The Knight & Her Guardian Dragon por Maximillian Havisham

Traducción Por linkinm1a1

Capítulo 3: Al día siguiente

Erza se despertó en su cama a la mañana siguiente, el sol atravesaba sus persianas y le daba en la cara. Se pasó los dedos por la cara, deteniéndose en los labios. Pensó en el beso que ella y Natsu compartieron la noche anterior y se sonrojó. Nerviosa, empezó a darse vueltas en la cama varias veces.

¿Qué está mal conmigo? ¿Por qué me siento de esta manera?

Ella no podía entenderlo. Cuando pensó en Natsu, su estómago se inquietó, pero no era un mal presentimiento. Hacía años que no se sentía así por nadie. Seguro que amaba a todos en Fairy Tail, pero Natsu era algo... diferente. Eso la asustó un poco.

—¡Agh! ¿Qué estoy haciendo? Tengo que prepararme y dirigirme al salón del gremio. —Saltó de la cama y se metió en la ducha, mientras repetía la cita en su mente. Aproximadamente una hora después, Erza salió del dormitorio de Fairy Hills y se dirigió hacia Fairy Tail.

Cuando llegó al gremio, se sorprendió al ver que Natsu no estaba a la vista. Decidiendo esperar a que llegara, se dirigió al bar y se sentó. También quería preguntarle a Mira si lo había visto, pero se mostró inusualmente aprensiva.

Mirajane vio la mirada ligeramente nerviosa en el rostro de su amiga y habló antes de que Erza llegara al bar. —Buenos días, Erza, —dijo con una sonrisa amable—, ¿buscas a Natsu? —su sonrisa cambió a una sonrisa traviesa.

El rostro de Erza se puso rojo cuando la pregunta de Mira llegó a sus oídos. Abrió la boca, pero las palabras salieron a trompicones. —N.… n.… no... no. ¡Por supuesto que no! ¿P.… por qué estaría haciendo eso? —Trató de negar la pregunta de Mira moviendo la cabeza fervientemente en desacuerdo; pero sus mejillas rojas como la sangre le dieron a Mira todas las respuestas que necesitaba.

Mira le sonrió suavemente a Erza, —Se fue a trabajar con Lucy, Gajeel y Wendy.

Erza miró a la camarera con ojos confundidos, —¿Eh? ¿Por qué Wendy y Gajeel fueron con ellos? ¿Por qué Gray no? —Mira dejó de limpiar el vaso que sostenía y colocó su dedo índice en su barbilla mientras comenzaba a pensar.

—No lo sé con certeza. Creo que era algo acerca necesitar la ayuda dragonslayers, y en cuanto a Gray, él y Juvia trabajaron con Elfman y Lisanna.

Escuchar que Natsu y los demás se fueron a trabajar sin ella molestó un poco a Erza, y una mirada de tristeza comenzó a aparecer en su rostro.

—¿Por qué se fueron sin mí? —murmuró entre dientes.

—Bueno, Natsu dijo que estabas bastante cansada por lo de anoche. Así que les dijo a todos que no te molestaran.

Los ojos de Erza se abrieron un poco por la sorpresa. ¿Natsu no quería que nadie me molestara? Ella sonrió para sí misma mientras pensaba esto. Natsu había pensado en ella.

Se sentó en el bar durante un par de horas, esperando que Natsu y sus amigos regresaran. Los minutos comenzaron a pasar más y más lentos, nunca antes se había aburrido tanto. Charló con Mira por un rato, habló con el maestro sobre los nuevos trabajos de Clase S, y pronto se encontró sentada en la mesa, frente a Laxus. Cuando se sentó, comenzó a mirar las puertas del salón del gremio.

—Oye Erza, ¿qué te pasa? —Laxus inquirió mientras tomaba un sorbo de su jarra de cerveza.

—Nada. ¿De qué estás hablando?

—Solo digo que pareces un poco distraída.

—Cómo me veo no es de tu incumbencia Laxus. —ella le dijo con frialdad

Laxus se sorprendió un poco por su declaración severa, pero no la culpó, los dos nunca estuvieron realmente en términos amistosos. —Whoa, cálmate; no hay necesidad de ser tan hostil. —Terminó su cerveza y sostuvo su jarra en el aire.

—¡Oye, Mira! Otra cerveza, por favor.

—Ya viene. —Mira se dio la vuelta para llenar otra taza.

Erza se quedó fija en su silla, mirando un agujero en las puertas del gremio.

¿Dónde están? El maestro dijo que era un trabajo fácil, ya deberían haber regresado. Y si…

Luego se contuvo. ¿Que estoy diciendo? Natsu y los demás pueden cuidarse solos. Necesito dejar de preocuparme.

Mira llevó la bebida fría a donde estaban sentados Laxus y Erza. —Aquí tienes Laxus, otra fría para ti.

Laxus tomó la taza y se la llevó a los labios, la bebida dorada se deslizó suavemente por su garganta. Dejó escapar un suspiro de éxtasis, —Ahh, gracias Mira. Maldita sea, eso es bueno. ¿Quieres un poco de Erza?

Levantó su taza hacia ella. Ella lo miró por una fracción de segundos antes de volver su atención a la puerta. Laxus simplemente se encogió de hombros y se acercó la taza. —Como quieras. —Una vez más bebió de la taza.

