Advertencia de contenido: Este oneshot aborda temas sexuales y contiene escenas subidas de tono así que puede no ser del gusto de algunaspersonas, así que abstenerse de leer si no les gusta ese contenido.
Bulma observó curiosa el comportamiento de su nuevo huésped saiyajin. Era el que más le había llamado la atención de los que había tenido en su casa los últimos tiempos, incluso más que los namekianos que había alojado también.
Sabía que había sido una locura invitarlo a su casa en primer lugar ya que él había tratado de matar a su mejor amigo, pero no había podido evitar sentir una gran curiosidad por él cuando lo había visto la primera vez.
Debía admitir que era muy diferente a Goku, era frío, parecía calculador, cerrado y tosco, además de que según sabía era un genocida espacial que había estado al servicio de Freezer. Algo completamente distinto al ser gentil y descuidado de su amigo Goku, que resultaba ser de la misma raza que él.
Había podido tener algunas pocas conversaciones con él y la mayoría de las veces ella era quien las empezaba y quien más hablaba en ellas.
Se preguntó si compartiría rasgos en común con Goku a pesar de que parecían tan diferentes. Ella sabía que, aunque los humanos fueran todos diferentes tenían ciertas cosas que todos compartían, o al menos la gran mayoría.
Oye Vegeta- dijo mientras lo observaba beber café en la mañana, ese día no había dormido bien porque había estado dándole vueltas a la actitud del saiyajin tratando de sacar conclusiones respecto a él, pero poco podía saber por lo que él le hubiera comunicado.
Vegeta la miró al escuchar que le hablaba, aunque no respondió hasta dejar de beber, tenía eso diferente a Goku ya que él le habría hablado atragantándose con la bebida para responder.
¿Qué? -preguntó de forma tosca, esa humana le resultaba irritante desde que había llegado, aunque la notaba más extraña los últimos días, era como si observara cada cosa que hacía.
¿Qué cualidades comparten los saiyajin en general? Quiero saber ya que según tengo entendido tu y Goku son extraterrestres- le preguntó intrigada, esperaba que eso pudiera responder sus dudas. Miraba nerviosa al saiyajin ya que a pesar de que sabía que era un cascarrabias a veces no podía predecir qué iba a responderle al ser tan cerrado en su forma de comunicarse.
Tu ya sabes que cualidades tiene un saiyajin diferentes a un humano, no entiendo para que preguntas estupideces- respondió él de forma tosca, Bulma lo miró con molestia ante sus palabras groseras.
Si ya se, super fuerza, velocidad, agilidad, gran control del ki y cabello negro al parecer-dijo pensativa- Pero aún no me explico por qué Goku y tu no parecen muy similares, aun así, aunque supongo que solo debería tener en cuenta las características físicas- agregó, Vegeta la miró con aun más desagrado.
Ese idiota de clase baja y yo no somos iguales en absoluto, además olvidaste el orgullo y escuchar preguntas irritantes de humanas molestas- le aseguró él con fastidio, lo vio levantarse e irse, seguramente se iría a entrenar.
Bulma lo miró con rabia al ver que la había dejado hablando sola como siempre, parecía que sus dudas no se resolverían hablando con él directamente, era alguien muy difícil de llegar a conocer.
Había estado pensando si la falta de deseo sexual sería una característica física de los saiyajin ya que había visto que Goku no parecía interesarse en eso y mucho menos comprender esos asuntos, pero poco podría averiguar hablando con su arrogante y malhumorado huésped.
También notó que, cuando le había dicho a Vegeta que no se enamorara de ella, él no había tenido una reacción que demostrara que lo sintiera tampoco ¿Y si los saiyajin eran asexuales?
Se quedó pensativa sobre ello, aunque bien podría resultar en que no les gustaran las humanas, pero así pensó también en que Goku tenía una esposa humana efectivamente, pero no parecía que su relación priorizara los asuntos sexuales.
Pensó en la posibilidad de que su amigo no fuera un saiyajin convencional y no fuera el mejor ejemplo ya que había sido criado en La Tierra. Podría mejor tratar de verificar sus suposiciones con Vegeta, aunque sería mucho más difícil que con su amigo por su gran terquedad.
Se convenció a sí misma de que podría lograrlo, después todo era una científica brillante, no creía que el orgullo del saiyajin fuera de mayor tamaño que su inteligencia, aún si debía servirse de más métodos de investigación que las simples preguntas que bien sabía que él no respondería.
Estuvo observándolo los siguientes días nuevamente, parecía que él notaba su vigilancia, pero no se había quejado al respecto. Ella hizo caso omiso, estaba realmente involucrada con averiguar lo que quería saber.
Un día cualquiera, cuando sabía que él estaría a esa hora en el comedor y sus padres no estaban en la casa, se puso a ver una serie que sabía bien que tenía escenas sexuales en ella. La había empezado a ver justo en el comedor mientras los dos estaban allí cenando, usualmente ella lo esperaba para cenar cuando salía de entrenar.
