Un plan para todos
La mitad de su plan estaba hecho, ahora solo había que quitar a alguien del camino y ese alguien era su hermano.
-Te lo juro
-Esta bien Hao- respondió Yoh seriamente para luego sonreír como siempre lo hacía -Si no te molesta quiero seguir entrenando
-¿Para qué? No está Anna para obligarte a hacerlo
-Por lo mismo debo entrenar, porque sino lo hago cuando ella vuelva me golpeará
-Como quieras- respondió Hao dudando un poco sobre la explicación de su hermano pero bueno, era Yoh, así que decidió dejarlo solo -Tengo cosas que hacer, volveré para cenar con ustedes
-De acuerdo
-Yoh, está demás decirte que no hagas ninguna estupidez mientras no estoy ¿Verdad?- preguntó Hao mientras veía como su hermano se sentaba en el suelo para continuar haciendo sentadillas
-No te preocupes, no haré nada estúpido- sonrió Yoh esforzándose todo lo posible para que su sonrisa se viera normal, aunque no lo era
-Bien- dijo Hao mirando su sonrisa, se veía igual a la que él usa diario pero tenía un toque forzado aunque quizás solo era su imaginación
El Asakura mayor no dijo nada más y se retiro llamando al espíritu de fuego para poder volar por todo Izumo en dirección hacia el bosque en busca de alguien. Era hora de poner su plan en marcha, la mitad ya estaba lista, ahora con la ayuda de la rosa blanca que poseía todo el tiempo bajo su poncho lograría convencer a aquella bruja a ayudarlo.
Yoh vio cómo su hermano se iba por los cielos en el espíritu de fuego y cuando estuvo lo suficiente lejos como para poder verlo desapareció su sonrisa de su rostro. ¿Acaso todo el mundo creía que él era un estúpido? ¡Pues no lo era! Se sentía traicionado por su familia, por Hao, por sus abuelos e incluso por sí mismo. Él sabía que todo el mundo tenía un plan así que ¿Por que él no iba a tener uno? Lo primero era encontrar una manera para no dejar que Hao leyera sus pensamientos o si no nada de lo que planeara funcionaría. Sabía que se necesitaba el reishi para hacer un escudo mental pero él no lo tenía, solo una persona había sido capaz de hacer ese tipo de escudos sin tener el reishi. Debía buscarla y pedirle que le enseñara a hacerlo pero sin levantar sospecha alguna.
-Pero ¿En dónde está mi abuela?
Hao no tuvo noción del tiempo, se había distraído en observar la rosa. Pensaba en todo lo que había tenido que pasar hace 500 años para poder plantar aquel rosal…
FLASH BACK
Hao Asakura se encontraba caminando tranquilamente durante la tarde por el jardín de su mansión. Eran cerca de las tres de la tarde, había un sol abrumador pero también había un aire muy fresco. Todo era pasto fresco, ni una sola flor se encontraba allí… realmente se respiraba…
-Soledad
-Que gusto verte por aquí- Hao sonrió mientras se acercaba a la chica
-También me da gusto Hao
-¿Qué haces por aquí? Pensé que estarías con Grimm- preguntó Hao con una mueca de malestar
-Grimm está ocupado planeando la boda- respondió ella son una tristeza palpable
-Si no quieres casarte no tienes por qué hacerlo
-¿Acaso el padrino de bodas me está pidiendo que huya con él?- preguntó la chica con una ceja alzada
-Sí
-Sabes muy bien que no puedo hacerlo
-¿Por qué no, Layla?- preguntó Hao con los puños cerrados mientras veía como ella caminaba con los ojos cerrados respirando el aire fresco
-¿Sabes? A este lugar no le vendría mal un par de flores
Hao suspiró con cansancio, cada vez que él hacía la misma pregunta ella le cambiaba el tema. Lo único que podía hacer era seguirle el juego.
-Tienes razón, he pensado en plantar algo pero todavía no se qué
-Quedaría bien un rosal- sonrió Layla mientras sacaba una bolsa llenas de semillas se rosa
-Sí, me gustaría un rosal- respondió Hao luego de ver el saco de semillas
-Estas semillas son especiales- contaba Layla mientras sacaba unas cuantas y las depositaba en la mano de Hao
-¿Por qué?
