El fantasma de la fiesta
Lo lograsen o no a la primera quizás era lo más importante, porque no matar al objetivo significaba un problema multiplicado por mucho.
A pesar de que a Xana le costó hacer que Zack se quedase en París ayudando a Ayn Rand, fue relativamente fácil también convencer a los padres de Yumi para que la dejasen ir con ellos, argumentando que no tardarían mucho y sería simplemente turismo.
Se encontraban en el coche de Anthea, tenían la opción de ir en avión, pero si tenían que dejarlas por el camino, era mejor hacerlo con el coche. Taelia se notaba bastante inquieta, esperaba que al principio fuese un viaje de solo dos personas e incluso ella sola, en este caso tenía a tres personas más.
—¿Vosotras venís también? —Preguntó Taelia, sentada delante junto con Anthea—
—No te preocupes por nosotras, vamos buscando a alguien del proyecto Cartago—Espetó la IA, mirando por la ventana—Solo espero que no se complique—
—Mamá no dejó que me quedase con Richard así que aquí estoy—Respondió la pelirrosa. El día de antes, con intención de no molestar mucho a Taelia, le pidió a Anthea si se podía quedar con Richard, pero ante poca o ninguna sorpresa, ella se negó, ya que, aunque fuesen amigos, había una diferencia de edad que simplemente no le gustaba—
—¿De verdad pensabas que te iba a dejar quedarte ahí, así como así? —Soltó la otra pelirrosa—
—¿Con un hombre adulto hecho y derecho? —Secundó la IA con una medio sonrisa, ganándose un codazo de Aelita—
—¿Crees que podamos encontrarnos con Ulrich? —Preguntó Yumi a Aelita—
—Espero que sí, le dije que íbamos—
El viaje fue un poco silencioso, la música de la radio y las pocas ganas en general daban una preferencia al silencio. Era un camino largo.
—¿Sabemos alguna pista? —Preguntó Yumi a la IA luego de un rato—
—Solo un par de fotos y un área en específico, nada más—Respondió esta—No te preocupes, algo se nos ocurrirá—
—¿Qué tienes pensado? —
—Si lo encontramos tendremos que ver el contexto de la situación y si hay alguna oportunidad de ganar su confianza de manera que podamos hablar directamente con él, la idea no es matarlo a la primera sino sacarle información—Tocó con su dedo un par de veces el cristal de la ventanilla—¿Qué tal se te da seducir gente? —
—¿A mí? —Era una pregunta extraña, y no hacía mucha falta decir la respuesta—No creo que algo así pueda salir bien conmigo—
—Podemos practicar—Aelita soltó un suspiro—
—¿Por qué la vas a obligar a hacer eso? —Le preguntó, de verdad que a veces tenía unas ideas un poco extremistas—
—Tranquilidad, no voy a dejar que le pongan una mano encima de manera indebida, si esa fuese mi opción hubiese intentado convencer a Taelia—La aludida le miró de reojo con una expresión quizás de desprecio, por una parte, por lo que esas palabras significaban, por la otra, porque podía tener razón, dependiendo del contexto y de la recompensa hubiese accedido a ello—
—¿Qué idea tienes de mí? —Le preguntó la adolescente—No soy una persona que haría eso tan fácil—
—No lo decía por eso, sino porque serías capaz de hacerlo sin cortarte un pelo solo porque no le prestarías suficiente importancia a la situación para que la presión te afectase—Había sido un muy extraño análisis, pero en resumen había dicho que lo haría de manera desinteresada—
—Mientras no tenga que hacer algo raro con alguien, creo que puedo hacerlo—Suspiró la nipona—
—Aparte que sabes artes marciales, tienes buen carácter para defenderte, por eso no me preocupa mucho la situación en particular, sino quienes estén presentes—Ese era un buen y válido punto, Yumi sabía defenderse. —
Hubo otro momento muerto donde nadie dijo nada, puesto que no había más que decir al respecto, la IA tenía razón.
Quizás con poco o nada que decir al respecto, el trayecto fue bastante silencioso.
Luego de casi seis horas llegaron sobre medio día, estaban en la ciudad de Essen y debían parar, ya que Xana y Yumi se quedarían ahí.
—Recuerda, no tienes que matarlo a la primera, busca el momento adecuado—Recordó Anthea, dejando a ambas en una plaza pequeña a las afueras de la ciudad, cerca del área indicada, donde se podían ver fincas grandes de personas de bastante dinero—Si necesitáis algo o tenéis algún inconveniente avisadme, no estaremos muy lejos—
—Sería una suerte si hubiese algún tipo de evento esta noche donde poder colarnos—Soltó la nipona, la IA pareció tener una idea—
—No es mala idea, pero… es algo arriesgado, vamos a identificar primero al objetivo—Asintió la IA. Miró a Anthea—Nos vamos—Se bajaron del coche—
—Buena suerte—Tras esas palabras, siguieron su camino—
—¿Por dónde empezamos? —Preguntó Yumi, colgando una mochila en su espalda—
—Primero vamos a familiarizarnos con la zona, si está por aquí podremos, por lo menos, saber alguna ruta a seguir—Sacó de su mochila una pequeña foto que había sacado del objetivo, era la misma que le había enseñado Anthea—
—Elegante—Asintió—
Caminaron tranquilamente por la zona, era dificultoso poder reconocer a la gente, ya que iban con elementos varios que ocultaban su identidad de alguna manera, desde gafas de sol hasta trajes enteros. Intentaban pasar desapercibidas para no levantar sospechas, pero parecía que, si el objetivo estaba ahí, tendrían que ser muy cautelosas de no alarmarlo.
El sol estaba en su punto más álgido, desde la cima iluminaba el cielo de una manera que la tierra casi parecía prenderse en fuego, algunas nubes que comenzaban a aparecer en el cielo daban una sensación de bochorno abrumador.
—¿Pararemos a comer? —Preguntó la nipona luego de casi hora y media andando—
—Deberíamos—
Por otro lado, aún era un poco temprano, pero Taelia estaba impaciente, habían terminado de comer hacía poco rato y ya estaban en el cementerio, ubicado casi en el centro de la ciudad, un gran parque vallado de árboles tupidos dejaba ver la tranquilidad que emanaba la zona, un área de descanso eterno para aquellos que estaban fuera. En la entrada, había una pequeña floristería y quizás, salvo caminos interminables y algunas tumbas, no había mucho más.
—Creo que me quedaré aquí un rato—Se quitó el cinturón, soltando un suspiro—
—Si necesitas algo, avísanos—Dijo finalmente Anthea a su hija, quien asintió, despidiéndose en silencio. Bajó del vehículo y se acercó a la floristería, viendo por encima algunas cosas simples como rosas, hasta coronas hechas de flores de manera espectacular. Un muchacho joven, de piel morena y algo atento, se dio cuenta de su presencia, acercándose—
—¿Algo que busques? —El hombre le miró por un par de segundos, viendo como Taelia recogía de un pequeño balde una rosa de color blanco, en contraste con su vestimenta; un vestido corto de color negro junto a unas zapatillas del mismo color—Ah, es bonita—Tras pagarle, se giró—
—Gracias—Soltó casi en un susurro. Entró por un gran portón, soltando un suspiro mientras caminaba por una calle amplia que se separaba por más caminos bajo los árboles, lleno de tumbas que parecía un laberinto donde no querrías estar por las noches—¿Dónde estarán? —Se hacía una idea, pero había tantos sitios donde mirar, que solo le quedaba observar, rezando para no perder mucho tiempo en su búsqueda.
Pasaba el rato y las ganas y esperanzas de Taelia de poder encontrar las tumbas correspondientes parecían mermar a gran velocidad, ya había cruzado varios campos mirando con cautela cada una de las tumbas, pero no parecían tener gran correlación con su objetivo. Cansada de estar en ese sitio, se sentó en un banco al lado del camino, soltando un pesado suspiro mientras agudizaba su oído para escuchar el concierto de la naturaleza, pero ese concierto se vio interrumpido por lloros y lamentos que provenían de su espalda. Se giró, y un poco a la distancia pudo ver una concentración de personas alrededor de un agujero cavado en la tierra, donde se estaba depositando un féretro de madera al tiempo que un hombre con una blanca vestimenta y un libro en sus manos, recitaba unas palabras, mientras todos a su alrededor, lleno de flores y lamentos, solo podían mirar. Se puso de pie y se acercó, no con intención de curiosear, sino porque podría ser que lo que buscaba se encontrase por ahí. Por desgracia no lo encontró, parecía que los lamentos de aquellas personas perforaban su oído y no le dejaban mantener la calma. Por suerte se alejó lo suficiente para no poder escucharlos más, encontrándose con una zona iluminada por el sol, de las pocas donde la arboleda no daba su correspondiente sombra. Se acercó por una razón en particular, había varias personas reunidas alrededor de dos tumbas cerca una de la otra; las personas eran una mujer mayor algo familiar, un niño que no superaba los cinco años y una mujer quizás de la edad de Richard, el amigo de Aelita.
