Aquí está el capítulo 47. En este capítulo nos separaremos de los personajes principales para centrarnos en algunos personajes secundarios y recurrentes en la historia.
Mientras tanto en otra parte de la ciudad se encontraban Bogo y Clawhauser dando un paseo. Ambos habían tenido unos días de relajación, después de este viaje imprevisto a Japón, Bogo se dio cuenta de lo mucho que necesitaba unas vacaciones, y que mejor que ir en compañía de su novio. No podía recordar cuando fue la última vez que se sintió tranquilo sin pensar en nada más que tomar un descanso e incluso Clawhauser le ayuda a pensar en otras cosas que no fuera el trabajo o su cargo como jefe policía. Aun no sabían cuánto tiempo se quedarían en ese país antes de volver a Zootopia, pero aprovecharían cada momento que les quedase allí.
Mientras pasaban por una de las calles, encontraron una tienda de música. Al verla pensaron que quizás podrían estar vendiendo algún disco con alguna música que les interesase, por lo que decidieron entrar. No había muchos clientes en el interior del local así que momentáneamente cada uno tomó un rumbo separado para buscar algún disco con música que les gustase, aunque había algo en específico que ambos tenían en mente que querían encontrar y esperaba que esa tienda vendiera. Después de ojear por unos minutos volvieron a juntarse y fue justo en el momento en que ambos miraron un estante en el extremo, encontraron justo lo que estaban buscando.
Era un disco de Gazelle, pero era diferente a la colección que ellos tenían. Ya que a diferencia de los que se vendían en Zootopia, estos venían con sus canciones más populares en japonés y una versión instrumental. Parece que su cantante favorita se había expandido a diferentes mercados cantando sus canciones en distintos idiomas que llegarían al público internacional. Si ese era el caso debían comprar todos los discos traducidos a otros idiomas, y este era uno que planeaban comprar. Cuando lo llevaron dos copias a la caja para comprarlos, el vendedor les dijo el precio, para su fortuna, tenían dinero de sobra para comprar ambos discos. Una vez que pagaron, salieron de la tienda, felices por su nueva adquisición. Definitivamente este viaje les ayudó no solo a relajarse, sino a conseguir recuerdos que de seguro apreciarían.
Mientras caminaban por una pequeña avenida decidieron descansar en un pequeño local para beber algo. Un refresco sería algo bueno para ambos en ese momento. Una vez que se sentaron pasaron junto a ellos uno de los empleados que tomó su orden. Mientras esperaban a que viniera su orden, pudieron notar que el local no tenía muchos asientos en donde sentarse, supusieron que no pusieron muchas mesas y sillas ese día debido a que por lo ocurrido el fin de semana muchas personas no estaban saliendo a esos lugares a relajarse, por lo que no esperaban tener mucha clientela en primer lugar. Para el búfalo y el cheetah no les molestó tener un poco más de intimidad en un lugar público, aunque quisieran que lo sucedió en la ciudad el fin de semana no hubiera sucedido para que las personas vivieran su vida normal.
Mientras que esperaban, otra pareja de clientes entro al local, los cuales eran un faisán de color azul y un zorro de color marrón. Como el búfalo y el cheetah estaban de espalda estaban observando los discos que acaban de comprar no notaron la presencia de los recién llegados, los cuales vieron que las pocas mesas del local estaban mayoritariamente ocupadas y solo una estaba ocupada, pero con dos asientos vacíos. Se acercaron para preguntarle a los que estaban allí si podían sentarse en los asientos vacíos. Esperaban que no tuvieran ningún tipo de problema con eso.
"Disculpa, estos asientos están ocupados" preguntó el zorro de manera educada, no queriendo interrumpir su conversación.
"No, solo estamos los dos solo, pueden sentarse si quieren" respondió el cheetah respondiendo de manera amable.
Al recibir esa respuesta, los recién llegados se sentaron. Una vez que estaban frente a frente pudieron reconocerse, ya que aunque no se llegaron a hablar directamente el día anterior llegaron a verse en el parque, aunque desde lejos. Ya que el zorro y el faisán habían visto al búfalo y al cheetah tomados de las manos frente al lago mientras descansaban un poco y pasaban un tiempo de pareja. Lo mismo con el el bufalo y el cheetah que vieron al zorro y al faisán como unas de las parejas que estaban dando un paseo por el parque y que ellos mismos pudieron presenciar.
