Harry Potter Los Senderos Que Elegimos

by DARKNIG

Tras la muerte de Cedric Diggory y el regreso de Lord Voldemort, Harry Potter siente que el peso del mundo mágico lo está aplastando. Con la necesidad de escapar, toma una decisión inesperada: alejarse de la magia, de su fama como el Niño que Vivió, Solo quiere un respiro, un instante para vivir como alguien normal por una noche, Pero esa sencilla elección, cambiara todo su mundo..

5. Chapter 5

Harry Potter

Los Senderos que elegimos

Capítulo 5

El Bien Mayor

Parte 1

Martes 8 de agosto de 1995

Hogwarts

Durante gran parte de su vida, Albus Dumbledore se enfrentó a muchas situaciones que pusieron al límite su paciencia.

Dilemas que lo llevaron al borde de su brújula moral, pero hasta ahora, cada situación que se había presentado, de alguna manera las había sobrepasado.

Siempre teniendo un plan, siempre observando el final, para cada cosa que se saliera de su control, pero esto que tenía delante de él, no tenía la menor idea de como manejarlo.

– Harry. —Dio un suspiro cansado mientras volvía a pensar en el nombre de su dolor de cabeza.

El niño que vivió era el arma definitiva contra voldemort. Un héroe dorado que tenía un propósito más grande que el de cualquier mago.. Su destino, era morir por el bien de la gran bretaña mágica en la batalla final, contra su enemigo predestinado.

Pero había un problema. Harry era un humano, ningún humano era perfecto, y pocos eran los que podrían entender el significado de un sacrificio por el bien Mayor.

Ese hecho fue algo que él supo de inmediato, tan pronto como la profecía marcó a dos posibles candidatos, para obstentar el título del campeón de la luz.

Neville Longboton, y Harry Potter.

Dos posibles candidatos a ser los elegidos para derrotar al señor oscuro, y solo uno de ellos cumplía con los requisitos que Albus necesitaba para asegurar el futuro.

Neville tenía una familia numerosa, no solo eran sus padres los que cuidarían al pequeño al crecer, sino que todos los Longboton se asegurarían de protegerlo y darle una buena vida, que le daria motivos para vivir, Y eso era algo que no era bueno para forjar su arma en contra del señor oscuro.

Albus necesitaba un lienzo voluble, un niño carente de cualquier apego a la vida, que pusiera el bienestar de los demás por encima de él, Y solo había alguien que podía cumplir ese propósito.

La Familia Potter, a diferencia de los Longboton estaban casi extintos, la última guerra contra grindelwal, había erradicado casi a la familia, y en los tiempos que corrían, James Potter era el último de su línea. Eso significaba que si algo le pasaba junto a su esposa, el pequeño Harry no tendría a nadie para cuidarlo, y podría tomarlo para moldearlo de la mejor manera posible.

Sin embargo, las posibilidades de que los padres del niño murieran, eran muy pocas.. ambos magos eran sumamente poderosos y talentosos, para ser derrotados en las incursiones que la orden del fénix hacía, por lo que algo se tenía que arreglar. y fue en ese pensamiento, donde una idea vino a su mente en la forma de Severus Snape.

El hombre era un espía para Voldemort, y él podría utilizarlo para mover una pieza de ajedrez, y desencadenar el juego que llevaría a la salvación del mundo mágico.

El suceso tenía que ser planeado, tenía que verse real y cuando finalmente estuvo seguro de que nadie sospecharía de una trampa., Albus se aseguró de que el hombre escuchara la profecía, al menos una parte, la parte que él quería que voldemort supiera, y fue así como todo se empezó a formar.

Voldemort había escuchado parte de la profecía, y con un susurro bien dado por parte suya al señor oscuro, el hombre había decidido atacar a los Potter, y la siguiente fase de su plan pudo comenzar.

Con la confianza casi ciega que James Potter tenía sobre él, fue relativamente sencillo convencer a los Potter, para que salieran de las protecciones del antiguo castillo de su familia, bajo la excusa de que las protecciones eran débiles, y que se habían deteriorado con el paso del tiempo y no resistirían un asedio de voldemort.

A partir de allí, y con ellos fuera del lugar más seguro en la gran bretaña mágica, sus planes fueron simples. Aíslalos en un lugar, y envía al señor oscuro para que acabe con sus vidas. Sin embargo, su plan aún tenía una falla. Sirius Black el padrino del niño, era una pieza que no necesitaba en el amplio margen de sus planes.

Si a Sirius se le permitía vivir, Harry estaría fuera de sus manos. Pero incluso sabiendo esto, él no podía arriesgarse a hacer un movimiento en contra del negro rebelde, ya se estaba arriesgando mucho al poner a los Potter bajo fidelius, y las familias de la luz podrían sospechar si Sirius desaparecía misteriosamente, por lo que otra acción fue requerida.

Afortunadamente para él, un milagro en la forma de Peter Pettigrew apareció frente a él.

El Bastardo había sido un espía para Voldemort, y era por su culpa que muchas de las tácticas en contra del señor oscuro habían fracasado. Sin embargo, a pesar de que la rabia lo llenó, y quería matar a la rata, albus había decidido algo más, una estratagema para poder deshacerse de Sirius sin que él tuviera que ensuciarse las manos.

Solo bastó un poco de sus palabras, y un poco de magia compulsiva, para hacer que Sirius le diera la idea a los Potter para cambiar de guardián secreto, y en el momento en que lo hizo, y James consideró la idea, el destino de él y de Lili Potter había sido decidido.

Voldemort los mataría, y cuando intentara lastimar al pequeño Harry, su trampa se activaria, enviando a voldemort hacia una prisión, en donde podría ser contenido, mientras él preparaba al niño de la profecía.

Sin embargo, eso nunca sucedió, Lili Potter había hecho algo esa noche, había protegido al niño usando magia de sangre, algo que nunca creyó que la bruja pudiera saber.

Dio su vida para proteger a su hijo, y gracias a eso el señor oscuro fue derrotado, al menos por un tiempo.

Porque si, Él sabía que no era permanente, el hechizo de ligamento que había puesto en Tom para rastrear sus movimientos en su último enfrentamiento, aún seguía activo.

No funcionaba como debería, debido a algunas cosas que el mago oscuro había hecho sobre su cuerpo, pero daba el suficiente poder para que albus lo pudiera sentir. La conexión era débil, casi inexistente, pero allí estaba, y eso fue todo lo que albus necesitaba, para saber que la batalla no había terminado.

La profecía seguía activa, y era hora de que él jugara su papel en esta lucha. Su tiempo de estar al frente de todo había acabado, Pero aún tenía mucho que dar jugando desde las sombras moviendo los hilos, para lograr él bien mayor.,

– No puedes tener al niño.

Pero incluso cuando sus intenciones y planes eran perfectos para asegurar el futuro de su hogar, las personas eran estúpidas. Los humanos eran incorregibles y gracias a los estúpidos seguidores de voldemort en el ministerio, apoyados por los sentimentalistas de su facción, el niño Potter fue arrancado de sus manos, y tuvo que entregarlo a la única familia que tenía.

Los Dursley eran lo único que al niño le quedaba, pero no todo estaba perdido. Ellos eran muggles, personas que fácilmente podían ser manipulados, y eso jugaba perfectamente en su plan.

Tal vez no pudiera tener al niño, pero se aseguraría de que todo saliera tal y como él quería. Y para eso, solo tenía que pronunciar una simple palabra.

– Imperius.

Y así, con un simple hechizo, Albus Dumbledore se aseguró de que el destino del mundo mágico estuviera a salvo.

Las órdenes que había grabado en la mente de los muggles eran simples.

Has la vida del joven Potter miserable, y asegúrate de que no tenga ninguna idea fuera de la mediocridad. Trunca sus estudios, Baja la autoestima, niégale su herencia, y manténlo así hasta que vaya a Hogwarts.

Esas habían sido las órdenes, y los muggles lo habían hecho tal cual y como él se los ordenó. Habían preparado un lienzo en blanco para sus manos, y cuando Harry llegó a las puertas del castillo, Albus supo que todo estaba bien.

Se había asegurado de que el primer amigo de Harry fuera un Weasley, una de las familias más leales a la luz, y con la amistad entre el pequeño ronal weasley y el joven Potter, cualquier intento de las familias sangre pura de corromper a su campeón sería detenido.

Después de todo, el tiempo en el expreso de Hogwarts era largo, y gracias al que el niño Potter no tenía la menor idea sobre el mundo mágico, las palabras inocentes e influenciables de Ronal Weasley, cortarían cualquier esperanza de que Harry se saliera de su plan.

– Gryffindor. —Tan pronto como las palabras salieron de la boca del sombrero, y Albus notó la familiar molestia en el rostro del heredero malfoy, la alegría de albus no se pudo contener.

Había tenido razón, sus planes una vez más le habían asegurado la victoria, y ahora que Harry era un Gryffindor, y con la presencia de voldemort en el castillo atraído por la piedra filosofal, sus pruebas podrían comenzar.

La nutrición de un campeón era un proceso largo, un proceso que llevaría tiempo, pero él se aseguraría de nutrir a su chico apropiadamente, para que fuera el campeón que el mundo tanto necesitaba.

Sus planes no tenían falla, y lo había comprobado año tras año, mientras veía, como Harry se moldeaba en el sacrificio perfecto, un hombre dispuesto a morir por sus amigos, dispuesto a hacer todo por el bien Mayor.

Harry Potter era su campeón, Y albus sabía que la batalla en contra de voldemort estaba cada vez más cerca. el torneo de los 3 magos era el epítome del regreso del señor oscuro, pero Albus no intervendría, porque así lo dictaba la profecía.

Para que el señor oscuro fuera derrotado de una vez por todas, Harry debía morir en la batalla final, para que el último vestigio de voldemort fuera destruido. El horrocrux alojado en su cicatriz sería el último clavo en la tumba de voldemort ,y la protección que Lili Potter había dejado en su hijo, se aseguraría de que el niño sobreviviera lo suficiente para que él pudiera actuar.

Cuando la batalla final hubiese ocurrido, y las estrellas se hubieran alineado para ese acontecimiento, Albus ya habría encontrado todos los Horrocrux, que había rastreado en el momento en que analizó la cicatriz del niño que vivió, cuando lo tuvo en sus brazos.

Sabía del fragmento de alma en el niño, desde que lo recogió esa noche en godrics Hollow, pero no había hecho nada hasta ahora por que la conexión era muy débil. si quería encontrar los fragmentos de Tom Riddle, Harry debía crecer y su conexión con voldemort se tenía que hacer más fuerte. Y así, justo como lo planeó, en el momento en que el señor oscuro regresó, y Potter estuvo al alcance de sus manos, albus descubrió cuantos Horrocruxes tenía el hombre.

Eran 7 en total, y el niño potter era el último que se había creado. Harry era lo último que mantenia vivo al señor oscuro, y por eso debía encontrar los demás Horrocruxes para poder ayudar a cumplir la profecía. Sin embargo, a pesar de que las cosas habían estado marchando perfectamente bien en los últimos años, el último mes había sido algo que Albus nunca esperó que sucediera.

El niño que siempre se había mantenido recto en el camino que le había trazado, empezó a desviarse. comenzó a dejar de lado su guía y quiso cambiar su rumbo.

Al principio no le preocupaba, ya que intuía que su cambio era debido a la falta de comunicación con sus amigos, de la cual ya se había encargado para seguir con la siguiente fase de su plan.

Sin embargo, aquella preocupación casi inexistente, cambió por completo en el momento en que el niño le hizo mención sobre el tema de las almas. Nunca había esperado que el niño Potter mencionara algo como eso, y cuando lo hizo, albus no pudo negar que lo preocupó. No obstante, no dejó que eso lo desconcertara, y en su lugar decidió tomar un enfoque diferente.

Decidió vigilar al niño más de cerca de lo que ya lo había estado haciendo. Había dado órdenes estrictas para que la señora fig y el resto de la orden estacionados en privet drive, prestara más atención al niño, y sus sospechas de que algo podría suceder, fueron confirmadas casi de inmediato, cuando el niño había intentado escapar de su casa 2 noche seguidas.

La señora fig le había informado de este hecho y desde entonces, todos los miembros en guardia se habían mantenido atentos a cualquier intento de fuga por parte del niño.

No entendía que podría estar ocasionando que Harry quisiera escapar, pero ciertamente lo había dejado de lado, cuando el chico no lo volvió a intentar, y en su lugar prefirió pasar su tiempo libre, quedándose en la casa de sus tíos como un buen niño. —Haciendo una mueca llena de disgusto y Apretando los puños con molestia, Albus resopló Irritado.

– Había sido un completo estúpido. Se había vuelto complaciente y gracias a su propia arrogancia, el chico Potter había estado escapando de privet drive sin que él se diera cuenta.

Remus lupin le había traído está foto, una fotografia extremadamente preocupante dos días atrás. En ella, se mostraba a un Sonriente Harry, uno que albus nunca había visto nunca en la figura del chico torpe y con falta de confianza que había formado.

– No. Este niño era todo lo contrario, pocos lo podrían ver, pero albus se dio cuenta de inmediato. El chico en la foto no tenía ninguna falta de confianza, se le veía más confiado, más maduro y sobre todo, Más feliz.

– Inaceptable. —Escupiendo la palabra con molestia, los ojos de Albus se dirigieron hacia la mujer en la foto.

De alguna manera, Harry se había topado con Bellatrix Lestrange de todas las personas. Ella era la mano derecha de voldemort y por alguna razón que albus no podía empezar a comprender, La mujer no lo había asesinado.

Remus creía que la presencia de la mujer en la foto a lado del chico, Era alguna especie de plan para poder pasar al niño que vivió al lado del señor oscuro, por medio de la manipulación o algún especie de embrujo.

