Hola mushashos…
Sigamos donde lo dejamos, recordándoles que voten y comenten la historia.
…
"¿¡Quien osa!? ¿¡Llevan una hora de retraso y deciden venir justo ahora!?" Kazuma azoto la puerta al salir por la puerta delantera mientras Aqua ponía apurada su atuendo en su lugar.
Al salir, se toparon con el otro par, en una vista poco tranquilizadora.
Red se había vestido más casual para la ocasión, usando una blusa sencilla azul con una falda blanca sobre una malla negra.
Varik, aunque prescindiendo de su armadura, seguía pareciendo un hombre de montaña, con una camisa marrón, pantalones negros y botas de cuero.
En su patio, el más robusto de ellos estaba ensamblando una especie de asador, usando ladrillos sueltos en la cercanía y una rejilla de metal.
Lo poco tranquilizador era que, junto a él, se exhibía una cola de langosta gigante muy familiar.
"¡No puedo creerlo! ¿¡Por esto te querías quedar más tiempo en el pantano? ¡hasta mentí por ti sin querer! ¿¡Eres descerebrado!? ¡Debes tener algo malo ahí arriba!" Red se veía cada vez más mortificada mientras le gritaba a su compañero.
"Se te va a reventar la vena de la frente" Varik no tenia interés de hacer esto una discusión seria.
Aun intentaba encender el fuego de la manera tradicional, antes de percatarse de la aparición del otro par "Hey, linda casa la de ustedes ¿puedes hacer tu magia Kazuma?"
Un sonriente aventurero se aproximó a él con una mirada mimosa.
"Claro compañero, pero primero explícame ¿¡Porque robaste un pedazo de monstruo!?" Por su tono, sabia que estaba enojado.
"La ultima vez que revise, no tenia el nombre del gremio" Siguió empeñado en encender la hoguera en vista de que no lo ayudaría.
Kazuma aspiro todo el aire frente a el para evitar que le diera acidez.
"El gremio nos paga para quedarse con la carne de los monstruos, esto es fraude sin importar de donde lo veas" Logro formar palabras que hasta su compañero mas reciente debía tomar como razonables.
"¿¡Vamos a ir a prisión!?" Aqua ya estaba perdiendo la cabeza, no haciendo más sencilla la situación.
"No, a menos que haya soplones" El berserker respondió, obviamente haciendo alusión a ambos.
"¡Aunque odiaría tener que arrodillarme frente a Luna para disculparme, no podemos solo dejarlo así!" El aventurero en traje deportivo señalo insistentemente la cola.
"Kazuma, el gremio hace omisiones para su conveniencia todo el tiempo, si tu no extrañas algunos miles Eris desviados, ellos no deberían extrañar un poco de carne blanca" Le advirtió mientras seguía empeñado en encender las ramas debajo de la pequeña hornilla.
La frase en sí, cambio la cara de Red.
"Esa mentalidad no te llevara a nada bueno, no deberías soltar eso sin pruebas" Kazuma lo regaño sin lograr avanzar.
"Bueno… en realidad" La maga murmuró, fallando en no ser escuchada por los otros dos.
Kazuma le hizo una señal para que se alejaran un poco.
"Explícate" La interrogante era el preludio de un reclamo.
Sin escape o la oportunidad de retractarse, Red suspiro derrotada.
"… cuando contaba la recompensa, noté que había un faltante, supuse que era por la langosta… cuando pregunté, Luna me dijo que los altos mandos no quisieron añadir más dinero por un monstruo adicional… por ser un riesgo lógico, además de no haber solicitado su eliminación" Explico lenta, suave y comprensivamente.
Pero Kazuma se exaltó al instante.
"¿…Que?" Tenso la voz, asustando a la maga.
"… n-no dije nada para no provocar alguna discusión, incluso rebaje mi parte para que no se dieran cuenta" Intento justificar a prisa.
Pero en cambio.
"…" Ambos varones vertieron una cantidad aterradora de atención en ella.
No importaba como lo vieran, estaba mal.
Al mismo tiempo, la hoguera se encendió.
"¡Te lo dije! ¡Hora de cocinar!" Varik vitoreo mientras empezaba a abrir la coraza de la cola de langosta con un cuchillo.
("Nota personal, no volver a confiar en el gremio")
"… Aqua ¿nos queda mantequilla?" El amo de la mansión exclamo en una voz apática, para horror de la honesta hechicera.
…
…
…
En una mesa de picnic frente a la mansión, una desolada pelirroja miraba una porción de costosa carne blanca asada, cubierta de salsa de mantequilla sobre un pan tostado.
