No Todo Conocimiento es Bueno
Carlos se quedó meditando respecto a la petición del rey, sabía bien que los riesgos eran altos si era descubierto no solo porque viajar en el tiempo estaba estrictamente prohibido si no también, por las consecuencias que acarrearían si algo salía mal y llegaban a modificar algo, ese era un límite que el joven científico no había cruzado.
- ¿Máquina del tiempo? - comentó riendo levemente Nash un vez repuesto del asombro
- Créeme que es verdad, Charlie, no estoy mintiendo... él inventó una - aseguró Endymion en referencia al hermano menor de Setsuna y el aparato recién mencionado
- De acuerdo... acepto, y para convencer a su amigo de que realmente es posible viajar por el tiempo, se las voy a mostrar ahora... - dijo Meiou decidido, refiriéndose a Charlie, poniéndose de pie ante la vista de los dos hombres
Dicho esto, invitó a ambos a seguirlo hasta la sala en donde trabajaba, al llegar vieron el cuarto lleno de instrumentos de medición, modernos y sofisticados aparatos varios junto a una pizarra electrónica proyectada en el aire.
- Cielos... esto me recuerda al laboratorio del doctor Emmett Brown, aunque mejorado... - comentó Nash paseando la vista por el sitio
- Ahora mismo verá que la realidad supera a la ficción - respondió Carlos sonriente buscando algo en los cajones de un escritorio - Ah, aquí está - dijo sacando algo de los mismos
Se trataba de algo que parecía ser un celular el cual mostró a ambos hombres que lo miraron con incredulidad.
- ¿¡Es esto!? - preguntó Endymion con una mezcla de desencanto y asombro, ya que no había visto qué clase de dispositivo era y esperaba algo más
- Si, parece un teléfono móvil común pero en realidad es un dispositivo para viajar en el tiempo - afirmó el hermano de Setsuna encendiéndolo
En la pantalla aparecieron tres espacios en blanco sobre un fondo morado, en el primero aparecía la fecha actual
- Comprendo que sea un fan de la ciencia ficción pero esto es demasiado - respondió el rubio de anteojos sin dejar su escepticismo
- Esta no es solo una máquina del tiempo si no también dimensional, en el casillero de arriba puede leerse la fecha actual, en la que estamos ahora, en el segundo yo introduzco la fecha a la cual deseo ir, ¿Quiero ir a cuando el shogunato se instauró o cuando los Mongoles atacaron Japón en 1274 y 1281? ¿La celebración de los juegos olímpicos de Tokyo, los primeros de Asia en 1964? ¿O tal vez presenciar el nacimiento de Jesucristo? Con este aparato lo puedo hacer - presentó el de pupilas rojizas con suma calma y confianza, señalando el monitor - El tercer casillero es para el lugar específico en donde quiero aparecer, puede ser cualquier sitio del planeta - añadió acto seguido
- Y... ¿cómo funciona? - preguntó el rey intrigado
- Permítame - dijo Carlos introduciendo unas coordenadas en el aparato mientras lo apuntaba al centro de la sala
Enseguida una luz verde apareció que los cegó por unos instantes y una especie de portal se abrió en dicho lugar.
Los azorados ojos de Charlie y Endymion lo contemplaron al recuperarse, además se impactaron al ver como una gigantesca cabeza de tiranosaurio salía del portal.
- ¡Fluffy, no! ¡Atrás! ¡Sit... sit! - exclamó Meiou sorprendido haciéndole gestos de que regresara
El animal obedeció y retrocedió, volviendo a meterse por donde había salido, del otro lado podían oírse las fuertes pisadas del dinosaurio mientras se alejaba. Acto seguido el joven tecleó otros datos y el portal se cerró.
- Lo siento, fue un error de dedo... sin querer abrí un portal hacia la prehistoria - se disculpó riendo el muchacho
- ¿Qu... que fue eso? - fue la pregunta del norteamericano sin dar crédito a lo que sus ojos acababan de ver
- Te lo dije, amigo, te dije que era cierto - dijo el esposo de Serena aún sin salir de su sorpresa
- Ahora, a fin de acabar de convencer al señor Charlie de que todo esto es cierto y no un montaje, propongo realizar una prueba más - sugirió el científico acomodándose los lentes y tecleando nuevos datos
Al acabar de hacerlo, inmediatamente un nuevo portal se abrió en el mismo sitio y el chico invitó a ambos a atravesarlo, una vez que Endymion y Nash lo hicieron, Carlos los imitó.
Ciudad de Tokyo, año 1992.
El portal luminoso apareció y se abrió en un callejón, del mismo salieron los tres varones corriendo. Endymion y el militar rubio paseaban la vista para todos lados y mientras el segundo no tenía la menor idea de dónde se encontraban, el primero reconocía enseguida el entorno.
- ¿Dónde estamos? ¿Dónde nos trajo? - preguntó Charlie buscando reconocer algo en el sitio, solamente dedujo que era una mañana de invierno u otoño puesto que hacía bastante frío y el sol ya había salido hace no tanto tiempo
- Este sitio me es muy familiar, se trata de la ciudad de Tokyo... de la Tokyo anterior a la fundación del 2do Milenio, antes de Tokyo de Cristal - dedujo Endymion sumamente estupefacto
- La pregunta correcta sería "¿Cuándo estamos?"... nos encontramos ahora exactamente en el 28 de noviembre de 1992, la localización es la que su majestad dijo - respondió Carlos caminando hacia el frente y pasando en medio de los dos - Vengan conmigo, ahora - invitó acto seguido
Los tres corrieron por las calles matutinas de la ciudad en las cuales se observaba bastante gente, inclusive se pasaron algunos semáforos en rojo para llegar a un sitio que el soberano reconoció enseguida apenas vio.