Él por otra parte, consideraba que la idea era simplemente estúpida. Harry no se veía de ninguna manera obligado a estar en ese lugar, de hecho parecía todo lo contrario. El niño estaba mostrando una felicidad tan pura, que hizo que su estómago se revolviera.

Él conocía esos gestos, él conocía esas miradas y el pensamiento de lo que estaba sucediendo le hizo querer vomitar.

Harry Potter estaba coqueteando con el enemigo, tal y como él lo había hecho en su juventud ,en plena guerra con su amado Gellért. ¿La pregunta era? ¿Porque bellatrix Lestrange de todas las personas estaba permitiendo esto?.

¿Sería acaso que la mujer se hubiera enamorado del chico Potter? —Conteniendo las ganas de reír, Albus negó con su cabeza. La idea era simplemente estúpida, y el no creyó ni por un momento que esa fuera la razón.

Debía haber algo más. Algo que la mujer quería de Harry, algo lo suficientemente valioso para traicionar a su maestro..—Llevándose la mano nuevamente a su rostro, La mente del viejo brujo empezó a pensar.

No importaba que tanto le diera vueltas en su cabeza, no podía encontrar una razón suficiente para las acciones de la bruja, pero estaba llegando a querer ignorar ese misterio.

Lo importante ahora era encontrar el paradero del chico Potter. Su arma se había esfumado con el viento y el no podía encontrarlo.

Su varita había sido recogida de su casa cuando fueron a buscarlo, y por lo que parecía no había sido tocada en varias semanas, si el polvo en ella era una señal clara de que Harry no estaba usando su varita. ¿Acaso seria que el niño había descubierto el hechizo de rastreo? —Negando con su cabeza, albus se negó a creer ese hecho.

Él había moldeado a Harry para ser ignorante, para confiar ciegamente en los demás, y no podría haberse salido tanto de control sin que él lo notara. —Recostándose en su silla y sacando una pipa de entre sus túnicas, Albus empezó a reflexionar.

El tiempo era apremiante, y mientras más tiempo Harry pasara lejos de su control, las cosas podrían salir increíblemente mal. Bellatrix podría corromper a su campeón, si no es que ya lo había hecho, si la foto era una señal clara de este hecho.

– Necesito encontrarlos. —Dando una calada a su pipa, Albus dejó que el humo lo llenara.

Tenía una forma de encontrar a Bellatrix, pero prefería no tener que hacerlo. Sería mucho riesgo para Harry, y no estaba seguro si iba a valer la pena.

Perder al niño por una decisión apresurada no era un riesgo que estuviera dispuesto a correr. Al menos, no hasta que hubiera agotado todas sus opciones.

Harry iba a aparecer y si no lograba encontrarlo con todas sus herramientas, la decisión más arriesgada sería su única opción.

Debía poner al niño nuevamente bajo su control, y averiguar que tanto daño esa mujer le había hecho a su campeón.

Linelinelinelinelinelinelinelinelinelin

Parte 2

Sábado 12 De agosto de 1995

Recostándose en el sillon de la habitación, Harry se dejó caer de espaldas mientras se acostaba por primera vez ese día.

Ya había terminado de limpiar la casa, y hacer la comida del día, y ahora necesitaba un descanso. La casa de bella no era tan grande, pero apenas había tenido tiempo de hacer las labores del hogar en los últimos 12 días, y hoy finalmente había sido el día en que decidió limpiar la casa que se había convertido en su hogar.

Soltando un suspiro cansado, la varita de Harry se deslizó en su mano derecha, y cuando su familiar compañera se sincronizó con su magia, el cansancio de su cuerpo pareció disminuir.

Incluso aunque su nueva varita hubiera estado con él poco más de un mes, la sensación de familiaridad y de compatibilidad era mucho más fuerte, de lo que su antigua varita de tejo había logrado obtener, en los 4 años que había estado con el.

Shium.

Sintiendo un leve pulso de magia en su mano izquierda, Harry soltó una pequeña sonrisa, al ver el familiar destello de color morado, que su anillo parecía emitir cada vez que su varita estaba en su mano.

El suceso era raro, pero Harry rápidamente se acostumbró al destello, cuando se dio cuenta de que de alguna manera que no podía entender, su magia no era lo único con lo que su varita se sincronizaba. su anillo también estaba ligado a su varita, y aunque no entendía con qué propósito sucedía la unión, Harry no se molestó más en intentar descubrir el misterio.

El anillo había demostrado ser una adquisición positiva en su vida, y si su varita se sentía cómoda también con su anillo, ¿Quien era él para quejarse?.

– Chic,chic. —Aleteando lentamente, Hedwig apareció ante la vista de Harry, antes de soltar un periódico enfrente de su maestro acompañado de un sobre blanco. "Y aquí va un nuevo dolor de cabeza ". —Suspirando con cansancio, Harry tomó entre sus manos el periódico mientras su lechuza se acomodaba en su perchero, y lo leyó con una leve sonrisa.

En los últimos 12 días que había estado viviendo en la casa de bella, se había enterado de la campaña de difamación que el ministerio tenía en contra de él. Hedwig había sido quien le había traído el periódico, y cuando se dio cuenta de su contenido, Harry no pudo evitar enfurecerse, incluso cuando el anillo de la familia peverel intentó calmar sus pensamientos, La furia duró al menos 10 minutos antes de que finalmente, la magia lo calmara y su mente se aplacara con la idea de retribución, con el deseo de venganza en contra de aquellos que lo habían difamado..

– Rita Skeiter, suspendida como editora principal del Diario el profeta.

Sonriendo complacido al leer el titular del periódico, Harry lo tiro por un lado, mientras una sonrisa se deslizaba por sus labios. –Veamos que dice Griphook. —Tomando el sobre blanco, Harry lo abrió lentamente, y sacó la carta que sabía que pertenecía a su gerente de cuenta.

– Querido señor peverel, hice lo que me pidió, y demandé a Rita Skeiter por las constantes difamaciones a su nombre.

Normalmente el profeta hubiera ignorado la demanda, pero considerando que la señora Skeiter, ha estado tras tu cabeza desde el segundo año de tu escolaridad en Hogwarts, y ha aprovechado cada oportunidad para difamarte, la demanda tiene suficiente poder para arrancar de su puesto a la Señora Skeiter, y cerrar el profeta, si se rehusán a aceptar la demanda, según las leyes de protección de reputación de los Lords.

Y ahora que usted Sr Peverel es uno en pleno derecho, la señora Skeiter no tiene forma de escapar de esta consecuencia.

Le hemos sacado 1500 galeones de multa, para cubrir los daños a su imagen, y la hemos retirado de su cargo, Tal y como usted solicitó..

espero que esté satisfecho con mi trabajo,

Atentamente, su gerente de cuenta.

Dejando el sobre por un lado de él, las manos de Harry se dirigieron hacia la parte posterior de su cabeza, y sonrió divertido.

Nunca hubiera pensado, que ser un lord y aprender sobre política le serviría tan bien. Antes, tal vez hubiera dejado pasar este ataque, y no hubiera hecho nada para evitarlo, simplemente se hubiera quedado sin hacer nada hasta que inevitablemente el mundo mágico lo volviera a ver como su salvador. Sin embargo, el tiempo de permanecer pasivo había terminado. Ahora tenía poder, tenía conocimiento sobre cómo funcionaba el mundo, y ya nada lo detendría, nada lo volvería a dañar.

– Crack. —Levantándose con un sobre salto, Harry rápidamente empezó a correr hacia la habitación principal.

– Bella. —Entrando por la puerta llamando el nombre de su maestra, Harry se acercó hacia la figura caída de la mujer y la tomó entre sus brazos. "No debes dormir tan bruscamente". Mirándola con una sonrisa triste, Harry la levantó del suelo, y la cargó al estilo nupcial, para después meterla en su cama. Se aseguró de arroparla cuidadosamente, antes de darle un beso en la frente y volver a salir de la habitación.

Su rostro antes feliz, se había transformado en uno de completa tristeza, mientras su cabeza volvía al estilo de vida que había estado llevando. Desde su cumpleaños en que bella le había contado su secreto, Harry se había quedado con la mujer. La tenía bajo un hechizo de sueño constante, y las pocas veces que la despertaba, era simplemente para darle de comer.

Bella podía estar despierta un máximo de media hora, pero al pasar de ese tiempo, el hechizo imperius que mantenía controlada a su otro yo empezaba a fallar. La otra bellatrix luchaba con fuerza, para tomar el control de su cuerpo y Harry tenía que volver a hacer dormir a la bruja. Era una rutina que había tomado en los últimos 12 días, y que ahora había llegado a apreciar como su nueva normalidad.

– Debería seguir con mi trabajo. —Encogiéndose de hombros y dando un suspiro cansado, Harry empezó a dirigirse hacia las escaleras del sótano.

Una vez estuvo abajo, abrió la primera puerta a su derecha y entró en la biblioteca del lugar. La habitación no era tan grande como las otras dos, pero estaba llena de libros que Harry había estado utilizando.

–Llevándose la mano a sus anteojos, Harry los retiró lentamente de su cara, y los puso a un costado de la puerta en un pequeño buro. Su vista había estado mejorando en las últimas semanas y para poder realizar su trabajo correctamente, necesitaba dejar fuera sus lentes. —Dando un nuevo paso hacia dentro de la habitación, el niño que vivió se dirigió hacia una mesa rodeada de pizarras, en donde varios diagramas y números estaban garabateados.

– Ahora, ¿Dónde me quedé? —Agarrando el primer libro que tenía sobre la mesa, Harry lo empezó a leer, sin importarle ni un poco que no tuviera el permiso de su maestra, para echar un vistazo en estos libros.

Cómo crear Runas, Y sus usos en las personas. —Leyendo el título de la página, Harry sonrió con una pequeña sonrisa. Esta había sido la página en que se había quedado la noche anterior, y ahora que finalmente tenía un poco de tiempo, era momento de continuar con su aprendizaje.

Una rama de la magia que jamás pensó que tocaría, pero que las circunstancias lo habían obligado a tomar. Debía encontrar una solución al problema de su maestra, y no tenía a nadie para ayudarlo. Solo se tenía a él mismo y bella contaba con él.

Podría nunca haber estudiado runas antiguas ni aritmancia, pero se estaba obligando a aprender. Había un dicho en el mundo muggle que decía que el amor lo podía todo, y en los últimos 10 días, Harry había aprendido que tenía razón.

Su amor por bella lo estaba impulsando a ser más, A exigirse más de sí, Y ahora estaba centrado. Tenía una misión, una meta, un objetivo. Curar a su maestra era todo lo que importaba, y no se detendría hasta que eso pudiera suceder.

Linelinelinelinelinelinelinelinelineline

Parte 3

Lunes 14 de agosto de 1995

– Mamá, ¿Dónde está papá?. —Escuchando el familiar sollozo de una niña pequeña, la joven bruja empezó a abrir sus ojos lentamente, mientras la conciencia volvía a su mente.

– ¿Por qué no está conmigo? Porque él no me quiere. ¿Acaso me odia? —Sollozando más fuerte, y sintiendo que las emociones de la niña la empezaban a invadir, la expresión de bella se volvió confusa mientras se daba cuenta de donde se encontraba.

– Ella recordaba este momento, ella nunca podría olvidar este día. Aquí fue donde su padre decidió descartarla, y no perder más tiempo en un producto defectuoso.

Una negra que no podia usar la magia de su familia, era una mujer que no servia para nada mas que ser una ficha de cambio.

– No Bella querida, Papa no te odia, solo está un poco molesto, pero ya pasará. —Abrazando a la niña con fuerza, Druella, la madre de la pequeña bruja intentó consolar a su hija. incluso aunque sus palabras estaban vacías de cualquier verdad, el consuelo de ellas debía calmar a su hija. despues de todo, ella era una niña, no se daría cuenta de que estaba mintiendo, y en estos momentos las mentiras era algo que su corazón necesitaba.

– ¿Por qué estoy aquí? —Desviando su mirada de la escena frente a ella, no queriendo recordar un momento tan doloroso, la mujer no pudo evitar preguntarse mientras empezaba a caminar.

Esto era el nexo de su mente, El centro de todos sus recuerdos, un lugar al que no había regresado después de separar su mente.

– Por favor no, nosotros no sabemos nada. No tenemos idea de cuál fue el hechizo que se usó para derrotar al señor oscuro. asi que porfavor, no sigas.

– ¡Crucio!

La figura de una pareja siendo torturada por el hechizo cruciatus, apareció a un lado de la bruja, y Bella tuvo que luchar con todo su autocontrol para no prestar atención.

Cuando ella estaba a cargo de su cuerpo, Los recuerdos de su otro yo eran fácilmente accesibles ,a diferencia de cuando ella tenía el control. Despues de todo, ella Había configurado el hechizo puesto en su mente para que esto fuera de esta manera, así la otra Bellatrix no podría saber que realmente no era la original, al menos hasta que volviera a estar encerrada en su mente.

– Porque mi Lord, ¿Por qué no me deja acompañarlo a matar a los Potter? Sé que es poderoso, pero me preocupo por usted. —Deteniendo en seco su caminata, la atención de bellatrix se dirigió hacia un recuerdo que no debería estar aquí. De hecho, el anterior tampoco deberia haber aparecido, y eso hizo que la atencion que le puso al recuerdo, fuera mas sería de lo que deberia.

Bellatrix querida, aprecio tu preocupación, pero soy lo suficientemente poderoso para lidiar con los insectos de Potter. Además, tengo un trabajo para ti, algo que necesito que hagas en total silencio, y no confío en nadie más para hacer esta labor.

