Incógnita

"El fuego está en sus ojos y sus palabras son realmente claras,

Así que, lárgate simplemente lárgate.

Será mejor que corras, será mejor que hagas lo que puedas,

No quieres ver sangre, basta de ser bravo

Quieres ser duro, mejor haz lo que puedas

Así que, lárgate pero malo te crees"

Beat It - Michael Jackson

Desde hacía un rato ya que habían salido del lugar en donde Mirajane estuvo cautiva y Ralf le dijo a ella de llevarla a un hospital a fin de que la atendiesen además de preguntarle si sentía mucho dolor en el cuerpo, ella le respondía que iba a estar bien y que primero fueran al restaurante Magnolia puesto que Setsuna debía de estar muy preocupada ya que la esperaba de regreso y que después fueran a casa, quien conducía no podía evitar preocuparse por ella.

- Primero me ocuparé de que estés cómoda y a gusto, después voy a llevar a ese hijo de la mala madre que traigo en el baúl a tenerlo bajo arresto así que ten la seguridad de que lo interrogaré y le haré confesar todo... ¿Segura que estás bien? Luces bastante lastimada – dijo él mirándola con preocupación

- Agradezco tu preocupación pero estoy bien, solo necesito... reposo y se me pasará el dolor y la flojera – respondió la albina mostrándose dolorida

- Si te tenían atada de pies y manos, ¿Cómo escapaste? ¿Qué pasó para que aquellos tipos salieran tan asustados corriendo? Estabas rodeada y eran muchos para ti sola suponiendo que se confiaran y te soltaran, tengamos en cuenta además tu hombro lesionado y que estabas en un espacio limitado como para poder realizar tus movimientos con libertad – preguntó y comentó intrigado el de pupilas cafés

- Pues... sí se confiaron y me soltaron por lo que pude reducir a algu... nos con mis movimientos, después llegaste tú – respondió la bella camarera sin entrar en más detalles

- Pero en ese caso, los restantes podían haberte reducido, ¿Tan débiles eran? Hay algo que no entiendo ¿Y Chad Kumada? Tengo entendido que fue entrenado por su padre en artes marciales – siguió preguntando Jones

- No lo sé... no me preguntes más... por favor – contestó Mira algo molesta

- Es que necesito saber exactamente qué fue lo que sucedió, de todos modos no te preocupes, puedo esperar a que estés más calmada y sin dolor – afirmó Ralf preocupado y pensativo

- Iban... todos enmascarados, después que... corrieron no supe de él, cr... eo que escapó – respondió la de ojos azules suspirando - ¿A a ti qu..e te pasó en el rostro que tienes algunos mo..retones? – indagó intrigada observando dicho detalle

- A ti sí te lo puedo decir porque confío en ti y sé que no se lo dirás a nadie, luché contra el rey Endymion, me retó a una pelea y me ha sorprendido, pude ganarle pero me dio trabajo – recordó Ralf lo acontecido en la capital

- ¿Co... como dices? ¿Por qué? No tení...a idea de que el rey su...piera luchar, además... es llamativo que siendo él quien es... quebrante el código – comentó ella trabajosamente sin poder evitar asociar aquello con lo que Risa le había contado sobre la reina y Ralf – Me pregunto si el rey sabrá sobre el desliz que tuvo su esposa con él pero... de ser así, le hubiera pedido el divorcio y se habría armado un escándalo, salvo que buscaran mantener las apariencias ¿Se lo habrá contado ella? No creo... ¿Entonces para qué le borró la memoria a Ralf? – pensó acto seguido con intriga dicho asunto que le quitaba la tranquilidad

- Tiene buenas habilidades y un gran talento para pelear, lo ha entrenado un compatriota mío ex teniente de los Marines que es amigo suyo – afirmó el musculoso – Yo me divertí, un buen combate calienta la sangre pero, no me queda bien claro por qué me retó, ponerse a prueba él mismo y entrenar probablemente pero... justo antes me pidió que no me acercara a su esposa y no entiendo la razón, jamás me propasé con ella y siempre la traté con respeto y amistad – añadió además teorizando y afirmando lo último

- Ralf... di...dime la verdad, ¿Qué sientes por la reina? ¿Te involucrarías con ella? – preguntó la de cabello blanco expectante mirándolo – Entonces es evidente que sospecha o algo sabe, ¿Pero cómo y por medio de quién? ¿Rei Hino tal vez? – pensó más preocupada

Ralf también la miró y le respondió con total seguridad.

- Ella es una mujer casada y encima, amiga de Rei por lo que jamás me fijaría en Serena ni me le insinuaría.

- Conociéndote, no dudo de eso... ¿Y qué pasó? ¿Sancionaron a lady Mars? – siguió preguntando la ex luchadora algo más tranquila

- No, Rei salió librada, seguirá siendo gobernadora y además continuará con derecho sobre Risa, Serena la libró a pesar de nuestro testimonio y del de la princesa a nuestro favor, solo la sancionó por los incidentes en Ciudad Argentum y nada más – dijo él contrariado – Para colmo en Nukureo Kaseigan se complicaron las cosas, Leona fue descubierta cuando espiaba a ese rubio imbécil y debió luchar para huir, muy probablemente sea delatada y Rei le pida explicaciones... - agregó acto seguido de igual modo

Mirajane empezó a quejarse del dolor y a tomarse el estómago con ambas manos evidenciando que le dolía bastante la zona, ella debió de confesarlo al no poder ocultarlo.

- Voy a llevarte al hospital y después me comunico con lady Plut, no tenemos tiempo que perder – resolvió el de cabello castaño oscuro acelerando el auto

Él tenía la opción de llevarla a Ciudad Aquae a fin de aprovechar y hablar con Ami sobre lo que tenía pendiente, si lograba ponerla de su parte sería una excelente ayuda contra Rei pero, en estos momentos la situación apremiaba, no sabía cuán lastimada estaba Mira y por dentro rogaba que no fuera nada grave. Entonces resolvió llevarla al hospital de Ciudad Ígnea que cubriera el gremio gastronómico de Mirajane.

Hasta allí se dirigió habiéndole indicado ella cuál era y al llegar, la cargó en brazos y solicitó para ella atención urgente, un vez que le preguntaron lo ocurrido y él les explicó, la atendieron los enfermeros. Ralf la acompañó hasta que le dijeron que la llevarían a observación y que aguardara al informe médico; al encontrarse solo procedió a telefonear a una muy preocupada Setsuna quien se encontraba sola en el restaurante por esperarla a ella y ponerla sobre aviso sobre los hechos.

Esta le pidió que la esperara a que fuera al hospital, rato después la morena llegó después de que el ex coronel le indicara dónde estaba.

- ¡Jefe Jones! ¿Qué sucedió? ¿Qué le dijeron? ¿Cómo está ella? – preguntó Setsuna llegando a la sala

- Aun no me dicen nada ya estoy perdiendo la paciencia, estaba golpeada en el rostro y el cuerpo, le han dado golpes en el abdomen también... ese pedido que llevó era una trampa para ella ideada por ese maldito niño rico hijo de Kumada al que voy a estrangular, Mirajane lo identificó pero usted, ¿Por qué aceptó enviarla a un lugar tan lejos? ¿No pensó la posibilidad de la emboscada? – respondió Jones molesto y recriminándole

- Cálmese... la verdad, ella tuvo un mal presentimiento y me dijo que podía ser una trampa pero lo desestimé, no pensé que Chad Kumada fuera capaz de algo así – dijo sentida la de ojos rojizos – Quiero creer que su padre está ignorante de lo que hace su hijo.

- Pues pensó mal... y respecto al idiota de su padre, deduzco lo mismo aunque por lo visto ha hecho un pésimo trabajo criándolo o aquel, sabe fingir muy bien – comentó el de ojos cafés no menos calmado

- Debemos conseguir pruebas para ponerlo en evidencia y otra cosa... usted debería de moderar su lenguaje, así quebranta el código – dijo la de cabello verdoso suspirando

- Olvídese del estúpido código y deje de ser tan estructurada... pude capturar a uno de los renacuajos que la tuvieron cautiva y lo tengo en mi auto, ahora lo voy a llevar a Saibansho* a tenerlo bajo arresto y después volveré, lo interrogaré cuando vea que Mira se encuentra bien – aseguró

- La ley es la ley y se hizo para ser respetada, oír eso es bueno así su testimonio servirá de prueba contra Chad Kumada ¿Ya supo el día en que el embarque llegará? – quiso saber la senshi de Plutón

- Ha habido algún que otro problema con mi contacto en la gobernación, hablaré con ella y en cuanto tenga la información se la envío por mensaje recuerde que estará codificado, ¿Tiene aún el papel que le dí? – aseguró seriamente Ralf

- ¿Cómo dio con Strauss? – indagó Setsuna después de asentir afirmativamente

- Ella me contactó cuando escapaba y la traje deprisa, ahora voy a llevar aquel granuja a Saibansho, vuelvo apenas lo haya puesto preso – dijo el soldado alejándose

- No se apure, yo me quedaré aquí, es importante que usted lo interrogue lo antes posible, también contribuye al bien de ella – afirmó la morena mirándolo y refiriéndose a la ex luchadora

- Tiene razón, lo haré y volveré no vaya a ser cosa que a Rei se le ocurra liberarlo, usted avíseme por teléfono si hay novedades de Mira – coincidió el hombre antes de salir de la sala

De modo que salió de prisa del hospital y se dirigió a su auto al sentir golpes provenientes de adentro, entonces abrió el baúl y sacó al encapuchado de adentro el cual se encontraba desesperado y suplicándole.

