Cap_02

El mundo se volvió caótico desde el instante en la que su burbuja se vio reventada.

Se concentró solo en salir del aula pero luego de ello, el mundo estallo en su cabeza. El ruido de los pasos, las hojas de los libros pasando, las sillas o hasta de los bolígrafos rozando el papel se vio notado por su oído como si lo estuvieran haciendo a un volumen altísimo a su lado. Con los aromas pasaba lo mismo, golpeando su cabeza sin parar hasta el punto que le estaba desgarrando.

Sus ojos brillaron en un tono ámbar brillante y sus colmillos se volvieron visibles, mostrándose en un gruñido profundo y sanguinario.

Siempre había pensado que su mente y la de su lobo se hallaban separados por una pared de cristal donde ambos podían ver al otro y tal vez controlarse mutuamente. Era una linda forma de ver su cabeza separado en dos entidades diferentes y por fortuna la humana, dominaba al lobo pero no en esta ocasión. Podía sentir, casi ver como su lobo estaba destrozando el cristal a golpes y lo peor es que estaba segura de que lo haría.

Y por primera vez en su vida, tuvo miedo de esa parte de ella.

El estruendo del mundo la hizo salir de su miedo para concentrarse en una única idea.

Alejarse.

Pero el miedo le impidió salir para transformarse. Algo en su interior le grito que no lo hiciera. Que era peligroso.

Cerrando sus ojos y cortando sus labios que obligo a ocultar sus colmillos a pesar del dolor y la sangre que inundo su boca. Se apresuró por los pasillos siguiendo el camino por instinto hasta su habitación.

Lanzando sus libros con violencia al entrar. Cerrando con un atronador golpe.

Su magia vibraba en todo su cuerpo. Se sentía como si fuera a perder el control pero si lo hacía se preguntaba que tan débil quedaría su conciencia humana que era la única que detenía a su lobo.

Y entonces solo tuvo una idea. Con doloroso esfuerzo logro concentrarse en dos hechizos. Sellado e Insonorización.

Nadie debía saber lo que ocurría o escuchar sus lamentos.

Su cuerpo comenzó a calentarse. Tanto como para parecer que su sangre estaba hirviendo y sus miembros comenzaron a ser comprimidos, a punto de destrozarse. Estaba por cambiar y no estaba segura del porqué.

El primer crujido de un hueso rompiéndose le hizo soltar un grito. No era nada parecido a sus usuales cambios. Ese dolor ya casi no era notorio. No. Este era más parecido a su primer cambio. Le destrozaba y era brutal, agresivo y casi cruel y todo empeoraba y multiplicaba porque luchaba por impedirlo.

Entre el dolor y el caos del mundo que no podía ser silenciado. Y el desgarre que su lobo estaba haciendo en su cuerpo y mente. Aun pudo reaccionar no solo a gritar con todas sus fuerzas sino a romper la cadena de su collar familiar.

Un llamado de auxilio.

Golpeo el suelo con sus rodillas y enterró sus manos entre sus cabellos tratando de cubrir sus oídos. Apretó sus dientes y trato de no moverse esperando que eso bastara para que el dolor disminuyera pero no lo hizo...

-¡Hope! ¡¿Qué pasa?! –. Exclamo Freya Mikaelson apareciendo de la nada. Sintiendo como su pecho se presionaba al ver a su sobrina en el suelo y su habitación echa un desastre.

La cobriza negó con fuerza –N-no lo... no lo sé... –. Soltó un grito y de la nada elevo sus puños para luego estrellarlos con todas sus fuerzas contra el suelo –Me... me estoy volviendo... ¡loca!

Freya se apresuró hacia su sobrina, deseando poder tocarla en el momento en que se puso a cuclillas a su lado. Trato de tomarla entre sus brazos y protegerla al escuchar los atronadores crujidos de sus huesos que se rompían en pedazos pero no cambiaban de forma o lo intentaban pero la terrible realidad de no estar ahí la golpeo para su propio dolor y preocupación.

Pero sobre todo. La golpeo la magia que irradiaba su sobrina que no dejaba de quejarse. Confusa vio el desastre y aún más, noto esa magia en tono rojizo que se unía a la mano de su sobrina y que abandonaba la habitación. Un hilillo aunque delgado, resistente.