-Porque contienen mi esencia- respondía ella mientras veía como Hao se quedaba pálido –Es enserio, dentro de estas semillas se encuentra parte de mi esencia
-¿Cómo es posible?
-Cuando era niña mi madre decía que cuando una persona le regalaba unas semillas al amor de su vida, en éstas se quedaba la esencia de dicha persona. Ya sabes, para que acompañen al ser amado y toda esa bola de ridiculeces- respondió Layla mientras rolaba sus ojos color miel
-¿Entonces me amas?- preguntó Hao algo anonadado
-Ya te lo dije, no lo repetiré- sentenció ella con una sonrisa burlona –Así que espero que cuides bien de este rosal o te patearé el trasero
-No será necesario cuidarlo yo solo
-¿Por qué dices eso?
-Porque sé que mi destino es estar junto a ti, podremos cuidarlo juntos- sonrió Hao mientras tomaba la mano de ella
-¿Sabes Hao? El destino es algo extraño nunca se sabe cómo van a resultar las cosas…- decía ella al momento de tomar la mano de él para luego posarla en su pecho, justo en donde debería ir su corazón -… pero si mantienes tu mente y corazón abiertos, te prometo que encontrarás tu destino algún día
-Te prometo que pase lo que pase siempre estaremos juntos- sonrió Hao dulcemente mientras veía como ella se sonrojaba. Así era ella, era dulce, inteligente, ágil, hostil y poco sociable pero así la quería
FIN FLASH BACK
-No fallaré a esa promesa- dijo Hao en voz alta para él mismo mientras seguí mirando la rosa con una sonrisa dulce
Yoh caminó hacía su casa y al llegar buscó como loco a su abuela pero, no la encontró. Suponía que debía estar en el templo rezando como de costumbre lo hacia, así que sin pensarlo dos veces se dirigió hacia allá. Durante el trayecto intentaba hacer la excusa perfecta para pedirle a su abuela a que le enseñara a realizar el escudo. Su abuela era astuta, si quería tener éxito todo debía ser preciso, sin miedo.
No tardó mucho en llegar al templo. Entró y vio a su abuela hincada delante de un altar. Yoh sabía que a su abuela no había que interrumpirla durante su rezo, así que decidió sentarse a esperar que ella terminara, pero ella no lo dejó.
-¿Qué quieres Yoh?- preguntó la anciana Kino aún de espaldas
-Quería pedirte un favor abuela
-¿Qué favor?- cuestionó Kino al momento de voltear a verlo
-Quiero que me enseñes a hacer un escudo mental- contestó decidido Yoh mientras mantenía una cara seria
-¿Para que?- si hubiera una regla no escrita sobre los Asakura sería que ellos no se andan con rodeos y Kino lo demostraba en este momento
-Lo necesito
-No
-Abuela, tienes que ayudarme
-Dame una sola razón
-Si no lo haces no duraré en el torneo- se excusó Yoh al ver la cara de su abuela
-¿De que hablas?- Kino estaba confundida
-He estado pensando sobre el torneo y creó que yo también debería saber realizar un escudo mental ya que, aunque buscan a Anna estoy seguro que ellos quitaran a todo el que intente protegerla y tu sabes que yo lo haré sin dudar, por eso te pido que me enseñes a hacerlo
-¿Y por que yo? Deberías pedírselo a Hao- decía Kino seriamente, algo no cuadraba en esa explicación
-Hao está demasiado ocupado entrenando a Anna, no hay tiempo que perder. Además, creí que tu serias mucho mejor maestra que Hao- retó Yoh a su abuela dando justo en el clavo ya que había lastimado el orgullo de su abuela
-¡Claro que soy mucho mejor que tu estúpido hermano!- grito Kino al momento de pararse -Mañana mismo empezaremos, pero debo advertirte una cosa
-¿Qué?
-No será fácil
-No lo espero
Kino sonrió discretamente, se puso de pie y salió caminando del templo.
Junto a una ventana se encontraba Bon, él estaba caminando en círculos. Estaba preocupado, su amo no estaba. Luego de haber cumplido con éxito su trabajo había vuelto para darle la buena noticia, pero al volver al castillo él no estaba. Lo había intentado buscar mediante su furyoku pero no logró hacerlo. Había escondido su esencia.