- ¡Camina, bastardo infeliz! ¡Me vas a decir todo, lo quieras o no! Puedes sentirte afortunado, vas a estrenar una prisión puesto que ni se han usado – exclamó fúrico metiéndolo en el asiento del acompañante a las malas

Luego de esto, puso en marcha al motor y avanzó de prisa en dirección a donde deseaba ir.

Casa Kumada

Ya era tarde de la noche y tanto Yuuichirou como Chuubou ya se habían ido a dormir al igual que el personal doméstico, el chico llegó de prisa en su auto y lo dejó en la cochera rápidamente mientras deseaba que el ruido del coche y la puerta no despertaran a nadie. Después de apagar el motor, descendió de prisa mientras lucía alterado y asustado y sigilosamente abrió la puerta que comunicaba la cochera con el resto de la casa a fin de dirigirse a su habitación al mismo tiempo que vigilaba que nadie estuviera cerca.

Una vez en el lugar mencionado, se paseó de un lugar a otro antes de sentarse en la cama y sacar el celular para realizar un llamado.

- ¿Señor Chad? ¿Es usted? – contestó una voz masculina desde el otro lado

- Si, escucha... todo salió mal, esa maldita camarera no es normal... no sé de dónde sacó ese extraño truco que hizo pero todos huimos de prisa, ¿¡Qué y quién rayos es esa mujer!? – vociferó Chad alterado

- Acabo de recibir el informe de los chicos, tiene que ser una broma, lo que cuentan no es verosímil... ella es solo una simple moza, una ex luchadora caída en desgracia – dijo la voz en un tono de extrañeza

- ¡Yo estaba allí también y lo vi con mis propios ojos! Por lo que confirmo lo que dicen – insistió el joven de melena castaña

- No todos volvieron de ese edificio y por lo que me contaron, la chica había telefoneado al jefe Jones antes de ser atrapada – informó el interlocutor

- No puede ser, si esa zorrita habla y él investiga, puedo estar en serios problemas aunque... es la palabra de ella contra la mía, por más que él le crea, sin pruebas concretas se les reirán en la cara – dedujo Chad buscando calmarse un poco – Escucha, hay que limpiar la zona antes de que Jones mande a revisar el lugar, tenemos que actuar de prisa – añadió acto seguido sin poder evitar preocuparse

- Ahora mismo me pongo en campaña para eso, joven Chad, una pregunta... ¿Qué hará con respecto a su idea de hacer despedir a esas dos camareras de su trabajo? ¿Seguirá adelante o no? – quiso saber la persona con quien el muchacho hablaba

Este pensó unos instantes en silencio mientras recordaba.

El chico castigaba con el cinturón a la ex luchadora mientras era acompañado de sus hombres y ella gemía de dolor, de repente su cuerpo fue envuelto por una luz brillante blanca primero y que se tornó violeta a continuación al mismo tiempo que Mirajane gritaba. Los que la sostenían la soltaron enseguida, todos se cubrieron los ojos y se alejaron unos pasos totalmente desconcertados y atónitos.

Más lo estuvieron al cabo de unos instantes y notar que la luz violeta se desvanecía y observaban a la ex luchadora, la cual lucía totalmente cambiada. Esta con una expresión de furia los atacó y golpeó con una fuerza renovada y sobrehumana, mandándolos a volar y destrozando el sitio al punto de sacarles sangre y dejarlos en un estado lastimoso. Los que no habían sido alcanzados por ella huían despavoridos y Chad estaba sentado mientras la contemplaba inmóvil y aterrorizado sin poder moverse.

Al quedar Mirajane y él solos, esta lo observó con una expresión de rabia mientras que Chad se ponía de pie temblando.

- Se... será mejor que no te pases de lista conmigo, porque si no atacaré... sé artes marciales... el Karate Kyokushin que me fue enseñado por mi padre – dijo el chico claramente asustado

Como respuesta, ella sonrió burlonamente y lo invitó a intentarlo, entonces Chad saltó y realizó una patada giratoria doble en el aire que fue detenida sin ningún esfuerzo por ella con una sola mano, acto seguido el joven inspiró y exhaló un par de veces mientras se concentraba cerrando los ojos e insistió con rápidos ataques de puño, habiendo él concentrado la fuerza en aquellos.

De nuevo ella se los detuvo todos sin ningún problema haciendo uso de una sola mano y sin darle tiempo a más, con la otra mano lo agarró del cuello mientras se lo apretaba y lo miraba con desprecio, levantándolo como si no pesara nada.

- Escúchame bien, basura, no quiero volver a verte nunca jamás en mi vida ni que vuelvas a molestarme a mí o a Kinana o que el restaurante tenga problemas por tu culpa, porque de lo contrario... ¡Te encontraré y te destrozaré! ¿¡Has entendido, miserable gusano!? – dijo ella con un tono de voz claramente más grave y duro que el usual - ¡Ah, y lo mismo va si te vuelves a acercar a Risa Hino Jones, ella no es para un patético niñito engreído y creído como tú! – añadió de igual forma ante lo cual, él asintió con una cabezada y los ojos rojos y desorbitados

A continuación, Mirajane lo soltó arrojándolo bruscamente y de mala manera, al suelo.

- ¿No que eras un macho? Ahora lárgate de mi vista – ordenó aquella mofándose de lo asustado que lucía el chico, quien no tuvo otro remedio que ponerse de pie y salir corriendo preso del miedo

El interlocutor lo nombraba en el ínterin que Chad se quedaba pensando y recordando aquello, hasta que finalmente dio a conocer su decisión.

- No sé qué tiene esa estúpida en verdad pero la astucia es mejor que la fuerza bruta, desde luego que sigo adelante y si después ella intenta volver a atacarme, reforzaré mi seguridad ah y por lo visto ella conoce a la hija de Rei Hino, hay que investigar bien sobre la chica y el padre... tal vez esa camarerita sea amiga de ellos ¿entendido?.

Chad recibió un segundo llamado en su teléfono por lo que despidió al hombre con quien hablaba y atendió aquel.

- Buenas noches, señor Kumada, ante todo disculpe usted la hora espero no haberlo despertado – saludó la voz de un muchacho al otro lado de la línea

- No hay problema, ¿Quién habla? – quiso saber el hijo de Yuuichirou buscando aun serenarse y recuperarse del susto

- ¿Ya se olvidó de mí? Habla Arata Hayashi, compañero de las dos camareras que usted desea hacer echar del restaurante Magnolia, me prometió una fuerte suma de dinero por ensuciar la cocina para que los funcionarios de salubridad la encontraran así – recordó el interlocutor

- Ah sí, escucha... voy a transferirte el dinero a tu cuenta bancaria pero recuerda, nunca trataste conmigo ni sabes nada de mí, ¿Entendiste? Otra cosa, voy a necesitar un favor más de parte tuya – aseguró Kumada hijo, con seriedad

- Como no, de acuerdo... soy todo oídos ¿Qué necesita? – aceptó de buena gana el camarero que hablaba con él

Acto seguido, Chad comenzaba a explicarle lo que deseaba de él.

Mientras tanto...

Saibansho se trataba del palacio de justicia ubicado a pocos metros de Nukureo Kaseigan, en el lugar primeramente mencionado funcionaba la prisión que en la presente Era de paz era más bien una formalidad puesto que no habían tenido que encarcelar a nadie allí; ya de por si en la Era pasada Japón se posicionaba dentro del top 10 de los países más seguros del mundo debido a la estricta ley en cuanto a la inmigración, el consumo de drogas y la tenencia de armas de fuego, a eso se le sumaba la prohibición absoluta de conducir si la persona había bebido siquiera una gota de alcohol y además, los robos eran muy pocos.

Desde la asunción de la Neo reina Serenity al trono y la implementación del Código de Convivencia Pacífica, con más razón los robos y la delincuencia eran nulos pero igualmente, el gobierno Real creyó necesario crear los organismos de justicia como el presente.

A Saibansho llevó el jefe de guardia de Ciudad Ígnea a quien había capturado en donde tenían cautiva a Mirajane, allí hizo revisar bien sus pertenencias encontrando el celular de la anteriormente mencionada e hizo que le sacaran fotos y que quede asentado que aquel hombre lo tenía en su poder, acto seguido Jones mismo lo interrogó duramente al mismo tiempo que hacía filmar para que su testimonio quedara registrado. Claro estaba que el detenido relató lo que presenció y tuvo que jurar la veracidad de los hechos y suplicar puesto que Ralf no le creía como así también confesó que trabajaba para Chad Kumada.

Viendo él que el detenido no contaba otra cosa, mandó a que lo llevaran a prisión hasta tanto se decidiera lo que pasaría, claro estaba que la decisión final la tenía Rei como la gobernadora que era.