"Se te va a enfriar" Aqua le advirtió, con la boca llena de su propio emparedado, luego lo bajo con un trago grande de vino "¡Fuaahh, deben probar esta combinación!" lleno la copa de Red hasta el borde, mientras esta titubeaba.
"A-aqua, yo no"
"Nuestra compañera honoraria no puede beber, si lo hace se va a desmayar otra vez" La intervención indeseada del berserker que atendía la parrilla en compañía del aventurero la hizo fruncir las cejas.
"Cierra el pico" Tomo un sorbo ligero de la copa, en un intento de contradecir al azabache.
En consecuencia, inmediatamente empezó a sentir la cabeza liviana.
"…" Frente al fuego, viendo la carne cubierta en mantequilla y ajo poniéndose de un agradable color rojo.
Kazuma no pudo evitar pensar en su primer banquete de cangrejo en la mansión.
Y claro, también en Darkness.
"Si sigues mirando la langosta así, creerá que quieres conocer a sus padres" El berserker lo saco de su profundo recuerdo de manera no muy considerada.
"… solo me aseguro de que este bien cocinado" La respuesta de Kazuma fue algo brusca.
Pero luego volvió a sumirse en la vista del fuego.
…
"¿Por qué la cara de perro regañado?" Esta vez, Varik sonó menos burlona al respecto.
El aventurero del color verde se extrañó un poco del interés del mayor en sus pensamientos.
…
"No es nada…" Aun no estaba listo para hablar sobre como extrañaba al resto de su grupo… y Varik pareció entender el mensaje.
Se quedaron en silencio frente a la titilante parrilla.
"¿Ya casi esta verdad?" De la boca de Kazuma salió eso de manera autómata.
Fue casi involuntario.
"… si ya casi" También salió de Varik, como si fuese una respuesta natural.
…
…
El resto de la tarde fue… divertido.
Aun cuando Varik parecía gustar de molestarlo, también encontraron un rato para hacer ocio y divertirse.
Principalmente a costa de Aqua haciendo trucos de magia usando a una ebria Red como asistente.
…
…
Finalmente, fue la hora de la despedida.
"¿Seguro que no necesitas ayuda?" Tras la caída del sol, Varik ahora llevaba los restos de la coraza de la langosta en una carreta de la mansión.
Sobre dicha coraza, Red dormitaba en posición fetal.
"Fue mi idea, así que yo me deshago de la evidencia, también se tomar la responsabilidad" Sin un caballo, Varik tendría que encargarse de llevar la carreta el mismo, cosa que no le parecía difícil.
No iba a discutirle eso, en efecto, era su culpa.
Pero…
"Gracias por compartirlo con nosotros, pero la próxima vez deja que yo consiga la comida" Era la primera vez en un tiempo que tenía visitas… y realmente le había gustado.
"No me digas que hacer, nos vemos" Varik se puso en marcha, tras dejarlo con una breve sensación de inconformidad…
Que rápidamente se convirtió en algo de gracia.
…
…
Dentro de la mansión y en el comedor.
"Bueno, aún quedan las sobras, podremos desayunar langosta los próximos tres días" En efecto, toda la carne de su pequeña parrillada estaba en una tela blanca sobre la mesa.
No sabría tan bien seca y salada, lo cual era una pena.
"Kazuma, Kazuma" Aqua se le acercó desde su habitación, completamente vestida con su orogamo para salir.
"Si habla Kazuma"
"¿Puedo llevarles las sobras a los chicos en la iglesia de Axis?"
No tuvo una reacción negativa en absoluto, aunque le daba pavor relacionarse con la orden, aun sabía que tenían una vida bastante dura (Aunque mayoritariamente era su culpa)
Dio un vistazo por la ventana.
"… no lo sé, ya es bastante tarde" El estoicismo en su voz, hizo que Aqua se sorprendiera brevemente.
Esperaba o un sí o un no rotundo, nada más.
Sonrió de lado.
"¿Ehhhh? Estas teniendo bastantes reservas conmigo ¿no quieres que se aprovechen de mi en tu ausencia?" Lo molesto un poco, jugando con su nuevo acercamiento.
"No, temo que le provoques problemas a alguien, y que tenga que ir a media madrugada a resolverlo"
"¡Olvida que dije algo!" Empezó a andar a la salida con pisotones, cargando la cesta con los aperitivos.
Kazuma le puso la mano en el hombro de manera suave, asustándola un poco.
"¡…!"
"… ve, pero ten mucho cuidado" Le pidió en un tono bastante sobrio.
La expresión de Aqua, luego de una sorpresa, se convirtió en una sonrisa boyante, antes de reanudar su salida de un mejor humor.
