Capítulo 31: unidos por el destino

Toshiki: ¡¡¡Momoko!!! ¡¡¡¡¡Momoko!!!!!- fue corriendo hasta donde estaba Momoko, que se cogía la pierna con fuerza.

Jeanne: ¡¡¡Momoko!!!- intentó ir, pero I·o·n la retuvo.

I·o·n: ¡si tú vas ahora, no habrá más posibilidades de ganar! ¡deja que se ocupe Toshiki!

Jeanne: ¿¿no lo entiendes?? ¡¡es mi mejor amiga, no la puedo dejar ahí como si nada, mientras veo como se desangra!! ¡¡¡Momoko!!!- pero I·o·n no la soltaba.

Momoko:-Toshiki llegó corriendo a su lado- Toshiki...

Toshiki: ¡¡¡Momoko!!! ¡¡no temas, enseguida te ayudo!!- le extrajo la bala de la pierna, pero no conseguía detener la sangre- ¡¡Momoko, qué hago!! ¡¡esto no para!!

Momoko: no te preocupes... vete... yo estaré bien... vete antes que te haga algo...

Toshiki: ¿y dejarte aquí? ¿estás loca? ¡¡nunca!!

Momoko:- se sentó como pudo y miró a Toshiki, mientras ponía, en vano, la mano encima de la herida, por si conseguía algo- ¡¡vete!! ¿no ves que a mi ya me ha derribado? ¡no me ha...!- el dolor de la pierna era muy fuerte.

Toshiki: ¡yo no me voy sin ti!

Momoko: ¡te he dicho que te vayas! ¿no entiendes, no?

Toshiki: ¡y yo sin ti no me voy!

Mikado:- los estaba viendo discutir- buahh... pero mira que llegáis a armar jaleo... ¡largaos los dos!- disparó un tiro hacia ellos, pero Toshiki se puso de escudo a Momoko...

Toshiki: "aunque no soy el hombre que la vida te deparó, tú me escogiste... te enamoraste de mi, pese a querer con locura a tu hermano... yo no seré el hombre que te deparó el futuro, pero sé que..." Momoko, tu eras la mujer que la vida me tenía destinada...

Momoko: ¡¡¡noooo!!!- no pudo seguir chillando, porque Toshiki la besó- ¡¡¡Toshiki!!!

Toshiki: Celcia...- Momoko se quedó de piedra. Toshiki le acarició el rostro- mi Celcia...- la abrazó con fuerza. Por la espalda, una bala caía al suelo, dejándole a Toshiki un puntito rojo.

I.o.n: bufff... esta si que ha ido de poco... ya no sé si podré parar la próxima bala...

Toshiki: Celcia...- la miró fijamente, con una sonrisa de oreja a oreja.

Momoko: To... ¿Toki? ¿eres Toki?

Toshiki: cuanto te eché de menos...

Momoko: ¡¡¡Toki!!!- se le tiró encima, olvidando el dolor de la pierna- ¡¡Toki, Toki!!

Toshiki: Celcia... que me chafas...- Momoko se le salió de encima y Toshiki puso las manos sobre su herida- ¡!- al hacer fuerza, la herida dejó de sangrar.

Zen:- estaba mirándolos (como todos) desde el hombro de Jeanne- ¡¡este tío es un ángel puro!!

Jeanne: ¿¿qué?? ¿no es humano?

I.o.n: ¡como quieres que no sea humano si es hijo mío!

Zen: tiene poderes de un ángel de los más puros... la mayoría de ángeles solo se pueden pasar el poder por el pelo, pero los más fuertes, los ángeles puros supremos o incluso los arcángeles, esos poseen la habilidad de traspasar el poder a voluntad, con las manos, o cualquier otra parte del cuerpo...

Mikado: ¡fuera!- disparó de nuevo, pero ni tan siquiera la ayuda de I.o.n hizo falta. A la mitad de trayecto, una luz salió de su interior y lo partió- ¿pero qué pasa aquí?

Toshiki: has querido dañar a mi querida Celcia... ¡no te perdonaré nunca!- creó una barrera como la de Momoko, pero mucho más resistente y alrededor de Mikado, para que no se moviera.

Jeanne: ¡I.o.n! ¿me has dicho que tú podías hacer flotar cosas, no?

I.o.n: sí...

Jeanne: ¡necesito que me ayudes! ¡tal vez así podremos liberar a Mikado! ¡necesito que hagas flotar la cosa que para Mikado sea más importante en este momento!

I.o.n: ¿pero... como quieres que yo lo sepa?

Jeanne: ups... es verdad...

I.o.n:- parecía que le acabaran de encender la bombilla- ¡espera, ya sé como! ¡ahora vuelvo!- apretó a correr y se puso frente a Mikado.

Mikado: asquerosa... ¡te odio!

I.o.n: vuelve a ser tú... yo sé que puedes... I-O-N -el cristal que tenía en el cuello empezó a brillar sin parar- "por favor, muéstrame lo que más te importa en este momento...!"- de repente, un muñequito de peluche del héroe Psychoman salió disparado hacia arriba- ¡¡Jeanne, es ese!!

Demonio: ¡¡maldita Jeanne!! ¡¡malditos ángeles!!