Dio una vuelta un poco tonta solo con la intención de no llamar la atención y ver si esas personas estaban en su objetivo, pero antes de poder darse cuenta, el niño en cuestión, vestido con un traje negro, de piel blanca, pelo rubio y ojos azules, se giró hacia ella, haciendo contacto visual. Pasaron un par de segundos donde Taelia cayó en cuenta de quién era, había dado en el blanco.
—¡Taelia! —Saludó el niño, alzando su brazo, la aludida se acercó rápidamente, pero fue bloqueada por la mujer mayor que le acompañaba, una persona que ya conocía bien. Una mujer no muy alta, ligeramente obesa de pelo rubio y canoso, casi no se diferenciaba y lo tenía recogido en un moño, vestía un vestido negro y unas zapatillas como ella, su expresión, molesta y triste, no era para menos—
—¿¡Por qué estás aquí!? —Preguntó la señora, ahora tenía una extraña mezcla de sentimientos, ya que se esperaba un poco más de comprensión, sin embargo, recibió indiferencia y enfado—Ellos no están aquí así que no perteneces a esta familia—Eran unas duras palabras, pero…—
—Lo sé, pero fueron mis padres y quería verlos—Respondió en voz baja, mostrando indiferencia, forzándose a hacerlo—Vi como los mataban en frente mío y…—Bofetada. Si, la mujer no había ido ahí para escuchar una oda a la muerte de esa joven y su paciencia estaba en el límite. La mujer joven se acercó a intentar tranquilizarla, no se habían visto antes, pero debía ser de la misma familia—
—¡Ya basta! —Dijo la joven—¡Ella no tiene la culpa! —Taelia se tocó suavemente la mejilla, no se lo esperaba, pero no estaba molesta, entendía la frustración y el enfado de la señora y solo podía esperar a que ellos se marchasen para poder tener un rato de tranquilidad—
—No pongas esa cara—Dijo una vocecita delante suyo, era aquel niño que en su momento era su hermano, ahora era simplemente otro conocido más. Su rostro no era de tristeza, quizás su inocencia lo hacía creer que sus padres volverían en algún momento—¿Crees que los veremos en algún momento? —No se esperaba esa pregunta, pudo notar la mirada furtiva de las otras dos personas—
—Yo espero que sí, pero quizás debamos olvidarnos de eso por el momento—Le acarició la cabeza suavemente—Ayúdame a limpiar un poco—El chico simplemente le siguió. Tras dejar la flor sobre una de las tumbas, comenzó a arrancar maleza con sus manos, despejando y dejando algo más presentable el pequeño lugar que ahora ocupaban, parecía que se había instaurado la paz. Taelia estaba sentada con los pies cruzados en el césped, en silencio mientras miraba una de las tumbas, recordando el pasado mientras arrancaba césped sin nada más que hacer—
—No me… explico que sigas con vida, dijeron que habían muerto todos—Soltó la señora mayor en un sollozo—
—Pasó muy rápido y quizás debí morir con ellos, pero por suerte o desgracia estoy aquí—Respondió, sin hacer contacto visual, el pequeño parecía haberse dormido a su lado—
—Es difícil escucharlo preguntar todos los días dónde están sus padres, y pregunta por ti también de vez en cuando, te describía como un muñeco porque siempre tenías la misma cara—Taelia le miró de reojo—¿Por qué ocurren estas cosas? —
—Me pregunto lo mismo, pero no obtengo ninguna respuesta—Hubo otro momento de silencio—
—¿Cómo sobreviviste hasta ahora? —
—Poco después del incidente me encontré como mi madre biológica y estoy viviendo con ella desde entonces—Respondió con parsimonia—No es que haya sido fácil, pero desde luego es preferible que estar en la calle—La mujer asintió mientras sonreía vagamente—A decir verdad, cualquier lugar ahora mismo me vale—
—Tantos años y tu actitud sigue igual—Respondió con suavidad—Supongo que ya crecerás—
—Tengo que hacerlo, no porque quiera, sino porque ya no soy una niña—Bastante válido, a opinión de aquella anciana—
Otro momento de silencio mientras Taelia seguía simplemente observando el ambiente, viendo el sol caer en frente suyo.
Xana y Yumi habían reanudado su búsqueda hacía no mucho, no habían obtenido mayores resultados, pero debían hacerlo, debía haber alguna manera de obtener información de aquel hombre por esa zona. Se encontraban dando vueltas por el vecindario, intentando recordar la cara de los visitantes.
—Creo que esto es una pérdida de tiempo—Soltó Yumi, estirando su cuerpo, ligeramente cansada de caminar—
—Llevamos bastante rato y se nos acaba el tiempo—Miró al cielo—Necesitamos hacer algo rápido, necesitamos encontrar una manera de hablar con la gente importante de este lugar—
—¿Cómo? —
—Podemos empezar por hacernos pasar por rameras—Respondió, Yumi soltó un pesado suspiro—
—Me negaría, pero sé que es inútil—Parecía pensárselo—Mientras no pase de hacernos pasar por eso…—
—Cuando logremos algo de intimidad con el tipo no es más que robarle la memoria, será sencillo, pero necesitamos una manera de empezar rápido—
Yumi simplemente seguía a la IA, no sabía exactamente qué plan tenía en mente, pero parecía que el anteriormente mencionado no sería uno malo, si de alguna manera podían obtener una ubicación…
—Si encontramos a alguien tendrás que aguantar lo que te hagan, ya lo sabes—Yumi asintió, la verdad solo de imaginarlo ya se sentía bastante incómoda—
—Luego de esto no quiero saber nada de encargos por un tiempo—La IA soltó una risilla—
—Te quejas demasiado—Subió su mirada al cielo—Tranquila, no será nada malo—
Se sentaron en una plaza circundante al barrio. Xana parecía hacer algo con su móvil mientras la gente iba y venía, con la oscuridad apropiándose cada vez más del sitio, la IA no parecía tener una idea fija de dónde empezar.
Sin quererlo ni beberlo, un coche se detuvo en frente de ellas, había una pareja en un coche que aparentaba ser de alta gama, las personas en el interior parecían haber fijado su mirada en ellas.
—¿Queréis dar un paseo? —Preguntó el hombre, mordiéndose el labio inferior, la IA y Yumi se miraron mutuamente—
—¿Eres de la zona? —Preguntó la IA al hombre, quien asintió—
—Somos de cerca de aquí—Respondió—¿Os apuntáis? —Antes de poder protestar Yumi, la IA asintió—
Se subieron en la parte de atrás del coche, viendo como el hombre arrancaba al tiempo que no dejaba de mirarlas por el retrovisor.
—¿Qué hacían dos linduras como vosotras por aquí? —Por suerte la IA podía entenderle, no Yumi, quien simplemente esperaba alguna respuesta de la IA, ya que apenas reconocía algunas palabras de lo que había aprendido de Ulrich—
—Turismo, y buscando a alguien en particular—Respondió la IA, mirando a la chica, que no estaba demasiado interesada—
—A alguien en particular, ¿eh? —Soltó una risa extraña—Vamos a casa, allí nos divertiremos—Miró a Yumi—No habla mucho tu amiga—
—No te entiende—Miró a Yumi, quien se encogió de hombros mientras le miraba, estaba completamente a la suerte de Xana, de sea lo que quisiese hacer la IA con esa pareja—
La verdad es que tuvieron suerte, el hombre aparcó en una casa particular en la misma zona donde aquel hombre debía estar, se bajaron del coche. Yumi se quedó al lado de la IA, mientras entraban a casa, podía sentir algo raro en el ambiente, cuando se acercaba a la mano de la IA podía sentir un extraño magnetismo, una señal de que estaba interactuando con el ambiente en tiempo real, en un momento de descuido, sintió la mano de la chica acariciando su cuello, se tensó y cuando se giró, sintió una descarga a su alrededor.