Agitando su varita, Una hermosa copa apareció en las manos del señor oscuro, y la bellatrix del recuerdo le dio una mirada confundida.

– Esto querida, es algo muy importante, una reliquia que te concedo para que protejas. No quiero que me digas en que lugar la vas a ocultar, solo quiero que me prometas que te asegurarás de que esté a salvo. ¿Puedo confiar en ti?

Arrodillándose de inmediato y bajando su cabeza en señal de sumisión, Bellatrix estiró sus manos y tomó la copa con firmeza. Le prometo que no lo decepcionare.

– Espera un momento, ¿Acaso esa copa sería un horrocrux? —Abriendo sus ojos con incredulidad, al darse cuenta de una revelación tan importante como esa, los pensamientos de bella empezaron a girar mientras las figuras del recuerdo desaparecían en humo.

Había olvidado que Voldemort le había confiado esa copa, descartándolo como algo sin relevancia. sin embargo, ahora que habia visto el recuerdo nuevamente, y lo analizaba más a fondo, y al tener la cicatriz de Harry como prueba, no podía evitar sospechar que el señor oscuro le había confiado un horrocrux. Entonces no solo era uno, debían ser 2. pero, si había un segundo, ¿Quién no le aseguraba que Voldemort no había hechó más?. —Deteniendo su hilo de pensamiento en seco, Bella se estremeció al darse cuenta de cuantos podría haber hecho el hombre que era su maestro.

Ya había tenido sospechas de que la apariencia inhumana de voldemort se debía a la magia oscura. No obstante, había supuesto que era una consecuencia de los rituales oscuros que el hombre usaba. Pero, ¿y si esto no fuera así?, ¿Qué tal si su apariencia casi igual a la de una serpiente, se debía al castigo mágico que se otorgaba a aquellos lo suficientemente estúpidos para fracturar su alma?.

Ciertamente la teoría podría encajar, y eso solo hizo que Bella sintiera más pavor por el destino que Harry tenía que enfrentar. "Nunca podría derrotar al señor oscuro al menos que sus Horrocruxes fueran destruidos, y hasta ahora, solamente conocían 2". "Debo encontrar una manera de rastrear si hay alguno más". —Deteniéndose en seco ante su pensamiento, Los recuerdos de su última conversación con su pupilo volvieron a su mente.

– ¿Qué había hecho Harry con ella? La pregunta que se hizo fue respondida casi de inmediato cuando una nueva escena se proyectó a un lado de ella.

La escena que se observó era simple, se podía ver a Harry cuidando de ella, dándole de comer con delicadeza y monitoreando sus acciones, en el corto tiempo que ella estaba despierta.

– No recuerdo esto..—Tratando de hacer memoria, Bella negó con su cabeza mientras los recuerdos de esas interacciones no parecían estar disponibles para ella.

– Crack. —Sintiendo como su mente se topaba con un muro, Bella abrió los ojos con incredulidad al sentir algo que no debería estar allí.

– ¿Quién eres tú? —Girándose bruscamente hacia la fuente de la voz, la mandíbula de bellatrix se cayó, cuando estuvo observando la apariencia familiar de su yo más joven.

La niña frente a ella parecía tener 10 años, y algo en ella parecía sentirse mal.

– ¿Quién soy yo? ¿No debería estarte haciendo esa misma pregunta yo a ti?. —Apuntando con su dedo hacia su yo más joven, Bella acusó con sospecha, mientras la niña se llevaba un dedo a su barbilla en señal de estar reflexionando sobre sus palabras.

– No, creo que no. Ya que esta es mi mente y tú estás invadiendo. —Haciendo un puchero y trazando una varita en su mano, mientras la apuntaba hacia la bruja mayor, la expresión de la niña se afiló, mientras un leve rastro de locura brillaba en sus ojos.

– Pregunté, ¿Quién eres y por qué estás en mi mente? —canalizando magia en la punta de su varita, la niña gritó con el rostro carente de cualquier emoción, provocando que bella levantara las manos en un intento de disuadir el ataque de la niña.

No sabía que era lo que estaba pasando, y estaba completamente desarmada, por lo que el molestar a la chica que tenía una varita, no era una buena idea.

– Soy Bellatrix Lestrange, y esta es mi mente. —Declarando en voz alta y mirando a la niña con sinceridad, Bella esperó que la chica bajara su varita. sin embargo, en lugar de hacerlo una leve sonrisa apareció en sus labios.

– Eres la segunda persona que me dice eso, lo consideraría gracioso si yo misma no fuera la persona que dices ser. —Volviendo a oscurecer su expresión, la varita de la niña apuntó hacia la bruja.

Última oportunidad, quien eres, y porque tú y tu amiga están en mi mente.

Fulminando con su mirada, la niña le dijo mientras su muñeca empezaba a jugar con su varita.

La vista debería ser preocupante, debería ser algo que Bellatrix temiera, pero sus pensamientos estaban en otra parte. ¿Ella había dicho amiga? ¿Había alguien más aquí? —Las dudas venían una tras otra, y ella no iba a desaprovechar esta oportunidad para descubrir quien era esta chica que se parecía tanto a ella.

– ¿Mencionaste una amiga? ¿Dónde estaría esa persona? —Tomando la palabra y cuestionando con verdadera sinceridad, la bruja de hermoso cabello negro preguntó, haciendo que la niña hiciera una mueca.

– Ella está justo allí. —Apuntando su varita hacia un lado, la figura de una mujer exactamente idéntica a Bellatrix, apareció sentada en una silla con los ojos vidriosos. "Ella se portó muy mal con Bella, y quiso atacarme, es por eso que está en ese estado". Normalmente se despierta cada cierto tiempo, pero hago lo suficiente para mantenerla en ese estado. —Sonriendo ampliamente, la pequeña niña dijo con orgullo, sin notar la expresión confundída que bella tenía.

Ella conocía a esa mujer, su cabello desordenado era algo que nunca podría olvidar, porque era el que ella tenía cada vez que la otra Bellatrix tenía el control.

Pero, ¿Qué estaba pasando aquí? ¿Quién era esta niña que tenía sometida a su otro yo?, ¿y porque estaba en su mente?. No tenía ninguna respuesta, y la incertidumbre la estaba alcanzando.

El muro que había creado solo había dividido su mente en 2 partes, y ahora había una más de ellas. "Espera un momento". ¿En dónde estaba su muro? —Mirando alrededor de su línea de visión, Bellatrix intentó encontrar el muro que separaba sus dos versiones. Sin embargo, no importaba que tanto buscara, que tanto quisiera hacer que el muro se mostrara, parecía casi como si no existiera, como si su mente hubiera vuelto a ser una sola.

– ¿No puede ser, o si? —Mirando hacia la niña que tenía delante, Bella hizo una pregunta mientras tragaba duro, ante la posible revelación que podría tener.

– ¿Conoces a Harry? —Lanzando su pregunta directamente, la atención de bella se concentró de inmediato en el lenguaje corporal de la niña.

Era una pregunta simple, pero dependiendo de la respuesta que la chica le diera, ella podría darse cuenta si sus pensamientos eran correctos.

– Harry. —Sonrojándose violentamente, y empezando a sonreír con cariño, la expresión de la niña se suavizó.

¿Cómo conoces a mi Harry? —Pasando de estar sonrojada, a mirar con celos a la mujer frente a ella, la expresión de la niña se transformó en una de molestia. – ¿Trabajas para voldemort o para ese viejo bastardo de Albus Dumbledore? —Cuestionando con la varita cargada de una luz morada, ella le dijo, y Bella supo de inmediato lo que tenía que hacer.

Sus sospechas casi habían sido confirmadas en el momento en que las emociones de la niña se dispararon sin control, y ahora debía encontrar la manera de poder llegar a un entendimiento con ella.

– No, no trabajo para ninguno de los dos, pero conozco a Harry, y él es mi amigo. —Dando un paso al frente, Bella trató de acercarse lentamente.

– ¿Tu amigo? No lo creo, mi Harry nunca tendría a una vieja bruja como tú como su amiga. —Sacando la lengua con un puchero, la pequeña bellatrix se burló, causando que una vena se marcara en el rostro de la mujer mayor.

– Trata de entenderla bella, es una niña. —Diciéndose mentalmente, Bella se dijo mientras formulaba las siguientes palabras que iba a usar.

– Aunque puedo ser vieja, Harry es mi amigo y puedo decirte casi cualquier cosa de él. –Acercándose un poco más, Bella sonrió lentamente mientras se acercaba a la niña, y veía que su varita se estaba bajando.

– Pruébalo. ¿Dime quien fue su primer amigo en el mundo mágico?.

– Fue Hagrid. —Respondiendo casi de inmediato, bella respondió haciendo que la niña la mirara sorprendida.

– ¿Quién es la persona a quien más admiración le tiene aparte de mí?.

– Esa seria Hermione. —Dando un paso más al frente, la confianza de bella se empezó a incrementar, mientras veía como sus palabras estaban funcionando.

– ¿Cuál es el mayor dolor de Harry? —Deteniéndose en seco por la frialdad con la que la niña dijo esas palabras, la expresión de la mujer se oscureció con tristeza. "La muerte de Cedric". —Respondiendo lentamente, Bella volvió a dar otro paso, y estuvo a menos de 2 metros cerca de la niña.

– ¿Quién fue la primera persona de la que Harry se enamoró? —Volviéndose a quedar inmóvil, la expresión de bella se encontró completamente carente de cualquier emoción.

Sabía esta respuesta, no había ninguna manera en que pudiera equivocarse y aun así, se encontró temiendo su respuesta.

De Bellatrix Lestrange.

La respuesta que salió por su boca fue casi imposible de entender, pero la pequeña niña con la varita en su mano lo pudo escuchar, y eso hizo que la chica bajara su varita.

¿Realmente no quieres hacerle daño a Harry? —Ella había preguntado, y Bella se encontró teniendo un dilema.

La respuesta era simple, nunca había tenido la intención de lastimar a su alumno, pero eso no significaba, que no lo fuera a hacer, con las acciones que había planeado. Podía mentir, y decir que no lo haría, pero sentía que esa no era la respuesta correcta. "Dando un suspiro cansado, los ojos de Bellatrix parpadearon brevemente, antes de dar la respuesta que muy bien podría terminar con ella".

– No quiero hacerlo, pero es muy probable que lo haga. Mis acciones han puesto muchas cosas en movimiento, y tarde o temprano Harry sufrirá por mi culpa. —Agachando su mirada en señal de culpa, Bella respondió a la niña con sinceridad, y se quedó allí inmóvil, esperando que la chica la dejara en el mismo estado que la otra Bellatrix.

– Eso es lo que quería oír. —Abriendo sus ojos con sorpresa y sintiendo una palma acariciar su cabeza, Bella levantó su mirada y se encontró mirando los ardientes ojos de la niña.

– ¿Quieres volver con él? —Sonriendo ante su declaración, la niña pequeña ofreció con una sonrisa, y bella no pudo evitar asentir con esperanza.

- Entonces dime porque quieres volver con el. "Tragando el nudo en la garganta que podia sentir alli, bella se preparó para admitir algo que habia rechazado por tanto tiempo.

– Quiero volver con el, porque no deseo que nuestro poco tiempo que nos queda juntos, se acabe sin poder confesar lo que siento.

Acariciando más la cabeza de la bruja mayor, la niña empezó a bombear magia hacia el cuerpo de bella haciéndola estremecer.

– Bien, entonces te lo permitiré. Vuelve con él y dile todo lo que no te atreviste a contar. Revela todo lo que ocultamos en nuestro corazón, y muéstrale tu vulnerabilidad. No nos queda mucho bella, Así que aprovecha el tiempo que te estoy ganando. —Soltando la cabeza de bella, la pequeña niña se alejó de su yo mayor, y le dedicó una pequeña sonrisa de despedida.

– Vive tu vida Bella, y no trates de escapar de tus emociones, ya lo hicimos una vez y esto es en lo que nos hemos convertido, no vuelvas a cometer el mismo error. —Girándose para darle la espalda a su yo mayor, la pequeña niña desaparecio de la vista de bella, haciendo que un brillo de esperanza apareciera en los ojos de la bruja.

Le habían regalado un poco de tiempo y ahora no era el momento de dudar. tenía cosas que hacer, cosas que hablar con Harry, y ahora que esto había resultado de esta manera, Bella se aseguraría de que cada segundo contara.

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Cuando sus ojos se abrieron nuevamente y su sentido del tacto estuvo activo una vez más, Bellatrix se permitió soltar un suspiro, mientras volvía a estar a cargo una vez más.

Una tercera conciencia en su mente era algo que nunca pensó que fuera posible, sin embargo, ahora que se había despertado y todos los recuerdos estaban bajo su control, la respuesta que estaba buscando finalmente llegó a su cabeza.

El imperius que Harry había estado usando constantemente en ella en las últimas semanas, había tomado una forma física usando los vestigios de su verdadero yo.

No una Bellatrix fragmentada en 2 partes, sino la original, antes de haber hecho esa locura.

Normalmente el imperius no debería poder hacer eso, pero las órdenes que Harry le había dado a su mente, de alguna manera habían resonado con los muros que había creado en su adolescencia, haciendo que se rompieran, y una nueva conciencia se creára. O más bien, se volviera a reformar. Fue así, como nació esa niña pequeña que habitaba en su mente, fue de esa manera que el imperius que mantenía bajó control a su yo malvado, se convirtió en una entidad pensante, que era la fusión de ellas dos.

Una fusión que para su alivio, mantenía los ideales y los sentimientos puros que alguna vez tuvo durante su adolescencia. —No debo pensar en eso.

