Hola a todos. Como pueden ver no estoy muerto, sólo con menos tiempo que antes debido a mi trabajo. De todos modos sé que este es un capítulo que debí traer mucho tiempo atrás, por lo que me disculpo por ello. En esta ocasión no responderé reviews, aunque se agradece el apoyo recibido en todo este tiempo de ausencia. De verdad son grandes ustedes, que pese al hiatus han permanecido pacientes, siempre con fe en que este capítulo llegaría.

El campeón

Sori no había dejado ir la primera oportunidad para abandonar el pueblo del cuarto gimnasio. Ser capaz de caminar a horas del día sin sentir que estaba siendo asada viva sin duda era una maravilla. Marco quizá estaba todavía intentando derrotar a Gardenia, o bien sería que ya lo logró, Sori no tenía idea de ello, pero de momento a la chica sólo le interesaba que iba de camino al quinto gimnasio. Y de Gwen directamente ni intentaba acordarse.

Al lado de ella estaban sus pokemon, varios de ellos (específicamente Wendy, Tony y Sheena) estaban emocionados ante la idea de nuevos retos luego de su última victoria, mientras que los demás (Mariano, Nelly y Ai) prestaban algo más de atención a los alrededores.

─ Me pregunto quién será el líder del quinto gimnasio… o la líder ─ observa Sori con curiosidad ─. Ahora que lo tomo en cuenta, los cuatro primeros gimnasios han sido regentados por chicas. No dudo que de cara y cuerpo son bastante lindas, y si yo estuviera disponible no las despreciaría, pero igual sigue siendo un hecho algo extraño.

─ Tal vez sea que la fulana liga tiene cierta preferencia en las hembras de tu especie para que ocupen un lugar en los gimnasios ─ opina Wendy con tono casual.

─ No lo pongo en duda, y francamente no los culparía por ello. Muchas veces el puesto de líder de gimnasio está asociado con una imagen de rudeza, autoridad, elegancia o poder. Al menos las que hemos visto hasta ahora dan bastante porte de elegancia y poder, así que hasta ahora todo bien.

─ Maestra, mire allá ─ Ai señala con un dedo al frente del camino.

Sori y sus pokemon ven a dos entrenadores que estaban teniendo una batalla. Aquello a Sori le parece una oportunidad perfecta para contemplar equipos, estrategias y habilidades diferentes para así aprender un poquito más para dirigir a sus propios pokemon, así que se acerca para contemplar a detalle el combate.

Por desgracia para Sori el combate estaba llegando a su final, y es que la chica que estaba cerca de Sori ordena a su Magneton que le diera el golpe de gracia al Milcery de su oponente, un chico que claramente era inexperto, pero eso no generaba piedad alguna de parte de la chica.

─ ¡Diantres! Esta es mi tercera derrota seguida ─ dice el chico luego de guardar a su Milcery en la pokeball.

─ No te sientas mal, guapo ─ le dice la chica con tono coqueto, casi seductor ─. Entrenar pokemon es todo un proceso, por lo que no esperes que tu equipo sea invencible de la noche a la mañana.

─ Si tú lo dices, supongo que necesito ser más paciente…

─ ¡Completamente de acuerdo! ─ Sori termina interviniendo, a lo que ambos oponentes se la quedan viendo ─ ¿Eh?

─ ¿Y tú quién eres? ─ dice el chico.

─ Oh, ¿acaso quieres poner a prueba a tus pokemon con los míos? ─ la chica coqueta le guiña un ojo a Sori, haciendo que esta tuviese un ligero sangrado nasal.

─ ¿Qué demonios? ─ Sori se apresura para taparse el sangrado mientras mira con desconfianza a aquella entrenadora ─ ¿Acaso eres así de linda con todos los entrenadores?

