Capítulo 9: Un día con Joel

-Sin hacer trampa Samy- le advirtió divertido Joel a su hermano menor al notar que se ponía de puntitas. Samael tenía la espalda apoyada en el marco de la puerta del pasillo interno de la habitación de su hermano mayor que aún compartían. Desde que se mudaron, cada cierto tiempo hace una marca de su crecimiento en ella y Gabriel estampa su mano al lado -Si haces trampa tu crecimiento no será real hermanito- le revolvió el cabello.

El menor sonrió con picardía -Pero Joeh… no hago trampa-

-¿No?... ¿Y esto qué es?- Preguntó Gabriel colocando su dedo en el espacio que había dejado y haciéndole cosquillas en la planta del pie.

-Jijiji… basta Gabe- comenzó a reír y brillar.

-Oh… ¿Además de hacer trampa, mientes hermanito?… eso es digno de un castigo- Comentó Gabriel divertido y comenzó a hacerle cosquillas en su abdomen.

El pequeño comenzó a reír sin parar mientras trataba de escapar de su hermano -¡Gabe, seré bueno!... jijiji… por favor… jijiji… ¡Detente!... ¡Joeh, ayúdame!-

Su hermano mayor se sentó en el sofá divertido -No lo sé… Gabe tiene razón… mentir y hacer trampa está mal Samy-

Gabriel lo elevo y entre sus brazos comenzó a hacerle más cosquillas -¡Gabe!- comenzó a retorcerse de la risa -Seré bueno… no lo volveré a hacer-

El aludido se detuvo aún con el pequeño entre sus brazos -¿Qué opinas Hermano?-

Joel se acercó lentamente a ellos pensativo, examinó con detenimiento a su hermano menor -No lo sé-

-Por favor Joeh… no lo volveré a hacer- se rió un poco más antes de mirarlo suplicante.

-De acuerdo es suficiente- el menor parecía aliviado -Pero… la siguiente vez no te ayudaré- le advirtió divertido tocando su frente con el dedo índice -Y Gabe decidirá cuándo detenerse-

-¡Uhhh!… Ya sabes enano- Le revolvió el cabello -si mientes serás mío… jijiji- Sonrió malvadamente.

-¡Joeh!- Estiró sus brazos suplicante, el mayor lo tomó entre sus brazos y le beso la frente.

-¿Estás listo para intentarlo nuevamente?-

-¡Sí!-

-Bien- Lo bajo de espalda a la pared -Quieto- con precisión realizó la marca horizontal.

-¿Cuánto crecí esta vez?- Estaba emocionado.

-Un centímetro- Bromeo Gabriel.

-Joooh- inflo los cachetes -¡Que malo eres Gabe!-

Joel hizo aparecer una regla para medir de forma exacta -Fueron doce centímetros y medio en realidad- su hermano brillo de felicidad -Recuerda decirle a Raf, él lleva un registro de sus crecimientos-

-Sí hermano- Sonrió feliz, Gabriel le tomó su mano izquierda para entintarla, esta vez escogió una tinta verde claro. Con cuidado lo ayudo -¡Mi mano también es más grande!-

-Levemente- Gabriel se arrodillo para limpiarla, pero su travieso hermano en vez de colocar la mano en el paño, lo hizo en su cara, dejando una suave marca verde.

-Ups… lo siento Gabe… me equivoqué- sonrió con falsa inocencia.

Tranquilamente y sin decir nada, su hermano le limpio la mano y luego su propia mejilla -Sabes Samy… La venganza es más dulce cuando la víctima sabe que ocurrirá pero no sabe ¿cuándo, dónde y cómo?… seré paciente- le revolvió el cabello con una tétrica sonrisa.

-Joeeeeh- Esa declaración lo puso nervioso.

-No me meteré en esto Samy, lo siento- Se encogió de hombros -Ahora que ya terminamos debemos ir a preparar el desayuno- Sus hermanos asintieron -oh Samy… Hoy se termina el castigo de Azy-

Su hermanito asintió -Sally va a estar muy feliz de volver a verlo- le sonrió -Trata de ocultarlo pero es evidente de que lo extraña mucho-

-Estoy seguro de eso… Hoy es el último día en que Gabe les enseñara a volar, Mañana Azy volverá a enseñarles, se paciente por favor-

-Sí… No te preocupes… No tengo nada contra nuestro hermano-

El mayor le revolvió el cabello -Después del desayuno tú y yo iremos a entrenar… Hoy es el primer día de tu formación con la espada- La emoción que esperaba de parte de su hermano nunca llegó.

