Capítulo 3x22: "Los difuntos."
Residencia Gilbert
Ya con Elena de regreso a su casa, con mejor salud que el día anterior. Matt, Stefan y Elizabeth se ocuparon de ella. Elizabeth al rato quedó sola en la planta baja recogiendo la manta que Elena había dejado en el mueble doblándola. Llegó al pasillo, y estiró la mano para abrir el armario que se encontraba debajo de las escaleras. Guardó la manta y acomodó algunas cosas que estaban a punto de caer.
Cerró la puertita y colocó el pestillo, asegurándose que estuviese bien trabada. Pero luego de haber guardado la manta, sintió una extraña sensación. Miró en diferentes direcciones, y se quedó completamente tiesa al ver la puerta de entrada abierta de par en par. Pero eso no fue realmente lo que la paralizó. Había una figura parada del lado de adentro de la casa. "Stefan." llamó, volviendo la vista hacia el armario.
"¿Qué ocurre?" él se asomó por la abertura de la cocina pero antes de dar un paso más, se detuvo no muy lejos del marco. "Elijah."
"Hola de nuevo." saludó el aludido, llevándose las manos a los bolsillos y luego ladeó la cabeza lentamente. "Creo que necesitamos hablar."
"Todo lo que necesitamos es quitarle esa estaca." explicó Elijah en la mesa del comedor, razonando su trato con todos. "Una vez que lo hayan desarmado, y con el arma en mi poder, mi familia se dispersará hasta los confines de la Tierra y Alaric nos seguirá."
"Y tú solo... correras." Stefan dijo sentándose en la silla al lado de la de Elena.
"Lo hemos hecho antes." estuvo de acuerdo Elijah. "Klaus y Rebekah pasaron la mayor parte de los mil años evadiendo a mi padre... ¿Qué es otro medio siglo mientras Elena sea capaz de vivir el resto de su vida humana?"
"Finalmente lo detuvimos, Elijah." comenzó Elena con su voz casi desesperada. "Pero después de todo lo que nos ha hecho, no puedo dejar que Klaus vuelva."
"Te doy mi palabra, Elena, no reviviré a Klaus dentro de la tuya, ni siquiera dentro de la vida de tus hijos." Elijah se quedó en silencio por un momento mientras se fijaba en el mantel que se enderezó frente a él. "Quizás eso le enseñe algunos modales."
"¿Por qué debería confiar en ti?" Matt exigió. "Todo lo que han hecho es fastidiarla y arruinarle la vida."
"Y por eso, estoy profundamente avergonzado." dijo Elijah. "Pero debes saber esto: ella podría haber muerto en el instante en que entré por esa puerta esta noche... Entonces, Elena, te dejo la decisión de decidir si confiar en mí o no."
"¡No!" la voz de Damon respondió a través del teléfono que estaba en el altavoz, en la mesa. "¡Hola! ¿Esa conmoción cerebral te causó daño cerebral, Elena? ¡Sus lunáticos hermanos te matarán a la primera oportunidad que tengan!"
"Tiene razón." Elizabeth intervino por primera vez. "¿Qué hay de ellos?"
"Rebekah y Kol respetarán los términos... Si nos das el cuerpo de Klaus, Elena no sufrirá ningún daño." prometió Elijah. "¿Tenemos un trato?"
"¡No!" Damon gritó a través del teléfono. "¡No, no, no, no! ¿Ya he dicho que no? ¡No!"
"Elena, depende de ti." le dijo Stefan sin más que un momento de vacilación.
"¡Oh, vamos!"
"Tenemos un trato." Elena estuvo de acuerdo con un gesto de asentimiento, ganándose otro de Elijah.
"Gracias." aceptó amablemente, y sutilmente volvió la cabeza hacia Elizabeth, sin que ella se diera cuenta mirándola detalladamente buscando algo en la joven que tanto él como sus hermanos habían perdido siglos atrás. Y varias de sus sospechas apuntaban a Elizabeth Whitmore. Los rasgos físicamente, eran muy notorios, por lo que solo tendrían que esperar una última pista para afirmar si sus sospechas eran ciertas.
