Capítulo 47: Una promoción desastrosa

Rin*

Estábamos de vuelta en el estudio después de la "discusión" con Inuyasha, aun sentía un mar de emociones por todo lo que nos habíamos dicho. Lo raro de todo esto era que no tenía ganas de llorar, aun cuando sentía mi corazón partirse, era como si mi mente estuviera renuente a creer en las palabras de Inuyasha.

-Tenemos que volver a la cena gatita- Sesshomaru también había estado en silencio hasta el momento y cuando voltee a verlo se podía notar que le había afectado mucho lo que había pasado.

-¿En serio lo dejaras ir así?- aun sentía que debíamos hacer algo por él

-Rin, Inuyasha no estaba jugando cuando advirtió sobre hacerte algo y yo no estoy dispuesto a ponerte en peligro- se acercó a acariciar mis mejillas, era su manera de decirme que no teníamos más opciones.

-No quiero que le pase algo a Inuyasha- Sesshomaru asintió y me ayudo a pararme.

-Jaken se está encargando de eso, así que no te preocupes- deje salir el aire resignada, sabiendo que no había nada más que se pudiera hacer, en cambio Sesshomaru me dio un sonoro beso en las mejillas- Ahora disfrutemos de nuestra noche gatita- volví a verlo a los ojos para darme cuenta de que aquella inquietud aún seguía ahí, pero que estaba ocultándola tras la fachada del gran CEO.

-Está bien- ahora fui yo la que le dio un beso en los labios antes de salir de aquel estudio.

Cuando volvimos al salón había más gente, algunos de ellos se acercaron a Sesshomaru en cuanto lo visualizaron, unos lo felicitaban mientras que otros buscaban concretar negocios con el CEO. Yo me quede a su lado unos momentos, cuando de pronto mis ojos visualizaron a la persona que estaba buscando antes de la "discusión" con Inuyasha. Kagome se encontraba platicando con Sango y Miroku, al parecer venia sola, lo cual hizo que mi corazón se tranquilizara solo un poco. Cuando me dirigía hacia ellos alguien más se cruzó en mi camino impidiendo que avanzara.

-Es un gusto volver a encontrarnos Rin- esa voz melodiosa, pero altanera me hizo recordar cosas del pasado.

-Debo de serte sincera, no esperaba encontrarte aquí Kagura- definitivamente todo en ella era algo que me intimidaba, desde su altura, hasta su porte desafiante. Ella estaba completamente en otro circulo de la sociedad, que por más que yo me fuera a convertir en la esposa de Sesshomaru, jamás lograría pertenecer a él.

-No iba a perderme la oportunidad de desearles mis mejores deseos- algo en ella no me permitía confiar del todo, tal vez era debido a mi complejo de inferioridad.- definitivamente te ves preciosa en ese vestido, aunque aún me preocupa que estas muy delgada- poso su mano sobre mis brazos desnudos- ¿Acaso Sesshomaru no te da de comer?- yo no sabía que contestar ya que el que estuviera acariciando mi brazo me ponía muy incómoda.

-Claro que le doy de comer, ¿acaso piensas que soy un desalmado con ella?- Sesshomaru había llegado a mi lado y al pasar su brazo por mi cintura, sentí como Kagura soltaba el mío

-La verdad no me sorprendería que lo hicieras, pero me alegra que no sea así- yo trate de sonreír, pero estoy segura de que ella se dio cuenta de que no era sincera.

-Si nos disculpas, tenemos que hacer un anuncio- dijo Sesshomaru mientras me estrechaba un poco más a él.

-Claro, estaré justo aquí- Sesshomaru me llevo con él y mientras íbamos caminando note un poco tenso su cuerpo.

-No puedo perderte de vista ni un segundo gatita, todos quieren poner sus manos sobre ti- la manera en la que lo decía me hizo reír un poco, parecía estar celoso.