─ No veo el problema ─ dice la entrenadora ladeando la cabeza ─. En una batalla pokemon hay mucho más que pokemon lanzando o esquivando ataques. También cuenta la atención que los entrenadores prestan al campo de batalla, así que parte de mi estrategia es seducir a mis oponentes para hacerles bajar la guardia ─ la chica remata juntando sus brazos de modo que sus pechos resaltan bastante ─. Una estrategia bastante adorable, ¿no crees?

─ Parece efectiva, no lo voy a negar, aunque a mí jamás me haya pasado algo así por la cabeza ─ dice Sori girando la mirada para no dejarse llevar por lo que exhibía aquella chica ─. S-supongo que no estarás disponible para un combate, ¿verdad? Digo, acabas de librar una batalla, y a lo mejor tus pokemon están agotados…

─ ¡Vamos, chica! Tú tranquila, que en esta batalla había librado un uno contra uno. Si quieres hacemos lo mismo para que no te sientas mal por presionar a mi lindo Magneton ¿Qué te parece?

─ ¿Una batalla con pocos pokemon? Supongo que puedo hacerlo ─ Sori mira a su equipo, como queriendo decidir a cuál escoger ─. Nelly, tú das el paso al frente.

─ ¡Pues ya ves que mi poder de pokemon legendario te dará una nueva victoria, maestra! ─ la Riolu avanza dando brinquitos con alegría.

─ En ese caso yo elijo a Heracross ─ la entrenadora saca entonces al mencionado pokemon de tipo bicho, el cual hace gala de estar bien cuidado ─. Pequeño, ¿te molestaría ser nuestro réferi?

─ A-ah, claro que no me molesta ─ el chico que recién había perdido se pone en posición rápidamente ─. Esta es una batalla de un solo pokemon por retadora, por lo que no se permiten cambios. Si uno de los pokemon cae fuera de combate, su entrenadora se rinde o incumple con la restricción de cambio, será declarado perdedor. Y ahora… eh… ¿Cómo es que se llaman las dos?

─ ¿Acabas de tener un combate con ella y ni preguntaste su nombre? No eres demasiado listo, niño ─ se burla Sori.

─ Pues tampoco tú preguntaste su nombre ─ el chico le sale al paso a Sori, haciéndola sonrojar de la vergüenza.

─ Vamos, no tienen que pelear ─ la entrenadora amplía su sonrisa, como si la situación le hiciese gracia ─. Da lo mismo si me presento ahora mismo, así que lo haré. Pueden llamarme Milagritos si así lo desean.

─ Milagritos los que conforman ese cuerpo ─ dice Sori entre dientes para no ser oída ─. Soria, pero pueden llamarme Sori, según les acomode.

─ Muy bien ─ el chico alza su mano para dar la orden de inicio ─ ¡Que este combate entre Milagritos y Sori empiece!

─ Empecemos con un bonito Golpe Aéreo, Heracross ─ ordena Milagritos, a lo que su pokemon asiente y ejecuta el ataque.

─ ¡Golpe Roca, Nelly!

Ambos pokemon intercambian ataques, y si bien Nelly se resiente debido a la efectividad del ataque de tipo volador, su puño logra dar más de lleno en su oponente, logrando bajar su defensa en el proceso. El comienzo no había sido del todo malo.

─ Oh, buen golpe, pero todavía cuento con cierta ventaja ─ Milagritos sonríe de lado ─. Heracross, hora de repetir la dosis.

─ ¡Ataque Rápido, Nelly!

El siguiente intercambio de golpes consistió en la Riolu anticipándose en su ataque, de modo que consigue que Heracross pierda algo de foco a la hora de golpear su rival, y por lo tanto su ataque no resulta del todo atinado. Gracias a eso Nelly no recibe tanto daño, mientras que Heracross sentía dolor por el golpe recibido.

─ Eso está bien jugado ─ Milagritos silba para demostrar su sorpresa ─. Debes ser una entrenadora bastante hábil ¿Cuántas medallas tienes? ¿Dos? ¿Tres?

─ Tengo cuatro en realidad ─ dice Sori sacando el estuche de sus medallas para mostrarlas ─. Justo ahora estoy de camino a tratar de ganar mi quinta medalla.

