Disclaimer: todos los personajes que reconozcan y el mundo donde viven pertenecen a JK Rowling. El resto es producto de mi imaginación.

Escribo esto solo por diversión. No ha sido sometido a revisión beta ni profesional por parte de un editor.


9.- La llegada

Ocho semanas habían pasado desde la última vez que Harry había tenido contacto con Ron y Hermione, en ese tiempo había logrado que Severus se recuperara de las heridas y fracturas y había iniciado la rehabilitación de brazos y manos.

Ahora Severus era capaz de comer por sí solo, podía escribir con lápiz y pluma adecuadamente y había iniciado los ejercicios de caligrafía con pluma y pergamino, en un inicio había sido todo un suplicio, pero ahora ya podía sostener la pluma en sus dedos con precisión y trazar las letras con torpeza, pero de manera continua.

Esto le había dado a Severus la fuerza y determinación que necesitaba, y no dejaba de decirse que pronto estaría en pie, si en ocho semanas había logrado lo que creía imposible con sus manos, recuperar la fuerza en sus piernas para estar en pie no sería tan difícil.

Eran las nueve de la mañana cuando Harry sintió vibrar el teléfono en su bolsillo, lo miró ilusionado, era un mensaje de Hermione, avisándole que conforme a lo planeado estarían a mediodía en Grimmauld Place. Le informaba también que llevaban todo lo necesario para continuar con la rehabilitación de Severus y que se quedarían con él hasta que el maestro de pociones estuviera totalmente recuperado.

Harry no pudo evitar sonreír ampliamente, una oleada de alegría invadiéndolo. Sus amigos pronto estarían con él. No que no hubiera disfrutado la interacción con Severus, pero los extrañaba, habían pasado tanto tiempo juntos el último año que no podía acostumbrarse a no estar con ellos casi todo el tiempo.

Se dirigió a la habitación donde se encontraba Severus para informarle de la situación. Sabía que el maestro no toleraba a sus amigos, pero consideraba que el saber le ayudarían a terminar de rehabilitarse sería suficiente motivación para aguantarlos.

Encontró a Severus sentado en la habitación, practicando su escritura, aún no era la estilizada caligrafía que tantos años le llevo perfeccionar, pero al menos ya no era de un niño de preescolar.

"Buenos días profesor", saludó Harry desde la puerta con una suave sonrisa, "veo que está practicando, eso significa que estamos de buen humor, supongo", Severus volteó a verlo brevemente y gruño una respuesta que sonó algo cercano a muchacho insolente, lo que hizo sonreír aun más a Harry.

"Creo está lo suficientemente recuperado para seguir con nuestro siguiente paso en el plan de rehabilitación", Harry no esperó una respuesta y continuó. "Es hora de empezar a fortalecer sus piernas para que pueda volver a caminar, estoy seguro está ya cansado de estar en esa cama, y como estoy seguro le había comentado antes, hoy llegarán Herms y Ron para ayudarme con esa fase, espero no sea un suplicio o imposición para usted, pero realmente es algo que no podemos hacer los dos solos".

Severus le devolvió una mirada cansada, llena de frustración, algo que Harry había aprendido a notar en las últimas semanas. "Creo no estoy en posición de negarme a tu programa de rehabilitación, con o sin tus amigos, no me agrada la idea de ser visto en este estado por nadie más, pero cuándo se han cumplido realmente mis deseos. Además, debo reconocer que hasta el momento tu plan de tratamiento y rehabilitación han funcionado más allá de mis pobres expectativas, así que te dejaré seguir tomando las decisiones con respecto a mi salud. Aunque no lo parezca o no lo diga muy a menudo, confío en ti, realmente lo hago, y estoy muy agradecido y sorprendido de lo que hemos logrado hasta el momento".

Harry sonrío más ampliamente. "Agradezco sus palabras profesor, es importante para mi sepa que su bienestar me importa, creo que ha quedado más que claro que estamos en una nueva fase de nuestra relación, y espero sepa que haré todo lo que esté a mi alcance para que recupere su salud, y espero que logremos un punto en el que no solo seamos profesor y alumno, sino amigos, y que sepa puede confiar en que no volverá a estar solo, ahora lo considero parte de mi familia y como tal nunca nada le volverá a faltar".