Saliendo de sus reflexiones, Bella decidió no perder más el tiempo. Su tercera yo le había comprado más, y No sabía cuánto tiempo duraría este trato.

Debía aprovechar esta oportunidad casi imposible para terminar con su trabajo, para ayudar ha preparar a Harry para su inevitable partida. Porque eso era algo que ya estaba decidido.

Una vez que la otra Bellatrix tomara el control, ella no sabría cuanto tiempo tardaría en volver a estar a cargo. El trato original parecía ya no estar funcionando como debería, y eso era algo que debía considerar.

¿Dónde está Harry? —Buscando al adolescente que se había ganado su corazón, Bella lo llamó, pero cuando no obtuvo ninguna respuesta, ella decidió buscarlo.

Sabía que estaba en su casa, Porque los recuerdos de su tercer yo que había estado tomando el control cuando ella estaba fuera, le decían que Harry no se había apartado de su lado, desde que perdió el control en su cumpleaños.

– Tal vez este abajo. —Levantándose de la cama y empezando a bajar hacia el sótano, Bella abrió la primera puerta y se sorprendió con la vista que la habitación la recibió.

Había innumerables pisarras garabateadas con runas antiguas, factores mágicos y rituales complejos que bella ni siquiera podía empezar a encontrar su inicio.

¿Harry hizo todo esto? —Agarrando uno de los tantos papeles tirados en el piso, Bella lo abrió y cuando lo leyó, no pudo evitar mirar el papel con miedo.

– ¿Cómo hechizar la mente? —Un escalofrío recorrió su cuerpo cuando se dio cuenta de que libros estaba leyendo su alumno. "Debo encontrarlo". Empezando a buscar furiosamente por la habitación, Bella intentó encontrar a Harry, pero no pudo hacerlo.

Solo había libros en el suelo, papeles dispersos por aquí y allá, y diferentes Runas experimentales, todas dirigidas hacia las magias mentales.

Tal vez este en otra habitación. —Pensando para sí misma, Bella envió sus miedos al fondo de su pecho, y se dirigió hacia la otra habitación en donde podría estar su pupilo.

Grande fue su sorpresa cuando de hecho él estaba allí, pero se encontraba en una posición de meditación. Esto si bien no era algo sorprendente, el hecho de que su magia estuviera fluctuante a su alrededor, en una aura calmante si lo fue, lo que solo significaba que el niño estaba en su mente. Estaba en su paisaje mental y eso fue algo que la enorgulleció.

Harry estaba terminando el paso dos de la Oclumancia, algo que a ella le tomó muchos años y que su alumno había logrado en menos de un mes.

– Realmente eres increíble. —Sonriendo lentamente, Bellatrix se acercó al chico, y se sentó aún lado de él. —Recargó su cabeza contra su hombro, y dejó que su magia la envolviera.

Se sentía frío, se sentía tranquilo. La magia de Harry era fría, pero de alguna manera ese frío tenía un calor que ella encontraba agradable.

– Necesito ser sincera con él. —Mirando hacia sus manos, las palabras de su tercer yo, llegaron a ella, y supo en ese momento que ya se había decidido.

Iba a contarle a Harry todo, y después buscarían una forma de encontrar el resto de los Horrocruxes para poder derrotar a voldemort.

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Parte 4

Flotando en el vacío de multitud de colores, los ojos del niño que vivió se clavaron en su entorno, mientras brillaban con poder.

– Barrera. —Estirando su mano con un brillo morado, multitud de hilos de magia empezaron a brotar de su mano, antes de que se juntaran para tomar la forma de una esfera.

– Guardia. —Volviendo a susurrar comprimiendo la esfera con su mano, una ráfaga de luz fue absorbida por la esfera, haciéndola brillar en color dorado.

– Más rápido. —Llenándose de una luz morada, los ojos del niño que vivió empezaron a brillar en verde, mientras multitud de hilos salían de su cuerpo, y empezaban el mismo proceso anterior.

Las esferas iban apareciendo una tras otra, y con cada nueva esfera creada, la luz de colores en la que flotaba el bastago peverel, se empezó a apagar. Se empezó a consumir, mientras los recuerdos eran encapsulados en contenedores perfectamente listados, y una vez que todo el brillo del lugar se apagó, y Harry estuvo flotando en la completa oscuridad, el mago supo lo que tenía que hacer. Juntó sus manos en un triángulo y la energía se empezó a condensar en su centro, mientras imaginaba la forma de su guardián.

Debía ser algo poderoso. debía ser Hermoso, debía ser algo como, un árbol.

—Brillando intensamente en color morado, el bastago peverel soltó la energía que estaba reuniendo, y un gigantesco árbol de ojas blancas apareció en el centro de todo el vacío, y sus ramas empezaron a albergar las esferas antes creadas, uniéndose naturalmente a la estructura del árbol.

– Ahora, necesito luz. —Despegando en el aire y teniendo una idea clara de cómo iba a hacer esto, la mano izquierda de Harry se iluminó con una energía rojiza, y disparó un rayo hacia el cielo. Cuando dicho rayo de energía tocó cierta altura, explotó expandiéndose en una cúpula roja, que cubrió todo el lugar.

– Ahora, es el momento. —Cargando un rayo de luz negra en su palma, Harry volvió a hacer el mismo proceso y una nueva cúpula de energía cubrió el árbol, encapsulando el hermoso paisaje artificial que Harry había creado.

– Está hecho. –Cayendo al suelo agotado, Harry suspiró, mientras miraba su trabajo.

Había estado pensando desde hace 2 semanas, una forma de avanzar en su entrenamiento de Oclumancia, y finalmente se había decidido por la forma de sus escudos.

Había decidido usar un método de protección de capas, una forma de cúpula que protegería su mente por medio de barreras, y que incluso si alguien las lograba pasar, tendría que adivinar en donde estaban sus recuerdos, de entre las más de docientas mini esferas que había creado, cada una con su propio límite de protección.

¿Me pregunto, Si bella sería capaz de entrar en mi cabeza ahora? —Dando una sonrisa triste, y sintiendo que un nudo se formaba en su garganta, Harry negó con su cabeza.

No podía seguirse deprimiendo, la curación de bella llegaría más temprano que tarde, y de eso el se estaba encargando.

Llevaba más de una semana intentando crear Runas de contención, y sus avances estaban funcionando. Ahora solo debía averiguar como hacer que esas Runas pudieran contener una parte del cerebro, y para que eso pudiera funcionar, Harry debía avanzar en su legeremancia.

– Necesito alguien con quien usar mi poder. —Chasqueando su lengua, Harry se frustró mientras recordaba ese problema.

La legeremancia era un arte que necesitaba entrenar con otras personas. pero no podía simplemente ir y practicar con un muggle, porque Albus Dumbledore lo estaba buscando. ya se había dado cuenta de este hecho ayer por la tarde, cuando intentó regresar a la casa de los Dursley por algo de ropa.

Había varios magos estacionados custodiando la casa, y casi había sido atrapado si no hubiera sido por su traslador. Había sentido algunas protecciones en contra de las apariciones poniéndose en la casa, y había sido solo su sentido mágico lo que lo había ayudado a escapar de allí.

Había sentido el peligro tan pronto como cayó la primera protección, y fue gracias a eso que ahora estaba aquí.

– ¿Cómo se enteró? —La pregunta que había estado rondando su mente, volvió con fuerza nuevamente mientras recordaba los acontecimientos del último día.

Claramente, alguien le había informado a albus que no había estado en la casa de sus tíos, y era por eso que lo estaba buscando.

– ¿Debería volver? —Una parte de él que aún no lograba borrar, le había estado planteando esta idea en su cabeza, pero Harry simplemente la estaba ignorando.

No volvería a esa casa. no se arriesgaría a nunca volver a ver a bella si se alejaba de este lugar.

No tenía dudas de que Dumbledore usaría métodos fuera de lo común, para sacarle información, y lo que menos quería es que ese hombre se acercara a su bella.

A él no le importaría lo que su maestra tenía, y simplemente se dejaría guiar por las acciones del pasado. Por acciones que ella no había cometido, si sus palabras eran ciertas y no dudaba que lo fueran.

– Necesito seguir estudiando. —A pesar de que se encontraba estancado en su avance de legeremancia, el deseo de seguir aprendiendo y poder encontrar una cura para su maestra, seguía latiendo tan fuerte como la primera vez.

– Debo volver al mundo real. —Metiendo sus manos a sus bolsillos y con su trabajo en su mente terminado, Harry decidió finalmente dar por terminado este día de entrenamiento.

No sabía cuánto tiempo había pasado en su mente, pero si el hambre que estaba sintiendo era un indicativo, Harry intuyó que el proceso de creación de sus escudos mentales y el posterior ordenamiento de sus recuerdos, había tomado más de 4 horas.

Iré a comer algo. —Dando un último suspiro, Harry miró una vez más su creación. Estaba orgulloso de lo que había hecho, y se sentía conforme consigo mismo. tal vez no era lo que había pensado la primera vez que pensó en como se vería su mente, pero no podía evitar sentir un sentimiento de superación y orgullo por su creación.

Él había avanzado, él había finalmente dado un nuevo paso, y eso lo ponía muy feliz.

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Parte 5

Cuando sus ojos se abrieron nuevamente, Harry tuvo que parpadear varias veces mientras la luz de la habitación se atenuaba en su vista.

¿Qué debería comer? Preguntándose lentamente, Harry estaba por levantarse de su posición sentada antes de que sintiera un peso en sus piernas.

– ¿Bella? —Abriendo sus ojos con incredulidad, y sintiendo un profundo miedo al tener a la mujer en su regazo, la varita de Harry se deslizó rápidamente en su mano derecha, y estuvo a punto de hechizar a la bruja.

Sin embargo, su acción fue detenida, cuando la familiar risíta tranquila y juguetona de su maestra, entró en sus oidos.

– ¿Enserio pensabas hechizar a una mujer indefensa? Pensé que te había enseñado mejor. —Llevando su mano hacia la mejilla de Harry, Bella lo empezó a acariciar con cariño, y el cuerpo del adolescente se estremeció, mientras la familiar sensación de felicidad lo envolvía.

– ¿En serio eres tú? —Preguntando en un tono esperanzado y con su voz entre cortada, Harry miró directamente los ojos de su maestra, esperando encontrar la respuesta que tanto quería saber.

"Gooong".

Sintiendo como una presencia intentaba entrar en su mente, sus escudos de Oclumancia se activaron cuando el ataque de legeremancia fue rechazado.

– Buenos escudos los que tienes allí, parece que al final lograste lo que querías. —Sonriendo dulcemente, y viendo como las pupilas de Harry se dilataban, Bella se levantó lentamente, y abrazó al niño con sus brazos.

– Bella. —Jadeando en un tono suplicante, Harry le devolvió el abrazo y apretó con fuerza su cuerpo, mientras la mujer dejaba que el niño se desahogara.

Podía ver en sus ojos, que Harry estaba sufriendo, se estaba exigiendo más de lo que podía manejar, y eso solo hizo que Bella se sintiera más culpable.

Nunca había querido que su pupilo pasara por esto, no había estado en sus planes contarle a Harry su problema, pero ahora no había vuelta atrás. Ya había decidido contarle las cosas y eso era exactamente lo que iba a hacer.

– Harry, necesito hablar contigo. —Separándose del abrazo y mirando al niño con una media sonrisa, Bella agarró las manos del niño que vivió, y se aseguró de que sus ojos se encontrarán.

Harry, la verdad es que no tengo mucho tiempo. Tu hechizo imperius y una parte de mi mente me han comprado algún tiempo. Cuanto, es algo que no te puedo decir con certeza, porque la anomalía que ocurre en mi mente es algo que nunca antes había sucedido. Y es por eso que necesito aprovechar cada segundo que tenga junto a ti.

Así que dime, ¿Qué has estado haciendo en las últimas semanas que he estado fuera? —Lanzando la pregunta directamente, la ceja de bella se levantó, esperando que el niño respondiera su pregunta.

Por un lado, la declaración de bella había sacudido su mente, y quería preguntar sus propias dudas para saber a qué se refería la mujer. Sin embargo, Los ojos que ella le estaba poniendo, fueron algo que simplemente hizo que Harry no pudiera evitar hacer lo que le estaba pidiendo.

– Yo, bueno, he hecho muchas cosas, y no sabría a cual te refieres.

Sonriendo lentamente, Bella acarició con cariño la palma de Harry.

– Me refiero a tus avances en las runas antiguas, quiero que me digas que planeabas hacer con ellas.

Afilando su mirada y queriendo ver si sus miedos estaban fundamentados, Bella cuestionó mientras se aseguraba de no perder el más mínimo detalle del lenguaje corporal de su alumno.

El niño parecía haber sido tomado con la guardia baja, y pareció dudar por unos segundos antes de simplemente responder a su pregunta.

– Estaba investigando la forma de poder unir una runa directamente al cerebro, manipulando la esencia misma de la magia, por medio de una proyección de legeremancia en el globulo interno de la mente.

Era simplemente una teoría que iba a probar contigo, una vez que la runa de contención que tenía destinada, a detener la influencia de tu otro yo estuviera lista. "Creí que una vez que pudiera hacerte despertar, y no estuvieras bajo la amenaza de ser consumida por tu alter ego, las cosas podrían comenzar a funcionar".

Aunque por tu rostro, Siento que tomé el camino equivocado, ¿Verdad?

Asintiendo con su cabeza, y dando una mirada culpable al niño frente a ella, Bella suspiró, en señal de derrota.

– Sí. Lo hiciste. Al menos si se trata de mi condición. Verás, Yo misma ya había intentado algo como lo que estabas haciendo, y créeme, las runas no son capaces de contener mi problema.

