Tarde. pero mejor que nunca, lamento la tardanza, problemas de trabajo, tiempo, bloqueo de escritor y otras cosas más no me dejaban escribir, pero aquí se los dejo.
Ahora un pequeño cambio en la historia, simple realmente, dejare que ustedes escojan los ganadores de cada evento. Así es, ustedes me diran quien quiere que gane cada evento, solo digan los nombres del personaje, el personaje con más menciones sera el que coloque en primer, segundo y tercer lugar. Al final de cada capítulo dire cual será el siguiente evento y también de que se tratara, comenzando por el siguiente que es el que acaba de comenzar en este capítulo.
Así que espero sus comentarios y/o mensajes privados, los esperare con ansias, nos vemos pronto y que disfruten este capítulo.
Capítulo 12: Grate Flight - Edimburg.
El silencio era total, no había nadie que hiciera un solo sonido, todos tenían sus miradas a la plataforma del estadio. Los jinetes no dejaban de ver a la criatura, los comentaristas estaban con la mandíbula abierta de la impresión, e incluso los camarógrafos se encontraban sin palabras. Frente a ellos, en todo su esplendor, belleza y poderío se encontraba un Night Fury, ¡Un Night Fury!
- ¡Night Fury!
El grito rompió la tensión, la emoción estaba en el aire, la sorpresa paso al éxtasis y la euforia. Los Berkianos gritaban de alegría por ver al dragón de la isla y compañero de su jefe, los extranjeros por la alegría de ver un Night Fury por primera vez en su vida, puesto que estos dragones no se muestran en ninguna parte del mundo, hasta incluso son categorizados como mito o leyendas; ver uno con vida era algo que jamás olvidarían en su vida.
Hiccup al ver la reacción de la gente se acercó a su amigo, se veía nervioso por tanta atención, eso era normal en su amigo, después de todo, no todo el tiempo estos dragones se muestran ante la gente. Coloco su mano en el hocico de su amigo, este se calmó y bajo su cabeza, de esta manera unieron sus frentes, ambos con los ojos cerrados se permitieron el lujo de tranquilizarse antes del evento principal de sus vidas. Al abrir ambos sus ojos y observarse, el dragón dio un lametazo a su jinete haciendo que este protestara, la risa se escuchó pero esto no les importo a ambos, quienes ahora se limpiaban la baba de dragón, puesto que Hiccup tomo baba y se la lanzo a su amigo directamente a su rostro.
El jinete se subió a su silla, los jinetes aun con la sorpresa le copiaron, encendieron sus sillas con su huella dactilar, los dispositivos y sensores se activaron, mostrando en la pantalla los niveles de todas y cada una de las funciones de vuelo y también el estado de salud del dragón como del piloto; por lo visto los controles tenían sensores para medir los signos vitales del jinete. La tecnología en las sillas los tenía más que abrumados, esto era realmente algo avanzado para cualquier jinete de dragones, esto simplemente significaba que Hiccup realmente era un genio para su edad.
Observar al muchacho encender su silla, fue algo que nadie se quería perder, puesto que el dragón al sentirlo en su espalda se colocó en posición para salir volando, alas sin terminar de despegar, aletas traseras y de cadera se movieron para el despegue y también se agazapo un poco para el impulso de salir a vuelo. Hiccup estaba revisando todos sus instrumentos y también que la conexión de la silla con el casco fuera estable y fuerte; puesto que en este se tenían que ver las estadísticas de la silla, esto lo estuvo realizando en secreto antes de la carrera, un prototipo para cascos de jinetes u otros medios de transportes personales. Todo estaba preparado, todo en orden, su amigo emocionado como él se encontraba, una última mirada de apoyo entre ambos y se encontraban listos para el evento de sus vidas.
Los comentaristas, como los televidentes, aún se encontraban con la sorpresa en la cara; fue hasta que vieron al jefe de Berk subir sobre su dragón que todos volvieron a la realidad. Retomando el control de sus emociones, comenzaron nuevamente sus narraciones.
- Esto es increíble, un Nightfury señores ¡Un Nightfury!
- Este es el dragón con el que el participantes Hiccup entro a las carreras, teniendo un record de tiempo de 1.25 min.