-Okey- dijo indiferente.

Gabriel no pudo evitar reír por la cara de decepción de su hermano mayor -Vamos Samy- tomó la mano del menor y se fue con él. Al salir de la habitación ambos se detuvieron al notar que en la puerta del pelinegro su pequeña hermana estaba dormida hecha un ovillo aún con su camisón, ambos se miraron preocupados.

Joel suspiro sonoramente al verla ahí, no era la primera vez que sucedía -Bajen ustedes primero- les ordenó, hoy les tocaba a ellos preparar el desayuno y por eso Gabriel durmió con ellos -La llevaré con Leroy- se acercó a ella y la tomó con cuidado entre sus brazos.

-Vamos Samy- Gabriel prácticamente obligó a su hermano menor a seguirlo.

Él sólo asintió sin dejar de ver como se la llevaban, al llegar lo siguió hasta la cocina dispuesto a ayudar.

-¡Oh no Samy!- Lo sentó en el taburete de la barra que dividía la cocina del comedor -Sabes que no debes entrar a la cocina-

-Pero quiero ayudar- se quejó con un puchero.

Su hermano le revolvió el cabello divertido -Lo siento, pero aún eres muy joven para esto… pronto podrás ayudar-

-¿Cuándo?-

-Pronto-

-¿Cuándo?-

Suspiro -Cuando sea el momento-

-Pero… yo quiero ayudar ahora- con sus palmas golpeó la mesada de la barra e inflo sus cachetes -Yo…-

-Suficiente Samael- lo regaño con suavidad, su hermano cerró la boca y bajó la mirada -Aún eres pequeño y estas responsabilidades no son para ustedes… Así que no insistas y no vuelvas a golpear la mesada así-

Puso los codos en la barra y apoyó su cara entre sus manos -De acuerdo- respondió de mala gana.

-Aunque no estemos comiendo no debes colocar tus codos en la barra y en ninguna mesa, es de mala educación- lo regaño con el ceño fruncido -Eres un ángel primordial, uno de los príncipes celestiales… Ese comportamiento no es adecuado… y no uses ese tono conmigo-

-¡Lo siento hermano!- rápidamente se sentó correctamente y suavizó su tono -No volverá a suceder- en tan solo un par de minutos había sido regañado dos veces, eso no le gustaba. Si se trata de modales y etiqueta tanto Joel como Gabriel son inflexibles debido a sus roles más políticos y públicos, él debe seguir un camino similar en el futuro así que le exigen desde temprana edad un buen comportamiento.

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Como fue prometido Samael y Joel después del desayuno se cambiaron sus túnicas por ropa de combate y subieron a entrenar con espadas de madera muy similares en tamaño y peso a las reales, la preferida del mayor es de hoja fina y larga con protección en la empuñadura, así que de ese tipo usaban ambos.

-Samy… Separa el codo… no tanto- Suspiro y se acercó a su hermano para corregir la postura.

-Joooh- Se quejo -Esto es incomodo Joeh y difícil-

-Es tu primera vez, no te preocupes, con la práctica constante será más fácil-

El menor frunció el ceño -No me gusta esto… es aburrido- lanzó la espada al suelo lejos de él y se cruzó de brazos, su hermano sólo lo observó desaprobatoriamente -Carece de sentido, padre es el creador, no tiene opositores y Mike va a liderar a un gran ejército … No necesito nada de esto… No lo haré- dio un fuerte pisotón inflando sus cachetes.

-Samael- Lo miró severamente y usó su tono de advertencia, el menor lo capto inmediatamente, trago saliva y recogió rápidamente la espada -No vuelvas a hacer eso-

-Lo siento- Mordió su labio inferior nervioso.

El mayor bajó a su altura provocando que su hermano adoptará una postura rígida -Esta clase de comportamiento y arrebatos no son apropiados- tomó la espada de entrenamiento de su pequeño hermano y la dejó junto a la de él con suavidad en el suelo, se sentó sobre sus piernas -ven aquí- le ordenó apuntando su regazo.