-¿Qué es esto? Hope.

-N-no lo sé... –. Gruño la cobriza y sin poder aguantarlo más se forzó a apresurarse hacia su librero. Sin importarle nada lanzo sus libros al suelo para dejar a la vista una pequeña caja fuerte que abrió en un segundo.

Freya soltó una exclamación al ver como su sobrina sacaba una gruesa jeringa llena de un líquido negruzco –¡Hope! ¡¿Qué es...?!

Hope apretó los dientes y miro la punta de la aguja con decisión –Wolfsbane concentrado con un toque de verbena y bastante morfina. Un noqueador… en teoría.

-¡No…! –. Grito Freya tratando de frenarla.

La aguja se apresuró hacia el pecho de la cobriza a pesar del grito de su tía. Dolorosamente atravesó piel y musculo hasta perforar su corazón, arrancando un grito fusionado con gruñido. Justo en el centro del órgano, el líquido fue liberado y el ardor de mil flamas se extendió con velocidad por todo el cuerpo de la loba hasta su cabeza.

Todo se oscureció en un instante.

Todo desapareció. Todo excepto la confortable calidez en su pecho y el suave aroma a tenues flores…

xxxOxxxOxxx

Ver a Hope desaparecer tras la puerta golpeo de alguna forma a Josie.

Por un momento solo se concentró en el vacío que le dejo la partida.

En como momentos atrás sentía la necesidad de aferrarse a la loba. Las viejas memorias de sus momentos juntas, en especial desde el año pasado cuando al fin se habían hecho amigas rodaban por su cabeza. Sobre todo aquellos pequeños momentos que le robaban sonrisas tontas.

Sintió como la magia del lazo se filtró bajo su piel y sin ningún impedimento rodeo su corazón que dio un vuelco al sentir como el perfume de la loba le golpeaba el rostro por un momento. Su corazón se aceleró y sintió como una sonrisa torpe y llena de ilusión trataba de formarse por sus labios pero no lo permitió.

Calma. Confianza. Admiración. Seguridad. Amor.

Esas emociones predominantes en su cabeza fueron las que inspiraron la sonrisa pero no sabía de dónde venían o porque las sentía. Eran arrolladoras. Nítidas y estridentes en su pecho.

Cuando la loba partió, la calidez disminuyo y el aroma se perdió así como los sentimientos. Este sorpresivo vacío le aturdió por completo.

Le dolió el abandono que se instaló en su pecho en su lugar. Una exclamación llena de dolor y necesidad se quedó atorada en su garganta y en su cabeza el susurro de que fuera tras la loba se instaló. Muy lejano y casi inaudible pero aun así estaba ahí.

Ella lo sentía así como podía sentir su corazón entrujarse bajo su simple recuerdo.

La magia se volvió un torbellino sin control a su alrededor. Por cada poro de su piel se filtraba y escapaba sin autorización. Su respiración se agito y sus ojos se llenaron de pánico.

Todo se volvió demasiado y Lizzie lo vio. Lo sintió junto a ella.

Aferro su mano entre las suyas y se recargo en su hombro para que pareciera que solo le contaba un secreto como siempre pero en su lugar no dejaba de susurrar que todo estaba bien. Que estaba ahí. Que tenía que relajarse y respirar. Solo respirar.

Por primera vez. Josie era la que estaba a punto de tener un episodio.

xxxOxxxOxxx

Entre la oscuridad había tranquilidad.

Un refugio de la tormenta en su cabeza. Un silencio sepulcral que le dejo respirar de nuevo y suspiro aliviada por un momento antes de ver a su alrededor con atención.

Sentía una presión a su alrededor. No estaba sola.

Busco. Dispuesta a enfrentar lo que fuera que le hacía tensarse y tratar de despertar sus instintos al máximo para protegerse pero no había nada más que oscuridad.

Solo era ella.

Solo una oscuridad profunda que comenzó a parecerle atemorizante.

Un golpe la sobresalto y al girarse entre la negrura vio un par de resplandores ámbar…

-Cariño. Dime algo… –. Susurro Freya desesperada. Arrodillada junto al cuerpo de su sobrina al que aun intentaba tocar o lo que fuera para dejarle saber que estaba ahí.