Verás Harry, lo que me afecta no es simplemente un problema de personalidad, es algo mucho más complejo, más terrible de lo que puedes imaginar.

– ¿Entonces no es una separación forzada de la mente, usando Oclumancia? —Interrumpiendo a su maestra, Harry cuestionó, haciendo que bella negara con su cabeza.

– No Harry, eso se podría pensar en primera instancia si no supieras la verdad de las cosas. Y si soy sincera dicha verdad es más estúpida de lo que puedes creer.

– No es estúpida. —Volviendo a Interrumpir y apretando las manos de bella con cariño, los ojos de Harry se iluminaron brevemente.

– Cualquier cosa, que halla provocado que tengas esa situación no es algo estúpido. Te conozco bella, sé muy bien como eres y aunque no conozca los detalles exactos, sé muy bien que cualquiera que sea la causa de que tu mente esté fragmentada, no es una estupidez.

Sonriendo con cariño, al ver la confianza que Harry tenía sobre ella, Bella no pudo evitar sentir que el chico merecía saber su secreto.

Había estado trabajando tan duro para poder ayudarla, y ella no le había dado nada más que vacíos de información. Sabía que tenía que informar sobre lo que había descubierto sobre los Horrocruxes de voldemort, pero tal vez eso podría esperar. Despues de todo, Harry merecía escuchar toda la historia.

– ¿Recuerdas cuando me preguntaste si algún día te iba a contar la verdadera razón por la que decidí prestarte mi ayuda?. —Asintiendo en acuerdo, Harry confirmó, y pudo notar casi de inmediato la confusión del niño ante el cambio de tema.

– Te dije que no lo sabía, y era cierto, no tenía ninguna intención de revelarte mis motivos, al menos hasta ahora.

Levantando sus manos y poniéndolas en las mejillas de su pupilo, Bella le dedicó nuevamente otra sonrisa amable, mientras clavaba sus ojos en los iris color esmeralda del niño que vivió.

– Baja tus escudos de Oclumancia Harry.

Voy a mostrarte la verdad, voy a contarte por qué te ayudé, y la razon por la que mi mente se ah fracturado.

Tomado nuevamente con la guardia baja, pero con un deseo de aprender una verdad a la que le había dado tantas vueltas desde que conoció a la mujer, Harry lo hizo, y de inmediato pudo sentir como una presencia entraba en su cabeza, Como una sensación con la que ya se había acostumbrado. Sin embargo, la sensación cambió por completo cuando imágenes empezaron a destellar en su mente, Y rápidamente se encontró viendo un recuerdo.

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Parte 6

24 De diciembre de 1974

Mansión Black.

– Estoy agotada. –Dejándose caer en las fauces de su cama, Bellatrix Black suspiró derrotada, mientras se permitía relajarse por primera vez ese día.

A veces me pregunto si vale la pena el cansancio de seguir esforzándome tanto para ayudar al hospital. —Dándose media vuelta en su cama, una sonrisa divertida apareció en el rostro de la adolescente.

Por supuesto que vale la pena, Estoy aprendiendo más sobre la elaboración de pociones, y encima estoy ayudando aunque sea un poco a quienes lo necesitan. —Poniéndose de más buen humor, Bella no pudo evitar sentir como la satisfacción la empezaba a invadir.

Estaba a menos de un año de terminar sus estudios en Hogwarts, y ya tenía puesto su ojo sobre un aprendizaje de sanador.

Su plan era trabajar al menos 5 años en esa profesión, para después apuntar a un trabajo en el ministerio como uno de los inefables, una idea que había tenido desde que supo lo que hacían esas personas, y se había especializado en las artes de la mente, junto con runas antiguas y aritmancia.

– Me pregunto si Sisy querrá unirse a mí una vez que termine sus estudios.. —Negando rápidamente con su cabeza, ella descartó esa idea.

Su hermana pequeña estaba muy prendida del vástago malfoy, y dudaba que la fuera a disuadir para escapar con ella de su hogar, y darle la espalda a su familia tal y como su hermana mayor lo había hecho años atrás.

– ¿Cómo estará andy? —Pensando en su hermana mayor, un ceño fruncido adornó su expresión.

Aún seguía enojada con la mujer por haberlas abandonado por un sangre sucia, pero no podía negar que a veces pensaba en ella, y le gustaría saber como estaba su vida ahora que estaba lejos de su padre. —Haciendo una mueca al pensar en el hombre, la expresión de bella se volvió ilegible.

Su relación con su padre no había dejado de deteriorarse, después de que había fracasado en el ritual de la familia, Para aprender las magias de su casa.

Desde ese día, su padre la había descartado, la había olvidado y se había concentrado en su hermana menor.

– Bueno, no es como si importara realmente. —Encogiéndose de hombros y apartando su atención de ese pensamiento, Bella miró al techo de su habitación con clara intención de relajar su mente. Sin embargo, cualquier idea que pudo tener sobre relajarse, y dejar ir cualquier preocupación fue detenida, cuando el familiar aleteo de una lechuza entró en sus oídos.

– Dios, no aquí también. —Mirando con fastidio a la lechuza que tenía parada en el alfeizar de la ventana, Bella hizo una mueca, mientras recogía la carta de las garras de la lechuza.

Sabía perfectamente a quien pertenecía esta ave, y el pensamiento le hizo querer vomitar.

Rudolpus Lestrange, era una maldita molestia, un dolor de cabeza que había tenido que soportar los últimos 6 años en Hogwarts.

El bastardo simplemente no podía ver que no estaba interesada en nada relacionado con él, y aún seguía insistiendo en cortejarla.

Aguantando las náuseas que sintió al pensar en el hombre, Bella no pudo evitar enfurecerse, al recordar cada intento que el cabrón había intentado sobre ella.

Al principio habían sido cumplidos, cortejos lentos y nobles, pero cuando eso no funcionó, y el cabrón se empezó a desesperar, había recurrido a intentos más directos, llegando al punto de querer forzarla a hacer cosas, lo que le había ganado varias idas ala enfermería, y muchas maldiciones oscuras en su maldita espalda.

¿Qué mierda querrá ahora? —Abriendo la carta con molestia, ahora que los recuerdos de esas ocasiones volvieron a ella, Bella destruyó el sobre con sus manos, antes de empezar a leer el contenido del papel.

Querida bellatrix, feliz navidad, sé que no debiste haber esperado una carta mía, después de lo que sucedió en la sala común, pero solo quería disculparme una vez más, e informarte que tengo un regalo, que estoy seguro de que ambos disfrutaremos cuando sea anunciado.

Espero estés ansiosa por descubrir a que me refiero, y estarás sabiendo de mí más tarde que nunca.

Con amor, Tu Pequeño Rudolpus.

– Que montón de mierda. —Quemando el papel con un rápido hechizo de fuego, Bella miró las brazas con absoluta molestia. Porque el bastardo no podía entender que no quería tener nada que ver con él.

Era algo tan simple, y el hecho de que su diminuto cerebro no pudiera procesarlo, solamente hacía que su furia y odio hacia el bastardo se hiciera más fuerte.

Cuando volviera a Hogwarts, se aseguraría de recordarle al hijo de puta, el porqué no debía meterse con ella.

– Bella, ¿puedes bajar?. —Escuchando la voz de su madre desde la parte baja de su habitación, Bella se levantó de su cama e hizo lo que la mujer estaba pidiendo.

Su madre y su hermana eran las únicas personas con las que aún actuaba con normalidad, y no les mostraba el lado frío que había adquirido desde que entró en la casa de las serpientes.

En Hogwarts, siempre tenía que estar atenta y mostrarse fuerte, porque si llegaba a dar el más mínimo indicio de debilidad, la casa se la iba a tragar, más si consideraba el movimiento sangre pura que había estado ganando fuerza en los últimos 2 años.

– ¿Qué sucede mamá? —Preguntando directamente tan pronto como estuvo en la sala de estar, Bellatrix dijo tranquilamente, antes de notar el ceño fruncido en el rostro de su madre.

– ¿Mamá está todo bien? —Cuestionando en un tono preocupado, ella dijo, y su madre rápidamente negó con su cabeza.

– No Bella, no lo está. —Mirando con total rabia y tristeza en su rostro, Druella respondió, mientras veía el estado confundido en el rostro de su hija. Siéntate por favor. —Indicándole el asiento aún lado de ella, druella pidió, y cuando su hija hizo caso a sus palabras y se sentó aún lado, los brazos de la mujer se envolvieron con fuerza en su pequeña.

– Perdóname Bella. Perdóname por no ser tan fuerte. —Empezando a sollozar en el hombro de su hija, La matriarca Black, declaró abatida.

– Mamá, ¿Qué sucede? ¿Por qué me pides perdón?. —Tratando de obtener respuesta y con un nudo formándose en su garganta, Bella cuestionó, en un intento de entender la situación .

– Es tu padre Bella, el bastardo te ha entregado en un contrato de matrimonio arreglado, y no pude hacer nada para detenerlo.

Sintiendo como todo su mundo se rompía, y su sangre se helaba por las palabras que estaba escuchando, la garganta de bella se secó cuando un pensamiento llegó a su mente.

– ¿Quién? —Ella había preguntado en un susurro, temiendo la respuesta que saldría de su madre.

– Rudolpus Lestrange. —Como si hubieran vertido un balde de agua fría en su cuerpo, la furia y el miedo de bella la empezaron a inundar.

– "No". Alejándose de su madre y no queriendo quedarse más tiempo en esa habitación, Bella corrió hacia la cocina, antes de aparecerse en un chasquido atronador.

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Crack, crack, crack.

Explotando en miles de pedazos, la corteza de varios árboles salió disparada en multitud de direcciones, mientras uno tras otro eran destruidos por hechizos amarillos.

– Maldito bastardo. "Te odio". —Rugiendo con todo el odio y la zaña que pudo reunir, la varita de bella se deslizó en multitud de direcciones, mientras los hechizos destruían por completo el bosque de la familia black.

¿Porque siempre las cosas tenían que ser tan injustas para ella?.

¿Porque siempre su maldito padre era el causante de su miseria?.

¿Porque siempre era ella quien tenía que sufrir?.

¡Porque, maldita sea!. —Enviando otra maldición explosiva hacia un cráter, la visión de bella empezó a flaquear, mientras el agotamiento mágico empezaba a pasar factura a su cuerpo.

Había estado lanzando magia sin descanso en la última hora, y su cuerpo ya no podía seguir sin un descanso.

Pero, ¿Se iba a detener? Absolutamente no. Su odio estaba ardiendo con ira, sus sentimientos estaban hecho un lío de emociones y necesitaba desahogarse.

– Bella mi vida ¿Qué estás haciendo? —Apretando con ira su varita, y sintiendo como todo el cansancio explotaba fuera de su cuerpo, los ojos de Bellatrix brillaron con rabia pura, mientras se volteaba hacia el recién llegado.

– Crucio. —Soltando el nombre del hechizo, y sin importarle ni un poco que pudiera ser enviada a Azkabán, Bellatrix descargó toda su ira, en el cuerpo tambaleante del bastardo que había arruinado su vida.

– Maldito infeliz, todo es tu maldita culpa. Todo mi futuro está arruinado por tu maldita existencia. "¡Porque mierda no lo pudiste entender!" ¿Por qué carajo no aprendiste que yo no quería nada que ver contigo?. Porque, no pudiste alejarte de mí.

– Bella mi amor, yo.

– ¡Crucio! —Volviendo a lanzar su hechizo, el rostro de bella se oscureció aún más.

Por tu culpa y la de mi padre, voy a ser reducida a una maldita ama de casa, voy a ser reducida a una esposa trofeo. estaré atada aún maldito matrimonio sin amor, por el resto de mi vida y todo es tu maldita culpa. —Soltando el hechizo, bella se alejó del cuerpo inmóvil de su prometido.

Su fatiga estaba amenazando con consumirla, y no quería desmayarse a merced de este cerdo.

– Bella, porque me haces esto, yo te amo. —Incluso aunque su cuerpo estuviera temblando por la tortura inducida por su hechizo, la resistencia que el bastardo tenía sobre su cuerpo era fuerte, y tuvo el suficiente valor para hablar.

– Te lo hago, porque, te odio. Te aborrezco, y preferiría casarme con un cerdo a pasar el resto de mi vida contigo.

Sé la clase de hombre que eres, y la sola idea de ser reducida a nada, por tus malditos caprichos me hace vomitar.

Tal vez mi padre quiera que me case contigo, pero yo nunca lo voy a hacer.

—Escupiendo con veneno su última declaración, Bella dijo, Antes de empezar a alejarse con clara intención de salir de allí.

– Sí tú no te casas conmigo, entonces tu pequeña hermana va a ser jodida por mí. —Sintiendo como la bilis llegaba a su garganta, Bella se giró violentamente y miró al hombre a los ojos.

– ¿Qué acabas de decir? —Sintiendo una ola de valentía, Rudolpus miró a la mujer con desafío.

– Tu padre sabía que nunca aceptarías este trato, así que también me ofreció a Narcissa como un sustituto en dado caso de que te negaras.. Así que, querida bella, si no te casas conmigo, voy a joder a tu amada hermana hasta que me canse, y la vuelva solamente una vil puta..

– Crucio. —Incluso aunque sus venas ardían como el infierno por el cansancio magico, Bellatrix volvió a lanzar el hechizo sin importarle el dolor.

– ¡Nunca, Vas a tocar a mi hermana, Incluso si debo acabar con tu vida. —Sintiendo más odio y con la perspectiva de que su hermana fuera tomada por este bastardo ruin, la varita de bella se empezó a iluminar en color verde.

– Bellatrix, ¿Qué estás haciendo? No puedes. Te encarcelarán por esto. —Gritando alarmado incluso aunque su cuerpo no se pudiera mover, y estuviera sintiendo un inmenso dolor, Rudolpus gritó en pánico, mientras trataba de evitar su inevitable final.