-Lo dices como si Kagura intentara acercarse en ese plan- yo lo dije a manera de chiste pero al ver que él no sonreía me parecido extraño- espera, ¿En serio estas celoso de ella? ¿No se supone que debería de ser al revés?

-Gatita, yo sé que no le intereso a Kagura, en cambio ella no ha perdido el tiempo para insinuarme en varias ocasiones que le llamaste la atención

-Espera, espera, ¿Me estás diciendo que a ella le gustan las mujeres?- aunque trataba de controlar mis caras y comentarios no podía hacerlo, ella era una mujer muy hermosa y que yo le gustara era imposible para mi mente.

-A ella le gusta la belleza humana, así que perseguirá todo aquello que le interesé- su contestación era muy vaga, pero antes de que pudiera hacer otra pregunta pellizco levemente mi nariz- basta de preguntas, es momento de hacer el anuncio- de pronto sentí una punzada en mi estómago, claramente indicando mis nervios.

-¿Justo ahora?- Sesshomaru no contesto a mi pregunta y en su lugar continúo caminando al centro del lugar. La gente rápidamente reparo en él y fueron guardando silencio esperando a que el nuevo CEO hablara.

-Agradezco a todos por asistir hoy a esta cena, les aseguro que a partir de este momento la empresa Taisho volverá a ser lo que era cuando mi padre estaba al mando- algunos miembros levantaron su copa en señal de aprobación, mientras que otros simplemente asintieron- Estos meses han sido muy complicados para todos nosotros- Sesshomaru tomo delicadamente de mi mano y yo sentí una especie de corriente mezclada con nervios- Y se lo mucho que se ha especulado de mi vida, así que en este momento, en frente de todos ustedes, quiero presentarles a la futura señora Taisho- en ese momento me sentía completamente fuera de mi misma, no podía entender bien que era lo que estaba pasando, esas no eran las palabras que él había estado ensayando. De pronto vi cómo se agachaba hasta poner una de sus rodillas al suelo, mientras que mi corazón comenzaba a latir con todas sus fuerzas- Rin Takumi, ¿Aceptarías ser mi esposa?- y esa pregunta hizo que mi pobre mente terminara por explotar. Ver a Sesshomaru, frente a mí, arrodillado y con un enorme anillo en sus manos era mucho más de lo que algún día podría pedir. La gente de mi alrededor comenzó a desaparecer hasta que solo quedaba él. Era esto lo que había esperado por tanto tiempo, era él. Siempre fue él.

-Si, acepto- dije casi como un susurro mientras sentía algunas lágrimas salir sin poderlas detener. Sesshomaru rápidamente puso el anillo en mi dedo, para después levantarse y darme un beso. No fue como los que acostumbrábamos a darnos, pero aun así se sintió magnifico. Fue entonces cuando escuche a la gente aplaudir, regresándome a mi bello presente.

-Lo felicito por su compromiso, joven Taisho- dijo un señor ya grande, que fue el primero en acercarse. También note que habían comenzado a aglomerarse alrededor de nosotros. De pronto sentí como fui sujetada de mi mano, seguido de un enorme abrazo.

-Rin, muchas felicidades- esa era Sango, me mantenía fuertemente pegada a ella mientras me meneaba de un lado a otro.

-Felicidades Rin- dijo Miroku mientras Sango iba soltándome poco a poco

-Muchas gracias, chicos- yo de nuevo sentía ganas de llorar, pero soporte todo lo que pude para que ninguna lagrima saliera y terminara por arruinar mi maquillaje. De pronto mi vista reparo en la tercera persona que se mantenía atrás de ellos, su mirada era indescriptible y por un momento pensé que no me iba a decir nada.

-Muchas felicidades Rin- pude observar en los ojos de Kagome pequeñas lágrimas, lo que no sabría descifrar era de si se trataban de felicidad o de tristeza. Aun así la abrace fuertemente, porque a pesar de no estar pasando por lo mismo que ella, quería que supiera que siempre iba a estar ahí.