Jeanne: en nombre de Dios, demonio nacido de la oscuridad... ¡¡¡queda aquí sellado!!!- con la espada atravesó el pequeño peluche, un regalo que I.o.n le había hecho para que sonriera...

I.o.n: Jeanne... no, Natsuki, gracias.- Jeanne se puso frente a ella y se quitó la cinta- ¡ah, no me equivocaba! ¡eres Natsuki!

Natsuki: ¿me guardaras el secreto?

I.o.n: ¿después de lo que has hecho? ¡tendría que ser una psicópata para no guardártelo!- Natsuki rió. Shinji también, y Maron, Miyako y Chiaki salieron de sus escondites. Pero había dos que no venían...

Momoko: ¡¡Toki!! ¡¡¡mi Toki, mi preciado Toki!!- lo volvió a mirar- ¡¡me parece imposible!!

Toshiki: Celcia...

Natsuki: ei, pero... ¿Toki no era tu hermano, Momoko?

Toshiki: ¡¡uo, Finn!! ¡¡pero cuanto tiempo!!

Momoko: sí, pero... ¡¡estoy segura de que no miente!! ¡¡es Toki, Finn!! ¡¡nuestro Toki!!

Shinji: ¿y entonces Natsuno?

Toshiki: debe ser...

Momoko: un farsante...

Momoko: ¡ya estoy en casa!- entró en casa sin hacer demasiado ruido.

Natsuno: ¿Momoko? ¿eres tú?- su hermano asomó la cabeza por las escaleras- no te esperaba tan tarde...

Momoko: ¿y papá y mamá?

Natsuno: no están... hubo problemas en el trabajo y se tuvieron que ir.

Momoko: ah... oye, ¿podemos hablar?- con un gesto afirmativo por parte de Natsuno, Momoko subió las escaleras hasta el cuarto de éste y se sentó en la cama.

Natsuno: ¿y bien? ¿de qué querías hablarme?

Momoko: ¿por qué... por qué nos engañaste?

Natsuno: ¿qué?

Momoko:- levantó la mirada, y por primera vez en mucho tiempo, Natsuno tuvo miedo de su hermana. Esa mirada llena de rabia se clavaba en sus ojos, destrozándole las pocas excusas que se le pudieran ocurrir por el momento- ¡No me mientas! ¡no me sigas mintiendo! ¿¡por qué nos engañaste!? ¿quién demonios eres? ¡contesta!

Natsuno: yo... no sé porqué lo hice...- de repente se sujetó fuertemente la cabeza, se fue hacia la ventana y saltó. Momoko se quedó perpleja, pero abajo ya le esperaba Natsuki y Shinji, que no lo dejarían escapar. Se vio acorralado, no tenía escapatoria...

Natsuki: ¿qué es lo que pretendes? ¿quién eres?- Momoko salió de la casa con Toshiki.

Natsuno: je... así que me habéis descubierto...- miró de reojo a Toshiki- quién lo iba a decir, hermanita, que encontrarías al verdadero Toki incluso pensando que era yo... al principio, mi amo me mandó para destruir a Jeanne, pero al descubrir que el poder de Jeanne se incrementaba al reencontrarse con viejos amigos, me mandó hacerme pasar por uno de ellos, vigilar tus pasos y informar... también le quise hacer la vida imposible a Momoko, para que así te odiara y os volvierais enemigas, Finn... no, Natsuki...

Natsuki: ¡eres detestable! ¿quién demonios eres tú?- Natsuno levantó la mirada y la fijó en los ojos de Natsuki, que al verlos se quedó paralizada, y empezó a recordar cosas...

Finn: Toki... ¿oyes algo?

Toki: no.

Finn:- se sonrojó- "qué debe ser este sentimiento? Mi corazón late muy deprisa..."

Finn: si un ángel conserva su poder espiritual, puede reencarnarse en humano algun día. Suele decirse que se reencarnan en alguien cercano a sus seres queridos... ¡así que seguro que vuelves a encontrarla!

Natsuki:- estaba pálida- ¡eres... tú eres Sagami!

Momoko:- se puso nerviosa de golpe- ¿qué? ¡es imposible!

Natsuno: no, Celcia, no lo es tanto... veo que no os habéis olvidado de mi...

Natsuki: ¿qué pretendes? ¿tú no habías sido poseído por un demonio?

Natsuno: para que veas, mala hierba nunca muere...

Toshiki: así que es eso...

Natsuno: y ahora, Natsuki... mis ordenes son llevarte conmigo frente a mi amo, cumplir con tu destino, y así todo terminará. ¿harás ese sacrificio, hermanita?- miraba a Natsuki con una sonrisa picarona en los labios, mientras esta se sorprendía de lo que estaba diciendo.

Natsuki: ¿qué me vaya... contigo? ¿cumplir con mi destino?

Natsuno: o eso... ¡o te mataré!- se abalanzó encima de Natsuki, empuñando una espada negra salida de la nada...

CONTINUARÁ...

NOTAS DE LA AUTORA: gomen nasaiiiiiiiiiiiiiiiiiii!!!!! Nu me dejo publicarlo antes... pero os juro q ahora si q publicare regularmente!!!!!! De veras q lo sientooooo!!!! :'(