Reencuentros
Lo que está en cursiva y en "comillas" son los pensamientos de los personajes
-Pues si no quieres que Anna tenga el mismo destino que Layla te dejarás de estupideces y tomarás este asunto seriamente. ¿Entendido?
-Entendido- contestó Hao seriamente, ese había sido un golpe muy bajo para él. Su abuela lo sabía, estaba casi seguro que lo hizo apropósito. Era más que obvio que no quería que Anna sufriera lo que sufrió Layla, se volvería loco si eso pasara…
-Annita, ¿sigues enojada conmigo?- preguntaba Yoh mientras caminaban hacia el comedor
-Sí
Después de que Yoh le acabara de poner los zapatos de cemento a Anna intentó disculparse con ella sobre lo de sumisa. Pero le salió todo al revés y terminó haciendo que Anna se enojará más. Anna lo mandó al diablo y comenzó a caminar hacia el comedor, o mejor dicho, comenzó a arrastrarse. Los benditos zapatos pesaban mucho, casi ni podía caminar. Pero ella era fuerte y muy buena actora, así que sabía disimular muy bien. Yoh por su parte solo caminaba junto a ella sin mucho ánimo hasta que se le ocurrió una fantástica idea…
-Me alegra que lo hayas entendido- pronunció victoriosa Kino
-Si eso era todo, entonces me largo- pronunció Hao con algo de rencor mientras comenzaba a levantarse
-No tan rápido- sentenció Kino –Como ya sabrás, ha vuelto
-Lo sé, creo que asesinarlo no fue suficiente
-Entonces aún lo recuerdas- habló su abuelo –Deberías de estar nervioso por todo lo sucedido
-Nunca lo podré olvidar. Los que deberían estar nerviosos son ustedes, yo ya no tengo nada para que me arrebate
-¿Y Anna?- cuestionó Kino con una ceja alzada
-Ella no me importa. Si fuera Layla me importaría
-Lo es
-Físicamente, emocionalmente no
-Pero podría llegar a serlo
-Lo sé- afirmó Hao débilmente mientras sonreía nostálgicamente –Pero nunca lo será, y ustedes saben lo que tendría que pasar para que Anna fuera Layla.
Yoh en un rápido movimiento acorraló a Anna contra la pared y sujeto las manos de ella por encima de su cabeza. Anna que iba sumergida en sus pensamientos no pudo actuar ágilmente, y cuando tuvo tiempo de reaccionar estaba acorralada contra la pared con Yoh encima de ella sujetándole las manos por encima de ella.
-¿Qué diablos haces?- preguntaba Anna sumamente molesta mientras intentaba soltarse
-Quiero pedirte perdón- decía Yoh mientras sonreía como siempre lo hacía
-¿Y esta es tu manera de hacerlo?- preguntaba irónicamente Ana
-No, es esta…- pronunció Yoh al momento de acerca sus labios con los de ella, pero no contó con que ella podría mover la cabeza
-Te he dicho que no
-Si no quieres no lo haré- sonrió Yoh
-No quiero, suéltame- decía Anna mientras lo miraba a los ojos
-No me pareces convincente. Solo quiero un besito- rogaba Yoh con carita de perro mojado
-Suéltame Yoh- decía Anna mientras le mantenía la mirada
-Vamos Annita, sé que me dices que no porque estas enojada
-Tus abuelos nos han de estar esperando, déjate de estupideces y suéltame
-No me importan los abuelos, no me importa nadie. Solo tú Anna- sonrió con dulzura Yoh, mientras miraba a su prometida –No quise decirte sumisa, es solo que me molesta que mi abuela imponga su voluntad ante ti. Eres lo más importante de mi vida Anna, no me gusta que nadie te obligue a hacer cosas que quizás tú no quieras.