Grimm no hacia eso, él era fuerte pero se suponía que tenían un plan. Algo debería estar mal, antes de que Bon siguiera atormentándose su amo entró por la puerta.
-Bon- saludo cortésmente Grimm
-Mi señor, lo he estado buscando- admitió el chico seriamente -Pensé que le había ocurrido algo terrible
-Fui a visitar a mi mejor amigo- admitió Grimm como si fuera lo más normal de mundo
-P-pero señor…- intentaba decir Bon pero tenía los ojos en blanco
-Sé lo que estas pensando, pero lo hice porque tenía que separar a los gemelos. Si están separados no son un peligro para mi
-Tiene razón mi señor
-Fui a llenarle la cabeza de estupideces a Yoh, ahora él duda de su propio hermano
-Si me permite aconsejarle algo mi señor, yo creo que deberíamos aprovecharnos de eso
-¿Qué sugieres?- preguntó Grimm algo curioso
-Hoy vi a la señorita Layla con el joven Miko. Al parecer ella paso la noche en su casa, creó que si separamos a los gemelos Asakura de ella será mucho más fácil matarla- sonrió Bon con cierta maldad
-Ella no morirá, la necesito con vida, ya te lo dije
-…-
-Para traer de vuelta a Layla es necesario que ella siga con vida
-Lo entiendo señor- se disculpó Bon
-Aunque tu plan no suena mal, deberemos separar a los Asakura de ella
-Sólo que no sé como mi señor
-Es simple, para eso nos vendría bien tener de nuestro lado a Miko Yamato. Él quiere a Layla, lo único que debemos hacer es hacerle creer que si nos ayuda a alejar a los Asakura, él podrá quedarse con Layla…
-Y luego se deshará de él
-Exacto, pero debemos tener mucho cuidado. Él no es un idiota, será difícil convencerlo
-Yo puedo ir mi señor- se ofreció Bon con una sonrisa retorcida
-No, debe ir alguien con más tacto. Busca a Darko y explicale su misión
-Está bien señor
-También quiero que busques a los demás, muy pronto comenzará el torneo y los necesitaré
-Claro mi señor
-¿Qué pasó con el asunto que te encargue?
-Ya está listo- sonrió Bon
-¿Justo como te lo pedí?- Grimm alzó una ceja
-Si amo, se cambio el rosal de la mansión Asakura justo como usted lo ordeno
-¿Y pusieron el repuesto?
-Sí amo, nadie notó que lo cambiamos hace semanas
-Te felicitó. Ahora sólo es cosa de esperar a que Hao intente traer de vuelta a Layla, lastimando a Anna irremediablemente
-Pero señor, ¿Eso no afectaría su plan?- preguntó Bon algo alarmado
-Al contrario, eso nos beneficiaría bastante
-Como usted ordene señor, me retiro- dijo para luego hacer una reverencia y marcharse del lugar para realizar todo lo que su amo quería
Grimm se acercó a un espejo de cuerpo completo el cual se encontraba en aquella habitación. Se posicionó delante de él y alzando una de sus manos tocó gentil mente el espejo.
-Esto sería diferente si no te hubieras enamorado de él, Layla- pronunció Grimm con una tristeza palpable en su rostro. Tenía un nudo en su garganta, aún dolía, pero no por eso iba a tentarse el corazón para obtener lo que quería. Él no era malo, ella lo había hecho malo. Su desamor causó que su alma se pudriera. Ahora era turno de ella…
-Te pido una disculpa, eso no debió pasar- se disculpó Miko al momento de mirarla con tristeza
-Tienes razón, no debió pasar- ella estaba enojada
-Lo lamento- volvió a pedir perdón Miko al momento de bajar su mirada. Se sentí pésimo pero no era principalmente por Elena, sino porque habían pasado muchas cosas. Había golpeado a un hombre, su madre lo odiaba, ahora era el culpable de la muerte de su padre y ahora la que se SUPONÍA era su mano derecha había ofendido a su querida Anna. Tenía ganas de arrancarse su cabello con sus propias manos.
-Tranquilo- sonrió ella al momento de sujetar su mentón para hacer que él la mirara. Ella sabía que esta mañana había sido dura para él. Había perdido a su madre y ahora a su mano derecha.
Anna podía sentir cómo se encontraba Miko, él estaba confundido, triste, enojado, feliz, impotente y frustado. Durante todo el camino le había querido preguntar algo, tal vez este era el momento.