Antes que pudieran decir algo más, un empleado se acercó a la mesa y tomó la orden de los dos recién llegados. Los cuales pidieron un refresco del mismo sabor que los otros con los que compartían mesa. Una vez que el camarero se fue, ambas parejas se quedaron solas en la mesa. Quizás sería una buena idea para ambas parejas comenzar a hablar y no tener una velada monótona en la que nadie decía nada y solo se mirasen a los ojos. Decidieron comenzar hablando de algo fácil para ver a que podrían llegar después.
"Veo que ustedes también pidieron el mismo sabor de refresco" dijo Bogo comenzando la conversación.
"Oh, sí. No somos de por aquí, pero desde que llegamos es una de nuestras bebidas favoritas de este lugar" dijo el faisán.
"¿Ustedes no son de por aquí? Qué coincidencia, nosotros tampoco, venimos de una ciudad llamada Zootopia, la cual se sitúa en Estados Unidos. ¿Y ustedes?" preguntó Clawhauser.
"Bueno, es un poco más que complicado lo de nosotros. Pero… un momento. ¿Ustedes son de Zootopia también?" preguntó el zorro.
El búfalo y el cheetah asintieron con la cabeza.
"Entonces ustedes deben conocer a Nick Wilde" dijo el faisán.
"Si, lo conocemos, es un compañero de mi pareja, y yo soy su jefe" dijo Bogo.
"¿De dónde lo conocen?" preguntó Clawhauser.
"Bueno, el domingo nos encontramos con él y otras dos personas que nos estaban buscando en nombre de los que sabían cómo llegaron aquí" respondió el zorro.
"¿Entonces ustedes son unas de esas personas que vienen de otras dimensiones?" preguntó Bogo.
"Bueno, no de otra dimensión. Pero si de otro planeta. Somos de un sistema estelar a varios años luz del planeta tierra" respondió el faisán.
"¿En serio? No sabíamos que hubiera vida en otro planetas" dijo el cheetah.
"El universo es más grande de lo que se imaginan. Es más, nuestro sistema estelar no es el único aparte de este que tiene vida. Hay más" dijo el zorro.
"Es sistema estela del cual provenimos se llama Lylat System. Yo vengo de un planeta llamado Zoness y mi pareja de un planeta llamado Papetoon" dijo el faisán.
"Es interesante. Y, perdonen por la pregunta, no quiero ser entrometido ni nada, pero algo que dijiste me llamo la atención. ¿Ustedes son pareja también?" preguntó el búfalo.
El zorro miró al faisán antes responder mientras el ave ponía una mano sobre la suya. "Si, si lo somos, llevamos saliendo unos años".
"Y nosotros sabemos que ustedes también están saliendo" dijo el faisán.
"¿En serio? ¿Cómo lo supieron?" preguntó el cheetah.
"Ayer los vimos en parque y vimos presenciamos desde lejos lo muy cariñosos que eran entre ustedes" dijo el zorro.
"Y eso no correspondía a una simple amistad. Y no fuimos los únicos que estábamos allí que lo notaron" dijo el faisán.
"En serio no fuimos discretos" dijo Bogo sonrojado luego miró a Clawhauser el cual estaba igual que él.
Y era cierto que ambos disfrutaban su tiempo el uno junto con el otro, que no se dieron cuenta de las muestras de afecto que había entre ambos. Parece que en ese momento perdieron contacto con la realidad, aunque nadie podría culparlos, ya que las parejas que estaban enamoradas acostumbraban a hacer eso comúnmente. Aunque si era la primera vez en donde a ellos les pasaba algo como eso.
"Pero no se preocupe. Ninguno de los que los vio se sintió ofendido ni nada. Y eso que todos los que lo notamos no eran diferentes de nosotros" dijo el faisán.
"Ya que las otras dos parejas que los vieron a ustedes también eran parejas del mismo sexo. E incluso no creo que aquí exista prejuicio contra ese tipo de relaciones" dijo el zorro.