-Yoh, nadie me obliga a hacer cosas que yo no quiera. Obedezco a tu abuela porque es lo correcto, ella me recogió y educó cuando mis padres me abandonaron, yo le debo lo que soy. Sin Kino-san quizás estaría en la cárcel o quizás muerta- decía Anna mientras miraba a Yoh con cariño
-Lo sé y todos los días le agradezco a Kami sama que ella te haya encontrado
-De hecho yo fui la que la encontró a ella- susurró Anna
-¿Qué?- preguntó Yoh algo confundido
-Olvídalo, es una larga historia- decía Anna
-Como digas Annita jijiji
-Ahora suéltame- ordenaba Anna, pues Yoh aún la tenía sujetada
-¿Ya me perdonaste?- preguntaba Yoh con tono infantil
-Sí, ya suéltame- contestaba Anna con tono exasperado
-Aún te falta mi beso- le recordó Yoh mientras se sonrojaba levemente
-Pero alguien podría entrar y vernos…-decía nerviosa y sumamente sonrojada
-Demuéstrame cuanto te importa- la retó Yoh dando justo en el clavo pues ella había puesto los ojos en blanco
-¿Cuánto es?
-52 yenes- pronunció un aciano mientras sostenía una bolsa de naranjas
-Aquí tiene- respondí el chico castaño mientras recibía la bolsa de parte del anciano
Hace unos 10 minutos que se encontraba en el mercado comprando las cosas que le habían faltado la última vez, él había insistido en que eran cosas tan insignificantes que nadie iba a notar que no estaban, pero ese comentario casi le cuesta una golpiza por parte de su madre.
Aún no entendía por qué su madre se preocupaba tanto por su vida amorosa. Desde que tenía 7 le había dejado muy en claro que él simplemente no deseaba estar con nadie, ni mucho menos casarse. Claro que como toda madre pego el grito en cielo, pero lo acepto. O más bien su padre la obligó a aceptarlo…su padre… ¡cómo lo extrañaba! Desde que él había muerto ni su madre ni él mismo habían vuelto a ser los mismos desde entonces, pero como toda tormenta, pasó. Tanto él como su madre habían hecho sus vidas de nuevo. Él se hacía cargo de las empresas que su padre le había dejado, en cambio, su madre se había vuelto a casar con otro tipo.
Tipo, así era como él le decía pues, nunca le había caído bien. Y la razón era muy simple, el idiota golpeaba a su madre y lo peor de todo era que su madre lo justificaba. Claro que hubo una vez en la que él se le fue a los golpes al imbécil por haber golpeado a su madre y, sinceramente él no se arrepentía en lo más mínimo, el detalle fue que se madre se encabronó con él, ¡SI! No se enojó ¡SE ENCABRONÓ! Y no le habló por una semana. Así que tuvo que prometer que ya no lo volvería a hacer (en frente de ella, claro).
En fin, ese era un tema muy privado y no le gustaba pensar en eso. Mejor se concentró en seguir buscando las cosas para la estúpida cena.
-Claro que lo sé, nieto estúpido- contestó Kino sumamente molesta
-Entonces dejen de hacer ese tipo de comentarios…-ordenaba Hao "Ya que duelen" –Por cierto, ya que tocamos el tema, quiero decirles que les prohíbo rotundamente que le cuenten a Anna de Miko
-¿De qué coño hablas?- respondió su abuela con expresión fría pero por dentro mostraba una gran sorpresa "No es posible que el idiota de Hao sepa de Miko"
-Ustedes saben de qué hablo- reprendió Hao con rabia ¿Acaso podían ser más cínicos? –Solo les advierto, que esta vez no dejaré que Anna sufra. Sí ustedes le cuentan la cruel verdad, yo no tendré piedad ante ustedes
-No la necesitamos
-Ni tampoco ayudaré a Yoh. Es más, quizás acabe con él, si es que ustedes me traicionan
-Yoh es más fuerte que tú
-Entonces uniré fuerzas con él…- explicó Hao poniendo énfasis en él
-…-
-…-
Tanto su abuela como su abuelo quedaron pasmados, lo cual le dio tiempo al shaman del fuego para salir sin decir nada más. Todo era mentira, estaban locos si pensaban que Hao Asakura podría unirse a ese idiota. Antes le pediría perdón a su abuela hincado que ser aliado de ese estúpido. Lo odiaba.
Anna estaba con los ojos en blanco, ¿acaso el inocente Yoh le había dicho eso? Pues vaya que sí le había dolido en su ego y orgullo. Sinceramente no le importaba en nada que los vieran, después de todo eran prometidos ¿no? Sería normal, claro que ella nunca lo aceptaría…bueno, solo esta vez, para callar a su estúpido prometido. Así tomó aire y valor, sobre todo valor y lo besó.
