Capitulo 5

Adora estaba en Las Salinas con Mermista, ambas estaban sentadas en la arena contemplando el atardecer, la princesa de la región exclamaba:

-nunca me canso de ver el atardecer, es tan hermoso.

-lo se.

Respondía Adora, aquellos tonos naranjas eran dignos de una obra de arte y se complementaban de manera simbiótica con aquel cuerpo de agua en el que se reflejaba, Adora llevo su mano sutilmente hasta la mano de Mermista mientras decía:

-me alegra que podamos pasar tanto tiempo juntas Mermista.

Pero para su sorpresa tan pronto rozo la mano de la chica morena, la misma la retiro para acomodarse el cabello, aquel pequeño gesto incluso si no fuese a propósito había molestado a la chica rubia.

-si, con esto de La Alianza de Princesas es difícil encontrar tiempo libre para los amigos.

Decía Mermista sin despegar la vista del atardecer, la suave brisa del viento acariciaba su piel como si fuese un masaje.

-por eso es importante aprovecharlo, hacer que valga la pena.

Decía Adora acercándose un poco más a Mermista, la gran fama que había obtenido Adora como She Ra, las demostraciones de aprecio, de admiración le había inflado el ego a punto tal de que creía que podía comerse el mundo, pero para su sorpresa Mermista era muy diferente de Perfuma, la princesa de Las Salinas retrocedió un poco su cuerpo y exclamo muy extrañada:

-¿qué crees que haces Adora?

-¿tú que crees Mermista?

Si bien por fuera Adora sonreía por dentro se estaba molestando de que Mermista no cooperase o cediese a sus deseos.

-escucha Adora…yo estoy con Seahawk, creí que te lo había dicho.

-ya lo sé, pero…

-¿pero que Adora?

Adora cada vez más dejaba salir su frustración, la expresión en su rostro dejaba ver su enojo, pero por ahora sus pensamientos se quedaban en su mente:

¡Soy She Ra carajo! ¿Que hace falta que te explique? ¡Agradece que siquiera me fije en ti!

-bueno, no estoy diciendo que rompas con él, solo divirtámonos un poco.

-no voy a hacer eso Adora, si te di a entender que me gustabas de esa forma…discúlpame, pero solo eres una amiga para mí.

Adora al oír esa frase debió contenerse, sus puños se cerraban con gran agresividad, si había algo que le molestase es que le dijeran no a ella, a la protectora de Etheria, después de todas las veces que salvo a tantos habitantes todos deberían venerarla, pero ahora se estaba encontrando con una "hereje".

Mermista se puso de pie al notar que Adora se estaba enojando, si bien apreciaba a su amiga no estaba en sus planes ser su juguete o su sirvienta por lo que se cruzó de brazos y exclamo entrecerrando los ojos:

-debo atender unos asuntos del reino, te vere más tarde, intenta "relajarte" Adora.

Con su orgullo herido Adora solo respondió:

-claro, te vere luego.

Veía como la chica morena se iba alejando de ella caminando sobre la arena, no sabía si sentirse avergonzada, humillada, arrepentida, se acercó a la orilla del agua y fue ahí que vio su reflejo mientras reflexionaba:

No lo entiendo, soy Adora, Soy She Ra, soy perfecta, ¿por qué me rechazo?

Para su asombro, su propia mente, su propio ser le empezó a responder:

JAJAJA ¡TE RECHAZARON!¡ERES UNA PERDEDORA!

¡Cállate! ¡Cállate!

¡PARECE QUE LA GRAN SHE RA NO ES TAN GRANDE!

Adora empezó a sacudir su cabeza de un lado al otro, quería callar aquella burlona voz en su mente, pero no era tarea fácil.


Catra recorría los pasillos que conducían a su habitación y la paranoia lentamente ingresaba en su cerebro:

Van a descubrirlo, alguien va a descubrirme, dios siento que tengo la soga al cuello

Por suerte sabia disimularlo y se limitaba a saludar al resto de soldados que pasaban por los pasillos sin levantar sospechas:

-¡saludos capitana de la fuerza!

-saludos.

Al llegar a su habitación se lavó la cara y observo su rostro en el espejo, pensaba en ella, en Adora, pensaba lo hermoso que seria que estuvieran en la misma habitación, hablando de lo que sea, o solo estar acostadas en la cama y abrazadas, los brazos de Adora encima de ella de seguro podrían relajarla, pero sus pensamientos fueron interrumpidos cuando alguien golpeo a su puerta.

-¿quién podrá ser?

Se acerco lentamente a la puerta, con su mano izquierda abriría la puerta, pero ya tenía lista su mano derecha para atacar en caso de que se dieran cuenta de que ella era quien pasaba información a She Ra.

Abrió la puerta lentamente y mientras que la puerta chillaba su corazón latía con fuerza, su respiración se detuvo y no fue hasta que la puerta se abrió…

-Lonnie, eres tú.

-¿qué hay Catra?

-¿qué haces aquí? ¿No deberías estar con los demás?

-ayer dijiste que querías que siguiéramos con las clases de guitarra, ¿recuerdas?

-ah cierto, pasa.