- Por vuelta.
- No el recorrido completo.
- Las tres vueltas reglamentarias para entrar a la carrera ¿En 1.25 min?
- Exactamente, esto lo califica como el dragón más rápido del grupo y el oponente a vencer.
- En definitiva, este muchacho siempre nos da varias sorpresas.
- Pero antes de todo, explicaremos cuales son las reglas para esta carrera.
Mostrando en las pantallas aparece el mapa del mundo, donde se señala con una marca roja cada país participante en la carrera.
"Comenzaremos con Berk, donde se dará la señal de salida, los competidores y sus dragones comenzaran el vuelo directo a Edimburgo, Escocia, donde tendremos el primer encuentro.
- En este primer encuentro los jinetes tendrán que demostrar su fuerza y habilidad al atacar objetivos en movimiento sin utilizar sus dragones.
- El mismo día se dirigirán a Londres, donde a dragones y jinetes se les pondrá a prueba su precisión y trabajo en equipo, puesto que blancos móviles, en diferentes puntos y zonas aparecerán de la nada. Este día descansaran para al siguiente pasar a Alemania, donde explicaremos las siguientes pruebas. Pero recuerden, que el primero en llegar obtendrá el doble de puntos que los demás.
- Es una carrera después de todo, el primero en llegar tiene que ganar, en este caso los puntos. Cada uno comenzara con 10 pts. Los dos finalistas serán escogidos de esta manera, en la penúltima carrera se darán los resultados, la carrera final será como tal, una carrera tradicional de dragones.
- Así que esperemos hagan sus mejores movimientos, tácticas y también sus mejores trucos, puesto que esto es el…
- ¡Grate Flight! – El grito de ambos dio la luz verde para que todos se prepararan.
Los televidentes alrededor del mundo comenzaron a festejar el evento, todos apoyando a su corredor preferido. En los países de cada participante se escuchaban los clamores y gritos de apoyo a sus representantes; pero era Berk quien festejaba a lo grande. Cada taberna, casa, plaza y salón de evento ponía atención a los sucesos de la carrera y su jinete.
Cada jinete colocaba su atención al encargado de dar la señal de partida, quien era Gobber, el cuerno de la aldea con forma de Thunderdrum se colocaba en la torre más alta del lugar. Hiccup se colocaba su casco, el cual por dentro mostro todo los instrumentos de su silla, su dragón extendió alas, afirmo las patas y se agazapo un poco preparándose para la salida, los demás dragones le imitaron. Gobber se relamió los labios, tomo la boquilla del cuerno con ambas manos y con una inspiración grande, dejo salir todo el aire de sus pulmones dentro del instrumento.
Del otro extremo salió el tan esperado sonido, las alas dieron el impulso y con el grito de emoción estos comenzaron la carrera. Todos dieron un par de vueltas en el estadio, hasta que la puerta de salida fue abierta. Parte de las grades se abrieron cual compuerta son, el espacio abierto todos los jinetes pasaron por la apertura, pasando entre emocionados y alegres espectadores quienes les brindaban su apoyo. Hiccup estaba que desbordaba de ansiedad, nervios, miedo, alegría, júbilo y otras emociones más. Toothless y él por primera vez es su vida veían el horizonte como algo más, no solo una vista más de su vida cotidiana, no, esto era diferente se sentían…se sentían… ¡Libres!
Soltando un grito de emoción y su dragón lanzando una pequeña esfera purpura para poder pasar entre la explosión, demostrando la excitación y emoción de esta aventura. Los demás jinetes lo tomaron como algo de ellos dos, solo Astrid sabía el porqué de esa pequeña muestra de emoción.
- ¿Qué dices amigo? ¿Volamos hasta Edimburgo? – La contestación fue un pequeño gruñido acompañado de una sonrisa. – Ese es mi chico.
Solo un par de aleteos fueron suficientes para ponerlos a la cabeza, los demás al ver esto siguieron el ejemplo, solo para darse cuenta de que no lograrían alcanzarlos, la velocidad de ese dragón era algo que incluso al Skrill y al Nadder le costaba mantener, pero para esos dos esto no importaba; ambos disfrutaban este momento.