- Imagino que se acuerda de aquella torre, majestad - señaló Carlos a un alto e imponente rascacielos situado a una distancia de varios metros de donde estaban parados, una arboleda atravesada por un camino bordeado por faroles y a la derecha de ellos, se encontraban varios containers junto a una callejuela
- Claro que me acuerdo de ese sitio... es la torre Starlight, ahí fue donde recuperé mis recuerdos... - confirmó el de cabello negro con nostalgia
- He visto este lugar, aquella torre es conocida - opinó el militar de lentes con seriedad señalando a otro sitio situado cerca del lugar que Meiou indicara
- Desde luego, Charlie, aquella es la Torre de Tokyo... punto obligatorio para el turismo - agregó el rey respecto a lo que su amigo dijo recién
El muchacho les pidió sin pérdida de tiempo que se escondieran detrás de un árbol y que permanecieran allí hasta que él mismo les avisase que pudieran salir
- ¿Puedo preguntar para qué nos escondemos, Carlos? - quiso saber Nash intrigado
- Es simple, al viajar por el pasado es sumamente importante tener en cuenta que la menor modificación que hagamos, repercutirá en el futuro... es por eso la prohibición de viajar a través de aquel que siempre me recalca mi hermana, solo imaginen que esta tecnología cayese en malas manos - informó el científico en referencia a su invento - Ahora observen hacia allí - señaló a continuación hacia la derecha de donde estaban
Luego de unos instantes apareció caminando proveniente de un callejón en medio de los containers, a un juvenil Darien tomándose claramente un hombro con una mano y una expresión de dolor en el rostro, haciendo notar que se encontraba herido pero igualmente avanzaba hacia el rascacielos y detrás suyo caminaba una joven adolescente que los tres supieron quién era, sin dudar.
- ¿¡Que aquella joven no es la Neo reina Serenity!? ¿Y aquel muchacho es usted, majestad? - preguntó Charlie sumamente impactado señalándolos
- ¡Sii! ¡Me acuerdo perfectamente! Zoicite me había tendido una trampa y herido en un hombro el día anterior, él me había retado a un duelo final en la torre... Serena me encontró herido y me siguió - rememoró Endymion con el pecho palpitante
- Observen ahora - se limitó a decir Charly sonriendo
El sitio se iluminó con un resplandor rojo y el Darien joven se detuvo mirando hacia todos lados, muy impactado.
- ¡Es increíble! ¿¡Que es esto!? - preguntaba muy asustada Serena viendo en todas direcciones
- No seas tan necia, ¿Por qué me has seguido? - le recriminó el chico de pupilas azules dándose media vuelta
El resplandor rojo se achicó en tamaño hasta formar una bola de igual color que los envolvió y los hizo desaparecer de la vista del trío proveniente del futuro, aquella flotó y voló en dirección a la alta torre antes señalada.
- ¿Que pasó? - indagó un Nash que no salía de su asombro
- Ese fue Zoicite que nos teletrasportó hasta la torre Starlight... aparte de descubrir que Serena era Sailor Moon, yo era capturado por el Negaverso intentando protegerla... - dijo el soberano sumamente nostálgico bajando la vista
- ¿Alguna otra duda de que es cierto que se puede viajar por el tiempo, Charlie? - preguntó Meiou al teniente rubio quien negó con la cabeza - Bien, ahora que han comprobado que yo no mentí y que mi invento funciona, debemos regresar a nuestra época - agregó tecleando en su teléfono la fecha de donde habían llegado
- ¿No vamos a ir a la torre Starlight? - dijo Endymion sorprendido y algo contrariado
- No, si hacemos eso, el riesgo de que su "yo más joven" como así también Serena y las chicas lo vean, es muy alto... tal y como dije antes, debemos dejar que los hechos aquí transcurran naturalmente sin nuestra intervención o alteraremos el futuro - explicó Charly con seriedad
Luego de esto, un nuevo portal apareció delante de ellos a un costado del camino en donde habían estado recién los adolescentes Darien y Serena y Endymion, aunque un poco a regañadientes, entendió el punto explicado por el hermano de Setsuna y atravesó el portal junto a él y Nash.
Tokyo de Crystal, siglo XXX
Los tres reaparecieron en el laboratorio de la casa de Carlos, el mismo sitio desde donde habían ido al pasado.
