¿Acaso no has aprendido nada en todo este tiempo juntos? Además ¿Sabes quién es ella?
«Es obvio que no, ya que esta es la tercera vez que la veo»
—Creo que tú respuesta es no y no me extraña que no la recuerdes, verás esos preciosos y valiosos ojos son del clan Hyuga, él padre de esta princesita pertenece a Konoha y cómo sabrás él es uno de los cobardes que torturó, atacó y mató a muchos miembros de nuestro clan, por envidia y poder, incluso me atrevo asegurar que tu madre fue una de sus víctimas..
—¡¿Qué?!
—Tras sonreír— dime ¿Sigues pensando que es una invitada sobrino?
[...]
No hay ninguna duda Madara Uchiha y su endemoniado ejercicio están atacando las fronteras, sumado a que se mueven rápido, lo peor de todo es que nos bloquean poder brindarles nuestra ayuda.
—Kakashi ¿Qué es lo que sabemos?
—Lo que temíamos hokage, Madara Uchiha piensa derrocar Konoha, ya ha pisoteado varias aldeas cercanas a Konoha sin dejar nada vivo a su paso, su ejército lo conforman hombres de la peor calaña, incluso se rumora que los rezagados de las aldeas que atacan se les une para tener al menos unas horas más de vida..
—Madara Uchiha siempre ha sido así desde que el segundo hokage los detuvo, ante el intento de golpe de estado que planeo..
«De seguro su odio hacia nosotros se incrementó todo este tiempo, lo que no entiendo es porqué hasta ahora es que intenta ejercer una venganza»
—Es un absurdo hokage, es lógico que tiene una idea muy equivocada de lo que es la justicia..
—Tú lo has dicho Kakashi, reúne a todos los hombres disponibles, necesitamos empezar evacuar a los civiles, con ese hombre no sé sabe que pueda pas... — el ver como la puerta se abre de golpe me interrumpe y..
—Hokage-sama, Kakashi-san..
Un Shino Aburame llega hasta el escritorio agitado y..
—Cálmate, respira y dime ¿Qué sucede?
—Hinata, ella... cuándo venía hacia acá con mi equipo intentamos ayudar a la frontera sur, pero ya nada pudimos hacer por ellos, perseguimos algunos de los atacantes llegando un poco más allá del lago, siguiendo sus huellas, pero al encontrar esta cantimplora detuve nuestro ataque sorpresa, hay muchas carpas instaladas a las afueras y temo que la hayan secuestrado..
—O matado, con esa gente no sé sabe..
«Las palabras de ambos me preocupan»
—Esto complica aún más todo, Kakashi solicita una orden para ver cuántos ninjas hay en misión y que alguien avise inmediatamente a Hiashi Hyuga de lo que sospechamos pasó con su heredera y tu Shino ve a descansar, nosotros nos ocuparemos..
—A la orden señor..
Ambos responden al mismo tiempo y al verlos salir y acercarme a la ventana..
«Madara uchiha ¿Cuál será tu siguiente movimiento?»
[...]
Por fin estoy muy cerca de mi venganza, pronto esa maldita aldea estará bajo mis pies, cómo debió ser desde un principio. Las manos me hormiguean por terminar con todos esos infelices traidores y cobardes que me dieron la espalda.
Lo más ilógico y que me hace reir es que precisamente el muchacho que está frente a mí me había ayudado atacar a quien trato de protegerlo de mi persona y mejor aún, él será quien se encargue de darles el golpe final.
Definitivamente a sido un buen peón, pero al verlo observarme confundido..
—¡Mientes! Eso no puede ser verdad, esta mujer ni siquiera sabe quién soy, además mi madre..
—Tú madre Óbito, era una mujer que muchos veían como una sacerdotisa del templo Nakano, pero ella era una diosa entre todas esas inútiles, ya que Naori Uchiha no solo vio este momento en sus visiones, si no otras cosas más importantes que los puso nerviosos y por esa razón se encargaron de cazarla, capturarla, tortúrala y finalmente quemaron como una vil bruja..
—Eso no es cierto! ¡Cállate! — Al cubrir mis oídos —eso no puede ser verdad, ella..
—Pobre sobrino mío— al tomarlo por sus hombros —pero lamento decirte que yo sólo digo la verdad, pero si no me quieres creer no es asunto mío, no tengo porque mentir, esta mujer y su clan nos pisotearon cazándonos uno por uno hasta que dieron el golpe de estado matando a todos incluido los niños y las mujeres..
—Eso no es verd..
—Un golpe resuena por el lugar y... — ¡MADARA!
—Vamos no me digas que la compadeces, que no te engañe ese aire angelical Óbito, además no tiene por qué meterse dónde no la llaman..
—Tal vez, pero si lo que dices es verdad, es a mí a quien me toca juzgarla ¿No crees?
—Pobre sobrino mío... — tras reir..
Los minutos habían pasado y al ver a Óbito salir furioso de esa carpa, no había escuchado esa conversación, pero estoy seguro que nada bueno es lo que ahí se había hablado, además nunca lo había visto así.
Motivado por la curiosidad y tratar de averiguar qué fue lo que pasó, regreso a ese lugar y al entrar, veo como el jefe intenta forzar a una mujer solo él sabe a qué, al fingir toser y su mirada me enfoque..
—¿Tú qué haces aquí?
«Estoy seguro que esa chica forma parte del estado emocional de mi amigo»
—Bueno digamos que aparte de ser un extraordinario guerrero y artista que soy, mi otro pasatiempo es meterme dónde no me llaman y como hombre al mando te quiero dar un consejo, si en verdad quieres ganar esta guerra y obtener tu venganza como anhelas, regresa esa mujer dónde estaba, eres inteligente y si lo piensas bien no te conviene enemistarse con él y lo sabes, Óbito aparte de ser un excelente subordinado, muchos de los hombres que te siguen es por él, incluso lo ven como el segundo al mando..
—Mhp..
—Puede que Deidara tenga raz..
—Cállate Zetsu, no te metas..
—Bueno al haber cumplido mi misión me retiró, lo que decidía hacer jefe lo dejo a su consideración— giro mis pies hacia la salida, Madara tiene claro lo que debe hacer, ahora es turno de hablar con mi camarada y saber qué fue lo que pasó.
—No, no y no, eso no puede ser verdad..
Maldita sea ¿Por qué le pedí a ese hombre llevarla a mi carpa? Se que es una enemiga, pero es una mujer y yo jamás atacó a una o un niño indefenso, pero Madara no se tienta el corazón en esa cuestión.
No sé si lo que dijo sea o no verdad, para ser sincero aún hay muchas dudas que no resuelvo, pero ella no es quien tiene que pagar..
Golpeó el tronco de un árbol que está a mi paso, intentando sacar con ello mi frustración y al sentir el dolor en mis dedos, eso es lo que me hace seguir coherente, ya que en este momento lo único que deseo es destruir todo a mi paso, cómo si con ello pudiera calmar todo este coraje.
Algunas veces odio todo este ambiente de desolación, desde que recuerdo sólo he servido para entrenar, matar y aunque me había resignado, muchas veces deseo otra tipo de vida para mí..
Algunos cantos de los hombres con las mujeres que los siguen se escuchan, pero el recuerdo de los ojos temerosos de esa chica me persiguen, maldita sea no había podido hacer nada..
—Huy vaya que te flechó..
Deidara llega hasta mí y tras sus palabras sonríe burlonamente y al tomar asiento en el suelo..
—Ahora no estoy de humor para tus estupideces, déjame sólo..
—Vamos camarada siempre hemos conversado al anochecer, además algo me dice que tú tío no es tan cruel como parece..
Deidara sigue sonriendo y si no quiere que me desquite con él más vale que se vaya..
—Hoy no estoy de humor Deidara, hablo enserio..
—Vamos relájate, ten toma un trago lo mereces... — al extender una botella de sake hacia el..
—Deidara..
—Anda, bebe ya y no te comportes como crio..
Tomó la botella que me brinda y hago lo que me pide, sinceramente no quiero discutir con él, ya que a pesar de ser una molestia la mayor parte del tiempo, es como ese hermano que nunca tuve..
—Sabes no te culpo, tiene unos bonitos melones y cualquiera se volvería loco con una mujer así..
—No seas vulgar quieres, además no es por eso que la rapte. Más bien intente protegerla y mira a dónde la lleve..
—Así que querías jugar ¿Eh? Vaya que tenías bien guardadas tus mañas..
—Idiota, sabes bien que eso no es así..
—Lo sé, tú desechas a las mujeres después de satisfacer tu deseo o mejor dicho solo las usas y adiós a la tía..
—No digas estupideces quieres, que eso no es verdad y lo sabes bien, además por primera vez intenté ayudar a una y mira cómo resultó todo, dime ¿Para qué quiero una mujer conmigo viviendo cómo lo hacemos?
—Hmp... de acuerdo tienes un punto a tu favor, pero ahora relájate, ya te dije confía en mi intuición..
—Ajá cómo siempre es tan asertiva..
—Digamos que hoy sí..
Tras tomar otro trago de la bebida que él me había brindado, me levantó y marchó de ahí, avanzando hacia mi carpa, necesito dormir o cometere una locura. Al llegar y entrar, frente a mi esta esa chiquilla mirándome asustadiza..
—Esto es torturante ¿Cómo es qué había terminado así? Había sido secuestrada, casi ultrajada y ahora regreso al lugar dónde me habían llevado y al ver que el hombre que me trajo a este infierno avanzar hacia mi— no me toques, aléjate, yo..
Esos imbéciles, sus mejillas están un poco inflamadas, ademas tiene restos de su llanto, pero ante sus palabras busco algún trapo para limpiarla y al mostrárselo..
—Tranquila muchacha no te haré daño..
—Hinata, así me llamo y permítame persuadir de eso, en verdad son todos unos salvajes..
—Lo siento— limpio su mejilla lo más despacio que puedo y ante un quejido..
—¿Acaso a ustedes los entrenan para saber dónde golpear a las mujeres exactamente? Siento que mi ojo se saldrá..
—En verdad lo lamento, como ya te dije yo no soy así..
—Te aseguró que esa gente, ni yo tampoco hicimos nada, eran unos simples campesinos ¿Lo sabías?
—El mundo siempre es así de cruel, desgraciadamente ellos estaban en un lugar que no debían..
—Dime ¿Por qué odias Konoha si naciste ahí?
—No tengo humor para hablar de ello, además eso es algo que a ti no te importa..
—Tal vez, pero sabes hace muchos años cuando yo era pequeña una de mis nanas me contaba una historia de un distinguido clan que formaba parte de Konoha, los Uchiha, ellos eran guerreros orgullosos, pero fuertes y sin duda alguna leales a su nación, pero desgraciadamente su líder ante la envidia hacia quien junto a él fuera fundador de Konohagakure, se dice que de la gran amistad que los unía se fue deteriorando y separándolos, ya que Madara Uchiha poco a poco se fue llenando de odio, ya que él quería conquistar naciones, ser líderes en muchos lados, obtener poder y temor de sus enemigos, todo lo contrario a lo que Hashirama Senju su mejor amigo deseaba, él anhelaba paz, dejar las guerras y odio de lado, echar raíces, de ahí es que entre ambos amigos inició la discordia, pero según mi nana Madara había muerto hace muchos años atrás, lleno de odio y rencor, pero jurando vengarse de todos, así tuviera que vender su alma al diablo. No sé qué pasó exactamente ya que era muy niña, pero en la aldea cada año se celebraba el día en que él junto a su clan habían perecido..