-Auch…

Freya rio secamente por lo bajo y cerro sus ojos dejando que una lagrima de alivio se deslizara por su mejilla –Otra cosa.

-¿Qué? ¿Mi auch no es lo suficientemente bueno? –. Susurro Hope con voz áspera y pesada. Sus ojos se abrieron poco a poco sintiendo como sus parpados eran pesados pero no se movió más. No podía aunque lo intentara.

Su tía volvió a reír –¿Cómo te sientes?

-Atontada… pero mejor… –. Acepto soltando un leve suspiro. Su cabeza punzaba pausadamente pero era soportable y apenas estaba retomando la sensación así que no se apresuró o preocupo demasiado –¿Sabes qué paso?

-Lo sé –. Dijo Freya asintiendo y frunciendo su ceño con enojo –Ya le grite a Alaric… por cierto, esta fuera aporreando la puerta sin parar.

Hope sonrió levemente –Detenlo. Me gusta mi puerta y es capaz de volarla por los aires si enloquece. Y enloquecer es su especialidad.

Le miro con duda. Con evidente negación pero los ojos cristalinos de su sobrina le convencieron de que la escuchara. Fue una simple mirada. Una súplica silenciosa que su tía supo reconocer.

Soltó un suspiro y se puso de pie –Esta bien. Ahora vuelvo.

-No iré a ningún lado –. Aseguro la cobriza con evidente burla en su voz que hizo rodar los ojos a su tía antes de que dejara la habitación.

Hope suspiro silenciosamente y ahora que estaba a solas se atrevió a moverse. No quería hacerlo antes por temor a que algo fuera mal, ya no confiaba en su propio cuerpo y no quería preocupar más a su tía. Se giró para descansar su espalda en el suelo sintiendo como la frescura de este era relajante en sus adoloridos músculos, sentía como si hubiera pasado todo el día haciendo ejercicio así que cuando decidió tomar asiento un gruñido profundo escapo de su garganta.

Miro a su alrededor, confusa por la pequeña destrucción que hizo sin realmente recordarlo aunque no le sorprendió. El mundo había sido demasiado en todos los sentidos. Suspiro aliviada al no sentir nada extraño pero luego elevo su mano al nivel de su rostro, acercándola para ver mejor el hilo mágico que rodeaba su meñique casi formando un anillo pero subía como si fuera una enredadera bien aferrada a todo su dedo. Cubriéndolo con un hermoso patrón.

La confortable sensación que desprendía le robo una leve sonrisa que desapareció en el instante en que su tía volvió a la habitación. Bajo su mano y le oculto tras su espalda casi como si hubiera hecho algo malo. Manteniendo sus ojos en Freya que le sonrió suavemente.

-Listo pero dice que no se ira hasta que te vea el mismo.

-No esperaba menos –. Suspiro con una sonrisa leve que duró poco. Su ceño se frunció –¿Qué paso?

Freya se sentó frente a ella y soltó un suspiro –Un hechizo antiguo. Muy antiguo.

-¿Es malo? Creo haber escuchado que ya eran inútiles –. Dijo a la vez que cerraba uno de sus ojos ante el dolor que le hizo fruncir el ceño. El solo intentar recordar era demasiado.

Su tía miro sus gestos con preocupación –Lo son para los demás –. Negó con un enojo creciente en su estómago que fue notorio en sus facciones que se endurecieron –Hope. Eres la nieta de una de las primeras brujas de la historia. Sangre antigua corre por tus venas, al igual que magia muy pura.

Hope bufo con molestia –Genial. ¿Y qué hizo? Creo que alcance a ver algo sobre almas gemelas o…

-Así es.

El ceño de la cobriza se fue frunciendo lentamente –Y… ¡Y me vinculo a Josie! –. Exclamo dando un salto que la hizo soltar un quejido –Mierda.

-Lenguaje.

Hope apretó sus labios con enojo a la vez que bajaba su mirada para notar la jeringa que seguía clavada en su pecho –Caraj… Repámpanos –. Gruño tomándola y sacándola de un tirón simple que ilumino sus ojos por un segundo –¿Eso fue lo suficiente correcto para tus oídos?

Su tía rio rodando sus ojos –Tan molesta como tu padre.