- ¿Cuándo estamos ahora? - preguntó Endymion observando todo
- El mismo día y hora a la que partimos, ¿alguna otra duda? - contestó Carlos sonriéndole
- Zoicite... ¿Qué no es el actual representante de la Neo reina, en Europa? - recordó Charlie dicho detalle, respecto a lo que contara el rey antes
- Si, pero él y los otros estaban bajo el influjo de los malos - aclaró el soberano sin perder tiempo
- Comprendo, aún así hay bastante que no conozco de su vida, señor... - mencionó el militar de anteojos con serenidad
- Lo se, amigo... pero de contártelo, ¿Me habrías creído? - señaló su amigo riendo levemente
- Sinceramente no, hubiera pensado que todo era un cuento de hadas de su invención - lo imitó Charlie
- Bien, ahora que las dudas e incredulidades han sido disipadas, me veo en la necesidad de pedir saber a dónde quiere ir, majestad - pidió Charly refregándose las manos
- El Palacio de Crystal, hace ya varios años - dijo el de ojos celestes con seguridad, acto seguido comentó la situación con Serena y su relación con el esposo de Rei Hino, además de lo que mostraran las fotos anónimas que recibiera
- ¿Recuerda usted la fecha exacta? - indagó el de ojos rojizos respecto al hecho mencionado - Necesito saber la fecha y hora exactas a fin de ahorrar tiempo y esfuerzo - aclaró enseguida
- No pero... traje la foto, ¿Puedes escanearla y sacar por computadora la fecha en que fue tomada? - solicitó el regente sacando un sobre de debajo de su saco - La misma es de carácter muy privado y no me gusta la idea de que alguien más la vea pero... no tengo otro remedio, necesito saber que más sucedió exactamente - añadió en tono algo seco alargando el sobre al chico
- Comprendo, señor, no se preocupe... enseguida la escaneo y la computadora me dirá la fecha y hora exactas en las cuales fue tomada, le prometo total confidencialidad - accedió el hermano menor de Setsuna
- Siendo así y si me lo permiten, yo voy a estar en el living - dijo Nash antes de alejarse en dirección al sitio nombrado
Carlos sacó la fotografía y la observó aunque no parecía impresionado por la misma, luego de examinarla se dirigió a una impresora a un costado de su computadora la cual encendió. Una vez que estuvo todo listo, colocó aquella en el escáner de la máquina y unos segundos después, la misma estuvo copiada al disco duro y al poner el puntero del mouse sobre el archivo, apareció el dato requerido
- Con esto, ya estamos en condiciones de emprender el viaje - afirmó Carlos borrando el archivo y colocándose de pie, el rey inmediatamente le indicó a Nash que podía volver si quería
- Mi vida no ha sido la misma desde ese hecho, Carlos... necesito ver con detalle los acontecimientos - aseguró Endymion con algo de angustia, recibiendo unas palmadas en un hombro de parte de Charlie
- Lo entiendo perfectamente, majestad, pero déjeme aclararme algo... lo que verá no será agradable a sus ojos y puede dejarlo seriamente traumado... no todo conocimiento es bueno - advirtió seriamente el de cabello oscuro verdoso ajustándose los lentes y observándolo fijamente con los ojos entrecerrados
- Conozco los riesgos pero aún así deseo hacerlo - insistió el rey con decisión
Oído esto, Carlos comenzó a teclear la fecha y lugar de destino y rápidamente, otro portal se abrió y los tres se acercaron al mismo.
- Ese es un hecho que nomas lo concierne a usted, majestad, al ser de carácter muy íntimo no creo correcto que vaya yo también así que por ende, yo me quedaré aquí - decidió el militar rubio del fleco pronunciado
- Comprendo, Charlie, iremos Carlos y yo nada más - le sonrió su amigo
- Si, yo los espero aquí para cuando vuelvan - devolvió el de lentes la sonrisa
- Bien, vamos entonces, rey Endymion - invitó el joven científico extendiendo una mano hacia el portal
Acto seguido, los dos varones cruzaron el mismo y desaparecieron junto con aquel, de la vista del ex piloto de la fuerza aérea de Estados Unidos.
Palacio de Crystal, varios años atrás
El portal se abrió en una de las tantas habitaciones de la lujosa sede Real y del mismo salieron Endymion y Carlos, quien chequeó los datos en el dispositivo temporal antes de revisar que no hubiera nadie cerca afuera.
- ¿Estamos en el tiempo correcto? - indagó el rey paseándose por el cuarto
- Si, es la fecha de la foto solo que programé mi dispositivo para que llegásemos una hora y media antes de lo que mostraban las fotos, ahora si no es mucha molestia... - dijo el chico tecleando algo en el aparato, enseguida el entorno cambio de su color natural a uno gris lo cual impactó al soberano
- ¿Q... que pasó? ¿Qué es esto? - quiso saber el de pupilas celestes, anonadado
- He cambiado nuestra estadía aquí de interactiva a no interactiva, seremos puramente espectadores... tal y como expliqué cuando estábamos en 1992, no debemos tocar absolutamente nada, solo vinimos a que usted viera lo que desea ver - recalcó el de cabello oscuro verdoso
- Comprendo pero, ¿Cómo lo hiciste? - quiso saber el hombre sumamente intrigado
Charly le mostró la pantalla del aparato en donde había una especie de ruedita en la esquina inferior derecha que al tocarla abría otra pantalla mostrando distintas opciones como ver el registro de viajes hechos y lo que anteriormente hiciera el chico.
- Justamente a esta hora no hay tanto movimiento en el Palacio - dijo Endymion mientras abría la puerta de la habitación para salir de allí
- Por eso elegí bien este momento y la localización, no podía arriesgarnos a que alguien nos viese llegar - dijo Carlos mirando atentamente el corredor imitando al rey
El hermano de Setsuna le indicó a Endymion que lo siguiera, ambos continuaron avanzando hasta llegar a una intersección por la cual vieron pasar a un grupo de gente que el esposo de la Neo reina reconoció perfectamente.
- Deduzco que usted sabe bien quiénes son ellos - señaló Carlos al grupo
- Son las chicas... lady Mercury, Júpiter y Venus solo falta Mars, en su lugar está Jones... - aseguró el rey sin pérdida de tiempo abriendo grande los ojos
- Correcto, ella no estaba aquí en este día, se encontraba fuera de la ciudad atendiendo otros asuntos, apurémonos - contestó el de ojos rojizos acelerando el paso
Los dos así lo hicieron hasta quedar a pocos pasos de distancia del grupo, el cual caminaba detrás de Luna y Artemis en dirección a la sala de reunión, en donde Endymion había estado con su esposa y las senshis evaluando las gestiones de cada una al frente de cada gobernación.
- ¿Es conveniente acercarnos tanto a ellos? - preguntó el rey algo intranquilo
- Descuide señor, en el modo no interactivo nadie nos puede ver ni escuchar - lo tranquilizó el científico - Pero debemos aprovechar para entrar mientras ellos lo están haciendo - añadió además
El grupo caminaba y mientras Ami y Mina hablaban entre sí, Ralf y Mako conversaban amistosamente y el rey notó eso, dándose cuenta enseguida, que antes de que los problemas con Ralf comenzaran, la senshi del trueno no sentía ni la bronca ni la hostilidad que él vio que aquella poseía hacia el esposo de Rei.