Severus le dio una larga y prolongada mirada, sus ojos se comenzaban a nublar por las lágrimas que luchaba por contener, no supo que decir, las charlas sentimentales nunca fueron su fuerte, tragó tratando de despejar su garganta y simplemente asintió, buscando lograr nuevamente cierto grado de control de sí mismo.

A media tarde llegaron por fin Hermione y Ron, Harry ya los estaba esperando en la sala, cuando salieron por la chimenea se dirigieron directamente a Harry y se abrazaron largamente.

Hermione fue la primera en hablar. "Harry, que gusto volver a verte, te extrañamos lo que no tienes idea, me alegra verte bastante más recuperado, esperaba encontrarte molido por la responsabilidad de cuidar del profesor todo este tiempo", una cálida sonrisa se instaló en su boca, mirándolo con cariño.

"Si hermano", dijo Ron con su alegría característica, "teníamos una genuina inquietud por verte, después de 8 semanas encerrado con Snape uno esperaría encontrarte cansado, desesperado e incluso un poco loco", terminó la frase dándole un apretón de hombro, una sonrisa fácil instalada en su cara.

"Lo hacen sonar como si hubiera estado sometido a tortura, cuando la realidad es que si alguien ha sufrido en estos días ha sido Snape, pero su fuerza de voluntad es admirable, su recuperación ha ido al ritmo previsto por Mione, sorprendentemente, realmente, y debo agregar que ha sido bastante civilizado, podría decir casi sociable". Harry comentó casualmente.

A la hora de la comida Harry, Ron y Hermione se reunieron en la habitación de Severus para comer con él, tratando así de romper el hielo y comenzar a convivir con el maestro, entre más rápido se perdieran la aversión mutua mejor, las próximas semanas serían de íntima convivencia y necesitaban pasar a la comodidad mutua para poder continuar con la rehabilitación.

Para sorpresa de los tres muchachos, Severus estaba siendo bastante civilizado, incluso amable y con cierto grado de diversión en sus comentarios, a pesar de su situación, lo que logró relajar visiblemente a los jóvenes.

Hermione, como siempre, fue la primera en animarse a hablar. "Profesor, es bueno ver que se está recuperando, estábamos realmente preocupados por su salud, pero es un gran alivio encontrarlo en mejor estado".

"Gracias por tus palabras Granger, aun no me acostumbro a ser el receptor de sus buenos comentarios y atenciones, nunca imaginé pudieran ustedes estar preocupados por mi persona, pero es grato ser por una vez, el receptor de su buena voluntad", dijo Severus bastante conmovido.

"En honor a la verdad, siempre fuiste un bastardo con nosotros profesor, pero, cuando le diste a Harry tus memorias y supimos todo lo que habías sacrificado, a pesar de tus errores, no pudimos odiarte más, hay un largo camino por delante, al menos por mi parte, para poder considerarte un amigo, pero, estoy dispuesto a darte una oportunidad, tomando en cuenta que parece que Mione y Harry están dispuestos a empezar de cero". Ron fue completamente sincero y abierto.

"Agradezco su sinceridad señor Weasley y le aseguro haré todo lo posible para ser merecedor de esa oportunidad de empezar de cero de la que hablas, mis errores pasados siempre permanecerán grabados en mi memoria, pero, en pos de un futuro mejor y la oportunidad de una vida tranquila, estoy dispuesto a hacer ciertas concesiones y tratar de verlos por quienes son independientemente de mis prejuicios".

"Parece una oferta de paz bastante justa para venir de un amargado murciélago de las mazmorras, no presionaré por ahora, pero, ser amigo de Mione y Harry, y eventualmente mío, inevitablemente significará ser parte de mi gran y ruidosa familia, lo que a la larga, si estás dispuesto a afrontarlo, será suficiente muestra de mejoría y cambio para mí", dijo Ron con una sonrisa socarrona en su rostro.

El resto de la tarde pasó tranquilamente, conversaron de muchos temas, Severus demostró ser un escucha paciente, y Mione y Ron les dieron detalles de su viaje a Australia, la recuperación de los padres de Hermione, el funeral de Fred (al que Harry no había podido asistir), así como la situación actual en el intento de captura de todos los mortífagos restantes.

Cuando la noche comenzó a caer, los tres chicos se despidieron de Severus, lo dejarían descansar, el proceso que estaba por comenzar sería el más duro y requeriría de toda su fuerza y voluntad.