Capítulo 2x03: "Mala luna cresiente."

Pensión Salvatore

"Gracias por venir, Ric." Damon saludó a Alaric Saltzman en la puerta de la mansión Salvatore. Cuando el hombre entró cerró la puerta. "¿Puedo conseguirte algo de beber? ¿Café, bourbon, bourbon en su café?"

Ric no contestó. "Elena mencionó que necesitaban mi ayuda."

"Sí." estuvo de acuerdo Stefan. "Teníamos la esperanza de que pudieras ayudar a arrojar algo de luz sobre la familia Lockwood."

Alaric enarcó las cejas. "Ahora, ¿por qué sabría algo sobre los Lockwood?"

"Bueno, no lo harías." le dijo Damon mientras se sentaba en una silla al lado de Stefan. "Pero tu esposa vampiro, muerta y no muerta, podría."

"La investigación de Isobel. Desde cuando estaban juntos en Duke." aclaró Elena.

"Dijiste que ella había pasado años investigando esta ciudad." Stefan lo dijo como una declaración, pero sonaba como una pregunta.

"La investigación de Isobel aquí en Mystic Falls estaba arraigada en el folclore y la leyenda." explicó Alaric. "En ese momento, pensé que la mayoría de los cuales era ficción."

"Como esa increíble historia de vampiros." dijo Damon con una sonrisa.

"Aparte de los vampiros, ¿qué más?" Elena empujó.

"El licántropo." respondió Ric.

Elena se enderezó. "Espera, ¿como los hombres lobo?"

"De ninguna manera." dijo Damon, sentándose en la silla. "Imposible. Camino demasiado Lon Chaney." argumentó.

"¿Lo es?" Stefan desafió a su hermano.

Damon le lanzó una mirada furiosa a Stefan. "He estado en este planeta unos sesenta y tantos años, nunca he encontrado uno. Si existen hombres lobo, ¿dónde diablos están?"

Alaric interrumpió. "¿Por qué sospechas de los Lockwoods?"

"Porque la verbena no afectó al alcalde en el Día de los Fundadores, pero el dispositivo de Gilbert sí." Damon respondió. "Y afectó a su hijo, Tyler."

"Y en el carnaval de la escuela, su tío Mason exhibió un comportamiento inhumano cuando luchó contra uno de los trabajadores del carnaval." agregó Stefan. "Se sugirió algún tipo de entidad sobrenatural."

"Esperábamos que la investigación de Isobel nos ayudara a descubrir qué es." le dijo Elena.

"Bueno, todas sus cosas todavía están en Duke." explicó Alaric. "Quiero decir, su oficina todavía está allí. Técnicamente todavía está desaparecida."

"Entonces, ¿podemos tener acceso a eso?" Damon le preguntó. Ric se quedó en silencio por un momento antes de que Damon continuara. "Ric, necesitamos saber con qué estamos lidiando. Si esta cosa del hombre lobo es verdad, he visto suficientes películas para saber que no es buena. Significa que Mason Lockwood es un Lon Chaney de la vida real. Y ese pequeño Tyler punk puede muy bien ser Lon Chaney Jr. Lo que significa que Bela Lugosi, es decir, yo, está totalmente jodida."

Fue una analogía aproximada, pero entendió el punto. Alaric asintió.

"Está bien, está bien. Todavía puedo entrar a la oficina. Nos iremos dentro de una o dos horas." dijo levantándose de su asiento y caminando hacia la puerta.

Elena y Stefan se fueron para dejarla prepararse para el día en Duke, que parecía que sólo consistiría de Damon, Elena y Alaric.

Damon sabía que Stefan no estaba contento con la situación, pero tampoco era como si Damon estuviera contento con eso. Sabía que Elena todavía estaba más que enojada con él. Solo tendría que hacer algo que valiera la pena recuperar en sus buenas gracias.