- Entonces, es factible que de algún modo... lady Júpiter se enterase de lo ocurrido, factiblemente de boca de lady Mars - razonaba Endymion para sí, relacionando ambos hechos
Al llegar a la puerta de acceso a la sala de reuniones, aquella se abrió y los cuatro ingresaron junto a los consejeros Reales, momento que fue aprovechado por Carlos y Endymion para entrar con ellos antes de que la entrada se cerrase.
Una vez allí, ambos contemplaron como Luna y Artemis se retiraban al mismo tiempo que una Serena sonriente los recibía e invitaba a sentarse.
- ¡Bienvenidos todos! Es un placer tenerlos aquí, lástima que no está Rei pero bueno... - decía la Neo reina animadamente
- Ella está de viaje en estos momentos y regresará en cuanto pueda pero aquí estoy yo, en representación de Rei - respondía Ralf sonriente
- Desde que asumimos como gobernadoras de las distintas regiones de Tokyo de Crystal tenemos muy poco tiempo libre para reunirnos, valoro cada momento en que coincidimos - comentó Minako alegremente
- Bueno, con Ralf nos vemos un poco más seguido ya que él y Rei nos visitan en Ciudad Lignum cuando tenemos algo de tiempo - dijo la alta mujer de castaño con una sonrisa
- ¿Y no invitan? Que malos - protestó la rubia de moño rojo, ganándose un llamado de atención de parte de Ami
- Bueno, bueno, la verdad yo también extrañaba estas escenas, antes yo decía cualquier tontería y Rei me regañaba, pero los tiempos cambian - rió Serena
- Bueno, ella no está ahora y estoy en su lugar pero, no quedaría bien que lo haga yo - comentó Jones a modo de broma
- Pero ahora somos funcionarios y ella es nuestra reina ahora - recordó la peliazul en un tono de asombro
- Calma, solo bromeaba ¿No sabe distinguirla? - aclaró el de ojos cafés riendo
Mientras tanto, Carlos y Endymion observaban todo en silencio hasta que el muchacho habló.
- ¿Recuerda la razón por la cual usted no estuvo presente aquí, en esta reunión? - preguntó el de ojos rojizos, al lado del soberano
- Por supuesto... yo estaba también de viaje, en los Estados Unidos - contestó el rey con un nudo en la garganta, ya imaginando lo que iba a pasar después de la reunión
La misma tenía como motivo realizar una exposición de lo que cada gestión precisaba en cada distrito y se desarrolló con normalidad; Carlos y el Rey oían pero no era a escuchar aquella a lo que habían venido, lo realmente importante vendría a continuación.
Ambos observaban a todas despidiéndose y retirándose ya, cuando Ralf iba a hacerlo también la reina lo detuvo.
- Ralf... quédate conmigo, quiero que conversemos un rato - le pidió Serena acercándose al hombre
- Estoy cansado, Serena - intentó excusarse el de cabello castaño oscuro, bajando la vista
- Por favor, te lo pido de favor - insistió la rubia de coletas agarrándolo cariñosamente de un brazo, lo que causó ya la molestia de Endymion, el chico lo notó y le pidió que se calmara
- De acuerdo... está bien, si me lo pides así... - accedió Ralf finalmente a quedarse
- ¡Perfecto! Voy a ordenar ahora mismo que nos traigan la cena - decidió sonriente la Neo reina
Dicho esto, la rubia de odango mandó a llamar a alguien del personal de la cocina a realizar la acción antes mencionada. Mientras eso pasaba, a Endymion le llamó la atención algo, le pareció ver la sombra de alguien moviéndose del otro lado de la puerta abierta de acceso y sin perder tiempo se dirigió allí a mirar pero, cuando llegó no había nadie.
- ¿Sucedió algo, majestad? - le preguntó Carlos
- Es que... estoy seguro que había alguien del otro lado de la entrada a la sala, vi una sombra pero... solo estaba el corredor vacío, es extraño - contestó pensativo el rey
- Yo también la vi, señor... por un momento creí equivocarme y ver mal - confesó el hermano menor de Setsuna
Y no se habían equivocado, alguien estaba del otro lado de la puerta oyendo mientras la soberana encargaba la comida y cuando quien había recibido el pedido salía de la sala y las puertas plateadas se cerraban, aquel desconocido lo seguía de cerca.
- Creí que las puertas solo reaccionaban ante los medallones de las chicas - dijo intrigado Ralf
- Cualquiera del palacio que tenga el código de acceso puede abrirla, ¿Tanto tiempo hace que Tokyo de Crystal comenzó y todavía no lo sabes? - respondió Serena riendo
- Cierto... lo había olvidado, es que tengo miles de cosas en la cabeza - replicó el hombre imitándola
- ¿Cómo van las cosas con Rei? - indagó la sobenara
- Muy bien, todo va viento en popa la verdad no me puedo quejar aunque tenemos poco tiempo libre para nosotros, ¿Y tu matrimonio?.
- Bueno... Endymion y yo andamos muy ocupados, él también anda casi todo el tiempo viajando y en reuniones, pero bueno... - aseguró la de coletas con un poco de pesar
- Eso es lógico, ser los reyes de Tokyo de Crystal y del mundo no es una tarea fácil - fue la respuesta de Jones
- Es que...
- ¿Es que qué? - quiso saber el de cabello castaño oscuro
- Nada, olvídalo... - se limitó a responder la rubia
Así la charla entre ambos continuó hasta que la comida llegó y ambos la consumían, si bien era una charla común, Endymion no podía dejar de notar el nivel de confianza con que se trataban, hasta él la llamaba por el nombre y nadie más salvo él mismo lo hacía, ni siquiera las chicas... al menos que supiera.