Elizabeth estaba sentada en los escalones del porche de la casa de Elena, mirando la noche en su mejor apogeo con las luces de la luna alumbrando todo delante de ella.
"Me estaba preguntando donde estabas." Stefan dijo saliendo de la casa parándose junto a la puerta. "¿Puedo acompañarte?"
"Claro que sí." Elizabeth asintió. Cuando él se sentó a su lado ella le sonrió. "¿Todo en orden?"
"Todo en orden." respondió él. "Elena se ha ido a dormir y Matt se irá en breve."
Elizabeth asintió lentamente mientras se acomodaba el cabello. "¿Se sabe algo de Jeremy?" cuando Stefan negó, suspiró. "No fue buena idea involucrarlo... Esperemos que el Dr. Saltzman no le haga daño-"
"Él estará bien." Stefan le aseguró sin darle tiempo a finalizar. "Es más, todos estamos a salvo en la fuerza de los números, sólo así seremos capaz de desarmar a Alaric." cuando ella solo afirmó sin decir nada más frunció el ceño. "Oye, sé que no estás así solo por Jeremy únicamente... ¿Qué ocurre?"
Elizabeth respiró hondo y expulsó el aire por la boca. "Creo que no sería justo ocultarlo por mucho más."
"¿Qué cosa?" Stefan se arrimó aún más y agarró la mano de ella. "¿De qué hablas?"
Elizabeth miró a Stefan que la miraba fijamente a los ojos. Verde hoja sobre celeste cielo. La más pura honestidad, investigando al más oscuro secreto. Él estaba viendo a través de ella... Con un suspiro se puso de pie para mirar a la Luna. "Marcos vendrá por mí y me iré de Mystic Falls para siempre."
"¿Qué?" Stefan se puso de pie también. "¿Por qué?"
"Si Elijah cumple su palabra y se lleva a Klaus para siempre, Marcos y yo no tendremos que correr más." Elizabeth le dijo. "Él dijo que me llevaría lejos de este pueblo para comenzar una nueva vida. Y yo jamás lo dejaría solo, así que acepte irme con él... Tal vez es lo mejor para mí." cuando Stefan la miró con una expresión ilegible se acercó a él para tomar sus manos. "Quiero que me prometas algo."
"Lo que sea." Stefan asintió, acercándose también.
"Ya que no voy a estar con ustedes, quiero que cuides de nuestros amigos." pidió Elizabeth con voz entrecortada. "No sé qué haría si algo llegase a pasarles... Ellos, al igual que tú, son lo más importante que tengo en mi vida."
"¿Y Damon?" Stefan preguntó.
"Ya me despedire yo misma de él... Tengo que verlo en el almacenamiento." Elizabeth suspiró antes de sacudir la cabeza. "De verdad los extrañaré."
Stefan estiró sus brazos y con ellos rodeó su cuerpo, atrayéndola hacia adelante. "Nosotros igual."
Ambos duraron así un tiempo hasta que el teléfono de Elizabeth vibró. "Lo siento..." ella le dijo a Stefan cuando se separaron y miro el mensaje de Damon diciendole que la esperaba en el almacenamiento. Ella suspiró antes de mirar a Stefan. "Creo que debo irme... Te vere luego."
"Eso espero." dijo él sonriendo un poco.
Elizabeth le devolvió el gesto antes de volverse para irse.
"¡Espera!" Stefan se acercó a ella, cerrando sus dedos alrededor de su antebrazo deteniendola.
"¿Qué ocurre?" Elizabeth se volvió hacia él... Su rostro estaba sereno, pero sus ojos se encontraban nerviosos. "¿Pasa algo?"