─ Ya veo. Incluso yo me veo como una novata a tu lado, y eso hará más delicioso que logre vencer ─ Milagritos mueve de manera sensual sus pestañas ─ ¡Cornada, Heracross!

─ ¡Vamos otra vez con Golpe Roca, Nelly!

La Riolu no tuvo ningún problema en derribar a Heracross con su ataque más reciente, frustrando completamente el intento de ataque del pokemon de tipo bicho. Sori sonríe al ver que esa batalla ya estaba ganada.

─ Ataque Rápido una última vez.

Nelly da entonces el golpe de gracia, por lo que Heracross acaba tendido en el suelo de una manera un poco dramática, pero igual los golpes recibidos no lucían serios.

─ Heracross ya no puede continuar con el combate. La ganadora es Soria ─ el chico alza su mano en dirección a la ganadora.

─ Sori va contenta a su Riolu y la alza para felicitarla mientras Milagritos saca la pokeball del Heracross para guardarlo. En eso aparece alguien más que aparentemente estaba contemplando la contienda en silencio, sorprendiendo a todos los presentes.

─ Esa fue una buena demostración. Una batalla entretenida por donde se la vea.

─ ¿Hm? ─ Milagritos se queda viendo al intruso extrañada ─ ¿Y quién eres tú, cariño? ¿También vienes por algo de diversión?

─ En realidad estoy de paso, pero gracias por el ofrecimiento ─ responde el recién llegado, y acto seguido mira a Sori ─. Y tú debes ser la chica que ha aparecido recientemente en las noticias. Me alegra conocerte.

─ T-tú eres… ─ Sori señala a aquella persona con un dedo tembloroso, aunque toda ella estaba temblando ─ N-no me lo puedo creer… ¡Eres el joven Chano! Eres una auténtica celebridad en el mundo de las batallas pokemon.

─ ¿De verdad soy tan famoso? ─ el nombrado se cruza de hombros y se pone pensativo, como si intentara recordar algo ─ Bueno, la cosa es que ya no soy el "joven" Chano. Ocurre que acabo de ganar la nueva liga pokemon de esta región, por lo que ahora soy el campeón Chano.

El joven saca una Rotomdex y muestra una serie de noticias recientes que, efectivamente, corroboran que él era el nuevo campeón de la región. Los tres entrenadores que estaban frente a Chano estaban completamente sorprendidos al ver que lo que ese chico estaba diciendo era verdad. Estaban nada menos que ante el nuevo campeón de la región, lo que obviamente implicaba que debían tratarlo con respeto y hacerse a la idea de que posee bastante habilidad entrenando pokemon.

─ De puro entrenar Rattatas en Johto ─ dice Chano con suficiencia.

─ De verdad estamos ante una celebridad ─ dice el otro chico con los ojos completamente abiertos.

─ Dime que sea tuya y me entrego entera ─ dice Milagritos limpiándose la baba luego de ver la última parte de las noticias.

─ Yo siempre fui una admiradora tuya ─ dice Sori con gran admiración ─. Tu empecinamiento con estar entrenando Rattatas y la manera en que presumías tu talento fue una inspiración para mí en su momento cuando quise probar a ser una entrenadora de pokemon de tipo siniestro.

─ ¿Tipo siniestro? ─ Chano echa una mirada a los pokemon de Sori, aprovechando que estaban justo detrás de ella ─ No lo sé, pero no veo en tu equipo a ningún pokemon siniestro, al menos no todavía.

─ Jeje, lo que pasa es que muchas cosas han pasado, y de cualquier modo los pokemon en mi equipo han sabido responderme, así que de momento estoy conforme con todos.

─ Sí, tener un equipo con el que te sientas bien y que sea acorde a tu manera de ver los combates es muy importante, pero no olvides que debes aprender de tu equipo lo más que puedas para que así saques su máximo potencial a flote.

─ ¡Por supuesto! ─ Sori saluda al estilo militar.