– Hago, lo que debo hacer para proteger a mi familia. Hago, lo que debo hacer, para ser libre.

—Avada keda. —Sus palabras murieron en su boca, cuando sintió un hechizo golpear contra su pecho.

Un hechizo aturdidor había sido lanzado hacia ella, y antes de que su mundo se pusiera negro, vio el familiar rostro severo que tanto se había acostumbrado a odiar.

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– Te das cuenta del daño que le has hecho a tu prometido. Lord Lestrange está furioso por tus acciones y pide una maldita compensación.

Ahora por tu culpa las ganancias que estaba ganando al comprometerte con Lestrange, se han ido, y estoy furioso maldita mocosa.

Ignorando por completo la reprimenda que su padre le estaba dando, los ojos de bella miraron con ninguna muestra de emoción al que alguna vez había llamado papá.

– Hazme maldito caso.

¡Crucio! —Sintiendo como el hechizo de la tortura era lanzado hacia ella, Bellatrix se retorcio con dolor, mientras el hechizo rojo era puesto sobre su cuerpo.

Podía doler como el infierno sentir esta sensación, pero no iba a gritar, no le iba a dar la satisfacción a este bastardo.

– ¿Crees que eres fuerte? ¿Te crees que estás por encima de mi autoridad? —Acercándose a su hija, el hombre la agarro por el cuello, antes de darle una Cachetada.

– No eres nada, no tienes ninguna fuerza, eres simplemente un producto defectuoso y estoy arto de esa actitud tuya. —Conjurando su varita, el mago conjuró un pergamíno, y sonrió oscuramente, mientras una pluma aparecía en su mano libre.

– Iba a darte un matrimonio arreglado tradicional, pero ciertamente tú no mereces eso. Necesitas aprender a someterte, y tengo justo lo que tu esposo necesitará.

Garabateando con furia el papel, el hombre sonrió divertido antes de hechizar el pergamíno, y dirigir su varita hacia su hija.

– Acnetus cadersus.

Pronunciando el nombre del hechizo y disparándolo hacia la adolescente en el suelo, el hombre sonrió complacido, mientras veía como una marca de un collar, aparecía en el cuello de su hija.

– Ahora harás todo lo que tu querido esposo quiera de ti ,y nunca podrás ser libre, y todo esto es por tu culpa.

– ¡Crucio! —Volviendo a disparar la maldición, Bella se volvió a retorcer sin emitir ningún sonido hasta que El hechizo finalmente se detuvo.

– Me harté de tu presencia. —Escupiendo la cabeza de su hija, el hombre se dio media vuelta y salió de la habitación, dejando a una Bellatrix tirada en el suelo, con sus ojos carente de cualquier emoción.

Ya nada le podía importar en estos momentos, su futuro había sido arrebatado, y no había nada que ella pudiera hacer para evitarlo.

Todo habia terminado, y lo unico que le quedaba, era simplemente deseear que su oclumancia pudiera soportar el infierno que estaba por experimentar.

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21 de noviembre de 1975

– Eso estuvo delicioso. Que encantador es follarte tanto como quiero. —Poniéndose los pantalones, Rudolpus Lestrange se vistió, sin importarle ni un poco las lágrimas derramadas y el rostro morado que su prometida tenía.

Arregla eso, y nos vemos en el castillo, iré a disfrutar el resto del tiempo en hogsmeade. —Saliendo De la habitación con un portazo, Rudolpus le dio una mirada engreída a la mujer, antes de cerrar la puerta de golpe.

– Odio esto. —Acurrucándose en un rincón de la habitación, Los sollozos de bellatrix no pudieron ser contenidos por más tiempo, y empezó a lagrimear con más fuerza.

Ya no podía soportar esta vida. Ya no podía simplemente seguir aguantando, su mente estaba rota, Su cuerpo quería descansar, y solo podía ver una salida viable, para poder liberarse de la tortura que era ser bellatrix Lestrange.

– Avada Kedavra. —Susurrando el nombre de su hechizo, su varita tomó una luz verde, y la miró por unos segundos, antes de que su cuerpo simplemente sufriera una descarga que deshizo la magia.

Como si pudiera salir tan fácil de su sufrimiento. —Haciendo una mueca de disgusto y llena de impotencia, Bellatrix lloró más fuerte, mientras se dejaba consumir nuevamente por su miseria.

No podía morir, no podía ser feliz.

Era una marioneta al servicio de un bastardo, y su vida parecía estar encaminada a cosas mucho peores.

Recordando el rostro de un hombre que había conocido recientemente en el bosque prohibido, Bellatrix hizo una mueca, mientras fácilmente podía ver su futuro.

Ya no solo sería esclava de un cerdo bastardo, sino que tendría que jurar lealtad a un hombre que se creía superior a los demás, que creía que sus seguidores eran simplemente marionetas, y su estúpido esposo no podía darse cuenta de ese simple hecho.

– Reducto. —Mordiendo sus labios con fuerza hasta hacerlos sangrar, la rabia fría empezó a volver, y sus hechizos empezaron a hacer pedazos la casa de los gritos.

Alguien sálveme, alguien máteme, cualquiera de las dos es bienvenida, así que por favor simplemente sáquenme de mi miseria. —Enviando un nuevo hechizo hacia una biga en el techo, Bella miró confundida, como un viejo libro caía de donde había impactado su hechizo.

– ¿Qué es eso? —No pudiendo evitar preguntar, Bellatrix empezó a gatear hacia el libro, y cuando estuvo lo suficientemente cerca para leer la portada, su rostro se oscureció.

Artes Oscuras, por Geller Grindelwal.

¿Qué es este libro? ¿Qué está haciendo un libro escrito por el mago oscuro más temido en este lugar. —Abriendo el libro lentamente, Bella lo empezó a leer, y se dio cuenta de que su contenido estaba prácticamente en blanco.

Las páginas habían sido arrancadas, y solo quedaban 5 en donde antes había habido muchas más.

Separación de la esencia mágica.

Leyendo lentamente y sintiendo genuina curiosidad por el título, Bellatrix empezó a leer el contenido, y su rostro se convirtió en uno de esperanza, cuando terminó todas las páginas.

Ella podía usar esto. Ella podía intentar este ritual y tal vez encontrar una salida a su miseria. La idea había llegado tan pronto como entendió la naturaleza del proceso, y la esperanza no tardó mucho en aparecer.

Esta podía ser su salida, podía ser lo que tanto había esperado. ¿Pero, se arriesgaría?. Por supuesto que si.

Levantándose rápidamente de su posición en el suelo, la varita de bella giró en su mano, mientras empezaba a trazar el círculo rúnico que el libro había indicado.

Una para el cuerpo.

Una para el alma.

Una para la magia.

Creando las runas individuales que el libro decía, Bella terminó el círculo rúnico, después de 5 minutos.

– Ahora, necesito sangre. —Cortándose el dedo con un rápido hechizo de corte, Bella soltó la cantidad indicada antes de ponerse en el centro.

Ahora, necesito empezar. —Leyendo una última vez las instrucciones, Bella se preparó para lo que estaba por venir.

Defrevtus.

Empezando a cantar y sintiendo como su magia nutria el círculo rúnico, los ojos de bella vagaron hacia el centro de su cuerpo, mientras sostenía una daga conjurada en sus manos.

Divredstu.

Sintiendo como su magia, era empezada a drenarse cada vez más rápido, Bella siguió con su canto.

Dobretrus.

Boom. —Sintiendo un pulso de magia, los ojos de Bellatrix se abrieron con asombro, al ver emerger en partículas de luz, una copia exacta de su cuerpo enfrente de ella.

– Está funsionando, realmente funciona. —Sonriendo con alegría sincera, Bellatrix estiró su mano, y tocó el pecho de la copia de luz.

Ahora, Tú llevarás mi odio. Llevarás mi rabia, llevarás todo lo malo de mí, y serás todo lo que nunca quise ser.

Brillando en color rojo en respuesta a sus palabras, La figura levantó su mirada, y esperó sus siguientes indicaciones.

Estarás activa durante 9 meses del año, y yo estaré durante 3. Nunca sabrás de mi existencia, ni de este proceso hasta que vuelvas a mi cabeza. Tú eres la original, y eso es lo único que debes saber.

Brillando en color verde, la figura de luz empezó a parpadear y bella supo que era el momento.

– Es hora. —Agarrando con fuerza la daga que tenía en sus manos, Bella la bajó, y se apuñaló directamente en su corazón. Y tan pronto como la daga tocó su pecho, sintió como su mente se partía, como su cuerpo se torcía, y un muro aparecía en su mente, mientras su conciencia era empujada hacia atrás.

– ¿Funcionó? —Preguntándose para sí misma, ella se dijo, antes de que notara que estaba en un espacio vacío.

Un espacio que reconoció como su paisaje interior. "Si yo estoy aquí, eso significa que. —Chasqueando sus dedos y apareciendo una burbuja transparente, Bella no pudo evitar sonreír, al ver una escena que la hizo sentirse sumamente orgullosa.

El ritual había funcionado, y parecía que el tiempo ya había pasado fuera de su mente, porque enfrente de ella, podía ver su cuerpo torturar a Rudolpus con el hechizo cruciatus.

El bastardo parecía confundido del porqué su control sobre ella no estaba funcionando, y eso solo hizo que la escena fuera más dulce de ver.

Nunca podría controlar a su otro yo, porque la que había sido encadenada a ese contrato matrimonial había sido ella, y para la magia misma, ella ya no se encontraba en ese cuerpo.

La que estaba a cargo era una nueva entidad, y ella disfrutaría viendo cada cosa que su nueva normalidad le iba a mostrar. Después de todo, finalmente era libre, y ya no tenía que sufrir.

Ella podría ser feliz, y aunque no fuera de la manera que esperó, Ella Sería una prisionera en su mente de todas las cosas, pero esto fue mucho mejor que ser una marioneta. Ella era libre de elegir su propio destino, y esto era algo que ella podía disfrutar.

Nadie nunca la volvería a controlar, y ese solo hecho, fue lo que le hizo sentirse conforme consigo misma. Tal vez no era la vida con la que había soñado, pero no se iba a quejar. Ella era quien controlaba su destino, y nunca nadie la iba a volver a lastimar.

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4 de septiembre de 1982

Suspirando con cansancio, Una mujer se recostó contra los barrotes de su celda, mientras el frío del lugar la empezaba a llenar.

Azkabán ciertamente no era el lugar, donde la bruja esperaba pasar sus días cuando ella tenía el control, y la situación ciertamente la estaba desesperando.

Había sido encarcelada por el crimen de torturar hasta la locura a la familia Longboton, y ahora pasaría el resto de sus días encerrada en esta celda.

Pero, ¿esto era diferente a como había estado viviendo en los últimos 7 años?. Absolutamente no.

Su vida desde que había partidos su esencia mágica en 2 partes había sido una de total encierro. Una de aislamiento, donde solamente tenía 3 simples meses para ser quien algún día fue.

Tenía 90 días para disfrutar de su vida, incluso aunque tuviera que cargar con todos los pecados, que su otro yo había hecho por sus acciones.

El peso de todo el daño que su contra parte causaba al resto de las personas, le dolía, le hacía sentir culpable, pero incluso aunque todo esto pesara en su mente, Bella no se arrepentía de la decisión que había tomado.

La otra Bellatrix se había convertido en algo que ella nunca había esperado lograr. Era una maniática inestable, que conseguía todo lo que quería, y lo había demostrado, no únicamente hundiendo en la miseria a su antiguo padre, sino que había logrado obtener el liderazgo de la casa Lestrange, haciendo uso del señor oscuro.

La otra Bellatrix era leal al mago oscuro, pero incluso con su fe ciega al hombre, ella sabía aprovechar sus oportunidades, y tan pronto como estuvo segura de que podía sacar algún provecho, la mujer no se tentó la mano, y le pidió como recompensa que Rudolpus le diera su casa. Y así, con simples palabras de gratitud, Bellatrix Lestrange fue convertida en una laidy, dejando en la miseria al hombre que la había destruido.

Verlo arrastrando y suplicando piedad cada vez que bellatrix lo enfrentaba era satisfactorio de ver, y era algo que ella nunca se podría cansar de ver.

– Zrt,zrt,zrt.

Sintiendo un abrumador frío entrar en sus huesos, Bella entrecerró sus ojos mientras se preparaba para lo que venía. Los dementores pasaban por su celda cada cierto tiempo, y le hacían pasar una tortura a la que ella ya se estaba cansando de llegar.

– Pero, no tengo que soportarla. Puedo recluirme en mi mente y dejar que la otra se encargue. —Sonriendo maliciosamente, Bellatrix empujó con fuerza su mente hacia atrás, e hizo algo que nunca había intentado.

Forzó a la otra Bellatrix a tomar el control, y cuando ella regresó a su familiar celda que era su mente, no pudo evitar sonreír con malicia al ver como los dementores ya estaban haciendo su trabajo.

La otra bella se estaba retorciendo bajo los efectos de las bestias, y eso hizo que una sonrisa se plasmara en sus labios.

Podría no arrepentirse de sus decisiones, pero eso no significaba que no disfrutara, ver ala causante de tanta miseria sufrir un castigo apropiado.

Era karma divino, y ella estaba feliz de que su otro yo, sufriera por todo lo que había hecho.

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25 de mayo de 1995

El sonido atronador de una explosión, hizo que su mente retumbara, y el sueño en el que había estado dormida, fuera retirado de su mente.

¿Cuánto tiempo había pasado desde que ella se durmió?