Pero Kazuma volvió a pararla en el umbral, con sus manos en sus hombros "Y por cuidado, me refiero a que, no vayas por ahí causando problemas, no vayas a embriagarte por ahí, no te acerques a la iglesia de Eris, no te pelees con niños de camino acá, y no dejes que Cecily te meta en problemas por mucho que te adule… " Kazuma se mantuvo invasivamente cerca mientras le listaba punto por punto, aun habiendo más en fila.
Aqua se sacudió su agarre agitando los brazos.
"¡Ya entendí! Dios, pareces mi novia" Se volvió hacia la puerta haciendo una pataleta.
Luego la cerro, dejándolo en soledad… y una rara satisfacción en su pecho.
…
Su siguiente paso era… lo que fuese.
Tenía la mansión para el solo.
Sin haber hecho una cita con una súcubo, ir a dormir temprano estaba fuera de cuestión.
Así que decidió dar la vuelta por varios puntos familiares de la casa, solo para ver si encontraba algo interesante que hacer.
El sótano, el ático, la bodega, el armario…
Repentinamente, se detuvo frente a la habitación de Megumin.
…
No podría resistirse a fisgonear en una situación normal.
Pero él ya lo sabía perfectamente.
No había nada allí.
…
…
…
Meses atrás, tuvo el impulso culposo de ir a pedir perdón.
Perdón por estar tan empeñado en discutir los últimos días, o eso creía.
Se detuvo frente a la susodicha puerta, una tarde de otoño después de volver de su propio paseo para ventilarse.
"Oye, Megumin"
…
Pasados algunos segundos, no hubo respuesta a su llamado "Se que estas molesta, vine a hacer las paces" De nuevo, nada.
…
"Mira, sé que crees que he sido odioso últimamente… pero solo quiero que sepas, que cuando digo que quiero que seamos formales… solo me refiero a que… no es nada sucio, lo juro… solo quiero que seamos…"
…
Empezó a sentir que había demasiado silencio detrás de la puerta.
Tomo la perilla en un impulso, encontrando nula resistencia.
…
…
…
Igual que aquel día, la habitación estaba desierta.
La sensación de aquel día fue horriblemente desoladora, más cuando las noticias de Megumin llegaron cerca de tres días después.
[Me iré un tiempo a casa, volveré en una temporada]
Las dos líneas en esa carta se reprodujeron con su voz en su propia cabeza una y otra vez, hasta que decidió detenerlas.
"… bastaba con botarme" Le murmuro a una habitación vacía.
Al percatarse de ello, salió a toda prisa, queriendo evitar ponerse melancólico justo ahora.
Huyo a la habitación de Aqua, yendo automáticamente por un objeto en particular… dentro de un cajón, donde se suponía, él no podría encontrarlo.
Así es…
Era justo eso…
…
Su Game-boy.
…
…
…
Tras una hora y tanto.
Siguió presionando los botones en una combinación casi mecánica.
Que hizo que el juego que Aqua tenía guardado terminara con una puntuación casi perfecta.
Todo en menos de una hora.
…
"Debimos tomar más de estas cosas de aquella fabrica" De nuevo seguía quejándose con el viento.
Incluso había traído un invitado de afuera.
El pollo mascota de Aqua le camino encima como un tapete, antes de que Kazuma la tomara para acariciarlo como si fuera un gato.
Recibiendo una nula respuesta del mismo, además de algunos cacareos mansos.
"Genial, también perdí al gato en el divorcio" Un pensamiento divertido pero agrio a la vez.
Sus planes de esperar el regreso de la Diosa maligna de pechos grandes se habían ido la retrete también
…
"… soy de lo peor"
No le había prometido a Aqua gran cosa, pero cuando menos no debería estar pensando en perseguir activamente otras faldas.
…
Ahora que lo recordaba.
Aqua y el también tuvieron una pelea, poco después de que Megumin se fue.
… fue estúpida, infantil, absurda.
Pero pese a todo eso, no pudo ni responder a los reclamos de Aqua.
En aquel momento, era un muerto en vida.
…
Aqua se fue, prometiendo que se quedaría en la orden de Axis hasta que arreglara las cosas.
…
Recordó una y otra vez, lo que Vanir le había profesado aquella visita casual en su tienda.
"Cometerás un error víctima de tu arrogancia, y te quedaras solo"
…
Una parte de él estaba tentada a ir a casa de los dustiness, desahogarse con Darkness, y ver si aún era su "tipo".
… no.
Incluso él tenía estándares para ser egoísta, ya la había rechazado antes, si de repente cambiara de opinión, ella vería la ofensa en seguida… y ella no merecía eso.