Notó que Vegeta no veía la televisión, por lo general si la veía no solía comentar respecto del contenido. Los sonidos sexuales comenzaron a resonar en el silencio de la cena, ella sonrió pretendiendo contener la risa ya que la situación le daba un poco de gracia a pesar de que lo estaba haciendo por mera curiosidad científica.
Vegeta la miró de reojo en cuanto ella sonrió, pero siguió cenando sin acotar nada, por lo general comían juntos en silencio en la noche a menos que sus padres estuvieran en la casa, en ese caso charlaba con ellos.
¿Por qué estás viendo vulgaridades en esa cosa que usan para entretenimiento? -preguntó Vegeta ya que ya no podía ignorar los ruidos sexuales molestos de lo que sea que la humana estuviera viendo en ese ruidoso artefacto humano.
Es una serie que quería ver ¿Te molesta? -preguntó Bulma pensativa, tenía una libreta cerca y anotó algo en ella.
Sí, escuchar ruido de humanos fornicando no es de mi agrado-le aseguró el con molestia, Bulma hizo una mueca, vaya que el saiyajin era tosco al hablar.
¿Te dan asco los humanos? - preguntó ella interesada, Vegeta la miró con fastidio.
Solo apaga esa cosa- le demandó irritado, Bulma lo hizo y decidió poner otra cosa para ver, aunque anotó en su libreta luego de ello.
Respuesta a estímulos auditivos: Negativa- pensó mientras lo escribía, la cena terminó con normalidad luego de eso, aunque no podía quitarse de la mente aquello ya que quería saber más sobre eso. Por mucho que quisiera a su amigo él no le serviría para averiguarlo como si fuera un saiyajin convencional.
Se preguntó por un momento si no era demasiado hacer aquellos experimentos con Vegeta ya que no lo conocía tanto, aunque tenía tanta curiosidad que sabía que podría involucrarse lo necesario para comprobar o refutar su hipótesis. Pocas veces tenía la oportunidad de observar tan de cerca un extraterrestre, aunque era tan cerrado que se volvía algo desafiante.
Al día siguiente en la mañana, optó por un experimento simple, había rociado un poco de su propio perfume en el comedor donde solían desayunar. Era una fragancia suave y agradable que solía usar en el verano.
Por alguna razón Vegeta siempre se sentaba en el mismo lugar así que sabía dónde rociarlo antes de que llegara al comedor.
Vegeta llegó a desayunar y se dispuso a comer luego de que ella pusiera las cosas a disposición, generalmente él solía hacerlo solo ya que ella se levantaba más tarde, pero seguía en sus días sin poder dormir debido a su gran curiosidad.
Luego de beber el primer sorbo de café, Vegeta se quedó pensativo un momento, al parecer había sentido el aroma del perfume, aunque no le dio demasiada importancia ya que volvió a beber de la taza que estaba sosteniendo.
¿Qué tal dormiste? -preguntó Bulma con naturalidad ya que quería que le dijera algo al respecto, aunque se había extrañado al ver al saiyajin desayunar normalmente.
¿Por qué este lugar huele a ti? -preguntó Vegeta confundido ignorando la pregunta de la humana, Bulma lo miró sorprendida ya que se había dado cuenta que ella usaba ese perfume.
Es que derramé mi perfume sin querer ¿Te molesta? -preguntó haciéndose la desentendida con su tono de voz confundido, no quería que notara un patrón entre sus experimentos.
Huele a flores muertas y naranja- dijo él sin dar una respuesta concreta, Bulma hizo una mueca de resignación al escuchar aquello, aunque escribió en su libreta lo que había concluido con ello.
Reacción a estímulos olfativos: Indiferente- pensó mientras lo anotaba, comenzaba a irritarla que fuera tan difícil obtener datos de aquel cerrado saiyajin.
Otro día luego de eso, decidió atreverse un poco más con alguno de sus experimentos, aunque esta vez tuvo una buena excusa para hacerlo. Su plan inicial había sido hacer contacto físico leve con él con alguna excusa tonta.
Vegeta había salido un poco herido de una de sus jornadas de entrenamiento, incluso había entrado goteando sangre ya que tenía una herida en el brazo.
Oye, estas herido- mencionó ella al verlo, aunque no había pensado en sus experimentos cuando lo había visto ya que genuinamente se había preocupado por él.
No hagas un escándalo, terrícola molesta- dijo Vegeta con fastidio al escuchar las palabras de Bulma, solía hablar fuerte cuando estaba exaltada. La vio ir corriendo a buscar un pequeño maletín e interceptarlo mientras iba a su cuarto.
No te irás, tengo que curar eso, además vas a llenar de sangre toda la casa- le reprochó, Vegeta la obedeció a regañadientes luego de que le insistiera para que volviera a la sala para que se tratara la herida.
No necesito que lo hagas- le aclaró él molesto, Bulma hizo caso omiso a ello al escucharlo.
Yo lo haré, no seas testarudo- dijo Bulma sin darle mucha importancia a la opinión de su huésped.