Ella unió sus labios a los de él. Yoh no se lo esperaba, pero obviamente no se iba a quedar atrás, así que cuando "Annita"lo besó le soltó las manos automáticamente y tomó con la mano derecha la nuca de su prometida para que no se escapará, y la izquierda fue a parar a su cintura. Anna solo colocó ambos brazos en el cuello del shaman. Al principio Yoh solo movía sus labios con los de Anna, hasta que intentó llegar un poco más lejos. Con su lengua pidió permiso para entrar en la boca de Anna y ella, algo insegura le dio permiso. Él recorría todo la cavidad bocal de ella, como si quisiera memorizarla, pero todo cambió cuando tocó la lengua de ella. Era obvio que Yoh quería experimentar un poco más, pero para Anna eso ya era demasiado, así que cuando sintió que Yoh tocaba su lengua rompió el beso.
Ambos estaban jadeando y con un terrible sonrojo de unas mil tonalidades de rojo.
-¿Satisfecho?- preguntó Anna con una sonrisa pequeña
-Estoy extasiado. Si así será tu perdón, te haré enojar más seguido Annita jijiji- se reía Yoh
-Idiota- contestó Anna ante ese atrevido comentario por parte de su prometido
-Te amo Anna- soltó Yoh mientras se acercaba a ella lentamente
Anna había jurado que la iba a besar otra vez, pero no fue así. Yoh solo pegó su frente con la de ella.
-No sabes cuánto estaría dispuesto a dar por ti- sonrió Yoh
-¿Por qué lo dices?- preguntaba Anna mientras un leve sonrojo se iba formando en sus mejillas
-Te amo Anna, estoy profunda y locamente enamorado de ti. Eres mi vida entera- confesaba Yoh mientras acariciaba con su mano derecha la mejilla de Anna
-Yo también Yoh- y sin más que decir por parte de ella lo abrazó
"Siempre estaré para ti Anna. Te amo" escuchó Anna mientras abrazaba a Yoh. Claro que ese había sido un pensamiento de Yoh, pero era tan fuertes los sentimientos que Yoh emanaba que le fue imposible a la sacerdotisa ignorarlo.
-Deberíamos ir a cenar Yoh- decía Anna al momento de romper el abrazo
-Sí Annita, pero antes…- dijo Yoh mientras le levantaba en brazos, estilo princesa
-¿Qué haces? ¡Bájame!- ordenaba Anna
-Pues te cargo, esos zapatos pesan una tonelada y no quiero que te canses, además conociendo a mi abuela estoy seguro que te pondrá a correr o algo por el estilo. Así que quiero quitarte un peso de encima Annita
-Gracias Yoh, pero no tienes por qué hacerlo. Soy fuerte
-Por favor permítemelo, solo por hoy Anna ¿si?- rogaba Yoh mientras se acercaba peligrosamente a la cara de Anna
-¿Y si no qué?- retaba Anna divertida
-Y si no, te meteré a mi habitación y te juro que no saldrás como no sea descalza y embarazada- explicaba Yoh con un tono lujurioso
Anna solo parpadeo increíblemente sorprendida ante la explicación del chico
-Entonces me puedes cargar, pero solo por hoy- decía Anna
-Esperaba que te resistieras- soltó Yoh mientras le guiñaba un ojo
Después de eso, Yoh caminó con Anna en sus brazos hasta el comedor, estaba a punto de entrar pero un grito de su abuela lo detuvo
-¡ANNA SE CASARÁ CON YOH Y PUNTO!
Anna le hizo una seña a Yoh para que la bajara y eso hizo. Después le dijo que guardara silencio para poder escuchar mejor la conversación.
-Cálmate mujer, solo dije que es probable que ella se enamore de él- se excusaba el señor Yohmei al saber el plan de su esposa
-No me importa si Anna se enamora de él, se casará con Yoh y punto
-Yoh no permitiría que lo casaras sabiendo que ella no lo quiere
-Al contrario, Yoh sería el más feliz. Le estaría haciendo un favor al casarlo con Anna, aunque ella ame a otro
Yoh se congeló en ese momento de la plática… ¿Qué Anna ame a otro? No es posible, ella lo ama y no lo dejaría ¿verdad? ¡¿VERDAD?!