Estaban dentro de la casa, no había nadie y las dos personas habían caído al suelo inconscientes.
—¿Ahora qué? —Preguntó la nipona—
—Déjales un segundo—La IA los miraba con detenimiento, hasta que en un momento de silencio ambas personas se pusieron de pie, en sus ojos no había más que la diana de XANA, esa inconfundible diana que hacía no demasiado sería una pésima señal—¿Conocéis a un tal Manfred? —Las dos personas asintieron—Esta persona—Sacó la foto de su mochila, enseñándola—Asintieron otra vez—¿Podéis decirme donde vive? —Comenzaron a balbucear—
—¿Qué les ocurre? —
—Están bajo mi control, pero no pueden expresarse bien, son lo más cercano a un zombi—Suspiró, sacando un papel y un bolígrafo de su mochila, era una hoja pequeña—Aquí—La dejó en el suelo, uno de los presentes comenzó a escribir en ella, la letra era lo más parecida a un jeroglífico, pero la IA podía entenderlo—Gracias por vuestra ayuda—La pareja cayó dormida otra vez—Cuando despierten no recordarán nada—
Yumi auténticamente no entendía nada de lo que estaba pasando, había sido un extraño avance que les había dado la ubicación del objetivo sin apenas esfuerzo.
Salieron de la casa en silencio, no dejando huella alguna.
—Al parecer la casa está unas calles hacia arriba—Soltó la IA—Vamos—Caminaron en silencio y para su buena fortuna, la encontraron. Una casa grande, fachada blanca y de dos pisos, protegida por un muro de piedra ajardinado, sin embargo, no parecía haber nadie en casa—
—¿Tocamos? —Preguntó, ojeando los alrededores—
—No siento presencia alguna dentro de la casa—
—No sientes presencia alguna, porque no hay nadie en casa—Una tercera voz habló encima de ellas, era una femenina algo conocida y para sorpresa de Yumi, ligeramente hostil para la IA—
—¿La aprendiz de Lisa por aquí? —Soltó—¿Me estabas siguiendo? —Maersk asintió—
—Tu presencia es un peligro para la humanidad, pero en realidad solamente estaba ayudándote, Lisa me pidió el favor cuando se informó que te habían visto—
—¿Sabes dónde encontrar a esa persona? —Maersk asintió—
—No me interpondré en tu camino, pero que sepas que terminaremos en el mismo punto, puedes fiarte de mí—La IA pareció enfadarse con eso último—
—¿De ti? —Maersk se sorprendió—Luego de lo ocurrido con Zack no me pienso fiar más de ti, me mentiste, sabías que él estaba cerca y no dijiste nada, de haberlo hecho no tendríamos que habernos preocupado de lo que ocurrió después—
—Lisa quería encontrarlo antes que nadie, por eso no dije nada—Respondió—¿Acaso pensabas que íbamos a dejar que ese muchacho pudiese caer en cualquier sitio? —
—Sabías que lo buscaba, eso no es una excusa para no habérmelo dicho desde un principio—Maersk frunció el ceño—
—Estáis a salvo los dos—
—No gracias a vosotros—
—¡Vale ya! —Soltó Yumi, cansada de esa discusión—No llegaremos a ninguna parte, ¿Dónde está ese tipo para poder irnos ya? —
—De acuerdo, para empezar él se reunirá con gente importante en una mansión no muy lejos de aquí, no sé qué plan llevabas, pero si el caso es matarlo, debes hacerlo antes que lo vean—Resumió Maersk, poniéndose de pie en frente de ellas—
—No matarlo a la primera, pero desde luego un objetivo era hablar con él, sacarle algo de información—Respondió Xana, suspirando—¿Hay alguna manera de entrar a esa reunión de manera inadvertida? —
—El hombre está buscando una dama de compañía para ir a la reunión, se cree que alguien de Guardián pueda estar presente así que…—
—Esa es la razón por la cual tienes que ir—Maersk asintió—Entonces Yumi puede hacerlo perfectamente—
—¿Qué hace una dama de compañía? —Preguntó la nipona, ya que, dependiendo del lugar, esa connotación podía ser diferente—
—Simplemente compañía, no hace falta más, en realidad es únicamente pagarte por acompañarlo y hacer de etiqueta—Maersk pensó—Tenemos su contacto, ¿quieres intentarlo? —Yumi asintió—
—Yo estaré dentro, solo necesito la ubicación—Secundó la IA—
—Iremos—
Tras avisar a Anthea, partieron hacia aquel lugar, desconocido ya que solo seguían a Maersk, quien parecía tener todo bajo control, había sido un golpe de suerte, porque no tenían una pista clara de donde poder encontrar a esa persona. Llegaron a un hotel de una zona a una hora de camino, entraron al mismo.
—Este hotel está controlado por la corporación, así que es seguro estar aquí esta noche—
—¿Cuándo es la reunión? —Preguntó la IA, entrando a una habitación con Maersk y Yumi—
—En unas cuantas horas, así que tenemos poco tiempo para preparar a esta chica—
—No me siento segura de que hacer realmente—Asintió—¿Seguras de que es una buena idea? —
—Tranquila, si fuese mala idea no estaríamos aquí para empezar—
—Ahora solo queda convencerle de que la persona que le llevarás le gustará—Asintió la IA—
—De eso ya me encargo yo—Sacó un móvil —
Pasó un rato no muy largo en el que Maersk habló con alguien por teléfono, convenciéndole de que la persona que le haría compañía sería elegante. Ahora solo quedaba hacerlo realidad, dado a como era Yumi, hacer que se viese elegante o de alguna manera, llamativa, era un problema por solucionar.
—¿Qué clase de ropa tienes en mente? —Preguntó Maersk a Yumi, quien estaba sentada frente a un espejo—
—¿Qué tal un vestido negro? —Maersk ladeó la cabeza un par de veces—
—Podría verse bonito—La IA parecía un poco cansada—
—Ahora de verdad, ¿Por qué estás aquí? —Preguntó a Maersk—
—No es por ti, es por la reunión, sabemos que alguien muy importante de Guardian estará ahí, de hecho, me haré pasar también como dama de compañía de uno de los invitados—Parecía animada con el trabajo—
—¿Lo vais a matar? —
—Vigilarlo—Comenzó a rebuscar algo en una maleta—No queremos causar un alboroto, solo vamos a ver que él no cause ninguno—La IA asintió, le parecía bastante justo—No sabemos nada de él, solo que estará—
—¿Y por qué estás tú en primera línea? —
—Lisa no está muy lejos, aparte que de los agentes que tenemos, no había ninguno con ganas de arriesgarse tanto, y ella pensó que sería bueno para mi entrenamiento—
—Si ella lo dice…—Pasó un rato largo hasta que Yumi quedó lista, ahora vestía con un vestido negro corto y estaba peinada y ligeramente maquillada para parecer ligeramente más mayor, sin quitar su tono gótico y oscuro que llevaba siempre, ahora ya no tenía tanto miedo, estaba curiosa de ver lo que deparaba la misión—Debo decir que quedaste bastante bien—
—Hice un buen trabajo después de todo—Suspiró Maersk—Bueno, quizás debemos marchar ya—
—Te aviso que si las cosas se salen de control tendré que intervenir, así que mantened un ojo abierto—Asintió la IA—Yumi, estaré vigilándote, pero no esperes que llegue rápido a salvarte, si el objetivo es ese hombre y las cosas se salen de control intenta escapar con Maersk, te alcanzaré cuando pueda—La nipona asintió—
—¿Qué es lo peor que puede pasar? — Preguntó a ambas—
—Supongo que lo peor que puede pasar es que haya un alboroto, pero no lo sé—
—Como sea—Suspiró Maersk, sacando un papel con algo escrito en el—Esta es la dirección exacta y el modo de llegar, mantente oculta, sé que estarás ahí, pero por favor no alteres las cosas si no hay necesidad—
—Tranquila, no tenía intención de manteneros en peligro—Miró a Yumi—Buena suerte—
Las tres salieron del hotel, viendo como la IA se perdía entre la oscuridad de la noche, ellas dos, montándose en los asientos traseros de una camioneta negra elegante.