- La verdad vendría bien unas pruebas para ver si ese infeliz no está borracho o algo por el estilo, el cuento que contó no me lo creo... será mejor que mande a revisar el edificio aquel como así los autos que quedaban, no quita el hecho de que en lo que dijo Mira hay algo que no encaja, estaba sola y eran muchos para colmo ella estaba lastimada sumado a su vieja lesión, aunque la desataran... ¿Cómo hizo para batirlos y ponerlos a correr con tanto miedo? Solo si hubiera recibido ayuda pero, no había nadie más o algo más pasó que ella no me está diciendo pero, lo importante es que logré llegar a tiempo antes de que le hicieran más daño o algo peor – pensaba Jones para sí con curiosidad – Escucha, reúne un grupo de hombres y vayan a la dirección que les diré, revisen todo el edificio y alrededores, enfrente habían quedado un par de coches de ellos los cuales debemos confiscar y revisar – habló el de ojos cafés a uno de los guardias que se encontraban cerca

- Entendido, jefe Jones – contestó este realizando una leve reverencia

- Ve ahora, no pierdan tiempo si Kumada estuvo detrás del ataque seguramente se apurará a borrar evidencias, ah y no dejen de informarme todo ¿Entendido? yo voy de regreso al hospital – ordenó el ex coronel en el ínterin que caminaba y el soldado corría a cumplir con la orden

El hombre salió de Saibansho a paso ligero y se subió a su Dodge Charger a fin de volver al hospital en donde estaba internada Mirajane y desde luego que no podía evitar pensar en la reacción y acción de Rei cuando se anoticie del hecho, a su pesar, no era optimista con ello tratándose del hijo de Yuuichirou.

Entre pensamientos llegó al lugar y se dirigió de prisa a la sala en donde había esperado antes, en donde se encontraba Setsuna Meiou sentada en una silla, cruzada de piernas y con los codos apoyados en la falda y el mentón apoyado en las manos, quien lo observó seriamente arribar.

- ¿Y qué pasó? ¿Alguna noticia de Mirajane? – fue lo primero que preguntó Jones

- Aun no, nadie vino – respondió la morena suspirando

- ¿¡Todavía no!? ¡Maldición! – se quejó el jefe de guardia fastidiándose

- ¿Y cómo fue el interrogatorio? ¿Sacó usted información que sirviese? Será importante para reportarlo al Palacio de Cristal – quiso saber la guardiana del tiempo, con curiosidad

- Lo único es que ese sujeto confirmó que trabaja para Chad Kumada y que él fue quien ordenó la emboscada para Mirajane... sacando eso, dijo una sarta de sandeces que estoy lejos de creer – respondió Ralf buscando calmarse – He mandado a grabar su testimonio ah y recuperé el teléfono de Mira, lo tenía ese tipo – añadió con una pequeña sonrisa

- Algo bueno ha podido obtener, sumado a los testimonios de mis empleadas sobre las agresiones de él en el bar resultarán en un buen castigo para el joven, su padre no tendrá otro remedio que ver la realidad por más dolorosa que resulte – opinó la de cabello verdoso

- Mandé también a revisar el área a donde usted la envió a fin de juntar pruebas e investigar... el problema es Rei, conociéndola es capaz de liberar al detenido y decir que fue pagado por mí para perjudicar a Kumada y frustrar su boda con Risa – informó el musculoso dando a conocer su pálpito – Pero ahora lo más importante es que Mira esté bien, me preocupa que el castigo recibido tenga complicaciones... tenía mucho dolor en el camino hasta aquí – añadió suspirando de preocupación

- ¿Se preocupa mucho por Strauss, verdad? ¿Es muy importante ella para usted? En el puerto usted dijo que tomaría ventaja de cualquier cosa que pueda serle útil a fin de cumplir su misión de vengarse de lady Mars – señaló Setsuna incisivamente mirándolo fijo

- ¡Un momento! Cuando dije eso no estaba hablando de Mirajane, no me aprovecharía de ella ni haría nada para lastimarla y respecto a su pregunta, desde luego que lo es ¿Cómo no preocuparme si la quiero mucho y la conozco desde hace tiempo? Y ahora con los líos que tengo con mi esposa, ella me apoyó y se preocupó por mí además de confiar en mí, no me cuestionó ni me juzgó, no me perdonaría si no hiciera yo lo mismo por Mira – aseguró Ralf ofendido

- Comprendo, jefe Jones, entonces si lo que afirma es verdad no la ilusione, no quiera usarla para olvidar a lady Mars sea siempre sincero con ella, debería olvidarse de otra relación amorosa – aconsejó la dueña del restaurante Magnolia con franqueza

- No necesito su consejo sé bien lo que hago y actuaré en bien de ella – dijo secamente el imponente musculoso

- Yo no deseo ni que sufra más usted ni tampoco Strauss, ¿me comprende? Y ya que menciona a lady Mars, ¿Qué sucedió en el comparecimiento en el palacio? – aclaró la de pupilas rojizas su punto de vista y preguntando

- Las cosas salieron mal, la reina absolvió a Rei a pesar de los testimonios y continúa siendo gobernadora como así también teniendo libertad sobre Risa, ¡Que frustración! La verdad, no entiendo por qué – recordó molesto el ex coronel

- ¿De verdad? Cielos, que mal oír eso... pero tenga paciencia, la justicia llegará – dijo Setsuna bajando la vista con pesar

Dicho esto, permanecieron en silencio y el tiempo pasaba sin haber novedad de Mirajane, Ralf se paseaba de un lugar a otro y la impaciencia empezaba a traicionarlo.

- ¿¡Cuando diablos van a venir a decir cómo esta ella!? Si algo le pasa haré que el maldito doctor que la atiende sea responsable por ello – se quejó Jones alzando la voz

- Jefe Jones, por favor sea paciente y cálmese – recomendó la morena

- Sin duda alguna yo velaré por Mira – contestó sin bajar el tono de voz

- Esto es un hospital, por favor – dijo un médico que pasaba cerca haciéndole un ademán de que bajara el tono

- ¿Y a mí que me importa? – respondió el jefe de guardia de mala gana

- No ganará nada enojándose ni gritándole a la gente – suspiró la morena meneando la cabeza

- Entienda que estoy preocupado por ella, usted no es la única – señaló el hombre no menos calmado

Cuando apenas había terminado de hablar, otro médico se acercó a ellos.

- ¿Ustedes están con la paciente Strauss?.

- ¡Sí! ¡Tardaron bastante! ¿Ella está bien, verdad? – preguntó Jones expectante y acercándose junto a Setsuna

- La paciente tiene un gran hematoma en el abdomen producto de golpes recibidos, tenía una hemorragia interna que afortunadamente pudimos controlar, la zona del abdomen está inflamada como así también presenta otros golpes en la cabeza y brazos con hematomas y heridas en la espalda, presenta una vieja lesión crónica en el hombro derecho con los músculos y tendones de la zona, deteriorados – explicó el doctor calmadamente

- ¿Pero sí esta fuera de peligro, verdad? – volvió a indagar Jones

- El hematoma abdominal es en el músculo y piel y los de las demás áreas en la piel, la desaparición de los hematomas puede llevar de semanas a meses pero, sí se encuentra fuera de peligro, por precaución ella se quedará unos días internada hasta que la inflamación abdominal baje y que corroboremos que no presente más complicaciones – siguió explicando el hombre

- De acuerdo ella se tomará licencia hasta que se recupere, ¿Qué recomienda? – intervino Setsuna calmadamente

- Pues, reposar la zona de los moretones, aplicar compresas de hielo en una toalla sobre las zonas entre 10 y 20 minutos y repetir esto varias veces al día durante unos días según sea necesario, en caso de que se inflamen, comprimir la zona de los moretones con una venda elástica tal como ahora está, más que nada en la espalda ya que si la piel no está lastimada no es necesario y en caso de que sienta ella mucho dolor, que tome analgésicos de venta libre durante los primeros días, solo debe evitar tomar aspirinas o cualquier medicamento que contenga anticoagulantes y tener la zona del hombro derecho en reposo sin forzarlo pero, no podemos hacer nada para curar esa lesión ¿Ustedes son familiares de ella? – quiso saber el médico

- No, familiar directo solo tiene un hermano al que no ve desde hace mucho tiempo pero, yo me haré cargo de ella – aseguró el de ojos cafés mientras la morena lo observaba

- ¿Podemos verla ahora? – preguntó esta

- Desde luego, vengan conmigo solo procuren no hablar mucho puesto que es necesario que la paciente descanse – respondió el doctor empezando a caminar

Ellos lo siguieron por una puerta y caminaron por un pasillo que los depositó en un ascensor el cual tomaron hasta llegar un par de pisos más arriba, allí caminaron por otro corredor hasta cruzar otra puerta que los dejó en el área de internaciones.

Avanzaron algunas puertas hasta que entraron por la cuarta a la derecha, en la cama se encontraba ella despierta y tenía vendas en la frente y una compresa en una mejilla.

Al verlos les sonrió y los saludó.