Comenzó a desinfectar su herida y vio cierto dolor en su rostro, aunque trató de hacerlo con el mayor cuidado posible.
Lo siento- dijo Bulma mientras seguía haciéndolo, vio el rostro serio de él mientras resistía el dolor luego de que el ardor inicial se le hubiera pasado.
Luego de eso, vendó su herida para que estuviera protegida de cualquier infección, sintió que sus mejillas se acaloraron al rodear el musculoso brazo de Vegeta con la venda.
¿Mejor? -preguntó Bulma mientras aseguraba la venda para que no se quitara, aunque Vegeta movió su brazo para que dejara de tocarlo.
Humana entrometida- dijo con molestia el saiyajin mientras se ponía de pie, Bulma lo miró aún más curiosa al verlo alejarse, le había parecido ver que estaba algo sonrojado, aunque bien podría ser por el entrenamiento que había tenido hace poco.
Buscó su libreta para anotar los datos que había recabado, aunque no había planeado que eso contara como uno de sus experimentos.
Reacción a contacto físico leve: Confusa, aunque al menos hay alguna ¿Aversión o represión de reacción? -anotó pensativa, aunque sonrió ya que sentía que estaba un poco más cerca de poder saber algo.
Al día siguiente, había decidido poner en pausa los experimentos ya que no quería molestar a su huésped tantos días seguidos, pero recibió la visita del maestro Roshi y Oolong de imprevisto.
Hola Bulma, qué linda estas-dijo Roshi al llegar, su madre les había abierto la puerta mientras que ella estaba en el comedor junto con Vegeta. Él había hecho una pausa para almorzar y ella estaba allí acompañándolo ya que también tenía hambre.
Veo que llegamos en un mal momento- dijo Oolong, miró con miedo al saiyajin que comía sin mirarlos, así como si no hubiera llegado nadie, pero su sola presencia allí le había puesto los nervios de punta.
Claro que no, pueden quedarse a comer, hay mucha comida. Vegeta y yo estábamos comiendo temprano porque él tiene un descanso de su entrenamiento a esta hora y luego regresa a entrenar hasta la noche- les comentó la peliazul con naturalidad.
Muchas gracias- dijo el maestro Roshi sonriente, aunque apenas Bulma se volteó para ir a buscar más comida miró con temor a Vegeta ya que él solo seguía comiendo con su seria y dura expresión de siempre.
En cuanto la chica volvió les sugirió que se sentaran ya que no entendía por qué no lo habían hecho, Roshi y Oolong se sentaron temerosos en la otra punta de la mesa, el lado más alejado del saiyajin que estaba alimentándose allí.
Muchas gracias por tu amabilidad-dijo Roshi aunque estaba nervioso por la expresión seria del saiyajin, ellos sabían que él vivía allí, pero era diferente a verlo por sí mismos.
¿Qué hacían por la ciudad? Están muy lejos de Kame House-dijo Bulma curiosa mientras les servía algo de comida, aunque notó que cuando se acercó a la mesa para poder servir en el plato de Roshi, él miró sus pechos de inmediato ya que ella tenía una camiseta de tiras.
Estábamos comprando unos electrodomésticos que necesitamos en la casa, pero la ciudad es una locura- mencionó Oolong, trató de ignorar lo que el maestro Roshi hacía ya que ahora Bulma le estaba sirviendo en su plato también.
Vegeta miró al anciano con disgusto al notar lo que estaba haciendo, aunque no dijo nada al respecto. Bulma notó que la nariz de Roshi comenzó a sangrar, aunque ya sabía que él era de esa forma, y le alcanzó una servilleta.
Muchas gracias Bulma-le agradeció el anciano mientras se limpiaba la nariz.
Bulma volteó a ver a Vegeta mientras aún estaba de pie ya que estaba sirviendo comida.
¿Vegeta quieres más o ya te llenaste? - preguntó mirando al príncipe saiyajin con amabilidad. Vegeta la miró algo confundido y luego asintió, aunque le parecía raro que no hubiera reaccionado ante la actitud tan extraña del anciano pervertido.
Vaya, que bien lo atienden a uno aquí- dijo Roshi en cuanto Bulma terminó de servir, aunque ya que él estaba algo cerca del lado izquierdo de Bulma en la mesa había podido ver su trasero en aquella falda corta que llevaba.
Maestro compórtese- dijo Oolong como reproche, había notado que la seriedad en el rostro de Vegeta era peor que antes y no entendía bien por qué le molestaría la actitud del anciano si es que él era malvado.
Tiene suerte de ser visita- dijo Bulma mirando al anciano con desconfianza mientras se sentaba, pero ya sabía de sobra cómo era.
No es fácil ignorar a una bella señorita- dijo Roshi justificando su accionar, él y Oolong habían comenzado a comer, ambos seguían algo nerviosos por la presencia de Vegeta.
Ya se supone que tendría suficiente con esas revistas que compró- le recordó Oolong ya que también habían ido a la ciudad para que el anciano pudiera surtirse de nuevas revistas para leer.