─ Yo también procuro aprender lo más posible de mis pokemon para ser el mejor dice el otro chico, llamando la atención de Chano.

─ ¿Me puedes decir tu nombre?

─ Jonah, soy hijo del dueño del herbolario que está en el siguiente pueblo ─ responde el chico con diligencia, impresionando a Chano por alguna razón.

─ ¿El dueño del herbolario? ¿Te refieres al señor Jameson? Es un buen sujeto, además de saber muy bien lo que hacer. Me ayudó a identificar un par de plantas de la zona cuando todavía iba por las medallas.

El chico asiente alegre, mientras que Sori y Milagritos por algún motivo empezaban a reírse, y los demás se la quedan mirando.

─ Jonah, hijo de Jameson… ─ dice Sori entre dientes.

─ ¿Y qué sigue? ¿Tu padre tiene un asistente al que llama Parker? ─ dice Milagritos antes de estallar en carcajadas.

─ ¡Eso no es algo de lo que deban reírse! ─ dice Jonah indignado, aunque luego se pone completamente rojo ─ Aunque debo aceptar que mi padre sí tiene un asistente al que llama así.

Sori y Milagritos se toman un rato para normalizar sus respiraciones y poner sus risas bajo control, aunque reculan un poco al pensar nuevamente en "Jonah, hijo de Jameson". Cuando finalmente logran regresar a la normalidad pueden retomar el tema de conversación con Chano, una pequeña explosión se produce cerca de ahí. Varios pokemon voladores se van rápidamente de allí. Para Sori y su equipo era una evidente señal de que el equipo Fénix andaba cerca.

─ Parece que son ellos otra vez ─ dice Chano de la nada, sorprendiendo un poco a Sori.

─ ¿Los conoce?

─ Son noticia en toda la región desde hace un tiempo ¿No lo sabías? ─ Sori baja la cabeza avergonzada porque efectivamente no sabía ─ En un par de ocasiones me ha tocado enfrentar a algunos de esos granujas que estaban llevando a cabo sus actos delictivos cerca de la calle victoria. De verdad es molesto tener que escuchar las cosas que dicen, además que no entiendo cómo es que varios de ellos son capaces de trabajar en conjunto, puesto que son agua y aceite entre ellos.

─ Lo sé ─ Sori recordaba las veces que tuvo que hacer frente a antiguos integrantes del equipo Rocket, el equipo Flare o el equipo Plasma ─. Supongo que el plan de acción es ir allá y detenerlos, ¿verdad?

─ Eres impulsiva. Tienes futuro, chica.

─ Nosotros también ayudaremos ─ Milagritos levanta su mano ─. La belleza de la región no debe ser perturbada por gente que claramente no tiene estilo ni cariño real por los pokemon.

─ Lucharé con todo lo que tengo ─ se ofrece Jonah algo tímido pero con determinación.

─ ¡En ese caso vamos, que tenemos a unos cuantos villanos a los que sacarles la chucha!

Zona de la explosión

En el lugar se encontraban únicamente dos integrantes del equipo Fénix. Estaban comprobando los efectos de la explosión y comprobaban si habían llamado la atención de algún pokemon que haya preferido fisgonear antes en vez de huir. La zona estaba completamente vacía. Si acaso los árboles chamuscados contaban, aparte de algunos Caterpies y Metapod calcinados por culpa de los criminales, pero nada más.

─ En este lugar no hay nada que valga la pena ─ uno de los criminales patea una piedra con rabia ─. Se supone que aquí hay algunos pokemon interesantes ¿Por qué demonios no se ha aparecido ninguno?

─ Esos señalamientos debieron estar errados. En ese caso es mejor que regresemos, que me he cansado de estar en este estúpido bosque…

─ ¡ALTO AHÍ, BASURA! ─ Sori es la primera en llegar, y su equipo estaba furioso y listo para el combate.

─ ¿Y esta niña quién es? ─ señala el primer criminal.