Hope sonrió ante el comentario pero luego volvió a su semblante serio donde sus labios se mantenían cerrados con firmeza sin apretar pero lo suficiente para que cualquiera viera que solo guardaba sus palabras. Un rasgo más que heredó de su padre que siempre le dijo que no dejara ir todo lo que pasaba por su mente. A nadie.

-¿Cómo lo deshago?

Freya la miro a los ojos intentando darle algo de seguridad que la loba buscaba desesperada. Podía ver su miedo vibrando bajo su piel y arañando su interior –No puedes.

-¡¿Qué?! –. Exclamo Hope frunciendo su ceño por completo y apretando sus puños tan fuerte que sus nudillos crujieron sonoramente –No. No puedo estar unida a Josie –. Negó con firmeza en varias ocasiones –La última vez que alguien se vinculó a un Mikaelson no salió bien. Tiene que haber alguna forma…

-No la hay.

-¡Debe! –. Rugió la cobriza a la vez que sus ojos resplandecían.

-Cálmate –. Susurro Freya elevando sus manos.

-No puedo calmarme –. Gruño la loba poniéndose de pie y comenzando un ir y venir por la habitación en un vago intento de desahogo. Paso su mano por sus cabellos con enojo –No es seguro. ¿No lo entiendes? Alguien ya podría haberlo visto y eso pone en riesgo a Josie –. Se detuvo frente a su tía que se mantenía tranquila en su asiento y ver eso sola la hizo volver a rugir –¡¿Qué no lo entiendes?!

-Te importa –. Afirmo la rubia con una leve sonrisa.

Hope negó con incredulidad y volvió a su paseo frustrado –Claro que lo hace. Es Josie –. Trato de explicar a toda velocidad –Es la hija del Dr. Saltzman y Caroline Forbes. Al menos ella era amiga de papá y él siempre ha cuidado de mí aun cuando yo no quiera. Ella… ella… ella es mi amiga y… y…

-Y te gusta –. Finalizo Freya con una sonrisa llena de seguridad.

Al instante. Hope detuvo sus pasos y la miro con fiereza casi dispuesta a golpearla para que retirada sus palabras pero poco a poco su valor se fue disolviendo ante la mirada de su tía. Esa mirada penetrante que le decía que podía ver todo lo que ocultaba y siempre le funcionaba.

Soltó un suspiro y sus hombros cayeron a la vez que su mirada –He estado enamorada de ella desde los 14 o tal vez más… –. Elevo sus hombros tratando de quitarle importancia –Nunca se lo he dicho. Ella no está hecha para mí…

La rubia dejo de sonreir y le miro con ternura. Se puso de pie y se acercó a ella para confortarla reconociendo todo el miedo que siempre vio en su hermano. Y susurro –Esa magia que te rodea dice lo contrario.

-No… –. Susurro Hope mirando hacia su mano y luego sacudió su cabeza –No. Esto solo es una sentencia.

-Hope…

-No –. Dijo con firmeza. Mirándola a los ojos y pronto sus lágrimas se formaron ante la mirada de su tía. Y un sollozo escapo mientras su cabeza se sacudía en negación –No quiero que de nuevo alguien que amo esté en peligro por mi culpa. No lo soportaría… no soy tan fuerte…

Freya la miro con tristeza y deseo estar a su lado –Cariño. Está bien. Ella estará bien…

-No mientras este unida a mi…

-El hechizo es una señalización básicamente. Te muestra la persona correcta para estar a tu lado, que te complementara y que se haya mostrado con tal claridad solo muestra lo que ya sientes pero nadie más puede verlo.

-Tú lo ves –. Afirmo la loba con un susurro temeroso.

-No lo hago realmente. Veo magia pura saliendo de ti pero no sé qué es, ni veo ninguna forma –. Dijo Freya con tono sincero esperando que eso calmara a su sobrina –Solo tú y ella pueden verlo con claridad. El mundo no y es posible que yo lo haga porque soy tu sangre.

Hope la miro con temerosa esperanza a la vez que sus ojos se iban apagando –¿Segura?

-Segura –. La rubia sonrió y elevo sus hombros –Bueno. Lo ve también su hermana pero creo que es por la misma razón que yo.

-¡¿Viste a Josie?! ¿Está bien? –. Exclamo la loba.