En aquel instante, víctima de un fatalismo gigantesco… llego a pensar que tal vez, era hora de volver a empezar en Japón.
…
Hasta que esa misma tarde, Aqua toco a su puerta… solo medio día después de haberse ido.
"¿¡Porque cambiaste la cerradura!? ¡Eres horrible! ¡Nini!"
…
La excusa de Aqua para volver, fue que no se sentía cómoda en los aposentos de la iglesia.
Pero considerando lo bien recibida que era Aqua en la orden, dudaba seriamente que fuera el caso.
La otra pista, fue que trajo aperitivos para ir a verlo.
Tras una merienda silenciosa… Aqua se resolvió para decir algo que no fuesen regaños o reclamos.
"Kazuma ¿…estas bien?" La pregunta era obvia, incluso tonta en medida.
Pero…
El no tenia idea… de lo mucho que necesitaba que alguien se lo preguntara.
"no…"
…
…
…
Podía ser muchas cosas… muchas de ellas negativas.
Pero, al menos en el sentido más burdo de la palabra, podía decir que cuando menos, Aqua era leal.
"Mañana la llevare a comer…" Le anuncio al Emperador Zell con una sonrisa afable.
…
("Oye… ¿eso no es una bandera?")
*Toc toc*
Al mismo tiempo que ese pensamiento se manifestó en su cabeza, la puerta fue tocada, anunciando el regreso de la arcipreste.
…
Quien se suponía, debía tener su propia llave.
*Toc, toc*
…
Volvieron a tocar la puerta.
…
En guardia, se puso de pie con el emperador Zell en las manos, yendo al frente de la casa, con una leve sensación de inquietud.
*Toc, toc*
Estando frente a la entrada, volvieron a golpear en un ritmo apacible y paciente.
…
Sujetando su espada, abrió lentamente, esperando con anticipación el cliché donde no habría nadie.
…
Pero no fue así.
…
En la entrada, cubierta por la penumbra, había una chica… con una aparente edad cercana a la suya, tal vez un poco mayor.
Cabello negro azabache, corto, solo llegando hasta su nuca en un impecable y estilizado domo, más unos mechones a ambos lados de la cabeza y un flequillo bien peinado.
Tenía la piel tan blanca que parecía de papel, pero tan bien cuidada que parecía suave solo de verla.
Su figura bien proporcionada, estaba cubierta por una blusa blanca sin mangas, dejando ver la hendidura de sus axilas, en su cuello, llevaba una corbata negra de moño.
Debajo, una falda negra que solo defendía el inicio de sus muslos, dejando una vista amplia de sus piernas, hasta llegar a unas elegantes botas negras.
Era sospechoso, definitivamente…
La pista más obvia, era que, a ambos lados de su cabeza, sobresalían dos cuernos negros con puntas rojas, los cuales formaban una especie de corona natural.
Era evidente, se trataba de un demonio en toda regla… uno que había atravesado la barrera de Aqua sin un rasguño.
Pero la mayor sorpresa, llego cuando esta abrió los ojos, revelando un par de orbes de color rojo, tan penetrante que casi logran hipnotizarlo.
Un demonio con un color anormal de ojos no debería ser nada del otro mundo…
Si tan solo no le recordaran, tanto a los ojos que había visto una y otra vez en la aldea de los demonios carmesí.
…
"Muy buenas noches" Lo saludo educadamente, desprendiendo solemnidad al moverse "¿Puedo pasar?"
…
Ante la petición, Kazuma cerró la puerta al instante en su cara.
…
Lo siguiente era salir por una ventana de atrás.
"Era solo una formalidad, voy a entrar de todas formas" al girarse al pasillo, se encontró con la espalda de esta mujer, caminando tranquilamente hacia la sala.
Kazuma tuvo un escalofrío espantoso.
"¡Ohhhh, es un lugar muy bonito! ¿Te molesta si me siento?" Señalo el sofá frente a la chimenea.
"Un poquito" no quería que la situación no fuese como ella quería.
"Gracias" Se sentó de todas formas, lanzándose hacia el sofá.
…
("Esta tipa…")
"Disculpa ¿Viniste aquí por algún motivo en particular?" Le pregunto alzando un poco la ceja, mientras rodeaba el sofa.
Si tuviera que recordar una sensación similar… le recordaba bastante a estar en presencia de Wolbach, Seresdina o incluso Sylvia…
Esta sonrió jocosamente a su precaución.
"Solo vine a formalizar, quería conocerte en persona, Satou Kazuma" Sabia su nombre, esto pintaba mal.