-No tienen idea lo que significa para mí que estén aquí, los quiero mucho a todos- Sango volvió abrazarnos mostrando unas pequeñas lagrimas de emoción.

El resto de la noche transcurrió de lo más normal, yo pase el tiempo platicando con ellas mientras que Sesshomaru se dedicaba a atender a sus invitados. Miroku se llevó a Sango cuando vio que estaba comenzando a beber de mas y aunque se fue a regañadientes le hizo caso.

-De nuevo Kagome, muchas gracias por venir- la tome de la mano y ella sonrió un poco, de hecho , había sonreído más esta noche que en los últimos meses, por lo cual eso lo tomaba como un triunfo extra.

-La verdad me alegro mucho por ustedes Rin, me alegro por el futuro que vas a tener- la mirada de Kagome divago y por primera vez desde que fue secuestrada por Naraku vi una emoción diferente en su rostro. Nostalgia- Puedo comprender ese sentimiento, así que les deseo lo mejor- de nuevo ese brillo característico de Kagome había vuelto, estuve a punto de comentarle algo cuando mis ojos se desviaron a la presencia de Jaken, seguido de Myoga. Los dos iban con cierta prisa hacia la habitación que habíamos estado antes, justo donde discutimos con Inuyasha.

-En seguida vuelvo- le dije Kagome antes de encaminarme hacia donde se habían ido Jaken y Myoga

-¿Rin? ¿Pasa algo?- alcance a escuchar a Kagome pero no tuve tiempo de contestarle y seguí mi camino, al llegar a la habitación me percaté al instante de que la conversación era algo subida de tono. Eso solo podían indicar malas noticias- ¿Rin?- sentí la mano de Kagome en mi brazo

-No deberías de estar aquí Kagome- casi tuve que susurrar, aunque estoy segura de que si hubiéramos hablado normalmente no nos escucharían.

-Por lo visto tu tampoco- no quise discutir más con ella y mejor puse atención a la conversación que se estaba llevando adentro.

-¿Cómo es que no sabes donde esta Myoga?- la voz de Sesshomaru sonaba alterada y yo sentí como una especie de vacío en mi estómago.

-Ya le he dicho lo que se joven Sesshomaru, algo tuvo que pasarle aquí al amo, ya que salió completamente diferente de este lugar. Después de que ustedes hablaron con él- hubo un silencio de algunos segundos antes de que alguien volviera hablar- Si usted sabe algo o tiene algo que ver con esto…

-¿Acaso estas insinuando que el amo Sesshomaru tuvo algo que ver con la desaparición de Inuyasha?- ¿Desaparición? Ese hueco en mi estomago se iba haciendo más grande- Él jamás haría algo así Myoga- la voz de Jaken mostraba su enojo, era la primera vez que lo escuchaba en ese estado.

-Tuvimos una discusión, fue un poco más fuerte que de costumbre, pero, eso no pudo ser lo que ocasiono esa actitud- otro silencio largo- Mejor explica bien lo que paso Myoga

-En cuanto salió de este edificio fue otra persona, estaba perdido en sus pensamientos, le recomendé que descansara pero no quiso hacerme caso, al contrario de eso menciono que esta noche partiríamos. A mitad de camino hacia su departamento, simplemente pidió bajar del carro. Trate de ir detrás de él pero me pidió que lo dejara solo. Parecía desorientado, pero aun así continúo caminado, yo me mantuve alejado pero no lo perdí de vista hasta que llego a su departamento. Pensé que simplemente era otro episodio y se iría acostar. Pero 15 minutos después comenzaron a llamarme diciendo que el amo había atacado a algunos hombres y tomado su moto.

-¿Ataco a sus hombres?- pregunto Sesshomaru

-Lo vieron mal, así que trataron de detenerlo, pero el amo se puso agresivo. Solo los dejo inconscientes, pero están fuera de gravedad- otro silencio- el amo estaba bien antes de venir aquí y cuando salió algo lo perturbaba

-Ya te dije Myoga, nuestra pelea no fue para tanto, es más, creo que presenciaste lo más fuerte de ella- recordé entonces todas aquellas palabras hirientes que dijo Inuyasha antes de irse- ¿Tu no lo viste hablar con alguien más?

