Buenas, aqui les traigo un remake de mi fic. Honestamente cometí varios errores y buscaba arreglarlos como podía. Así que disfruten de este fic.

Antes que nada, ninguna de las franquicias me pertenecen: Fate Grand Order pertenece a Type-Moon, Honkai 3D Impact pertenece a Mihoyo, y Asura's Wrath pertenece a Capcom.

Sin más que decir, comencemos con el Grand Order:

-Hola - personajes hablando.

-Hola - pensamientos y comunicación telepática.

-"Hola" - comunicaciones.


Capítulo 1: Mithra

Las teclas sonaban mientras el operario las presionaba rápidamente. Sus ojos no se despegaba de la pantalla frente a él mientras seguía analizando los datos.

Se encontraba en lo que era un laboratorio tecnológico, con varias computadoras analizando una figura dentro de un tanque verdoso con varios cables conectados para su estudio. Toda esta tecnología era algo inconcebible para el tipo de ser que era…no es que le importe.

-Mmh… la sangre del dragón se ha estabilizado. Era de suponer que usar algo como el primer dragón Albion iba a tener consecuencias pero… - la figura se giró para ver a la otra dentro del tubo… no parecia tener mas de 10 años, con cabello negro flotando dentro de liquido, una apariencia claramente femenina con escamas surgiendo en su cuerpo…

El hombre soltó un suspiro. Su cabello rubio corto parecía de oro mientras esos ojos fríos miraban a otro "fracaso".

-Parece que un cuerpo con sangre dragón tampoco es adecuado para ti… no importa, ya lograre traerte. Tal vez solo espere a otra de esas guerras del…

PELIGRO PELIGRO PELIGRO

Las alarmas en las computadoras empezaron a sonar para su sorpresa… los análisis de la chica se estaban volviendo locos, en especial…

-¡¿Qué ocurre?! - el rubio se giró a otra computadora, analizando los resultados - Energía desconocida en aumento…estructura corporal cambiando ¿como…? ¡espera…! - sus ojos se abrieron cuando la computadora analizaba la energía desconocida.

Esta sensación… estas lecturas… se giró hacia la chica, viendo marcas extrañas apareciendo en su cuerpo mientras las escamas, cuerno, cola y alas retrocedían hasta desaparecer en su cuerpo.

-Esto…estructura corporal y ADN cambiando… ¿dos núcleos? - cuestiono el rubio anonadado - esto…¿Este mundo también será atacado por el Honkai?

El rubio se giró hacia la chica… su puño se apretó mientras se acercaba a un arma cercana…

-Yo que tu no lo hago.

El rubio se detuvo cuando giro hacia un espacio donde no había nadie previamente…hasta que ese brillo arcoiris se noto. El rubio se cubrió los ojos ante el intenso brillo, hasta que noto como este disminuia lentamente… y vio varias figuras.

El primero era un hombre con barba y cabello blanco con piel pálida y un traje elegante clásico en un magus. Sus ojos rojos tenían un brillo de locura y diversión… una clara MALA SEÑAL considerando quien era.

El segundo era un hombre de pelo platinado un poco gris, con un traje blanco bien cuidado y un porte de noble. Aun así, no emanaba el mismo aire elitista que estos.

El tercero era otro hombre, de pelo castaño con pocos mechones blancos y lentes. Usaba un traje marrón con gabardina y se sostiene con un bastón…y sabía bien que era una mentira. Este bastón era más peligroso de lo que parecía.

Y la última era una mujer joven. En sus 18 años, de pelo rojo ardiente y una mirada fiera que denotaba una voluntad fuerte.

El rubio vio con los ojos entrecerrados a los recién llegados.

-Ha pasado tiempo - el castaño se ajustó los lentes -Otto.

-Welt Yang, creí que quedamos claros en que no te metieras en mis asuntos - el rubio conocido como Otto dirigió su mirada al resto - Y veo que no viniste solo…tu "Master" parece más fuerte…

Su mirada se dirigió al peliplateado.

-Seños Animusphere, supongo que el humano que cree está funcionando bien.