Las olas por debajo de ellos, el horizonte a su vista, el viento pasando por sus rostros, cuerpos y las alas; el sol a su derecha y sus rivales a sus espaldas, ambos dentro de la carrera que más querían estar, este era un sueño cumplido, era el día con el que más había soñados y deseado; salir de la isla, conocer nuevos lugares, personas, culturas ¡todo!
Se detuvieron unos segundos, dejando que se adelantaran los demás jinetes, para ellos era importante este momento. Dieron un despido silencioso a sus isla, pero para los otros esto no les importaba, después de todo no era su casa, su hogar, su vida. Los demás solo vieron que se detuvieron, pero aprovecharon para continuar, se confiaron pensando que tal vez era algo mayor para el "maestro de dragones", el más alegre en ese momento era Dagur quien solo tenía en su mirada la primera meta de la carrera y también llegar a su casa.
Solo faltaban minutos, puesto que el recorrido era de una hora si fuera en avión, pero están sobre dragones, el tiempo era menor solo les tomaría alrededor de unos 45 minutos el llegar a su destino; solo Astrid observaba a sus espaldas, confundida del porque el jefe de la aldea se detendría, fue hasta que lo vio acariciar la cabeza de su dragón que supo que se estaba despidiendo de su ciudad, de su hogar. La sorpresa llego cuando tan pronto lo vio en un lugar, lo vio en otro, de nuevo se encontraba entre ellos y sin el menor aviso. Saco a todos de concentración, todos se quedaron quietos al verlo retomar el liderazgo una vez más; tomados por sorpresa y reanimados por el desafío de volver a retomar sus posiciones y dejar al novato atrás, comenzaron a seguir al chico.
Para ellos era común ver fallar a los novatos, puesto que se veía que estaban dando todo en el primer tramo, en este tipo de carreras siempre se debía comenzar con poco, puesto que el viaje es largo y de mucha resistencia tanto física y mental para dragones y jinetes. El ver a Hiccup aumentar velocidad para estar en primer lugar, era prueba para ellos de que el chico era realmente un novato en cuanto a carreras de largas distancias. Podría haber demostrado grandes habilidades en Berk, pero este era su terreno y se asegurarían de demostrarle su error.
Solo faltaban pocos minutos para llegar a su primer destino, ahora se sentía más que antes la rivalidad entre ellos. Los dragones la sentían, esa presión, esa emoción, ese instinto salvaje de ganar, ya no veían amigos, compañeros o parejas, no, ahora veían presas y sus presas eran los competidores, no dejarían que les ganaran, pero el premio mayor era el Night Fury, esa era su presa principal.
A lo lejos se veía la tierra firme, el continente se acercaba a ellos en cada aleteo que daban sus compañeros, solo unos kilómetros más…solo unos metros más…solo unos centímetros más; ahora el verde estaba bajo ellos, las calles de Arnol y sus casas se veían pequeñas a su altura actual. Pasaron Stornoway entrando el mar que se les presentaba para poder llegar a su siguiente destino, entraron por Ullapool donde los esperaban un grupo de camarógrafos sobre un grupo de Singetail. La gente corría a recibirlos con cámaras y teléfonos para tomar el mejor ángulo de su paso, esto realmente emociono a Hiccup y su amigo, quien dio otro aleteo más para aumentar la distancia entre ellos sus rivales.
El hacerlo incitó a los demás a seguir su ejemplo, ahora solo estaban a unos metros de sus colas, esto hizo sonreír a ambos; sabían lo que se tramaban, querían hacerlos ver novatos, que no tenían experiencia en este evento. La verdad era que si lo tenían, puesto que su madre y él estaban presentes en cada carrera de su padre, creando estrategias, tácticas y planes, era hora de aplicarlos.