Anna no estaba mejor, igual se había quedado en shock, pero por algo diferente. ¿Por qué hablaban de eso? ¿Acaso era posible que la mandarán con otro pretendiente mejor que Yoh? Imposible, eso afectaría de lleno al orgullo Asakura y eso sin contar con el ego de Kino. Era hora de saber la verdad. Y sin más titubeos Anna tocó la puerta haciendo saber que ya habían llegado Yoh y ella.
-Miko Yamato ¿En dónde estás?- se preguntaba así mismo en voz alta Bon –Tengo que encontrarte, solo contigo la señorita Layla volverá con el amo.
-Maldita anciana ¡¿CRÉE QUE SOY IMBÉCIL?! – gritaba Hao mientras golpeaba un árbol de por ahí –Sé lo que planea esa loca, y tengo que evitarlo. Él y Anna no se pueden conocer. Estoy seguro que ese idiota aún la recuerda y si la ve, Anna tendrá que saber toda la verdad. No puedo permitirlo.
-Aunque me termines odiando Annita…- decía Hao con una sonrida dolida, pero decidida –Tú nunca podrás saber lo que ese idiota te hizo
-Pase- contestó la anciana…digo, la señora Kino
Yoh y Anna entraron seriamente al comedor y se sentaron enfrente de los abuelos. El ambiente era tenso sin duda alguna. Pero ellos no podían preguntar nada, pues la abuela se enojaría y los mataría por haber escuchado sin permiso.
-Me alegra ver que por fin se hayan dignado en aparecer- contestó con notable sarcasmo Kino
-No seas tan dura Kino- recriminó su esposo –Mejor hay que decirles el motivo para traer a ambos hasta acá
-¿Abuela?- preguntó Yoh -¿De qué hablas abuelo?
-Anna y tú están aquí, porque el matrimonio se llevará a cabo en dos semanas- explicó Kino sin sentimiento alguno
-¡¿Qué?!- dijeron al unísono Yoh y Anna mientras se volteaban a ver y se sonrojaban. Al verse a los ojos ambos, voltearon su cara rápidamente por vergüenza
-¿Tengo que repetirlo dos veces? Dije que se casarán en dos semanas- repitió de forma burlona Kino
-Y respecto a ese tema, les quiero informar que de ahora en adelante dormirán en la misma habitación, tendrán que ser más cariñosos entre ustedes, y cosas por el estilo- sonrió su abuelo
-Pero… ¿Por qué el apuro?- preguntó Yoh nervioso y sumamente sonrojado
-Porque es necesario. Hace poco nos enteramos que el torneo se reanudará, pero para eso a cada shaman le pusieron una condición para poder participar, y la tuya Yoh, es casarte- explicaba Yohmei
-¿Casarme? No entiendo para que…- decía Yoh pero su abuela le ganó
-Y tener relaciones sexuales con Anna- completó ella sin rodeos
-Gracias- dijo el chico castaño mientras recibía una bolsa con especias
"Gracias a Kami-sama ya he terminado con las compras. Ahora solo compraré una paleta y me podré ir… un momento ¿Dónde dejé mi coche?" pensaba el chico castaño mientras lloraba a cascaditas por no saber en dónde se había estacionado. Y lo peor de todo, era que era tarde y al ver su celular tenía 23 llamadas perdidas de su madre. Eso significaba paliza segura
Tener relaciones sexuales con Anna era la única frase que retumbaba en la cabeza de Yoh mientras se le subían los colores a la cabeza. En alguna parte de su ser, esa noticia le había gustado, pero en otra está preocupado. ¿Qué pasaría si Anna no quiere? ¿O si no cumple las expectativas de Anna? Estaba muy claro que él la deseaba, pero él quería ir poco a poco para así no asustarla. La amaba demasiado como para obligarla a hacer eso por un estúpido torneo. Sí Anna no quería, él tampoco.
