Kakashi observaba con dolor cómo los últimos pétalos de cerezo caían de sus labios, manchados por la sangre que brotaba esporádicamente de su garganta. Cada uno de esos delicados pétalos era un recordatorio del inmenso amor que sentía por Sakura, un amor que lo estaba consumiendo lentamente.
Había pasado incontables noches en vela, reflexionando sobre su dolorosa situación y enfrentando la cruda realidad que se cernía sobre él. Sakura, su alma gemela, estaba finalmente en una relación con Sasuke, algo que ella siempre había anhelado. Y por mucho que le desgarrara el corazón, Kakashi sabía que no podía interferir en eso.
Se había enamorado profundamente de Sakura, pero ¿cómo podía obligarla a estar con él, simplemente por la conexión predestinada de almas gemelas? Eso iría en contra de todo en lo que él creía. Sakura merecía ser feliz, pero no de manera impuesta porque el destino lo proclamaba.
Amaba a otra persona, y no era él.
Sin estar a su lado, ella ya era feliz.
Con un profundo suspiro, Kakashi se sentó en la cama, sintiendo cómo el dolor en su pecho se intensificaba aún más. Había tomado la decisión más difícil de su vida, pero sabía que era la correcta. Extirpar los sentimientos que lo unían a Sakura sería un sacrificio enorme, pero si con eso lograba preservar la felicidad de ella, entonces lo haría sin dudarlo.
Kakashi sabía que, al renunciar a esa conexión de almas gemelas, estaría dejando atrás una parte esencial de sí mismo. Esa unión se desvanecería, dejándolo vacío y solo. Pero si eso significaba que Sakura pudiera amar libremente a Sasuke, entonces lo aceptaría, por doloroso que fuera.
A medida que los días pasaban, Kakashi se preparaba mentalmente para ese inevitable final. Atesoraba cada momento junto a Sakura, cada gesto, cada mirada, cada risa, pues sabía que una vez que su sacrificio se completara, nada de eso volvería a ser suyo.
Observaba, impotente, cómo Sakura eran tan feliz con Sasuke, ajena al enorme dolor que Kakashi soportaba. Pero, a pesar del sufrimiento que lo consumía, Kakashi no pudo evitar sonreír con sinceridad. Porque mientras Sakura fuera feliz, él también lo sería, aunque eso significara renunciar a ella y a la posibilidad de ser su alma gemela.
Su intención nunca fue enamorarse, pero ahora se aferraba a la certeza de que había elegido el camino correcto, el que preservaría su felicidad. Tal vez, en otras circunstancias, con su último aliento le habría confesado su amor, pero, estaba eligiendo respirar en vez de amar.
...
Tsunade no dejo que esa fuera su elección, impidió que se realice la cirugía y le exigió que eligiera el amor.
No podía, y no pudo.
Paso días sin siquiera intentarlo. Las flores continuaban creciendo en su interior, cada vez más numerosas y asfixiantes, recordándole constantemente el inmenso amor que sentía por Sakura. Los espasmos se intensificaban, obligándolo a toser y escupir pétalos de cerezo manchados a veces con sangre. El dolor en su pecho era insoportable, un recordatorio vívido de que su amor por Sakura no era correspondido.
Así que, con el corazón roto, Kakashi se resignó a sufrir en silencio, aceptando que su destino era dejar de amar o morir en el intento. Su amor por Sakura era tan fuerte que, incluso en su muerte, sería el único que quedaría.
No obstante, pasados unos días, Kakashi se dio cuenta de que Tsunade no lo dejaría ir tan fácilmente. La Hokage lo estaba vigilando de cerca, sabiendo que no había habido ningún contacto de Kakashi con alguna "alma gemela" durante varios días.
La muerte ya no parecía una opción viable, pues Tsunade no iba a permitir que se rindiera de esa manera. Pero la tortura emocional que estaba soportando tampoco parecía tener fin, al no concederle la opción de arrancarse estos sentimientos de raíz.
Entonces, cuando esa mañana Kakashi abrió la puerta que alguien golpeaba insistentemente, se encontró frente a frente con la causa de sus sufrimientos y de su amor: Sakura Haruno, quien había sido asignada por Tsunade como su médica personal.
Kakashi sintió cómo el corazón le daba un vuelco al ver a Sakura parada allí, lista para comenzar a atenderlo. La sola presencia de ella, tan cerca de él, hizo que las flores en su interior se agitaran con violencia, amenazando con brotar en cualquier momento.
Intentó mantener la calma, pero cada respiración le dolía, cada latido de su corazón era una agonía. Tener a Sakura tan cerca, y saber que no lo correspondia, se sintió como una tortura aún más cruel que la muerte.
Estaba viendo de que forma iba a dividir los capítulos y mis actualizaciones. Al final van a hacer cortos (no tanto pero podrían haber sido el doble de largos) y actualízare cuando lo dicte mí corazón ?)
Siento que no me organizo bien para escribir capítulos más largos aunque me hubiera gustado hacerlo. Fue una excepcion "Perdido en ti" ya que al ser en un inicio un One-shot que luego de extendió, quise mantener la misma cantidad de palabras para todos los capítulos.
Estos serán cortos. Pero llenos de sentimientos :)
Adrit126 hola! Yo también espero lo mismo jaja
Gracias por comentar y leer!
arali2425: Comparto el sentimiento, diria que está sería mí última historia de kakasaku, pero quien sabe lo que deparara el futuro. ❤️
Mizuki-nya: Gracias, igualmente! Al final terminé publicando ahora el capítulo jajaja
Aunque el otro no sé cuándo, puede ser este año o no.
Gracias por lo favs, follows y reviews
Nos leemos pronto! Y les deseo felices fiestas a todos por las dudas de que no nos leemos en esos días! Y que tengan un feliz año, también por las dudas jojojo *riendo con estilo navideño*