─ Es la hija del gobernador, que la vi en las noticias ─ el segundo criminal sonríe de forma macabra ─. Si la atrapamos podríamos exigir un buen rescate por ella, ¿no te parece?

─ Si hay dinero nada es demasiado para mí ─ el primer criminal saca una pokeball y la lanza ─ ¡Atrapa a esa chica y tráela, Persian!

Sin siquiera esperar a materializarse por completo, el Persian del criminal se lanza con sus garras al frente en dirección a Sori, pero antes de llegar a ella es obstaculizado por Mariano, que termina repeliéndolo y lo obliga a retroceder.

─ ¡Ese fue un buen bloqueo! Además que corres rápido, chica ─ llega Chano con los demás chicos para enfrentar a los criminales ─ Esta vez son dos nada más. Parece que les tocó una misión de muy poca importancia para que los manden de esa manera a este lugar.

─ ¿Qué pretendes decir con eso? ─ el segundo criminal saca dos pokeballs y las lanza ─ ¡Denle una lección a ese hablador, Arbok, Weavile!

─ ¡Sal tú también, Golbat! ─ el primer criminal saca su segunda pokeball.

Sori ahora veía que cada uno tendría que enfrentarse a un pokemon del equipo villano. Por ella estaba bien eso, pues de ese modo nadie tendría que esperar a esperar por una oportunidad para lucirse que, con algo de mala suerte, no iba a darse. Pudo ver que Milagritos había sacado Espeon y que Jonah por su parte invocaba a un Swellow para enfrentarse al Arbok y el Golbat de los villanos, y Chano se haría cargo de Weavile. Era momento de preocuparse por ella misma, pues debía vencer al Persian que un momento antes había arremetido contra ella.

─ Muy bien, Mariano, es momento de que esta vez consigas dar una batalla verdaderamente digna.

─ ¿Y-yo? ─ ahora el Frillish no parecía tan valiente ─ ¿De verdad va a hacer que me exponga ante ese Persian feo?

─ Esta vez cuentas con ventaja, fantasmín. Con algo de suerte ese pokemon no conocerá ningún movimiento que sea capaz de hacerte daño, de cualquier modo tú tienes Absorbe Agua como habilidad en caso de que algo pase, así que estarás bien ─ Sori levanta su pulgar al pokemon de tipo fantasma ─. Es el momento adecuado para que demuestres que estás a la altura del equipo del que formas parte.

─ Tú puedes, Mariano ─ dice Ai alzando los brazos para hacer énfasis en su mensaje.

─ S-supongo que no me queda alternativa ─ Mariano pasa entonces a mirar de forma retadora al Persian ─. A ver lo que tienes, gatito.

─ Grrr… ─ Persian ni siquiera se dignó en contestar, sino que mostraba una ira que iba más allá de la provocación previa a un combate, señal de que era probablemente de esos pokemon a los que les forzaron su evolución.

─ ¡Empieza con Picotazo Venenoso, Mariano!

─ ¡Usa Mordisco con ese pokemon, Persian! ─ ordena el criminal antes de dirigir su atención al Golbat que había mandado también al campo.

Al ser Persian más rápido que Mariano, el ataque que había usado llega a impactar antes en Mariano que el ataque de este en el pokemon de tipo normal, pero eso no significó que no le diera con su ataque de tipo veneno. El plan de Sori da resultado, pues Persian cae envenenado al primer intento, aunque eso no lo hace mostrarse menos agresivo.

─ Es hora de hacer las cosas más interesantes, Mariano. Usa Absorber y recupera un poco de tu fuerza.

El Frillish no dudó un solo segundo en acatar la instrucción de Sori y envolver a Persian para acto seguido hacerse con parte de su vitalidad. El criminal, por estar prestando más atención a Golbat, se da cuenta algo tarde del problema en que se encontraba Persian, lo que lo hace enfurecer.

─ ¡No me pongas en ridículo, gato tonto! Usa Arañazo.