"Bueno, en Zootopia tampoco existe el prejuicio, pero la razón por la que nunca había dado a conocer nuestra relación es otra" dijo el cheetah.
"Ya que ambos trabajamos en la estación de policías. Y yo soy el jefe allí. No habíamos dado a conocer nuestra relación por temor a rumores de favoritismo. Habíamos decidido comenzar diciéndoles a algunas personas en las que confiamos, y aunque estamos de acuerdo en decirle también a nuestros compañeros, todavía siento un poco de preocupación por mi pareja" dijo el búfalo.
"Oh, eso es comprensible. Ese tipo de temores está bien justificado. Esas situaciones van a pasar pero con el tiempo serán olvidadas" dijo el zorro.
"Eso mismo le dijo yo" dijo el cheetah bastante sorprendido de que el zorro pensara lo mismo que él de la situación.
Antes de que pudieran decir algo más, el empleado trajo los refrescos que pidieron las dos parejas y los puso sobre la mesa. Estos pagaron y finalmente comenzaron a beber para refrescarse un poco.
Mientras se tomaban los refrescos, ellos continuaron con su conversación.
"Por cierto, todavía no nos hemos presentado formalmente. Mi nombre es Fox McCloud. Un gusto en conocerlos" dijo el zorro.
"Y mi nombre es Falco Lombardi. Somos pilotos del escuadrón Star Fox que protege el sistema Lylat" dijo el faisán.
Bogo y Clawhauser también se presentaron formalmente con ellos.
Durante un largo rato hablaron de varios temas como por ejemplo las aventuras pasadas que tuvieron Fox y Falco como mercenarios del equipo Star Fox y como en la actualidad se dedican todavía a eso. Mientras que por otro lado Bogo y Clawhauser les contaron acerca de su trabajo como policías que aunque no era como las aventuras espaciales de la pareja frente a ellos, no podían quejarse del oficio al que se dedicaban. Incluso durante la conversación, el búfalo y el cheetah mencionaron a su cantante favorita, Gazelle, y como acababan de comprar dos copias de un disco que solo es obtenible en ese país y que planeaban agregar a su colección.
Después de varios temas de los que hablaron, Fox y Falco volvieron preguntaron una cosa que querían saber.
"Por curiosidad, ustedes o Nick saben si ya los habitantes del planeta Mobius han logrado encontrar la forma de llevarnos de vuelta a nuestro sistema estelar" preguntó Fox.
"Bueno, no hemos entrado en contacto con la mayoría de los habitantes de Mobius con excepción de dos de ellos y sus tres hijos. Pero no los hemos visto en días. Aunque el oficial Wilde tiene nuestro número, y le dije que llamara en caso de que averiguara alguna nueva información. Por el momento parecer ser que no hay nada nuevo" respondió Bogo.
"Entendemos. Bueno, por el momento no nos queda más que esperar. Solo esperemos que no hayan ataques a nuestro sistema estelar mientras que estamos allá" dijo Falco.
"No te preocupes por eso Falco. Estoy seguro de que en nuestra ausencia Fara, Miyu, Fay, Bill, Katt, Sabre, Lucy y Dash pueden mantenerlo todo bajo control" dijo Fox.
"Estoy seguro de que en su hogar todo estará bien y que sus amigos podrán encargarse de todo hasta que regresen. Yo no me preocuparía por eso" dijo Clawhauser para demostrar que él creía que todo estaba en paz en el hogar del zorro y el faisán.
"Muchas gracias por tus palabras de aliento" dijo Fox.
Para ese momento, ya ambas parejas habían terminado sus refrescos.
"Bueno, ya es hora de irnos. Pero fue un gusto en conocerlos" dijo Falco.
"Está bien nosotros también tenemos que irnos" dijo Bogo.
Pero antes de que se marcharan, decidieron intercambiar números en caso de que si Bogo y Clawhauser se enteraban de algo más, llamarían a Falco y Fox para que supieran más de la situación. Tras eso ambas parejas tomaron caminos separados. Con Falco rodeando a Fox con su brazo mientras que Bogo y Clawhauser iban tomados de las manos.
Bueno hasta aquí el capítulo, espero que les haya gustado, en el próximo capítulo reaparecerán algunos de los personajes principales.