—No hables de estupideces que no sabes, cómo mujer supongo tienes otra crianza, pero déjame decirte que el único culpable de todo lo que le pasó al clan Uchiha y de lo que está pasando, es del actual hokage, él es un hombre doble cara, ya que él junto a otros clanes atracaron a los míos sin piedad y eso no sé lo perdonaré nunca..
—Su mirada había cambiado, pero creo que esta engañado y al ver como aprieta el trapo— la gente de Konoha y sus alrededores no tiene culpa de nada, él hokage cuida y vela por todos nosotros, ya que él es como un padre para todos, su labor es protegernos, incluso puede dar su vida por cualquier aldeano si se lo piden, creo que te han mentido, ya que desde la fundación de Konohagakure cada hokage se ha encargado de pasar la voluntad de fuego en todos nosotros y aunque mi padre sea «cruel conmigo» como sea, te aseguro que él jamás haría lo que ése hombre dice y mucho menos atacaría a alguien por traición..
—Lo mejor es dejar este tema de lado, además no discutiré con alguien que no sabe nada de la vida, ahora si gustas puedes asearte... — al señalar el camino..
—¿Para qué? ¿Para qué también intentes aprovecharte de mí?
—Claro que no, en primer lugar no eres mi tipo, eres una chiquilla que cree en cuentos de hadas, mira no quiero discutir a sido un dia agotador, sumado a que en verdad te quiero ayudar, creeme si te traje aquí no fue para aprovecharme o maltratarte, solo quise evitar que estuvieras en un lugar peligroso, pero te traje a uno peor lo sé bien, lamento mucho lo ocurrido. Para que veas que mis intenciones son buenas y sinceras te propongo algo, Konohagakure caerá es algo inminente, supongo que algo te pasa con tu padre, así que cuándo todo esto acabé, prometo que serás libre e irás al lugar que tú quieras..
—Ante sus palabras me siento ofendida— Konoha es mi hogar y tú pretendes que lo traicione, mira independiente de los problemas que tenga con mi clan o padre, crees qué cuándo vea cómo los destruyes simplemente te diga muy bien hecho, gracias..
—Créeme ese lugar no es el mejor para vivir, hay otros lugares, otros mundos..
—Dime algo ¿A dónde puedo ir sin que ese hombre al que llamas tío no quería llegar y destruirlo? Date cuenta está enfermo, cegado de odio, uno que nunca saciará por qué su alma está perdida y su sed de venganza aumentará entre más poder obtenga, más querra, te aseguró que así destruya hasta el último cimiento de Konoha no quedara conforme..
La observo y parece firme a sus palabras, pero siento que la cabeza me va a estallar y no porque fuerce mi mente, más bien porque son muchas cosas las que han pasado. Así que sin decir nada más me alejo de ella dejándola sola y al salir de la carpa sintiendo el aire en mis mejillas..
«¿Cuál es la maldita verdad en todo esto? ¿Acaso ella tiene algo de razón en lo que dice?»
Maldición, creo me voy a volver loco con todo lo que ocurre y al suspirar sintiéndome frustrado. Si tan solo pudiera recordar qué fue lo que pasó aquel negro día.
Según esa chiquilla en todo lo ocurrido hay otro hombre llamado Hashirama Senju, pero de él no se nada, ya que Madara nunca lo mencionó, sólo me repitió constantemente que Hiruzen Sarutobi es quien tiene todas las respuestas y quién es él único culpable de todo..
Ante los cantos y festejos de los hombres mis dudas quedan de lado, ellos están felices y tan ajenos a todo lo que pasa y atormenta..
¿Podría culparlos? No lo creo, ellos simplemente hacen lo que se les pide, creo que esa mujer empieza afectarme, pero no debo creer en sus palabras y al ver a Madara y su perro guardián observarme y sonreír regreso al interior de mi carpa, prefiero estar con ella, al menos en este momento.
—Lo observo regresar, sinceramente no entiendo por qué actúa así, además parece tan atormentado y al ver que se dirige a tomar una bebida..
«¿Qué tanto vivió para que esté así?»
—Pensé que ya te estabas bañando, creeme te doy mi palabra de que no te espiare..
—Yo... — evado su mirada —eso deseó hacer, asumiendo que cumplirá su palabra, pero no tengo ropa y.
Camino hacia un gran cajón, sacó una de mis camisas y se la extiendo..
—En el lugar hay todo lo que ocupas para asearte— ella toma la camisa y avanza siguiendo la dirección que le indico y al perderla de vista, me recuesto en uno de los cojines del piso y al suspirar..
A buena hora me metí en esto.
Llegó a la parte trasera de esa carpa viendo "el baño" improvisado que hay, es lógico, además son hombres y ellos no ocupan tantas cosas como nosotras, pero ya veré cómo asearme como dios manda. Colocó la camisa en un taburete y antes de empezar a desvestirme, observó hacia todos lados y al comprobar que no hay nadie cerca, ni algún hueco, me desvisto y empiezo a bañarme y al sentir el agua recorrer mi cara la masajeo..
¿Ya se darían cuenta de mi ausencia? ¿Vendrán a rescatarme? Obvio no Hinata, conociendo a mi padre dirá, que soy una inútil y que este es mi castigo. Tras suspirar..
—¿Cómo voy a salir de aquí? — Supongo debo empezar a ganarme la confianza de quien es "mi salvador" además de averiguar todo lo que pueda y así poder avisar a Konoha, aunque dudo que a esta hora no se hayan dado cuenta de ellos, de lo poco que pude ver hay muchas carpas y por los gritos muchos soldados..
Jamás creí que un peligro así de grande amenazará mi nación, ahora compruebo que lo que mis nanas decían era verdad, pero ¿Cómo es posible que un hombre como Madara Uchiha aún viva? Si en verdad es ese Madara de los cuentos que ellas me contaban..
Digo ¿Cómo es que se conservara tan bien? Y al darme un golpe mental, ya que eso no es importante. Por ahora no puedo hacer nada, salvo ver qué información puedo obtener de él..
Pero ¿En verdad quiere ayudarme o sólo es una estrategia? Digo hasta ahora se había comportado bien conmigo, pero él tiene una mirada de odio, pero es un odio infundado por un hombre que no conoce límites.
Al terminar mi baño y secarme, colocó la camisa, aunque esta me queda muy grande, pero ni modo y al regresar hacia ese hombre, al enfocarlo, él está leyendo algunos planos..
«¿Serán de Konoha?»
—¿Y bien?
—¡Eh! — Su voz me regresa al presente y al observarnos mutuamente..
—¿Qué tal el baño?
«A pesar de que la camisa le queda muy grande se ve bonita»
—¿Qué estoy pensando? Además es tan raro que yo contemple a una mujer que es mi enemiga— ella simula toser y..
—Todo bien, pero am yo quería saber si me voy a quedar mucho tiempo aquí..
—No puedes irte...
—¿Por qué?
—Ya te dije, las cosas se van a poner muy feas y difíciles... — ella se sienta frente de mí, parece que ya no me tiene miedo..
—¿Crees que ese hombre me vuelva a llevarme con él?
—Esperó que no, por lo pronto lo mejor es dormir, ya mañana veremos qué hacer, ahora espero que seas consciente y no sé te ocurra intentar escapar por ti sola, ya que no sé si la próxima vez logres salir bien librada, además no me hago responsable si consigues más que un golpe..
Lo veo de mala gana, obvio que iba a intentar huir, pero es lógico que él me va a vigilar, se nota que es alguien de carrera y sabe de lo que habla y al escucharlo decir que me deja su cama y yo le diga que no es necesario e iniciar una mini pelea campal, la cual no había ganado..
Al verlo acostarse en el piso, aunque me siento muy cansada, tengo miedo de quedarme dormida y cuando todo se oscurece, tras cubrirme, aprieto las sábanas, las cuales tienen un buen olor, pero más vale no fiarme, pero el sueño y cansancio poco a poco me vence y al cerrar los ojos..
De pronto escucho unos quejidos haciéndome despertar asustada y al acostumbrarme a la oscuridad del lugar, llegó hasta esos sonidos, mi captor parece dormir tranquilo, pero al parecer tiene una pesadilla, ya que él es quien se queja..
Está sin duda alguna es mi oportunidad para irme, pero al tocar sus brazos él tiene fiebre, ¿Qué hago? Una parte de mi me grita que huya, después de todo estoy cerca de Konoha, pero la otra me pide que lo ayude..
Y al ser mi raciocinio mayor, le brindare mi ayuda. Voy por agua fresca en el lugar que es el baño y al tomar algunos trapos, empiezo ayudar a quien aparentemente me protege. Paso el trapo húmedo por sus brazos, limpiando el sudor acumulado, pero al intentar poner otro trapo húmedo en su frente, él empieza a forcejear y hablar de cosas que no entiendo, aunque sus ojos siguen cerrados..
Lo único que se me ocurre hacer para ayudarlo, es arrullarlo, cómo lo hacía con Hanabi cuándo era niña y tenía una pesadilla y al ver que funciona, intentó acomodar la franela en su frente y al acercarme a ver si había bajado aunque fuera un poco la temperatura..
El me toma por el cuello y me acerca a si, yo me sorprendo ante su acto y al empezar a forcejear para que me suelte por qué el aire empieza a escasear, su agarre se hace más fuerte y al ver que abre sus grandes y negros ojos los cuales parecen furiosos, creó este es mi fin..
Me siento tan cansado, pero no puedo confiarme, Madara o Zetsu pueden lastimar a esa chiquilla y hasta no saber qué haré con ella no puedo descansar, pero al sentir los párpados muy pesados y luchar para que no se cierren..
De pronto el llanto de una mujer me estremece, quiero avanzar hacia ella y saber ¿Qué le pasa? Pero mis pasos son tan pesados, la misma mujer grita agónicamente mientras que una risa muy tétrica se escucha. Por alguna razón eso me molesta mucho. El sonido de la risa se intensifica, pero esta es más clara, lo que indica que me estoy acercando a ellos y sea quien sea la voy ayudar. Llegó hasta esas personas, al tomar al hombre que parece la hace sufrir y tratar de apartarlo de la mujer con todas mis fuerzas..
Unos ojos llorosos me observan asustados y al soltarla al instante y escuchar cómo ella tose..
«Otra vez ese sueño, lo malo es que nunca logró ver la cara de esa pareja» al intentar acercarme a ella..
—Están locos— al seguir tosiendo..
—Lo lamento, no quise lastimarte..
—Dime ¿Qué te pasó?
—Nada que te interese, mejor dicho ¿Por qué estás aquí?
—Aspiro todo el aire qué puedo llenando mis pulmones..
«Creí que él rompería mi cuello» al ignorar mi pensamiento y sobar esa zona..
—Intenté ayudarte ya que parecías estar teniendo una pesadilla..
—No debiste hacerlo, no necesito tu ayuda, ahora por tu propio bien, no te vuelvas acercar a mí, pero anda vuelve a dormir... — ella parece analizarme, yo me recuesto y al darle la espalda..
Es lógico que no dormiré más, ese sueño me había dejado muy intranquilo, creó todo lo vivido hoy me está afectando. Y al sentir que ella se levanta..
«¿Por qué la tenía que traer? Hasta ahora solo me a causado problemas»
El amanecer llega y para ser sincera después de lo ocurrido anoche, no había podido conciliar el sueño..
¿Quién es en verdad ese hombre que parece tan atormentado? ¿Acaso sus demonios lo atormentan torturándolo entre sueños? O ese es el resultado de todo lo atroz que a hecho en su vida, ¿Cómo saberlo? Si parece que no quiere hablar de lo que lo ocurrido..
Al sentarme en esa cama y ver el lugar que él ocupó para dormir está vacío.