—¿Alguna vez hiciste esto? —Preguntó Maersk a Yumi, quien negó con la cabeza—
—Sigo sin comprender exactamente lo que está ocurriendo—Respondió con claridad, se sentía algo incómoda con ese vestido, le iba algo largo, pero el problema no era ese, sino por el cómo se vería para la persona en cuestión—
—Tú solo intenta ser lo más cercana a él, síguele la corriente e intenta no alarmarte demasiado, él está pagando para que alguien le acompañe, así que espera que por lo menos sea una persona educada—
—Entonces creo que puedo hacerlo—Tomó aire—Espero que el matar a esa persona no… suponga un problema—
—El que lo mate es la menor de tus preocupaciones, realmente debes preocuparte cuando esa chica haga acto de presencia—
—Se defenderme, tranquila—Maersk asintió—
—Entonces está hecho, si algo sale mal solo acércate a mí, saldremos lo antes posible sin ser vistas, no sabemos lo que Edge tiene en mente, pero si su objetivo es matar a Manfred, en esta reunión, lo tiene claro—
—Señorita Maersk, estamos llegando—Anunció el conductor—
—Bien, déjanos en la entrada—
Lo hizo. Se bajaron del coche y pudieron ver una verdadera mansión; un portón grande de metal, con un gran descampado lleno de árboles y pasto, con una mansión grande de dos plantas, un recibidor muy amplio y lo que parecía una sala de reunión para una fiesta, había coches de personas importantes y un gran comité de bienvenida, en la entrada, podía ver a la persona de la foto, acompañada de otras personas con etiqueta. Manfred, vistiendo de la misma manera que en la foto, hizo contacto visual con ellas nada más bajarse de la camioneta.
—Actúa lo más natural posible, déjame hablar a mi—Yumi asintió, siguiendo a Maersk. Se acercaron al grupo de personas—Aquí estamos, como habíamos prometido—
—Bien elegantes, justo como lo esperaba—Mencionó Manfred, con voz grave y tildada, acercándose a Yumi—Supongo que tú eres quien me acompañará esta noche—La nipona asintió—
—No seas malo con ella, está aprendiendo—Suspiró, acercándose a una persona algo anciana, otro de los invitados—
—Tranquila, para lo que haremos aquí, me es más que suficiente—El hombre analizó a Yumi con la mirada, quien estaba tremendamente nerviosa, tenía que pasar de la reacción inicial para poder tranquilizarse. El hombre extendió su codo, le costó un par de segundos comprender que quería que pasase su brazo por él, para caminar juntos. Simplemente obedeció. Miraba con detenimiento el paisaje mientras entraba, viendo como el hombre simplemente hablaba con los demás presentes, acercándose a la puerta de entrada—
—Hay mucha gente—Pensó Yumi en voz alta, dándose cuenta que había dicho algo luego de un rato—
—Es una reunión de gente mayor, es normal que haya tantas personas—Respondió el hombre, algo arrogante, quizás molesto por el aglomeramiento en la entrada—Eres joven comparada con esa chica, pero me vienes perfecta—Apenas si él era más alto que Yumi—Dentro no tienes la obligación de quedarte conmigo, pero evita alejarte, nunca sabes lo que estos sibaritas pueden hacerte—Le parecía raro que un completo desconocido se preocupase por ella, quizás lo que había dicho Maersk le había hecho tomar esa postura. Finalmente entraron, pasando a un gran salón redondo, grande, de dos pisos en el que en el centro había una fuente con una figura de una musa esculpida en mármol, podía ver la gran cantidad de personas dentro—
—Que elegancia—Asintió la nipona—
—Y espera ver a la persona que vive acá—Se fijó que había varias mesas largas con comida y bebida, en el centro, justo a un lado de la fuente, otra mesa con copas de champán. Tomaron una cada uno, de la nada, un presente tomó una pequeña cuchara y golpeó suavemente su copa, llamando la atención de los presentes—Aquí vamos—
—En nombre del jefe me gustaría dar las gracias a los presentes por asistir a esta reunión, por favor, pasadlo bien, recordad que las reuniones con el jefe están ya acordadas—Yumi miró de reojo a Manfred—¡Salud! —
—¡Salud! —Respondieron todos al unísono, comenzando a beber—
—Como dije, eres libre de hacer lo que quieras, a partir de aquí voy por mi cuenta—Yumi asintió, pero le apetecía seguir con él hasta volver a encontrar a Maersk, aún si no la conocía como tal, su presencia era más que suficiente para sentir que no estaba sola en ese lugar—
El hombre hablaba con personas, de cosas tan triviales como cosas que le habían pasado, siguiendo con negocios. Se sentía extraña, las personas presentes eran adultas, elegantes y cuanto menos imponentes, quizás era un punto importante en ese tipo de reuniones, pero había algo raro en el ambiente, parecía que lentamente se iba desconectando del mismo, es como si alguien estuviese tomando control de la situación. En un momento dado, Maersk se puso a su lado.
—¿Ocurre algo? —Le preguntó, ligeramente nerviosa—
—Al parecer Edge se dio cuenta de algo, pero no puedo saber el qué, es todo muy extraño, no te alejes de mí, sea lo que sea, entre dos será más fácil—Yumi asintió—
—Más le vale acabar con esto rápido—Lentamente, una niebla casi imperceptible se apoderó del lugar, nadie lograba verla salvo si estabas muy atento a las luces, pero, aun así, podían confundirse con el humo de los cigarros encendidos, seguía siendo raro, a pesar de hacer la trivial función de invitadas a una fiesta, hablando de manera formal con los demás invitados sin alejarse de sus objetivos, sentían ambas lo mismo, la desconexión con el ambiente y algo poderoso en el sitio—
No había lugar a dudas que algo estaba ocurriendo, pero no podían levantar muchas sospechas, solo ellas se habían dado cuenta y tal parecía que nadie más lo iba a hacer.
—¿Intenta sacarnos de aquí? —Preguntó en voz baja, Yumi suspiró—
—No sé por qué me metí en esto…—Miraba a su alrededor, pero había tantas personas que si debía ver algo en específico no lo estaba haciendo—
—Algo malo está pasando, alejémonos de aquí—Intentó tomar la mano de Yumi, pero cuando lo hizo, la nipona se giró hacia ella—
—Esto ya es absurdo, no siento nada, ¿qué ocurre? —
—Quizás debamos irnos antes que algo malo ocurra de verdad—Maersk estaba de acuerdo, podían usar la excusa de ir al baño para inmiscuirse a otro lugar. Por desgracia, un fuerte pitido y un gran mareo se apoderaron de todos los presentes, cayendo desmayados al suelo como si fuesen un muñeco, excepto por tres personas, Maersk, Yumi y… un desconocido, ese desconocido era llamativo; alto, delgado, de pelo castaño y desordenado no demasiado largo, con una cara alargada y delgada, casi esquelética, con una piel blanca, pero bronceada, con un traje negro de corbata y zapatillas, con una mirada atenta y algo anciano, pero aparentemente joven, estaba de pie, mirando la segunda planta. Ambas chicas fijaron su mirada ahí, pudieron ver la realidad, Xana estaba sentada en el borde de una barandilla de la segunda planta, un aura rojiza rodeaba su piel y su mirada era de enfado—
—Tu presencia es una gran molestia para mí persona—Dijo finalmente la IA—¿Por qué alguien como tú está en un lugar como este? —No parecía querer bajar tan a la ligera, había algo raro en el ambiente—
—No es asunto tuyo, son asuntos internos y no de una chica impulsiva—Respondió el hombre con voz anodina, con la copa de champán en la mano—Si lo que querías era matarme perdiste tu oportunidad cuando entré aquí—
—Estás en mi zona de influencia, nadie puede entrar o salir de ella y puedo interactuar con ella como yo quiera—Saltó del borde, cayendo de pie en la cabeza de la musa—
—¿Entonces cómo es que estas dos jovencitas no están como el resto? —
—Decisión propia, pero podría haberlo hecho—El ambiente hostil era bastante palpable, había una gran lucha de poder entre ambos, ese hombre era la persona de guardián que Maersk estaba vigilando, pero no sabía por qué la IA había reaccionado de esa manera—Estabas intentando controlar a esta gente—
—Sí, fue un astuto movimiento usar la humedad del ambiente para establecer tu campo de influencia, pero, si no puedes ver que estás en desventaja entonces no mereces ese poder—
—¿Quién dice que necesito ventaja para esto? —Se llevó las manos a los bolsillos, el hombre soltó la copa y dio un salto hacia atrás, un segundo antes de que un gran destello apareciese en el suelo—No sé quién seas, pero me estás molestando—
—Entonces, ¿Por qué no me concedes el honor de intentar matarme? —El hombre hizo una reverencia a modo de burla, mirándole con una sonrisa maliciosa—
—Sabía que no os podíais mantener el bajo perfil tan sencillo—Seguía de pie encima de la musa, mirando con detenimiento al hombre, que parecía enfrentar con la mirada a alguien como Xana—
—Me contaron sobre ti, el ser que voló la base de Kiruna con un chasquido, el que eliminó una de nuestras bases con un gran poder… un monstruo creado por el odio de la humanidad hacia ellos mismos—Sonrió—No me he presentado—Hizo otra reverencia—Llámame Claudio, si alguno de nosotros va a morir, que por lo menos lo haga como una persona normal—
—Que así sea—Yumi y Maersk seguían sin comprender muy bien la situación—
—¿No crees que sería de mala educación con el anfitrión destrozar su mansión? —El hombre se giró, acercándose a la salida, Xana de un salto, llegó a ella un momento después que él se marchase—
—¡Edge! —Gritó Maersk—¿¡Qué ocurre!? —
—Ese hombre tiene demasiado poder, ahora es cosa mía, vosotras acabad con Manfred y escapad de aquí, mi área de influencia no durará mucho si tengo que usar mucha energía—Su aura rojiza se intensificó, solo sabía ella lo que estaba pasando para comportarse así, pero al parecer el hombre la había estado provocando durante un buen rato de alguna manera para provocar una respuesta de ese nivel.