-Mashu se encuentra en perfectas condiciones - el Animusphere ni se inmuto - pero me trajeron por otra cosa.

La mirada de Otto se dirigió hacia el último.

-Y supongo que es algo que amerita la participación del Mago Marshal.

-Ohohoho no planeo perderme algo así - declaró el vampiro portador de la Segunda Magia, Zelretch - No sabes que has hecho, Otto.

Los ojos del vampiro ven como el cabello negro de la chica se torna blanco puro lentamente.

-Si, muy para mi pesar…he creado una Herrscher - reveló el rubio apretando su puño.

Herrscher…son seres que poseen niveles masivos y monstruosos de energía Honkai, una rara energía que humanos normales no podrían soportar, que puede crear criaturas con el único objetivo de eliminar a la humanidad. Y los Herrshcher son aquellos que poseen tales niveles que dominan algún elemento o aspecto de la existencia.

El y Welt Yang… poseen recuerdos de otras vidas en un mundo azotado por este fenómeno… y por eso eran los más consternados por esto.

El Honkai genera eventos conocidos como "impactos", de menor o masiva escala, que podrían acabar con buena parte de la humanidad en una zona y como consecuencia con varios en las áreas cercanas. El nacimiento de un Herrscher viene acompañado de eso… pero eso era en su mundo.

En este, como investigaron, eventos así son más complicados de que ocurran. Hay una importante diferencia entre este y su anterior mundo: Defensas.

Este mundo posee defensas: desde dos entidades que buscan proteger el mundo o a la humanidad respectivamente, hasta una propia fuerza del equilibrio. Si un Impacto Honkai ocurriera, se activarian los protocolos de salvar el mundo.

Por eso era tan desconcertante que ahora frente a ellos haya otra Herrscher, sin causar un evento apocalíptico.

-Mhhh sí, creo que puedo explicar que ocurre y el porque me tomé la molestia de traer a Animusphere - el vampiro camino hacia la cápsula, posando su mano en ella - ¿No se han cuestionado de dónde vino el Honkai?

-...Más de una vez - la reencarnación y el demi-servant dijeron al mismo tiempo con distintos tonos. Y no mentían sobre eso.

-Pues, déjenme aclararles… el Honkai, una vez fue conocido como…

Los ojos de los 4 oyentes se ensancharon mientras el vampiro hablaba… secretos que jamás se habrían pensado revelados de manera tan casual y compacta…

-Si ella reencarnó, es probable que fuera una coincidencia… buscaba un cuerpo capaz de soportar su alma y núcleo - Zelretch dijo mirando a la joven en el tanque - Incluso explica cómo es que no se convirtió en una loca destructora como las otras… aunque, parece que su verdadero poder, incluso la parte dragón, se ha sellado.

¿Akasha o la Counter Force tendrán que ver en esto? kukuku estos misterios son interesantes.

-...Aaahhh esto es demasiado dolor de cabeza para mí - confesó la pelirroja de nombre Himeko, rascándose la cabeza - Apenas comprendo bien todo… solo se que no podemos dejartela, Otto Apocalips.

-Es una clara amenaza para todo… o mi clave para encontrarla - Otto miro a la joven albina que creo - No planeo sol…

En eso…una figura pequeña salida de la nada saltó hasta la cabeza de Otto…

PAAAAAMMMM

-¡Compórtate!

Otto se sobo la zona golpeada por una niña de pelo blanco y ojos rojos, vestida cuál monja. La pequeña tenía sus manos en sus caderas con una mirada intensa y seria.

-Maldita sea Theresa - gruño Otto mirando a la niña - ¿Cómo llegaste a aquí? estoy seguro que estabas con… - Otto le lanzó una mirada a Zelretch quien solo se rio. Ese bastardo la trajo

-Así como todas, esta niña tiene el derecho de una buena vida - declaró Theresa apuntándole, con palabras que no coinciden con una niña de su edad - Y no sabemos qué efecto tendría el Honkai en este mundo. Asi que nada de experimentos.

-...Tsk, hagan lo que quieran - Otto se dio la vuelta y se acercó a su computadora…tenía mejores cosas que hacer.