—Y ahora ¿Qué sigue?
Unos sonidos de tambores me alertan, al ir a asomarme y ver hombres ir y venir por todo el lugar, escuchó que alguien de Konohagakure se acerca, no sé quién puede ser, pero espero venga por mí.
Ante la incertidumbre mi instinto me pide ir a averiguar quién es esa persona y al ver a un grupo de soldados reunidos unos pasos delante de mí, veo cómo un intermediario en forma de paz se acerca a la entrada de esa gran carpa en color negro..
Trató de colarme entre los hombres y lograr que ese intermediario me vea, pero al escucharla la voz de a quien llaman Madara..
—Vaya, pero que tenemos aqui..
Él intermediario mostrando la bandera blanca, le entrega un sobre, diciendo es una oferta para que reconsidere su decisión cesando su ataque y evitando una masacre..
Las murmuraciones no se hacen esperar, yo ruego para que Madara Uchiha ceda al trato, es algo justo, pero quien manda aquí no solo ignora la ofrenda de paz, sino que decapita al intermediario en ese mismo instante y ríe cruelmente sabiendo que esa persona no lleva consigo ni armas, ni nada para defenderse, supongo esa es su cruel respuesta y al sorprenderme por lo que veo y estar por gritar ante tal escena, unas manos cubren mi boca y jalan hacia atrás, mientras siento que lo que vi puede ser mi futuro.
[...]
Toda la noche le había dado vueltas al asunto de lo que está pasando, es obvio que tengo que buscar una medida de paz, escuchar sus peticiones, no puedo arriesgar a la gente bajo mi cargo por una absurda idea errónea, ademas quiero confiar en que Madara aún sea un hombre de honor, recapacite y acepte mi propuesta.
Al escuchar unos golpes en la puerta, les pido pasar y..
—Hokage-sama..
—Hiashi bienvenido, toma asiento, quiero hablar contigo de..
—Si me disculpa y perdón por la interrupción, pero ya me informaron el motivo de citarme aquí, al hablar con el consejo de mi clan de la situación, llegamos a la conclusión de que si en verdad ellos tienen a Hinata, lo más seguro es que a esta hora ella debe estar muerta..
—Hiashi ¿Cómo es posible que pienses eso? Sin duda alguna Hinata es una buena kunoichi, además ella cómo muchos jóvenes de su edad sienten la voluntad de fuego en su corazón y no se rendirá tan fácilmente..
Cuándo él me va a decir algo, la puerta se abre de golpe y frente a mi aparecen, Kakashi, Yamato y Sai, por sus caras parece que no son buenas noticias..
—Hokage-sama, lamento interrumpirlo, pero tenemos una emergencia..
—¿Y esa es?
—Hay que prepararnos, ellos mandaron su respuesta y me temo que la guerra está por empezar..
«Justo lo que temía» pero no es momento para esos pensamientos o lamentaciones, tengo que empezar con la evacuación de los civiles (niños, mujeres y personas adultas) aunque ¿En verdad podría librarlos de la maldad y odio de ese hombre?
—Ustedes encárguese de sus problemas, que yo me encargaré de los míos y mi gente..
Ese hombre sigue siendo un terco y actuando muy orgulloso como siempre, pero ahora no puedo lidiar con él, tengo que actuar y tratar de salvar a la ciudadanía de mi amada aldea, he intentaré planear el rescate de Hinata Hyuga, ya que su padre no hará nada por ella.
[...]
Al ver que quien me sujeta y aleja de tal escena, mis lágrimas caen, ese hombre es un monstruo y al aferrarme a lo único cercano a mi..
—Sin duda alguna me siento mal por su llanto, ademas que al ser mujer a pesar de ser una kunoichi es más sensible, aunque siendo sinceros a pesar de tener años viendo el cruel actuar de mi tío, aun no me acostumbro a esa manera tan salvaje de hacer las cosas— ¿Por qué saliste? No te das cuenta del peligro que corres... — ante un sollozo..
—Ese hombre es un sanguinario, él emisario estaba indefenso, ademas todos saben que ellos actúan para tratar de llegar a una rendición mutua evitando haya muchas víctimas..
—No puedo negarlo, Madara se había vuelto loco, pero ante eso ¿Qué hacer o decirle? — Al sentir que ella se aferra más a mi, acaricio su espalda tratando se calme, pero..
—Óbit... — ante tal escena me cayo y..
—¿Acaso no sabes llamar?
—Al sonreír ya que ese chico aparenta despreocupación, pero su actuar me da entender otra cosa y eso si que es interesante..
—Y bien ¿Vas hablar o sólo te dedicaras a reírte como imbécil?
—Tranquilo, yo no soy tu enemigo, solo vine a decirte que Madara te espera en su carpa..
—Zetsu sale y al separarme de ella— ya tranquilizate, toma agua y espérame aquí, no salgas por favor, ya vuelvo y hablaremos ¿De acuerdo?
Yo sólo quiero irme de aquí y al mover mi cabeza en forma de sí y él salga.
«¿Cuándo va a terminar toda esta locura?»
Al respirar profundamente y exhalar el aire contenido en mis pulmones avanzó hacia ese lugar, al llegar al menos ya habían retirado el cuerpo, supongo lo regresaron a Konoha y al ver los restos de la sangre, entró a la capa principal y..
—¡Oh! Sobrino mío bienvenido..
—Ahorrarte las hipocresías y dime ¿Qué ocupas?
—Me parece bien entonces hablemos seriamente, esperó que ya hayas llenado de disfrutar a esa ramera y ahora si te concentres en la misión y puedas cumplir esa venganza que juraste desde niño ¿O acaso también ya olvidaste eso?
Ignoro sus palabras venenosas y al encararlo..
—Yo nunca dejaré mi juramento de lado..
—Me alegro escuchar eso. Sabes Zetsu encontró un túnel por el cual puedes llegar directo hasta el hokage, está en la zona donde nuestro digno clan vivía, obviamente el lugar está desierto, si te infiltras por ahí puedes lograr tu objetivo cortar la cabeza de ese hombre y tu familia pueda por fin descansar en paz..
—Bien que así sea— salgo de ese lugar, esto es lo correcto. Al llegar nuevamente a mi carpa y entrar, veo a esa chica observando unos planos, supongo ya está más tranquila, así que la ignoró, no es como si pudiera hacer algo, más bien tengo que prepararme para empezar mi última misión, no puedo dudar, no ahora, mis sentimientos o la voluntad de fuego que ella mencionó hacia esa aldea había muerto durante mi entrenamiento..
Digamos cuando me gradué tras años de prepararme y empecé a realizar las misiones que se me encomendaban, me repetía constantemente que no importa qué tan cruel fueran las órdenes, que al matar o aniquilar la población de una villa, era para debilitar sus alianzas y así acercarme cada vez más a mi misión final destruir por fin Konohagakure, así que definitivamente no debo dudar, se los había jurado a los míos.
—Él regresó muy rápido y ahora estando más tranquila, creí que habláramos de lo ocurrido, pero al ver como se pone el mismo traje que visita cuando lo conocí— ¿A dónde vas?
Ante la mirada atenta de ella, guardó lo que ocupare..
—Tengo una misión..
—¿Vas hacia Konoha verdad?
Toma mis cosas he ignoro su pregunta..
—Solo te diré que voy a terminar con todo el problema de raíz— al intentar avanzar hacia la salida, ella sujeta mi brazo y..
—No vayas por favor, si en verdad quieres protegerme y ayudarme, dejame averiguar qué fue lo que en verdad pasó, ya no mates a más gente inocente que no te ha hecho nada, déjame demostrarte que ese hombre sádico miente..
—Agradezco tu ayuda, pero este es mi camino y no hay marcha atrás, lo siento, pero así son las cosas, pero mi palabra sigue en pie cuando todo esto acabe tú serás libre de vivir donde quieras— me zafo de su agarre y salgo de ahí firme y digno, ni siquiera esa chica de bonitos ojos perla puede hacerme dudar de mi juramento y al ver la burlesca sonrisa de Zetsu..
—Hey camarada ¿Te vas sin mí?
—Claro, pero volveré te lo aseguro— le hago una seña apuntado mi carpa..
Deidara me conoce bien y sabe que deseo cuide a esa chica si algo me pasa. Tras chocar nuestros puños y observar a mi acompañante..
—Vamos..
Zetsu me acompañará hasta el lugar dónde me infiltrare. El me entrega una maleta y dice que ahi hay ropa de la aldea, algo irónico para mi gusto pero bueno. Mientras avanzamos hacia allá, algo en mí se inquieta, pero no puedo demostrarlo y después de avanzar un buen tramo y ver la famosa Konoha..
Un bullicio surge de mi interior. Siento como un fuego a punto de salir y con ello culminar el momento, con la caída de ese hombre este lugar será vulnerable, no importa que tan buenos sean sus shinobis, en esta vida nada es perfecto..
—Bueno hasta aquí llego yo— tras sonreir —buena suerte Tobi..
Lo observo de mala gana. Estamos frente a una enorme puerta de roca con símbolos Uchiha, obviamente borrados atreves del tiempo, pero dejando marcas como Deidara siempre dice. Analizo la zona y está en verdad parece desierta, Zetsu me explica que solo los antiguos miembros de la policía de Konoha conocían ese pasadizo secreto, ya que por aquí salían hacia nekobaa a suministrarse o por ahí digamos sacaban a enemigos que no entregaban precisamente al gobierno de Konohagakure.
Supongo que esa información se lo había dicho Madara..
—Puedes irte, de aquí en adelante me encargare yo sólo..
—Claro cuídate mucho pequeño Tobi..
Odio que me diga así, es un imbécil, si es que sé podría decir que es un humano, nunca entendí cómo alguien como él conoció a Madara o al revés, un día simplemente llegaron juntos a esa cueva donde vivíamos y desde entonces nunca se separaron. A veces siento como si hubiera dormido mucho tiempo y al despertar hubieran borrado todo lo vivido, recordando sólo la voz de mi tío repitiéndose en mi memoria con la maldita palabra venganza.
Después de cambiarme de ropa y mover esa enorme puerta, entró y al avanzar unos pasos, sin duda alguna es la jefatura de la policía, o más bien una enorme tumba, ya que todo está en silencio y cubierto de polvo, alguna veces escuche decir a mi padre que no había nada más digno que ser un miembro de la policía de Konoha, algo de lo cual deberíamos sentirnos orgullosos, pero sus palabras son tan lejanas y vacías, como todo el lugar, en verdad se podría decir que es una zona fantasmal.
Al salir de ahí y observar todo, algunos recuerdos llegan a mi mente, me veo corriendo por la zona Uchiha, donde vivían personas cálidas, pero orgullosas de pertenecer mi clan las cuales vivían cerca de aquí. Además el lugar siempre había bullicio y ahora todo es vacío como mi frío corazón.
Tras ignorar esas últimas palabras y analizar la zona, no sé oye algún ruido y después de hacer una oración por toda la gente que pereció en este lugar, definitivamente no puedo echarme para atrás, se los debo para que sus almas puedan descansar en paz.
Dejo atrás esa zona y al infiltrarme por esas calles, todo es tan diferente, aquí hay vida, luz, color, risas, eso me hace apretar mis manos en forma de puños. ¿Acaso no les importa ni un poco el dolor que mi gente había sufrido por culpa de los altos mandos de Konoha? ¿Cómo es que pueden vivir felices con tantas muertes en su conciencia?
Cada año se hace una fiesta en honor a ese distinguido clan.
Sacudo mi cabeza, ignorando las palabras de esa chiquilla, esta gente son unos hipócritas y al ver cómo poco a poco algunos de ellos me observan desde sus locales, lo mejor es seguir avanzando y al hacerlo frente a mi esta un poderoso edificio donde ese hombre me espera.