Haciendo memoria, el paso del tiempo no podía ser contado con exactitud debido a su situación, pero si la forma demacrada de la mente de su otro yo era un indicativo, eso significaba que habían sido por lo menos un par de años.

– Mi señor. —Levantando una ceja curiosa al escuchar los pensamientos de su otro yo, Bella chasqueó sus dedos, mientras una burbuja aparecía enfrente de su vista.

Se sentía un poco mariada después de despertarse de una manera tan abrupta, pero la conciencia rápidamente la estaba empezando a llenar.

– Bella querida, he venido por ti. —Abriendo los ojos con incredulidad al ver a un hombre que había estado muerto, mucho antes de que fuera arrojada a azkabán, Bella no pudo evitar el ceño fruncido que apareció en su rostro.

¿Por qué el señor oscuro estaba vivo?

¿Cómo era posible que hubiera vuelto a la vida?

Cuestionándose por un largo rato, Bella simplemente decidió dejar el tema de lado.

No tenía la menor idea de como era posible que su señor hubiera vuelto, pero esta era una oportunidad.

Lord Voldemort estaba rescatando a su otro yo, y eso significaba que ella sería libre. Después de tanto tiempo de estar encerrada, podría estar fuera de su mente y sentir el calor de la libertad.

Sonriendo ampliamente, y sintiendo como la emoción la empezaba a llenar, los ojos de Bellatrix se llenaron de anhelo, mientras veía toda la escena desarrollarse atra vez de su burbuja.

Voldemort estaba asaltando azkabán, y por lo que parecía el hombre tenía la intención de llevarse a todas sus fuerzas, pero eso era algo que a ella no le importó.

Mientras pudiera ser libre una vez más, todo estaría bien. Quería sentir la libertad nuevamente tocando su piel, antes de que finalmente pudiera descansar.

Porque si, Ella ya lo había decidido muchos años atrás. había sido durante el segundo año que había pasado en azkabán, cuando decidió tomar este camino.

Ella quería morir, quería dejar de causar miseria a las personas, y finalmente liberarse de la tortura que era su vida.

Todo lo que alguna vez había pensado que quería, ya no importaba ahora. Bellatrix Lestrange se había asegurado de que no tuviera un futuro en este mundo, y ella se aseguraría de que la mujer tampoco lo tuviera.

Los años no habían pasado en vano, y aunque su cuerpo se hubiera deteriorado, su mente no había parado de crecer y analizar toda su vida.

Los dementores habían ayudado con eso, y el ver todas las torturas, la miseria que su otro yo había hecho, Habia provocado, que ella simplemente quisiera un respiro. Quería estar en paz consigo misma, y ya sabía que es lo que haría.

Solo necesitaba salir de aquí, y una vez eso estuviera fuera, todo podría comenzar.

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26 de mayo de 1995

Finalmente estaba libre. —Apareciendo en un chasquido en su antiguo departamento, Bellatrix entró en el lugar, y vio el polvo que se arremolinaba en las habitaciones.

El departamento había estado vacío por mucho tiempo, y ella lo sabía.

Este era el futuro en el que había estado pensando mucho antes de que su vida fuera arruinada por ese contrato.

Su abuelo el antiguo Lord Black, se lo había dejado como una muestra de amabilidad, y nadie tenía idea de donde estaba este lugar.

Su abuelo se había asegurado de eso antes de morir, y ella estaba agradecida con el hombre.

De todas las personas en la casa black, él siempre había sido alguien amable que la había apoyado en sus decisiones, y que si hubiera estado vivo en ese tiempo en donde todo se fue a la mierda, las cosas hubieran sido diferentes.

– Dicksy. —Llamando a su elfo doméstico, la pequeña criatura apareció en pop, y la bruja la miró con una sonrisa.

Había conocido al elfo durante su tercer año en Hogwarts, y ella se había vinculado con ella, haciendo un trato temporal. La pequeña le serviría durante las vacaciones del castillo, y el resto del tiempo, seguiría con sus labores como un elfo del castillo.

– En que le puede servir dicksy este día señora bella. —Inclinándose respetuosamente ella le dijo, y bella simplemente le dio una pequeña sonrisa.

– Acabo de volver a tomar el control de mi cuerpo, y necesito que este lugar quede limpio. ¿Podrías hacerlo?

Girándose para ver el polvo del apartamento, dicksy asintió en acuerdo.

La pequeña estaba consiente de su situación, por lo que el hablar directamente de las cosas, no era un problema.

– Dicksy se encargará en un momento joven ama. Si gusta puede darse un baño. —Sonriendo agradecida, Bella se dirigió hacia la habitación principal.

Conocía perfectamente el departamento, porque había estado planeando mudarse aquí, tan pronto como terminara Hogwarts, y finalmente ella abandonara a su familia. Una idea que había sido aplastada, cuando su vida fue destrozada.

Haciendo una mueca, y enviando esos pensamientos al fondo de su mente, Bella decidió que no lo pensaría más.

Tenía 92 días restantes para hacer todo lo que alguna vez quiso hacer, para disfrutar de la vida que le quedaba, antes de que inevitablemente terminara con su destino.

No podía morir directamente, pero ya tenía una maldición pensada para acabar con su otro yo.

La debilitaría con el paso del tiempo hasta que sus capacidades mágicas fueran casi nulas, Para que inevitablemente alguien la pudiera matar. Si bien ella era fuerte, y sumamente letal con su varita, La mujer tendía a confiarse demasiado en una batalla, debido a la locura que consumía su mente. Era por esa razón que decidió este plan de acción.

No solamente aseguraría que alguien la matara en un futuro mientras ella no tenía el control, sino que también podría disfrutar del espectáculo de ver a su contra parte, siendo derrotada por cualquier mago mediocre. Tal vez podría ser incluso una ama de casa quien lo hiciera al final.

Sonriendo ante ese pensamiento, Bella se quitó la ropa y se dirigió hacia su baño.

No le daría más vueltas al asunto, ya había tomado su decisión, y ahora solo necesitaba descansar.

Los próximos días que le quedaban, los iba a usar de una manera en que pudiera disfrutar al máximo su vida, y nada la iba a detener.

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22 de junio de 1995

Apareciéndose en un bar a lazar, Bella se estiró lentamente mientras dejaba que sus músculos se relajaran.

Había tenido una reunión con el señor oscuro por medio de la red flu, y el suceso solo hizo que el cansancio de su mente amenazara con invadirla.

El bastardo quería que estuviera en la Mansión malfoy para discutir los planes de guerra, y eso era algo que realmente no tenía ganas de hacer.

No sabía si voldemort notaria su cambio de personalidad, y ciertamente no quería arriesgarse, por lo que optó por un enfoque más directo.

Actuó como la loca desquiciada con la que todos la asociaban, y proyectó una aura de locura, mientras lanzaba una ilusión en su habitación, haciendo parecer que estaba torturando a varios muggles, y eso pareció detener cualquier intento que el señor oscuro tuviera sobre ella.

Normalmente él nunca sería tan indulgente, Pero bellatrix era su mano derecha, y el hombre sabía que podía confiar en ella.

– Estúpido. —Sonriendo divertida, Bella entró en el bar, y empezó a relajarse con el sonido de la música.

Nunca había disfrutado de su juventud, y ahora que su tiempo estaba contado, se había asegurado de hacer todo lo que una vez le negaron.

Ya no había nadie para dictar su vida, y ella era libre de hacer lo que quisiera.

– Bailas muy bien.

– Eres hermosa.

– Vamos a la cama.

Piropo tras piropo, fueron lanzados hacia ella en todo el tiempo que estuvo disfrutando del baile muggle. No les daba importancia porque realmente no era como si tuviera las ganas de seguir esa conversación.

Podría disfrutar de las cosas, pero el acostarse con alguien desconocido no era algo que le llamara la atención.

Su primera vez había sido robada por un cerdo, y todas sus experiencias en ese tema, solo le hacían querer vomitar.

– Zrt, zrt, zrt, zrt.

Deteniéndose en seco al sentir una presencia mágica entrando en las protecciones que había puesto, La vista de bella se dirigió rápidamente hacia el mago que había entrado en el bar.

Ese mocoso, es Harry Potter.

Sintiendo una total incredulidad, al ver por primera vez al niño que vivió entrar en este lugar, La atención de bella se centró con cautela en las acciones que el niño estaba por hacer.

Si él estaba aquí, ¿eso significaba que alguien más venía con él?

Volviendo a checar las protecciones de bolsillo que había puesto antes de entrar al bar, Bella sacudió la cabeza.

No había nadie más, solo estaba él y eso solo hizo que su curiosidad empezara a emanar.

¿Qué estaba haciendo el chico Potter, aquí solo de todas las cosas?

¿Acaso nadie se preocupaba por él, cuando el señor oscuro había renacido? —Cuestionándose internamente, Bella sacudió su cabeza. Debía haber algo más en todo esto, pero ciertamente no tenía ganas de involucrarse en cualquier cosa que el niño estaba haciendo, Asi que lo mejor seria que ella se fuera. —Decidiéndose a irse de lugar, Bella estaba por aparecerse, antes de que notara algo familiar en los ojos del niño, cuando el chico pasó a su lado.

Ella conocía las emociones que los ojos del niño estaban mostrando, ella las había visto muchas veces en su rostro en el pasado, y eso hizo que cualquier pensamiento de irse de lugar, fuera descartado.

Tal vez podría quedarse un poco. —Sentándose en uno de los muebles del lugar, la vista de bella se centró, en el adolescente a unos cuantos metros lejos de su posición.

El mocoso estaba tomando como si nada importara. Parecía que era su primera vez, si el ceño fruncido en su rostro era una indicación de que había acertado.

Pero incluso aunque al principio la bebida le caló en la garganta, el chico siguió tomando, y rápidamente los minutos empezaron a pasar, hasta que finalmente esos minutos se convirtieron en horas.

– parece que me equivoqué. —Suspirando con fastidio, Bella estaba por volver a irse del lugar, antes de que una conversación lograra ser captada por su oido, que había sido mejorado con magia.

– ¿Quieres saber que es un Muggle?

– Ese estúpido, no irá a revelarlo. —Levantándose violentamente de su asiento, Bella empezó a acercarse al niño con clara intención de detenerlo.

Podía ver la sonrisa pícara adornando su rostro, y eso era una mala señal.

No sabía porque le debería importar si el niño rompía el estatuto del secreto, pero cuando se dio cuenta de lo que estaba haciendo, Ya era demasiado tarde.

No solamente había hablado de más, sino que tenía al niño a punta de varita, y lo estaba secuestrando. Se lo estaba llevando, y no sabía el motivo del porqué lo estaba haciendo.

Al menos, no hasta que entró a la mente del chico.

Una vez vio su vida y por todo lo que había tenido que pasar, Ella se dio cuenta del porqué le había interesado, y había sido atraída instintivamente hacia el niño que vivió.

La razon era simple.

Él era similar a ella en muchos sentidos.

No tenía sueños, no tenía ningún objetivo en mente y había estado solo la mayor parte de su vida. Era un extraño en el mundo mágico, que no podía encontrar su lugar en el mundo, Y que estaba siendo controlado por personas que no pensaban en su bienestar.

Harry Potter era simplemente una marioneta, y ella pudo reconocer los indicios en su vida que hacían que esa declaración tuviera valor.

El niño estaba solo, no tenía a nadie en quien confiar, y ese pensamiento la hizo sentirse mal.

Ella había estado a merced de personas que controlaban su vida, y no quería que este niño pudiera tener una vida miserable, tal y como ella la había conseguido.

¿Y si le ayudo un poco? —El pensamiento tan fugaz que pasó por su mente, Hizo que Bella se quedara de piedra. ¿Sería posible ayudar al niño?

Quiso reír al pensar en ese solo hecho, pero una parte de ella sabía que era posible.

Podía ayudar al niño a obtener todo el conocimiento que se le había negado, y prepararlo para afrontar el duro destino que tenía por delante. Tal vez, si hacía eso, el niño podría tener una mejor vida, y ella habría hecho algo importante con la suya.

Sintiendo como una calidez la empezaba a llenar, Bella se decidió.

Ayudaría a este niño de la forma en que alguna vez deseó que alguien la ayudara. Le daría las herramientas para que él pudiera tener una buena vida, y no hubiera forma de que terminara en la miseria, tal y como ella había acabado.

El niño que vivió, sería su legado, se convertiría en el logro más grande de su vida, y haría que el niño fuera feliz.

– Podrías convertirlo en tu asesino y darte una muerte más digna.

Quedándose inmóvil una vez más, un nuevo pensamiento inundó su mente, y esta vez Bella tuvo que luchar para no ceder.

La idea era tentadora, era realista, y podría ser mucho mejor morir bajo la varita de un poderoso mago que la de cualquiera.

Al menos así, su muerte sería recordada, y no quedaría simplemente como una de las seguidoras de voldemort.

Sintiendo un escalofrío recorrer su cuerpo, Bella miró el rostro temeroso del adolescente frente a ella.

Si hacia esto, sus acciones antes puras se convertirían en codicia, y eso estaba mal.

Pero. ¿Realmente importaba?

No era como si pudiera caer más bajo. Además, solo estaba pidiendo un pequeño favor.

Ella le ofrecería su ayuda, y él a cambio solo tendría que matarla. Era un ganar ganar, y no había nada malo en esa decisión. —Decidiéndose con una determinación casi anormal, Bella decidió hacer el primer paso.

Le ofrecería su ayuda sincera, y si el niño tomaba su mano, Ella tendría a su campeón. Un campeón que podría matarla, y en el proceso darle una buena vida, una vida que ella nunca podría tener, pero que tal vez, el niño podría lograr.