- Esta cena estuvo deliciosa, te lo agradezco - dijo amablemente el ex soldado
- No es nada, querido, es un placer para mí el pasar tiempo contigo sean cuales sean las circunstancias - contestó ella guiñándole un ojo - Gracias por estar siempre para mí - añadió tomándole una mano
- Todo está bien, lo mismo digo yo - respondió él palmeándosela
- Dime, ¿Cuándo volverás a verme? Cielos... - indagó Serena apantallándose la cara con una mano y suspirando
- En cuanto tenga algo de tiempo... sabes que soy jefe de guardia de Ciudad Ígnea - dijo el hombre queriendo desajustarse el cuello de la camisa bajo el traje, como si tuviera calor
- Oye... ¿Crees... que crees que hubiera pasado con nosotros, si me hubieras conocido a mí antes que a Rei? - siguió preguntando la reina mientras se pasaba una mano por la frente, como si empezara a sudar
- No... no lo sé, es imposible que te conociera ti antes que a Rei, fue ella quien nos presentó, eres una persona bonita y hermosa... sin dudas - respondió Ralf bajando la vista - Serena... creo... creo que va a ser mejor que tomemos distancia, no es correcto que seamos tan cercanos, estando casados... - siguió hablando mientras sentía una extraña y creciente excitación
Pero Serena no le respondió, ella estaba con la vista baja, los ojos ocultos tras su rubio cabello y las manos apoyadas en la mesa, no sabía porqué pero se sentía también muy estimulada y excitada, dicha sensación inundaba cada poro de su piel y no sabía cuánto más resistiría.
Mientras el musculoso ex militar hablaba, Carlos y un Endymion cada vez más exaltado y nervioso por el rumbo que estaban tomando las cosas, vieron que la puerta de acceso al salón se abría y cerraba sola como así también un sonido de pisadas.
- Tengo... ¡Tengo que salir de aquí! - exclamó el de pupilas cafés
Ralf se levantó de golpe y corrió hacia la puerta, intentó abrirla pero esta estaba trabada, forcejeó la misma e incluso la pateó pero aquella no se movía, él se encontraba muy excitado y deseaba salir de allí antes de acabar haciendo algo de lo que se arrepentiría después.
- ¿¡Qué diablos pasa con esta maldita puerta!? ¡Quiero salir, maldición! - gritaba él con desesperación
El rey observaba aquello y no entendía la razón de aquella acción, pero la furia que empezaba a sentir le impedía pensar claramente, solo quería lanzarse sobre él y golpearlo; Carlos por su parte observaba todo en silencio sin asombrarse, analizando los detalles.
Serena se levantó del asiento como un resorte y corrió hacia Ralf, antes de abrazarlo de atrás, ponerse en puntas de pie y besarle la nuca.
- No sigas... no sigas... por favor - pedía el de castaño oscuro en tono suplicante pero Serena estaba lejos de obedecerlo, seguía abrazándolo, acariciándolo y besándolo desde atrás
- No resisto más... yo te a... te amo, te deseo... quiero estar contigo - decía la rubia de coletas jadeando
- No... no... no está bien - decía Jones tratando de sacarse de encima a la mujer, aunque él también deseara esas caricias y besos
Trataba de resistirse pero la razón perdía la batalla contra la pasión, de la misma forma que había pasado con Serena, quien insistía con sus caricias y besos.
- Porque... porque no tienes el valor de decirme que me amas también - le recriminó la mujer aún en medio del calor de la pasión
- Estás... casada... estoy casado... amo a... - trata de hablar el ex soldado pero se detuvo al sentir la mano de Serena sobre su erecto miembro debajo de su pantalón
- Hazme el amor - pedía la de odango logrando dar vuelta al hombre y quedar frente a frente
El rey por su parte no podía más de la rabia, gritaba y deseaba separarlos pero Charly lo detenía.
- ¡Ese maldito miserable no solamente arruinó su matrimonio, también echó a perder el mío! - exclamaba desaforado el de cabello negro
- Será mejor que se calme majestad, recuerde que prometió controlarse... ¡Usted sabía a lo que se atenía e igual quiso venir! - buscaba el de ojos rojizos calmarlo
- Maldito par de inmorales... ¿¡Por qué, Serena!? - decía el de ojos celestes apretando los dientes y los puños, mientras golpeaba de rodillas el suelo
- Por piedad para usted, es mejor que no veamos esto, señor... mejor viajemos de nuevo al momento cuando vimos la sombra, la puerta se abre y cierra sola y queda trabada después... yo no creo en espectros, aquí hay algo raro - dijo el de pelo oscuro verdoso
El rey asintió afirmativamente con la cabeza y se puso de pie, Carlos tecleó las nuevas coordenadas y el portal se abrió a un costado de ellos por el cual se apuraron a pasar, desapareciendo el mismo tras ello.
Por su parte, Ralf había acabado de perder la batalla y tanto él cómo Serena comenzaban a besarse y a acariciarse atrevidamente, desatando así el desenfreno y la pasión.
Mismo lugar, instantes antes
El portal se abrió en el pasillo de afuera frente a la puerta justo antes de que Serena llamara al servicio para que les llevaran la comida a ella y a Ralf. Endymion lucía aún bastante alterado pero trataba de calmarse puesto que Carlos se lo había explicado claramente, conocía con lo que se encontraría e igualmente insistió en hacer este viaje.
Los dos prestaron atención al momento en que la Neo reina mandaba llamar al personal y lo vieron claramente, por un par de segundos contemplaron a una figura masculina de cabello largo y ondulado caminar al lado de la entrada a la sala pero este desapareció rápidamente de la vista de ambos.