La IA salió de la mansión, al momento de hacerlo se hizo la oscuridad, las luces se cortaron, pero no hacía mucha falta, el cielo estaba recubierto de nubes girando en un remolino que tenía como centro una gran esfera de energía de color morado, que desprendía relámpagos por toda la extensión, obra de la energía de la IA para mantener un área grande de control en la cual era difícil mantener una relativa oposición a ella, cualquier persona en esa misma área debía tener una gran capacidad para no caer bajo control de la IA, lo cual era bastante complicado.
—¿Por qué atacarme a mí de todas las personas? —Preguntó el hombre, casi en el portón, girándose hacia la IA al percatarse que no podía escapar—
—Intentabas romper mi área de influencia, si no te bloqueaba o hacía algo al respecto te podrías haber aprovechado de la situación y no puedo permitir eso—La IA extendió los brazos hacia los lados—¿Por qué no intentas salir con vida? —Se acercó al hombre corriendo, cargando su cuerpo de electricidad, aprovechando la humedad del ambiente para hacer una gran reacción eléctrica con cada toque, pero por más que intentaba golpearlo, él simplemente la esquivaba con una gran precisión, no intentaba atacar, solo esquivar mientras observaba los movimientos de la IA—
—Si atacas sin un plan, pueden pasar cosas como estas—En uno de los ataques fallidos de la IA, el hombre extendió su brazo con fuerza, provocando que su antebrazo golpeara con el pecho de la misma, empujándola metros hacia atrás, sintiendo como una gran energía la mandaba hacia atrás aún más—Usa tu energía para distraer al oponente, simula estar en otro sitio, aunque entiendo que siendo tan llamativa a ese nivel pueda ser complicado—Se remangó la camisa, suspirando—
—¿Cómo es que…? —El hombre le miró mientras asentía—
—No eres la única con esa capacidad, ni Lisa la única con un gran poder, soy solo un esbirro o como nos llama él, una de sus manos superiores—
—¿Él? —
—No conoces nada sobre nosotros, y aun así luchas contra nosotros—El hombre suspiró—Soy de la corporación Guardián y en nombre de nuestro líder, Mihaly, queremos evitar la destrucción de la humanidad, el objetivo de Gaia y quizás también el tuyo—
—No soy una supervillana de comics ni de fantasía, mi objetivo a largo plazo se limita a observar y… ¿Por qué no?, quizás tomar el control de la situación—Quizás estaba dando mucha información—
—No te pediré que te unas a nosotros porque sé que no lo harás, pero intenta no meterte en medio de nuestra disputa, no tiene nada que ver contigo—Parecía intentar sacar alguna excusa válida para irse, pero este caso no era nada de un enfrentamiento de Guardián contra Gaia, era de Edge contra él—
—Esta disputa es entre nosotros dos a manera particular, realmente no quiero nada con ninguna de las dos organizaciones porque mi obligación ahora mismo es completamente externa y no atribuyente a ninguna de las dos, sin embargo, quizás sea una bonita ocasión para poder liberar todo mi potencial—Se quitó el buso negro que llevaba, lanzándolo a un lado, dejando ver su blusa esqueleto que apenas le cubría—Vamos a bailar—Cruzó los brazos, liberando un haz de luz que luego se rompió en unos cuantos, provocando que el hombre tuviese que saltar para esquivarlos con gran precisión—
—Si no puedes alcanzar a tu objetivo, intenta utilizar otro método para llegar hasta él—Claudio extendió una de sus manos hacia el frente, liberando haces de luz hacia la IA, quien logró repeler con un campo de repulsión que la cubrió por completo, parecía que el hombre no quería tocarla—
—Aprendes rápido—Suspiró, rompiendo el campo de repulsión—
—Si te toco será lo último que haga, lo sé—El hombre no parecía tener intención de morir a la ligera y si fuese a hacerlo, lo haría con valor y, por qué no, llevándose a la IA por delante—Tus ataques son muy precisos, pero son demasiado lentos para alguien que su habilidad se centra en la esquiva—La IA chasqueó la lengua, tenía que idear otra manera de llegar a él—
—No pensaba causar un gran alboroto, pero…—El cielo pareció rugir con fuerza, el cuerpo de la IA se vio otra vez recubierto de una inestable aura rojiza—Voy a darte el beneficio de enseñarme lo que eres capaz—La IA se lanzó hacia él, tenía que intentar cansarlo de cualquier manera antes de que pudiese aprovechar cualquier error y hacerle mucho daño.
Mientras Xana intentaba descubrir una manera de llegar hasta Claudio, Yumi y Maersk habían salido exactamente por el lado contrario de la mansión, con pocas ganas de entrometerse en una pelea en la que tenían poco o nada que hacer al respecto. Habían acabado con Manfred, para su desgracia la situación se había tornado violenta y el objetivo principal de hablar con el tipo había fracasado, pero había algo más importante en juego; sus propias vidas. Estaban llegando a una arboleda, que parecía cruzar hacia una carretera, desconocían si serían capaz de salir del área de influencia, Maersk, a diferencia de Yumi, podía sentir y ver los límites de la misma, que había inutilizado sus habilidades por culpa de mantener un bajo perfil.
—Casi llegamos—Suspiró la nipona, delante de Maersk—
—Esos dos se están matando, espero que no sea problema para Edge—Sin darse cuenta, habían salido del área de influencia de la IA, había sido quizás voluntario. El caso era que ya habían llegado a la carretera, pero se encontraron con un segundo problema, personas vestidas de gris con pinta de pocos amigos, armas en sus manos y un símbolo que la propia Maersk supo reconocer—Guardián—
—¿Qué rayos pasa con esos tipos y por qué contra nosotras? —
—No importa, solo intenta volver—Se dieron vuelta al tiempo que algunos agentes de la misma corporación les seguían, podían escucharlos y casi sentirlos. Aprovecharon la relativa oscuridad y se ocultaron tras unos árboles, había temblores en la tierra por la violenta pelea atrás de ellas, pero no era suficiente para que les dejasen en paz. Unos hombres cruzaron delante de ellas y Maersk, aprovechando la cercanía, se lanzó sobre uno de ellos, tumbándolo y acertándole un puntapié en el rostro. Yumi por su parte, al ver la reacción de Maersk notó que el segundo hombre desenfundó un arma, pero casi de rebote logró dar una patada alta y quitársela de las manos. Por suerte o desgracia esto no terminó ahí, Yumi se pudo recomponer al momento que el hombre le lanzaba un puñetazo que le acertaba en el pecho, no la desconcentró, pero si la desestabilizó, se apoyó contra un árbol, pero con gran habilidad logró esquivar otro puñetazo y de propina darle otro aún más fuerte al hombre que casi le doblaba en altura. Escuchó que algo cortó el aire, al fijarse, vio a Maersk con una navaja acuchillando a ambos hombres, que yacieron muertos en el suelo—Eres buena—
—Sabía que aprender artes marciales podría venirme bien algún día—Se apoyó contra el árbol—¿Ahora que hacemos? —
—Esperar a que esos dos terminen—Se apoyó al lado de Yumi—
Golpe tras golpe, patada tras patada, partícula tras partícula de energía perdida, la pelea física había llegado a un punto muerto; Ni Xana podía hacerle gran daño a aquel hombre, ni él podía hacerle frente a ella de tal manera que pudiese pararla. Se dejaron un momento de golpes y solo se miraban mutuamente, jadeando con gran fuerza, cubiertos de sudor, pero la IA se estaba molestando ya de esa dinámica, quería acabar con ese hombre de cualquier manera y a como diera lugar.