"Quiero... quiero darte algo." Stefan murmuró, deslizando su mano lentamente al tiempo que acortaba la distancia dando pasos cortos. Elizabeth retrocedió pero él siguió avanzando y tomó su rostro entre sus dedos. Su tacto era algo... inestable, pero su determinación era bastante segura. Él inclinó levemente la cabeza hacia el costado y fue tirando de ella hacia adelante. Y antes de que ella lo detuviera él posicionó sus labios sobre los suyos y su agarre se hizo más fuerte... Stefan la estaba besando una vez más.
En medio de tanta confusión, no supo que hacer. Una parte de ella quería alejarlo, pero la otra parte, la irracional, la encargada de hacer que todo se saliera de control y la que provocaba que hiciera todas las idioteces que se pudieran ocurrir, la tentó a obedecer. Poseyendo toda su cordura, correspondió al beso. Se vió obligada a cerrar los ojos y dejarse llevar por la situación del momento. De todas maneras tal vez sería la última vez que se vieran. Subió sus dedos lentamente por su mentón, tocando los bordes de su boca y con un dedo comenzó a dibujar su comisura.
Él deslizó tímidamente sus manos por sus brazos y bajó para luego entrelazar sus dedos sobre su espalda. Elizabeth sabía que eso no estaba bien, pero se dejó llevar por el momento. Sus respiraciones se unieron, tornándose suaves. De repente la parte racional de ella se activó.
"No..." masculló, apartandose del beso y soltando todo el aire que tenía contenido en sus pulmones. Stefan aún la sostenía y la cercanía todavía era invasiva. "No debemos. Te dije que no lo intentaras más... ¿Por qué lo has hecho?"
"Lo hice en caso de que no haya un después." dijo Stefan en voz baja sin sentirse para nada arrepentido.
Elizabeth se apartó de él poniendo una distancia prudente. "Eso estuvo mal-"
"No para mí." Stefan la interrumpió. "Solo... tenía que hacerlo."
"No esta bien, Stefan. No quiero que te lastimes." Elizabeth miró a sus ojos penetrando los de ella. La miraba con cuidado, gentil, como si él quisiera llevarla muy lejos de ahí.
"Es por Damon, ¿verdad?." preguntó Stefan con la mirada en el suelo.
"Damon no tiene que ver con esto." Elizabeth sacudió la cabeza. "Esto tiene que ver con que, no quiero que te lastimes por mi culpa... Tal vez estas confundido por tu separación de Elena y reflejaste eso en mí."
"Al principio si." Stefan susurró. "Pero después no lo fue... Tu tomaste el lugar de Elena."
"Stefan... No soy como Elena." Elizabeth murmuró suavemente. "No soy lo que necesitas-"
"¿Quien dice que no?" Stefan interrumpió molesto.
"¡Yo!" Elizabeth soltó, negando luego con la cabeza. "Ésto no puede volver a pasar... No con Jeremy en medio."
"¿Jeremy?" Stefan frunció el ceño. "¿Qué tiene que ver Jeremy?"
"Tiene que ver porque... creo que quiero intentar ser feliz junto a él." explicó Elizabeth con sinceridad. "Desde que lo conozco Jeremy le ha hecho bien a mi vida. Quizás él sea eso que he esperado encontrar por años en una persona. Pero no podré descubrirlo si seguimos haciendo ésto." terminó señalandolos a los dos. "Lo siento."
Con una profunda respiración para calmarse, Stefan se acercó a ella lentamente. "Escucha, a pesar de todo nosotros seguimos siendo amigos, ¿esta bien?" espero que asintiera para continuar. "Pero no puedo olvidar que este beso significa algo."
"Esto jamás pasará otra vez, Stefan." Elizabeth susurró con sería determinación. "No debe pasar de nuevo." sin decir nada más utilizó su velocidad vampiro a para salir rapidamente de allí.
Almacén
Más tarde Damon y Elizabeth salieron de un ascensor a una sala de unidades de almacenamiento.
"¿Sabes, no estoy a medio camino de Virginia y Elena vende nuestras almas a los Originales?" Damon dijo con sarcasmo.