Sus pensamientos se interrumpieron cuando escuchó pasos que venían hacia la sala. Cuando levantó la mirada vió que era Elizabeth. Dejó el vaso de sangre sobre la mesa que estaba junto a él al mismo tiempo que ella se detuvo bruscamente cuando lo vió.

"Vaya, pero si es la pequeña vampiro/bruja en persona." dijo con una sonrisa astuta.

"Buenos días a ti también." Elizabeth dijo rodando los ojos, antes de darse la vuelta y encaminarse hacia la salida, pero la voz de Damon la interrumpió.

"¿A dónde vas?"

"A un lugar donde no estés tú ." Elizabeth dijo fríamente. "No tengo tiempo para tus sarcasmos y tus juegos estúpidos."

"Bueno si te molestan tanto mis juegos estupidos, nada te impide irte." dijo Damon haciendo una seña hacia la puerta.

Elizabeth sacudió la cabeza antes de voltear a mirarlo. "Créeme nada me encantaría más, pero estoy anclada aquí hasta que Marcos regrese." ella se encogió de hombros. "Lo siento pero, aunque no quieras tendrás que soportarme por más tiempo."

"Eres muy impertinente, ¿sabías?" Damon le dió una sonrisa falsa.

"¿Impertinente yo?" Elizabeth bufó antes de cruzar los brazos. "Si hablamos de impertinencia, tú ganas el primer lugar."

Damon se levantó del sofá acercándose a ella enseguida. "¿Por que siempre tenemos que estar peleando? Creí que teníamos una tregua."

"En primer lugar tú eres el que siempre empiezas." Elizabeth levantó las cejas. "Y en segundo lugar esa tregua murió hace mucho tiempo-" se interrumpió riendo un poco. "No pertenecemos a la misma frase, y mucho menos a la misma habitación. Tú no me caes bien, yo no te caigo bien. Fin de la historia." con eso intentó irse pero él la agarró del brazo deteniendola.

"Eso podría cambiar." dijo Damon acercando su rostro al de ella.

Elizabeth se quedó en silencio, tratando de ocultar sus emociones al tenerlo tan cerca. Con lentitud se alejó del agarre de su brazo temerosa de lo que pudiera traer el contacto y se cruzó de brazos. "¿Todavía crees que soy como las demás mujeres con las que has estado? ¿Que con insinuasiones y palabras suaves voy a caer redondita?" ella sacudió la cabeza. "No te equivoques Damon. No soy un pasatiempo para que intentes olvidar a Katherine. Además sospecho que no me estarías provocando si Elena cediera contigo, ¿no?"

Ella se dió la vuelta una vez más, pero Damon la volteó agarrándola por la garganta, pegandola en una pared. "No te recomiendo que me provoques Elizabeth."

Rodando los ojos, Elizabeth también lo agarró de la garganta. Ambos hicieron gemidos y ruidos ahogados mientras se aferraban firmemente a las gargantas del otro.

"Bien, me rindo, ¿de acuerdo?" Damon le dijo asfixiado. Elizabeth sonrió antes de liberarlo. Él hizo lo mismo tosiendo y frotándose el cuello. "Maldita sea... Eres fuerte para ser pequeña."

"No me dan miedo tus amenazas Salvatore." dijo Elizabeth cruzandose de brazos. "Así que no pierdas tu tiempo y hacerme perder el mío contigo."

"No te quiero aquí." dijo Damon deteniendose frente a ella cuando se disponía a irse de nuevo.

Elizabeth sonrió burlandose de él. "Lastima, como te dije no puedo irme." subiendo su mano presionó su pecho para empujarlo lejos de ella. "Así que tendrás que aguantar mi presencia un tiempo más como yo tendré que aguatar la tuya."

Damon se quedó parado en el mismo lugar mirándola sonreír y rodearlo antes de irse. "Como odio a esa chica." murmuró entre dientes.