-Entonces ¿Eres un Shaman?-
-¿Eh?- dijo Miko confuso pero con una mirada de "ya te lo dije" por parte de Anna él reaccionó -¡Ah! Sí
-¿Y cuando pensabas decírmelo?- preguntó ella enojaba mientras se cruzaba de brazos
-Creí que ya lo sabías
-¿Por qué crees eso?
-Porque escondí nuestras esencias- respondió Miko alzando los hombros como si fuera lo más noooormal del mundo
-¿Qué?- ella en cambio puso los ojos en blanco. Ahora entendía porque ni Yoh ni Hao la habían encontrado -¿Cuándo?
-Ayer…- Miko estaba algo confundido -¿Acaso no lo recuerdas?
-No
-Mmmh, entonces te contaré lo sucedido…- decía Miko mientras recordaba todo lo ocurrido la noche anterior
FLASH BACK
-¡Nana! Ya llegué- gritó Miko al momento de entrar a su casa, desde la puerta que era donde se encontraba había visto como María salía de la cocina con una sonrisa
-Me alegro mi niño- ella acarició la cara del chico una vez que se había parado delante de él -¿Cómo te fue?
-De maravilla, creo que mañana la volveré a ver
-Hacía tanto tiempo que no te veía sonreír
-Lo sé- sonrió amargamente Miko –Desde que mi padre murió
-Así es
-¿Y mi mamá?- preguntó Miko mientras dejaba las llaves del auto sobre una pequeña mesa junto a la puerta
-Ya se fue a dormir
-Querrás decir se fueron a dormir- pronunció Miko con algo de rencor enfatizando "se fueron"
-El señor Raúl no es tan malo- intentaba excusar María
-Tienes razón, no es malo…Es un bastardo- se rió Miko por el comentario
María lo iba a regañar pero un estruendo llamó la atención de ambos. Se parecía al sonido que hace un rayo cuando cae en la tierra. También se escuchaban jadeos y gemidos de dolor, parecía que una batalla se estaba realizando afuera.
-Qué raro, en las noticias no dijeron que fuera a haber una tormenta- explicó María con algo de curiosidad
-No creo que sea una tormenta nana…- decía Miko mientras se concentraba en escuchar algo para averiguar lo que estaba pasando
-Deberíamos ir a dormir- sugería María nerviosamente
-Voy a investigar- pronunció Miko mientras se daba la vuelta y tomaba su espada por si las dudas
Abrió la puerta y lo que vió lo dejó en shock. Era Anna, ella estaba siendo atacada por un hombre, el cual se encontraba encima de una nube gris mientras lanzaba rayos hacía ella con la intención de lastimarla. Anna se veía cansada, tenía rasguños en todo su cuerpo, la ropa la tenía toda rasgada.
Anna tenía un escudo pero se podía percibir a simple vista que ese escudo no iba a aguantar nada y el chico que la atacaba parecía saberlo, ya que había sonreído macabramente mientras susurraba un "ya te tengo" al momento de lanzar un rayo en dirección hacia ella.
Estaba tan débil que no le importaba si su escudo era fuerte o no, estaba cansada. En cuanto vio que el rayo iba en dirección hacia ella solo cerró los ojos esperando un golpe que nunca llegó. Miko estaba delante de ella en pose defensiva, tenía su espada en guardia, había desviado el rayo.
-Miko…- susurró Anna mientras intentaba seguir conciente
-Tranquila- le sonrió él para luego volver a mirar al chico rayo
-No te metas, ésta no es tu pelea- le explicó el chico que estaba en la nube
-Te equivocas, ahora también es mi pelea- lo retó Miko –Lárgate antes de que te provoque un dolor nunca antes visto
-Jajaja- rió el chico al momento de bajar de su nube para caminar con las mano en la espalda –Esa chica es mía, debo llevármela
-Primero muerto a dejar que te la lleves- pronunció Miko al momento de llamar a su espíritu acompañante -¡Michie posesiona la espada ancestral!
En ese un cerdito rosa llamado Michie entró en una espada. Michie era un puerco (literalmente), su poder era enorme, si uno lo miraba no pareciera que era agresivo ya que daba ternura, pero al momento de fusionarse en la espalda su aspecto cambiaba completamente. Su espada se iluminaba de un aura entre rojo y rosa, podían verse los ojos de Michie en el mango de la espada, en esto se podía ver una inmensa rabia.
