DISCLAIMER: Los personajes de The Loud House y Spider-Man no me pertenecen. Son propiedad de sus respectivos dueños y cualquier uso que se les dé aquí no busca remuneración alguna. Esta historia está escrita con fines lúdicos.
GylmarGeniusCat: ¿Quién es Full Deck?. Lisa no sabe que está jugando con fuego.
Alphared45667: Lisa tomó el simbionte de industrias McBride en el capítulo 3.
Capítulo 14: ¡El peso sobre sus hombros! -
La señora Johnson podía ser una profesora bastante flexible en ciertos aspectos, pero si algo valoraba en verdad era la puntualidad, el tiempo era escaso para lograr enseñar algo a sus alumnos y no le gustaba desperdiciar ni un solo segundo de su clase, eran las 8:22 am, su clase había iniciado hace más de 20 minutos y estaba resolviendo las dudas sobre el libro que le había dejado a sus alumnos que leyeran cuando un peli blanco interrumpió su clase:
-Siento el retraso señora Johnson, ¿puedo pasar? - se disculpó un Lincoln muy agitado.
La mujer miró con suma impresión que el chico tenía un estado lamentable: llevaba un zapato en el pie derecho y un tenis en el izquierdo, su pantalón estaba arrugado, su camisa estaba con las costuras por fuera y su cabello completamente despeinado.
-Bueno, ya que interrumpes mi clase Lincoln. dinos que te pareció el libro- mencionó la señora Agnes cruzada de brazos.
-Pues…. sin duda es un libro muy interesante que en cada una de las páginas plasma una reflexión que nos ayuda a comprender la perspectiva del autor sobre la vida y….
-No leíste el libro, ¿verdad? -
-Ah….
-Para mañana quiero un reporte sobre el libro mínimo de 20 cuartillas, ¿entendido? -
-Sí señorita Agnes-
Durante la clase de educación física…
-Debemos evitar a toda costa a Jordán chica- mencionaba Zach.
-Hemos mejorado bastante con la formación escorpión, si neutralizamos a Jordán habrá más posibilidades de sobrevivir- comentó Liam.
En medio del campo de batalla, se libraba una batalla intensa de quemados, el equipo de Lincoln sobrevivía a duras penas y todo iba bien hasta que le dieron un balonazo en el rostro al peli blanco:
-En tu cara canoso- gritó Jordán chica mientras vitoreaba.
-Loud, ¡ve a la enfermería ahora! y que Stella te acompañe-
- ¿Todo bien conejito? - preguntó Stella al ver a su novio más distraído de lo normal.
- ¿Qué? Ah si, ¿por qué no lo preguntas? -
-No lo sé, será porque tienes el aspecto de haber peleado con una banda de ladrones antes de venir a clases- contestó la filipina.
Su novio últimamente no era la persona más puntual o comprometida que solía ser y comenzaba a molestarle que Lincoln llegará tarde a todas sus citas, que las cancelará o que se quedará dormido. Lincoln podía tener muchos defectos, pero si por algo se caracterizaba era por ser muy organizado con su agenda, no por nada se llamaba a sí mismo el hombre con un plan y esa era una de las cualidades que Stella apreciaba más del peli blanco, pero ahora parecía que la atención del chico estaba en otro asunto, como si ella pasará a ser una de sus prioridades secundarias, la pregunta era ¿cuáles eran las prioridades de Lincoln Loud?, ¿que era aquello que absorbía la mayor cantidad de su tiempo? Stella sabía que Lincoln no era capaz de pensar en otra chica estando con ella, pero su conejito estaba distraído y si algo lo angustiaba ella quería ser una buena novia y apoyarlo.
-Si claro, no puedo vencer ni siquiera a Lynn en las vencidas- respondió Lincoln con una pequeña risa nerviosa.
- ¿Está todo bien?, puedes contarme si te ocurre algo y juntos buscaremos una solución- menciona la chica tomando las manos del joven.
Por unos momentos parecía que Lincoln iba a confesarle un secreto que carcomía su conciencia, pero cuando estaba a punto de hablar solo bajo la mirada y se limitó a decir:
-No es nada-
¿No es nada?, ¡No es nada!, ¿cuántas veces había escuchado esa excusa en los últimos días?, a Stella en verdad se le hacía ridículo que Lincoln mantuviera esa faceta de misterio con ella, ¿acaso no tenía suficiente mérito para ganarse su confianza?, ellos se amaban y cuando dos personas están en una relación los problemas entre ellas existirán (por qué no hay relación perfecta) pero para ello estaba la comunicación, para evitar que los conflictos se hagan más grandes. Y si una de las dos partes sufre, la otra también, porque de cierta forma ambos se convierten en un solo ser que lo comparten todo, incluso los problemas. Stella se vio tentada a presionar a Lincoln para hablar, pero la cara de su chico parecía muy cansada, era cierto que le dolía que él no le contara si algo le preocupaba, pero estaba convencida de que a pesar de todo siempre lo apoyaría por que aun con defectos, Lincoln a su parecer era el chico más perfecto entre los imperfectos. Por ello cambió el tema de conversación;
-Oye, que te parece si hoy después de mi presentación de robótica vienes a cenar a mi casa, ¡papá cocina estupendo! -
- ¿Cual presenta… ¡Ah si!, la presentación- contestó Lincoln mordiéndose la lengua, ¿cómo se le había podido olvidar la presentación de Stella? -
Ella lo observo con una mirada de sospecha, solo para después decir.