"Fue su elección." Elizabeth dijo restándole importancia.
"¿Sabes qué más es su elección? Todo lo malo."
"¿Dónde está el cuerpo?" preguntó ella ignorándolo.
"Oculto... Iba a usar la Unidad 666, pero pensé que sería un poco obvio. Así que..." Damon bromeó cuando se detuvieron delante de una unidad. 1020. Mini nevera, un par de jaulas de pájaros, una caja de viejos Playboys. Damon abrió la puerta del obturador de la unidad. Una carne jerkified Original.
Elizabeth abrió el ataúd enseguida. El cuerpo encadenado y desecado de Klaus se encontraba dentro de él. De repente, el híbrido abrió los ojos mirándolos.
"Oh, espeluznante." dijo Damon haciendo una mueca.
"Necesito un minuto." Elizabeth pidió aun mirando a Klaus.
"Solo coloca el localizador de bruja, la batiseñal o lo que sea y terminemos con esto, Elizabeth." replicó Damon negándose a salir.
"Elena y Jeremy perdieron a Jenna y a Alaric por culpa de él." dijo Elizabeth entre dientes. "Tyler es un híbrido, Marcos esta huyendo por su culpa, me persiguió durante siglos... Clavó una estaca en mi corazón... ¿Podrías darme un minuto solo para apreciar como se ve de esta manera?"
"Esta bien." Damon aceptó no muy seguro. "Un minuto." dijo antes de salir de la bóveda dejando a Elizabeth sola con Klaus.
"Deberías quemarte en el infierno." Elizabeth se inclinó sobre el ataúd, mirando a Klaus fijamente. "Pero si mueres, también lo harán mis amigos... ¿Qué se supone que debo hacer al respecto?" respiró hondo, porque la decisión que tomaría no seria fácil, pero no quería correr el riesgo de perder a todos sus amigos.
Damon se estaba relajando en un sofá en una unidad. Él estaba en el teléfono con Stefan que estaba saliendo de la casa Gilbert.
"¿Como esta Elena?" Damon le preguntó a Stefan mientras esperaba a que Rebekah viniera por su disecado hermano.
"Esta bien, solo que los medicamentos que Meredith le dio le causan mucho cansancio, pero esta bien, Damon." Stefan aseguró. "¿Y Elizabeth?"
"Elizabeth esta haciendo su trabajo. Rebekah debería estar aquí pronto para recoger el cuerpo." Damon dijo rodando los ojos.
"Tengo a Caroline y a Elijah en su lugar." Stefan dijo por el teléfono. "Jeremy nos llevará a Alaric. Tan pronto como consigamos la estaca, entrega el ataúd y sal de alli. Alaric tiene a la mitad de la policía buscando el auto de Klaus."
"Lo haré... Tengo que irme, la hermana Original está aquí."
Damon colgó y salió de la unidad. "Ya era hora, sexy Bex."
Alaric salió de detrás de Damon agarrándolo en un estrangulamiento. "¿Dónde está Klaus?"
"¿Cómo me encontraste?" Damon luchó contra Alaric pero era igual de fuerte que él.
"Bueno, te sorprendería que tan competente es la aplicación de la ley cuando no esta corrompida por vampiros." Alaric dijo secamente "Ahora, ¿dónde está Klaus?"
"En una bodega." dijo Damon sarcásticamente viendo todas las puertas. "Solo que hay miles de ellas en las que podría estar."
Sin miramientos Alaric le rompió el cuello y lo colocó en el suelo, antes de caminar para comenzar su búsqueda del cuerpo de Klaus.
Alaric rompió las cerraduras abriendo las puertas a varias de las unidades de almacenamiento. Después de no poder encontrar el cuerpo de Klaus en ninguno de ellos, escuchó pasos.
"¡Damon! ¿dónde estás?" Elizabeth llamó mirando a su alrededor.