-No, yo fui por el carro y cuando regrese- Myoga se paró a mitad de su oración, como si hubiera recordado algo- creo que él estaba hablando con alguien antes de que yo llegara- ¿Hablo con alguien? ¿Con quién más podría hablar si nosotros nos quedamos en la habitación? De pronto recordé de la presencia de mi amiga a lado mío.

-Kagome, ¿tuviste algo que ver con esto? ¿Tú te encontraste con él?- Kagome se veía sorprendida, pero su rostro no podía fingir nada.

-Yo…- comenzó a poner sus manos en su cabeza- No quise…

-Kagome, ¿Qué le dijiste?- después de la discusión que habíamos tenido, después de las palabras que Inuyasha nos dijo, algo muy malo le tuvo que decir Kagome para que hubiera reaccionado así. Pero Kagome no podía reaccionar, así que tome sus manos para que pudiera verme a los ojos-Kagome, respira, dime ¿Qué le dijiste?- sus ojos mostraban su estado de shock.

-Yo solo…

-Por dios Kagome, ¿te das cuenta de lo que hiciste? Inuyasha… él es capaz de ir tras Naraku solo- Kagome comenzó a negar con la cabeza y a recobrar poco a poco su fuerza- tenemos que hacer algo para detenerlo- de pronto sentí como era empujada fuertemente por ella hasta que mi trasero termino en el suelo.

-¡Suéltame!- grito Kagome- tú no tienes idea de lo que yo tengo que soportar Rin, no tienes la mínima idea- después de decirme eso se fue rápido del lugar.

-¡Kagome!- aún estaba tratando de levantarme cuando de pronto abrieron la puerta y los rostros de Jaken y Myoga rápidamente repararon en mí.

-Señorita Rin- los dos se agacharon para ayudarme a levantarme. Sesshomaru también se había aproximado hacia donde yo estaba y al ver su cara de molestia sabía que estaba metida en problemas.

-¿Estuviste escuchando todo este tiempo?- pregunto Sesshomaru de mala gana

-No hay tiempo de explicar, Kagome fue la que hablo con él antes de salir del edificio- Los tres se quedaron viéndome un momento, como si estuvieran meditando mis palabras- ¿No me escucharon? Fue Kagome, si hablaron los dos sabemos bien lo que ella le pudo haber dicho, Myoga mencionaste que partirían esta noche, ¿cierto?

-Si, el amo se enteró de una posible ubicación de Naraku

-¿Y todavía siguen aquí? Es más que obvio hacia donde se dirigía- Myoga negó con la cabeza

-La moto cuenta con un localizador y antes de que el amo lo desactivara la dirección que tomo no era hacia la dirección de Naraku, es por eso por lo que el primer lugar al que vine fue aquí, pensando que había hablado algo más con ustedes

-¿Quieres decir que él venia hacia aquí?- pregunto Sesshomaru

-Parecía que estaba volviendo, pero como les dije él desactivo su localizador

-Tal vez la única que puede decirnos donde puede estar o lo que lo altero tanto, es Kagome- comente y Myoga asintió antes de ir tras ella

-Espera Rin- me detuvo Sesshomaru por el brazo- creo que es mejor que te mantengas fuera de esto- quite mi brazo rápidamente y lo mire con enojo

-Estás loco si piensas sacarme de esto, ellos también son importantes para mi- Sesshomaru me vio sorprendido pero no le di tiempo que me dijera algo más porque comencé a caminar en dirección de Myoga. Cuando me acerque a la entrada alcance a escuchar que Myoga estaba discutiendo con uno de los encargados del hotel, que hasta este momento no sabía que eran hombres contratados por la familia Taisho.