- Aquí estamos, ¿Cómo se encuentra la paciente? – le preguntó el médico

- Estoy bien aunque aún me siento floja y tengo algo de dolor – respondió la albina

- Es bueno ver que estás fuera de peligro, Mira, realmente me alivia – dijo Ralf sonriéndole

- Gracias por traerme, corazón, no hubiera resistido mucho más el dolor – respondió ella correspondiéndole el gesto

- Strauss, realmente me preocupé por usted, siento no haberle creído – dijo Setsuna a modo de disculpa

- No se preocupe, usted no lo conoce bien – justificó la de ojos azules refiriéndose a Chad Kumada - ¿Cuándo podré volver a casa? – quiso saber acto seguido

- En unos dos o tres días, si no hay ninguna complicación y una vez allí, recomiendo al menos un par de semanas de licencia del trabajo y que nos visite periódicamente para control – explicó el doctor – Ahora si me disculpan, los dejo solos para que hablen pero recuerden que el paciente tiene que descansar – añadió hablándole a las visitas quienes asintieron con la cabeza

- Me preocupé en serio, cuando el médico nos dijo que te encontrabas bien mas allá de los golpes y moretones, fue una excelente noticia – aseguró Jones acariciándole con los dedos una mejilla

- Me da gusto oír eso – respondió ella sonriendo y sonrojándose, sintiendo gusto con el contacto de su piel con la suya

- Cuando vi que el tiempo pasaba y usted no volvía aun cuando Hayashi y Cubelios ya se habían retirado y yo llamaba a su celular y no contestaba nadie, me asusté en serio – confesó suspirando la de cabello verdoso

- A usted también le agradezco el preocuparse por mí, es usted una buena persona – agradeció y reconoció Mirajane

- Eso me hace acordar, recuperé tu celular lo tenía ese tipo al cual atrapé – dijo el musculoso sacando el teléfono y devolviéndoselo a Mira, quien le agradeció

- Con su ausencia, necesitaré contratar a un empleado para cubrirla el tiempo que no esté – dijo Setsuna a Mirajane con calma y seriamente

- Lo entiendo, lo necesitará en las horas de mayor concurrencia de público – respondió la albina comprendiendo

- ¿Por qué no reincorpora a Haruna? Necesita trabajar aunque yo no tenga problema en ayudarla económicamente – propuso Ralf

- No es tan simple... si lady Mars se entera puedo tener problemas con el restaurante pero, veré qué puedo hacer – contestó la morena suspirando de cansancio

- Debería, señorita Setsuna, ella se peleó con Rei Hino para defender a su hermano mayor, si la reincorpora y a ella no le gusta, debería usted ir al palacio a reportarlo y denunciarla – opinó la ex luchadora con sinceridad

- Luego lo pensaré y tomaré una decisión, mientras tanto debemos ocuparnos del asunto de Kumada... ese chico me ha decepcionado grandemente, no lo creí capaz de semejante bajeza – aseguró la de pupilas rojizas bajando la vista

- A mí no me sorprende teniendo en cuenta su trato con nosotros los empleados cada vez que iba a comer al restaurante y menos aún luego de cómo le faltó el respeto a Kinana y las denuncias que hizo solo para hacernos echar a ella y a mí, si no llegaba Ralf no sé qué hubiera pasado... de golpearme con la hebilla del cinturón a vaya uno a saber qué otras barbaridades más – la imitó la albina con molestia refiriéndose a Chad

- Se acabó... voy ahora mismo a la casa de ese niño de papi a enfrentarlo y a hacerle tragar su cochino cinturón – dijo Ralf apretando los dientes con enojo quien se encontraba recargado sobre el posa manos de la cama y la mirada baja

- No lo hagas por favor... el padre de ese chico es uno de los empresarios más poderosos e influyentes del país y si le haces algo sin pruebas firmes contra él solo te meterás en líos y puedes acabar en prisión, yo no deseo que te pase eso y además, no vale la pena... piensa en Risa y en Aya – pidió Mira en tono suplicante y tomándole de un brazo con ambas manos cuando él ya se estaba por ir

- Strauss tiene razón, jefe Jones, deberá tener buenas evidencias más allá del testimonio del hombre que usted capturó ya que de lo contrario, a ustedes dos nadie les creerá – concordó Setsuna por lo dicho por su empleada – Y además, lady Mars estará de parte de los Kumada – añadió señalando dicho detalle

- Tienes razón, me dejé llevar por el enojo, lo siento – dijo Jones a Mira, acariciándole la cabeza y sonriéndole

- Aunque déjame decirte que lo merece grandemente – opinó la de cabello blanco respecto de Chad

- ¿Quién es Aya? – indagó Setsuna con intriga

- Es una larga historia, con tiempo se la contaré – se limitó a responder el ex soldado

Luego de que hablara, entró una enfermera a indicarles que la paciente tenía que descansar y que podían volver al día siguiente por lo que tuvieron que irse, antes de eso Ralf le dijo que estaría en contacto con ella vía celular y que se encontraría al pendiente de ella y por su parte Setsuna le prometió lo mismo.

De esa forma, Mirajane pasó una noche tranquila de descanso y después de que le sirvieran el desayuno, le llego un mensaje a su teléfono de parte de Ralf quien le preguntaba cómo había pasado la noche, después de contestarle le llegó una llamada de un número privado.

- Hola Mira, soy Risa disculpa si te interrumpo ¿Ya saliste para tu trabajo? – saludó la voz de la joven

- Hola querida, no, estoy internada en el hospital, anoche me han tendido una emboscada, me atacaron y me lastimaron... gracias al kami que tu papá llegó a tiempo para buscarme – resumió la de ojos azules lo ocurrido

- ¿¡Que!? ¡No lo puedo creer! ¿Quién estaría detrás de esa cobardía? – preguntó sorprendida y enojada la voz de la chica

- Tu excelentísimo futuro esposo, Chad Kumada, yo lo identifiqué – dijo la albina con ironía y una pisca de broma

- Y mi madre desea casarme con ese niño... antes muerta, ¿Pero porqué hizo eso? – contestó la voz de Risa resoplando de fastidio

- Simplemente por defender a una compañera de trabajo a la que él le faltó el respeto, yo lo había enfrentado y lo agredí... oye, supe que tu mamá salió bien librada del comparecimiento ¿Tú cómo estás? – respondió la ex luchadora recordando ese detalle

- Sulfurada por ese detalle por lo que le reclamé a la reina, más allá de eso estoy más tranquila que cuando debía aguantar a mamá – informó la hija de Rei y Ralf

- ¿Y qué te dijo la soberana? ¿Por qué perdonó a tu madre? – preguntó la camarera con extrañeza

- Escucha, lo que voy a decirte debe quedar entre nosotras... mi mamá sabe lo que pasó entre papá y la reina, tal parece que tiene unas fotos en su poder que alguien le tuvo que haber enviado y la está extorsionando con eso a fin de no ser castigada – explicó la muchacha con cansancio

- Cielos... eso lo explica, también el porqué del cambio de Rei Hino, Ralf cometió un error que pagó muy caro con mucho sufrimiento y lo peor es que pagaste tú también que no tenías nada que ver ¿Te dijo algo más respecto de ese momento? – quiso saber la de ojos azules sintiendo cómo comenzaba a hervirle la sangre de solo imaginar el momento de Jones con Serena y además, de recodar todo lo que sufrieron ellos por culpa de eso

- Si, la reina me repitió que se encontraban hablando lo más normal mientras comían algo cuando de repente ella se sintió excitada de la nada y notó que a él le pasaba lo mismo... en ese momento, mi papá le había dicho a ella de tomar distancia y que no era correcto que fueran tan cercanos siendo ambos casados, después él se levantó de la silla, corrió y trató de escapar... luego de eso, la reina recuerda que ya no pudo más de la excitación y fue tras él, no pudo contenerse ya y mi papá le pidió que se detuviera pero... no lo controlaron y pasó lo que ya sabemos, ella recuerda que a la mañana siguiente mi padre estaba desesperado y muy sentido por el hecho ocurrido e iba a hablar con mamá para decirle la verdad y afrontar las consecuencias pero, la reina le suplicó que no lo hiciera y le borró la memoria.

- Eso explica más aun y definitivamente tu papá iba a obrar correctamente... entonces fue ella quien se le arrojó y lo provocó pero, ¿De dónde salió esa excitación? ¿Cómo no respetó ella a su marido? – siguió Mira con las preguntas, sintiendo un cierto alivio de oír aquello

- Serena recuerda que la puerta de salida estaba destrabada y después cuando mi papá quiso huir y abrirla, se encontraba cerrada... sinceramente y viendo el panorama, creo que les tendieron una trampa – teorizó la joven pensativa

- ¿Una trampa? – preguntó la de pelo blanco con curiosidad

- Si, probablemente alguien les puso algo en la comida para excitarlos y después trabó la puerta para que pasara lo que pasó... tal vez la misma persona que tomó las fotos o alguien más en combinación, este o estos después, se ocuparon de hacerle llegar las fotos a mamá – siguió teorizando Risa

- Lo que cuentas es espantoso, ¿Quién haría algo así? ¿Alguien enamorado de tu madre o de tu padre? – indagó la ex luchadora quien no salía de su asombro

- No lo sé pero, quien ama de verdad no se vale de esos trucos sucios lo que sí es que, quien lo haya hecho estaba interesado en arruinar el matrimonio de mis padres... definitivamente hay más cosas que no sabemos por detrás de los problemas con mamá, ¿Alguien que sabe lo mismo que yo sobre lo ocurrido en el antiguo Milenio de Plata? Tiene sentido, hablé con el consejero Artemis y él teorizó lo mismo además, cuando fui a la biblioteca de Ciudad Aquae a averiguar sobre el anterior milenio de plata y el disturbio de la sangre, alguien arrancó pedazos de páginas y faltaba información – continuó Risa hablando

Mirajane le contó sobre lo que Ralf le dijera de la pelea que tuvo este con Endymion y lo que el ex coronel le dijo sobre la actitud del rey al retarlo, de prohibirle acercarse a la reina y sobre lo que se preguntaba ella misma.