Enojado, drenó la sangre de la copa de la que estaba bebiendo antes de que ella hubiese aparecido y salió corriendo para encontrarse con Ric para irse con Duke.

Pensión Salvatore/Lago

Elizabeth entró más tarde a la casa cerrando la puerta detras de ella. Stefan y Caroline venian caminando por el pasillo, y se detuvieron al verla.

"¿Ya puedes salir a la luz del sol?" Elizabeth le preguntó a Caroline.

"Si, Bonnie ayudo con el hechizo." dijo Caroline. "¿Te gusta?" preguntó enseñándole a Elizabeth su anillo.

"Es lindo." Elizabeth dijo encogiendose de hombros.

"Mentirosa y lo peor es que tendré que llevarlo por el resto de mi vida." Caroline se quejó ganando una sonrisa de Elizabeth.

"En serio, me gusta." Elizabeth le aseguró, pero Caroline negó antes de salir de la casa.

"Iremos a cazar algo, tiene que comer y le enseñaré unas técnicas." dijo Stefan. "¿Vienes?"

Elizabeth dudó un poco, recordando las ordenes de Marcos de que se mantuviera fuera de foco mientras no estuviera. Pero estaba aburrida de estar todos los días encerrada en esas cuatro paredes. "Está bien. Solo no ataquen a las ardillas frente a mí, es un poco raro." le pidió ella y él asintió divertido.

"Entonces, ¿qué hago cuando vea al conejo?" preguntó Caroline de nuevo mientras se adentraban en el bosque.

"Lo persigues, lo atrapas, y te alimentas." repitió Stefan.

Elizabeth hizo una mueca de desagrado. No creía que hubiera sido muy buena idea haber venido con ellos, pero todo valía para no aburrirse en su habitación.

"¿Matar adorables e indefensos animales, no es el primer paso para convertirte en un asesino en serie?" preguntó Caroline.

"Bueno, te has saltado lo de asesino en serie, y te has ido directa a vampiro." Stefan se detuvo. "Caroline, si no te estas tomando esto en serio, creo que deberías decírmelo."

"No. Si que lo tomo en serio." Caroline se detuvo cuando miró a Stefan que la miraba como un padre miraba a su hijo para que le contara la verdad. "Lo juro. Es solo que no he visto el sol en días. Y todos están en la laguna, divirtiéndose. Matt esta ahí y por fin me dijo que me quiere, pero he estado evitándolo. Y ahora, tu quieres que yo coma conejos. Y estoy algo asustada."

Elizabeth sonrió al igual que Stefan.

"No es gracioso." se quejó Caroline.

"No, no, nada de esto es gracioso, en serio." le aseguró Stefan. "Es solo que cuando alguien se convierte en vampiro, todo su comportamiento natural es amplificado."

"¿Que quieres decir?" Caroline frunció el ceño.

"Me refiero a que como humano me preocupaba mucho por las personas y por lo que sentían. Si les estaba haciendo daño, yo lo sentía." las dos chicas escucharon atentas a cada cosa que decia. "Y me sentía culpable si era yo el que se los hacia. Y como vampiro todo eso se amplifica."

"¿Entonces, estas diciendo que soy una insegura neurótica y descontrolada que consume crack?" preguntó Caroline.

Elizabeth no pudo evitar reír.

"No lo iba a decir así, pero si." le respondió Stefan. "Escucha, vamos a cazar y después iremos a la laguna."

"¿De verdad?" preguntó Caroline emocionada.

"Si, estar con personas mientras estoy contigo me ayudara a ayudarte a controlarte."

"Okey." dijo Caroline feliz.

"¿Pueden cazar otra cosa que no sea conejos?" les pidió Elizabeth hablando por primera vez.

"No, ahora ayúdame a buscar un lindo conejo para que pueda comer y así me acompañaras a ir con Matt y mezclarte con otras personas." Caroline dijo tomando el brazo de Elizabeth.