Theresa se rio por eso, antes de ver a la chica en el tubo… era…era muy… MUY parecida a…

-Se parecen ¿no? - dijo Welt y esta asintió.

-...Odio cuando no se de qué hablan - dijo Himeko con un suspiro… va a necesitar una buena bebida luego.

Theresa le dirigió una mirada… incluso si era 100% parecida a la Himeko que conoció, no era ella o tenía sus recuerdos. Otto tenía algunas teorías sobre eso:

Otto, ella y cierto alguien tenían sangre especial… que reencarnaron aquí podría deberse a eso, manteniendo sus recuerdos incluso.

Himeko por otro lado era una humana pura, sin sangre especial salvo una fuerte determinación, y una suerte desastrosa. Acabo metida en un evento en Japón que cambió su mundo en buena parte.

La Cuarta Guerra del Santo Grial. El ritual donde uno podría alcanzar el milagro.

Ella entró por mera mala suerte, luego de que un loco asesino buscará matarla a ella y su familia… su profesor, Welt Yang, estaba ahí ayudándole cuando pasó. Estuvo al borde de morir como ella, pero su deseo de vivir fue determinante para que el grial la eligiera.

Y su servant… terminó siendo Welt Yang, obteniendo las habilidades y recuerdos del de su mundo. Juntos sobrevivieron a esa guerra y, con ayuda de cierta familia fundadora de la guerra, limpiaron el grial de su corrupción.

¿Por qué Otto no participó? el grial no lo eligió y en ese entonces Otto no sabía de la Guerra.

-Entonces ¿qué planean hacer? - pregunto Animusphere haciendo recordar que estaba ahí - Podría llevarla a Chaldea…

-Ohoho eso será en unos años - dijo divertido el vampiro presente - pero creo que se dónde podrían enviarla ¿no?

Theresa…sonrió mostrando un par de colmillos.

En otra parte:

-Aaahh que dia. Y Theresa desapareció de repente… ¡Al menos debería decirle a su hermano a donde se fue!

Se quejó un hombre adulto. Su pelo blanco estaba atado con una cola de caballo y tenía ojos azules. Usaba un chaleco azul con mangas hasta el antebrazo, una camiseta negra y jeans negros con botas de combate.

El era Siegfried…Siegfried Kaslana.

Los Kaslana existían en este mundo y… no eran tan distintos a su familia en el otro mundo. Verán, en su mundo los Kaslana son una familia que lucha contra el Honkai en cada generación. Aquí, casi lo mismo cambiando Honkai con vampiros.

Si, ahora era un Van Helsing.

El clan también tiene una particularidad… al nacer, cada Kaslana se somete a un ritual donde se le da sangre de una bestia mágica particular. Esto para volverlos más capaces contra los vampiros, y teniéndolos desde tan jóvenes es que son entrenados para dominar estos poderes. Aquí entraba la sangre Kaslana, que se adapta a la sangre de las bestias mágicas y las volvía parte del Kaslana.

Cuando nació, no mantuvo sus recuerdos…estos no aparecieron hasta sus 18 años, donde en un evento contra un vampiro donde casi muere, estos regresaron… junto a algo más.

Hoy en día el número de Kaslana era tan bajo que se contaba con una mano, así que no estaban en una gran mansión ni nada. Es por eso que decidió instalarse en una cabaña en las montañas nevadas, junto a…

SLAM

-¡Ya volví Siegfried!

El albino sonrió ante esa voz, girando para toparse con Theresa. La pequeña albina había abierto la puerta de la cabaña dejando entrar el aire frío momentáneamente.

-Yoh Theresa, temía que tardaras bastante - Siegfried acaricio su cabeza y esta la apartó con un rubor.

-Urusai, el abuelo solo hizo algo inesperado.

-...¿Significa que puedo meterle una bala en la cabeza?

-No - Siegfried suspiro decepcionado… valía la pena intentarlo - Pero en el buen lado ¡traje a alguien a la familia!

-...¿Que? - cuestiono Siegfried mientras Theresa se dirigía hacia la puerta.

-Oi vamos, presentante.