El Persian obedece la orden y usa sus garrar para atacar a Mariano, pero el ataque no le llega a hacer el más mínimo daño. Sori se cruza de brazos y mira burlona y despectivamente a su oponente.

─ No prestas atención al combate y encima ignoras que tu pokemon no puede dañar a los pokemon de tipo fantasma. Se nota que el éxito no era tu destino.

─ ¡Cierra la boca! ¡Te demostraré el miedo que puedes sentir de la mano de mi Persian! ─ el criminal rápidamente estaba cayendo en la provocación de Sori ─ ¡Usa Mordisco otra vez, Persian, y asegúrate de que duela de verdad!

Persian lanza un bufido lleno de ira y pretende morder los tentáculos de Mariano, y consigue hacerle una buena cantidad de daño al respecto. Ahora la cosa se iba complicando poco a poco, aunque Sori todavía tenía una carta bajo la manga.

─ ¡Hidropulso contigo mismo, Mariano!

El Frillish asiente y se ataca con su movimiento que, al ser de tipo agua, termina revitalizándolo en vez de hacerle algún daño, permitiéndole de ese modo no ceder ante el dolor que le generaba el ataque en que Persian se mantenía firme.

─ M-maestra, esto duele ¿Qué hago?

─ Tú tranquilo. Sigue usando Hidropulso contigo mismo y con Persian, a ver si así te deja en paz en algún momento.

La instrucción era clara, y Mariano estaba convencido de que sería capaz de llevarla a cabo sin problemas. Lanza un Hidropulso, y aunque en Persian parecía no hacer nada en un principio, la realidad era que al pokemon gato no le hacía ninguna gracia estar recibiendo ese ataque a quemarropa y directamente en la cara. Trataba de acabar lo más rápidamente con el Frillish con Mordisco, pero Mariano, pese al dolor, lograba mantenerse lo bastante centrado como para seguir usando el movimiento una y otra vez, tanto dañando al Persian oponente como curándose a sí mismo para así dificultar más y más su derrota, y de paso que el criminal estaba prestando mayor atención al otro combate no estaba ayudando en absoluto a Persian.

─ Ya casi lo tienes, medusín. Tú puedes hacerlo ─ lo apoya Nelly alzando sus patas delanteras.

─ Tú no estás aguantando el dolor que yo estoy padeciendo, pequeña furra ─ se queja Mariano sin dejar de atacar.

─ Tienes mi bendición de pokemon legendario. No necesitas nada más para ganar.

─ Persiste en tu ataque, Mariano. Pronto ese Persian te va a soltar y te curarás por completo ─ señala Sori con total convicción.

El pokemon de tipo agua/fantasma sentía que los dientes de Persian estaban poco a poco aflojando la hincada, señal de que su oponente estaba perdiendo fuerzas y que en cualquier momento estaría forzado a retroceder. Eso fue un estímulo extra para que Mariano redoblara esfuerzos y lanzara Hidropulso justo en medio de los ojos de Persian. Al final el pokemon felino deja de morder a Mariano y retrocede adolorido, además que se lo notaba bastante confundido, además que el debilitamiento por el anterior envenenamiento se estaba haciendo bastante evidente.

Bastante pronto ese Persian estaba en las últimas, mientras que Mariano, al seguir atacándose a sí mismo usando agua, estaba sanando rápidamente sus heridas.

─ ¿Qué haces descansando, inútil? ─ el criminal mira con rabia a Persian ─ ¡Vamos, aniquila a tus oponentes!

Persian estaba haciendo un esfuerzo para lanzarse de nuevo al ataque, pero su cuerpo simplemente no responde y termina desplomándose. Mariano se mostraba orgulloso de haber ganado, y Sori se cruza de brazos mientras mira con arrogancia a su oponentes.

─ Parece que forzar a los pokemon a evolucionar no es suficiente para hacer que sean fuertes. Sigue siendo mejor entrenarlos y tratar de tenerles paciencia.