"¿Por qué lo miras con tu mirada de vampiro serio?" preguntó Caroline cuando Sefan miró a Mason Lockwood.

"¿Mi qué?" preguntó Stefan. "¿Mi «mirada de vampiro serio»?"

"Es diferente a tu mirada de «vampiro preocupado» Ninguna de las dos dista demasiado de tu mirada de «¡Hey, es martes!»" se burló Caroline.

Elizabeth sonrió mientras ayudaba a bajar las cosas del auto.

"Ah, ya entiendo. ¿Tu crees que soy demasiado serio?" preguntó Stefan.

"No lo iba a decir así, pero si." Caroline copió sus palabras. "Voy a buscar a Matt, te dejo con el señor «no soy aburrido»" le dijo a Elizabeth antes de irse.

Elizabeth miró a Stefan. "¿Vamos a vigilarla de cerca o piensas darte un chapuzón?" preguntó divertida.

"Enserio ustedes creen que soy muy aburrido." afirmó Stefan.

"Solo un poco." murmuró Elizabeth.

"Vamos a darnos su chapuzón." Stefan dijo antes de alejarse.

Elizabeth lo vió caminando hacia donde estaban todos los chicos columpiándose de la cuerda para caer al agua. "¿En serio vas hacerlo?" preguntó ella y el asintió.

"Puede haber dos hermanos Salvatores divertidos." Stefan sonrió, pero Elizabeth hizo una mueca al recordar a Damon.

"Preferiría que solo hubiera uno." dijo entre dientes.

"¿En serio?" preguntó Stefan. "Pensé que tu y Damon estaban intentando tolerarse-"

"Solo fingimos hacerlo delante de todos." Elizabeth lo interrumpió secamente. "Y de verdad no vine aquí para hablar de él."

"Esta bien." sonrió Stefan antes de mirar detras de Elizabeth. Cuando ella volteó vió a Matt dejando a Caroline sola. Parecian enojados.

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"Vamos." Stefan dijo caminando hacia Caroline seguido de Elizabeth. "Hey, he visto eso. Obligaste a esa chica a irse."

"Si, se lo merecía." gruñó Caroline.

"Caroline, nadie merece que jueguen con sus mentes por razones superficiales." Stefan reprochó enseguida.

"¡¿Por que todos defienden a la maldita Amy Bradley?!" Caroline preguntó con rabia.

"A nadie le importa Amy." Elizabeth intervino por Stefan. "No puedes dejarte llevar por cosas tan pequeñas. Todos sabemos que le gustas a Matt y que el jamas te lastimaría o dejaría por otra persona."

"Mi nueva personalidad me está matando." Caroline se quejó.

"Deberías ir y hablar con Matt." Elizabeth sugirió ganandose una sonrisa de Caroline antes de irse.

Ya de noche con la luna llena brillando intensamente en el cielo, tanto Elizabeth como Stefan se encontraron sentados a la orilla del lago vigilando de lejos a Caroline.

"¿A veces no piensas en todo lo que te has perdido de la vida por ser un vampiro?" Elizabeth le preguntó después de un silencio.

"Siempre quise casarme y tener hijos. Verlos crecer y envejecer." Stefan sonrió levemente. "Cuando estoy con Elena, a veces olvido lo que soy y me veo haciendo todas esas cosas con ella."

Elizabeth sonrió sintiendo algo dentro de ella removiendose. Había pasado tiempo que no escuchaba a alguien hablar así de la persona que amaba. Stefan le había hecho recordar todas las veces que su mamá y papá le contaban como se habían conocido y cuando se habían casado... Se alegraba que Elena hubiese encontrado una persona tan especial como Stefan.

"Me gustas." murmuró ganadose que Stefan volteara a mirarla. "Y creo que eres perfecto para Elena. El escucharte hablar así de ella me hace entender que ustedes deben estar juntos."