-No, no es…

-¡Vamos~!

Theresa tiro de quien estaba en la puerta, revelando a una niña de pelo blanco, con ojos rojos y marcas en todo su cuerpo… pero fue el rostro el que hizo que Siegfried sintiera su corazón detenerse.

-¿K-Kiana? - susurro Siegfried pero la albina nego.

-No…mi nombre…es Mithra - reveló la nueva albina mientras Theresa la abrazaba.

-Como no tiene a donde ir ¡decidí que será de la familia ahora!

-...¡Eso es algo que debes consultar primero! - gritó incrédulo el adulto en apariencia ¡esta chica pensaba demasiado por su cuenta!

-Si nos basamos en nuestras vidas privadas, soy mayor que tú - declaró Theresa apuntandole.

-Dilo cuando llegue al tarro de galletas…

-...Si…es…así…soy mayor…

Ambos miraron a Mithra, quien mantenía una poker face con un tono apagado. Theresa sintió escalofríos recordando a alguien así.

Mierda, espera que ella no sea una rara mezcla de esas tres chicas.

-...Aahh tal vez… - Siegfried se arrodillo frente a Mithra…y acaricio su cabeza suavemente- Es bueno conocerte. Soy Siegfried Kaslana.

-...Un placer…

Esta niña…¿qué habrá pasado en su anterior vida? Es como si tuviera algún destino de traer niños traumados.

3 meses después:

-¡Te digo que me dejes cocinar!

-¡Claro que no Theresa! ¡Tu último intento terminó explotando la cocina!

-¡Solía ser buena cocinera antes! ¡Es tu culpa que ahora no sea buena, señor "creo vida intentando cocinar arroz!

Theresa y su "hermano" chocaban cabezas mientras un relámpago chocaba en medio. Ninguno daba lugar para retroceder mientras su deseo de imponerse al otro tomaba más relevancia.

La pequeña loli vampira preparó su puño y Siegfried fue a su arma…

FIUSH FIUSH

Hasta que una cuchara con salsa y carne golpeó sus bocas, dejandolos mudos…y derritiéndose por el delicioso sabor.

-Dejen de discutir - ordenó Mithra, dejando una olla con carne, salsa y papas. Con un movimiento de su mano, platos, vasos y cubiertos aparecieron.

Cada cierto tiempo Welt venía de visita con Himeko y un doctor curioso. Algo de análisis rudimentario descubrió uno de los núcleos Herrscher en ella: Creación. Es similar al Herrscher de la Razón, algo curioso ya que fue el primero en aparecer en el otro mundo y la creación vino primero. Descubrió que Mithra es capaz de crear objetos que comprenda y conozca su composición.

¿Hasta dónde puede crear? pues… Theresa en broma dijo que sí puede hacer diamantes sus problemas económicos se resolverian. 12 horas después encontraron a Mithra frente a la computadora, aprendiendo la composición de gemas.

TOCK TOCK

-Ah, deben ser ellos - la joven albina se dirigió a la puerta y la abrió, sonriendo un poco - Himeko-san, Welt-san, Romani-san.

En la puerta se encontraban Himeko, Welt y un hombre de pelo naranja/rosa pálido con un abrigo.

-Hola Mithra - la pelirroja sonrió mientras acariciaba su cabeza -¿Llegamos tarde?

-No, recién puse la comida.

-No deberías esforzarte tanto - Romani declaró mientras le sonreía.

-Si no cocino, esos dos haran un desastre masivo - señaló Mithra con una linda poker face.

Justo cuando iba a cerrar, cierto rubio detuvo la puerta.

-Ah, Otto-san - Mithra vio a su "creador" por asi decirlo - ¿que hace aqui?

-Theresa me invitó - comentó Otto mientras cerraba la puerta - ¿Ha habido desperfectos o efectos secundarios?

-No se que efectos - Mithra inclinó la cabeza.

-La he revisado, está bien - señaló Romani mirando fijamente a Otto - ¿Por qué el interés?

-No la he visto en 3 meses, solo quería saber - Otto se encogió de hombros aunque Welt no le creyó.