—Esto se está alargando de manera innecesaria—Suspiró la IA, mirando al cielo, a esa hermosa y ahora peligrosa esfera magenta—
—Eres buena, pero sigues sin demostrarme ese poder del que hablas, ¿de que tienes miedo?, ¿de acabar con todo?, podrías hacer de toda tu destrucción tu propio reino, eres un ángel de la oscuridad, tienes el mundo en tus manos, pero no me rendiré ante esa premisa, lucharé hasta el final—
—¿Miedo de acabar con todo? —La IA se regocijó—Mientras la humanidad siga expandiendo su dominio por el planeta todo esto puede ser mi propio reino, aun cuando una teoría de conspiración pueda decirlo, en algún momento todos serán mis marionetas, solo debo esperar al momento adecuado, solo debo fortalecerme hasta llegar a mi límite—Expandió sus brazos hacia los lados, mirando a Claudio con sus ojos rojizos, brillantes, amenazantes, peligrosos—
—Entonces… ¡Hazlo!, si de verdad tienes la capacidad de hacerlo, demuéstrame que no me equivoco—Sabía que era una excusa del hombre para hacer el mismo movimiento que hizo Zack, atacarla en el momento que preparaba un gran ataque, solo que aquí, lo tenía preparado, la esfera de energía en el cielo tenía un solo cometido, acabar con la vida del planeta de una explosión electromagnética, nadie lo podía saber, esa esfera tenía tanto de su poder, que nadie podía interactuar con ella salvo su creadora, que ahora se veía envuelta en un acto de provocación. Sus manos comenzaron a brillar con un tono rojizo casi como la sangre, creando delante de ella una gran circunferencia que parecía estar alineada con el hombre de Guardián, que solo podía mantenerse duramente en pie, estaba cansado, pero aún con voluntad de luchar—Eres buena, muchacha, pero subestimas a la gente—Hizo lo esperado, se movió con rapidez justo hacia la IA, haciendo un movimiento curvilíneo esquivando la circunferencia, cometiendo el primer error, justo lo que había dicho, la había subestimado; un gran relámpago proveniente de la esfera en el cielo lo alcanzó de lleno, expulsándolo de golpe hacia atrás, recorriendo el suelo unos cuantos metros—Malgastas mucha energía en medidas defensivas, está bien, pero no puedes depender de tu físico, debes utilizar medidas para acabar rápido con tu oponente, no caíste en mi provocación, pero no quieres seguir más con esta pelea—
—Quiero acabar con todo esto de una vez—Había algo raro en su voz, sus ojos rojizos brillaban con gran intensidad, pero su voz ahora era más suave, más silenciosa, ya no era fuerte e imponente como el principio, ahora era callada…—Quizás deba hacerlo, ¿Qué me lo impide? —La esfera en el cielo comenzó a girar sobre si misma a gran velocidad—
—Primero acaba conmigo, no vayas por el camino fácil, aprende más de tus oponentes—Tenía razón, no había aprendido nada de alguien como él, de hecho, era la primera persona que sus consejos eran aplicables a su situación—Luchas hasta tu último aliento, déjame morir como un humano y no como un extraño monstruo—Xana suspiró, asintiendo, pero debía haberse dado cuenta de algo, ya no era del todo Xana. Se lanzó al ataque de aquel hombre, ahora su esquiva habilidad ya no era tal, el cansancio y el ambiente le hacían perder capacidad para ello, por más que lo intentaba no podía contenerla, sus ataques cargados de energía hacían mella en su cuerpo que, cansado de luchar, pedía clamor—
—Teniendo ventaja de saber cómo utilizar tu poder, ¿por qué te contuviste contra mí? —
—Porque descubrí que tienes un gran potencial que intentas explotar, pero sin el conocimiento adecuado no podrás hacerlo, cuando sentí tu presencia supe que este día sería mi fin, pero no quería irme sin antes dejar mi enseñanza a alguien con una gran capacidad, así que quiero que me mates como un humano o… con todo tu poder—Xana siguió atacando al hombre que, al parecer, se había rendido. Había sido una pelea física por una sencilla razón, el hombre lo había pedido así, había visto que podía repeler sus ataques bastante fáciles y el camino sería hacerlos de una manera directa, pero no se esperaba que esa persona le diese gran batalla.
Hubo un momento muerto donde el hombre quedó suspendido en el aire luego de que la IA, con una patada, repeliese un golpe suyo. La misma cayó al suelo bocarriba, extendiendo sus manos hacia adelante, lanzando un haz de luz que chocó contra toda la humanidad del hombre, provocando un gran destello en su cuerpo, expulsando su energía del cuerpo, cayendo bocarriba sin capacidad para levantarse. Habían pasado ya una hora y media de pelea sin parar, la IA estaba agotada por culpa del gran uso de su energía y aún parecía no haberse acabado, pero visto de esta manera…
—Perdí—Suspiró. La IA se acercó, manteniendo una distancia segura—
—Supongo que hasta aquí llegó la pelea—El hombre, asintió mientras se reía, confundiendo a la IA—
—Nunca pensé que moriría a manos de alguien mejor que yo, pero es un honor—El hombre aún parecía mantener el honor hasta el final. Sacó algo de su bolsillo, una cartera que abrió, contenía la foto de un par de personas—
—Sé que me espera gente más peligrosa, pero aprendí bastante contigo… fue bonito mientras duró—El hombre asintió—
—Chica… no dejes que esa gente te arrastre contigo, ellos no mandan sobre ti, tú mandas sobre todos ellos, evita meterte en la pelea de Gaia y Guardián, nada bueno saldrá de ahí—Se aquejó—No siento mis piernas… se siente cálido—Del golpe de energía de la IA, había expulsado toda de su cuerpo, ahora solo era cuestión de tiempo en que su cuerpo se apagase—Déjame morir con tu poder—La IA asintió—No olvides nunca tu lucha, mantén siempre una parte de ti segura de tu objetivo y por nada del mundo lo evites… si la lucha de esas dos corporaciones sigue escalando… será el fin de todo, no dejes que lo sea por culpa de ellos, has de este mundo tu propio reino—Jadeaba con fuerza mientras sostenía la cartera junto a su pecho—Ese maldito de Mihaly no se detendrá hasta ver a Lisa en la tumba, y esa maldita vieja no se detendrá hasta vernos a todos muertos—
—¿Entonces cuál es el camino correcto? —
—El que te guíe a tu objetivo, tú eres la que debe hacerlo, no guiarte por el camino fácil, todo lo fácil al final sale caro, por favor, no mueras en el intento—La IA se alejó, recordando las palabras de aquel moribundo hombre—
—Cumpliré tu deseo—Extendió los brazos hacia los lados, recubriendo el área de un aura magenta—
—No dejes que Lisa se haga con el control de la herencia de las Siete Estrellas, por favor… —
—¿Qué? —No había entendido nada de lo que había dicho el hombre—
—Utilizará todo como excusa para mataros a todos, si eso llega a pasar, toda la lucha habrá sido en vano—Xana tendría que investigar sobre ello, desconocía lo de la llamada Herencia, quizás era algo que él consideraba importante o… una alucinación de alguien ya moribundo—
—Lo haré—Un gran destello de luz cayó sobre el hombre, proveniente del cielo nocturno e iluminando todo a su alrededor, viendo como toda la vestimenta de Claudio se desvanecía en un segundo, incluyendo su humanidad, ahora convertida en poco más que materia, la esfera en el cielo comenzaba a desaparecer, con la energía volviendo a la IA, que sentía su cuerpo arder del calor—¿Por qué se dejó matar? —Pensó en voz baja. Tranquilamente podía haber perdido, puesto que su intención era hacer que Yumi y Maersk escapasen para luego ella hacerlo, el hombre tenía más energía que ella y más capacidad para usarla, pero por alguna razón se contuvo y solo se detuvo a enseñarle a cómo utilizarla, era extraño, una pelea sin sentido con una derrota para nada valerosa para ella, puesto que seguía confundida—
—¿Qué acaba de pasar? —Preguntó Maersk, acercándose con Yumi a los pocos minutos—Ese hombre era de los más importantes de Guardián—
—Se dejó matar… por alguna razón—Miró al suelo, donde hasta hace nada yacía aquél hombre. Soltó un quejido, cayendo de rodillas, sentía sangre bajar por su torso, había cruzado su límite usando energía para apagar el dolor en su cuerpo que, cuando el efecto se quitó, su cuerpo le recordó que seguía con vida—
—Tranquila, descansa—La dejaron sobre la fuente de la entrada, intentando controlar el sangrado de alguna manera, no era mucho, pero era mejor contenerlo para evitar alguna sorpresa—¿Ahora qué? —
—Fracasamos en nuestra misión de hablar con el hombre por culpa de esto—Suspiró Yumi, sentándose al lado de la IA—
—Lo siento, debía hacerlo, sino este hombre podría haberos controlado de la misma manera que lo hice yo—Presionaba su pecho para parar una pequeña, pero sangrante herida—De todas maneras, pudo ser bastante peor—Alzó la mirada al ver bastantes luces acercarse desde la entrada, agentes de Gaia—
—Pensamos que le había ocurrido algo, señorita Maersk—Señaló un hombre al verlas, nada más terminó la oración la iluminación de todo el sector volvió—
—Estoy bien, ahora debemos arreglar todo este alboroto—
Un rato pasó hasta que Maersk y Yumi pudieron arreglar todo el alboroto causado por Xana. Se fueron del lugar pasada una hora, volviendo al hotel donde salieron originalmente con Maersk. Se encontraban en su habitación.