"Ya veo…" Kazuma tomo un poco de distancia, llamando la atención de su invasora.
Quien llego a ver con la pupilas encogidas, como Kazuma tomaba una pose dramática
"¡Mi nombre es Satou Kazuma, soy el héroe legendario que le dio fin al Rey demonio y el mayor aventurero de esta ciudad!" Anuncio de manera aparatosa.
Desvaneciendo la mueca confianzuda de la mujer de los cuernos.
…
La sala se envolvió en un silencio espeso e incómodo.
Pensó que sería una buena carta para disolver la tensión, e incluso empezar con buenos términos si era alguien de la aldea Carmesí.
En cambio, una espesa aura purpura envolvió a la mujer, después, los cimientos de la mansión junto con todos los muebles se sacudieron.
"OYE ¿Te estas burlando de mi?" Pregunto con una voz áspera y con obvio disgusto.
"y-yo…" Retrocedió por puro instinto.
"¿Me viste en la puerta, y pensaste que era alguna clase de idiota?" Le cuestiono mientras se ponía de pie y caminaba hasta él de manera amenazante.
"Pensé que eras un demonio carmesí" Se excuso, solo logrando que se viera más molesta.
"Lo soy" Confirmo su sospecha, cargada de intención asesina "no vuelvas a hacer eso… jamás"
"¡Ya, no fue personal!" Kazuma le levanto la voz mientras resguardaba a Zell de ella, inesperadamente, logrando detener su desplante.
La misteriosa mujer pareció recuperar la compostura en un suspiro.
…
"… Olvida que viste eso, por favor" Desvío la mirada con un poco de vergüenza.
"Difícil" Kazuma vocifero, llamando su atención nuevamente.
"… eres mucho más impertinente de lo que me imaginaba" Lo crítico, perdiendo el toque amenazante en su presencia.
"Es involuntario… pero tampoco estas siendo muy formal, aun no me dices ni tu nombre" Kazuma reclamo a la ligera, probando los límites de su paciencia.
"Me llamo Kara…" Se presento a secas, incluso haciendo que se viera extrañado.
"…"
"¿Qué?" La falta de respuesta la hizo preguntar.
"Es bastante normal para ser de un demonio carmesí" Hizo la observación sin querer.
De nuevo, "Kara" hizo un esfuerzo por no perder los estribos de nuevo.
"… da igual" Y lo logró, apenas "parece que los rumores sobre tu reputación son ciertos… a medias" De nuevo lo estaba reseñando.
No importaba, solo quería ganar tiempo para que Aqua la oliera desde la entrada de la mansión y viniera a ahuyentarla.
"Declara tus intenciones, aun no me dices quién eres o a que viniste" La invito a seguir monologando.
La pelinegra ensancho su sonrisa arrogante.
"¿Aun no es evidente?" Se inclino hacia él de manera divertida, por un momento, tuvo la sensación de haber tenido una charla similar en la secundaria.
"Para nada…" Tenía un par de teorías, pero el punto era hacerla hablar.
"… bien, seré directa" Tras esto, llevo su mano a su pecho, luego hizo una reverencia "Satou Kazuma, mi nombre es Kara Viatory, soy un demonio carmesí que logro ascender a archi demonio… y soy el actual rey demonio"
Tras la rimbombante pero mesurada presentación, la mansión se inundó de un silencio de cementerio.
"…" Pero Kazuma mantuvo una mirada estoica en ella, casi como si esperara una adición a su presentación.
Gradualmente, provocando que la renombrada chica se pusiera nerviosa…
"… n-no esperaba esa falta de respuesta… enserio tienes nervios de acero" empezó a temer que él ya la esperara, e incluso estuviera confiado en poder lidiar con ella.
*Thud*
Antes de terminar la frase, Kazuma ya había caído al suelo con los ojos en blanco.
…
…
…
En otro lado de la ciudad de los novatos.
La comunión de Axis, se había reunido en el austero comedor principal, para disfrutar del regalo de una de las figuras más gratas de su fe.
"Señora Aqua, agracemos mucho esta muestra de su div… generosidad" Cecily inclino la cabeza frente a la peli-azul, quien se paraba orgullosa junto a la silla principal, mientras veía a su limitada congregación comer y beber.
"No hay nada que agradecer Cecily, su felicidad me basta y me sobra" Mantuvo algo de solemnidad, secretamente regodeándose de la atención recibida.
"¡Siempre tan benevol… caritativa señora Aqua!" Cecily la adulo de nuevo con ojos de estrella.
"Fufu…" Aqua tomo una jarra de nenderoid, dispuesta a brindar con los demás.