- No alcancé a verle la cara pero... me es familiar... no entiendo, ¿un fantasma? - dijo Darien desconcertado
- No lo creo señor, pero esto despierta sospechas en mí... escuche, me queda batería para dos viajes más, ahora vayamos unas horas al futuro, al momento en que aquellos dos se despiertan del descontrol, aquí algo huele mal - contestó Charly
- ¿Qué crees que sea? - fue la pregunta del esposo de la Neo reina
- Piense objetivamente señor, estoy seguro que ese sujeto que vimos recién aparecer y esfumarse de la nada, un fantasma no es... Jones primero le plantea a su mujer el hecho de alejarse por respeto a los matrimonios y luego sale corriendo desesperado por escapar, la puerta que se mueve sola y queda cerrada y trabada, el ruido de pisadas... además ellos estaban tranquilos conversando y de repente se ponen muy excitados... hay demasiadas cosas raras - explicó el científico
- Supongo que tienes razón... ¿Cómo averiguarás el momento exacto en que se despierten para hacer el viaje? - contestó el regente respirando hondo
- Pues, tendré que programar el destino para la mañana siguiente y esperar a que despierten, ahora andando - dijo el chico tecleando los coordenadas en su dispositivo
Una vez hecho eso, el portal apareció frente a ellos y ambos lo cruzaron sin dudar.
A la mañana siguiente...
El destello de luz verdosa hacía su aparición dentro del salón de reuniones, Carlos y Endymion emergían de aquella, lo primero que vieron fue a Serena y a Ralf desnudos, acostados y abrazados sobre la mesa además de las ropas de ambos desparramadas por el suelo. El marido de ella volvía a llenarse de rabia al contemplar ese panorama, se sentía estúpido además de traicionado y también pensaba en Rei, podía entenderla perfectamente ya que seguro que con ella pasaba exactamente lo mismo, poseía un dolor en el pecho que no podía sacarse...
Entre pensamientos, ambos esperaron pacientemente hasta que los dos despertaron, vieron primero a Ralf alterarse al tomar conciencia del panorama y luego a Serena imitarlo.
- ¡Que... qué hice! ¿¡Como pude cometer esta deshonra!? - exclamaba el de ojos cafés con desesperación
- ¡No me pude contener! Estaba normal pero de repente me sentí como si fuera a explotar - decía ella con lágrimas en los ojos
- Ya no podré mirar a Rei a la cara... - confesaba Jones con pesar - Soy... soy una escoria... - agregaba él tomándose la cabeza
- ¿Cómo crees que me siento yo? ¿Cómo voy a ver a Endymion a los ojos sin acordarme de esto? - sollozaba ella
- Nunca antes había hecho algo como esto... he fallado como hombre y esposo... ahora no tengo otra opción - decía el de cabello castaño oscuro
- ¿Qué vas a hacer? ¿Te descargarás conmigo? ¡Adelante, castígame! - exclamaba alterada la mujer de ojos celestes
- No fuiste tú sola, yo accedí a cometer este ilícito... pero no me refería a eso, hablaré con Rei y le contaré todo, afrontaré las consecuencias - dijo el hombre poniéndose de pie
- ¡No! ¡No, Ralf! ¡No puedes hacer eso! Nos arruinarás a ambos... - gritaba la rubia de largo cabello
- ¡No podré con mi culpa! ¿¡Acaso tú sí!? ¿O es que acaso lo hiciste adrede y mandaste a poner algo en la comida? - dijo el musculoso alzando la voz mientras Serena corría hacia su ropa y recogía de la misma un broche
- ¿En serio me crees capaz de hacer eso? Yo me siento igualo que tú... pero déjame decirte algo, lo que te dije durante el frenesí no era mentira, la verdad estoy confundida ¿Se puede amar a dos personas? - decía Serena sollozando
- De... ¿De que estas hablando? - preguntaba el ex soldado desconcertado
- Quiero que sepas que siento cosas muy fuertes por ti... a pesar de todo, disfruté la noche contigo... pero nunca quise perjudicarte ni nada por el estilo... lo siento - confesó Serena y sin más, el broche que tenía en sus manos empezó a brillar junto con la media luna en su frente
Ralf se quedó inmóvil y con la boca abierta mientras un haz de luz salía de la frente la reina y pegaba contra la suya.
- Olvidarás lo que ocurrió entre nosotros, tú y yo seguiremos siendo buenos amigos pero tomaremos distancia, sé feliz con Rei, disfruta de su amor y compañía... - decía ella mientras realizaba la acción antes nombrada
Mientras tanto, Carlos en compañía del rey, observaban todo en silencio, el segundo se encontraba boquiabierto y estupefacto mientras el primero se mostraba pensativo.
- Creo que no tenemos nada ya que hacer aquí, majestad, volvamos a nuestro tiempo - fue todo lo que dijo el científico tecleando las coordenadas
- Si... si, de acuerdo - contestó Endymion
Casa de Carlos, tiempo presente.
Nash se encontraba en la sala del lugar leyendo tranquilo cuando oyó y sintió el destello de luz verde proveniente del laboratorio del dueño de la residencia, enseguida se levantó y fue a recibirlos.
- Carlos, majestad, ¿Qué pasó? ¿Cómo fue todo? - indagó Charlie caminando hacia ellos
- No se qué decir... - dijo el soberano abatido
- La verdad, huelo algo muy mal en todo esto, para ser sincero - opinó el joven científico con sinceridad
- Ese tipo que apareció y desapareció de repente... qué era - dudó el rey refiriéndose a quien habían visto en la puerta, cuando Serena pedía la comida
- Tuvo que haber sido el que abrió la puerta, la cerró y caminó por la sala de reuniones aparte de trabar la puerta pero... no vimos a absolutamente nadie - dijo Charly pensando
- Por lo que dicen... eso me suena a una tecnología que ya se usaba en la milicia, durante la anterior Era... - informaba el ex piloto norteamericano
- ¿De qué hablas, Charlie? - preguntó intrigado Darien
- Camuflaje Óptico, un aparato electrónico que convierte en "invisible" al portador tanto para el ojo humano como para los radares - prosiguió informando Nash al mismo tiempo que pensaba
- Claro... ¿Como pude olvidarlo? Conozco al inventor, además alguien tuvo que tomar las fotos pero, no vimos a nadie... ¿Cómo es posible si no?, ahora escuchen... debemos ser sumamente discretos con la información que ahora tenemos, especialmente usted, majestad... ya que no tiene cómo decir lo que sabe, sin mencionar el hecho que viajó por el tiempo y violó el tabú - respondió el de pupilas rojizas digiriéndose a Darien
- Comprendo, gracias por todo Carlos, ahora mi amigo y yo debemos ir al palacio - agradeció el rey cabizbajo
- No fue nada, señor, ahora con su permiso, tengo que poner a cargar el dispositivo temporal - afirmó el chico sonriéndoles - Y señor Charlie, ¿Será posible que usted me pueda instruir en algunos de sus movimientos de combate? - solicitó acto seguido
- No tengo problema, Charly, ¿alguna vez ha peleado? - preguntó el del fleco pronunciado, viéndolo dudoso
- Se sorprenderá - fue la contestación confianzuda del hermano de Setsuna
Palacio de Crystal, a la mañana siguiente.