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Saliendo de los recuerdos de su maestra, Harry sintió las gotas caer por sus mejillas, mientras miraba la mirada avergonzada que bella le estaba dando.

El queria decir algo, romper el silencio que parecia haber llenado la habitacion, pero ella se le adelantó.

– Ahora conoces la verdad Harry. Entenderé si estás furioso conmigo o si te arrepientes de haber aceptado mi ayuda.

Sé que mis acciones son cuestionables en el mejor de los casos, ya que solamente te estaba usando para acabar con mi miseria, pero quiero que entiendas que realmente me preocupo por ti.

Al principio realmente no tenía ningún sentimiento especial por ti, solo eras un medio para un fin, pero eso ya no es así.

Tu presencia en mi vida ha sido un regalo, una luz en la oscuridad de mi miseria que nunca pensé que vería, y que ahora es lo único que me mantiene feliz.

Harry, nunca he dicho esto, y realmente no espero nada de ti. Pero al menos necesitaba decirlo antes de desaparecer.

Tomando una breve respiracion, los ojos de bella se iluminaron brevemente, antes de soltar lo que nunca habia querido admitir.

Me gustas Harry, y he comenzado a tener sentimientos hacia tu persona.

Sé que es egoísta de mi parte, ya que solo te he mentido desde que nos conocimos. Pero quería que lo supieras.

Mi tiempo contigo es limitado, y no quería volver a ser consumida por mi otro yo, sin la certeza de que al menos sabrás lo que siento por ti.

No debería poder ser feliz por todo el mal que he hecho, pero no hay nada que pueda hacer. Tus acciones y tu calidez lograron entrar en mi frío corazón, e incluso he tenido el deseo de vivir aunque sea por breves momentos.

Ese es el impacto que tu presencia ha tenido en mi vida, y sé muy bien que después de enterarte de todo esto, no querras tener nada que ver conmigo, pero no me importa.

Quería que supieras la verdad, para no tener que mentirte más. Vales muchísimo Harry, y cualquier persona se alegraría de tenerte, y por eso no podía seguirte mintiendo.

Me gustas Harry, y quiero pasar el resto de mi tiempo contigo. Eres el primer hombre por el que tengo estos sentimientos, y realmente te adoro. —Sintiendo como empezaba a lagrimear, Bella se preparó para el estallido que Harry estaba por hacer.

Sabía perfectamente que el niño debía odiarla, y ella estaba lista para aceptar cualquier cosa que el chico quisiera hacer.

– Eres una tonta. —Estremeciéndose por las palabras de su pupilo, Bella levantó la vista justo para ver como Harry ponía una mano en su mejilla, antes de besarla lentamente.

– ¿Harry? —Apartándose del beso con completa confusión en su rostro, Bella cuestionó mientras veía la sonrisa alegre que el niño tenía.

– No me importa ni un poco que me hallas usado Bella, has sido lo mejor que me ha pasado en mi vida, e incluso aunque tus deseos de ayudarme hayan sido producto de tu propio egoísmo, lo cierto es que me has hecho una mejor persona. Has hecho que sea más de lo que estaba destinado a ser, y por eso te estoy agradecido.

Si no fuera por ti, seguiría siendo un niño estúpido e ignorante del mundo que me rodea, probablemente hubiera seguido siendo manipulado por ese viejo bastardo de Dumbledore, y sería simplemente una oveja sin ningún criterio propio.

Gracias a ti, eso ya no es así, y siento que por primera vez tengo un futuro el cual esperar. —Sonriendo amablemente, la expresión de Harry se suavizó, mientras acariciaba la mejilla de su maestra.

– Pero, yo quería usarte, yo quería hacer que me mataras, y eso te hubiera causado un gran dolor. ¿Como puede no importarte?. —Encogiendose de hombros, sin dejar de acariciar el rostro de su maestra, Harry le dio otro dulce beso en sus labios, antes de volver a hablar.

– Realmente no me importa bella. has causado más bien en mi vida, de lo que cualquier persona ha logrado en los 16 años que he estado vivo. Eso es lo único que cuenta, y ahora que estás aquí, juntos podemos encontrar una salida a tu problema.

Ahora que sé realmente como fue que tu mente se dividió, puedo empezar a buscar una solución. Puedo empezar a buscar un futuro, en el que estemos juntos los dos. —Recargando su frente en la de su maestra, Harry miró directamente los ojos de bella.

– ¿Quieres un futuro conmigo Bellatrix? —Lanzando la pregunta más importante que había hecho en toda su vida, Harry dijo, y Bella se quedó en silencio por unos momentos.

Sabía perfectamente que su tiempo estaba contado y no podía dar una promesa vacía.

Pero, en el calor del momento y con sus sentimientos al rojo vivo para que Harry los pudiera ver, realmente no le importó responder con total sinceridad.

Al final del día, había prometido ser sincera con Harry, y eso es lo que ella iba a ser.

– Quiero, quiero pasar el resto de mi vida junto a ti. —Respondiendo con las lágrimas cayendo por su rostro, Bella le dijo con sinceridad, Y fue toda la confirmación que Harry necesitaba para seguir adelante.

Se abalanzó sobre su maestra, y la devoró con sus labios, mientras Bella se quedaba inmóvil por unos momentos, antes de corresponder al cariño que Harry le estaba dando.

El beso era fuerte, Era tierno, y estaba lleno de un calor que bella nunca había experimentado.

– ¿Puedo? —Mirando como Harry le pedía permiso para quitarle su vestido, bella asintió lentamente.

– Sí iba a entregarse a Harry por el resto de su vida, incluso aunque no supiera cuanto sería ese tiempo, bien podría llegar hasta el final.

– Puedes. —Cediendo antes sus deseos, El vestido de bella fue quitado de su cuerpo, y rápidamente le siguió la ropa del niño que vivió.

– Deberíamos irnos de aquí. —Susurrando en su oreja, Harry le dijo, y bella estaba a punto de aparecerse, antes de que Harry lo hiciera, y aterrizaran en la habitación principal.

– ¿Cuándo aprendiste a hacer eso? —Ella le preguntó genuinamente curiosa, y él solo la silenció con un dulce y voraz beso.

– Las preguntas al final querida bella, ahora solo déjame disfrutar el momento. —Sintiendo como un escalofrío la empezaba a recorrer mientras Harry mordía vorazmente uno de sus pechos, Bella se dejó consumir por las sensaciones de su cuerpo.

Nunca antes había tenido una buena experiencia en el sexo, pero mientras Harry se apoderaba de su cuerpo, Ella sintió que podía dejarse llevar.

Harry la estaba consumiendo con amor, con deseo, y los sentimientos que pudo sentir emanando de su alumno, fueron suficientes para entregarse por completo.

Harry ya tenía su mente, Harry ya tenía su corazón, y ahora finalmente le daría su cuerpo.

Y así, con ese último pensamiento, La mente de bella se dejó llevar por primera vez en su vida.

Esa noche sería una que ambos recordarían por el resto de sus vidas, como el día en que ambos amantes entregaron todo de sí el uno por el otro.

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Parte 7

Martes 15 de agosto de 1995

–¿Cómo fueron que las cosas terminaron de esta manera? —Dando un suspiro derrotado, y sintiendo como el cansancio invadía su cuerpo, Albus Dumbledore se sentó en un café familiar, el mismo que había visitado tantos años atrás, cuando se reunió con gellert.

Él no quería tener que hacer esto, pero Harry Potter lo había obligado a tomar esta decisión.

Había pasado más de dos semanas buscando al niño que vivió, y nada de lo que había intentado había dado resultado. Era casi como si la misma tierra se lo hubiera tragado, o en el peor de los casos hubiera sido asesinado por Voldemort.

Negando con su cabeza, el pensamiento fue descartado rápidamente, al recordar el registro que el libro de Hogwarts tenía sobre el chico.

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Aún estaba inscrito en la escuela, lo que significaba que el niño seguía vivo, y eso solo hizo que sus preocupaciones se hicieran mucho más fuertes.

El que el niño siguiera vivo y no hubiera rastro de él, solo podía significar que estaba junto a esa mujer, y las implicaciones de ese hecho le hicieron estremecer.

Severus le había asegurado que el señor oscuro tampoco tenía idea de en donde se encontraba bellatrix, y eso solo hizo que sus preocupaciones se hicieran más grandes.

La mujer había ignorado abiertamente los llamados del señor oscuro, y eso era algo que era impensable, conociendo el fanatismo que la mujer tenía por el hombre, Lo que solo podría significar una cosa.

Tomando un trago de su café, Dumbledore dejó que los recuerdos de una conversación que tuvo con el amor de su vida, llegaran a su mente.

Fue durante el último año de la guerra, que Gellert y él se reunieron una última vez, en donde albus le había propuesto algo al hombre que esperaba que él aceptara.

Le había propuesto huír juntos del conflicto, y dejar atrás todo lo que habían ocasionado para vivir una vida juntos.

La vida que siempre debieron tener.

Sin embargo, incluso aunque hubiera mostrado todo el amor que tenía por El hombre, él simplemente descartó esa propuesta, argumentando que ya era demasiado tarde. Y aunque a albus le dolía admitir que eso era cierto, la idea de escapar con Gellert, incluso ahora quedaba grabado en su mente.

Si él hubiera aceptado su propuesta, ¿Qué sería de ellos dos? —Dando un suspiro derrotado, albus negó con su cabeza.

No servía de nada lamentar el pasado, y él lo sabía muy bien.

Sin embargo, nuevamente estaba el problema que tenía entre sus manos, Y no pudo evitar que un ceño fruncido adornara su rostro.

Las situaciones entre Harry Potter y Bellatrix Lestrange, le resultaban demasiado familiares con las que alguna vez tuvo con grindelwal, y eso solo hizo que su desesperación por tener a Harry nuevamente bajo su control, se hiciera más grande.

En la foto que Remus le había traído, facilmente podía apreciar claramente el amor que ambos magos se tenían, y eso era algo que no podía permitir que siguiera creciendo.

Harry era su campeón, y estaba destinado a morir al final del conflicto, y no podía permitir que tuviera una razón para vivir. Y por eso estaba aquí.

– ¿Me citaste? —Apareciendo con una mirada tranquila, y dejando al descubierto su largo cabello rubio, Lord malfoy se presentó con toda la gracia que un sangre pura tenia para ofrecer, al hombre que tenía enfrente de él.

– Lo hice, toma asiento. —Aceptando la oferta del hombre que tenía frente a él, Lucíus malfoy se sentó tranquilamente, antes de ofrecerle su mano.

– Me alegra ver que sigas vivo, después de tanto tiempo, Fenir. —Aceptando la mano estrechaba por el hombre, Albus le sonrió.

– Me mantengo a flote, pero mis días están contados. Es por eso que estoy dejando la gran bretaña mágica para pasar mis últimos días en mi tierra natal. Ya estoy viejo, y la vejez me está alcanzando, pero necesitaba hacer una última cosa antes de dejar gran bretaña, y ayudar una última vez a mi buen amigo lucius y a su señor.

Asintiendo en señal de comprensión, Malfoy sacó una pequeña bolsa marrón, y se la entregó con una sonrisa.

– Hay 3000 galeones en esa bolsa, ¿será suficiente?. —Asintiendo en acuerdo, Albus saco de entre sus túnicas un sobre, y se lo entregó al patriarca malfoy.

– ¿Es esto real? —Cuestionando con el ceño fruncído y total incredulidad, Malfoy cuestionó, y el hombre asintió tristemente.

– Me temo que lo es viejo amigo. Uno de mis contactos me lo envió hace 3 días, y decidi informarte de esta situación. Después de todo, los traidores no son bienvenidos en las filas del señor oscuro, ¿No crees?.

Frunciendo el ceño en total molestia, malfoy asintió lentamente.

– Estoy de acuerdo, muchas gracias por brindarme esta información, me aseguraré de hacérsela llegar a mi señor. "Que tengas un buen retiro, fenir." —Levantándose de la silla, Lord malfoy empezó a salir del café, dejando a Albus con sus propios pensamientos.

No había querido tener que recurrir a esta identidad nuevamente después de la última guerra, pero no había otra opción.

No podía encontrar a Harry, y si quería estar cerca de localizar a su campeón, esta era la única opción.

Voldemort podría encontrar a bellatrix, y en cuanto él hiciera un movimiento, Albus tendría la ubicación de Harry, y una vez supiera en donde estaba el niño que vivió, Él lo recuperaría, y se aseguraría de borrar cualquier influencia corrupta, que esa mujer hubiera puesto sobre su campeon.

Una arma con ganas de vivir, no era útil en el amplio margen de sus planes, y se aseguraría de que el niño volviera al camino de la luz, Incluso si eso significaba tener que borrar todos los recuerdos de los últimos meses. —Sonriendo complacido, Albus tomó otro sorbo de su café.

Esta situación era una que nunca pensó que sucedería, y que ahora que finalmente estaba tomando acciones para arreglar el problema, el no pudo evitar sentirse feliz y tranquilo, al saber que sus planes lentamente volverian a la normalidad.

Era una lástima tener que arruinar la felicidad del niño que vivió, pero no había otra manera.

Sus acciones podrían ser ruines y malvadas, pero ciertamente no le importó. Todo era por una buena causa.

Todo era, por el bien Mayor.

FIN

Hey soy yo de nuevo trayendo un nuevo capitulo de esta historia. dado que no hay reseñas hoy no respondere nada pero al menos dejare estas preguntas por si alguno quiere comentar :c

¿Que les parecio el capitulo? ¿Lo Amaron? ¿Los sorprendio? ¿Sus teorias para el siguiente? Dejare estas preguntas y me retirare lentamente. la siguiente actualizacion sera el miercoles asi que espero ver comentarios o llorare ,D

DARKNIG FUERA...