¿Sigue viendo esas cosas? Que desagradable- dijo Bulma mientras almorzaba, pero bien sabía que él anciano disponía de toda una colección de ese tipo de literatura controversial.
Las que compre en esta ocasión son muy buenas, solo lindas señoritas y tienen una sección especial de traje de baño- le comentó el maestro Roshi con naturalidad, Bulma hizo una mueca de disgusto, pero prefirió no emitir un juicio de valor al respecto, pero notaba que Vegeta parecía no estar disfrutando del tema de conversación ya que arrugó la frente.
Vegeta terminó de comer rápidamente y luego procuró salir de allí, el disgusto por la actitud tan desvergonzada de ese desagradable anciano le causaba náuseas.
Suerte en el entrenamiento- dijo Bulma al verlo levantarse y alejarse de la mesa, usualmente él no se despedía cuando se iba, aunque era curioso que los comentarios constantes del maestro Roshi sobre sus revistas si hubieran causado que reaccionara de alguna forma.
Espera ¿No quieres ver las revistas? -le ofreció Roshi con amabilidad, Vegeta ni siquiera volteó a verlo mientras se iba de allí con rapidez.
Maestro Roshi, no es apropiado ofrecerle eso a un genocida espacial- dijo Oolong con temor en cuanto Vegeta ya no podía escucharlos ya que se había ido afuera, que se molestara podría ser sumamente peligroso para todos allí.
Pero, aunque sea un genocida espacial él es hombre- dijo Roshi como justificación- Tal vez quería verlas, no es fácil resistirse a muchachas tan lindas, aunque estén en revistas- dijo excusándose nuevamente, el no tenía problemas en compartir su material recién adquirido.
Bulma analizó la situación pensativa ya que había sido curioso lo disgustado que Vegeta se había mostrado en aquella situación. No había podido obtener casi nada con sus experimentos, la expresión del maestro Roshi la había hecho pensar en que tal vez tendría que hacer uno más directo.
Luego de un rato, Oolong y el maestro Roshi se retiraron de Corporación Cápsula luego de que la heredera de esta se despidiera de ellos amablemente agradeciendo su visita.
Maestro no debería ser tan imprudente, Vegeta podría destruir La Tierra si quisiera hacerlo- le reprochó Oolong mientras se iban, el anciano con sombrero lo miró de reojo ante su advertencia.
No quiere, por eso no lo ha hecho. Aun así, no sé si habría querido ver mis revistas, tiene algo mejor, él puede ver a Bulma todos los días- mencionó el maestro con cierta envidia en sus palabras.
No creo que ese tipo obsesionado con matar a Goku sea como usted está insinuando- dijo Oolong con incredulidad, dudaba que Vegeta estuviera pendiente de su amiga.
Oolong, es hombre y vive con Bulma, no hay escapatoria- le aseguró Roshi con certeza- ¿Qué hombre en La Tierra podría resistirse a una chica tan linda rondando cerca de él a diario? Yo sé que seguramente él no, recuerda que yo soy un sabio en estas cosas-le recordó al cerdo mágico, el susodicho lo miró con incredulidad.
No puedo negar su vasta experiencia en ser un viejo mañoso- dijo Oolong haciendo que Roshi lo mirara con el ceño fruncido- Pero dudo mucho que algo pase entre esos dos- opinó sin creer demasiado en la conclusión del anciano.
Más sabe el diablo por viejo que por diablo- respondió Roshi sin duda de lo que afirmaba.
Bulma se encontraba limpiando la mesa luego de que Oolong y el Roshi se fueran y notó que el maestro había olvidado una de sus sucias revistas en la misma. La había usado para mostrarle la sección de traje de baño ya que quería sugerirle uno a Bulma que le quedaría bien y ella decidió ignorar sus sugerencias.
Miró la revista confusa mientras pensaba en lo que había dicho el maestro Roshi ¿Sería cierto que ningún hombre ya fuera humano o alienígena pudiera resistirse a una linda chica? Aunque las mujeres en esas revistas tenían muy poca ropa.
Se le ocurrió una idea para un último experimento, le parecía algo osado pero tal vez al final podría obtener algún resultado concluyente ¿Qué era lo peor que podía pasar? En el peor de los casos Vegeta la ignoraría y ya.
Un día próximo que fue especialmente caluroso, cerca de la hora en la que Vegeta salía de la cámara de gravedad, se decidió a salir en un bikini rojo para ir a la piscina de su casa. Después de todo ella era una mujer muy bonita, no creía que el resultado variara entre ella o cualquier otra.
Había elegido ese día ya que requería las condiciones necesarias para que pudiera llevar a cabo su experimento, que hiciera mucho calor para poder meterse en la piscina y que sus padres no estuvieran para que no notaran su experimento con su huésped. Aunque ciertamente dudaba que ocurriera algo si ellos estaban, pero prefería no hacer un espectáculo frente a ellos y tener una zona de experimentación controlada y tranquila.