-Oh ¿por qué tanta gente? - preguntó Siegfried confundido…y se ganó un sape de Theresa.

-Es tu cumpleaños, tarado.

-...Ah cierto…

-Temo por ella si eso es hereditario - confesó Himeko viendo a Mithra en la cocina, mientras preparaba algo.

-Diría por lo que vimos que no es una posibilidad -Welt Yang sonrió divertido - Por ahora disfrutemos.

5 años después:

SLASH

-Dame una, una sola razón para no matarte aquí y ahora - gruño Siegfried sosteniendo una espada con un filo ardiente.

El, Himeko, Welt, incluso Otto, Romani y el mismísimo Zelretch estaban ahí, aunque este último solo para ver el drama.

Y Siegfried le apuntaba a una mujer castaña de uniforme blanco perfectamente acomodado, con una mirada fría que a Welt y Otto le recordaban a cierto progenitor Kaslana de su mundo.

Ella era Bartholomei Lorelei, la heredera Bartholomei y Sub Directora de la Torre del Reloj, la llamada Reina… posiblemente el humano más poderoso sin alguna Magia Verdadera.

-Estas exagerando, Kaslana - dijo la mujer sin verse afectada por tener una espada que ardía como el sol apuntandole.

-¿Exagerando? ¡Mandaste a MI hija a pelear contra uno de los 27 ancestros! - rugió Siegfried. Sus ojos se afilaron como los de un reptil mientras escamas cubrían su cuerpo.

-Sobrevivió ¿no? y más fuerte ahora - los ojos de Lorelei se dirigieron hacia un objeto que descansaba contra la pared…una gran espada negra con filo rojo sangre y de aspecto bastante tecnológico.

-Lo que hiciste fue riesgoso - Welt ajustó sus lentes.

-No me hables de riesgos, Servant - los ojos de Lorelei brillaron, pero Himeko se interpuso.

-Y tu no creas que sabes con quien juegas - por un segundo el cabello de Himeko brilló mientras ambas tenían un duelo de miradas.

-Muy bien muy bien, las dos mujeres que pueden desatar un desastre natural deben calmarse

Otto se interpuso, separándolas antes de que se desate un infierno y un huracán.

-Repasemos qué pasó ¿si? - Otto miro a Lorelei - Viniste aquí, con poca información que obtuviste de Mithra Kaslana, buscando tu posible nuevo perro de ataque. Lograste convencerla aprovechando el como acabó Siegfried la última vez contra un Ancestro.

Siegfried hizo una mueca…subestimó la amenaza que eran los Ancestros comparados con los Apóstoles normales.

-Así que la sumaste a tu ataque al castillo de Louvre, en una luna carmesí que es donde son más poderosos los Ancestros - Otto casi se rió de la estupidez de la idea - Tenías un buen grupo de Ejecutores, tu propia guardia personal, y Mithra más Theresa…solo para que Louvre se burlara de ustedes y modificara su castillo, haciendo que se separen y sean presa más fácil. La mayoría de los Ejecutores murieron, tú y tu grupo acabaron fuera, y Mithra con Theresa dentro lidiando con los hijos de Louvre.

Con la resonancia de sangre, la luna roja y los códigos míticos en manos de ese vampiro…

-De no ser porque Theresa bebió la sangre de Mithra y le dio un impulso, no habrían salido de esa… - la mirada de Otto era intensa… si había algo que conservaba de su otra vida, fue su cariño por Theresa - Y luego acabaron enfrentando al mismo Louvre juego de la muerte de sus hijos.

Welt se cruzó de brazos.

-Donde Mithra descubrió su otro núcleo y elemento, mientras creaba esa espada.

Eso era otra cosa preocupante…por un lado, estaba ese núcleo y elemento. Ya habían determinado que uno era creación, que gobernaba sobre el espacio imaginario permitiendo crear objetos similar al Herrscher de la Razón… pero el otro era el opuesto, destrucción. Y dominaba el elemento cuántico manifestado como energía.