-Abuela yo…- iba a abogar Yoh en defensa de él y de Anna, la cual se había quedado en shock desde hacía bastante rato
-Eso es todo Yoh, puedes retirarte. Necesito hablar con Anna- ordenó su abuela
-No, pero yo…
-Lárgate
-Es que…- intentaba Yoh pero no lo dejaban acabar
-Fuera- exigía su abuela con más rudeza
-¿Estarás bien?- susurró Yoh a Anna mientras le tomaba la mano
-Sí, por favor vete- pidió Anna con un hilo de voz
-Está bien, estaré en nuestra habitación- fue lo último que le dijo a Anna y se fue junto con su abuelo. Dejando a las dos solas…
"Maldita sea Anna, ¿Por qué? ¿Por qué es tan difícil esto?"- Eran los pensamientos de Hao, el cual se encontraba en el mercado de Izumo. Ya tenía decidido lo que haría para evitar que Anna sufriera y en sí era muy fácil. Pero el problema era que algo en él le decía que eso era lo peor que podía hacer, pues algún día Anna se enteraría de todo y lo mataría a él. Mejor solo lo vigilaría…por ahora. Mientras lo vigilaba, se le vino a la mente un recuerdo sobre la infancia de Ana…
FLASH BACK
-¡Miko! ¡Miko!- gritaba una pequeña niña de unos 5 años de edad. Era muy bonita, tenía el pelo rubio y ojos dorados.
Ella se encontraba debajo de un árbol enorme, y junto a ella había un nido de pajaritos
-¿Qué pasa Anna?- contestaba un niño castaño de unos 5 años y medio, el cual había llegado corriendo junto a Anna
-Mira- señaló al nido
-¿Qué?- preguntó Miko mirando el nido en donde había una mamá pájaro y un huevo
-Se está abriendo…- decía Anna con entusiasmo mientras se arrodillaba para poder observar mejor
-Es cierto…- decía Miko con los ojos llenos de alegría, y al igual que Anna, se arrodilló para ver mejor
El espectáculo era increíble, el cascaron se iba rompiendo poco a poco mostrando el delicado y pequeño cuerpo del pajarito. Era de color azul, un azul celeste muy bonito. El pajarito acababa de romper el cascaron por completo y comenzó a llorar.
-¿Por qué llora?- preguntó tristemente Anna
-Supongo que ha de querer comer- sugirió Miko con una sonrisa burlona –Ahora tendrás que buscar gusanos y dárselos con tu boca
-No, qué asco- decía Anna, pues los gusanos le daban miedo y asco –Mejor tú busca…-
-Espera, Anna
-¿Qué?
-Debemos irnos, ven- la jaló Miko y la tomó de la mano para irse a esconder a unos arbustos cercanos
-¿Por qué?- preguntaba Anna pero Miko le tapó la boca
-Shhh…mira- susurró Miko mientras veían por los arbustos a tres chicos acercarse
-¿Seguro que los viste por acá?- preguntó el chico número uno
-Que sí, vi al demonio y a su amigo por aquí…- decía el chico para luego gritar -¡SALGAN!
-Oigan, miren- señaló el chico número tres mientras apuntaba al nido que minutos antes había visto nacer al pequeño pajarillo azul –Tengo una idea, síganme la corriente-
-De acuerdo- contestaron el chico 1 y 2
-¡SAL DEMONIO! SI NO SALES, MATAREMOS A LOS PÁJAROS- gritó el chico número tres con una sonrisa cruel
-Luck, pásame al pájaro más grande- ordenó el chico número uno al número dos
-Ten- respondió el chico luego de haber tomado a la mamá pájara por el cuello
-A la cuenta de tres le torceré el cuello si no salen- amenazó el chico 1
-Miko…- sollozaba Anna –La van a matar
-No mires Anna- decía Miko mientras le volteaba la cara a Anna y le decía… -Mírame Anna, solo mírame a mí
-Uno…
-Miko no…- lloraba Anna
-Dos…
-Anna, mírame y no voltees- rogaba Miko al cual se le partía el corazón, pero por Anna se hacía el fuerte
-Y ¡TRES!- gritaron los tres chicos al momento en el que el chico número uno le torcía el pescuezo al pobre pajarito haciéndolo fallecer
-No…-fue un grito ahogado por parte de Anna mientras abrazaba a Miko con toda su fuerza
-No funcionó, ellos no han de estar aquí. Solo hemos perdido nuestro tiempo- comentó el chico 3 al notar que nadie había salido –Vámonos
-Sí
-Larguémonos, vamos por una cerveza…- sugirió el chico 2 y todos asintieron
Después de que los tres malditos…digo… chicos se largaron Miko y Anna salieron de su escondite y fueron corriendo hacia el nido. El bebé pajarito estaba sano y vivo, en cambio no se podía decir mucho de la mamá pájaro. Ella estaba muerta.
