Reino de Edo.

El último de los Caballeros oscuros estaba batallando contra la Shogun y sus allegados, aunque en un momento, la gobernante de ese reino llegó a un punto en donde hasta sus guaridas, sus ninjas, estaban siendo sometidos.

- ¿Acaso es todo lo que tienen? – Quirón dijo con una sonrisa mirando a la peli rosa.

- ¿Cómo que todo lo que tenemos?

- Sinceramente me han decepcionado, salvo esas dos que han estado jodiendo la vida – señaló a Nunki que volaba llevando a Tokime. Sin perder tiempo, sacó una flecha y les disparó, pero la mini Amazon fue rápida para esquivar eso.

- ¡Déjalas! ¡Son unas niñas!

- Niñas o no, mataré a todo aquel que se interponga en mi camino – exclamó el centauro el cual disparó más flechas hacia las dos niñas, pero la velocidad de la mini Amazon era mayor por lo que no había problema, aunque en un momento una flecha estaba llegando hacia Nunki, pero con su cola la desvió hacia el suelo – maldición.

- Si vas a pelear contra alguien… que sea contra mí – Yoshimune exclamó empuñando su espada hacia el ex Caballero de Sagitario.

- No sabes lo que dices, ¿acaso una mocosa como tú hará algo?

- ¡S-Su Majestad! No luche – los súbditos de la peli rosa decían, varios de los ninjas y samuráis a su servicio estaban heridos, pero la reina los detuvo.

- Merecen un descanso y dejen que su reina, batalle por el bien de mi reino. Si no hago algo, ¿Cómo me puedo llamar Shogun? – exclamó la chica la cual decidió atacar, pero al chocar puños con el centauro, notó que la fuerza del legendario Caballero la iba superando.

No solo eso, Yoshimune fue tomada del brazo y la lanzó arriba justo cuando Quirón lanzó su Trueno Atómico hacia Yoshimune quien interpuso su espada para evitar que le diera directo, pero igual tuvo impacto en ella, aterrizando con algo de heridas.

- ¿Lo ves? Das mucha pena con eso – antes de que el centauro volviera a atacar, un rayo golpeó su espalda, aunque no lo afectó mucho, solo volteó a ver – ¿Quién osa a atacarme?

- Aquella que ataca a los que hagan daño a los míos, puede que sea enemiga del shogunato, pero no quiere decir que deje que alguien como tú joda a todo el reino – con sus cabellos rubios ondeando, esta se presentó frente al ex Caballero.

- Inazuma – susurró la peli rosa, la chica era Candy Inazuma quien sonrió de lado mirando a Quirón.

- Ven caballito, no creo que tengas fuerza para derribarme, tus rayitos no me afectarán en nada – la rubia se tiró encima del ex Caballero el cual fue golpeado por múltiples rayos en su cuerpo.

Como alguien que practicaba artes marciales y boxeo, Candy le estaba proporcionando bastantes golpes a Quirón y acabó finalizando su arsenal de ataques con una patada eléctrica la cual al impactar en el cuerpo del centauro, desató una pequeña explosión en el sitio.

- ¿Lo derroté? Creo que sí, nadie puede sobrevivir a tantos golpes de mi parte – para desgracia de la rubia, no vio venir una flecha la cual le atravesó el hombro – ¡aaaaaah!

- ¿Qué es lo que pasó con ese ataque? – exclamó el centauro saliendo del humo con apenas unos rasguños y además de que se sacudía el polvo de su cuerpo.

- T-Tú…

- ¡Impulso Luminoso! – exclamó y con las alas de su armadura creó una ventarrón que la mandó a volar por los cielos, aunque igual el viento fue tan fuerte que la hirió bastante feo y más cuando cayó al suelo.

- ¡Candy-dono!

- ¡Candy-sama! – varias de su grupo miraron eso asustados, pero sabían que no podían hacer nada ya que si alguien logró herir a su líder, ellos serían exterminados.

El miedo era grande debido a todo eso, incluso Harumi veía todo desde largo, todavía se encontraba cansada por la pelea que tuvo con los geminianos legendarios.