Samael retrocedió dos pasos tapándose por instinto su pequeño trasero -Joeh, por favor… No…-

Suspiró -Sabes perfectamente que ese tipo de comportamiento no es adecuado y no es tolerado- le explico calmadamente con el ceño fruncido -Tiene consecuencias… entre más tardes en aceptarlas, será peor- Con esa advertencia finalmente obedeció, Joel era muy estricto con eso realmente, no existen negociaciones al respecto -Cuatro por lanzar la espada, dos por el pisotón y por no venir inmediatamente serán directamente- dicho eso dejó su trasero totalmente expuesto, levantó su mano y le dio las primeras dos nalgadas rápidamente pero suaves, las siguientes tres fueron con con un poco más fuerza y con más tiempo entre ellas. Sin embargo, la esperada sexta fue mucho más dolorosa, de hecho la mano quedó levemente marcada en su trasero que ya había adquirido un tono dorado.

Samael gimoteo con algunas lágrimas en sus ojos, había pasado mucho tiempo desde que no lo castigaron de esa forma, su padre había sido el último en esa ocasión y fue por pelear a golpes con Mike, Joel casi nunca recurre a esto.

-Lo siento mucho Joeh, no lo volveré a hacer- se disculpó sinceramente con voz llorosa aún recostado boca abajo sobre el regazo de su hermano.

-Eso espero Samy- colocó su ropa nuevamente en su lugar -puedes levantarte- cuando lo hizo lo acercó a él, lo abrazo frotando su espalda, limpio sus lágrimas y le beso la frente en señal de que ya todo está bien, aquello es algo que el padre celestial no hace cuando castiga pero que Joel siente que es necesario, suspiro -Es esencial que todos aprendan al menos lo básico de combate con armas y cuerpo a cuerpo- Le explico calmado -Es parte de la formación que deben tener… puede que padre no tenga opositores dentro de sus creaciones pero hay otros afuera esperando y debes saber defenderte no puedes depender de mí o el ejército que va a liderar Mike ¿Comprendes?-

-Si hermano- parpadeo un par de veces ladeando la cabeza -¿Por qué mi hermana no está aquí entonces?-

Lo pensó un poco antes de responder -Si bien tienen prácticamente la misma edad, ella es más pequeña- Respondió tranquilamente, aunque lo real es que prefiere evitar enseñarle, ya que la ve frágil y delicada, a quién deben proteger, no al revés.

Su hermano levantó una ceja con sospecha -Supongo-

-Obviamente espero que nunca debas realmente luchar por tu vida y si puedo defenderte lo haré, sin embargo, es esencial que si aprendas a defenderte aunque te parezca difícil y aburrido- le acarició el rostro y le entregó la espada -Vuelve a la primera postura… eso está mejor… segunda… bien… tercera- corrigió la posición de los brazos -cuarta…-

Así continuaron hasta cerca de la hora del almuerzo -Bajemos a bañarnos Samy- le revolvió el cabello -Lo hiciste bastante bien… sin considerar tu arrebato inicial-

-Gracias Joeh… y no volverá a ocurrir- Le prometió con seguridad.

-Eso espero- abrió un portal directo a su habitación, guardo las espadas, busco túnicas limpias y toallas, abrió un nuevo portal directo a los baños. Ambos se desvistieron, enjabonaron cuidadosamente sus cuerpos, se enjuagaron y entraron a las piscinas calientes -Después del almuerzo me acompañaras a una reunión junto a Gabe con los líderes de las divisiones angelicales-

-Que aburrido- murmuró antes de hundirse completamente en el agua.

Joel lo sacó a flote para continuar -Sé que eres muy joven y que las reuniones te parecen aburridas pero debes comenzar a involucrarte Samy… No te preocupes es una reunión corta, después de eso iremos al jardín que nos hizo padre-

Eso lo emocionó -¡¿Lo prometes?!-

-Por supuesto, nos divertiremos hasta antes de tu clase de vuelo-

-Clarooo- No estaba seguro de que su hermano realmente supiese lo que es divertirse.

-Pero… Debes prometer que te comportaras adecuadamente- levantó su dedo índice -Sin quejas… Esta vez sólo irás de oyente, pero a pesar de eso debes estar atento y aprender cómo manejamos las reuniones… También es parte de tu formación aprender cómo lidiar con el resto de los ángeles y ser un líder… Recuerda que tu rol no es sólo la creación, también vas a liderar-

-Si hermano- respondió aburrido y se volvió a sumergir en el agua.