Por el lado de la sacerdotisa rubia… esta parecía tener una inquietud.
"Señora Aqua… en realidad, me gustaría discutir algo con usted" La mujer en el habito azul tuvo dificultad para expresar su apremiacion.
"¿De qué se trata, querida Cecily?" la Arcipreste pregunto antes de empezar a beber.
"… aquella noche en el callejón ¿Usted y Satou Kazuma…?"
En respuesta inmediata, Aqua salpico el vino, posteriormente empezando a toser de manera agresiva.
…
…
…
De vuelta en la mansión…
"¿Ya te encuentras bien?" La recién revelada "jefe final" lo había llevado al sofá para asegurarse de que no había sufrido un infarto.
Incluso había algo de preocupación en su rostro.
"… si, fue solo la impresión" Kazuma mantuvo su vista en el techo.
"… E-era mi primer objetivo, pero no esperaba que fuese así" Noto un ápice de lastima en su voz, esta mujer de porte sombrío estaba siendo bastante comprensiva.
"… si, fue un buen susto…" Se levanto de su lugar, tomando distancia de ella por precaución "¿vas a matarme?" Se preparo para sacar su ultima carta de ser necesario.
Pero Viatory no parecía tener intenciones de luchar, en cambio, le hizo algo de gracia…
"Oh, eso… en realidad, venia preparada para luchar en caso de que fueras mas irrazonable, pero como están las cosas, podemos hacer algo mucho más civilizado" De nuevo, esa confianzudes macabra le decía que no lo consideraba una amenaza en absoluto… al menos no ahora "Vine a aclarar nuestros bandos"
El aventurero en su traje deportivo, levanto una interrogante.
"¿Viniste a reclutarme?" Se señaló de manera tímida, pensando en una manera de sacar ventaja del supuesto.
En respuesta, Kara ahogo una risita burlona, provocando que una arruga se apareciera en la frente del aventurero.
"No, no, no… nononono, No" Le negó con vestigios de lo divertido que le parecía la simple implicación.
"Oye" No dudaba que ella pudiese matarlo con poco esfuerzo, pero tampoco le dejaría pasarle por encima tan casualmente.
Kara paso a una máscara más seria.
"Vine por tu declaración formal de guerra… o, si lo prefieres… un acuerdo de neutralidad entre tú y yo" Le anuncio de manera tentativa.
"¡…!"
Neutralidad… es decir ¿ella no lo fastidiaría sin importar como progresara la guerra contra el reino?
"Si aceptas mi neutralidad, no me acercare a Axel, tampoco a la gente cercana a ti, siempre y cuando ellos no se pongan en mi camino... Aunque técnicamente no soy completamente un demonio, no suelo romper mis acuerdos" El trato era riesgoso sin duda.
"… espera, los monstruos nuevos… soltaste a la cabra-cosa en la llanura ¿eso es un ataque tentativo de tu ejercito a la ciudad?" Kazuma le recrimino, cuestionando si no tenia planes futuros contra Axel.
Por un momento, la chica demonio se vio cómicamente confundida, luego chasqueo los dedos.
"Ohhh… No son mi ejército, son más bien experimentos… muchos de ellos no son útiles del todo, así que terminan siendo de 'Liberar y olvidar' no sé exactamente a donde van una vez los dejo a su suerte" Explico con una apatía gigantesca al asunto.
¿… la cosa que casi se los come era un perro abandonado?
Ella era terrible… pero, de todas maneras.
No era como si pudiese hacer algo contra ella ahora.
"… Muy bien, tenemos un acuerdo" Valía la pena si lograba ganar algo de tiempo.
La mujer de los cuernos se vio satisfecha "… Me parece excelente"
Kazuma estuvo a punto de extenderle la mano, pero mujer demonio no respondió de la misma manera.
"Antes de cerrar nuestro acuerdo, también vine por otra razón" Claro, debía haber algún beneficio para ella.
Kazuma chasqueo la lengua, pero no podía ser descuidado ahora.
"¿Y seria…?"
"Hace unos meses, erradique al remanente de la facción del general Wolbach, del ejercito del rey demonio…" Le conto como si fuese un chisme cualquiera.
"…" Las pupilas de Kazuma se encogieron.
"Wolbach tenía algo que yo necesito, estaba lista para batirme con ella para conseguirlo… y cuando murió, según sus tropas restantes, "eso" paso a manos de ustedes… sabes bien lo que estoy buscando ¿Verdad?" Le pregunto con una voz melosa y envinada.
"Oh… no sabría…" Antes de terminar de negarlo.
Kara lo detuvo, emanando un aura siniestra que de nuevo sacudió los cimientos de la casa.