Vaya que es ostentoso, me pregunto ¿Cuánta gente tuvo que pisotear para tener todo esto? Supongo que a mucha entre ellos, nosotros los Uchiha, en verdad me asquea seguir viendo esa imponente construcción, pero no debo perder más el tiempo, tengo que calmar el dolor de mi adolorido y quemante corazón.
Tras analizar el entorno y observar un poco el movimiento, al parecer el lugar está sin vigilancia, pero no creo que me lo pongan así tan fácil, despues de todo ahi está su hokage. Algunos movimientos de los shinobi llaman mi atención, supongo están haciendo un plan de contraataque, ante la respuesta de Madara Uchiha.
Analizo cómo poder entrar, una de mis ideas es hacerlo por mi propio pie y por la entrada, pero eso puede ser contraproducente, así que escalaré por los árboles y al ver esa ventana, es mi entrada, aunque a pesar de saber que esta desprotegida sus shinobi deben de cuidarla ocultándose, pero no serán más de dos personas, no deben llamar la atención, así que tendré que hacer un trabajo rápido.
Empiezo a escalar, sujetándome de las ramas y al llegar a mi objetivo, entró y frente a mí veo a un hombre adulto, pero que conozco bien su nombre Hiruzen Sarutobi, quien ante mi presencia se sorprende y al verlo levantarse de la silla..
—Esto no puede ser verdad..
Y al avanzar hacia él..
Había replanteado una posible misión de rescate, él hokage además de la latente amenaza se preocupa por su gente, a decir verdad maldigo que Hinata Hyuga se hubiera visto involucrada en todo este asunto, después de todo solo una joven chica, pero tengo una misión que cumplir antes de prepararme para defender mi hogar, creo que los chicos que había escogido para ir en su rescate son los mejores, su prioridad es traerla de vuelta a casa y ahora le informaré al hokage mi plan, al abrir la puerta..
Todo pasa tan rápido un shinobi de nuestra aldea se abalanza hacia quien debe proteger atacándolo, al ver su acción me muevo lo más rápido que puedo para interceptarlo y al chocar nuestros kunais..
—Maldita sea al dirigirme hacia ese viejo y liquidarlo, un hombre aparece frente a mí evitando mi ataque y al empezar a forcejear..
—No puede ser tú eres..
«Óbito Uchiha, esto no puede ser verdad»
Al verlo recobrar su posición de ataque, me hace salir de mis pensamientos y..
—No sé quién seas y no me importa, sólo aléjate de mi camino..
—No lo haré ¿Acaso no te das cuenta lo que estás haciendo? Estás traicionando el lugar dónde tú perteneces..
—Este maldito lugar no es nada mío, esta aldea es una nación más a la cual conquistar y lo lograré así sea lo último que haga en mi vida, ahora quítate de mi camino, si no quieres salir lastimado antes de tiempo, ese viejo decrépito me tiene que pagar muchas cosas..
—Ya te dije que no te dejaré hacerlo, así seas un fantasma que viene a torturarme..
—¿Torturarte? Tal vez, pero ahora solo estorbas, así que aléjate..
Óbito se viene sobre nosotros y al detenerlo chocando nuevamente nuestras armas..
—Quítate de mi camino, ya te dije que contra ti por el momento no tengo cuentas que ajustar..
—Estás equivocado, nosotros no somos tus enemigos, toda tú vida has vivido engañado..
—Te equivocas, el que ha estado engañado eres tú..
—Kakashi si me permites... — al tomar su brazo..
—Hokage-sama ¿Qué hace? Aléjese..
—Creo que Óbito merece saber la verdad o al menos nuestro punto de vista y si después de ello, él decide atacarme, tú lo dejaras actuar como él guste..
—Pero..
—Ambos hombres se observan, es obvio que eso es una treta, pero si quieren jugar por mi esta bien y cuando ambos me observan..
—Hace muchos años antes de la fundación de las aldeas cuando era la época de guerra dos clanes poderosos en específico vivían en constante conflicto, peleando por la supremacía, me refiero a los Uchiha y Senju, se dice que cuando un país contrataba a un Senju, el rival hacía lo mismo pero con un Uchiha, ya que era probablemente los únicos que podían competir en enfrentamientos, después de años de mucha muerte y desolación, los líderes de ambos clanes, decidieron llegar a un acuerdo firmando un tratado de paz. Hashirama Senju era un hombre pacifista, quería vivir en paz, no quería más violencia, por otro lado Madara Uchiha quien amaba las peleas y enfrentamientos, ya que esa era su vida, decía que ellos había nacido para ser alguien grande, pero como todos en la vida necesitamos al menos un momento de tranquilidad, así que decidieron hacer una tregua y así fue cómo nació Konohagakure, ambos decidieron hacer una sola tierra uniendo a otros clanes igual de poderosos que los seguían. Tras la fundación ellos propusieron la idea de un gobernante y después de razonarlo se decidió que los habitantes lo elegiría por medio de una votación. Los aldeanos eligieron a Hashirama como su líder, obviamente él otro contrincante al verse superado por quien consideraba su amigo y notar que los aldeanos preferían a los Senju sobre ellos, se sintió desterrado, sé dice que él infundió un rumor entre los miembros de su clan diciéndoles que ellos habían sido despojados de lo que les pertenecía por derecho y trato de levantar una rebelión contra los Senju, por supuesto la mayoría de su gente no quiso seguirlo, ya que después de mucho tiempo por fin respiraba paz tras años de violencia, se podría decir que se sentían en un lugar dónde podían establecerse y echar raíces, así que ha Madara no le quedó más que tragarse su orgullo herido y ver como su gente dejaba de ser guerreros valientes, fuertes y orgullosos, ya que para él se conformaban con vivir y convivir con los otros clanes y vivir de migajas. Pero esa época de paz y tranquilidad no duró mucho tiempo, ya que cuando el clan Uchiha nombraba como nuevo líder a Fugaku Uchiha y tras un intento de ataque contra la aldea, poco tiempo después de la boda de este, muchos aldeanos señalaron a los Uchiha de ser quienes lo provocaron, Tobirama Senju quien era el actual hokage en ese entonces decidió desterrarlos a las afueras de Konoha con el pretexto de que se estudiaría nuevamente el reparto de tierras, era obvio que ellos no le creían he intuían que era para mantenerlos vigilados, ya que a diferencia de su hermano mayor él no confiaba en ellos. Obviamente ese acto de desconfianza no le agrado para nada al nuevo líder y cómo Madara hacía algunos años pensaba, él decía que dentro de la aldea, nadie los respetaba. A pesar de los dimes y diretes que se habían formado Fugaku Uchiha accedió, muchos decían que lo hacía porque estaba por nombrar a quien sería el tercer hokage y ellos sugerían a Kagami Uchiha como candidato, pero nuevamente las elecciones no estuvieron a su favor, ya que fue a mí a quien se decidió ocupara ese puesto, obviamente ellos no lo vieron para nada bien y gracias a un espía se supo que Fugaku Uchiha aconsejado por Madara planeaba dar un golpe de estado antes del nombramiento. Intente arreglar las cosas y no sé diera esa traición por parte de un clan distinguido de Konoha el cual nos podría llevar tal vez a una nueva guerra, propuse crear un departamento de policía bajo el cargo de los Uchiha, incluso podrían regresar a sus tierras y aunque deliberamos mucho, lo logramos, pero nuevamente esa decisión no le agrado a Madara, ya que para él nosotros los estábamos comprando, así que busco por todos los medios volver al plan original y según nuestro espía Madara había descubierto un poder con el cual los haría invencibles y cuando tratamos de evitar la rebelión dentro del mismo clan, ya que se dividieron, Madara Uchiha y los hombres que lo seguían cegados por poder atacaron a su misma gente, muchos inocentes perecieron, incluso creímos que tú habías sido uno de ellos, ya que Madara descubrió que tu madre era el espía entre su clan y nosotros, así fue cómo él decidió matar a todos los miembros débiles y traidores, según él incluidos tus padres, para él lo único importante es el poder y destrucción y no sé detendrá hasta log..
—¡Mientes! — Al interrumpirlo evitando su historia me envuelva —eso no es verdad, ustedes fueron los que nos atacaron por traición, tu solo quieres confundirme como a la gente que vive aquí..
—Eso no es así, ¿Acaso no me recuerdas Óbito? Éramos amigos, incluso llore tu muerte cuando esa barbarie terminó, al sentirme impotente por no poder ayudar, todos estos años he venerado tu muerte. — Los cazadores anbu finamente hacen acto de aparición y lo rodean, sinceramente eso me molesta un poco, ya que espero que a quien considero mi amigo reaccione, pero ante una bomba de humo, Óbito huye..
Kamisama por favor cuídalos, kamisama protégelos, no permitas que él haga nada malo, ya no lo condenes más. Al terminar mi ruego, ¿Por qué ese hombre que se dice ser su tío, lo arrastra a ese mundo cruel?
Tal vez, en este mundo si hay gente con mala sangre dentro de la misma familia que contamina a los demás miembros guiandolos por el mal camino, en vez de protegerlos. Supongo la maldad es la respuesta.
Tras suspirar, no sé cuánto tiempo ha pasado y aún no se sabe nada "de mi protector", pero de pronto la entrada de esa carpa se abre de golpe y lo veo entrar, pero sus manos están llenas de sangre y al recordar lo que él dijo, mi cuerpo reacciona por instinto y me le voy encima empezando a forcejear haciéndome caer al piso y cuando él me deja bajo su cuerpo y observa fijamente..
—Sabes no eres tan dócil como aparentas ser, pero está bien— al aprisionarla con una de mis manos al sujetar las suyas, sacó un kunai de mi portaherramientas y... —vamos a ver que tan valiente eres— al soltar sus manos y entregárselo —atácame o mátame, lo que tú prefieras, que no me defenderé..
Yo tomo el arma decidida a detenerlo, no me voy a dejar engañar por esa mirada confusa y al encararlo molesta, muchas veces debes aprovechar la oportunidad o si no serás tú quien saldrá sacrificada, además ya le había explicado muchas veces que ni los aldeanos, ni el hokage, ni mi clan eran malos y al intentar atacarlo, poniendo el filo del arma cerca de su cuello y ver que él no se defiende..
Aviento ese kunai muy lejos de nosotros, yo no soy como ellos que atacan a traición, ademas al agredirlo no es la manera de hacerlo cambiar de idea y al empezar a llorar..
—¿Por qué me siento tan confundido? ¿Por qué me duele que ella lloré? Se supone que soy un guerrero, no debo sentir lástima por una enemiga y al acariciar su mejilla, me pierdo en su claro mirar intentando tal vez encontrar ahi las respuestas a mis dudas..
Al sentir sus dedos acariciando mi piel, sentir su aliento cálido chocar contra el mío y ver mi reflejo en sus negros ojos, tras parpadear, mi corazón empieza a latir más rápido, mi respiración se agita, ademas mis brazos por inercia rodean su cuello y al cerrar mis ojos..
—¿Qué estoy haciendo? Ni yo mismo me entiendo, pero al tenerla así entre mis brazos, sintiendo su calor, tras sentirme tan vulnerable, creo estoy actuado por instinto al atreverme a besarla. Sus labios son dulces, suaves y cuando la punta de mi lengua roza con la suya, siento que ella hunde sus dedos en mi cabello. Hinata es hermosa, lo supe desde el momento que la conocí, pero a pesar de ser mi enemiga ella siempre a tratado de hacerme ver la verdad de las cosas y muchas de las palabras dichas coinciden con lo que ese hombre dijo y al sentirla corresponderme, sólo puedo dejarme llevar por el momento, aumentando la intensidad, sintiendo como ese beso alivia mi atormentada alma.
