Draco revisaba unos papeles en su oficina, Hermione apareció por la puerta secreta -aun no terminas con eso-
-falta poco-
-ya es la hora- dijo ella con las manos en las caderas, Draco sonrió, ordeno los papeles -no me parezco tanto a Lucius, ¿por qué me confundiría yo mismo con Lucius?- antes que pudiera responderse, sintió la vibración en su magia -llegó el momento- dijo de forma dramática, Hermione le sonrió y le dio un beso -sé bueno-
Se sentía las carrera por el pasillo y la puerta se abrió de golpe -padre- dijo su yo de 18 años, Draco se dio cuenta en el momento que aún no se daba cuenta de frente a quien estaba, así que guardó silencio, el chico se acomodaba las ropa, la corbata y el pelo, Draco había olvidado que en esa época no miraba a los ojos a su padre así que tendría que hablar -¿cuántas veces te he dicho que no entres sin tocar, podría estar en algo importante?, ¿Qué haces aquí?- fue la pregunta que le realizó-
-la última vez que lo comprobé vivía aquí- Draco ve que el chico se gira a ver si alguien le gasta una broma, Draco decide imitar a Lucius -claramente, vuelvo a preguntar, ¿Qué haces aquí, no deberías estar en la escuela?-,el chico se da cuenta de que no es su padre, él se mantiene estoico ¡por fin!, dice para sí mismo Draco, el chico lo estudia, hasta que repara en la cicatriz, luego observa que no lleva corbata, su camisa está abierta y las mangas arremangadas, el chico se intimida con la marca descolorida en su brazo.
-tú no eres mi padre- le dice entrecerrando los ojos; no es una pregunta, es una afirmación.
-evidentemente, mis hijos tocan la puerta siempre antes de entrar- eso no es del todo cierto, pero el Draco joven no lo sabe, Draco se levanta y se yergue lo mira fijamente y le indica que tome asiento, cuando se mueve, le sonríe de forma sarcástica -no voy a hacerte daño, así que puedes guardar tu varita, sé que la tienes en la funda de tu brazo- esto es raro, es como el intimidándose a sí mismo…
-¿Dónde está mi padre?- pregunta el chico tomando asiento, -¿eres algún pariente?-
Draco contiene las ganas de rodar los ojos por su cráneo, esa pregunta esta demás, claro que él tiene la noción en su época que no hay otros Malfoy, si sabe para qué pregunta, el chico lo observa como midiéndolo, Draco trata de no reírse, Lucius está en Azkaban a esa edad y el aún le tenía miedo a su padre, así que contesta desde su perspectiva -está en su casa supongo, y respecto a tu otra pregunta, soy una especie de, pariente-
Draco se sienta sobre el escritorio y le extiende la mano -tu varita por favor, debo requisarla-, lo pide amablemente en un tono bajo y grave, el chico levanta la vista, ambos se miran, sus ojos grises son igual que los suyos, el chico parece darse cuenta ya que le entrega su varita, y baja la vista nuevamente, tan asustado se veía en esa época, se da cuenta Draco.
-Haría un comentario sarcástico en este momento, sobre si no te enseñaron a nunca entregar tu varita, pero asumo que la tienes sin permiso- le dice colocándose frente a la ventana, evocando recuerdos que ha querido olvidar, así se veía el, un chico altanero, indefenso, larguirucho, a medio crecer, ¿qué vio Hermione en él?
El chico no contesta nada, sólo lo mira, en el escritorio hay una serie de fotografías, su boda, una foto de cada uno de sus hijos de pequeños, ve como el chico quiere mirar, pero Draco sabe que no distinguirá nada, no de ese ángulo.