De TODA la casa.
"No intentes mentirme Kazuma, no es inteligente…" Se le acerco de manera invasiva "Si me entregas "Eso" como acto se buena fe, no nos enfrentaremos jamás, será el seguro de nuestro tratado" Termino de hablar, suprimiendo aquella aura aplastante, devolviéndole la libertad de respirar.
Kazuma estaba sudando frío, pero finalmente, se resolvió a mirarla a los ojos con un poco de desafío en él.
"No lo tengo…" Respondió con firmeza "Te lo entregaría si lo tuviera, pero no puedes responsabilizarme por no tenerlo aquí ¿verdad?"
Kara siguió con el contacto visual… no encontrando deshonestidad en él y limitándose a suspirar con decepción.
"¿ehhhh?… bueno, eso apesta sin duda, pero no tienes que preocuparte, aunque no lo tengas ahora…" Pauso de manera dramática "sabes donde esta ¿cierto?"
Mierda.
"…Y-yo" Estuvo a punto de negarlo solo por reflejo.
Pero, al mismo tiempo, una botella explotó detrás de él, dándole una advertencia seria.
Iba a vomitarse de los nervios en cualquier momento…
"No me mientas Kazuma" Kara canturreo frente a él, mientras sus ojos se volvían extremadamente rojos.
Lo sabía perfectamente, era una situación de vida o muerte, tenía que hacer lo necesario para sobrevivir.
La breve imagen de cierta archimaga detuvo su intento de tomar el escape sencillo.
"¿… que pasara con la persona que lo tenga?" Le murmuro, armándose de la poca resolución que le quedaba.
Kara sonrió comprensivamente.
Intento responder de la manera más favorable posible "Estará perfect…"
"Estas mintiendo" Esta vez Kazuma la interrumpió.
Le acuso directo y sin rodeos, por un momento robándole el aliento.
La sonrisa mimosa e ingenua de Kara, se volvió más siniestra de repente.
"… Eso depende de esa persona" Le informo con una obvia malicia en su voz.
…
Podía decirle ¿No? Es decir, por muy testaruda que fuera, esa maga seguro le entregaría al gato antes que poner en riesgo su propio pellejo o el de su familia.
…
Megumin lo entendería en seguida… era lo único que podía hacer.
…
"… No puedo decírtelo" Espeto de manera débil y etérea, lamentándose por dentro una y otra vez.
Si se trataba de Megumin… intentaría luchar primero.
Y solo con ver a esta mujer a los ojos, era más que obvio, le gustaba ser desafiada.
…
Kara, aun con toda la ventaja, se quedó patidifusa.
"Wow… ¿De veras?" Quería estar segura de que este individuo le estaba negando algo.
Todo mientras ella le sonreía ampliamente.
"No, lo lamento" Levanto la mirada, esperando el próximo movimiento de esta mujer.
La demonio carmesí, lo estaba mirando como si él fuera lo más divertido en el mundo.
Como una serpiente miraría a un ratón…
Luego se recompuso en una sonrisa simplona y recatada.
"Es una lástima" Se dio la vuelta y camino hacia la salida.
Fue el turno de Kazuma de verse descolocado, pues estaba seguro que lo fulminaría en su sitio.
"aquí termina nuestro acuerdo, no digas que no te lo advertí" Lo miro risueña por encima del hombro al salir, cerrando la puerta con mesura.
Luego la escucho batir las alas, dando fin a ese episodio.
Dio un suspiro hastiado, casi derrumbándose en el suelo.
…
Algo andaba mal.
…
Segundos después de que se fue…
Había una presión rara en el aire, algo que le recordaba vagamente a…
"¡Oh, hija de perra!"
Corrió a toda prisa detrás del emperador Zell, lo tomo en brazos y canto tan rápido como pudo.
"¡Teleport!"
…
…
…
En frente de la puerta cerrada del gremio.
Aqua se dirigía a la mansión, habiendo sido víctima de la charla más incomoda en su larga vida.
…
…
…
Cecily la había llevado a un área apartada dentro de la iglesia, de las cuales no había pocas.
"¡señorita Aqua, le ruego que calme mi consciencia, sé que usted no haría tal cosa sin una buena explicación!" Cecily se resistió a postrarse frente a quien se supone, era solo una alta adepta de la orden.
La mandíbula de la peli-azul se movió varias veces sin pronunciar palabra, en acompañamiento de un sonrojo de muerte.
Cecily esperaba impaciente por sus palabras.
"Y-yo… Kazuma… nosotros" Solo titubeos torpes salieron de sus labios, acrecentando su frustración.