-Miko…ella…está mue…muerta- lloraba Anna hasta que escuchó una voz misteriosa
-Yo podría revivirla- sugirió un chico de pelo castaño largo, el cual había saltado del árbol
-¿Quién eres tú?- preguntó hostilmente Miko
-Soy Hao, un gusto Anna- sonreía descaradamente hacia la rubiecita –Yo podría revivirla, claro, si tú quieres
-¿Enserio haría eso? Sí, sí quiero- respondió emocionada la rubia niña
-Claro- afirmó Hao
-Entonces hazlo, quiero ver que lo hagas- retó Miko mientras lo miraba con una ceja alzada
-Miren…- pedía Hao mientras tomaba el cuerpo del pájaro con sus manos y lo sujetaba con delicadez
Hao comenzó a rezar en voz baja, era más bien un hechizo que un rezo, pero suena más pro, rezo. Anna y Miko miraban atentos el cuerpo del pajarillo, y después de 3 minutos el cuerpo comenzó a moverse y de un minuto a otro saltó y voló hacia su polluelo. Anna estaba fascinada por lo sucedido, en cambio, Miko estaba molesto con Hao, no sabía porque, pero lo estaba.
-Gracias Hao- le sonrió Anna
-De nada Anna, espero que seamos amigos- decía Hao algo sonrojado
-Los mejores, te lo aseguro- reafirmaba Anna con una sonrisa mientras se le abalanzaba a Hao para darle un abrazo
-Lo que me faltaba- susurró Miko con el entrecejo fruncido
FIN FLASH BACK
"Sí tan solo te hubiera llevado conmigo ese día, ojalá hubiera sabido lo que te iba a ocurrir y te hubiera llevado muy lejos de ahí, en donde nadie te pudiera encontrar. Cuanto lo siento Anna, todo fue mi culpa. Debí haberte cuidado mejor, debí haber puesto más atención al peligro, debí…no debí haberte dejado sola con ese idiota. Discúlpame" gruñía Hao mientras se lamentaba internamente y al volver al mundo real se había dado cuenta que estaba llorando. "Impotencia, quizás." Se dijo así mismo, y caminó sigilosamente hacia el coche del estúpido al que vigilaba.
"¿Hacer el amor con mi Annita?" pensaba Yoh acostado en su futón "Sé que Anna no está muy de acuerdo con la idea, se puso muy nerviosa ante la noticia. Yo la amo y daría mi vida por ella, no quería que fuera por este modo, ni en esta situación, pero no puedo negarme a mí mismo que la deseo, me gustaría tocar la piel de Anna, creo que es muy suave y tersa….pero….un segundo….¡¿QUÉ COÑO PIENSAS YOH ASAKURA?!
-¿Eh?- preguntó Yoh saliendo de su trance. Podía jurar que había escuchado a su Annita gritar
Se levantó rápidamente, salió de la habitación y se encaminó hacia el comedor pero se detuvo al escuchar la frase más vacia que nunca pensó escuchar de la boca de su prometida
-Le aseguro que mis sentimientos hacia Yoh son falsos
-Me alegra oírlo, ahora ve y cumple con lo acordado- decía feliz la anciana mientras se acomodaba los lentes
-Sí, sensei. Me retiro- decía Anna mientras se escuchaba que se levanta y hacía una reverencia
Yoh antes de que saliera Anna se fue corriendo a su habitación lo más rápido que pudo para no ser notado por ellas dos. Anna salió de la habitación, como si nada importante hubiera sucedido ahí adentro, Yoh se asomó muy despacio y observó a la rubia, solo estaba ahí parada como sí nada. Pero de repente ella sonrió malévolamente y salió corriendo por la puerta principal, fue muy rápido y eso sin contar que aún llevaba los zapatos de cemento. Yoh pensó que lo que había escuchado había sido verdad, cerró la puerta y se tiró en el futón deseando dormir. Sin notar que después de que Anna saliera su abuela se había asomado con una sonrisa que poco a poco fue desapareciendo y apareciendo una llena de dolor.