Estaban sobre el Parque Nacional Cairngorms, el verde se encontraba bajo ellos, observaban correr animales salvajes, personas seguirlos sobre dragones de tierra, camionetas 4x4 y uno que otros en avionetas. Todo esto era grabado por las cámaras de sus sillas y también de los comentaristas, quienes no perdían ni un detalle de los participantes. En varias ocasiones observaron cómo los gemelos platicaban entre sí, parecía ser que estaban planeando algo para el primer evento; Astrid observaba cada instrumento y lo estudiaba, planeando como utilizar todo a su favor; Dagur solo tenía la mente y la vista en el primer puesto, su dragón parecía estar más tranquilo con él en su lomo, pero eso pondría a prueba en el primer encuentro de la carrera. Los otros solo volaban tranquilamente, por lo visto antes de comenzar la carrera ya habían discutido las tácticas y sus planes para cada encuentro.
Comenzaron a ver carreteras, montañas, pastizales, casas y más gente con el celular filmando su paso, ahora se encontraban sobre el mar nuevamente, habían pasado el puerto de Burntisland para llegar directamente a Edimburgo, ahora la tención era mayor, puesto que a partir de este momento comenzaba la verdadera carrera. Necesitaban llegar a Holyrood Park, en donde los esperaban todos los comentaristas y espectadores, era el lugar del primer encuentro, solo unos minutos, metros y kilómetros más y estarían en el mayor momento de sus vidas.
El GPS de la silla les marcaba que estaban a ton solo cinco minutos, cinco minutos de comenzar el evento. Las personas del viejo Edimburgo les gritaban aclamando a su corredor representante y a los demás, esto aumento los ánimos. Dos minutos, el parques estaba a la vista, tan cerca, tan palpable, todos se emocionaron; un minuto, escucharon los gritos de regocijo y emoción de los espectadores; treinta segundos, las cámaras apuntaron a ellos en la entrada del parque; 10 segundos, sus sillas mostraron las instrucciones del encuentro.
Tendrían dos minutos para que los jinetes destruyeran el mayor grupo de blancos disponibles, se les lanzarían seis armas especiales, al atraparlas comenzarían a atacar los blancos, drones con la bandera de su país, cada uno tendría un total de 30 blancos, el que logre destruir todos sus drones dentro de un total de 2 minutos pasaría a la siguiente prueba, en caso de que no, se sumarían los puntos acumulados y pasarían a la siguiente prueba. El primero en llegar y atrapar uno de los paquetes con un arma se le daría 20 puntos, el segundo 10 y el tercero 5; cada dron derribado se le daría un total de dos puntos. El que destruyera un dron que no fuera el suyo les quitaría dos puntos a los ya obtenidos como penalización, la tabla al final se les mostraría en sus pantallas de las sillas. Habían llegado, era el momento de brillar ante cámaras, ante Edimburgo y ante todo el mundo.
Las pantallas, televisores y radios recogieron las señales, todas describiendo y/o mostrando el evento, el grupo de cinco dragones acababan de llegar a su destino. En el suelo al centro de parque, sobre una pequeña formación de rocas, se lanzaron seis paquetes de color gris, todos de considerable tamaño y también con una imagen demostrando las armas que contenían cada una de ellas. Hiccup y Toothless colocaron su vista sobre una en específico, una de las especialidades del muchacho.
Los demás hicieron lo mismo, ahora dejo que su dragón hiciera lo propio, en estos momentos confiaba plenamente en las acciones de su amigo. Tal decisión fue vista ante los ojos de todos los observadores en las transmisiones, el jinete había dejado los mandos de las sillas y también se había soltado de sus agarres, ahora era el dragón el que se guiaba solo. Tal cosa osada fue tomada a mal por algunos, interesante y extremo por otros, pero para lo que los conocían sabían que esto era su relación entre jinete y dragón. Esta señal la tomaron los demás jinetes como algo peligroso para sus tácticas, necesitaban adelantarse; todos apresuraron a sus dragones, necesitaban ser los primeros.
Por unos segundos pareciera que todo estaba en cámara lenta, así lo percibía, el aletear de su amigo, el impulso de la cola, la tensión de los músculos, el encorvamiento del lomo, el giro del cuello, las respiración, su propia postura; el paquete se encontraba a unos metros, estaban bajando, su amigo necesitaba estar en posición para el embosque, tal cual un tiburón blanco haría. Desde que vieron ese documental hace varios años atrás, Toothless ha intentado recrear ese movimiento y táctica hasta que por fin logro recrearla, cosa que estaba haciendo en ese momento.