-Y no llegues tarde, los acomodadores son muy exigentes sobre la puntualidad-
-Estaré ahí, ¡siempre estaré ahí para ti Stella! -
- ¿Lo prometes? -
-Lo prometo, con el meñique- dijo el peli blanco dirigiéndole una sonrisa a su novia-
¡Stella lo había logrado!, tal vez no sabía que era lo que le preocupaba a Lincoln, pero había conseguido sacarle una sonrisa, aquella sonrisa tan boba e inocente que apartaba el invierno del rostro de cualquier persona.
Spider-kid se columpiaba por las calles de Royal Woods, había buscado toda la tarde a Misterio y a electro, pero parecía que la tierra se los había tragado. Además de que las chusmas de personas no habían dejado de hostigarlo, fue así que el chico se dio por vencido y comenzó a dirigirse al Instituto de Ciencias de Royal Woods para ir a la presentación de Stella, debía llegar a tiempo para apoyarla, no podía fallarle otra vez, sin embargo, cuando estaba a punto de llegar vio que se efectuaba un robo en progreso.
-No era lo que tenía pensado para mi noche- dijo Lincoln mientras llegaba a la tienda de Joyería.
Spider-kid comenzó a perseguir a una misteriosa figura que brincaba de edificio en edificio a gran velocidad y cuando pensaba que la había alcanzado resultó que en realidad la había perdido de vista.
- ¿Dónde se metió? - fue entonces que su sentido arácnido lo alertó antes de recibir una patada que casi lo arroja contra una pared.
- ¡Sabía que vendrías trepa muros!, la pregunta es ¿por qué? -
El peli blanco quedó impactado por unos instantes, frente a él había una chica que parecía de su edad que portaba un traje con antifaz y su cabello era blanco al igual que el de él.
- ¿No te has enterado?, soy el alguacil de esta ciudad y cualquier robo me incumbe- respondió spider-kid mientras se lanzaba a pelear contra la chica.
- ¡No intentes hacerte el santo conmigo!, sé que robaste el acelerador de la dilatación del tiempo de industrias McBride- dijo la chica esquivando los ataques de spider-kid.
Mientras tanto, Stella estaba muy nerviosa pues la presentación que iba a comenzar en breve y Lincoln no aparecía por ningún lugar, había intentado llamarlo varias veces, pero el chico jamás contestaba, ¿de qué le servía su teléfono? Así que decidió enviarle un mensaje de voz:
-Hola Linky, es solo para recordarte lo de la presentación, papá llamo y me dijo que no podría venir por el trabajo, ¡estoy muy nerviosa!, hay mucha gente y necesito una cara amistosa en el asiento que te reserve en primera fila, ¿recuerdas?, lo prometiste- pronunció Stella con una voz muy apagada.
Lo que ella no sabía es que su Linky estaba ocupado con otros asuntos.
- ¿Acaso eres amiga de Misterio? - cuestionó el héroe mientras lanzaba telarañas para atrapar a la villana.
-No tengo el gusto de conocerlo, pero me alegra que alguien intente detenerte- dijo ella mientras le daba un golpe en el estómago y rostro a spider-kid, con lo que logró derribarlo.
-Entonces, ¿quién rayos eres? - preguntaba el peli blanco intentando levantarse.
-Solo llámame black cat, me dedico a detener a los tiranos que se hacen pasar por héroes como tú- ella casi recibe una patada de spider-kid pero la esquiva haciendo una voltereta-Tonto spider-kid, Los Gatos siempre caemos de pie, además de que peleas como un aficionado de la lucha libre.
Pero la ladrona es capturada por las telarañas de spider-kid en un momento de distracción.
-Sera mejor que verifiques tu fuente, ¡yo soy de los buenos!, es por ello que te entregare a la policía- dijo el peli blanco mientras le quitaba a la chica lo robado, pero sin previo aviso ella se acerca demasiado a él y le roba un beso en los labios por encima de su máscara, Lincoln quedó congelado por un instante, lo cual fue aprovechado por la villana para rasgar su pecho con su han de sus garras y empujarlo a un contenedor de basura para poder escapar.