—¿Estáis las dos bien? —Preguntó Xana, volviéndose a colocar su buso al comprobar que la herida había dejado de sangrar, y habiéndose limpiado previamente—
—Sí, salvo alguna sorpresa, la verdad no pasó gran cosa—Respondió Yumi—
—Tuviste suerte, esto es lo más suave que le ha tocado a alguno de vosotros—Sonrió vagamente—
—Pudo ser peor—Atajó Maersk—Ahora tendrás que hablar con Lisa para explicarle lo ocurrido—
—La verdad es que es lo último que quiero hacer, pero si insistes…—Se puso de pie, tenía muchísimo calor, su cuerpo no dejaba de emanar calor y, aunque iba en descenso, no dejaba de ser bastante molesto—
—No es por nada, pero si Claudio está muerto tendremos que idear una manera que se crean que no tuvimos nada que ver, lo suyo será hacerlo, pero de eso nos podemos encargar—
—Lisa os está esperando—Dijo alguien tras la puerta en un momento de silencio—
Bajaron del hotel a la calle, viendo un coche algo grande que parecía tener un comité de bienvenida, una limusina. Se montaron en ella, encontrándose con la anciana.
—Escuché de la pelea, ¿Qué salió mal? —Preguntó de primeras, directo al grano—
—Ese hombre estaba intentando hacer con el control del lugar, yo lo tenía bajo control, pero al final tuve que intervenir para evitar cualquier peligro—Respondió la IA—
—¿Sabías que ese hombre era de Guardián? —
—Lo supuse cuando lo vi más detalladamente—Suspiró—No quería matarlo, pero él insistió—
—Esto será un gran escándalo cuando Mihaly se dé cuenta, nos encargaremos de aclarar la situación—La IA asintió—
—Ese hombre sabía usar la energía de su cuerpo muy bien, tenía superioridad contra mí, ¿Por qué se dejó matar? —
—Oh, querida, algunas personas no abandonan sus ideales por más malas que parezcan, no sabremos ya que tenía en mente, pero puedo asegurarte que supo reconocer una persona con muchísimo potencial—Lisa sonrió vagamente mientras asentía, jugando con sus dedos—
—La razón de que estuviéramos ahí era un hombre al que queríamos interrogar, por eso vine con ella—Señalando a Yumi, quien ya iba vestida con sus ropas habituales—Pero las cosas cambiaron cuando Claudio hizo acto de presencia y tuvimos que matarlo—
—Una pena, pero evitaste un mal mayor, quizás—Se mostraba muy insegura, algo raro en ella—¿Qué harás? —
—Volver a casa—Respondió—Esa pelea no fue más que un contratiempo, pero aprendí bastante con él—
—Me gustaría hablar contigo en las instalaciones de Gaia, pero lo mejor será otro día cuando vayas con ese chico, Zack—
—¿Qué interés tienes en él? —
—En ambos, quiero ver que tanto poder podéis tener juntos y ya sabes, seguir enseñándote cosas que solo tú y yo podemos entender—Xana asintió—Independientemente de lo ocurrido en Bretaña, Guardián sigue con su lucha de hacerse con más control de territorio dentro del país, cuando estés con Zack os explicaré la verdad de lo que ocurrió y quizás tengas que ir con el líder de Guardián para comprobarlo—
—¿Está bien que hagamos eso? —Parecía insegura—
—Eres neutral, lo saben bien, se los dejé en claro, tengo una muy vieja historia con Mihaly, es un viejo lobo con el que tengo una disputa personal—
—Entiendo, quizás deba ir a descansar—
No quería cruzar más palabras con Lisa, de verdad quería ir a descansar lo más posible.
Salieron del lugar, caminando por las calles de la ciudad hacia un hotel donde Anthea les había indicado. Estaba lloviznando.
—Pensé que íbamos a presenciar alguna explosión—Suspiró Yumi, mirando el nublado cielo—
—Me contuve demasiado al ver que no importaba lo que hiciese, él podía pararlo fácilmente—Suspiró, llevaba el buso en sus hombros—Mis manos no me dejan de cosquillear—Se rascaba las palmas de las manos constantemente por culpa de un picor similar a cuando se te duerme la mano, un pinchazo continuo muy incómodo a largo plazo—
—¿Y ahora? —
—Supongo que tendremos que volver a casa—Llegaron al hotel, subiendo rápidamente a una habitación donde se encontraban todos, incluyendo a un invitado—Volvimos—
—¿Qué ocurrió? —Preguntó Aelita de primeras, al ver a la IA con su cuerpo ligeramente magullado—
—Un contratiempo inesperado, no pudimos hablar con Manfred, hubo un problema en medio de todo—Asintió la IA, mirando a Anthea, quien chasqueó con la lengua mientras se ponía de pie—
—¿Estáis las dos bien? —Ambas asintieron—Entonces no hay ningún problema, aunque pudo haber sido mejor—
—¿Cuándo llegaste? —Preguntó Yumi a Ulrich luego de saludarlo—
—Esta tarde, estuve con Aelita porque pensé que terminaríais antes, pero está bien—Respondió el alemán—
—¿Ahora que haremos? —Preguntó la IA, estirando su cuerpo—
—Lo mejor será que descanses, pareces cansada, así que nos iremos mañana—Taelia estaba con un cuaderno en sus manos, recostada sobre una de las camas, dibujando algo no queriendo entrar en la conversación—Tenéis una habitación para vosotros, yo me quedaré con Taelia esta noche—Nadie parecía tener algo en contra de ello, al fin y al cabo, ella era la principal razón por la que habían ido a ese lugar—
Llegaron a otra habitación más amplia, con una bonita vista y una terraza por la cual poder asomarse, no era gran cosa, pero era suficiente para los cuatro. La IA se recostó en la cama mientras intentaba bajar el calor en su cuerpo producido por la electricidad.