Al llegar a la posición, se colocó de forma vertical, un aleteo potente, un movimiento de la cola con sus alas abiertas y el impulso le dio la ventaja. Observaba a los otros corredores acercarse, intentando tomar los paquetes, pero fue inútil; en cuestión de segundos ya tenía entre sus brazos el paquete.
- ¡Comenzamos! Vaya movimiento de Hiccup, eso fue más que increíble, incluso nuestras cámaras no pudieron captar su paso, solo se ve un borrón.
- En definitiva el dragón más rápido del grupo.
- Y por ende este par se lleva los primeros 20 pts. Del evento, seguidos de Astrid con sus 10 pts. Y Dagur con 5 pts.
- Los demás tomaron sus armas y comenzaron a prepararse, los drones han sido liberados y comienza la caza.
- En este mismo instante comienza a correr el reloj y los participantes comienzan a seguirlos.
- Observa eso, es la nueva arma para los corredores.
- Así es, esta es una pistola que lanza una señal al dron, esta al recibirla comenzara su regreso con los técnicos y comenzaran a analizar los datos, de esta manera se sabrá con certeza quien le disparo a sus correspondientes objetivos y quiénes no.
- Observa eso, el arma del concursante Hiccup es un arco.
- Es el arma sorpresa de este evento, se decidió que se agregara como un nivel de dificultad extra.
- Veamos cómo afronta esta situación el muchacho.
Esto era perfecto para ellos, un arco con 30 flechas de punta óptica, era como si les hubieran leído la mente. Se elevaron inmediatamente, al llegar a cierta altura observaron a los demás perseguir los drones, todos ya habían destruido algunos, aún quedaban un minuto con quince segundos y necesitaba ver realizado su plan. Un par de golpes en la nuca de su amigo y este lanzo un pequeño rugido corto, el casco de su jinete capto la señal de rebote. Ahora en su pantalla podía observar los drones que se encontraban cerca y marcar los propios, se apegó sobre su amigo y estos comenzaron el descenso, tomando un trio de flechas y apuntando cuidadosamente logro sus primeras tres bajas.
Observaron cómo tres de los objetivos comenzaron su descenso al mismo tiempo, los tres alcanzados por tres flechas caídas desde el cielo, solo para que en unos segundos el par pasara junto a ellos, maniobrando entre los objetivos, buscando los suyos propios. El solo verlos en ese momento entendían que en todo este tiempo jamás habían visto todo el potencial del Berkiano, solo habían arañado la superficie. Lo observaban esquivar árboles mientras perseguía un dron, lo veían apuntar y disparar con tal precisión que ni ellos mismo creían que era posible, solo lo observaban arrojar flecha tras flecha.
No se detenía, lugar donde apuntaba, lugar donde un dron comenzaba su regreso. Se colocaba en diferentes posiciones para conseguir el disparo, de cabeza, de lado, se detenían, perseguían e incluso parecía ser que los utilizaba a ellos para obtener su objetivo. En varias ocasiones pasaban junto a ellos, pareciendo que este los guiaba a algún lado solo para que liberar su flecha en el momento justo.
Podían verlo pasar sobre ellos mientras este se endereza, tensa el arco con la flecha lista, apuntar el arma a un grupo de drones y luego liberar la tención arrojando la flecha, esta al llegar a su objetivo lanzaba la señal al dron para comenzar su programación. Era un espectáculo de ver ante todo aquel que lo viera, era tal que incluso ellos se distraían para poder ver el chico realizar cada proeza.
Solo faltaban treinta segundos y el Berkiano ya llevaba más de veinte flechas liberadas, mientras ellos intentaban acertar a uno o dos drones, este muchacho derribaba tres o dos en solo unos segundos. El más impresionante fue a un objetivo a más de 300 metros de distancia, los vieron detenerse, el chico solo tomo su flecha, la coloco en el arco, tenso la cuerda hasta llegar a su mandíbula baja; el tomo aire, lo mantuvo en sus pulmones y luego lo dejo salir tranquilamente, era un tiro difícil, de mucha concentración. Su dragón movía sus orejas y crestas acorde al viento, dato que era más que útil para Hiccup, fijo su mirada en ese punto lejano, incluso su casco elevo su mascareta para una mejor visión.