Justo cuando había llegado al borde de la piscina, escuchó la puerta de la cámara de gravedad abrirse, al parecer había calculado bien la hora en la que el saiyajin finalizaba su entrenamiento.
Sintió que él la miró cuando salió, aunque no pudo espiar tan bien su mirada ya que ella estaba de espaldas a la cámara de gravedad. Ya luego podría verificar en las cámaras la expresión de Vegeta al verla allí, se dio un chapuzón en la piscina luego de que le diera un poco tiempo para verla.
Al sacar su cabeza del agua lo vio terminar de entrar en la casa, aunque no había volteado su cabeza cuando ella había mirado hacia allí con el cabello empapado y los últimos rayos del sol iluminando su blanca piel.
Vegeta sintió que se ruborizaba mientras entraba en la casa ya que había visto a aquella vulgar mujer en bikini dar un salto a la piscina de espaldas a él.
Había podido ver con claridad su redondo trasero con un diminuto traje de baño puesto que lo hacía ver aún más grande, casi había logrado que no diera vuelta la mirada de regreso a su objetivo, era demasiado llamativo como para ignorarlo. Se reprochó a sí mismo por distraerse con algo así ya que él estaba centrado en su entrenamiento para superar su fastidioso rival, pero la actitud de la desvergonzada humana era algo demasiado extraño para él.
Comenzaba a sospechar que las actitudes extrañas de la mujer de los últimos días eran adrede para poder provocarlo.
Primero habían sido las preguntas raras que hacía, luego el asunto del perfume y lo de la película de humanos fornicando en alguna especie de entretenimiento además de que había tratado de tener contacto físico con él cuando había curado su herida a pesar de que él se había negado.
Este asunto de salir tan ligera de ropa a la piscina a la hora que él salía de la cámara de gravedad era algo aún más curioso, había podido verla llegar a la piscina antes de salir de su entrenamiento, parecía que había estado esperando a que él saliera para lanzarse a ella de espaldas a donde él estaría pretendiendo que él la viera.
Bulma fue corriendo a ver las cámaras luego de secarse un poco por el chapuzón, aunque aún estaba en bikini, se había puesto una bata encima. Había ido a la zona en la que estaba Vegeta ya que allí había dejado su celular y se recargó sobre la mesada de la cocina para verlo.
Miró el video mirando de reojo que Vegeta no estuviera espiando lo que hacía, pero lo que habían grabado le llamó poderosamente la atención. En cuanto ella había estado afuera a punto de arrojarse a la piscina, Vegeta si se había detenido un momento y había visto su cuerpo. Aunque luego de mostrarse algo avergonzado por detenerse a verla se había dirigido a la casa de inmediato, que era el momento en el que ella había sacado su cabeza del agua.
Sonrió mientras se felicitaba a sí misma en su mente por obtener la grabación, aunque fuera un mínimo resultado. Si su sospecha era cierta, entonces a los saiyajin si les interesaban las mujeres terrícolas, las pruebas que tenía de ello eran un poco escasas, pero estaban allí efectivamente con ese video.
Vegeta notó avergonzado la posición de la mujer sobre la mesada de la cocina ya que él estaba sentado en la mesa, había llevado una botella de agua que había sacado del refrigerador, pero no la había bebido ya que la posición tan indecorosa en la que estaba Bulma en ese momento lo había distraído.
La científica de cabello azul ahora mojado estaba mostrando la mayor parte de su trasero solo cubierto con la tira del bikini ya que la bata no era tan larga y lograba verlo ya que estaba justo frente a él mientras se inclinaba sobre la mesada mirando su celular. Parecía que no lo estaba haciendo de forma deliberada, pero con aquella vulgar mujer nunca podía estar seguro.
Se sonrojó furiosamente mientras trataba de concentrarse, debía salir de allí cuanto antes ya que no quería ser parte de lo que sea que estuviera jugando aquella mujer tan vulgar. Aunque sabía de sobra que era difícil hacer caso omiso a sus provocaciones con aquel cuerpo tan voluptuoso y seductor que tenía, no es que no hubiera notado su sensualidad antes, pero por lo general le era más sencillo ignorarla ya que no andaba semidesnuda por la casa.
Se decidió a volver a la cámara de gravedad nuevamente en su apuro por salir de allí, había sentido que su rostro se había acalorado furiosamente y si la humana se daba la vuelta lo notaría.
Bulma volteó al escucharlo salir y miró la situación algo confundida ya que ya no le había estado prestando atención debido a que estaba repitiendo el video para comprobar que Vegeta la había visto cuando estaba de espaldas a la cámara de gravedad.
Al ver el lugar donde Vegeta había estado sentado, vio la botella de agua sobre la mesa, estaba llena y aún estaba sellada, eso significaba que no la había bebido ya que no la había abierto. Sonrió al pensar en ello, tal vez aún podría obtener unos datos más que confirmaran que el video no era una mera especulación suya.
Tomó la botella de agua en la mesa y se dirigió de inmediato a la cámara de gravedad, de todas formas, era extraño que él volviera allí luego de salir en la tarde ya que tenía un horario fijo en el que solía salir y no volvía a ingresar hasta el otro día temprano.