- Supongo que no hay nadie que me pueda detener, eso es todo para este patético reino – Quirón decía y sus ojos se posaron al castillo del shogunato en donde notó a una pequeña peli morada la cual veía todo con algo de miedo – vaya, vaya, parece que hay alguien que se esconde ahí.

- ¿Q-Qué? – Yoshimune vio a donde dirigió su mirada y sus miedos se apoderaron de ella – n-no… Shiro-chan.

- ¿Y si mato a esa niña?

- ¡Ni te atrevas! ¡No lo harás! – la peli rosa atacó al centauro, pero por más que le quería hacer daño, un golpe la dejó atontada.

Quirón decidió lanzar una flecha hacia donde estaba Shiro quien se asustó viendo como el arma arrojadiza iba hacia ella, pero su cuerpo desapareció antes de que fuera impactada.

- ¡SHIRO-CHAAAAAAAAAAAN!

- Parece que esa niña ha muerto, ¿qué más da? – el ex Sagitario comenzó a reír ante la mirada de varios y ni que decir de Yoshimune quien estaba en shock.

Aunque no sabía que Harumi la había salvado en el último momento, ni que decir que la pequeña mini Yuzu pensó que la peli negra era su madre, esto más por el parecido en su físico.

Por otro lado, la peli rosa estaba en silencio y por un momento, su mente se fue destrozando pensando en cómo es que la pequeña con la cual formaron un vínculo de hermanas y ahora, sin saberlo, pensó que ya no la tenía.

Su corazón latió con tanta fuerza que por un momento sentía que le estaba por estallar, sin embargo, su cosmos fue el que tomó con dureza y más el de su parte demoníaca.

Los genes que Ángel le heredó comenzaron a activarse de gran forma hasta que finalmente, se manifestaron de forma grande.

- ¡Y ahora sigues tú! – exclamó el centauro y sin más fue hacia la Shogun y cuando estaba por darle un puñetazo, esta detuvo sus intenciones con su mano – ¿eh?

- … - la peli rosa no dijo nada, pero al levantar su mirada, Quirón notó los ojos de Yoshimune y las pupilas de estas se volvieron rojas, así mismo, incluso logró ver cómo le salían cuernos y una cola se manifestaba.

- ¿Qué diablos?

- Pagarás… caro… ¡tú insolencia! – gritó la Shogun la cual tomó la mano del centauro y usando su espada, cercenó esa extremidad.

- ¡JODER! ¡Maldita perra! – gritó Quirón, pero una patada en el rostro lo cayó.

El cosmos demoníaco de Yoshimune se había activado por la ira y eso no fue lo único que pasó ya que le salieron un par de alas de demonio de su espalda la cual sin más salió volando a toda velocidad hacia el centauro el cual recibió un golpe en el pecho que lo mandó a estrellar.

- ¿C-Como es posible? Esa desgraciada le estaba ganando hace nada y ahora… ¡me cortó la mano!

- Pagarás caro… por haber lastimado a Shiro-chan, te destrozaré por haber traído al destrucción a mi reino y vengaré a todas las personas que has asesinado – la Shogun decía caminando lentamente hacia él.

- Mierda… ¡Flecha Sombra! – Quirón disparó una flecha hacia la sombra de la chica, con esta técnica podría frenarla y no hacerla caminar más, sin embargo, no pasó ya que el cosmos de Yoshimune destrozó esa flecha y continuó andando.

- Tu puta técnica no me hará daño.

- ¡Morirás! – a pesar de la falta de una mano, Quirón estaba dispuesto a disparar una flecha con su arco, sin embargo, no pudo hacerlo ya que Nunki bajó a toda velocidad llevando a Tokime en su forma Amazon.

Al volar cerca, la gata mágica tomó entre sus mandíbulas el arco del ex Sagitario por lo que lo destruyó y se fueron volando de ahí.

- ¡Malditas perras! – antes de que el centauro atacara a las dos pequeñas, Yoshimune llegó a donde estaba este y le dio un fuerte golpe que lo dejó atontado.

La reina de Edo siguió dándole una paliza al antiguo Caballero ya que este no se podía defender del todo por la falta de una mano y ni que decir que el cosmos de la reina no paraba de crecer, impulsado más por sus instintos demoníacos.