Era…curioso. Le recordaba a su heredera y su amiga, ambas portando la Razón y la Muerte…

Y esa espada…fue creada de repente, imbuida con los poderes de ambos núcleos. En palabras de este mundo, podría luchar con Noble Phantams y en su mundo, casi se podría llamar Llave Divina.

-Y solo salieron de ahí gracias a la llegada de ella… - Otto finalmente dirigió su mirada hacia otra zona de la casa, junto a los demás.

-¡Mantente alejada de ella, sanguijuela!

-¡Y tú no te metas, mocosa!

Una cabeza blanca chocaba con otra rubia, con el rojo chocando de ambos lados. No sabían bien cómo, pero la sangre de Mithra energizo a Theresa al punto de hacer que crezca, pasando de una niña a una joven adulta con medidas que solo pudo haber soñado. Incluso lo resalto con un vestido loligotico rojo y negro.

La otra mujer era una rubia de pelo corto con ojos rojos. Usaba un suéter blanco con una larga falda azul, y zapatos negros. Todo era un estilo muy simple, algo que no esperabas ver en ella… la princesa de los Ancestros Verdaderos, Arcueid Brunestrood.

Solo bastaba para ver el aura de deseo asesino que emanaba de Lorelei para saber que tanto le molesta la presencia de ambas.

Arcueid apareció en el castillo, buscando eliminar a Louvre por alguna antigua ley o algo así, pero el Ancestro ya la esperaba de antes. La princesa fue drenada y casi no la cuenta hasta que como con Theresa, Mithra le dio su sangre.

Luego de eso no había más castillo.

Y desde que trajeron a Mithra a la casa, estas dos han estado peleando…sabían que Theresa era algo siscon pero tal vez sea otra cosa.

Justo en eso, Romani salió de la habitación ganando la atención de todos.

-Estara bien, solo algo de descanso, comer y no dejar que dos chupasangre succionen más de la cuenta - Romani declaró apuntando a las dos vampiras.

-¿Ven? dije que estaría bien - Zelretch le resto importancia.

-Tu callado - gruño Siegfried y miró a Lorelei - Y tu, fuera de mi casa.

-Hm, no importa. Ya tengo lo que buscaba - Lorelei le quitó importancia mientras iba hacia la salida. Su mirada fría nunca abandonó ese rostro.

-...¿Qué es lo que buscas Zelretch? - cuestiono Welt, ahora con la atención puesta en el usuario de la Segunda Magia.

-Kukuku lo que siempre busco, entretenimiento - dijo el vampiro alzando su copa - Y veo que Mithra crece bien para lo que vendrá.

A nadie ahí le gusto eso… pero estaban seguros que no podrían quitarle información…excepto…

-Oi Zelretch ¿que planeas ahora? - pregunto curiosa Arcueid, inclinando su cabeza.

-Ohohoho solo diré que si sale bien, el mundo se salvará.

-...- Siegfried…saco de la nada un bate negro con marcas doradas y se lo dio a Theresa - sin piedad.

-Con gusto~

-¡Deja esa monstruosidad de Akasha! - grito el vampiro aterrado de ver ese condenado bate para diversión de los otros.

Años después:

-¿Qué quieres que haga que, Otto?

-Que se unan a la organización de Animusphere.

El rubio guapo no había cambiado físicamente con los años, mientras miraba a su "nieta" más crecida con su dieta de sangre especial, y su "sobrina"

Theresa ahora usaba un vestido loligotica de colores negros y rojos, con un adorno en su cabeza, resaltando su nueva figura de la que siempre hace gala. Su cabello estaba atado en dos grandes trenzas en la parte de atrás de su cabeza, manteniendo un increíble largo.

Y a su lado se encontraba Mithra Kaslana. Había una considerable diferencia entre la actual y la de hace 10 años. Esta chica ahora tenía su cabello largo hasta la cintura, con un estilo más salvaje que alisado. Usaba una camiseta blanca con una apertura en la parte superior de su pecho, el cual sí que era increíblemente grande. A esto se le suma unos pantalones negros con lineas rojas a los lados, aferrandose a sus piernas sin limitar en nada, mas unos tacones botas negros. Para completar usaba una gabardina negra larga hasta las rodillas.