La encontró cerrada, aunque aún no estaba encendida ya que cuando lo estaba un resplandor rojo se escapaba por las ventanas indicando que la gravedad estaba activada.
Suspiró pesadamente antes de enfrentar a Vegeta ya que sabía que su actitud era muy tosca por lo general, pero no veía una mejor oportunidad para comprobar su hipótesis. Después de todo ya estaba acostumbrada al malhumor del saiyajin, seguramente le cerraría la puerta en la cara y ya en el peor de los casos.
Tocó la puerta mientras lo llamaba y él no abrió, volvió a tocar y él preguntó qué quería de forma ruda.
Deja de molestarme, humana escandalosa- le reprochó él sin abrir la puerta, Bulma hizo una mueca y volvió a tocar.
¿Qué quieres? -preguntó con molestia él mientras abría, trató de no mirar a la mujer de forma extraña ya que había notado de inmediato que ella seguía paseándose con aquellas prendas diminutas y esa bata que ni siquiera lograba cubrir su exuberante y seductora figura.
Olvidaste tu agua, quería traértela, podrías deshidratarte- dijo Bulma con amabilidad mientras le tendía el agua, su bata se abrió un poco del lado que no sostenía la botella ya que había movido su brazo moviendo un poco la bata, como era corta y no muy cerrada solo cubría parcialmente su parte de atrás más que la de adelante.
¿Qué pretendes? -preguntó Vegeta con fastidio, había mirado fugazmente los redondos y grandes pechos de la mujer que amenazaban con escaparse de su bikini y sintió que estallaría en cualquier momento por las provocaciones de la mujer, era más que evidente que se trataba de eso. Al menos en esta oportunidad si se veía como algo completamente planeado.
¿De qué hablas? Solo te traje el agua, pensé que la habías olvidado, y si no te hidratas podrías desmayarte, hoy hace calor-le reprochó la mujer, aunque era cierto que el día estaba especialmente caluroso ya que hacían más de treinta grados, en la noche generalmente eso se calmaba un poco.
Largo- dijo Vegeta agarrando la botella de agua con brusquedad, Bulma lo miró con cierta molestia a pesar de que había notado que había visto sus pechos por un segundo, no le agradaba que le hablara mal.
Podrías ser menos grosero, no es que vine a molestarte-respondió ella con su carácter fuerte habitual- Solo me preocupo porque no cuidas de ti mismo, podrías ser más considerado- le reprochó ella dando un paso adelante, no planeaba demostrarle nervios o miedo a pesar de que hablarle en bikini le resultaba un poco incomodo en esa situación.
Si no quieres que te hable sal de mi camino, has estado acechándome, no creas que soy idiota-retrucó él- ¿Qué te crees? ¿Qué estúpido juego humano estas jugando terrícola fastidiosa? -preguntó de forma desafiante.
Bulma lo miró sorprendida ante su cuestionamiento ¿Tal vez Vegeta se había dado cuenta de sus pequeños experimentos? Aunque él parecía sonrojado al hablar con ella así, era más que evidente que al menos esa parte del experimento estaba dando resultados más interesantes.
Solo sentía curiosidad, eres un saiyajin viviendo en mi casa y no quisiste responder mis preguntas- le recordó ella de forma retadora, dio algunos pasos más dentro de la cámara de gravedad para enfrentarse a él, no parecía dispuesto a retroceder en el duelo de miradas que estaban teniendo- Soy científica y soy muy curiosa ¿Acaso eso te molesta?-preguntó fingiendo que la última parte de su experimento era una casualidad, aunque ella sabía que había apostado todo lo que tenía en ello para poder responder su pregunta.
La puerta de la cámara de gravedad se cerró sola detrás de ella, probablemente había sido un viento repentino que había aparecido de la nada y Vegeta la enfrentó sin titubear. Bulma sintió el nerviosismo recorriendo su espalda, aunque pretendió no dejar su actitud confiada y desafiante, no había previsto resultados tan variados para su último experimento.
Ya me tienes cansado con tus experimentos ridículos, no es como si fuera un mono de laboratorio- le reprochó él esta vez, Bulma vio sus ojos llenos de enojo, pero también notaba algo más que era lo que había buscado comprobar con todo eso.
Él la acorraló contra la pared de la cámara de gravedad repentinamente y Bulma sintió que los nervios se apoderaron de ella al ver que tal vez había presionado demasiado al saiyajin, había retrocedido instintivamente al ver que se acercaba a ella y se topó con el frío metal de la pared de la cámara de gravedad a través de su bata tocando su espalda.
Antes de que pudiera responder a su reproche, Vegeta volvió a hablar con la misma expresión furiosa y pasional contenida en sus ojos negros, ella sintió su cálido aliento contra su rostro ya que estaba muy cerca.