El cielo oscuro se ilumina debido a los relámpagos y los truenos, estos anuncian que una fuerte tormenta se acerca y al escuchar nuevamente el sonido del trueno y un relámpago ilumina todo el lugar..
La lluvia por fin cae, entró a la carpa con algo de comida, desde que Óbito había llegado no había salido, ni comido nada y al verlo perdido en sus recuerdos, dejó la bandeja en una de las mesas del lugar y..
Cuándo él me había besado, no sabía ni cómo reaccionar, se que debo rechazarlo, pero al sentir la calidez de su beso, despues de sentirme muy angustiada por fin me tranquilizo y al separarnos por falta de aire, Óbito me había robado algo muy importante para mí, pero se levanta liberándome de su peso, pero se mantiene callado..
Yo en cambio me siento agitada, calurosa. A pesar de tener miles de dudas, le había dado su espacio, Óbito se ve tan confundido, además ¿Qué puedo decir? Ni yo entiendo lo que ocurrido, ademas los nervios no me dejan hablar..
Así que me había alejado de ahí con el pretexto de ir a buscar comida. Tras salir de la carpa empiezo a buscar dónde poder conseguirla, alguien me llama, no se quien pueda ser, pero me acerco a él y al estar frente a frente, el chico rubio me pregunta si su compañero aún no regresa, yo no le digo nada, no quiero causar un problema y cuando él me sonríe, me guia a una carpa por comida, supongo que nadie sabe que Óbito había vuelto.
Me acerco a ese pensativo pelinegro lentamente y al estar frente a frente..
—Hoy por primera vez en mi vida, fallé en una misión que se me encomendó, hoy después de muchos años vi al hombre que siempre culpe de la desgracia de mi familia y los míos, pero simplemente no pude matarlo, todo el odio que juré tenerle se desvaneció, ademas de que me siento muy confundido, pero tarde que temprano tengo que enfrentar lo que se nos viene..
Coloco mis manos cerca de su pecho, sintiendo los latidos de su corazón y al sentir sus manos en las mías y su mirada por fin me enfoque..
—Escúchalo siempre, el nos dice que hacer y nos indica cuál es la verdad en todo..
—Cómo siempre teniendo sueños rosados, pero debes entender que este es el mundo real, no un mundo lleno de fantasías..
Él se aleja de mí y después de que un relámpago nos ilumine..
—¿A dónde vas? — Al verlo detenerse y enfocarme..
Se que Óbito es consciente de la amenaza que se avecina, así que mi deber es intentar persuadirlo de la locura que quiere hacer, ademas si él se siente confundido es porque lo que hubiera descubierto allá, lo hace dudar en atacar Konoha, además el saber que yo puedo tener razón y que lo puedo ayudar a liberarse de su pasado y de un odio que no es suyo, me alegra, independientemente de la razón por qué él me hubiera besado.
—Creo que no voy a ninguna parte..
—Eso quiere decir ¿Qué ya no atacaras Konoha?
—Digamos que por ahora me encuentro en una situación difícil..
—¿Difícil? ¿Te refieres a que estás dudando en hacerlo?
—No me refiero precisamente a eso Hinata, como soldado que soy vivo en constante peligro y tú mejor que nadie sabe eso, lo difícil aquí es tomar una decisión... — Ya sea elegir marchar a lado de Madara y luchar a su lado para destruir Konoha, independientemente de lo que ese hombre me dijo y gobernar junto a mi tío o arriesgar mi vida y defender a quien siempre creí eran mis enemigos y así tal vez poder elegir vivir una vida pacifica junto a ella..
«¿Acaso tengo ese derecho después de todo lo malo que he hecho en mi vida?»
No me gusta para nada ese silencio y al fingir toser..
—¿Te refieres a enfrentarte a Madara Uchiha? Mejor dicho ¿Eso es lo que te esta haciendo dudar Óbito Uchiha?
—Esas son palabras de traición ¿No lo crees?
«¿Creerlo? Claro que sí, si él lo desea puede hacerlo y no será precisamente una traición»
—Yo creo que puedes pensarlo y si en verdad deseas revelarte, yo no lo vería como una traición, más bien sería algo correcto, mejor dicho si decides enfrentarlo será algo así cómo si fueras a limpiar tu honor..
Tras sus palabras miles de pensamientos invaden mi mente, pero no es precisamente por lo que dijo, más bien desde hace un tiempo algo viene a mal conmigo..
Cuando habíamos salido huyendo del que era nuestro hogar cuando toda nuestra gente había muerto y mi tio me repitiera que Konoha es mi enemigo, jure vengarlos, incluso pasé muchos años de mi vida preparándome para ello luchando por la gloria, cómo Madara dice, pero ahora estando tan cerca de lograr mi objetivo y recobrar el honor de mi gente al estar por derrocar esa nación..
Después de las últimas victorias en vez de sentirme triunfador, siento un sabor amargo en mi boca. Además la desilusión había comenzado afectar mis ideales, mi orgullo y honor como Hinata dice, aunque más que nada todo se deriva de la total falta de humanidad de Madara Uchiha quien es mi jefe.
Su actuar me hace dudar de que sus ideales de justicia sean en verdad sinceras y que en verdad vaya a traer la paz que menciona. Lo que me hace preguntar ¿Cuánto tiempo más podré seguir luchando en su nombre? Yo había actuado mal no lo niego, incluso algunos hombres bajo mis órdenes podríamos decir que fuimos ambiciosos o escorias dependiendo el punto de vista, pero siempre habíamos seguido un código de honor "no llegar a cosas tan viles" ya que el aniquilar no significa pisotear a gente inocente y quitarles su vida por diversión, además esa maldita historia que me dijo Hiruzen Sarutobi no salen de mi mente..
Se por Deidara que algunos hombres habían arriesgado su vida al negarse a cumplir alguna petición de masacre arriesgándose a recibir una muerte horrible cómo castigó, supongo que en ese sentido yo sí puedo elegir..
—Solo piénsalo, no necesitas decirme tú respuesta, sólo te pido que analices qué es lo correcto para ti no pienses por mí, ni por él, ni nadie más, piensa qué es lo que tú deseas hacer desde el fondo de tú corazón— al ver que él aprieta su quijada..
«Sólo espero que Óbito sí analice las cosas y no actúe precipitadamente»
—Vamos come o se enfriará la comida..
—¡Eh! — Su cambio de platica me toma desprevenida, supongo ya no recibiré una respuesta —yo la traje para ti..
—Te lo agradezco, pero no tengo hambre..
—Debes hacerlo no has comido nada, además con el estómago lleno se piensa mejor, incluso hay suficiente para los dos..
—En verdad no tengo hambre, pero agradezco que... — Hinata toma la manga de mi túnica interrumpiéndome y..
—Nada, come aunque sea un poco— tras jalarlo para que se siente junto a mí, lo veo sorprenderse y al señalar ese lugar dónde él había estado durmiendo y ver que toma asiento, me alegro que no ponga resistencia y al servirle un poco de arroz con verduras que es lo que me habían brindado de alimentos, al colocar té frente a su plato, el silencio reina. Al probar un bocado, escucho su respiración y ahora es cuando la incertidumbre me invade, yo tengo dudas respecto a lo ocurrido entre nosotros, pero no encuentro la manera de preguntarlo, tal vez él me beso solo por estrategia y al estar por comer otro bocado de comida, el sonido de un fuerte trueno me hace brincar asustada y..
Es tan ilógico de todas las personas en el mundo que creí que algún día me harían compañía, ella es la que menos imaginé hacerlo. Al observarla de reojo, se nota su educación ya que come delicadamente y correctamente, supongo había recibido lecciones de etiqueta a lo largo de su vida.
Madara había dicho que es la hija del líder del clan Hyuga supongo es su primogénita, tal vez ella había tenido todo a manos llenas desde que nació, pero no parece nada presumida, además cuando la había tenido entre mis brazos a pesar de tener un cuerpo curvilíneo y sensual, se nota que entrena para ser una buena kunoichi..
Pero al ver como ella brinca asustada, ese acto me hace sonreír. Definitivamente es una niña atrapada en un cuerpo de mujer y al verla molestarse por mi sonrisa, al ver un grano de arroz en su mejilla, eso indica que ella no es tan perfecta y eso me gusta..
Al acercarme a ella y quitar los restos de comida de su cara..
—Tranquila miedosita— al observar esos ojos perlados los cuales desde un principio me habían cautivado, el impulso de volver a saborear esos dulces labios es más fuerte que yo y al atraerla a mí decido saciar mi deseo..
—Otra vez siento ese calor recorrer mi cuerpo, al sentir cómo sus labios ahora se mueven con más ímpetu sobre los míos. Al sentirlo nuevamente rozar mi lengua contra la suya, el ambiente se siente muy caliente y por extraño que parezca algo en mí anhela mucho más de su contacto. Óbito me recuesta y mientras sus labios reparten besos en mi cuello haciéndome jadear..
Hinata huele tan rico y al colocarme bien sobre ella, empiezo a besar su cuello, morder su barbilla, besándola, mientras mis manos levantan la camisa que ella viste mostrandome su suave y blanca piel, llegó hasta a sus glúteos y al escucharla gemir, mi mente se apaga y empiezo actuar por instinto al sentirla pegarse a mí..
—Si quieres que me detenga pídelo, por que sinceramente deseo mucho más de ti Hinata..
—Su voz es tan ronca, aunque lo lógico es detenerlo, esto no esta bien, pero al sentirlo lamer mi cuello y cómo sus manos me acarician, sólo puedo besarlo callándolo..
Al corresponder su beso, lo siento por ella, por mis padres y clan si les falto el respeto, pero desde que la había conocido algo en mí se había sentido inquieto y ahora al tenerla así, sólo deseo disfrutar de ella como con ninguna otra mujer que había pasado por mi vida y al sacarle esa camisa que en este momento estorba..
Nos separarnos por falta de aire, como puedo quitó mi ropa, pero su piel se eriza, supongo el ambiente fresco no ayuda, ademas de quitarle mi calor, ya que tuve que separarme de ella. En cambio yo siento mi cuerpo arder, la excitación se adueña y al colocarme nuevamente sobre ella, nuestros sexos se conectan y al empezar a frotar mi erección..
—Mi cara enrojece, su pene se siente caliente y muy duro. En las misiones que he realizado han pasado algunos accidentes con mis compañeros, por ejemplo entrar al lugar donde nos cambiamos por accidente, al tomar un baño, pero Óbito ahora me ve completamente desnuda, ya que mi ropa está húmeda al haberla lavado, use su camisa, pero cuando su mirada brillante y lujuriosa recorre mi cuerpo desnudo siento mi centro palpitar y al sentir que Óbito acaricia mi mejilla, ante el contacto de sus dedos cierro mis ojos y..
—Eres tan bonita— al bajar a besar sus labios, mejillas, cuello, mi manos siguen recorriendo su figura, llegando hasta la redondez de esos jugosos y carnosos pechos, mis dedos acarician su pezón, Hinata gime rompiendo el beso, mi pene se endurece cada vez más, pero no puedo actuar como un salvaje y lastimarla, después de darle otro corto beso, mi lengua empieza a lamer desde su cuello recorriendo su piel, hasta llegar sus senos, tras masajearlos, mi lengua empiezo a lamer su pezón y al empezar a moverla en forma circular, al sentirlo endurecer, mi otra mano acaricia el otro pecho..