—¿Sigues preocupada por Natsu? —Dijo Mira casualmente, Erza casi se cae de la silla por la sorpresa. Rápidamente se compuso y respondió a la pregunta de Mira.

—No... no estoy preocupada por Natsu, él puede cuidarse solo.

—¿En serio? Porque tus mejillas están rojas de nuevo. —Erza cubrió frenéticamente sus mejillas con sus manos tratando de ocultar su sonrojo. Mira le dio a Erza una sonrisa maliciosa y caminó de regreso al bar.

Erza observó severamente a Mira regresar al bar, maldiciendo mentalmente a la traviesa camarera. Luego se dio la vuelta, una vez más enfocándose en la puerta.

Laxus, que acababa de presenciar el espectáculo de damas, comenzó a reírse a expensas de Erza.

—¿Algo divertido Laxus? —preguntó Erza con severidad.

—Así que, estás loco por Natsu, ¿eh? —Preguntó con una sonrisa maliciosa.

Erza se giró enojada hacia Laxus, pero la intensidad del momento comenzó a desvanecerse ya que todavía tenía las manos en las mejillas.

—Vaya ahora. —Laxus agitó sus manos tratando de calmar a Erza, pero aun así no pudo evitar reírse un poco—. No me estoy burlando de ti. Solo estoy un poco sorprendido, eso es todo.

—¿A dónde vas con eso?

—Bueno… —Laxus se detuvo brevemente para tomar otro sorbo de su cerveza—. Pensé que elegirías a alguien más... varonil, no sé. Alguien como Elfman, o Gray, diablos, incluso yo. —Se río un poco más cuando el pensamiento de él y Erza saliendo cruzó por su mente.

Erza, sin embargo, no se divirtió con los comentarios de Laxus. —No es que sea de tu incumbencia, pero sí... tengo sentimientos por Natsu... creo. —Miró al suelo, insegura de sí misma.

—¿Qué quieres decir con qué crees? —La pregunta de Laxus hizo que Erza lo mirara desde el suelo.

—O te gusta o no te gusta. ¿Le gustas?

Hubo un silencio ensordecedor entre los dos mientras Erza reflexionaba sobre la pregunta de Laxus. Pensó en su día juntos ayer. Para ella, fue fácilmente uno de los días más felices que jamás haya tenido. Pensó en el picnic, la pelea y.… el beso. Una vez más puso sus dedos en sus labios cuando pensó en eso.

Todavía podía sentir el calor de sus labios sobre los de ella. Había dejado un efecto duradero en ella. Sin embargo, todavía no sabía qué sentía Natsu por ella, al menos no del todo. Natsu, siendo tan inocente como él nunca pensó en cosas como "relaciones" o "amor".

Después de unos momentos de silencio, le respondió a Laxus, aunque vacilante. —No lo sé. Natsu es... complicado.

—¡Ja! Si por complicado te refieres a estúpido como una piedra. No es difícil de leer, solo tienes que enfrentarlo de frente y obtendrás lo que estás buscando. —Tomó otro sorbo de su cerveza—. Eso es lo que pasa con ese chico, puede que no sea el miembro más inteligente de Fairy Tail, pero siempre puedes contar con él para ser honesto. —Le guiñó un ojo a Erza y le sonrió.

Erza se quedó perpleja ante las palabras de Laxus. No había oído hablar así en mucho tiempo. En realidad, fue bastante refrescante. Ella le devolvió la sonrisa por una fracción de segundos antes de detenerse y darse la vuelta de nuevo, fingiendo una actitud hacia él. Laxus pudo ver que se había comunicado con ella. Contento de que sus palabras fueran escuchadas, se levantó de la mesa y caminó hacia la barra.

Idiota, no tenía que decirme eso. Ya conocía la naturaleza de Natsu, pero tiene razón. Solo tengo que enfrentar a Natsu de frente. Así puedo conseguir un... Pensó en el beso de nuevo. ¡Enfócate Erza! Cuando Natsu regrese, debes decirle cómo te sientes.

Volvió a mirar hacia la puerta con una mirada renovada de resolución en sus ojos.

Una hora después de esto, las puertas del salón del gremio se abrieron. Erza casi saltó de su asiento, pero logró recomponerse. Se puso de pie, lista para caminar hacia Natsu y decirle cómo se sentía... pero lo que vio al otro lado de la puerta la horrorizó y detuvo sus planes en seco.

Era Gajeel. Estaba ensangrentado, magullado y golpeado. Un corte sobre su ojo sangraba profusamente, y su camisa estaba casi desgarrada y desgarrada. Erza miró a su demacrado camarada y vio que había algo aún más impactante en sus brazos. En ellos yacía Lucy, agarrando sus llaves mientras su cuerpo casi sin vida, magullado y roto estaba envuelto en los brazos de Gajeel.

Cuando cayó de rodillas exhausto, algo apareció detrás de su espalda. Wendy pronto apareció a la vista, la joven también estaba cubierta de cortes mientras Carla luchaba por sacar su forma inerte hacia la sala del gremio. Erza no pudo hacer nada más que mirar en estado de shock y horror al ver a sus amigos a las puertas de la muerte.

Sin embargo, mientras caminaba hacia ellos, sus ojos se abrieron de nuevo aterrorizados cuando notó algo aún más horrible que los cuerpos rotos de sus amigos...

Natsu... no volvió con ellos.