- Mmmhhh... con razón él llegó al palacio con la cara llena de moretones, me suena a que el rey también lo sabe, Serena no se lo contó a nadie ella misma me lo dijo, probablemente a él le llegaron también las mismas fotos que a mamá... tiene sentido que ella misma lo haya hecho por despecho o bien, que haya sido la misma persona que se ocupó de hacérselas llegar a ella – opinó la joven miko, pensativa

- Entonces, ¿él no le pide el divorcio a su mujer solo por conservar las apariencias y no afectar a la hija, aparte de no armar un escándalo? – preguntó Mira sintiéndose tranquila de saber que, Ralf no había engañado a su esposa a propósito y que iba a obrar correctamente a fin de evitar hacerlo cuando les tendieron aquella trampa y además, que hubiera afrontado las consecuencias de no haberle sido borrada la memoria, que era lo que correspondía hacer en un caso como ese

Aun así seguía angustiándole el hecho ocurrido y todo lo que tanto Risa como Ralf, sufrieron por culpa de ello y lo que acababa de enterarse, la dejaba con intriga de querer saber más del asunto

- Es lo más probable como así también, que ese ex piloto amigo suyo no vino de Estados Unidos solo de psicólogo, también a seguir entrenándolo tal vez por pedido de él... de modo que el honorable rey Endymion tiene sus secretos y quebranta la ley – conjeturó la voz de Risa con seguridad

- Risa... teniendo en cuenta lo que me has contado, deberías hablarle a tu papá, deja de evitarlo por favor – aconsejó la de cabello blanco con amabilidad

- Está bien hablaré con él... - accedió la joven luego de unos segundos de silencio

Después de hablar otro rato, ambas amigas se despidieron y luego Mira respondió un mensaje de Setsuna preguntándole más o menos lo mismo que Ralf.

Acto seguido se puso a mirar una vieja foto que poseía en su celular en la que estaban ella misma con Elfman y Lisanna más jóvenes, mientras la veía con nostalgia y acariciando la foto con la yema de los dedos a su habitación entró una mujer vestida de enfermera que la miró de forma rara, como con maldad

- Tú tienes un poder que me interesa – dijo la mujer en un tono bien bajo

- ¿Disculpe? – preguntó Mirajane observándola que la había oído, aquella desconocida tenía cabello ondulado largo azul oscuro, pupilas celestes claras y tez blanca

- A veces los sueños pueden convertirse en pesadillas... - dijo enigmáticamente la extraña enfermera

- ¿Me podría decir de qué está hablando? – volvió a preguntar la ex luchadora con desconcierto

- No es nada, necesito cambiar sus sábanas, señorita – respondió ella sonriéndole

Templo Hikawa, por la noche anterior.

Rei había llegado por la tarde procedente de Nukureo Kaseigan, ella pensaba en varias cosas principalmente en el paradero de Risa, sobre qué hacer con Leona Heidern además de vigilarla después de la información que Whip le diera al ir a verla a la enfermería... al menos estaba confirmado que trabajaba con su esposo para conspirar en su contra y trataban de sacar información de Jedite y claro estaba, qué tan profunda era la relación entre su marido y aquella camarera albina, mal que le pesara no la dejaba tranquila la idea de que ellos anduvieran viviendo juntos. En el ínterin se ocupaba de las cosas de la casa y de atender a quien quisiera comprar algún amuleto aunque, no podía adivinar el futuro ni leer las llamas como hiciera antes.

También se mantenía informada sobre lo que ocurriese en la gobernación y llegando la noche, ella misma se hizo la cena y le tocó comer sola justo antes de tomar su teléfono y realizar un llamado.

- ¿Hola? – atendió la voz femenina desde el otro lado de la línea

- Buenas noches... querida cuñadita – saludó con sequedad e ironía la de ojos violetas

- ¿Qué quieres?– preguntó Haruna suspirando con desgano

- Desde luego, que llamo para saber cómo van las cosas con Seiya Kou – fue Rei al directo al punto

- Estamos saliendo nada más, no pasó nada especial para tu información – respondió la joven de cabello corto castaño oscuro

- ¿Me estás diciendo que ustedes todavía no tuvieron sexo? ¿Por qué no usaste pastillas? – indagó la senshi del fuego con calma

- No tengo pastillas... - mintió la hermana menor de Ralf

- A otro perro con ese hueso, cuñadita – dijo la de cabello ébano burlonamente sin creerle

- Uso diafragma, hoy día no se necesita cambiarlos como antes y es más efectivo junto a las pastillas anticonceptivas – explicó la interlocutora tratando de tener paciencia

- ¡Pues te lo sacas! – exclamó Rei imperativamente

- No necesito hacer eso para tener relaciones sexuales – recordó Haru molestándose

- Bueno... además de permitirte reincorporarte a tu trabajo, puedo ofrecerte un buen dinero si haces algo más... - empezó la gobernadora a hacer un ofrecimiento

- ¿De qué estás hablando? ¿No estarás insinuando...? – preguntó la voz de la muchacha comprendiendo enseguida y fastidiándose

- Si, cuando tengan sexo, que él no use preservativo, si quedas embarazada... - respondió Rei siendo interrumpida

- ¡Olvídalo! Eso es lo más retorcido que he oído en mi vida, ¿¡Cómo puedes hacer eso para herir a tu propia hija!?– protestó airada la voz de Haruna

- Bueno, si no quieres hacerlo allá tú, te lo pierdes pero recuerda el trato... ¡Se ponen a hacer la cochinada una y otra vez hasta que revienten esa cama! ¿Me oíste? – recordó Rei alzando la voz

- ¡No tienes que recordármelo! – exclamóla chica antes de colgar

Rei observó el celular con seriedad mientras se oía a alguien aplaudir en la entrada de la casa, la regente del sur se levantó de la silla y fue a ver quién había arribado, le extrañó ver que se trataba de Mina.

- ¡Hola Reinita! ¿Cómo estás? – saludó alegremente la rubia acercándose a ella

- ¿Mina? ¿Qué haces aquí? ¿No te parece que es algo tarde? – preguntó Rei viéndose sorprendida por un beso en los labios que la rubia le diera

- Es que he andado ocupada y por eso no pude venir antes, ¿Acaso una no puede visitar a una vieja amiga cuando tiene algo de tiempo? – contestó riendo la de ojos azules al ver la reacción de Rei

- Ah claro porque yo no y... ¡Deja de hacer eso! Ya te he dicho que esos jueguitos quedaron en el pasado – dijo molesta la de pelo negro entrando a la casa

- Oh vamos, linda, ¿Cuál es el problema? Tu matrimonio no parece tener arreglo ya ni viven juntos con tu esposo – señaló Mina caminando tras ella

- ¿Y qué me importa eso? Mejor dime cuál es el motivo de tu visita – pidió saber la de ojos violetas entrando al living

- Ya te lo dije... hacerle una visita a una vieja amiga y además, ya que estás con tu uniforme de sacerdotisa, podrías aprovechar para consultar las llamas tengo una consulta para hacer – aseguró la de moño rojo pensativa y sonriendo

- ¿Leer las llamas? No va a poder ser – negó Rei aquella petición dándose vuelta y mirándola fijo

- ¿Por qué no? No te cuesta nada – insistió la gobernadora de Ciudad Metallus perdiendo la sonrisa

- Porque no, no insistas – repitió la regente del sur suspirando de cansancio

- Anda no seas mala, ¿Qué sucede? – volvió a insistir Mina en tono suplicante

- No puedo hacerlo, ya no puedo leer las llamas y he perdido las habilidades psíquicas en las cuales mi hija está entrenada, ¿conforme con la explicación? – dijo la de ojos amatistas viéndose en la necesidad de revelar dicho detalle, lo cual no le agradaba hacer

- Oh comprendo... supongo que enfocarte en las labores de gobernadora ha hecho que tus habilidades se vieran oxidadas pero, la vida sintoísta siempre ha sido una parte importante en tu vida por lo que me extraña que la hayas descuidado – comentó la de pupilas celestes sentándose en el sillón

- Así son las cosas... los tiempos cambian – contestó la dueña de casa imitándola - ¿Cuál era tu consulta? – quiso saber acto seguido

- Ahora que lo dices, no me sorprende tanto, mira yo no sé nada de la cultura zen ni de religión sintoísta pero ya no eres la misma de antes, tu alma no está bien y creo que eso tiene directa relación con la pérdida de tus poderes – teorizó Mina mirándola fijo y hablándole clara y calmadamente – Respecto a la pregunta, es un suceso extraño que pasó en el Edificio Dorado cuando el hermano de Setsuna y Ami fueron a verme – agregó recordando

- ¿Qué quieres que te diga? Mi esposo a quien amaba y en quien confiaba me engañó, más allá de eso, si bien ocupo un cargo importante como lo es la gobernación de este distrito... nada es lo que era para mí, siento que todo carece de sentido... es como si todo en lo que creía estuviera hecho de basura – confesó Rei con total sinceridad su sentir, como pocas veces lo hacía

- Es que te estás autodestruyendo, creo que insistes en encerrarte en sentimientos negativos que te hacen mal, si sigues así cuando te quieras acordar te mirarás y acabarás siendo lo que odiabas ser – dio su amiga su parecer, con franqueza

- Es fácil dar consejos... lo difícil es ponerlos por obra – respondió la de pelo negro refiriéndose a ambas

- Lo sé por eso te digo, quieres ser siempre fuerte y demostrar que puedes pelear pero, pedir ayuda no es rendirse ni señal de debilidad, créeme – señaló Minako sonriéndole – Mira lo que traje, ¿Te parece seguir la conversación con esto? – añadió sacando una botella de licor de su cartera

- Tiene buena pinta, mejor cambiemos de tema y me dices qué sucedió en el Edificio Dorado – sonrió Rei aceptando y cambiando el tema

- Mi jefa de guardia y una soldado sorprendieron a alguien infiltrándose en la sala núcleo del CtOS, esta última acusó al hermano de Setsuna pero cuando fuimos a ver las cámaras, no se vio a nadie más que a la soldado sola, yo quería que consultaras las llamas para saber la verdad detrás del asunto – respondió la autoproclamada diosa del amor, bebiendo de la botella y alargándosela a su amiga

- Es extraño, tal vez las cámaras fallaron ¿Estás segura que tu soldado vio bien? – quiso saber Rei con curiosidad al mismo tiempo que bebía también

- Ella asegura que sí insiste e insiste en que sí, hasta prometió seguirlo para probar que sí fue Carlos – contestó la senshi del amor

Entre trago y trago, el alcohol se les fue subiendo a la cabeza y la conversación fue virando hacia temas más íntimos como así también empezaron algunas caricias.