Era curioso como su ropa habitual es el estilo de Kevin Kaslana solo que femenino… ok da algo de miedo.

-¿Y exactamente qué hace? - cuestiono Mithra curiosa, cruzándose de brazos - Romani no me decía mucho tampoco. Decía que era secreto.

-Animusphere dejó de lado el egoísmo de un magus y se enfocó en el bien común. Creó una organización dedicada a proteger el orden humano - reveló Otto para sorpresa de ambas - ¿Recuerdan esos exámenes que les hice luego del incidente de Louvre?

-¿Esos para ver si causó algún efecto secundario? -Theresa recordó cómo tuvo que mantenerse quieta por horas…que horror.

-Ese mismo. Además de ese objetivo, también era para saber si eran compatibles con su programa…y lo son - Otto cruzo los dedos frente a su rostro - Ustedes podrían ser indispensables para ayudar al mundo.

-...¿Y papá sabe de esto? - pregunto Mithra inclinando la cabeza.

-Si, está al tanto - Otto bebió su té, calmado - Dice que será bueno para ambas…y que esparsas el encanto Kaslana como se debe - esto último lo dijo con una sonrisa burlona mientras Mithra se sonrojaba.

-Baka papá - murmuró la albina mientras la ceja de Theresa se crispaba - Ok, ¿dónde es y cómo vamos a ir?

-Es en la Antártida.

-...Eso solo hace que la segunda pregunta sea más importante.

-Descuida mi querida Theresa. El abuelo lo tiene todo arreglado.

-...¿Tiene algo que ver con él? - Theresa apuntó a Zelretch en una esquina, bebiendo un café.

-Oh continúen su charla. Hagan como que no estoy - el vampiro bebió su café con una sonrisa que uno querría borrar de su cara.

Theresa se cruzó de brazos.

-¿Qué? ¿Te prometio los Archivos del Vacío que debe tener, así como tenía la Shamash de Siegfried?

-...-

-¡LO SABÍA!

-Esta bien Theresa - Mithra puso una mano en su hombro - si es para ayudar al mundo, ire.

-Mithra, no deberías lanzarte así como… - Theresa intentó convencer a su sobrina, pero Zelretch aplaudió.

-¡Perfecto! Me tomé la libertad de empacarlo todo - Zelretch sonrió mientras debajo de ambas se abría una grieta arcoiris - ¡buen viaje!

-¡HIJO DE…!

Y ambas fueron tragadas ante la mirada de ambos.

-...Más vale que tu plan funcione, Zelretch - Otto miró con unos ojos intensos al vampiro.

-Kukuku todo saldrá bien - declaró Zelretch sin perder su sonrisa - Es momento de que la leyenda de Mithra Kaslana inicie.

Una leyenda sin igual.


Y hasta aquí llego este capítulo.

Como verán, he alterado mucho respecto al capítulo original. Luego de meterme en el mundo de Honkai, vi mayor potencial para el fic que con mis anteriores ideas, lo que me impulso a este reinicio.

Para explicar un poco: Otto, Siegfried y Theresa son después de los eventos de Honkai 3D Impact. Otto sabemos cómo murió, pero Theresa y Siegfried serán explicados en futuros momentos.

En cuanto al porqué Mithra y Kiana se parecen… en parte lo base con el hecho de que ambas tienen la misma seiyu en japonés sorpresivamente…junto a Happy de Fairy Tail. Algo que me divirtió mucho cuando lo descubrí de casualidad.

Y en cuanto a porque no hay un Impacto Honkai en Fate, pues la respuesta ya fue dicha. Alaya, Gaia, la Counter Force… El mundo tiene múltiples defensas que podrían enfrentar la influencia del Honkai. Incluso si nace un Herrscher, este podría mantener su humanidad por diversos motivos.

Eso no significa que el Honkai jamas haya intentado llegar al mundo. De hecho, hace 12000 años envio una de sus bestias clase Planetaria que casi logro acabar con todo, hasta que un humano con la luz del mundo vencio… ya debes saber de que hablo.

No dire mas para no arruinar la sorpresa. Este es Ikari no Ryujin, despidiendose…