-Lo lamento Yoh, pero es por tu bien- susurró la anciana mientras se retiraba a su habitación
"¡AL FIN! Mi coche" pensaba el chico castaño mientras se subía a su coche blanco y lo encendía. Era un camino largo y tedioso que tenía que recorrer para llegar a la casa de su madre. En fin, era mejor irse ya o llegaría más tarde. Encendió el coche y comenzó a avanzar.
Después de cinco minutos ya estaba algo alejado del mercado, ahora estaba en un camino solitario, lo cual no le preocupaba pues él era un shaman, y si lo intentaban asaltar, pelearía y obviamente ganaría.
Salió corriendo de la mansión Asakura lo más rápido que sus piernas podían ignorando completamente el hecho de llegar unos 200 kilos en cada pie gracias a sus zapatos. Después de haber salido de la habitación y haber sonreído apropósito macabramente asegurándose de que Yoh la viera se fue. A medida que se alejaba se notaba más su llanto, realmente no quería hacerle eso a Yoh, pero no tenía opción. Era por su seguridad.
Iban muy concentrado en el camino para no llevarse ninguna roca o pinchar alguna llanta con algún vidrio. Tenía las luces altas, lo cual iluminaba todo el camino, pues ya estaba bastante oscuro y no se veía nada. Curiosamente la Luna había perdido su brillo… "Como aquella vez" pensó Miko
Ya había corrido por lo menos unos 7 kilómetros y estaba segura que nadie la seguía, pero entonces ¿Por qué seguía corriendo? Fácil, si corría, se cansaría y al volver dormiría sin importar nada. Sí, ella solo quería llegar a su cuarto y dormir para poder evadir a Yoh, evadir su mirada de tristeza
"Es imposible, esto solo ha ocurrido una vez. El destino no puede ser tan cruel para volverme a hacer lo mismo" pensaba Miko mientras aceleraba cada vez más el coche, ahora iba a unos 75 km/hora
"Lo lamento tanto Yoh, pero es por tu bien, enserio lo lamento. Pero solo así estarás seguro" pensaba Anna mientras seguía corriendo a ciegas, pues su llanto le hacía ver todo borroso y es que no había notado que estaba a mitad del bosque
"Ella está fuera de mi vida, yo la saqué para siempre" se repetía una y otra vez así mismo. Ahora iba a 85 km/hora
"Sé que me odiarás por todo esto, pero lo hago pensando en ti" decía Anna aumentando su velocidad sin importar los árboles
"Aún la amo" admitió el chico que ahora iba a 100 km/hora
"Lo lamento Yoh" aumentaba su carrera hacia la nada
"Después de 10 años" 110 km/hora
"Te he fallado Yoh" Ya casi salía del bosque
"La sigo soñando" 120 km/hora
"Perdón" estaba a punto de salir
"Te amo" dijeron los dos al mismo tiempo cuando se cruzaron
Anna había salido del bosque y éste daba hacia el camino en donde un loco iba manejando a 120 km/hora y de no ser porque dio el volantazo al ver una silueta familiar la hubiera arrollado y obviamente asesinado. Lo único malo de esto, es que el coche al girar bruscamente y con tanta velocidad se volcó y dio varias vuelvas destrozándose. Anna estaba en shock, había estado a punto de morir, solo pudo ver en cuanto salió del bosque dos luces y luego vio un coche dando vueltas en el aire. Para suerte del chico, este llevaba puesto el cinturón de seguridad lo cual ocasionó que no sufriera daños severos.
Anna fue corriendo una vez que el coche se detuvo quedando bocabajo, fue a ver si el conductor estaba bien. Llegó y vio a un chico apuesto inconsciente y obviamente sangrando por el accidente. Le quitó el cinturón y con mucho esfuerzo lo sacó del auto. Lo arrastró por el suelo hasta dejarlo en una zona segura.