- ¡Tontas hormonas! -se reprendía el chico enojado mientras salía de la basura.
- ¡Ahí está!, alto spider-kid, ¿dónde están las Joyas que tú y tu amiga robaron? - ordeno apuntando con un arma el capitán Zahu.
-Le prometo que yo no tuve nada que ver con…- Lincoln ve que en su mano están las Joyas que le había arrebatado black cat- esto no es lo que…- lanza las joyas a la policía y escapa de ahí mientras los policías le disparaban dardos tranquilizantes que no lograron atinarle.
- ¡Estupendo!, otra razón para que me odien-
Lincoln llego al Instituto de Ciencias de Royal Woods, pero no pudo ingresar a la presentación de Stella porque ya había pasado la hora de entrada, por lo que no tuvo más opción que quedarse afuera y mirar a su novia a través de una ventana mientras escuchaba una y otra vez el mensaje de voz de Stella, sintiéndose más culpable aún. El Niño decidió esperar a que acabara la presentación para hablar con Stella, era lo mínimo que podía hacer. Sin embargo, cuando terminó la presentación, Lincoln vio a un montón de ambulancias y patrullas dirigirse a un posible accidente automovilístico, con resignación y dándole la espalda a aquella chica especial, el peli blanco se dirigió rumbo a su deber, un trabajo en el que tenía al patrón más exigente de todos: su conciencia.
Lincoln llego a su casa y fue recibido por un balón de Lynn Junior que esquivó por instinto.
- ¡Apestoso!, necesito a alguien con quien entrenar-
-No estoy de humor Lynn- contestó el chico mientras se dirigía a su habitación.
- ¿Por qué hueles tan mal?, sé que eres el apestoso, pero ahora si ya exageraste-
Por mucho que Lincoln odiara aceptarlo, Lynn tenía razón, apestaba por haber caído al contenedor de basura; así que antes de dormir decidió tomar una ducha, lo bueno es que la mayoría de sus hermanas ya se habían preparado de antemano para dormir, por lo que no hizo falta hacer una enorme fila para utilizar la regadera. Lincoln terminó de bañarse y por un momento vio que su cuerpo estaba lleno de cortadas y moretones, seguramente cualquiera que lo viera pensaría que era un luchador profesional o que lo habían asaltado, el problema ahora era ocultar su ojo morado de sus hermanas, lo había logrado con anterioridad gracias a su sudadera con gorra, pero su pijama no tenía una gorra que le cubriera el rostro. Así que trato de pasar lo más desapercibido posible, para beneficio suyo la mayoría de sus hermanas estaban viendo el televisor, no sabía lo que veían, pero agradecía que las mantuviera entretenidas.
Lincoln iba rumbo a su habitación, cuando sintió la obligación de fijarse a la habitación de Lisa, ¿seguiría trabajando en la cura para Darcy todavía? Lincoln ingreso con mucho cuidado a la habitación de su hermanita y para su sorpresa, la encontró dormida sobre su escritorio apoyando su cabeza sobre una pila de libros y con dos tubos de ensayo en sus diminutas manos. El peli blanco se conmovió profundamente ante tal escena y con mucho cuidado preparó a Lisa para poder dormir sin que ella despertara, la cobijó y le dio un pequeño beso en la frente, la pequeña no dejaba de repetir dormida: "¡ya casi encuentro la cura!, ¡ya casi encuentro la cura!, no te vayas Darcy, POR FAVOR". Sin poder resistir más, Lincoln derramó una pequeña lágrima sobre la mejilla de Lisa y después se retiró a su propia habitación donde se recostó en su cama boca arriba, no había sido su mejor día y para su desgracia no sería el último que tuviera. El chico intentó llamar varias veces a Stella para disculparse y hablar, pero ella no le contestó, sus sentimientos estaban heridos. Lincoln podía optar por dejarle un mensaje, pero prefirió hablar con ella en persona al día siguiente. El Niño comenzó a reflexionar sobre todo lo que había vivido aquel día, y llegó a la conclusión de que quizá todo lo que le ocurría era un castigo por no ser el novio que Stella merecía, comenzó a sentirse peor que una basura y quizá si su cuerpo no hubiera estado tan candado, seguramente se habría quedado despierto sin dejar de darle vueltas al asunto, pero cuando menos lo imagino ya tenía los ojos cerrados. Para su molestia, su teléfono comenzó a sonar interrumpiendo su descanso: sin muchos ánimos, contestó la llamada con los ojos aún cerrados, por lo que no vio quien le llamaba hasta que:
-Hola perdedor-
- ¿Ronnie Anne? -
Continuará...