Para los otros era como verlo en cámara lenta, el soltar del aire de sus pulmones, el ver como sus dedos liberaban la cuerda, la flecha ser impulsada atravesando el aire y cortándolo creando su característico sonido, la flecha siguió su camino hasta llegar a su blanco, esta libero su señal y el dron en ese momento activo su programación y comenzó su regreso con los técnicos para tomar la información relevante de este.
Lo vieron bajar su arco y luego continuar su camino, no pudo haber sido uno de los suyos y además haber acertado ¿O sí? Solo faltaban cinco segundos, tenían que lograr terminar, solo para observar que a los faltantes dos el chico se retiró del lugar rumbo a la siguiente locación ¿Cómo era posible? Al terminar su tiempo guardaron las armas en un compartimento de sus sillas, apresuraron a sus dragones intentando ganar terreno para alcanzar al Berkiano. Al salir de Edimburgo continuaron en dirección a Londres, la tierra de la corredora Hofferson.
Nuevamente estaban sobre caminos, praderas y formaciones montañosas, el mundo era algo grande y ellos dos solo un par de amigos recorriéndolo. El verse después de ese primer encuentro, con la sonrisa en el rostro, sentir la emoción de ser retados aun la tenían, aun la sentían, querían más, presionarse más, lastimarse, exigirse, pasar los limites; querían más retos. Todo el grupo se sentía de esa manera, era la primera probada para los novatos, era el primer gran sentimiento de prueba para los veteranos, esto era el Grate Flight y el siguiente reto se encontraba solo a cuarenta y cinco minutos. El tiempo original sería un total de una hora con diez minutos, si estuvieran en un avión de pasajeros, pero estaban sobre dragones, las criaturas más rápidas del planeta en el aire.
La velocidad era constante, aun no demostraban toda su velocidad, el plan era esperar hasta el último minuto y evento de la carrera, solo darían pruebas durante cada etapa, no querían cansarse antes de tiempo. Observaron a sus seguidores, sus dragones se veían tal cual su amigo, emocionados, esperando con ansias la siguiente prueba, tal cual ellos. El problema es que sus jinetes se veían un tanto preocupados, eso era extraño de ver.
Presionando un pequeño botón en la pantalla de su silla logra comunicarse con el jinete más cercano, era Eret quien al escuchar el sonido comenzó a buscar el botón de contestación de la silla.
- Eso es nuevo en las sillas.
- No mentíamos que era lo último en tecnología.
- Me parece bien ¿En qué te puedo ayudar?
- Todos parecen estar algo consternados ¿Ocurre algo?
- Algo así, tú eres la razón.
- ¿Yo?
- Lo que nos mostraste en el Thawfest, no era toda tu capacidad ¿Verdad?
- Perdón, pero mi padre siempre me dijo que en una carrera importante nunca muestres todas tus habilidades sino hasta el final, esta carrera no solo es por mí, es por mi madre y mi padre. Quiero dedicarles esta carrera, gane o pierda.
- Les diré a los demás, para no dejar que no te tomen enserio.
- Eso sería genial…Eret.
- ¿Ocurre algo?
- Gracias.
- No hay que, solo tampoco nos subestimes.
- Ustedes son los campeones, no escogería mi mejor dragón/amigo sino fuera por eso.
- Gracias, les pasare el mensaje.
Después de esa pequeña charla y de cortar la comunicación, observo que todos levantaron un poco los ánimos, Astrid parecía estar alegre. Descubrió a su amigo observándolo detenidamente, esa mirada era de complicidad, la conocía muy bien.
- ¿Qué estás viendo? - Un gruñido y este regreso la vista al frente, realmente lo conocía bien.
A unos pocos kilómetros se encontraba su destino, Londres. Al entrar a la ciudad las pantallas volvieron a mostrar el nuevo evento, límite de tiempo de dos minutos, destruir cuantos drones aparecieren, en este caso no había marcas distintivas, era un todos contra todos, el que lograra acertar más blancos de un total de 210 objetivos ganaría el evento. Igual que antes se les premiarían con 20, 10 y 5 puntos respectivamente a los primeros tres corredores en llegar.