"Hace tiempo no hablaba así con alguien." Stefan sonrió levemente. "Lexi ha sido mi única mejor amiga y hablar con ella siempre me hacía sentir bien y en confianza."

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"¿Estas diciendo que somos mejores amigos ahora?" Elizabeth preguntó con una sonrisa que hizo reír a Stefan.

"Solo si quieres." murmuró él.

"Claro que quiero." Elizabeth siguió sonriendo. "Jamás había podido hacer amigos, por estar en constante huída."

"Entonces somos mejores amigos." dijo Stefan y Elizabeth asintió.

"¡Es hora de mover la fiesta!" gritó un chico. "¡Tyler nos quiere fuera de aquí!"

"Iré a buscar a Caroline." Stefan se levantó.

"Voy por el auto." Elizabeth se levantó tomando la manta donde estában sentados. Caminó entre los chicos hasta llegar al auto. Sintió su teléfono vibrar, cuando lo sacó. Era un numero desconocido.

"Hola." Contestó con cautela.

"¿Elizabeth? Soy Elena. Encontramos algunas cosas sobre los lobos." dijo Elena. "Stefan no contesta su teléfono y estoy preocupada. ¿Esta contigo?"

"Fue a buscar a Caroline." Elizabeth respondió mirando alrededor.

"Tienes que decirle que tenga cuidado, hoy es luna llena." Elena dijo en tono preocupado.

"Entonces es cierto lo de los lobos." Elizabeth murmuró con frustración.

"Si, hay algo que descubrimos y me preocupa." murmuró Elena.

Elizabeth se tensó enseguida. "Que cosa."

"La mordida de lobos es letal para los vampiros."

"Iré a buscar a Caroline y Stefan." Elizabeth dijo preocupada ahora.

"Nosotros ya nos vamos, creo que nos veremos en casa." Elena dijo despues de un silencio.

"Esta bien, adiós."

Elizabeth guardó su teléfono antes de regresar al lago para buscar a Stefan y Caroline.

Vió algunos autos irse y personas caminando un poco borrachos, pero Caroline y Stefan no estában.

Sacó su teléfono marcandole a Stefan y Caroline, pero ninguno de los dos contestó.

Miró hacia el bosque mientras decidia si ir a buscarlos o no. Sin pensarlo dos veces entró pero solo habia arboles y silencio.

Agudizó sus sentidos enseguida para captar cualquier sonido. "¡Caroline!" gritó pero no hubo respuesta. "¡Stefan!"

Enseguida escuchó un ruido detrás de ella, cuando volteó no vió nada.

"¡Elizabeth!" llegó Stefan y Caroline a velocidad vampirica. "Tenemos que irnos."

Stefan empujó a Elizabeth para caminar rapido. "¿Que pasa?"

"Algo nos está siguiendo." dijo Caroline.

"Un lobo." aclaró Stefan.

"Elena llamo, dijo que habían descubierto algunas cosas de los lobos y entre ellas que su mordida es letal para los vampiros." Elizabeth dijo recordando la llamada.

"¡Hey!" Se detuvieron cuando Tyler salio de la nada. "¿Que pasa?" preguntó al verlos casi corriendo.

"Nada." Stefan dió un paso frente a Elizabeth y Caroline para protegerlas.

"Ya casi todos se fueron y ustedes debe..."

"¡Ah!" el grito de Caroline interrumpió a Tyler, cuando voltearon a verla. Vieron a un lobo sobre ella.

"¡Stefan! ¡Ayúdame!" suplicó Caroline.

Stefan corrió hacia ella empujando al lobo lejos.

Sin pensarlo Elizabeth corrió hasta Caroline para ayudarla a levantarse, viendo que el lobo estuvo a punto de atacar a Stefan, pero Tyler lo detuvo.

"¡No! ¡Son mis amigos! ¡Déjalos en paz!" le gritó.

El lobo gruñó antes de irse rápidamente. Era cierto, los Lockwood tenían que ver con los lobos.