Chibiusa se despertó de mañana como todos los días y al refregarse los ojos vio en la cama de al lado suya a su ahora compañera de habitación por pedido suyo, sentada en posición fetal y la mirada al frente, viendo nada en especial.
- ¿Risa? ¿Todo está bien? ¿Desde hace cuánto estás despierta? - indagó la de odango rosado bostezando
- No... no... no puede ser, tiene que haber un error... estamos jodidos... estamos jodidos...la flama sagrada tenía razón... - balbuceaba ella sin hacerle caso, al ver esto la princesa se preocupó y se sentó frente a su amiga
- Risa... Risa, ¿Qué sucede? Dime qué tienes - pidió saber la pelirrosa tomándole la cara con ambas manos para que la viese a los ojos
- Es... es una cobarde... no quiso afrontar las consecuencias e hizo lo más fácil... y él... porqué... porqué hizo esto - continuaba balbuceando ella
- ¿De quienes estás hablando? ¡Reacciona! - gritaba Chibiusa alarmada
Esto último pareció hacer volver en sí a Risa quien se quitó las manos de la princesa, de las mejillas y se levantó de la cama.
- Todo... todo en este supuesto "paraíso terrenal" es una mentira, todo... - decía suspirando la de cabello castaño oscuro tomándose la frente con una mano
- ¿Hablas de la situación con tu madre? Tranquila, todo se arreglará, dime ¿Cuándo te despertaste? - volvió a preguntar Chibiusa con algo de temor
- No dormí en toda la noche, no pude...
- ¿Tanto así? Pero, ¿Has sabido algo más antes de que vinieras a la habitación? ¿Hablaste con mi mamá? - siguió su amiga con sus preguntas
- La situación es mucho más grave de lo que pensábamos... es un problema gordo que viene desde hace muchísimo tiempo atrás y que se repitió en los días actuales... - se limitó a decir Risa en voz baja dándole la espalda
- Cuéntame, cuéntamelo todo, ya me estás asustando - dijo la pelirrosa de coletas con una gota de sudor corriéndole por un costado de la frente
- No te va a gustar saberlo - respondió la de pupilas púrpuras con una seguridad y severidad que asustaba, dándose media vuelta y mirándola fijo - No todo conocimiento es bueno - añadió de igual manera, Chibiusa se limitó a tragar saliva nerviosa
La verdad era que la reina le había rogado la noche anterior a Risa, que no dijera nada a nadie de la charla que habían tenido y menos a Chibiusa, la joven accedió a pesar de su enojo y decepción.
La muchacha se cambió de ropa y después de tomar un buen y abundante desayuno en compañía de la heredera al trono, decidió buscar de nuevo a la reina o a quien supiera decirle la manera de comunicarse con Ciudad Sur sin delatarse a sí misma y sin que le rastreen la llamada, la princesa le dijo que preguntara a su madre o a su padre, que seguro sabían y le habló de la sala de comunicaciones pero, necesitaba el permiso de ellos para poder entrar.
Risa no lo dudó y los buscó a fin de obtenerlo y que la guiasen hasta aquella, luego de indagar le informaron que ellos estaban en la sala de reuniones.
En la misma se encontraban los reyes en compañía de Artemis con Charlie Nash a fin de hacer oficial la estadía y cargo que ocuparía el norteamericano en el palacio.
- Entonces, señor Nash, no solo usted era piloto en la fuerza aérea de los Estados Unidos, si no también ha estudiado psicología, ¿verdad? - dijo Serena leyendo el currículum del rubio
- Así es, su alteza, ella se trata del estudio y el análisis de la conducta y los procesos mentales de los individuos y de los grupos humanos en distintas situaciones, su campo de estudio abarca todos los aspectos de la experiencia humana y lo hace para fines tanto de investigación como docentes y laborales, entre otros... ha de saber que la milicia también tenía sus psicólogos - explicó el hombre de lentes
- ¿Cómo se relacionan? - preguntó el consejero Real
- Se investigan, diseñan y aplican teorías psicológicas y de experimentaciones para el conocimiento, predicción y recuento de los comportamientos tanto de las fuerzas armadas propias como de las enemigas o de la población civil, en la anterior Era eso se utilizaba para identificar a los individuos indeseados, amenazantes o potencialmente peligrosos para llevar a cabo las operaciones militares, también se trataban el estrés, el cansancio y cualquier trauma psicológico sufrido por el personal militar como consecuencia de las operaciones - expuso claramente Nash
- Pero ahora en esta nueva Era, todo es paz y armonía así que no es necesario utilizarla en el mismo sentido... puede usarse con fines pacíficos y beneficiosos para todos - respondió la Neo reina Serenity con una sonrisa
- Propongo que Nash sea el psicólogo de nuestra guardia Real, nos servirá para ver si tienen alguna necesidad o expectativa sin cubrir y que esté contemplada dentro del Código - comentó el rey de forma decidida
- Es una excelente idea, querido, ¿Está usted de acuerdo, señor Nash? - fue la contestación de la soberana, sin que su esposo la mirara siquiera
- Por supuesto, majestad, para mí es todo un honor ocupar ese cargo y puedo empezar cuando ustedes lo deseen - aceptó amablemente el norteamericano
- Entonces estamos de acuerdo, ocupará ese cargo el tiempo que permanezca en Japón - concordó Artemis
- Está decidido entonces, tú te encargarás de guiar al señor Nash al lugar en donde se va a quedar y a dormir - fue la orden de la Neo reina
Ni bien terminó de hablar, la puerta se abrió y entró un guardia y se dirigió hacia la soberana, luego de que este le hablara al oído ella asintió con la cabeza y dio por terminada la reunión.