En verdad podrían ser una de mis perdiciones, joder creo que al estar tanto tiempo con Deidara me estoy convirtiendo en un pervertido a mis casi veintitrés años..
—Se siente tan rico como lame y chupa mi pezón, pero al sentirlo morderlo arqueo mi espalda, aunque duele es un dolor placentero y al gemir hecho mi cabeza hacia atrás, cerrando mis ojos, mientras Óbito besa mi cuello y algo duro rosa mi útero, los nervios me invaden, había escuchado decir que los penes algunas veces son muy grandes y aunque te lastiman al penetrarte, también te hacen sentir tan placenteramente al desgarrarte deliciosamente por dentro. Sólo espero que esa información sea verdad, no quiero entrar en pánico justo ahora, pero cuándo él muerde mi cuello al simular penetrarme, sus manos pellizcan mis pezones, mi vagina se humedece y al acercarlo a mí..
—Agh... — sus pechos suben hasta tenerlos cerca de mi boca debido a su posición y cuando Hinata me abraza por el cuello, como buen pervertido junto sus pechos y empiezo a succionar de ambos pezones, Hinata estira mi cabello, mi pene está ansioso, al frotar mi hombría contra su sexo y sentir sus fluidos jadeo, ya que ese movimiento ayuda un poco a mi dolor. Pero sus pudorosos gemidos aumentan mi deseo... —ya no puedo más, te deseo mucho Hinata..
—Óbito acaricia mi vagina haciéndome sentir abochornada, además mi vagina está tan húmeda, que cuándo él me penetra con un dedo, yo gimo fuerte moviendo mi cadera, él mueve más fuerte ese dedo y al sentirlo chupar uno de mis pezones, deseo más de su contacto y al parecer adivina mi pensamiento, ya que me invade con un segundo dedo. Tras gemir, kamisama esto es delicioso, sólo puedo dedicarme a gemir y seguir moviendo mis caderas hacia él..
Hinata parece disfrutar mis caricias, al verla morder su labio inferior, quien lo diría que una chica como ella me pondría de esta manera y al acariciar su clítoris con mi pulgar en forma circular, ella aprieta mi espalda..
—¿Te gusta?
—¡Oh, sí! Más fuerte por favor— lo escucho reír y decirme "eres una pervertida" pero antes de decir algo, Óbito me besa jugando con mí lengua y al sentirlo aumentar el ritmo de sus dedos, de pronto la sensación de hacer de la pipi, se presenta, si eso pasa justo ahora me dará mucha vergüenza y cuándo él muerde mi labio, siento cómo me penetra más fuerte, al sentirlo apretar mi clítoris, algo en mi interior explota, haciéndome sentir como si flotara, mientras mis piernas tiemblan y..
Su humedad moja mi mano, eso había sido un buen orgasmo y al ver cómo sus brazos descansan en el piso y sus ojos estén cerrados..
—Es el primer orgasmo de la noche princesa Hyuga... — tras sonreír de lado imaginando todo lo que nos espera..
Abro mis ojos al escucharlo llamarme así, pero es ¿Qué cosa? Y al observarlo, Óbito separa mis piernas y se recuesta sobre mí y al sentirlo besar mi barbilla y las cosquillas me invadan, estoy por preguntar ¿A que se refiere? Pero al ver cómo toma su erecto y duro pene y lo humedece con mis fluidos vaginales y su mirada puesta en mí me hace sentir muy caliente, al sentirlo en la entrada de mi vagina..
—Escucha linda esto puede doler un poco, pero trata de relajarte, si es mucho el dolor dime y me detendré ¿De acuerdo?
Al observarlo él entra en mí, siento cómo me invade de golpe haciéndome sentir un ardor y algo de dolor y al abrazarlo por su cuello..
—Tranquila, este dolor es bueno, digamos que dejaste de ser una niña y diste paso a una preciosa y perfecta mujer— beso sus lágrimas y al llegar a sus labios, la doy tiernos besos, pero sintiendo toda la presión de mi pene al ser apretado por el interior de su vagina, deseo moverme, pero tengo que ser paciente y al observarla..
La pulsación que sentía cesa un poco, siento como si se hubiera calmado el ardor y aunque el dolor es un poco molesto, sentirlo así me hace sentir tan completa y al ver esos bonitos ojos negros atentos en mí..
—Empezare a moverme ¿Sí? — Salgo de su interior dejando la punta de mi pene adentro y al volver a entrar, joder esto es desquiciante, pero tengo que cuidarla. Le pido que abra un poco más sus piernas y al salir un par de veces más de ella y entrara lentamente, la humedad empieza a crecer y eso me hace gruñir..
Lo abrazo por su cuello, él me está cuidando y al escucharlo gemir, me gusta ese sonido y al hacer lo que me pidio, poco a poco la molestia va siendo reemplazada por una rica sensación. Cierro mis ojos, mientras lo siento entrar y salir cada vez más rápido, mis pezones rozan su duro pecho y cuando lo siento invadirme más profundo..
La lluvia parece incrementarse, pero ni los truenos o relámpagos se comparan con la sensación de placer que Óbito me brinda y al verlo lamer mis pezones y con su mano lleva una de mis piernas para abrazarlo por su cadera, el sonido acuoso que producen nuestros cuerpos y gemidos, es lo único en lo que me concentro..
—Hinata es exquisita, maravillosa, deliciosa, tanto que quiero mucho más de ella, mis embestidas ahora son más fuertes y profundas, la abrazo de su cintura y continuo con mi labor, pero conforme la penetro más fuerte, siento cómo su vagina empieza apretar mi pene, el sudor cubre ambos cuerpos, pero es no importa, yo deseo más, pero su cálida y apretada vagina, succiona mi pene haciéndome sentir tan rico y al verla perdida en las sensaciones, al llegar su segundo orgasmo, la penetro más fuerte y finalmente me corro muy dentro de ella, marcando su vagina con mi semen..
Óbito cae sobre mi pecho, mi respiración está agitada, siento como si mi corazón late en mis oídos y al abrazarlo acariciando su espalda y sentirlo temblar..
—¿Estás bien?
—La beso tiernamente y al sonreír, tras abrazarla— lo estoy, pero ahora eres mía, toda mía Hinata..
Sus palabras causan un calor en mi pecho, aunque suena algo posesivas, pero al sentirlo salir de mi interior y acomodarse a mi lado para descansar, el cubre nuestra desnudez, el sueño me invade y al esconder mi cara en su cuello oliéndolo..
«Y tú mío Óbito Uchiha»
•
•
•
El cálido calor que me envuelve de pronto me abandona haciéndome abrir mis ojos, al ver que ya había amanecido, pero al parecer había llovido toda la noche, el ambiente es fresco, cubro mi desnudez y mientras los recuerdos de la noche me invaden, al volver a sentir esa calidez invadir mi pecho..
Óbito me había tomado nuevamente durante la noche y al pensarlo, lo enfoco, al tomar la sábana y cubrir mi cuerpo, bajo de la cama y llegó hasta él, lo abrazo por su espalda y..
—Te hacía aún dormida, dime ¿Te desperté? — Al ver su cabello revuelto, pero sus ojos tengan un bonito brillo y su rostro lo adorne una sonrisa. Anoche había sido una de las mejores de mí vida, además de que la había disfrutado mucho estar con ella intimamente, pero al amanecer como siempre pasa, los bonitos sueños no duran para siempre.
—No, pero te vi tan pensativo, dime ¿Qué ocurre? — El deja de verme..
«¿Acaso se arrepiente de lo ocurrido entre nosotros?»
Óbito vuelve a girarse y al estrecharme entre sus brazos..
—Volví a mi realidad, supongo que Madara me espera y..
Acaricio su mejilla lastimada..
—Sé que las responsabilidades nunca nos van abandonar, también sé que tienes que encararlo, pero esperó que al menos tengas ya tengas una idea de lo que harás, eres un guerrero y tal vez en tu vida o en este momento, el romance no sea tu prioridad, pero me gustaría que fueras un hombre libre... — él roza nuestras narices y al besar mis labios..
—Me he arrepentido de muchas cosas en mi vida, pero el que estés aquí conmigo no y creo que tengo una ligera idea de lo que haré..
—Ya veo y yo que pensé que quieras que te ayudará a decidir..
—¿Decidirme? — La abrazo por su cintura atrayéndola a mi —sabes algunos de mis hombres creen que eres una bruja hechicera que conduce a los hombres hacia su muerte y si ese es mi castigo por lo que me haces sentir, con gusto me dejo llevar por ti— deslizo mis manos entre su largo cabello, llegando hasta su nuca y al inclinarme para probar sus labios, disfrutado su sabor, tras separarnos..
—Más bien creó que soy una sanadora-rehén que te puede ayudar aclarar tus dudas y apoyarte firmemente..
—La beso con más ansiedad y al separarnos por falta de aire, la cargo en mis brazos— lo sé, pero esto es algo que tengo que hacer yo sólo, aunque sí me puedes ayudar en otra cosa —avanzó con ella llevándola hacia ese baño y al llegar ahí y bajarla, Hinata empieza a quitar esa bata que cubre mi desnudez, la sabana cae al suelo, al sentirla abrazarme, sus labios besan mi pecho y... —creo que debemos esper..
—Shh... — al colocar un dedo en sus labios interrumpiendolo —no pienses en nada ahora, solo disfrutemos el momento ¿Sí?
—Yo sólo puedo sonreír— no sé cómo, ni cuándo, pero creo me enamore de Hinata, es obvio que ella me gusta y sin duda alguna su presencia me hace sentir en paz, después de muchos años de martirio.
[...]
Al ver a Zetsu entrar a la carpa..
—Y bien ¿Qué se sabe de él?
—Hasta ahora nada, lo que si es que Konoha empezó a evacuar sus civiles..
Al golpear la mesa..
«Óbito ¿Qué demonios estás haciendo?»
—Sabes cuándo fui por él y lo vi con esa mujer, no parecía el Óbito de siempre, las mujeres son una perdición y tú mejor que nadie lo sabe, dime ¿Qué tal si esa visita sorpresa sale contraproducente?
—Es imposible y lo sabes, por más que Óbito se esfuerce, no podrá recordar lo que en verdad paso..
—Puede ser, pero..
—¡Basta ya, Zetsu! Deja las cizañas para después, recuerda que yo siempre tengo un as bajo la manga, vigila bien todo y manténme informado, si él vuelve pronto o no, atacaré Konoha de todas formas..
—Está bien, lo haré..
Al verlo avanzar hacia la salida, Konoha caerá y por fin mi venganza se consumirá, después me deshare de lo único que me ata a mi pasado, Óbito y quién sabe con un poco de suerte, esa mujerzuela pueda ser un premio aliciente en mi victoria.
[...]
El hecho de que ese muchacho no hubiera vuelto o no nos hubieran atacado al anochecer aprovechando la lluvia, me hace pensar que tal vez él había recapacitado, pero ¿Madara lo hará? Sinceramente no lo creo, al parecer sigue siendo el mismo hombre violento, el cual vive para la guerra, pero ¿Cómo es posible que un hombre como él aún viva?
Los años no se detiene, el tiempo no es benevolente con nadie y el claro ejemplo soy yo, mis manos y piernas ya no tienen la misma fuerza que en mi juventud, pero como líder de esta nación yo luchare con mi gente con la esperanza de salir victorioso a pesar de que tengo claro que puedo perder mi vida y al escuchar como tocan la puerta de mi oficina dejo esos pensamientos de lado y les pido pasar..
—Hokage-sama ¿Qué cree que hace?
—Tú que crees Kakashi..