Alaric sacó la estaca de roble blanco y comenzó a caminar hacia la voz de Elizabeth.
"Damon, esto no es gracioso, Rebekah debe estar por llegar y de verdad no quiero tener nada que ver con ella."
Elizabeth caminó por una línea de unidades de almacenamiento mientras Alaric siguió buscándola. Caminó por las pasillos de las bóvedas buscando a Damon, pero no lo vió por ninguna parte.
"Dam.." enseguida sintió a Damon cubrir su boca con su mano mientras la empujaba contra la pared.
"Shhhh." Damon la silenció mirando a su alrededor. "Alaric está aquí." la soltó y salieron de ahí lo mas rápido que pudieron sin hacer ruido. Elizabeth lo siguió hasta el lugar donde tenian a Klaus y lo ayudó a sacar el ataúd en silencio.
Mientras Alaric continuó buscando a Elizabeth, pero se detuvo frente a la unidad de almacenamiento 1020 y vió que la cerradura se habia roto.
En otra parte del almacén, Elizabeth y Damon estában llevando el ataúd de Klaus a un auto.
"Damon no se si lo que hice esta bien pero..." Elizabeth iba a decirle lo que había hecho con Klaus, pero todo pasó demasiado rápido... Alaric, con su velocidad vampírica, la tomó por el cuello estrellandola contra la parte trasera del vehículo, tirándola luego con demasiada fuerza hacía una esquina.
Damon corrió hacia él tratando de atacarlo, pero antes de que pudiera hacerle algo, éste lo pateó con tanta fuerza que terminó en el suelo.
Cuando Alaric sacó la estaca de roble blanco y comenzó a caminar hacia el ataúd, Elizabeth se puso de pie por lo que comenzó a atacarlo con un aneurisma de gran intensidad... Sin embargo él comenzó a gritar de dolor. Pero no contaba con que iría a velocidad vampírica hacia ella y la mordería en el cuello hasta que el aneurisma desapareciera.
Trato de no parar, pero el dolor se hizo fuerte asi que paro con el hechizo... Alaric enseguida la empujó con fuerza, haciendo que golpeara el suelo con fuerza.
Éste abrió el ataúd sacando la estaca de roble blanco. Los ojos de Klaus se abrieron enseguida, pero antes que clavara la estaca, de la nada y para impresion de Elizabeth apareció Marcos, y ambos empezaron a pelearse.
Elizabeth se apresuró a levantarse, en el momento que llegó Rebekah viendo toda la escena. Su mirada se desvió al ataud de su hermano y sin pensarlo aceleró parandose cerca.
Alaric empujó a Marcos lejos de él con fuerza antes de acercarse a velocidad a Rebekah apartandola de un golpe del ataud de Klaus. "Es hora de terminar con esto." gruñó abriendo el ataúd encajándole así la estaca a Klaus en el corazón.
"¡No!" Rebekah gritó tratando de acercarse al ataud de Klaus.
"Ahora sigues tú." Alaric dijo mirándola fijamente. Cuando dió un paso hacia ella Marcos volvió a atacarlo renovando la pelea entre ellos.
Pero al momento en que Alaric logró dominar a Marcos facilmente, Elizabeth vió con horror como Alaric estacaba a Marcos en el corazón. "¡No! ¡No! ¡No!"
Enseguida Damon la agarró para que no pudiera correr hasta ellos antes de mirar a Rebekah. "Rebekah, sal de aquí." ella miró unos segundos a Klaus quemandose antes de salir de ahi en menos de dos segundos sin pensarlo dos veces.
Mientras el cuerpo de Marcos estába desecandose en el suelo, Elizabeth siguió gritando y llorando en los brazos de Damon.
Alaric se dió la vuelta mirándola con cierto pesar en sus ojos. "Lo siento pero estaba en mi camino."