-Lo está. Solo un poco aturdida por el exceso de magia pero solo necesita controlar su habilidad y volverá a la normalidad.

Hope suspiro aliviada y se quedó en silencio mirando hacia su mano. Mostro una mueca –Lizzie va a matarme.

Freya rio por lo bajo –Creo que si. Estaba algo histérica y prometía encerrar a su hermana en su habitación –. Los ojos de la loba volvieron a resplandecer y un gruñido protector escapo desde su pecho –Tranquila. No le hará daño.

La cobriza apretó sus parpados y puños. Concentrándose en su respiración y latido que habían saltado a la vez, y lucho para controlar al lobo que arañaba para que corriera hacia la habitación de las gemelas.

-¿Qué tan malo es? –. Pregunto su tía con cierta tensión oculta.

Inhalo profundamente y no abrió sus ojos. Concentrándose –Esta enloqueciendo. Casi en la superficie pero no sé realmente que tan cercano esta. ¿Qué le está pasando?

-Es muy simple. Quiere reclamarla.

-Pues no lo hará –. Hope volvió a la normalidad y con firmeza dijo –No le dejare.

Su tía la miro con seriedad –Luchara bastante. El lazo básicamente lo está llamando.

La cobriza negó con firmeza –Me importa poco. Josie no es una cosa que solo pueda tomar porque mi lobo es idiota.

-Sera difícil hasta que el lazo se vaya.

-¿Se irá?

-Si. Ya debería haberlo hecho pero debe estarse alimentando de la magia de la escuela y de la tuya. Y claro, de tu lobo aferrándose a él pero se irá –. Afirmo la rubia.

-¿Cuándo?

-No lo sé cariño –. Freya la miro –Pero creo que si no lo vas a seguir, deberías venir a casa.

-No –. Su cabeza negó con firmeza –Tu misma lo dijiste. El vínculo se irá y todo volverá a la normalidad.

La rubia la miro con seriedad –Si pero no sabemos cuánto tome y mientras tanto serás casi un lobo incontrolable como todos los demás. Con la única diferencia de que tendrás un solo objetivo.

Hope siguió negando –Estaré bien. Solo necesito algún hechizo de sometimiento o hasta el suero de tía Keelin. Lo que sea.

-Hope…

La cobriza movió su mano deshaciendo el hechizo silenciador y se quedó en silencio escuchando el mundo que resonaba a un volumen inusualmente alto pero nada insoportable. No como lo había sentido antes.

Sonrió con arrogancia –¿Ves? Todo bien mientras el mundo no grite en mi oído.

Freya suspiro con frustración –No creo que sea lo más seguro.

-Vamos tía. Todo estará bien en un par de días –. Afirmo con falsa seguridad que poco a poco dejo ver en su mirada su vergüenza y confeso en un susurro –No quiero alejarme de ella… por si me necesita o algo…

Su tía la miro con ternura y soltó un suspiro de derrota –Esta bien pero sellaras tu habitación cuando duermas y si pierdes el control, prométeme que vendrás a casa.

Hope asintió –Lo hare.

-Promételo.

-Lo prometo –. Dijo con una leve sonrisa.

Freya asintió –Bien. Te estaré llamando cada noche para saber cómo estas y será mejor que me digas la verdad, señorita.

La loba rio por lo bajo –Lo hare.

-Oh, casi lo olvido. Nada de transformarse, al menos no mientras el vínculo este visible. Puede ser peligroso para todos.

-Ya lo imaginaba.

-Bien.

-Tía… –. Susurro la cobriza con tono tímido.

-¿Si? –. La rubia la miro con curiosidad.

-No les cuentes a los demás.

Freya soltó una pequeña risa –¿Por qué mataran a Alaric por permitir esto?

Hope sonrió pero luego volvió a mirarla con timidez –En parte pero realmente no quiero tenerlos aquí haciendo un alboroto por conocer a la chica de la que me enamore.

Esta vez, Freya si dejo escapar una sonora carcajada –Eso sí que sería divertido.

La loba hizo una mueca –No. No lo seria.

X

oooXooo

OOOxOOOxOOO

Hola.

Solo quiero desearles un feliz año 2020.

Que logren todo lo que se propongan y que me sigan leyendo xD