- ¿Sha... shabes? Mako siempre se jactó de te...tener los shenos más grandes pe... pero no nos quedamos atrás ¿verdad? – balbuceó la rubia ya alcoholizada abriéndose la camisa y descubriéndose sus voluptuosos pechos cubiertos con un corpiño blanco

- De... desde luego que no, yo tampoco... mi... mira – respondió Rei de igual forma abriéndose la parte de arriba del uniforme y haciendo lo mismo que su amiga

- Ohhh, que gra...grandes bellezas – alabó la rubia los pechos de Rei acariciando uno con una mano

- She... she te eshtá yendo la mano... - dijo la de cabello ébano molestándose aunque sin retirarle la mano

- Tonterías... hag...amos un cho... choque de pechos – sugirió antes de que ambas quedaran muy cerca una de la otra frente a frente con los senos de ambas apretándose un par contra el otro

Acto seguido, Mina besó rápidamente de nuevo a Rei en los labios para repetir de nuevo la misma acción unas dos veces más

A la mañana siguiente ambas aparecieron desnudas y tiradas en el piso del living en medio de las ropas de ambas desparramadas por todos lados y la botella de licor vacía, estaban aún dormidas y después de un rato la primera en ir despertando lentamente fue Mina, quien se enderezaba lentamente y bostezaba además de desperezarse.

- ¡Gran kami! Que lindo jolgorio nos pegamos anoche... ¡Guau! – dijo la rubia en voz alta lo cual despertó a Rei, quien también fue despertándose lentamente hasta que se dio cuenta de cómo estaban

- ¡Ay, ay, ay que dolor de cabeza!... ¡Por todos los kamis! ¿¡Qué diablos hicimos anoche!? – exclamó alarmada con la cara roja la de ojos violetas

- Qué no hicimos anoche sería la pregunta correcta, Reinita – dijo riendo la rubia viendo cómo su amiga buscaba rápidamente su ropa

- ¿Acaso me embriagaste a propósito o que, estúpida? – preguntó Rei, de mala forma

- Oh vamos, querida, solamente nos besamos un rato, nos desnudamos y nos frotamos un poco las... - relató la regente del oeste sonriente, siendo interrumpida

- ¡Mina! Ya basta, no quiero recordar eso, cállate la boca – exclamó agarrando su corpiño y su bombacha

- Pero anoche te veías muy a gusto, linda – señaló Mina sentada en el suelo aun desnuda con las manos apoyadas en el piso

En eso, Rei se ruborizó aún más al ver que Ralf salía del comedor con una caja en las manos, vestía la nueva armadura samurái color rojo que debían vestir ahora los miembros de la guardia. Él las miró con indiferencia aunque por dentro gustó de la vista, se guardó de demostrarlo y su aún esposa se apuró a taparse los senos y el área genital.

- ¿¡Qué estás haciendo tú aquí!? Te dije que no quería verte más por acá, maldito sinvergüenza – exigió saber la regente del sur avergonzada y enojada apretando los dientes

- ¡Hola Ralfi! ¿Cómo estás? – saludó alegremente Mina agitando una mano todavía sentada y sin cubrirse

- ¡Mina, tápate! ¿Qué no ves que hay un hombre presente? – vociferó la de ojos violetas mirándola igual que antes

- Solo vine a sacar unas cosas que me había olvidado, pero no las interrumpo más ustedes continúen nomás que yo voy de salida – respondió seriamente el de ojos cafés alejándose rumbo a la salida

- Oh cielos, que vergüenza... - se lamentó Rei poniéndose la ropa interior con velocidad después que él saliera

- Uaaahhh que sueño, tengo ganas de quedarme un ratito más aunque me duele todo, ¡Auch! ¿No tienes una aspirina o algo para el dolor de cabeza? Creo que olvidé traer y se me parte la cabeza – preguntó la de pupilas azules poniéndose lentamente de pie

- No tengo a mano, ahora si me disculpas... tengo cosas que hacer – informó la de cabello negro insinuándole que se vistiera y se fuera

- Ya que estoy aquí podemos desayunar juntas – propuso la rubia poniéndose la ropa interior

- ¿Qué no tienes nada que hacer? Que yo sepa sigues al frente de la gobernación de Ciudad Metallus, ¿no? – recordó su amiga con el ceño fruncido en tono de reproche

- Desde luego que sí, me iba a ir después de desayunar – aseguró Mina vistiéndose también – Oye, anoche mientras hacíamos travesuras te propuse algo, ¿no lo recuerdas? – añadió hablando con picardía y malicia

- ¿Otra de tus ideas locas? De ninguna mane... - habló Rei interrumpiéndose y acordándose de algo – Pensándolo bien, hagámoslo – accedió sonriendo y frunciendo el ceño acabando de vestirse

- ¿De verdad? ¿Así tan fácil? ¿Qué estás tramando? – preguntó Minako con cierta desconfianza – Mira que lo dije de verdad, ¿Podrán prestarse realmente? – añadió de igual forma

- ¡Desde luego que no! – exclamó ella dirigiéndose a la cocina

- ¿Y entonces? No entiendo... - quiso saber la regente del oeste sin entender

- Simple... hay que embriagarse como anoche y con lo que le gusta el trago a ese rufián desvergonzado, hacerlo caer no será tan complicado – dijo Rei despreocupadamente

- Bueno, la verdad no comprendo nada ¿Qué le vas a decir? – opinó Mina pensativa

- Tú solo ten listo un par de botellitas y yo te aviso cuándo hacerlo – fue la respuesta de la senshi del fuego en tono decidido

De modo que continuaron hablando y desayunaron juntas, luego de eso Mina regresó a Ciudad Oeste y Rei agarró su celular a fin de comunicarse con Nukureo Kaseigan para anoticiarse sobre la búsqueda de su hija y de cualquier novedad que aconteciera.

Entonces se comunicó con Jedite inmediatamente el cual comenzó a informarle.

- Buenos días, señora, la búsqueda de su hija no ha arrojado ningún resultado positivo.

- Ya veo, que contrariedad ¿Y que más me tienes? – indagó frustrada la gobernadora

- Tal parece que anoche hubo un intento de secuestro y agresión contra una camarera en una vieja casa en los límites de Ciudad Sur con Ciudad Este el jefe Jones consiguió atrapar a uno de los implicados como así también confiscar un par de autos de ellos, tal parece que eran varios – siguió reportándole el rubio Tercer Puesto

- ¿Cómo? ¿Y eso? Que extraño... ¿Secuestro? Es el primero desde la fundación del actual 2do milenio de plata, ¿Sabes qué averiguó Ralf? ¿Quién es la camarera en cuestión? – quiso saber más del asunto la gobernadora, sumamente extrañada

- Así es, lady Mars, por lo que me reportaron, el detenido afirmó trabajar para Chad Kumada y la camarera trabaja en el restaurante Magnolia, su nombre es una tal Mirajane Strauss y ahora mismo se encuentra internada en un hospital de aquí de Ciudad Ígnea – informó calmadamente la voz de Jedite

- ¡Vaya! ¡Mira lo que son las cosas! ¿Conque Mirajane Strauss, eh? – exclamó la de cabello ébano con soberbia y altivez

- ¿La conoce? – indagó con curiosidad el rubio

- Sé de ella lo suficiente como para saber que es una sucia desvergonzada – se limitó a decir Rei con fastidio

- El detenido está en prisión colocado por Jones a la espera de que decidamos qué hacer ¿Qué hará usted? ¿Vendrá aquí? – habló la voz de Jedite

- Desde luego que quiero que liberen al detenido, no voy a consentir a ningún falso implicado en un secuestrito fake pagado por el forajido de Ralf en combinación con aquella mocita atorranta para perjudicar a Chad e impedir su boda con Risa – decidió la regente del sur – Yo me quedaré en Hikawa, no voy a dejar el templo solo en ausencia de Risa ¿Ya encontraste a Leona Heidern? – quiso saber acto seguido

- Aun no, Whip ya salió de la enfermería aunque no está totalmente recuperada y tiene la tarea de mantenerla vigilada, ¿Desea leer el testimonio del detenido de anoche?.