Risa esperaba afuera cuando Serena salió seguida de Endymion, Artemis y Charlie, mientras los tres últimos siguieron su camino, la rubia de odango se quedó.
- Risa... dime, ¿Querías pedirme algo? - indagó la regente bajando la vista con pesar, sin poder evitar recordar la charla de anoche
- Si, deseo comunicarme con Ciudad Ígnea sin tener que usar mi celular ni salir afuera ni que me rastreen desde allá - contestó la chica en un tono algo seco
- De acuerdo, sígueme... - le respondió la de pupilas celestes
Ambas mujeres caminaron en un silencio incomodo rumbo a la sala de comunicaciones y al llegar al sitio, le dijo a los presentes en el mismo que Risa tenía autorización para comunicarse desde allí con quien quisiera como así también, libre acceso a la sala las veces que quisiera.
Luego de explicarle a la muchacha cómo funcionaba el sofisticado y avanzado computador, se retiró de allí.
Risa pidió enseguida por el número de Mirajane y se colocó rápidamente unos auriculares equipados con micrófono antes de pedir a la gente que la dejara sola, estos obedecieron mientras el tono de llamada sonaba.
La voz femenina del otro lado de la línea apareció y la chica la saludó con el corazón palpitante y algo de duda.
- ¡Risa! ¿Cómo estás? ¿Desde dónde estás hablando? - preguntó sorprendida la voz de la albina
- No te preocupes, yo estoy bien... desde donde hablo no pueden rastrearme, ¿Cómo van las cosas por allí? - contestó la de ojos violetas
- La verdad no muy bien, tu madre echó a tu papá de Hikawa y anoche tuve que ir a buscarlo a un bar porque estaba totalmente ebrio, ahora Ralf se está quedando en mi casa, si deseas hablar con él puedes llamar ahora - informó Mira con preocupación
- No, no quiero hablar con él, escucha... la situación es muy, muy grave... más de lo que pensaba... mi papá tampoco está limpio, déjame contarte todo ¿Tienes tiempo? - se decidió la hija de Rei y Ralf a hablar
- Oh cielos... no me asustes, escucha, ahora estoy yendo en un taxi a mi trabajo pero habla, aún me queda camino... necesito saberlo ahora o la duda me carcomerá - accedió temerosa la bella ex luchadora
Ante todo, la chica le juró por la memoria de su abuela que todo lo que le diría era cien por ciento cierto, acto seguido le contó todo lo que sabía... todo, sin reserva alguna y una vez que acabó de relatar todo, hubo unos segundos de un inquietante silencio, solo el sonido del taxi se escuchaba junto con la respiración de la chica.
Risa jamás se imaginaria la respuesta que Mirajane le daría...
- No puede ser... y no niego que lo que me dices no duele - aseguró la ex luchadora con la voz quebrándose - Estuvo mal lo que hizo... pero puedo entender perfectamente lo que es cargar con una maldición - prosiguió hablando dolida en referencia a Ralf
- Explícate, Mira... porqué lo dices - quiso saber la joven miko con desconcierto
- Porque yo también estoy igualmente maldita, como él... - confesó la moza con la voz temblorosa
- ¿Qué... que dijiste? - balbuceó la muchacha sumamente estupefacta
Muy buenas senshis y soldados, ¿Cómo están afrontando la cuarentena? Al menos aquí en Argentina es obligatoria y total así que, hay que quedarse en casa y solo salir para algo esencial, si te enganchan en la calle paseando te cagan a palos y te meten preso con suerte o sin la misma, te ejecutan :v (Ok no creo que tanto XD pero sí te podrán detenerte)
Bueno, espero que les haya gustado la entrega, para la parte del viaje al año 1992 tuve que mirar el capítulo 35 de Sailor Moon clásica para recordar detalles XD. No se si alguien que esté leyendo este fic ha leído también "Los ángeles de la muerte" de Aegis2000, el que lo hizo seguramente habrá recordado una frase guiño a dicha historia que les recomiendo leer si no lo han hecho :3
¿Que desean conocer los detalles de la charla entre Risa y Serena? Eso se va a conocer recién en el desenlace de la historia en ciertas circunstancias que no pienso decir :D
Pasemos entonces a responder los reviews:
Andrew81: te agradezco enormemente tus comentarios y cuando leas el desenlace de la historia te vas a caer de espaldas créeme XD Saludos a vos también n.n
Charly Meiou: Muchas gracias amigo por tus ideas, siempre son buenas! ¿Quieres saber que va a pasar? Sigue leyendo :D
Newwarrior: Por acá todo bien aunque en cuarentena, espero que vos también estés bien, amigo.
Aeronueve: Efectivamente se vienen cosas interesantes, no adelanto nada XD
Desconocido: Grazie mille, chiunque tu sia (Supongo que es italiano el que escribió, no se XD)
Me despido entonces hasta la próxima, cuídense mucho y ya saben, no salgan de casa si no es necesario! Hasta la vista!