El evento se llevara a cabo en Regent's Park, lugar donde se encuentra, junto a grandes universidades, la London Dragons Academy. Nuevamente la emoción los embargo, solo que esta vez podían sentir la presión en su espalda, los jinetes ahora estaban más concentrados y enfocados. Solo faltaban algunos minutos, unos pocos kilometros, metros y comenzaría el último desafío del día.
Entraron por Primrose Hill Park y continuaron derecho, cruzando por ZSL London Zoo, al llegar al centro fueron liberados los nuevos objetivos, esferas voladoras con cámaras integradas, al igual que las de la primera prueba estas también reciben señales generadas por las armas que obtuvieron en la primera prueba. Esta vez fue más reñido el primer lugar, puesto que eran tres los que se lo disputaban, Astrid, Dagur y Hiccup. Hiccup fue el primero en llegar, esta vez el segundo fue Dagur y entercer lugar Astrid, los tres por centímetros entre uno y otro.
- Comenzamos la nueva etapa.
- Así es, en esta ocasión las cosas serán diferentes, puesto que los objetivos podrán atacar a los corredores.
- ¿Cómo es eso?
- Simple, los objetivos mandaran señales a las armas, el arma se bloquearía por un total de 15 segundos cuando reciba la señal.
- Increíble, no parecerá mucho pero recuerden que están contra el tiempo, puesto que solo tienen un total de dos minutos.
- La mejor forma de evitarlo será leer correctamente el objetivo, ya que cada vez que este lance la señal emitiría un pequeño sonido y después tardara en llegar al arma un total de tres segundos.
- Y saben ahora, preparen sus armas, alisten sus punterías, reflejos e instinto, puesto que esta vez realmente la dificultad a aumentado.
- También los objetivos son desechables, por lo que sus dragones podrán atacar sin ningún problema, si su dragón destruye el objetivo por ustedes se les dará el punto aun si su arma fue bloqueada.
- Gran ayuda tienen en esta ocasión.
- Así es y por lo visto ya comenzó, puesto que Astrid lleva un total de 5 objetivos con su arma.
- Dagur un total de 10, Eret 7, los gemelos un sorprendente total de 15, Fishlegs un total de 4 y Snotlout un total de 6.
- Hiccup un total de cero, por lo visto sus flechas fueron bloqueadas, pero algo se trama.
- Es la gran sorpresa no solo por dragón sino también por tácticas, reflejos y por lo visto adaptabilidad.
- Mira eso, Astrid acaba de destruir otro grupo de objetivos, ahora con estos se pone a la cabeza con 12 gracias a los 7 que acaba de destruir.
- Observa, parece ser que Hiccup está empezando a moverse.
- Y… ¡Pero qué demonios!
- Increíble señores, pero que increíble, esto es algo sin precedentes.
- ¿Cómo es posible eso? ¿Cómo pudo hacer algo como eso?
- Este muchacho es de temer, se los juramos, no damos crédito alguno a lo que acabamos de ver.
- El corredor Hiccup de un solo tiro de su dragón, con una técnica, movimientos e incluso táctica jamás vista, sin utilizar su arma, ambos lograron destruir un total de 30 objetivos.
- Si señores ¡Treinta objetivos de un solo tiro!
- ¡En definitiva este Grate Fligh es para la historia!
Solo se veía sobre el campo del parque, ante la vista de varios espectadores y los concursantes, el observar el dominio, habilidades, tácticas y sobre lo que ellos creían ser excelentes jinetes de dragones; ser completamente opacados, dominados, básicamente ser ridiculizados por una sola persona.
No, por un jinete y un dragón que en el aire, dándoles la espalda y lomo, después tomando camino nuevamente para ver como perseguían dos objetivos más, el jinete tomara su arco, preparara un trio de flechas y estar ser arrojadas a sus blancos para que callera, junto con otros dos blancos más destruidos por el dragón. En menos de 20 segundos el par de Berk había destruido un total de 35 blancos ¿Cómo podrán ganarles?