¿Cómo le explicas a alguien esto?
Ni ella sabía que eran.
"¿Señora Aqua?" La cara de Cecily se volvía progresivamente de desilusión, apresurando aún mas el proceso de crear una excusa.
Un mecanismo en la cabeza de Aqua hizo "click" para concebir una abominación a la que ella llamaba "idea"
La expresión de Arcipreste se volvió altamente solemne, cosa que hizo que Cecily la mirara con esperanza.
"Cecily… todo esto lo he hecho por una razón simple" Llevo su mano a su pecho "Para aliviar el desenfrenado amor que Kazuma siente por mi persona"
…
La clérigo rubia pronuncio un quejido de pura agonía.
Aqua lo ignoraba de momento, pero acababa de lanzar a Kazuma debajo de las ruedas del camión.
"p-p-ero, señora Aqua… usted… ¿devuelve esos sentimientos?" La cuestión de la rubia le dio una bofetada.
El cuerpo de Aqua empezó a temblar, haciendo que Cecily fuera a atenderla.
"¿Aqu…?"
"¡NO LO SE!" Chillo en su cara, haciendo que la clérigo rubia retrocediera.
"…" Nunca creyó que llegaría a ver a la gran Aqua martirizándose y derrumbándose por algo parecido.
Mentiría si dijera que no estaba alarmada… pero eso también cosquilleo un instinto en ella, uno de buscar cotilleo.
Decidió solo escuchar de momento.
Por su parte, la peli-azul estaba al tope de inseguridad y una timidez que nunca creyó ver en alguien de su calibre.
"… llevo tanto tiempo con Kazuma que pensé que ya no había nada que saber del otro… pero ahora, me siento rara cuando estamos cerca…" Metió su cara entre sus piernas para resguardar sus mejillas rojas.
No, no iba a decirle a Cecily lo cerca que estaban del abismo, si alguien se enteraba, seria su fin.
Era evidente… sería impensable para toda la orden, pero frente a ella, estaba su diosa, en necesidad de orientación… y una confidente.
Cecily sonrió dulcemente.
"… señora Aqua" La llamo suavemente mientras tomaba sus manos "usted nos enseño la cúspide del estilo de vida humano… debemos vivir el momento, pues no sabemos que será del mañana… aun creo lo mismo, es mejor ser felices hoy"
Era enormemente raro escuchar lo que había predicado tantas veces, como una amonestación.
Por primera vez, le tenía miedo al futuro.
"… sabes, creo que nunca pude poner en práctica los preceptos de la orden, hasta que conocí a Kazuma" Antes de conocerlo, solo vivía por sus deberes y las comodidades que podía tener en un tris, si nadie con quien compartir momentos buenos como malos "… Es la persona más divertida que conozco" las comisuras de Aqua se formaron en una sonrisa encantadora.
Que hizo que Cecily se escandalizara hasta el núcleo como una adolescente.
"¡Señora Aqua, eso es tan dulce!" La clérigo chillo de emoción mientras la tomaba de las manos de nuevo, fuertemente.
Cosa que hizo que la peli azul se espantara.
"E-espera, Cecily, no hables tan alto"
"¡Me preocupa un poco su gusto en hombres, y la idea de que Kazuma llegue a tocarla particularmente me aterra, pero confío plenamente en su buen juicio! ¡Tiene todo mi apoyo!" La tenia a menos de unos centímetros de su cara.
Cecily no la dejo irse hasta que estuvo satisfecha.
…
…
…
De nuevo, volvíamos al presente…
"En cuanto llegué, me beberé toda una botella y luego me iré a dormir" Anuncio con pies de plomo en camino a su hogar.
Era el plan, hasta que Kazuma se materializo frente a ella, haciéndolos chocar.
Retrocedió brevemente, mirando la aparición del apurado aventurero en compañía de su bien mas preciado.
"¡Kazuma! ¿…Porque trajiste al emperador Zell?" Aqua se apresuró a tomarlo de sus brazos.
….
Kazuma no pudo decir nada… lo siguiente que ambos escucharon, fue una enorme explosión, seguido de una columna de fuego en la lejanía.
…
Que se erigía desde donde estaba la mansión.
…
Segundos después, las alarmas de la ciudad empezaron a sonar.
…
…
…
De nuevo, otros dos capítulos que se suponía fueran uno.
Esto ira para largo.
Espero que lograra dar el swing que buscaba, espero verlos en futuros capítulos.
Recuerden votar por la historia y dejar un comentario.
Les prometo que en el siguiente capitulo (O los siguientes dos) ya iremos al "punto" que les interesa de todo esto.