Empujando a Damon lejos de ella, Elizabeth corrió hacia Alaric con rabia, pero este salió lejos en busca de Rebekah... Con la respiración agitada se acercó rapidamente al cuerpo desecado de Marcos quitándole la estaca del pecho. "¡No, por favor!" suplicó acunando el cuerpo de la persona que había llegado a querer como un padre... Su respiración comenzó a entrecortarse por el dolor. "¡Por favor, Marcos tu no! ¡No me dejes!" al ver que su piel se tornaba gris lentamente no pudo evitar soltar un grito de agonía pura, mientras acunaba más apretadamente su cuerpo.
Por su parte, Damon fue empujado hacia atrás por magia descontrolada que comenzó a salir de ella. El suelo empezó a temblar ligeramente y el viento incrementó su fuerza a medida que los sollozos de Elizabeth se hicieron cada vez mas dolorosos. "Elizabeth." cuando se acercó tocando ligeramente su hombro, notó que el temblor y el aire menguaron su fuerza después de un rato pero ella aún no se movió de la misma posición... Su mirada estaba fijamente mirando a la nada. "Oye, Elizabeth." intentó de nuevo logrando que lo mirara unos segundos antes de que regresara su atención al cuerpo sin vida de Marcos. "Debemos irnos... Todo estará bien."
"No." Elizabeth interrumpió sin emoción, moviéndose al mismo tiempo para dejar el cuerpo desecado de Marcos en el suelo, antes de levantarse. "No estaré bien, nada estará bien." con eso salió de allí dejando a Damon sólo con el cuerpo de Marcos.
Mansión Lockwood
Elizabeth entró en las ruinas bajo la mansión Lockwood y se detuvo cuando terminó de bajar el ultimo escalón. "Se que estas aquí." llamó con voz temblorosa mirando a su alrededor.
"Debo decir, que ejecutaste el hechizo de intercambio brillantemente." dijo Klaus saliendo de las sombras en el cuerpo de Tyler. "No pensé que lo pudieras hacer."
"Lo hice para salvar a mis amigos Klaus... No a ti." aclaró Elizabeth sin emoción aguantando el dolor en su pecho por la pérdida de Marcos.
"Los espíritus no estarán felices contigo." dijo Klaus cruzándose de brazos.
"Los espíritus no pueden decirme que hacer, porque nunca les he hecho caso." dijo Elizabeth acercándose a Klaus. "Acabé de ser acosada por todos ustedes... Lo hice porque quería." con eso se fue dejando a Klaus solo en su nuevo cuerpo temporal.
Pensión Salvatore
Ahora en la pensión, el cuerpo de Marcos fue colocado en la cama de Elizabeth, mientras ella no había dejado su lado desde que lo habian dejado allí.
"No debí haberlo llamado." murmuró entre sollozos mientras sostenía la mano de Marcos con fuerza.
"No debes culparte." Jeremy dijo no muy lejos de ella. "No sabías."
"Él fue prácticamente mi padre Jeremy." Elizabeth lo miró brevemente dejando ver el dolor y el tormento en sus ojos. "Nunca tuvo paz conmigo, siempre me cuidó, y yo jamás le agradecí... Ni siquiera recuerdo lo último que le dije cuando se fue." lloró decir. "Solo recuerdo cuando lo llamé, me moleste porque sentí que me estaba abandonando... Le dije cosas horribles-"
"Elizabeth..." Jeremy dió un paso hacia la muchacha, pero ella negó con la cabeza deteniéndolo.
"Jeremy, por favor déjame sola." Elizabeth pidió. "Necesito estar sola."
"Claro..." Jeremy asintió caminando hacia la puerta de la habitación, deteniéndose un momento para mirarla antes de salir y dejarla sola.
Cuando supo que estaba sola Elizabeth sonrió levemente entre lágrimas mientras miraba a Marcos. "Perdóname por esto Marcos, es mi culpa que estés muerto, no debí haberte llamado." abrió su mente y llegó un recuerdo de cuando estaba aprendiendo a ser vampiro.