El chico del rayo no se había inmutado ni un solo momento, solo había visto con algo de aburrimiento la posesión. Miko en cambio estaba listo para él ataque.
-Un cerdo- se burlo el enemigo del espíritu de Miko –Que tierno
-¡Michie!- gritó Miko al momento de lanzarse a atacar -¡Ojos de furia invertida!
Mientras el enemigo se burlaba del espíritu de Miko, éste decidió atacarlo con todo lo que tenía. Los ojos de furia invertida había sido una técnica heredara, el ataque consistía en rodear al enemigo en una neblina muy densa causando alucinaciones ya que la neblina era venenosa y altamente tóxica, mientras el enemigo luchaba solo, Michie (el cerdo) drenaba su furyoku mediante su mirada.
Cuando Miko acabó de atacar el chico enemigo cayó al piso inconsciente, ese ataque era su mayor orgullo. Sonrió con arrogancia al ver a su contrincante K.O (noqueado), luego fue corriendo hacía Anna para ver cómo estaba.
-¡Anna!
-Hola- ella sonrió débilmente
-¿Qué te pasó?- preguntó el chico al momento de colocar la cabeza de ella en sus piernas
-Ese idiota me venía siguiendo- explicaba ella –Luego me atacó de la nada
-No te preocupes, él está inconsciente
-Vendrán más- susurró ella al momento de cerrar los ojos, todo le dolía
-¿Qué?- Miko puso una cara seria –Esconderé nuestras esencias- sentenció él
-Eso es una b-buena idea- sonrió con burla ella –Después de todo, eres un Shaman
-Al igual que tú- le acarició delicadamente a ella
-Y-yo…-iba a decir Anna pero se desmayó
Miko no se preocupó demasiado, él sabía que era por todo el cansancio que tenía, además de que su furyoku estaba muy bajo, podía sentirlo. Con un simple pensamiento ocultó ambas esencias, si era cierto lo que Anna decía muchos debían de buscarla para hacerle daño. Pero por lo menos así ella tendría una noche tranquila, podría dormir bien.
Dejó su espada en el suelo para poder tomar a Anna en sus brazos, la levantó y comenzó a caminar hacía su casa…
FIN FLASH BACK
-Después de eso te lleve a mi casa- explicó Miko –Estabas tan mal que incluso mi nana tuvo que pasarte furyoku
-¿Tu nana?- preguntó Anna
-Sí, ella también es un Shaman. Solo que ella se especializa en el área de medicina, ella curó tus heridas, es por eso que te levantaste perfecta.
-Oh…- ella no recordaba nada de eso, solo recordaba haber salido corriendo de la mansión Asakura
-No lo recuerdas ¿Verdad?
-No
-Es entendible, gastaste mucho furyoku
-Sí tu lo dices- pronunció Anna algo avergonzada, no quería verse débil delante de él
-Sé lo que piensas, pero déjame decirte que no eres débil- sonrió Miko con ternura
-Gracias- mencionó ella mientras se sonrojaba
-Te tengo una sorpresa, ahora vuelvo- pronunció Miko mientras se daba la vuelta y salía de la habitación cerrando la puerta detrás de él dejando a Anna sola
Ya estaba cerca, podía sentirlo. Estaba ansioso, había esperado este momento durante 500 años, la volvería a ver dentro de poco.
Luego de haber volado por unos minutos, Hao junto con el espíritu de fuego habían descendido en un bosque. Estaba caminando hacia una cabaña antigua, allí vivía una anciana con poderes impresionantes. Nunca pensó que la visitaría ya que él planeaba hacer esto cuando fuera rey Shaman, pero dadas las circunstancias no podía darse el lujo de esperar.
Aceleró su paso y por fin llegó a la puerta. No se molestó en tocar, así que entró directamente. Delante de él se encontraba una anciana decrépita. Medía no más de 1.60 metros, tenía el cabello blanco, en su rostro estaban muchas arrugas. En fin. Era una anciana algo rara.