Catra se sentó en su cama y sujeto la guitarra con sus manos, en tanto que Lonnie se apoyo contra una pared y observaba a la chica de ojos bicolor tocar algunos acordes, tras oírla y sobre todo ver su técnica la detuvo para explicarle algunos detalles:

-cuando hagas Si Menor no debes rozar la sexta cuerda Catra.

-¿no todas las cuerdas se tocan?

-exacto, depende el acorde.

-carajo, esto es más difícil de lo que pensé.

-vale la pena, llegara un punto que te harás adicta a escuchar las cuerdas de la guitarra.

-¿y cuándo tocare como tú? Ya llevo un mes con esto.

-te saldrá…cuando te salga, solo práctica.

Algo interesante era como el tiempo volaba cuando practicaba con el instrumento, si bien al principio era algo tedioso poco a poco sonaba mejor. Tras algunos minutos tocando Catra pregunto:

-¿qué hora es?

Lonnie miro su reloj y respondió:

-es…00:30 horas.

Catra sentía que el corazón se le iba a salir del pecho cuando se dio cuenta de la hora:

Mierda, mierda, hoy tenía que verme con Adora, tengo que irme ya.

Se levanto de la cama y exclamo:

-Lonnie, ya deberíamos irnos a dormir, estoy cansada.

-no te ves cansada Catra.

Sus nervios le ganaron y no pudo evitar tomar a la chica de rastas de los hombros y empujarla por la espalda:

-¡buenas noches adiós!

Una vez que cerró la puerta guardo la guitarra para salir hacia los bosques susurrantes.


Adora estaba parada frente aquel lago donde siempre se veía con Catra, veía su propio reflejo, el cual hablaba con ella, tanto su tono y la expresión en su cara era una clara burla:

-primero Mermista te rechaza y ahora Catra no se presenta, estas perdiendo el toque Adora.

-cierra la boca.

Su frustración y su impotencia crecía minuto a minuto, tomo una pequeña piedra y la lanzo al agua para atacar a su reflejo y si bien se generó una onda que lo distorsiono no tardo en volver.

Por "suerte" Catra apareció, estaba bañada en sudor y exhausta, debió recorrer gran terreno en poco tiempo, Adora al verla exclamo:

-¿dónde mierda estabas?

Su tono, además de ser exigente, era agresivo, sentía que de pronto el universo le tomaba el pelo, Catra aun recuperando aire y sin percatarse de la agresividad de su amada respondió:

-lo siento, se me hizo tarde.

Pero Adora no tardo en ponerse a la defensiva:

-¿es eso? ¿O no crees que valgo tu tiempo Catra?

Catra ahora podía notar el tono de Adora, pero no entendía el porque estaba tan molesta:

-no es lo que quise decir.

Adora camino rápidamente hasta acortar la distancia entre ambas, tenía mucha energía que liberar por lo que sin decir nada llevo su mano hacia los cabellos de Catra, quería acariciarla y besarla o eso es lo que ella pensaba, en realidad quería probarse un punto a sí misma, pero…

-espera Adora, antes quiero hablar de algo contigo.

Catra retrocedió un paso para poder explicarle la situación dejando notar sus nervios.

-en La Horda algunos soldados sospechan que alguien le pasa información a la Alianza de Princesas y…

Adora no escuchaba las palabras de Catra, su sentido común se había apagado y otra vez su propia mente se burlaba de ella.

¡JAJAJA AHORA CATRA NO QUIERA QUE LA TOQUES!¡ERES TAN PATETICA!

Adora cerro los puños, se sentía humillada, sentía que era una don nadie, sentía que no era She Ra, su respiración se aceleraba, la sangre le hervía, dio un paso más y directamente le escupió las palabras a Catra:

-¡cierra la boca, maldita basura!

Catra dejo de hablar, la actitud de Adora no solo la detuvo, también la confundió y obviamente la ofendió:

-¿qué pasa contigo?

-¿conmigo? ¿Qué carajos pasa contigo? ¿Qué carajos pasa con Mermista?

-¿Mermista? ¿Qué tiene que ver ella con todo esto Adora?

Adora empezó a gruñir, su frustración había llegado a un nivel tal de que no podía aguantarse a ella misma, necesitaba demostrar su valor…por desgracia la forma en que tenia pensado hacerlo era fruto de una mente inestable.

-de rodillas.

-¿que?

-¡ya me oíste Catra, ponte de rodillas!

Catra no podía reconocer a Adora, sentía que hablaba con una desconocida y si bien la amaba no pensaba dejarse tratar así.

-no se que pasa contigo, pero no puedes tratarme así Adora.

Una vez más no se cumplían los caprichos de Adora y una vez más sus inseguridades se apoderaban de ella.

-¡no pienso repetirlo Catra!

-ya te dije que no puedes tratarme así Adora, soy tu novia.

En ese instante, al oír esa frase Adora se quedó en silencio, sus ojos se abrieron y fue ahí que…estallo en risas.

-¡JAJAJA NO HABLAS EN SERIO!

Catra no entendía nada, solo podía ver como Adora parecía que iba a orinarse encima, incluso debió sujetar su estómago ya que le dolía de tanto reírse.

- ¿qué es tan gracioso?

Preguntaba Catra, toda esta charla la desorientaba más y más, en tanto que Adora llevo su mano a uno de sus ojos para poder limpiarse algunas lágrimas fruto de reírse tanto y respondió:

-¿Catra y yo cuando dije que era tu novia?