Te enseñaré lo que puede hacer un saiyajin- le aseguró antes de apoderarse de su boca con un furioso y profundo beso que sintió que podría robarle el aliento por lo intenso que era. Sintió cerca el fuerte y caliente cuerpo del saiyajin que parecía hervir por la furia y la temperatura elevada del ambiente.
Vegeta había cedido a las provocaciones que la peliazul había usado para llevarlo a ese punto, no podía simplemente mostrarse ante él con aquella ropa minúscula e insinuante a propósito. Había sentido que había rebasado su paciencia al verla ofrecerle de aquella forma sugerente la botella de agua después de seguirlo a la cámara de gravedad.
Bulma sintió que su rostro se enrojecía ante el inesperado beso, y aunque eso respondía satisfactoriamente la pregunta que se había planteado para sus experimentos, poco le importaban en ese momento.
Sentía el sabor masculino y la ferocidad de su acercamiento que solo hacían que se sintiera atraída hacia él mientras el saiyajin hacía lo que le placía con su lengua. La tenía acorralada entre su bronceado cuerpo musculoso y el frío de la pared de su cámara de entrenamiento.
Parecía que Vegeta no se detendría de su impaciente deseo ya que pronto sintió que su mano bajó rápidamente hacia su abdomen y le quitó sin esfuerzo la bata que tenía sobre su bikini rojo, la había rasgado, ahora estaba casi del todo desnuda frente a él. Ella jadeó al sentir eso mientras el aún poseía su boca sin darle espacio a respirar.
La levantó con una facilidad física casi imposible y la colocó con prisa encima de una mesa que estaba al lado del tablero central de la cámara de gravedad sin importarle las cosas que se habían caído de ella.
Una vez que estuvieron allí la dejó respirar liberándola del salvaje intercambio que habían tenido, la devoró con sus ojos esta vez, se encontraban llenos de deseo por aquella vulgar humana que parecía no temer sobrepasar sus límites. Estaba allí sentada en la mesa con las piernas abiertas ya que él estaba entre ellas al haberla cargado hasta allí.
El bikini ya se había deslizado un poco con el roce de ambos cuerpos durante el beso y su camino hasta allí, así que podía ver con claridad los exuberantes y grandes pechos de Bulma que apenas y eran cubiertos antes por la tela del traje de baño.
Hundió sus manos en ellos con deseo contenido y también algo de rabia por lo mucho que lo había provocado hasta hacerlo perder los estribos, acariciaba sus pechos sin pudor y así también sus curvas y sus piernas.
Bulma jadeó al sentir los fuertes y excitantes toques del saiyajin ya que sus manos se sentían como si fueran fuego y quisieran reducirla a cenizas.
Parece que tenía razón- dijo Bulma entre jadeos cuando el bajó una de sus manos hasta su sexo dispuesto a seguir adelante mientras aún se deleitaba del cuerpo de Bulma con su otra mano. Se sintió embriagada por el aroma masculino de su acompañante y la ferocidad en su toque y en sus besos, era algo que nunca había experimentado antes.
Será mejor que no hables, mujer- le reprochó él al oído ya que parecía que seguía con su loca idea científica en la cabeza, aunque su expresión le decía que ella lo estaba disfrutando.
Arrancó la parte de abajo del bikini ya que estaba estorbándole y de inmediato comenzó a acariciarla, aunque de forma algo brusca y ella dejó escapar un gemido.
Notó que él iba en serio ante eso, y aunque si había fantaseado con besarlo o que él la acariciara no había previsto que podría llegar tan lejos con sus provocaciones o que eso pudiera suceder efectivamente.
Espera Vegeta- le pidió en medio de un jadeo mientras hacía presión con sus manos contra su fuerte pecho que parecía tallado en piedra, aunque sentía que no podía contener su voz mientras él la estimulaba brusca pero placenteramente. Nunca habría pensado que Vegeta podría ser tan salvaje en una situación así.
Tu empezaste con esto mujer-le recordó Vegeta ciego por el deseo que le provocaba aquella intrépida y vulgar humana con la que vivía, su pervertida expresión le indicaba que no quería que se detuviera a pesar de que le había dicho que esperara.
Espera- dijo Bulma, y otro gemido se escapó de su boca indicándole a Vegeta que no estaba siendo honesta ya que su intimidad estaba más que húmeda. Vegeta apartó su mano de allí y se bajó los pantalones cortos que usaba para entrenar.
Vegeta se posicionó entre sus piernas mientras veía la jadeante y sonrojada cara de aquella humana con las piernas abiertas ante él, ella lo había provocado ridiculizándolo con aquellos experimentos extraños y vulgares.
La próxima lo pensarás dos veces antes de experimentar conmigo- le advirtió mientras frotaba su miembro contra su intimidad, la peliazul se retorcía ante aquella intensa sensación pretendiendo que no lo deseaba más que nada.
Lo...siento- se disculpó ella en medio de sus jadeos, tal vez la manera de castigarla de él ahora sería hacerla esperar- no volveré a expe...aaah-dijo ella hasta que sintió el miembro del saiyajin llenándola de improviso, había entrado fácilmente ya que estaba completamente húmeda.