-Hao Asakura- pronunció la anciana al momento de fijar su vista en él. Ella estaba sentada delante de una mesa leyendo un libro antiguo
-Tienes que ayudarme- él no tenía tiempo para presentaciones
-Sé lo que deseas, pero desgraciadamente no puedo hacerlo
-¿De qué hablas?- se exaltó Hao
-No puedo hacerlo- se disculpó la anciana volviendo a fijar su vista en el libro
-¡¿Y si te quemo tú casa?!- gritó Hao sumamente enojado
-Seguiría diciendo que no
-¿Por qué no?- preguntó Hao
-Mi magia no es oscura
-No vengo a eso- Hao estaba confundido. Había sacado la rosa y la había colocado en la mesa encima del libro –Necesito que saques la esencia de esta rosa
La anciana miró la rosa negra con una ceja alzada ¿Acaso él no veía el color de la flor? En esta flor se encontraba una esencia oscura.
-¿Sabes lo que tienes esta rosa?
-Sí
-¿Estás consciente de lo que pasaría si te ayudo?- preguntó la bruja para advertirle
-Sí
-¿Sabes lo que tienes que dar a cambio para que esto funcione, verdad?
-Sí- respondió Hao al momento de extender su mano sobre la rosa
Ella tomó un cuchillo y con un ligero corte logró sacar una gota de sangre para luego dejarla caer en la rosa. Si él chico sabía los riesgos era porque en verdad sabía lo que contenía esa rosa negra. Que equivocada estaba la anciana. Hao sabía que era una rosa blanca, nunca notó que alguien había cambiado los rosales, cuanto lo lamentaría más tarde.
Si todo resultaba como él lo planeó muy pronto Layla estaría de vuelta.
La anciana estaba conjurando un rezo antiguo, pero lo decía en una voz tan baja que Hao no podía escuchar nada, así estuvo exactamente tres minutos, luego sus ojos brillaron al igual que el interior de su boca. El hechizo consistía en algo simple, la anciana debía sacar la esencia de la rosa para posarla en el cuerpo correspondiente (el de Anna), esto llevaría tiempo. La gota de sangre era una ofrenda, significaba que al traer de vuelta a la persona ya mencionada (Layla) ésta lograría volver con todo el poder de su vida pasada.
La anciana tomó la rosa y partió por la mitad el tallo de la rosa para luego susurrarle algo. Ya había identificado al cuerpo correspondiente para poder mandar la esencia.
Anna se había sentado mientras esperaba a Miko. Pero de repente le había llegado una comezón espantosa por todo su cuerpo. No sabía porque pero sentía que el aire le estaba faltando. Se estaba sofocando.
Algo andaba mal en ella, se había mirado sus brazos en busca de alguna razón o motivo para su picazón pero se sorprendió al ver cómo sus venas se estaban hinchando, parecían que iban a explotar, estaban rojas.
Ya estaba a mitad del ritual, había comenzado a introducir la esencia en aquel cuerpo, pero se resistía. Él o ella estaba luchando, no se dejaba ir. Esto era más difícil de lo que normalmente lo es.
Debía hacer presión o todo fallaría, solo esperaba no causar daño alguno
Su corazón estaba latiendo a mil por hora, parecía que se iba a salir de su pecho. Ella sabía que alguien la estaba tratando de hechizar, no debía permitirlo.
Era fuerte la persona que estaba luchando, pero ella lo era más
Cada vez era más difícil respirar, se estaba debilitando
Ya casi estaba, la persona ya no estaba en condiciones de seguir batallando. Algo estaba mal, al parecer la esencia se acoplaba perfectamente al cuerpo pero había algo que no la dejaba unirse a su alma.
Le dolía el pecho, era un gran ardor. Como si le estuvieran clavando un cuchillo en el corazón. Nunca se había sentido así.
Se necesitaba un empujón para que quedara listo
Ya no podía más
Casi estaba
Debía dejarse ir
-Listo- pronunció la anciana al momento de salir de trance. Se giró hacía Hao para explicarle una cosa –El cambio se realizará exactamente en un mes
-De acuerdo- sonrió Hao
-Pero debo advertirte algo, una vez que suceda, no podrás hacer nada para revertirlo
-Lo tengo bien claro
-Puedes llevarte tu rosa negra- señaló la ancina la flor sobre la mesa
-¿Negra?- preguntó Hao algo sorprendido
-Sí, ¿Qué estás ciego?