Un ruido se escucha en el pasillo, sabe que es Hermione, así que comienza a sonreír de sólo imaginar la cara del chico cuando la vea. Draco ve varias emociones pasar por la cara del chico, recordó colocar el espejo al lado de la puerta para poder verlo, él se sorprende con la cara que tiene, así se veía cuando la miraba … Hermione no le había dicho, bueno si le dijo, peor él no le creyó
-¿Quién es esta vez ?, te dije que debíamos cambiar la sala del flu, Tippy me avisó que alguien cruzó, pero…. Oh- ella mira apreciativamente a su versión juvenil, mujer perversa, pero ya vera -¿a quién tenemos aquí, amor?- debe reconocerlo, ella es una buena actriz, le sonríe, y justo el chico cambia su cara a puro pánico da vuelta su cabeza y lo mira Draco tiene una expresión risueña ocultando su sonrisa con su mano -a un prófugo parece-
A Draco no se le pierde el escaneo que su yo más joven hace de ella, ella le sonríe -¿una pequeña cosita tan linda, prófuga?-
-amor, te he dicho que los hombres no son lindos- Draco la sujeta de la cintura.
-oh, pero, si es una cosita bien hecha- dice la mujer pasando su mano por su mandíbula, acariciándola, pero apretándola levemente -como tú-
-¿Podría decirme dónde está mi padre?- Draco joven la pregunta a Hermione y luego a él, casi arrugando la nariz ante la demostración de afecto, Lucius rara vez lo hiso, siempre eran órdenes y reclamos.
-en su casa supongo-, dice Hermione -no sabía que estábamos en la fecha- ella se hace la inocente, cuando fue ella la que revisó sus recuerdos y le hizo repetir todo lo que tenía que decir para que la experiencia fuera única e inalterable.
-por favor, ¿pueden contactar a mi padre?- solicita el Draco joven, visiblemente tratando de no hacer contacto visual con ellos, sobre todo con él.
-pero, cosita, ¿Por qué quieres irte?- le dice Hermione, Draco está conteniendo la risa -no lo acoses mujer-
-no lo estoy acosando- Hermione le hace un recorrido con la vista -creo que le falta algo de peso, está un poco flaco, ¿no crees?- dice ella acercándose a para mirar a su versión joven con mayor detenimiento, sus ojos son amables y su rostro no denota preocupaciones.
-sabes bien por qué, ya se repondrá- le recuerda Draco, es ese tiempo él estaba en recuperación de los meses o años más infernales de su vida.
-señor, no se su nombre y claramente usted no es mi padre, ¿podría volver por dónde vine?- su voz juvenil, aun no madura, suena con un dejo de preocupación, claramente es la mansión, pero a la vez no lo es, sin embargo, ellos visten con ropas modernas y él debe haberse dado cuenta.
-y devolver tu varita- le dice a Draco, luego a Hermione -lo colocaste nervioso- le dice a la mujer, sin dejar de mirarla, el Draco joven está visiblemente nervioso, y mueve sus ojos tratando de buscar un punto fijo.
-nunca ha visto mujeres de verdad, a los 18 que conoce, puras fulanas- Hermione lo mira fijamente, son celos los que ve, oh si, ella sabía de los rumores, pero él siempre ha sido respetuoso con esa parte de su vida.
-no fulanas, mujeres un poco ligeras- Draco trata de defenderse, era joven y pensaba con el pene, todos a esa edad lo hacían, hasta el mismo tenía pensamientos impuros con la Hermione de 40.
-bien, ¿crees que deberíamos enviarlo con tu padre?- el drástico cambio de tema no pasó desapercibido para Draco joven, parpadeo y al parecer su cerebro se detuvo, miró a Draco con los ojos como plato, luego miró a Hermione estudiándola, cuando se dio cuenta de la realidad, sólo dijo -¿Granger ?, antes de desmayarse.
-Creo que avisaré a tu madre-, dijo la mujer mientras acomodaba a un joven Draco desmayado.
-¿teníamos que asustarlo de esa manera?- pregunta él.
-estábamos siguiendo el guion- le retruca ella, y esto hubiera sido perfecto si no hubieras estado tentado de reírte a cada paso-
-¿qué querías que hiciera, esto es bizarro, en el mejor de los casos-
-no seas tan dramático y levítalo al dormitorio-
Fin.