—¿De verdad tenemos que dormir en la misma cama? —Susurró Yumi al darse cuenta de la situación—
—Puedo dormir con Ulrich—Le dijo la IA con una sonrisa perezosa, sintió la mirada de Aelita—
—Tú te quedas conmigo—Miró a la IA, luego a Yumi—Debería darme un baño—
—Te acompaño—Secundó la nipona, dejando a Ulrich y la IA en la habitación—
—¿Fue difícil? —Preguntó el alemán a la IA—
—¿Para ella? —él asintió—Ni idea, hubo un rato muy largo donde no la estaba viendo por culpa de algo importante, pero es Yumi, algo como esto no le supondría dificultad, ya os salvó muchas veces—
—A veces pienso que ella es mejor que yo—
—No es que lo pienses, lo es—Eso fue una respuesta que rondaba la mente de Ulrich. La IA alzó su torso, sentándose en la cama—Estoy segura que Aelita te diría que no te compares con ella, Yumi es un mundo aparte, solo no hagas las tonterías que hacías antes o seguramente se hartará de ti—
—No creo que lo haga tan fácil ahora que ya no está William—Parecía bastante seguro de esa respuesta—
—Te recuerdo que no sabemos dónde irá el próximo curso, tiene liceo—
—Kadic—Seguía estando seguro—
—Más os vale—Se puso de pie. Ulrich simplemente se quedó pensando su respuesta mientas la IA se acercaba al balcón—
—Dame un consejo—
—¿Para qué? —
—Para que Yumi no se canse de mi—
—Pregúntale a Aelita—
—No es justo—
—¿Te olvidas con quién estás hablando? —Ulrich chasqueó la lengua—Aelita es su mejor amiga, así que puedes preguntarle, solo no te sorprendas si te sale con alguna tontería—
—Supongo que tendré que esperar—
—Tienes el dinero que te dieron por ir conmigo a buscar a esa chica, ¿verdad? —Ulrich asintió—Entonces piensa en algo para ella, pero no te pases, pregúntale primero a Aelita—
Pasó un rato muerto mientas ambos parecían no querer decir nada, no es que tuviesen algo que hablar realmente, su relación había sido distante, pocas veces la IA parecía tener algún interés en Ulrich, de todo el grupo, para la IA, era el más irrelevante.
Sin embargo, ya fuese por cobardía o falta de ganas simplemente, no preguntó nada a la pelirrosa, tampoco veía una oportunidad para hacerlo. La IA se pasó bastante rato sentada en el balcón hasta el rato en el que parecía que todos se habían ido a dormir, poniéndose de pie y recostándose junto a Aelita, cubriéndose con la misma manta. Pasó su brazo por encima mientras intentaba dormir, sintiendo como Aelita se giraba hacia ella, mirándole con detenimiento, no parecía estar dormida.
—Pensé que estarías dormida —Susurró la IA, mirándole—
—Simplemente no podía dormir—Miraba fijamente a la IA, analizando su cuerpo viendo algunas marcas en su cuerpo—Tienes algunas marcas más en tu cuerpo—
—Me peleé con alguien, eso es todo—Aelita soltó un suspiro—No fue intencional, lo juro—
—De acuerdo—Hubo un momento de silencio—Espero tengamos un verano tranquilo—Se apoyó sobre la albina, quien tomó sus manos—
Pasaron una noche relativamente tranquila, al final no fue tanto problema el hacer que Ulrich y Yumi durmiesen en la misma cama.
Por desgracia, las obligaciones de tiempo hicieron que bastante temprano tuviesen que volver a casa.
Habían pasado un par de días desde ese pequeño incidente y las cosas habían vuelto a la normalidad, había sido un extraño final.
No obstante, la IA aún tenía cosas que hacer, ahora ya era tiempo de comenzar con Milly, forzarla de alguna manera que quisiese hacer lo que la IA le pidiese, solo iba a tratarla como un experimento, no tenía en mente que realmente fuese a ser de utilidad real para ella, si lo llegase a ser sería un añadido. Se escabulló por el laboratorio hasta llegar a la habitación donde se encontraba la pelirroja, era de noche y no parecía haber mucha guardia en ese piso, se encontraba más bien aislada del resto, quizás, por su propia seguridad. La IA entró, encontrándola dormida, quedándose de pie a un lado, mientras la observaba.
—Si puedo hacer que vuelva a la normalidad será un logro—Pensó en voz alta, viendo en un escritorio al lado de la camilla donde estaba recostada la chica un portapapeles, tenía algunas anotaciones escritas, las leyó por encima, viendo que simplemente era un registro de su estado, remarcando el día donde la IA le inyectó el cóctel químico. Las anotaciones variaban a partir de ese día, parecía no haber tenido una fuerte reacción al mismo, pero el dolor a veces era insoportable. Quería seguir leyendo, pero una serie de leves quejidos en su espalda llamaron su atención—Estás despierta—Dijo en voz baja—
—Me duele todo—Respondió, intentando esconder el dolor—¿Qué haces aquí? —
—¿Te olvidaste de lo que te dije el otro día? —Preguntó la IA, dejando al portapapeles en su sitio, acercándose—Te dije que te ayudaría a vengarte de esa gente y por lo visto seguimos el mismo camino—Milly no parecía entender mucho su punto; estaba enfadada, si, pero por alguna razón no había tenido muchas ganas de pensar en ello, no sabía nada acerca de esas personas sobre las que la IA le estaba hablando—
—Es que… no sé quienes son, apenas sé quien es la persona que lo hizo—Alzó su torso, sentándose en la camilla—
—Te enseñaré todo, es lo menos que puedo hacer, solo tendrás que hacer lo que te diga y si vas a aceptar te digo una cosa; los sermones no son lo mío, no hay mejor profesor que un hueso roto—
—¿Tengo otra opción? —
—Claro que tienes otra opción, negarte, pero teniendo en cuenta la clase de personas que te están siguiendo no sé si sea buena idea—
—¿Crees que les hagan daño a Tamiya o Hiroki? —
—No tendría sentido, eres el objetivo, no es que quieran algo de ti, te quieren muerta—Milly había entendido el significado de esas palabras; no querían algo de ella como para hacerle daño de esa manera, querían verla muerta así que solo sería ella el objetivo—
—Si dejo que me ayudes… ¿Volveré a la normalidad? —
—Posiblemente, no me servirías de nada si no pudieses mover las piernas—Ya se estaba haciendo idea del tipo de persona que era la IA—
—De acuerdo, por el momento te haré caso—No es que tuviese muchas opciones—
—Entonces me encargaré de ti de ahora en adelante, lo primero será que te recuperes, luego te enseñaré todo lo que necesitas saber sobre la gente que te sigue—
La IA había logrado hacer que Milly, de alguna manera, cayera en su trampa, pero no tenía nada malo pensado para ella, solo quería hacer un experimento; ver que tanto podía aguantar y cual era su límite de mejora para hacerla virtualmente intocable, tenía un inmenso camino por delante, empezando por su infantil personalidad, pero podía amasarla, solo necesitaba paciencia y un buen plan.
—CONTINUARÁ—
Próximo capítulo: Movimiento involuntario
Gracias por leer, espero que el capítulo sea de vuestro agrado.
Uh… odio la temporada de exámenes, consume todas mis ganas y encima hace calor, ¡AH!
Bueno, dejando los delirios aparte… nada, creo que salvo mi excusa de siempre de "Corté muy pronto el capítulo", no tengo nada más que aportar.
Bueno, la verdad no me gustó el último cuarto del capítulo, siendo honesto no sabía que poner para no hacer más innecesario lo de Ulrich, pero… por más que lo miraba no encontraba inspiración y para no dejar esto abandonado, lo dejé directamente así.
Entonces…
Reviews:
Titokenny01: Si, la verdad es que el coctel químico que le inyectó a la pobre puede llegar a ser peligroso, lo iremos viendo. Lo de Gaia, si, ten en cuenta que están tratando en un terreno donde solo hay dos participantes, cualquier cosa que haga la IA que tenga que ver con ellos es muy posible que cualquiera de Gaia ya lo sepa de antemano. Sobre la idea… no te voy a decir que no lo había pensado, pero la verdad es que es una interesante idea. No diré más, porque soy demasiado bocazas a veces y terminaré dando algún spoiler. Muchísimas gracias, Víctor, Espero que el capítulo sea de tu total agrado.
Draoptimusstar3: Muchísimas gracias por comentar, Draop, espero que el capítulo sea de tu total agrado.
Y eso, muchas gracias, nos vemos.
Adiós
Never give up, Never Surrender