-…- Hao no dijo nada, estaba perplejo…no podía ser posible, la rosa era negra…eso significaba que lo habían engañado
-No lo habías notado
-¡TÚ LO SABÍAS Y NO ME DIJISTE NADA!- gritó histérico Hao, la había cagado y muy fuerte
-Tú dijiste que sabías los riesgos- alzó los hombros restándole importancia –Solo hice lo que me pediste
-Debo impedir ese cambio
-No podrás hacerlo, ya está hecho. No hay vuelta atrás
-No, no lo acepto- respondió Hao seriamente
-Ella morirá
Anna estaba en el suelo, se había desmayado. Todo había sido muy raro, de la nada una punzada en su cabeza le había hecho perder el equilibrio. Pero no se sentía como antes, ahora se sentía acompañada…
Ella parpadeó y si Miko hubiera estado con ella se hubiera percatado de cómo los ojos de ella cambiaban de color miel a un color rojo durante una milésima de segundos para luego volver a ser normales.
Le ardía el cuello, como si tuviera algo. Se tocó esa área e instintivamente la presionó, pero al hacer eso soltó un grito de dolor, ardía…
-Hola
-¿Qué?- preguntó ella en voz alta, había escuchado una voz, pero allí no había nadie
-Se siente raro
-¿Qué cosa?- esa voz había vuelto a hablar
-Estar en un cuerpo de nuevo
-¿Quién eres?- preguntó en voz alta Anna mientras volteaba por todo el cuarto buscando algo
-Pierdes tu tiempo, no puedes verme, solo oírme- respondió esa voz con un tono de burla
-¿Quién eres?- volvió a preguntar ella
-Mi nombre es Layla
-¿En dónde te encuentras?- preguntó atónita Anna…no podía ser
-Dentro de ti
Holiwis x3
Tal vez estén sorprendidos ya que he actualizado muy seguido pero lo hago porque el Lunes que viene entraré a clases Dx y no tendré tiempo para nada, así que intento actualizar lo más que pueda.
Tambien lo he estado haciendo porque mis papás me llevaron a diferentes lugares y me inspiré, así que pues jejeje xD
Pido disculpas si no escribí comentarios en los dos capítulos anteriores pero los subí de rápido, apenas y pude subirlos. Casi no tuve tiempo por eso no escribí nada .-.
Pero bueno, dejaré de distraerlos y les dejaré las preguntas para el siguiente capítulo
¿Hao es malo? ¿Por qué quiere traer de vuelta a Layla? ¿Cuál será el plan de Yoh? ¿funcionará? ¿Logrará hacer el escudo? ¿Anna y Miko? ¿Por qué Anna salió corriendo de la mansión? ¿Por qué la atacaron? ¿Quién la atacó? ¿Grimm de verdad quiere a Anna? ¿Layla está dentro de Anna? ¿Por qué la rosa era negra? ¿Eso es malo? ¿Es bueno? ¿Qué le pasará a Anna? ¿Miko es un Shaman? Sí xD ¿Por qué Anna siente muchas cosas por Miko? ¿Será amor? ¿Hao logrará evitar que Anna muera? Espero que si xD
Sé que son muchas preguntas pero son necesarias, por cierto, quisiera decirles que pongan mucha atención porque todo lo que ponga tiene un significado y un porqué, el cual, más adelante será revelado.
Sin más que decir, estas son las contestaciones de los reviews:
Saralour-tita: Jeje me alegra que te guste mi historia x3, espero que te guste este capítulo :D
Lyly-M: Jajaja por lo pronto no se verá lo que pasó después de la bofetada pero en cuanto se sepa va a arder troya (es un dicho Mexicano) ósea que se va a poner intenso, creo que es parte mi culpa ya que si no actualizo seguido se les olvida la historia xD prometo actualizar más seguido, o por lo menos intentarlo
papaola: Jiji de hecho yo pensé hacer el capítulo aún más corto pero pensé que sería demasiado corto así que lo alargue lo más que pude, este estás muchísimo más largo, espero y te guste :3
dayoku 13: Y yo espero seguir, te prometo seguir actualizando por lo menos cada cuatro o cinco días :D claro que un review no me molestaría ¡Eh! xD
Soy Christa y te deseo un feliz cumpleaños (debe ser el cumpleaños de alguien hoy xD)
Los quiero :3
Bye (*-*)7