Comenzó a moverse dentro de ella rápidamente haciendo que sintiera que su mente estaba en las nubes, su cuerpo chocaba con el suyo de manera incesante y dominante.
La situación era tan excitante, sentía que el calor del cuerpo de él la quemaba y su actitud tan salvaje y dominante era tan atractiva, realmente parecía que lo había presionado más de la cuenta y ese era su castigo, no había creído que podría sentirse tan bien.
Miró la expresión deseosa de Vegeta que se deleitaba de su cuerpo como si fuera la mujer más irresistible de La Tierra, sus ansiosas embestidas demostraban que no había empezado a gustarle solo desde que había estado provocándolo.
Resistía los incesantes choques cargados de furia y lujuria de príncipe saiyajin que la hacían gemir ruidosamente, agradecía que eso hubiera sucedido en la cámara de gravedad ya que de otra forma alguien habría podido escucharla en la casa.
Jadeaba mientras sentía aquel miembro completamente erecto invadir su feminidad sin piedad, el placer la dominaba y su rostro no podía más que demostrar el gusto que sentía en cada movimiento de aquel salvaje saiyajin.
Se había estado sosteniendo de su fuerte espalda que había arañado un poco por la intensidad del encuentro con el príncipe, pero no pudo sostenerse más al sentir que alcanzaba su límite mientras él seguía embistiéndola con rapidez y necesidad
Resonó un gemido más fuerte que los anteriores en la cámara de gravedad y ella sintió que su cuerpo se debilitaba mientras llegaba a su punto máximo de placer. Sus piernas comenzaron a temblar, poco después sintió cómo él se vaciaba en ella luego de dejar escapar un gruñido de satisfacción por su encuentro con ella.
Se dejó caer en la mesa en la que estaba sentada ya que él la había estado sosteniendo, aunque estuvo pendiente de que no se cayera de ella a la vez que se recargaba allí para reponerse del encuentro sexual que había compartido con aquella humana.
Bulma miró al saiyajin exhausta mientras respiraba agitadamente y luego miró su bikini, la parte de arriba estaba hecha jirones y la parte de abajo del mismo ahora era completamente inservible ya que Vegeta lo había roto, podía verla hecha pedazos en el suelo de la cámara de gravedad.
Luego de reponerse un poco, se acomodó la parte del bikini que aún servía y miró a Vegeta sonriente.
Hipótesis refutada- dijo ella con una sonrisa relajada y la voz un poco ronca por sus gemidos de antes. Vegeta la miró con cierta molestia a su vez, aunque también estaba tranquilo
Ella le sonrió aún más con su cabello desordenado y algo sudorosa por el encuentro que habían tenido, se veía sonrojada y también feliz por haber comprobado lo que había pretendido con todo eso.
Ahora tengo evidencia empírica y vigorosa- respondió ella con un tono juguetón mientras tocaba con un dedo uno de los pectorales de Vegeta. Se veía tan atractivo con su cabello algo revuelto y su expresión seria, pero a su vez notaba que su expresión ya no parecía enojada.
Mejor no hables, mujer vulgar- le sugirió, parecía que la mujer estaba demente, pero su atracción por ella era innegable por más que fuera una especie de científica loca.
¿Quién es el vulgar? Tu rompiste mi bikini- le recordó ella haciéndose la desentendida- Aunque eso fue muy interesante, creo que podría querer experimentar un poco más, aun no tengo suficientes datos- dijo ella fingiendo que lo estaba considerando, realmente había disfrutado su cercanía con el saiyajin más de lo que habría creído, no había planeado llegar hasta ese punto.
No vuelvas a experimentar conmigo- le advirtió él de forma desafiante, aunque Bulma redobló la apuesta envalentonada por ver a aquel saiyajin tan fuerte y cerrado loco por ella.
Los datos indican que te gusta, así que no podría descartarlo-dijo ella con su tono audaz de siempre, Vegeta le mostró una expresión confundida pero a su vez parecía resignado a la forma de ser tan atrevida y excéntrica de ella.
Estas loca mujer- respondió él aceptando que ella le atraía, había caído ante aquella científica loca y lo peor es que había decidido seguir adelante a pesar de que sabía que ella había querido meterlo en su juego, sabía de sobra que ya no podría ni querría salir de él.
Bulma rio al escucharlo y esta vez ella lo besó de improviso, el correspondió de inmediato embelesado por esa mujer terrícola. Al final no había podido resistirse a ella, pero poco le importaba en ese momento mientras aquella bella e intrépida terrícola lo seducía otra vez.
Buenas noches! Espero les haya gustado el oneshot que escribí, esto surgió de una idea un poco rara que tuve y supuse que tendría que tener lemon si o si, aunque me costó un poco hacerlo porque se me dificulta escribir esas escenas.
Si les gusto por favor no olviden dejar un voto o comentario ya que eso me anima a seguir escribiendo oneshots como este, muchas gracias por leer.
Nos leemos pronto.
Niebla~