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Estaba aburrido, muy aburrido, perdió el interés totalmente después de la lectura del primer pergamino. Deseaba irse, pero sabía perfectamente que no debía, suspiro con cansancio. Se encontraba sentado entre sus hermanos frente a la delegación de líderes angelicales, es decir, los representantes de cada "raza" y gremio, entre ellos también se encontraban sus otros hermanos mayores quienes lideraban diferentes gremios como el de seguridad (vigilancia y poder militar), salud y bienestar, ciclo de vida (vida y muerte). Sólo su hermana menor no estaba ahí, eso lo hizo sentir raro, algo culpable por dejarla de lado.

Suspiro mientras tomaba apuntes, Joel le encargó como tarea anotar los nombres y función de los asistentes, algunas opiniones de ellos que le parecieran relevantes y su propia opinión o posible resolución. La reunión fue menos tediosa de lo que esperaba y cuando terminó sus hermanos se quedaron un poco más.

-Lo hiciste muy bien Samy- Joel le revolvió el cabello, estaba orgulloso.

El menor sonrió mostrando los dientes -Gracias Joeh- le entregó "su tarea".

Su hermano la leyó rápidamente y sonrió satisfecho -Estupendo, bien hecho-

-¿Ahora nos acompañaras en las reuniones enano?‐ le preguntó Azrael entre divertido y burlesco.

-No sé- se encogió de hombros y miró a su hermano mayor.

-Sólo en aquellas reuniones cortas como esta, siempre y cuando no interfiera en sus estudios- aclaró Joel.

-Comprendo- el pelinegro sonrió y le revolvió el cabello al menor.

Su hermanito sonrió divertido y lo abrazó repentinamente -te extrañe Azy- murmuró -Por cierto… ¿Dónde está Sally?-

Azrael y Leroy se miraron.

-Esta con Padre- respondió con suavidad Leroy.

-Escuché a Padre decir que le enseñara a usar su magia- acotó Rafael pensativo.

Gabriel se apoyó sobre la cabeza de su hermano castaño -No sabia que te gustaba el chisme Raf- se burló con una sonrisa.

Rafael lo miro molesto -No me aplastes- trato de quitárselo de encima, pero era imposible.

-Gabriel, deja a Raf- Le ordenó Joel con un tono serio, su hermano lo dejó inmediatamente y fue a molestar sutilmente a Leroy, el mayor suspiró con cansancio.

Samael se acercó al castaño -Raf- sonrió con orgullo -Hoy me midieron- su hermano se agacho hasta su altura e invoco una libreta de color dorado -Crecí doce centrimetros y medio-

Rafael lo anoto -Mucho más que la última vez… Mike creció veintiocho centímetros desde la última vez… eso quiere decir que Mike creció más de la mitad en el mismo periodo… Aunque claro es un poco mayor-

Eso decepcionó al rubio menor, Miguel se paró junto a él demostrando lo evidentemente más alto que es con una sonrisa burlesca -¿Quien sabe? puede que eventualmente me alcances o… te quedes chaparro-

-¡Túuuu…-

-Sin peleas- Les advirtieron al mismo tiempo Joel y Leo, los conocen demasiado bien, ambos sonrieron nerviosos y se abrazaron con falso amor.

-¿Cuánto creció Salael?- Pregunto curioso Rafael mirando a Azrael y Leroy, ambos intercambiaron miradas con una sonrisa extraña.

Azrael desvió la mirada y murmuró -cuatro centímetros- No es que fuese una competencia pero le incomodaba. Él es el más bajo de su generación por algunos centímetros, Leroy es evidentemente más bajo también y ahora su hermanita recorre ese mismo camino. Aunque los tres son los menores de su generación, eso le da algo de falsa "tranquilidad".

-Me pregunto si tendrá algo que ver la alimentación y estilo de vida- Reflexiono Rafael pensativo -Aunque claro, Mike es mayor y siempre a sido evidentemente más alto- hablaba para sí mismo -Pero Samy y Sally…-

-No experimentarás con ellos Rafael- Le advirtió Leo, conocía perfectamente esa mirada.

-Pero…-

-No- Leo no dejó espacio a la duda.

-De acuerdo- acepto mirando hacia otro lado. Aunque cambiar la alimentación de su hermana que no come carne, no es experimentar, simplemente es mejorar su calidad de vida. Sonrió ante esta nueva idea e inmediatamente comenzó a hacer una lista mental de los alimentos.