- No me interesa pero puedes mandármelo en cuanto puedas para verlo, en cuanto a la soldado Heidern, tengo una tarea para ella cuando Risa intente asistir al recital de los Three Lights aquí y una última cosa, ¿En qué hospital se encuentra internada Mirajane Strauss?

- Es uno que trabaja con el gremio gastronómico que la cubre debido a su ocupación, ahora mismo le paso la dirección por mensaje – respondió la voz del Tercer Puesto

Ciudad Lignum, Distrito Este, Palacio Edén.

Carlos había mandado a borrar una cantidad de datos vía mensaje de texto a fin de tener una prueba de la coartada ante Ami para volver a Ciudad Norte antes de que las cosas se complicaran más, por si ella preguntaba de más y quería averiguar, con eso alejaba sospechas de él mismo debido a lo ocurrido en el Edificio Dorado, la gobernación de Ciudad Metallus.

Hoy, el hermano menor de Setsuna había salido temprano de su casa y por pedido de Erza se dirigió al Palacio Edén a verla, ahora mismo se encontraba en una oficina de la gobernación en compañía de la recién mencionada y del jefe Still a fin de comunicarles lo que haría con los datos obtenidos.

Clark y Erza lo observaban expectantes pasearse con el teléfono celular en una mano, de un lado al otro.

- ¿Y bien, Meiou? ¿Nos explicará lo que hará? – preguntó el ex teniente de lentes negros con seriedad

- ¡Ya lo tengo! Disculpen es que estaba chequeando un último detalle, verán... los datos que obtuvimos sobre la señorita Aino serán publicados en los medios de comunicación, radio, televisión y periódicos, para ello necesito encontrar a un periodista que se ocupe de publicar y difundir la noticia – explicó el chico con una pequeña sonrisa – Y ya tengo al indicado, mejor dicho a la indicada – agregó acomodándose los lentes

- ¿Entonces no los llevará a publicarlos usted mismo mediante algún truco raro? – preguntó pensativa la de cabello rojo

- No, para verme libre a mí mismo del escándalo y ahorrarme explicaciones es mucho mejor que otra persona las difunda – aseguró confiadamente el experto en física

- Me parece lógico debido a su hermana mayor, ¿De quién se trata? – indagó el rubio musculoso de igual forma sonriendo mientras se cruzaba de brazos

- Se trata de nadie más ni de nadie menos que de Nanami Kuribayashi, periodista y reportera de uno de los periódicos más importantes de Tokio de Cristal, ella será la encargada de publicar la información – reveló el de ojos rojizos levantando un dedo

- ¿¡Nanami Kuribayashi!? Le aconsejo que tenga cuidado, Meiou, no quiero que ella se vea perjudicada por las consecuencias de publicar esos datos íntimos de Minako Aino – avisó Clark en tono serio

- ¿La conoce, jefe Still? – quiso saber Erza sintiendo curiosidad al ver la reacción de su superior, refiriéndose a la periodista

- Si, es la hermana menor de una antigua compañera mía en las Fuerzas de Autodefensa nacionales, fue novia de Ralf antes de que conociera a Rei – dijo el imponente hombre de armadura verde

- Por lo visto el señor Jones no ha tenido suerte con las mujeres – comentó Charly al oír aquello

- La verdad es que no, esa relación se terminó porque ella falleció, ellos llevaban bien su noviazgo más allá de algunas peleas que tuviesen puesto que los dos eran de carácter violento o sea si bien peleaban en algunas ocasiones, al rato estaban a los arrumacos, es una historia larga que ahora no viene al caso contar... yo he ido con él a la casa de ella y conocí a su hermana Nanami ¿Comprende ahora el porqué de mi advertencia? Es una buena persona y no merece verse envuelta en líos por culpa nuestra – recordó Clark a modo de explicación mientras fruncía el ceño

- Cierto, no recordaba que la ex novia de Ralf tuviese una hermana – dijo la de ojos marrones recordando finalmente

- Descuiden señores, el crédito por encontrar la información y difundirla será todo de ella y me aseguraré de que no tenga problemas más allá de alguna multa económica – aclaró Carlos sonriéndoles

- ¿No puede ser otro reportero? – preguntó la militar de pelo rojo

- Puedo buscar a otro pero la elegí a ella porque es muy buena y confiable en su profesión, necesito a alguien que publique todo de forma objetiva y creo que Kuribayashi reúne las características que busco – justificó el científico su elección

- Ahora, respecto a la misión en Ciudad Ígnea, ¿Será parecida a la de Ciudad Oeste? – quiso saber Erza pensando intrigada

- Parecida aunque la diferencia estará en que necesitaremos hablar con lady Mars primero con cualquier excusa, yo la iré a ver con la idea de ofrecerle un mejor sistema de seguridad para el CtOS, Jones y Heidern se ocuparán de buscar y reunir otras pruebas que quebranten la ley y sirvan para incriminarla, al mismo tiempo que yo me infiltro ustedes dos se encargarán de entretenerla con cualquier excusa – expuso Charly el plan de acción – Una cosa, amigos, tengan en cuenta algo... las Outers Senshis también están investigando sobre lady Mars, yo mismo acompañé a Neptune y Uranus a hablar con Setsuna en una casa abandonada – añadió recordando dicho detalle

- Mmmmhhh algo me mencionó Ralf ayer cuando vino a verme en la tarde, me comentó que hablaron con él en el puerto y le dijeron que saben que Rei espera un embarque con objetos que van contra el Código que llegará en unos días al puerto de Tokyo de Crystal, ellas desean infiltrarse y sacar algunos de ellos como prueba – recordó Clark pensativo y serio tomándose la barbilla con una mano

- Mi sincera opinión es que ellas y ustedes deberían trabajar juntos, así las posibilidades de éxito son mayores – fue la franca respuesta de Charly

- Es buena idea aunque no sé, nosotros no dudaremos en recurrir a métodos violentos los cuales sabemos que van contra la ley y en cambio ellas son respetuosas del sagrado código y pueden reportarnos, ahí está la diferencia – señaló Erza con algo de desconfianza

- Es verdad, especialmente Plut y Neptune, aunque Uranus sí pueda prestarse a ayudarnos sin condiciones es más, Ralf me contó cómo luchó contra ella en el puerto, es una brava guerrera que practica artes marciales y no duda a la hora de entrar a la acción, en cambio las otras dos sí son más estructuradas – explicó el jefe de guardia de Ciudad Lignum en referencia a Haruka, Michiru y Setsuna

Carlos les dijo entonces lo que ellas hablaron en la casa abandonada de Ciudad Sur en su presencia, referente a Rei Hino.

- Créanme lo que les digo, van a tener que arreglar ese tema o Hino los descubrirá y habrán fracasado, las Outers Senshis y ustedes trabajando juntos es mucho mejor yo sugiero que hablen con ellas y se reúnan para comparar y combinar planes de acción – acabó insistiendo el joven científico con una sonrisa – De hecho yo hablé con Haruka Tenou por teléfono y ellas también necesitan de mí.

- ¿Y para qué lo quieren ellas a usted? – interrogó la ex capitán de los Marines algo asombrada

- Mis conocimientos y habilidades son bastos y complejos, cuando nos conozcamos mejor lo irán sabiendo, se van a sorprender de lo que puedo hacer – dijo el de cabello oscuro verdoso enigmáticamente – Ahora si me disculpan, necesito ir a ver a Kuribayashi a fin de seguir con el plan, cualquier cosa no dejen de llamarme – agregó caminando hacia la puerta

- Muy bien, demás está decir que debemos ser discretos y actuar con cautela, Erza recuerda... aquí no se habló nada, Mako no puede sospechar en lo absoluto – aseguró el de lentes negros dirigiéndose primero a los dos y luego a su subalterna

- Entendido, señor – respondió la aludida firmemente realizando el saludo militar

Carlos les sonrió y salió de la oficina rumbo a la salida, después de salir del Palacio Edén volvió a su auto y decidió qué hacer, ir a la casa o al trabajo de la persona que buscaba, habiéndose decidido por la segunda opción salió rumbo a Ciudad Ígnea.

Más o menos 1 hora le tomó llegar a la región sur y desde luego que en esta ocasión no realizó ningún truco raro para pasar el control, mintió diciendo que iba a visitar a su hermana. Una vez viéndose en las calles del distrito sur, en medio de las pagodas tradicionales que se alternaban con las casas y edificios modernos, chequeó nuevamente la dirección del Tokyo Crystal Shimbun, el diario japonés más leído por encima de Sankei Crystal Shimbun, ubicado en segundo lugar.

Le tomó unos 15 minutos más llegar hasta la sede del periódico debido al tráfico, la cual se trataba de un moderno edificio en forma rectangular, entonces sin pérdida de tiempo descendió e ingresó. Ante sus ojos estuvo una sala de tamaño mediando con decoración tradicional nipona, con cuadros que poseían dragones pintados como así también imágenes del monte Fuji, el pico más alto de Japón.

- Buenos días, ¿Será posible hablar con alguien aquí? Busco a una periodista en específico – saludó Charly amablemente llegando a la recepción

- Buenos días, ¿A quién está buscando? ¿Quién es usted? – preguntó el joven que atendía

- Oh disculpe, mi nombre es Carlos Meiou y ando buscando a la señorita Nanami Kuribayashi – respondió el experto en Física

- Ya veo, Meiou, ¿Por qué asunto?.