-Oye ¿estás bien?- preguntaba algo angustiada, ya que había sido literalmente su culpa que el chico haya tenido que girar para evitar atropellarla
-…- el chico estaba inconsciente
-¡Levántate!- exigió Anna apunto de que se le quebrara la voz
-…-
-¡OYE!- gritó Anna reteniendo las lágrimas ¿Qué le pasaba?
-Mmmh…- gemía el chico mientras se despertaba
-¿Estás bien?
-Pe…ro… ¿qué pasó?- preguntó adolorido mientras intentaba fijar su borrosa vista
-Tuviste un accidente automovilístico
-Yo…me…due…le…todo- decía entre jadeos el chico
-¿Qué hago?- preguntaba Anna nerviosa, sin darse cuenta de que el chico la estaba mirando fijamente con la boca abierta y los ojos en blanco
Después de unos minutos el chico pudo centrar su vista y ponerla clara, pero al hacer eso vio quien era la chica a la cual había evitado arrollar hace unos minutos
-Anna…- pronunció el chico con sorpresa
-¿Qué? ¿Cómo sabes mi…- iba a preguntar Anna, pero el chico se desmayó por completo -¡Espera! ¿Quién eres?
~¿Acaso no lo recuerdas? Piensa Annie~ habló una voz masculina que venía de la nada, ya que ahí no había nadie
-¿Qué?- preguntó Anna, pero se calló cuando le llegó un nombre a la cabeza –Miko…
Lamento no haber actualizado enserio, pero tuve serios problemas y bueno, las excusas sobran, pero las disculpas no.
Espero que este capítulo les guste, porfi, dejen Review :D Me esforcé muchisisisismo y está más largo que el anterior por compensación de dejarlos esperando tanto tiempo pero lo prometido es deuda y aquí esta.
Sstridnt: ¡ACEPTO EL RETO ;)!
Preguntas para el sig. cap:
¿Yoh y Anna se van a casar? ¿Hao conoce a Miko? ¿Miko conoce a Anna? ¿De dónde? ¿Anna lo conoce? ¿Yoh esta triste? ¿Anna no siente nada por Yoh? ¿Por qué dijo eso? ¿Qué hablaron la señora Kino y Anna? ¿Qué traman Kino y Yohmei? ¿Hao quiere a Anna? ¿Por qué? ¿De quien era esa voz? ¿Y Bon? ¿Qué hará Anna con Miko?
Contestación de reviews:
Edy Asakura: No te preocupes, yo igual estuve súper ocupada y es por eso que no puede subir capítulo pero aquí esta :D No te puedo prometer nada sobre Anna xD jaja lo siento. Jajaja Genial, sabía que pensabas en él. No te puedo decir si él sujeto está enamorado de Anna pero todos se darán cuenta xD jajaja Saludos y tu igual actualiza Por fis :3 Bye bye
Yts: Jejeje Tomé en cuenta tu comentario y créeme que amaran a este nuevo y mejorado Miko :3 Será súper celoso, eso sí. Gracias por tu review , espero y dejes otro en este cap :3 Lamento no haber actualizado pero tuve tantos problemas que me hice bolas y no puede subir, jejeje, por poco me contagio, pero me vacune y mira…¡COMO NUEVA! Jajaja. Acabaré esta historia y lo juro por las matemáticas '-'7 No te vuelvas loca, asi me caes muy bien. Gracias por tu review y bye bye *-*7
Guest: Jajaja y eso que aún no viene lo peor, Esto se pondrá intenso y MUCHO jajaja- Yoh se preocupa por ella porque la ama :3 y Kino planea algo muy malo que solo los verdaderos seguidores de la antigua historia sabrán que trama Kino y Yohmei. Hasta la próxima ;) Deja Review en este por fis x3
Sstridnt: Jejeje Gracias, pueeeeeeeeeeeees, no te puedo adelantar mucho, pero te diré que en esta historia, en un futuro Anna será pelirroja, es todo lo que te puedo adelantar xD Jajaja sí, ese chico era Miko. Sí, maldita Kino, desde pequeña le ponía esos entrenamientos Dx Yoh se pondrá peor según avance la historia :o Bye bye (~'0')~
Les agradezco a los demás que leyeron mi historia y no dejaron review :( espero que en este capítulo dejen su opinión :)
Soy Christa y te estoy vigilando .-. Bye bye :3