- ¡Trueno Atómico! – gritó el centauro el cual disparó su ataque insignia, sin embargo, la peli rosa decidió atacar del mismo modo.

- ¡Meteoros de Pegaso! – al exclamar eso, salió el ataque por excelencia de los Caballeros de Pegaso ya que se sabía que la reina de Edo había entrenado con el legendario Seiya de Pegaso.

Ambos ataques chocaron y fue algo espectacular, sin embargo, a pesar de que el cosmos de Quirón lo estaba ayudando, no era nada comparado con los genes y la fuerza de voluntad de Yoshimune quien estaba ganando terreno hasta que los Meteoros de Pegaso estuvieron casi frente a él.

- ¡N-No es posible!

- ¡Muere! – finalmente, el ataque de la gobernante alcanzó a Quirón y su cuerpo fue golpeado tanto que los puños de la chica atravesaron el cuerpo del centauro hasta que finalmente no pudo más y acabó totalmente destruido y su cuerpo ya sin nada, cayó al suelo, muerto.

- L-La Shogun…

- … lo venció.

- ¡BRAVO! – todo el mundo celebró el hecho de que todo estaba bien ahora que el último Caballero oscuro murió.

Yoshimune estaba tomando algo de aire y cayó de rodillas al suelo mientras sus aspectos físicos de demonio desaparecieron volviendo a su forma humana.

- Lo has hecho bien, y vaya que solo por la hija de Alejandra – Harumi apareció al lado de la Shogun y con la mini Yuzu en brazos.

- N-No puede ser… ¡¿estás viva Shiro-chan?!

- La salvé a último momento, no me podrán importar muchas cosas, pero tampoco soy tan desalmada para dejar morir a una niña como esta – la peli negra la dejó en el suelo y la pequeña fue hacia la Shogun.

- ¡Shiro-chan! – ambas se fundieron en un fuerte abrazo y eso ayudó bastante a la peli rosa a calmarse.

- Yochi.

- Sí, soy Yoshi, me alegro que estés bien Shiro-chan – ambas estaban bien y el hecho de que las cosas salieron bien para eso.

Ya con eso, la amenaza de los Caballeros oscuros había desaparecido.

.

De regreso en Honduras, Ninja se estaba levantando lentamente, luego de la batalla contra Jason de Aries y Arthur de Capricornio, este había quedado agotado por el poder que Rassan le dio.

- Demonios… me duele todo el cuerpo – susurró el chico, aunque en un momento, su cuerpo se sintió raro.

No sabía por qué, pero el hondureño sintió como si algo venía hacia él y por un breve periodo de tiempo, su cuerpo brilló.

- ¿Q-Que es esto? ¿Qué demonios ha pasado?

- Tu cuerpo ha recuperado esperanza de vida perdida – la voz de Rassan le decía a su mente.

- ¿Mi esperanza de vida?

- Sí, por alguna razón habías perdido la mitad de tu esperanza de vida ¿no? – a la mente del chico, se le vino el momento en que realizó aquel jutsu en donde separó a Yuzu y Mei en cuerpos diferentes – n-no.

- ¿Sabes que quiere decir?

- Mei – Ninja negó con la cabeza – n-no… ¡¿acaso Mei…?!

- Por lo veo, has recuperado la mitad de la vida que diste, por lo que sí, esa amada gata mágica que quisiste ya no está con nosotros – el señor oscuro le dio todo lo que ocupaba saber.

Varias lágrimas cayeron de sus ojos al pensar que Mei, había fallecido y solo cayó al suelo pensando en la peli blanca.

Incluso mientras lloraba pensando en la peli blanca, sintió a alguien abrazarlo por atrás, una figura de luz blanca.

Y solo escuchó algo.

- Gracias.

.

.

Continuará…

.

.

Y hasta aquí el capítulo de hoy.

La batalla entre Quirón y Yoshimune se llevó a cabo de forma muy fuerte, ni que decir que pensando que Shiro había muerto, el poder demoníaco de la Shogun despertó, realmente tiene que darle las gracias a Ángel jeje.

Y ahora, Edo está salvo.

Además, parece que he recuperado la mitad de mi vida que di cuando separé a Yuzu y a Mei, pero… extrañaré a Mei, en serio.

Sin más, este ninja se despide.

Bye.