Azrael noto esa extraña mirada en su hermano castaño -¿Estás seguro que no experimentará con ellos?- Le preguntó a su gemelo preocupado.

-No realmente- Estaba agotado -Hablaré con el despues.. pero es mejor no confiarse-

Samael se acercó a su hermano mayor para que lo tomara en brazos -Joeh- mencionó preocupado después de escucharlos.

-Tranquilo Samy, Raf no experimentará con ustedes- Aseguró no tan seguro, cuando Rafael tiene algo en mente es difícil sacarlo de ahí -Ya terminamos aquí… ¿Vamos a donde te prometí?-

-¡Sí!-

-Nos vemos chicos- Se despidió el mayor sin esperar respuesta, se teletransporto con su pequeño hermano al jardín privado -Aquí estamos… ¿Qué quiere hacer?-

-En realidad- Jugueteo con sus manos -Podemos dormir una pequeña siesta primero… Estoy algo cansado-

Parpadeo un par de veces, eso no lo esperaba -Lo lamento, suelo olvidar que a pesar de tu apariencia eres demasiado joven aún, apenas un recién nacido-

Eso lo ofendió -No soy tan pequeño-

-Si lo eres- sonrió mientras se sentaba bajo un frondoso árbol con él -Aunque no lo creas ustedes: Mike, Sally y tú… han crecido y aprendido mucho más rápido que cualquiera de nosotros-

-¿Estás bromeando?-

-Por supuesto que no- Se recosto, Samael se quedó en su pecho -La categorización del tiempo es reciente, sin embargo, puedo calcular que yo tenía varios miles de años cuando Leo y Azy fueron creados y mi apariencia era la de Mike… aunque antes creía que solo nos llevamos por algunas décadas con Uriel hicimos la conversión real de nuestras edades- su hermano parpadeó incrédulo -De hecho los únicos que se llevan por pocos años son ustedes: Mike con Sally y tú que nacieron el mismo día… Leroy es mayor que Mike por cerca de diez mil años que es algo similar a la diferencia entre Leo/Azy y Gabe-

Samael estaba en shock, él tiene solo algunas décadas -Realmente ustedes son muy viejos- se tapó la boca con ambas manos.

-Eso no es amable Samy- Frunció el ceño y le tocó la frente con su dedo índice -Pero si somos muy mayores, sin embargo, desde que Tú y Sally nacieron nosotros hemos crecido a una tasa mayor que antes… La verdad es que nunca le he preguntado a Padre porque, pero me da curiosidad… Supongo que por eso Raf ha estado tan atento en tomar apuntes de…- Guardo silencio al escuchar un suave ronquido, sonrió ante la ternura de su hermano pequeño que se había dormido sobre él, en su pecho. Materializó sus alas para cubrirlo, era cálido y relajante, muy pocas veces se tomaba el día para descansar o una tarde, así que agradeció este momento.

Observó como el viento fresco movía las hojas de los árboles que los cubren, sintió en su piel la frescura y a la vez la calidez del sol. Por debajo de sus alas abrazo a su pequeño hermano que le entrega calidez y tranquilidad, era extraño pero sentía algo muy distinto por él, no deseaba hacer diferencias pero a pesar de que también estuvo/está a cargo de Gabriel por Samael siente algo muy distinto. Cerró los ojos e igualó su respiración con la de su pequeño hermano y finalmente se durmió.

Hola!

Gracias por leer...

Samael/Lucifer, es muy apegado a Joel o Joeh como lo llama y a su vez Joel aunque no lo sabe o comprende ve y siente a su hermano pequeño como un hijo y viceversa, que es diferente a la relación que tienen con Gabriel que si lo ven como un hermano pero muy cercano. Algo similar ocurre con Azrael, Leroy y Salael.

De la generación del medio Gabriel que es el mayor le gusta molestar y sacar de quicio a sus hermanos menores pero cuando esta con los otros angeles inmediatamente se vuelve serio y frío para cumplir su rol politico de mensajero; Rafael es TEA pero levemente, ama experimentar con plantas y los demás, quiere saber como funciona todo; Leroy es muy timido y amable, le cuesta decir que no, sobre todo a sus hermanos, le gusta recorrer con su visión el universo y aprender sobre el moviemiento de los astros.

Espero que les haya gustado, espero leer sus comentarios.

Saludos!