-¿Cómo que no sabes a donde se fue? Pero si ella acaba de salir

-Lo siento señor, pero ella paso casi corriendo por aquí, cuando los hombres quisieron detenerla ella logro evadirlos y se subió a un taxi que estaba esperando a uno de los invitados- el encargado se notaba nervioso, sabia a la perfección que este incidente posiblemente le costaría cualquier trabajo a futuro.

-Son unos incompetentes, sabían que su trabajo era no dejarla salir de aquí a solas- Myoga soltó el aire- ¿Al menos siguieron al taxi?- el joven negó con la cabeza aún más nervioso que antes.

-Lo ignoro señor- Myoga saco su teléfono para después hacer una llamada

-La señorita Kagome salió del lugar en un taxi, encuéntrenla- se escuchaban voces del otro lado, pero no pude distinguir bien- ¿acaso no expliqué bien? No me importa que estén buscando al amo Inuyasha, ahora su prioridad es encontrar a la señorita Kagome- sin esperar más Myoga corto la llamada.

-Nosotros buscaremos a Inuyasha- dijo Sesshomaru y Myoga solo asintió, en este momento había perdido totalmente cualquier signo de modales, era la primera vez que veía a Myoga con ese semblante.

-Si amo- dijo seguido Jaken y él también tomo su teléfono. Sentía que con cada segundo que pasaba todo iba empeorando en esta noche y algo en mi pecho me decía que lo más difícil estaba por pasar.

*Inuyasha*

Sabía que lo había hecho estaba mal, había actuado totalmente segado por mis emociones, pero, tampoco sentía que era totalmente incorrecto. La única manera de acabar con todo era matando a ese imbécil y ya ni siquiera importaba si volvía o no, yo ya no tenía ninguna clase de cabida en este mundo. No tenía familia. Tampoco tenía a Kagome, no había nada. Absolutamente nada.

Aun así seguía mirando la pantalla negra de mi celular, contemplándola como si buscara desesperadamente alguna luz. Sabía que si lo prendía probablemente me encontrarían, pero al menos quería despedirme de ella, aunque supiera que no le importaba en absoluto, quería hacerlo. Aprete el botón hasta que la pantalla se ilumino, tal como predije había miles de llamadas y mensajes, todos de la misma persona, ninguno que valiera realmente la pena. Estuve a punto de borrarlos cuando un mensaje en particular me llamo la intención, casi pensé que me lo había imaginado, tuve que tallarme los ojos para asegurarme de que no me lo estaba imaginando. Cuando entre dude unos segundos en darle reproducir el audio, sentí que mi dedo temblaba cuando toque el botón y mi corazón dio un salto cuando escuche su voz.

"No sé bien como comenzar esto, tengo tanto tiempo sin hacerlo, sin hablar con nadie, sin hablar contigo. ¿debería de comenzar con un hola? ¿después de tanto tiempo? No, creo que lo primero que debería de decir es, lo siento. Siento mucho lo que te hice sufrir todo este tiempo Inuyasha"

Puse una pausa al audio, sabía que era Kagome, era su voz. Era la voz que yo recordaba, aquella voz que me hablaba con cariño, sin rastro de resentimiento ni odio. Pero ¿Por qué este audio se sentía tan extraño? ¿Por qué la opresión de mi pecho no me abandonaba, como si se tratase de algo muy malo? ¿No debería de sentirme feliz?

*Notas de autor*

Holaaa, lo se lo sé, me desaparecí por mucho tiempo y lo siento T.T no era mi intensión hacerlo, tenía el capítulo anterior desde hace 2 meses, pero se me metió la idea de que quería subir dos capítulos de una vez, así que de repente me vi super ocupada y con un capítulo completo y el otro a medio empezar.

Vi muchos comentarios sobre si ya había terminado o sino la iba continuar, así que les digo que no dejare este fic hasta finalizarlo, que según mis cuentas solo faltaría capítulos.

Espero tener actualización antes de que se acabe el año, pero, si no es así, espero y disfruten bien las fiestas n_n/

Saludoooos *