—Eso no puede ser señor, de hecho venía a decirle que estamos listos, además en cuanto lo ordene, tanto nosotros como el equipo de rescate avanzara hacia allá, pero usted debe de ir a un lugar de resguard..
—De ninguna manera— tras interrumpirlo — ¿Cuándo has visto que un líder se esconda?
—Señor entiendo perfecto la manera como se siente, pero no puedo permitir que usted luche, mi prioridad es protegerlo y..
—Lo harás en el campo de batalla, ahora vamos..
—Pero..
—Hokage-sama, Kakashi-san ellos, ellos ya vienen y..
—Lo ves Kakashi y tú Udon tranquilízate, no hay nada más importante que defender tu nación, así esté en peligro tu vida..
—Definitivamente así cómo es sabio, es terco, pero ya veré cómo sacarlo bien librado de todo esto, a él y a mis compañeros.
[...]
El día pactado se había llegado y ya había elegido a quien ayudaría y al llegar al lugar donde será el campo de batalla, aquí se decidiría todo..
Hinata duerme tranquila, ella había llegado a mi vida en medio de esta guerra brindándome paz, ahora tengo alguien por quien vivir y proteger en mi vida, no importan las consecuencias que obtendré al ayudarlos.
Como es de esperarse todos se preparan para atacar y al entrar a cierta carpa..
—Óbito volvis..
—Shh cállate y escúchame— tras interrumpirlo —Deidara vengo a decirte que iré a balancear la guerra..
—¡¿Qué?!
—No es tiempo para sarcasmos, ni explicaciones, si vine hasta aquí fue para pedirte un favor..
—Hemos sido compañeros mucho tiempo y sinceramente esa información me sorprendió, creí que seguías en Konoha preparando nuestra entrada y ahora me sales con eso, como quieres que no haga preguntas..
—Deidara enserio no hay tiempo, Madara no sabe que estoy aquí, sé que eres alguien que ama los combates, pero quiero que por favor que te lleves a Hinata lejos de aquí, ella es alguien importante para mí, no quiero que le pase nada malo y..
—¿Te la cogiste verdad? Y luego dices que no eres un pervertido hum..
—No estoy aquí para que me juzgues, como mi amigo, mejor dicho hermano que eres no hay alguien más que pueda confiársela, por favor Deidara, creo que estoy por llegar a la punta del iceberg y saber que paso en verdad aquella noche que mi vida cambio, dime ¿Lo harás?
—Vaya que las mujeres tienen la forma de complicar todo, pero ¿Te das cuenta de lo que estás a punto de hacer?
—Si..
—Conociendote como lo hago, creo que nada de lo que diga te hará cambiar de opinión, solo espero que salgas bien librado de esa locura, porque si no, no solo tu morirás..
—Sabía que podía confiar en ti.
Le había dejado una carta a Hinata donde le pido confie y vaya con Deidara, que me espere, que yo iré con ellos, pero a ciencia cierta no se si lo lograré.
Al ver a esos hombres con los cuales había compartido tantas cosas juntos, desde haber sangrado, cantado y convivido, definitivamente será difícil, pero está decidido, ahora somos enemigos y aunque no quisiera atacarlos, se bien que ellos a pesar de todo cumplirán su misión.
El bando contrario se prepara para defenderse y cuándo Madara se posa frente a ellos y los ve altanero, avanzó hacia él. Siento todas las miradas sobre mi persona, supongo que los hombres a los que defenderé, me ven como un enemigo, incluso si pudieran con con gusto matarían, pero voy a cumplir mi palabra, castigaré a quien había masacrado a mi clan por avaricia y poder y al estar frente a ellos..
—Al fin llegas, yo que pensé que otra vez te iba a rescatar, pero ya que estamos completos es hora de..
Al colocarme frente a él..
—Hoy no Madara..
—Mhp no me digas que ahora me traicionaras por escorias como ellos..
—No se supone que para ti no hay nada más importante que la paz, hasta donde recuerdo ese es tu lema ¿No es así?
—Una paz requiere la muerte de gente inocentes..
—Temo que está vez no concuerdo contigo, Konoha no es sólo una aldea, ella y sus habitantes son nuestros compatriotas, si los matamos estaremos matando la última parte de ella en nosotros..
—Un árbol no muere porque le arranque una hoja mi querido Obito y como veo ahora estamos en bandos equivocados, me pregunto, si mato a esa mujerzuela ¿Volverás a ser él muchacho que era mi orgullo a quien yo eduque y crie?
—No digas estupideces, tú, mejor dicho nosotros..
—Para nosotros sobrino, no hay luz, tenemos en nuestra conciencia la muerte de muchos inocentes y el que esa zorra esté a tu lado y te convenza de no acabar con esa aldea de mierda y sus habitantes, no te hará un santo, espero recapacites y entiendas que esa no es la solución, ya que nuestras almas están condenadas al infierno, enterate yo si cumplire mi palabra, no me rendiré hasta lograr mi objetivo, yo renaceré y gobernare Konoha y sus alrededores..
—Estas mal Madara la venganza, el odio, no es lo más importante de la vida, si no la paz, la felicidad..
—Mhp ¿Dónde he escuchado eso antes? — Al fingir recordar —¡Ah! Sí, ya recordé, tu hermosa madre..
—¿Mi madre?
—Pobre de ti Óbito, pero creo es hora de decirte toda la verdad, digamos que será el último favor que haré por ti— tras sonreír —verás para mí lo único importante en la vida es el poder, la guerra, somos guerreros y esa cursilerías de amor, paz y demás estupideces salen sobrando, el poder es todo en la vida, pero muchos de los hombres que yo defendí doblaron sus piernas y se conformaron con mediocridad, tratando de vivir en un mundo de paz, el humano por naturaleza es egoísta y al saber que no me apoyarían y los perros de Konoha nos desterraron, decidí cambiar la historia, quise hacer un nuevo mundo y para ello necesitaba hacer sacrificios así que me dije por qué no empiezo haciendo una limpieza, aniquilando a los débiles eslabones del clan. Había planeado todo con cautela, pero al descubrir que la mujer de la cual yo siempre estuve enamorado, a quien deseaba fuera mi reina y gobernará conmigo, me traicionaba, ya que Naori se encargó de avisar no solo al viejo hokage, sino también a los altos mandos de konoha y demás clanes de mi traición, sin duda alguna me dolió su actuar, ya que ella para mi era una diosa, desde pequeña tuvo esplendorosas visiones, pero no sólo por eso me atraía, Naori descubrió una técnica muy poderosa llamada izanami, yo deseaba obtener esa técnica ya que gracias a ella podía vencer con suma facilidad a todos los oponentes que yo quisiera, si la obtenía sería el amo del mundo gracias a poder. Creí que podía lograr mi objetivo si la convencía de unirse a mí, le propuse olvidarme de su traición, intente persuadirla, que aceptara gobernar conmigo, pero ella me rechazó tajantemente al decir que para ella solo existía él mediocre de tu padre, el odio quien siempre me alimento, sumado a la rabia hablaron por mí y empecé a ejecutar mi plan y cuándo ella y los mandos de Konoha intentaron detenerme, la capture, torture, viole y amenace para que hablara y me dijera la manera de obtener el izanami, pero no logré saber nada de ella y al verme acorralado, te tomé a ti bajo mi protección, tú serías quien ejecutaría mi venganza, estaba tan orgulloso de ti, todo iba de acuerdo a lo planeado, pero esa perra bastarda llegó para arruinarlo todo..
—Eres un maldito hijo de puta— al invadirme la ira, me voy sobre él, sé que nosotros nunca nos habíamos enfrentado, incluso se que debía calmarme y pensar con la cabeza fría, pero ahora me doy cuenta de algunas cosas y supongo que esto algún día pasaría de una u otra forma..
—Doy la orden para que arrasen con Konoha, quiero verla arder, voy a crear una auténtica aldea, no me importa que en un futuro tenga que levantarla de nuevo, ahora si nada ni nadie me va a detener en tomar lo que es mío desde un principio, total Hashirama hace mucho tiempo que dejó este cruel mundo, Naori tampoco está, ellos eran los que tal vez podrían intentar detenerme y aunque no había logrado obtener ese poder que ella descubrió y se llevó a la tumba, había encontrado otros poderes y uno de ellos es lo que me mantiene aún con vida, solo Zetsu lo sabe y él definitivamente nunca me traicionará, tenemos un pacto y pronto todo acabara y este mundo renacerá bajo mi mando por muchos años más y ante los gritos de guerra de los de Konoha y de mis hombres..
Tal vez nunca logré vencerlo o tal vez sí ¿Quién puede saberlo? Pero al menos agradezco el haber tenido un momento de paz en mi vida, ese el cual el hombre que hasta hace un momento respetaba, ahora me muestra su verdadera faceta, yo me sentía mal por mi traición, pero nunca lo conocí y al chocar nuestras armas..
Se que si muero Deidara hará todo por cuidar de Hinata. Incluso a esta hora de seguro ambos están muy lejos de aquí, pero no puedo fiarme, tengo que conseguirles la oportunidad de paz y felicidad que ellos merecen y eso es matando a Madara Uchiha..
Tras un par de choques más de nuestras espadas y tomar distancia..
—Deberías de haber completado tu misión y terminar siendo como yo Óbito un triunfador, estaba seguro que podrías ser el mesías que traerá un nuevo mundo para todos, pensé que ya lo habías entendido, pero sólo resultaste ser un fracaso, aunque tú y yo buscamos la paz, esa que nos robaron, también trajimos la guerra, esa es la realidad..
—Te equivocas Madara..
El recuerdo de verme siendo un niño corriendo entre la gente herida buscando a mis padres y abuela entre los escombros, llega a mi mente, pero la voz de Madara diciéndome que mis padres me habían dejado sólo, porque los hombres malos nos habían traicionado y atacado sé repiten en mi cabeza, recuerdo ver como algunos gunbai (abanicos) se mueven con el viento y al querer ver más e intentar limpiar mis ojos debido a mis lágrimas acumuladas, él me pide que lo siga, diciéndome que algún día regresaremos a vengar la muerte de mis padres, ya que yo seré su aliado, el futuro salvador del mundo.
—Sabes alguien me dijo que aunque los líderes de una nación a veces tomen decisiones erróneas, nunca humillan, cazan o matan a los suyos y sus aliados, así que no permitiré que alguien como tú siga humillando y maltratando a gente inocente nunca más, ahora me doy cuenta que fui un guerrero falso, así que me ocuparé de remediar mis errores, tengo que acabar con el mal que tú te has encargado de expandir sobre este mundo, confiaré en mis nuevos y futuros aliados, ahora entiendo que yo no soy tú, yo soy Óbito Uchiha..
—Creo tienes razón, vi en ti alguien con un buen potencial y solo resultaste ser un guerrero impotente que al final no logró completar nada en su vida..
Empuño mi espada apuntándole y..
—Tal vez si estuviera solo, seguiría tú mismo ejemplo, pero ahora viendo como llega ese hombre que jure era mi mayor enemigo..
El hokage es un padre para todos los aldeanos, él nos cuida y protege, incluso puede dar su vida por nosotros.
Me acerco a Madara y al escuchar cómo se produce el sonido del golpe de nuestras armas..
—Ahora sé por qué vine al mundo, vine a salvarlo de una escoria como tú..
«Pelearé a lado de Konoha en esta batalla y triunfaremos»
—No puedo creer lo que veo, mis amigos, shinobis, la gente de la aldea defienden su hogar, algo en mi se llena de alegría y orgullo, pero al ver a ese muchacho defendiendo su nación, hace que una nostalgia me invada ¿Qué será lo que pasó para que Óbito cambiará de idea? ¿Acaso Madara le diría la verdad? Sinceramente no lo se, pero me alegro que recapacitara. Al ver que Obito y Madara siguen peleando, veo como claramente el pelinegro mayor lleva ventaja, así que lo ayudare y al acercarme a ellos detenido su batalla..