─ ¿Acaso crees que esa mierda me importa? ─ el criminal saca otra pokeball y manda al campo a un Domphan ─ ¡Aplástalos a todos!

─ ¡Hidrobomba con todo tu ser, Mariano!

El Domphan oponente en enrolla sobre sí mismo y se lanza como un bólido hacia Mariano, aunque estaba el detalle de que el Persian derrotado estaba a mitad de camino, pero eso poco parecía importar. Mariano acorta distancias para escudar al Persian y lanza su ataque de tipo agua poniendo su máximo esfuerzo. En un principio parecía que no surtía efecto, pero pronto Domphan queda completamente frenado ante la presión de la Hidrobomba. Sori sonríe, viendo que el entrenamiento de su pokemon estaba surtiendo finalmente efecto.

─ ¡Absorber, Mariano!

El Frillish asiente y usa sus tentáculos para atrapar a Domphan y empieza a extraer parte de su energía, dejando a Domphan severamente dañado mientras que Mariano se encontraba al tope de su salud y fuerzas. Con eso bastó con ejercer un poco más de presión y Domphan acaba finalmente derrotado.

─ Primera vez que medusín gana dos batallas seguidas ─ dice la Dragonair sorprendida.

─ Y eso que apenas calentamos, Wendy ─ le dice Sori confiada ─. Además que estos pelmazos no son la gran cosa, por lo que dos triunfos en racha contra ellos no es como que sea un grandioso logro.

En resto del campo de batalla las cosas no parecían ir diferente. Los demás pokemon usados por los agentes del equipo Fénix habían sido completamente superados. En los casos de Milagritos y Jonah sí parecían haber tenido algo de esfuerzo, mientras que Chano lucía completamente relajado, y a su lado había un Raticate que lucía totalmente ileso como si no hubiese peleado, pese a que frente a él yacían cuatro pokemon tendidos en el suelo.

─ Esto es una pérdida de tiempo ─ dice Chano algo aburrido ─. Tienen demasiada fama para lo flojos que son. Definitivamente el mejor integrante de su equipo debe ser el encargado de marketing.

─ ¡Insolente! ¿Cómo te atreves a poner en duda nuestra fuerza? ─ ambos criminales lanzan a sus pokemon restantes contra el Raticate de Chano.

─ ¡Raticate, es hora de usar Rueda Fuego!

El Raticate de Chano no lo duda un solo segundo en empezar a dar vueltas mientras se envuelve en fuego y se lanza a sus oponentes, derrotando a todos con ese ataque nada más. Sori y los demás quedan atónitos ante semejante muestra de poder de parte de Chano. Los criminales quedan a cuadros antes de que la tierra bajo sus pies se moviera repentinamente, cediendo sólo donde estaban ellos y cayendo en agujeros estrechos pero hondos que dificultaban bastante el escape.

─ ¿Qué fue esto? ─ dice el segundo criminal empezando a golpear las paredes de tierra.

─ Se nota que no lo vieron venir ─ al lado de Chano surge otro Raticate de debajo de la tierra ─. Buen trabajo, chicos.

─ Es un gusto poder jugar mientras cumplimos nuestro deber ─ dice el Raticate que había salido de la tierra de manera respetuosa antes de desaparecer por su pokeball.

Nadie había visto venir la estrategia con el segundo Raticate, además que el primero había demostrado ser bastante fuerte como para vencer por sí solo a varios pokemon a la vez. Sori podía de ese modo ver que el famoso joven Chano era ahora el campeón Chano.

CONTINUARÁ…

Desde ya aviso que de los tres personajes que han aparecido en este capítulo, el más relevante será sin duda Chano, en caso de que les interese. Otra cosa que debo decir, a parte de pedir disculpas por tamaño retraso y que en un par de capítulos tendrá lugar el encuentro con el/la quinto/a líder de gimnasio, es que trataré de subir otro capítulo este mismo año. 2024 no va a acabar sin una segunda actualización. De todos modos nos estaremos leyendo. Cuídense.

Hasta otra