Comienzo flashback
"Marcos, no quiero hacer esto." dijo Elizabeth viendo el cuerpo de un hombre joven en el suelo.
"Si no lo intentas al menos, nunca aprenderás cariño." dijo Marcos acercándose a ella.
"No quiero aprender." aseguró Elizabeth. "¿Que pasa si lastimo a más personas inocentes?"
"No lo harás." Marcos le aseguró agarrando la cara de Elizabeth.
"Pero viste lo que casi hice cuando me transforme en vampiro." Elizabeth le dijo con ojos llorosos. "No quiero que pase de nuevo."
"No pasara." Marcos le aseguró mientras la volteó empujandola hacia el cuerpo del hombre en el suelo. "Si pierdes el control yo mismo te detendre."
"Lo voy a matar." Elizabeth sollozó deteniendose delante del hombre joven. "Tengo miedo."
"No vas a matarlo." Marcos le dijo. "Puedes hacerlo."
"No me dejes sola Marcos." le suplicó Elizabeth inclinandose hacia el sujeto.
"No lo hare." Marcos le aseguró. "Hasta que estés lista. Nunca te dejaré sola."
"No estoy lista." Elizabeth le replicó volteando a mirar a Marcos que le sonrió.
"Si, lo estas."
Fin flashback
Elizabeth abrió los ojos cayendo en la realidad. "Marcos." dijo ella acariciando su mejilla. "Marcos no me dejes sola por favor... No estoy lista." sollozó ella mientras se acercaba a él abrazándolo con fuerza mientras sus lágrimas caian y sentía que algo dentro de ella se destrozaba y un sentimiento de vacío la llenaba igual que cuando sus padres habían muerto. "Por favor... Aún te necesito."
Horas después Elizabeth abrió los ojos lentamente mientras caía en la realidad de donde estaba. Ella miró hacia el cuerpo de Marcos antes de levantarse lentamente del suelo. Salió de la habitación sin hacer mucho ruido para no despertar a nadie. Cuando lo logró caminó hacia la cocina para tomar un vaso con agua. Al entrar vio a Damon escribiendo en un cuaderno. "Lo siento." murmuró con voz monótona. "Solo vengo por agua."
"Adelante" Damon asintió mirándola con extrañeza mientras abría el refrigerador. Ella nunca había dicho lo que iba a hacer a nadie antes.
"¿Qué haces?" preguntó Elizabeth intentando mirar el cuaderno.
"Nada, solo notas." Damon dijo tapando el cuaderno rápidamente.
"¿Notas, o estas escribiendo un diario?" Elizabeth le dijo bromeando un poco antes de ponerse seria otra vez. "Eso es lindo, creo."
"Tal vez... Pero no es un diario exactamente..." Damon murmuró.
"No tienes que contarlo." Elizabeth interrumpió. "Quiero decir... Hoy será el peor día de mi vida... No quiero pensar o hablar de nada. No me siento como para ser amiga de nadie." cuando él asintió lentamente, suspiró. "Sin ofender."
"Claro, lo entiendo." aceptó Damon un poco incómodo por su actitud distante.
"Genial." dijo Elizabeth dejando el vaso en la barra de la cocina antes de irse.
"Elizabeth." Damon llamó a Elizabeth que se detuvo pero sin voltear a verlo. "Hoy no es el peor día de tu vida... Hoy y mañana... serán pan comido. El peor día será la semana que viene, cuando no haya nada, solo silencio."
Sin decirle nada, Elizabeth salió de la cocina recargándose contra una pared... Allí respiró hondo para no llorar como una pequeña vampiro que se alimentaba por primera vez sin matar a nadie.
Nota: Hola amigos, ¿cómo han estado?
Así quedó ésta última temporada... ¿Qué les pareció? ¿Qué creen que sucederá ahora?
Solo puedo adelantarles que veremos un lado más oscuro en mi personaje de Elizabeth...
Pronto estaré publicando el primer capitulo de la próxima temporada... Esten pendientes ;)