- Tengo un asunto que hablar con ella, me interesa que haga un reportaje sobre los adelantos que ha logrado Ciudad Aquae en tecnología y ciencia – mintió el chico puesto que no quería develar el verdadero motivo por el que la buscaba

- El tema es que ella está por salir, déjeme ver si aún está – contestó llevándose una mano a una oreja y hablando – Todavía no salió, piso 4 oficina 15 yendo por el pasillo al fondo se encuentran los ascensores – informó luego de consultar

El de cabello verdoso oscuro agradeció y hasta allí de dirigió, mientras suspiraba aliviado por haberla encontrado a tiempo tomó el elevador para llegar al 4to piso. Una vez llegado allí preguntó por la oficina 15 a uno de los que se encontraban presentes allí y hasta dicho lugar se dirigió una vez que le indicaron.

La voz de la periodista se escuchó luego de que el Físico llamó a la puerta.

- ¿Buenas? ¿Usted me estaba buscando? – preguntó Nanami sonriendo

- Desde luego, señorita Kuribayashi, la he elegido a usted por ser una gran periodista y reportera que sé que publica todo tal cual lo recibe... - explicó el hermano menor de Setsuna – Necesito discutir un asunto con usted – agregó acto seguido

- ¿Si puede ser rápido? Ya me tengo que ir a hacer una nota – aseguró la muchacha sin perder la sonrisa

- Créame que valdrá la pena... ¿Sabe lo que tengo aquí? – dijo el de ojos rojizos sacando un cristal de debajo de su saco – Información exclusiva sobre la gobernadora de Ciudad Metallus, Minako Aino – añadió alargándoselo

- ¿De verdad? ¿Qué tipo de información? – preguntó la de cabello largo castaño, con intriga

- Se trata de todos los amoríos prohibidos que tuvo la señorita Aino, toda su vida amorosa se encuentra allí y la he buscado a usted para que la mire, analice y publique – le dijo Charly con una amplia sonrisa

- Pero... ¿Es esta información de carácter privado? ¿Cómo la obtuvo? Puedo tener problemas – comentó Nanami dudando mientras observaba el cristal

- No se preocupe por eso yo soy amigo de Minako Aino y me consta, es información confiable, allí encontrará muchos nombres de hombres de buena posición que estaban en pareja – reveló el de cabello verdoso – Soy amigo también del jefe de guardia de Ciudad Ígnea, Ralf Jones, él puede responder también aparte de mí, por la información – agregó con total confianza

- ¿Así que conoce a Ralf? ¿Él sabe que usted está aquí? – le sonrió la reportera

- Desde luego, quédese tranquila que la información que le doy no le traerá problemas ah, una cosa más, el descubrimiento y la recopilación de los datos es todo mérito suyo – fue la respuesta del científico aclarando lo último, puesto que no deseaba que por ahí su nombre apareciera en ningún lado

- No se preocupe que nunca revelo la identidad del informante en casos así, señor... ¿Cómo se llama usted? – indagó la joven el nombre del chico

- Carlos Meiou, soy un científico y experto en Física, sé todo en cuanto a teorías y especulación cuántica – se presentó el chico cortésmente

- Guau, bueno... si usted es amigo de Ralf y asegura que va a estar todo bien... - consideró Nanami pensativa y alegremente

- Si lo desea, podemos hablar del contenido mientras le invito un café o algo de comer, cualquier cosa además le ofrezco una buena suma de dinero por si todavía tiene alguna duda – ofreció el hermano menor de Setsuna - ¿Le han dicho que tiene usted unos bellos ojos? – preguntó a modo de halago

- Errr... bueno, gracias, ahora mismo me tengo que ir a hacer una nota, el móvil me espera, pero podemos quedar para más tarde si tiene tiempo – accedió ella sonrojada con timidez y nervosismo

- Me parece perfecto, le voy a pasar mi teléfono y acudiré enseguida – respondió simpáticamente el joven científico – Perfecto, todo va bien, ahora lo siguiente es esperar que la información esté publicada en el diario – pensó riendo para sus adentros

Mientras tanto, afuera del edificio una muchacha se encontraba de pie mirando seriamente con el ceño fruncido hacia el interior, se trataba de la misma mujer soldado que lo había sorprendido y acusado en el Edificio Dorado, lo había estado siguiendo desde el día anterior que saliera de la gobernación de Ciudad Oeste en compañía de Ami y Erza.

Sin quererlo, el chico la había conducido hasta su trabajo, su casa y en el día presente hasta el Palacio Edén y el periódico Tokyo Crystal Shimbun.

- Me pregunto qué se traerá ese atorrante, el tal Carlos... pero seré su sombra hasta corroborar en qué anda ese granuja y es más, tengo una idea para cuando vuelva a su trabajo, se lo contaré a lady Mercury... no te me vas a escapar – pensó ella sonriendo con el ceño fruncido

Por otro lado...

Los hombres disparaban desesperados sus armas pero la sombra se movía con rapidez y una agilidad asombrosa al mismo tiempo que daba certeros golpes en forma de zarpazos y los iba masacrando a uno tras otro.

El miedo, el desconcierto y la desesperación se respiraban en el aire en la base vietnamita, el experimento que había sido pensado para ser el guerrero más fuerte, ágil y despiadado se había salido de control y ahora no sabían cómo pararlo.

Uno de los que se encontraban en la base, quien poseía claros rasgos japoneses, fue quien dio el alerta la cual sonaba en todo el lugar, alerta mientras empuñaba una pistola en una mano gritaba órdenes en vietnamita a un grupo de hombres vestidos con ropa militar, pero horrorizado contempló como aquella sombra cual animal salvaje trotaba hacia ellos en cuatro patas en el ínterin que daba saltos con los cuales esquivaba la metralla.

Unos segundos después aquellos dos ojos blancos y vacíos se fijaban en él al mismo tiempo que con salvajes golpes mataba a los hombres.

Aquella sombra no se trataba de un monstruo ni de un mutante ni nada por el estilo, era humana... más específicamente una joven chica que gritaba con una voz cavernosa como si estuviera poseída, una sonrisa sádica, el cuerpo y la cara llenos de sangre que no era la suya.

Aya despertó de golpe con un leve grito y un par de lágrimas asomándole por los ojos, sobresaltada y con temor... había tenido otra vez la misma pesadilla y de nuevo se despertaba justo en el momento en que podía distinguir claramente el rostro de la psicópata del sueño.

- Uffff... No de nuevo, ¿Por qué esa maldita porquería insiste en volver? ¿Qué pasó ese día y cómo salí de allí? No puedo recordarlo por más que me esfuerzo – murmuró la joven frotándose el rostro con las palmas de las manos

Así como estaba, con los voluptuosos senos al aire y vestida tan solo con una bombacha negra se levantó lentamente del colchón en el que había dormido, se dirigió al baño mientras bostezaba y se rascaba la cabeza.

No se encontraba en la casa de su tía Nanami, después de haberla ayudado a escapar, Aya se había ofrecido a cuidar las heridas de Leona y si bien en un primer momento esta se negó, acabó accediendo e invitándola a su casa en donde pasó la noche cosa que nunca hacía puesto que era una persona reservada, pero teniendo en cuenta que ya sabía de quien se trataba, hizo una excepción.

La joven salió de la habitación con una playera manga corta blanca acompañando la bombacha y encontró a la soldado de cabello azul acabando de hablar por teléfono, oyéndola mencionar a su padre biológico.

- ¿Estabas hablando con Ralf? ¿En dónde anda ahora? – preguntó la chica

- En la gobernación, en un rato salía para el hospital... alguien cercano suyo tuvo un accidente, me llama la atención que lo llames por el nombre siendo él tu padre – respondió la militar con frialdad

- Él no me ha criado, a medida que nos vayamos conociendo ya veré si se lo gana o no ah oye, necesito revisar tus vendajes – señaló Aya acercándose y prestando atención a las compresas en los brazos y piernas de la dueña de casa

- De acuerdo, aunque estoy bien... - aseguró seriamente Leona, quien iba vestida con un short corto color verde musgo y una playera roja sin mangas

- Impresionante todo ese equipo tecnológico y armas que tienes en tu cuarto, imagino que están descargadas – dijo la castaña de cabello corto complacida en referencia a los objetos que se encontraban en el cuarto de Leona, encima de los muebles y colgados en las paredes

- Oye Kuribayashi, acepté que vinieras y te quedaras en mi casa por hoy pero no te acostumbres, ¿entendido? Si es que no desayunaste puedes hacerlo y después irte sin pérdida de tiempo – dijo Leona señalando hacia la cocina y hablando con indiferencia

- De acuerdo... pero quiero saber en qué andan Ralf y tú, hablabas recién de un embarque con objetos clandestinos y, ¿sabes qué? Deseo ayudar – dijo la de ojos marrones con decisión y cruzándose de brazos

Leona no le contestó y se quedó observándola impasiblemente.

*Palacio de Justicia

Que tal mis amigos/as, después de desvelarme algunas noches logro acabar este capítulo el cual se hizo largo con 31 paginas, espero que sepan disculpar.

Ya todo se va acomodando para el recital de los Three Lights en el cual pueden pasar cosas, no me pregunten nada sobre qué sucederá porque no spoilearé XD.

Sin más que decir los dejo con esta entrega y me despido hasta la próxima. Hasta la vista!