—Vaya al parecer estoy de suerte, mataré dos pájaros de un sólo tiro, sinceramente es excitante verlos caer a mis pies y por mi espada, eso es lo mejor de todo..
—Qué lástima que nunca aprendiste Madara..
—Al contrario Hiruzen, pero desde ya les digo que no se preocupen, Konoha renacerá y será un mejor mundo para todos— al ver llegar a varios ingenuos rodearme y los cubran..
Al abrir mis ojos, siento mi cuerpo muy pesado, supongo el haber estado íntimamente con Óbito varias veces, me está pasando factura, pero me siento muy contenta, tras sentarme veo a quien llama compañero a Óbito a mí lado y..
—Hasta que por fin despiertas bella durmiente..
—¿Dónde está Óbito?
—Él fue a cumplir con su deber..
—¡¿Qué?!
—Toma esto es para ti..
Él me extiende una hoja en blanco y al tomarla..
Hola bonita supongo que para cuándo leas esto, mi verdadera misión estará cumplida, al final creo que sí eres una hechicera porque me cautivaste con tu alma pura y buena, quiero agradecerte por haber llegando a mi vida en un momento de caos y desolación, sabes espero que al ayudar a Konoha pueda expiar mis pecados, al parecer si lograste cambiar mi lado intransigente, ya que protegeré nuestra nación te lo prometo, te pido que no hagas ninguna locura, ve con Deidara, yo los alcanzaré, solo espero poder vivir y ganarme el privilegio de vivir una vida junto a ti, gracias por ser mi bello regalo princesa Hyuga, besos Óbito.
No sé si alegrarme por lo que está haciendo justo ahora o molestarme con él y al acumularse mis lagrimas en los ojos y estruje ese papel contra mi pecho..
—Óbito siempre ha sido así, ahora todo está listo, lo mejor es partir cuando ant..
—No... — tras interrumpirlo y levantarme de la cama —yo quiero ir con él, luchar a su lado, salvarlo de todo ese sufrimiento... — y hacerlo cumplir su palabra, me lo debe..
—Ahora entiendo por qué Óbito cambió tanto, pero opino lo mismo que tú, así que andando..
—Gracias.
[...]
Me siento tan cansado, pero no puedo rendirme, no ahora que entiendo que solo fui un simple peón. Kamisa te pido perdón por toda la gente inocente que murió por mi culpa..
Lo que más coraje me da todo es que lo ocurrido fue por una falsa mentira, de seguro mis padres y mi gente no tienen un descanso por mis malas decisiones, pero voy a reparar mis errores.
Mi cabeza duele, pero este asunto lo voy a terminar yo mismo, tras levantarme y al colocarme delante del hombre que los shinobis de Konoha protegen..
—Es el momento y la hora de crear un nuevo mundo, Óbito el pago de tu insolencia será tu muerte y ustedes entiendan que están perdidos, pero estoy tan feliz que les daré una oportunidad, podrán vivir si se rinden y me juraran lealtad absoluta, si lo hacen tal vez considerare dejarlos con vida a excepción de ustedes dos traidores— al señalar al viejo Hiruzen y quien es un perro traidor —ya que este juego lo gano yo..
—No seas arrogante, date cuenta estás rodeado y aunque tal vez caigamos algunos, no podrás con todos..
—Tras sonreír— son unos ingenuos. —hago ésa importante señal, Zetsu me ayudará a lograr mi plan, es hora de saborear mi victoria, pero..
—Hokage-sama, Kakashi-san hemos descubierto que el hombre que acompaña a Madara Uchiha a quien llaman Zetsu trabaja en algo secreto mientras sigue las órdenes de Madara fingiendo ser su aliado y ahora él es nuestro mayor..
No escucho más ya que al ver a Madara venirse sobre mí, se lo que hará, conozco su manera de pelear, se que se viene la estocada final, es una lastima que no se de cuenta que es un hombre fracasado, pero al menos confió en que ellos terminaran mi misión y al colocarme frente a él he intentar dar mi golpe final..
—La voz de Shikaku Nara queda atrás, ya que al ver a ese muchacho correr hacia Madara lo sigo, ahora que había demostrado que no a dejado de ser ese chiquillo que se le llenaba la boca diciendo que algún día sería hokage y protegería a su gente, lo aviento y..
—Por fin dejaré atrás este odio maldito y al estar por despedirme de Óbito... — Zetsu sale bajo la tierra y al lanzar unas dagas veo a Hiruzen Sarutobi recibir mi golpe, pero..
Zetsu atraviesa a Madara en el estómago con la palma de la mano, la cual está rodeada de algo brillante y el escucharlo toser..
—Él aprieta mi artificial corazón, no puedo creerlo, Zetsu me había ayudado a colocar cuando juntos habíamos jurado vengarnos de Konoha y las demás aldeas y cuando una lanza reemplaza a su puño..
—Madara el tiempo se acabó, haz cumplido tu objetivo, pero antes de que te vayas al infierno quiero que sepas que yo fingí obedecerte, para avanzar en mi propio plan y tú no estás en el..
—Cuando vemos que el Hokage cae, termino mi frase al decirle a Kakashi-san que descubrimos que Zetsu traicionaría a su gente y ahora muestra su verdadera cara..
Al ver que Madara caer y sostener a quien me cubrió..
—¡Hokage, despierte! No puede rendirse, no ahora, perdóname, tenía razón yo era quien estaba equivocado..
—Óbito sostiene al Hokage, algunos shinobis persiguen a Zetsu y... — hazte a un lado Óbito Uchiha necesito llevarme al hok..
—Kakashi... — tras toser —relájate y tu Óbito me alegro saber que al final la voluntad de fuego si está en tu corazón, es una lástima haberla visto en mis últimos momentos, Kakashi quiero que tomes mi lugar como Hokage, te pido ayudes a Óbito, ya que los aldeanos no creerán lo que él hizo por ellos y tu Hinata no llores más, pero me alegra verte bien..
—Había corrido lo más rápido que pude, rogando a Kamisama proteja a todos lo que obran de buena fe y cuando Deidara y yo finalmente llegamos a ese lugar donde hay desolación y muerte por ambos lados, me siento muy mal, pero al ver a Óbito está junto al hokage, corro hacia ellos y..
Al escucharlo hablar, veo a Hinata y Deidara junto a nosotros, pero muchos de los hombres al ver a Madara muerto se retiran y..
—Hokage no hable más, ya mismo lo atenderán y usted estará bien..
—Kakashi al parecer hombres de Madara capturaron y mataron a Zetsu para vengar a su líder, antes de que el ejecutar su plan, según la información recabada el consiguió un pergamino prohibido que puede regresar el tiempo, pero no logro activarlo y eso me alegra, pero ese no es el único problema, los Hyuga vienen hacia acá por la cabeza de él y supongo que por ella..
—Shikaku, primero llevaremos al hokage atender, también hay que comprobar si esa información de Zetsu es correcta manda a gente explorar, ya que ese hombre en verdad es peligroso y tu Óbito..
—No iré a ningún lado Kakashi, no hay muerte más gloriosa que morir en un campo de batalla salvando a tus compañeros, mientras eso no pase sigues obedeciendo mis órdenes y tú Óbito lo mejor será que huyas con Hinata, estoy seguro de que su padre no la perdonará por quedarse junto al enemigo y mucho menos a ti, al menos no tan fácil, solo prométeme que cuidaras bien de ella ¿Sí?
No entiendo qué hacen ellos aquí, pero sigo en lo dicho y al estar por negarme a la petición de Hiruzen Sarutobi y pedirle a Deidara cumpla su palabra..
—Óbito ¡Reacciona!
Al sentir que alguien toma mi mano y ver esos hermosos ojos perlados pendientes de mí y Kakashi insista en que huya, yo..
•
•
•
Entro a ese lugar y al avanzar por el pasillo guiado por los murmullos y un buen olor invada mi olfato. Al llegar hasta la cocina y ver a Deidara meneando la cuchara al preparar algún alimento..
—Vaya, pero que bien huele, creo has mejorado mucho compañero... — al ver que él me enfoca..
—Hum aunque lo digas de broma, lo he hecho, digamos que ahora si tengo una buena senpai..
Veo cómo él hace una seña simulando la silueta femenina y sonríe..
Habíamos salido huyendo de aquel lugar, dejando todo y a todos atrás. Aunque había regañado a Deidara por no cumplir mi petición..
Hinata me había calmado al decirme que ella piensa por sí sola, mostrandose firmemete, vaya que aún guarda muchas facetas que no conozco.
Nosotros siempre viajamos al norte y supongo en eso no cambiará, así que muchos kilómetros despues habíamos llegado a una guarida que habíamos terminado de construir Deidara y yo y la cual había sido nuestro refugio estos cinco meses.
Intente aclarar las cosas, pero nuestra vida sin duda alguna había dado un gran giro y ahora recuerdo claramente todo lo que había ocurrido en mi niñez y aunque aún no perdonó del todo a Madara por los crímenes que había cometido y los cuales yo también había participado, trató de resarcir todo eso, con buenas obras y con la ayuda de Hinata a quien conforme trato, más me gusta y amo, pero al verla acercarse a mi..
—Hag... ¿Es enserio?
—Cuando lo abrazo y veo a Óbito mirarlo furioso, Deidara se aleja y por fin beso a mi hombre y al separarnos... —bienvenido a casa cariño..
—Gracias bonita, pero quiero preguntarte ¿No te arrepientes de esta decisión? — Hinata acaricia mi mejilla y..
Óbito tras dudar un buen tiempo, por fin toma mi mano y nos alejamos de ahi corriendo, Deidara nos alcanza y corrobora que en efecto Zetsu había muerto, pero no por los desertores que seguían a Madara, él no confiaba en nadie y de alguna manera había encontrado la forma de que Zetsu se destruyera junto con él por si algo le pasaba.
Al final de cuentas ambos eran iguales. Nosotros nos habíamos alejado lo suficiente de ellos.
El tiempo pasó, habían sido meses difíciles y ante el temor de una ardua cacería no solo por mi clan y la aldea, si no las otras también, ahora al parecer podríamos decir que estamos empezando a vivir en paz..
Ante la muerte de Madara Uchiha todos empezaron a reconstruir sus vidas y las naciones dejaron el temor atrás, la amenaza había terminado. Nosotros nos habíamos enterado que el Hokage Hiruzen Sarutobi había sobrevivido.
Además, de que a quien llamaban Zetsu había robado poderosas técnicas de naciones y de ahi que obtuvo ese poder brillante con el que mato a quien era su jefe. Supongo el secreto de como crearlo se lo llevó a la tumba.
También se rumora que elegirían a un nuevo hokage, entre ellos suena el nombre de Kakashi Hatake, quien nos había mandado una carta donde dice que él había informado a todo el mundo que yo había muerto y aunque a Óbito lo casarían o matarían si pone un pie en la aldea, nos dice que le demos tiempo al tiempo.
—Al sonreír... —no nunca, lo haré..
—Y yo me alegro de ello mi señora Uchiha... — sin importar lo que Deidara diga o las caras que haga, de ahora en adelante me dedicare hacer feliz a la persona que el destino me envió como un bello regalo.
FIN
Y hasta aquí llegamos.
Este One-shot está basado en el romance de Aquiles y Briseida de la película Troya..
¿Qué opinan? Los leo..
Disculpen los errores ortográficos, saludos, nos leemos pronto..
