Capítulo 58: el sueño que se hizo pedazos
"Hasta siempre..." todos oyeron claramente, en el interior de sus corazones, como estas últimas palabras de Natsuki se quedaban grabadas profundamente... Todos quedaron atónitos, fríos, sin saber qué decir. El reloj dejó de sonar, y ahora el único sonido que se escuchaba eran los sollozos apagados de Maron, que seguía en el suelo. Todo el resto era un silencio sepulcral. La primera en romperlo, sin embargo, fue la propia Maron.
Maron: maldita... escoria...- clavó fuertemente su puño contra el suelo, con tal fuerza que rompió la baldosa- ¡¿¡¿¡¿CÓMO TE HAS ATREVIDO, MALDITAAAAA! ¡¡¡¡DEVUÉLVEME A MI HIJA! ¡¡¡DEVUÉLVEME A FINN! ¡¡¡ELLA NO TIENE LA CULPA DE NADA! ¡¡¡¡CÓGEME A MÍ, MÁTAME SI QUIERES! Pero a ella no... ha sufrido demasiado... ¡¡¡¡¡MALDITA SEA!- todos se la quedaron mirando, sin saber qué decir.
Shinji: Maron...- puso una mano sobre el hombro de Maron, pero ésta lo apartó con furia, a la vez que se levantaba y se lanzaba hacia Shuichi.
Maron: tú sabes donde está... ¡¡tú sabes donde se esconde el alma de esa escoria! ¡¡¡LLÉVAME! ¡¡¡LLÉVAME JUNTO A NATSUKI!- su mirada demostraba una rabia sin precedentes, una mirada que hizo recular a Shuichi, el cual empezó a sudar.
Shuichi: yo... no puedo...
Maron:- lo estampó contra la pared- ¡¡no me vengas con gilipolleces! ¡¡no ha sido un pacto justo, y tú lo sabes! ¡¡tú estás conpinchado con ella, estoy segura!
Shinji:- no entendía- ¿con... ella?- Maron lanzó una mirada de odio hacia la cama. Itsuko seguía igual, sin despertar.
Momoko: ¡¡Itsuko! ¿por qué no despierta? ¿no dijo Natsuki que despertaría? ¿qué está pasando aquí?
Maron: ¡¡era una maldita trampa!- miró a Shuichi con rabia- y tú lo sabías... y no me dijiste nada de sus planes... ¡¡¡nada!- lo cogió por el cuello del jersey, y lo levantó, a la vez que lo zarandeaba con furia- ¡¡maldito demonio! ¡¡maldita escoria desterrada de los cielos! ¡devuélveme a mi ángel! ¡¡¡DEVUÉLVEMELO!
Chiaki:- se abalanzó sobre Maron, intentando detenerla- ¡cálmate, Maron! ¡¡no eres tú! ¡¡la culpa aquí solo la tiene el rey de los demonios! ¡¡ni Noin, ni nadie! ¡¡solo él!
Maron:- se rebelaba ante su marido, intentando deshacerse de él- ¡no, no! ¡¡él tiene también la culpa, él también! ¡¡él lo sabía! Y ella... ¡¡ella tiene la culpa de todo!- se abalanzó sobre el cuerpo de Itsuko- ¡¡tú, maldita! ¡¡devuélveme a mi hija! ¡¡todo es por tu culpa... todo! - todos se abalanzaron sobre ella, pero no pudieron impedir que Maron la cogiera por el cuello- ¡¡dime donde está mi hija! ¡¡¡DIME DONDE TE LA HAS LLEVADO!
Shinji: ¡¡Maron, contrólate!- de repente, Maron calló. De sus manos, una nube negra salió y envolvió todo el cuerpo de Itsuko, que desapareció al igual que Natsuki- ¡¡Itsuko! ¡¡no!- intentó sujetarla, pero fue demasiado tarde. Ya había desaparecido. La cama donde antes reposaba se hallaba completamente vacía.
Maron: no... no... ¡¡¡NOOOOOOO!- cayó al suelo, mientras gritaba de dolor- ¡¡¡¡¡FINN!
Momoko: ¿Itsuko ha...?
Maron: ¡¡¡¡¡MALDITA ESCORIA ESTÁS HECHA!- todos se pusieron alrededor de Maron, que, aunque lloraba de rabia, ya no intentaba atentar contra nadie. Todos excepto...
Shuichi:- estaba apoyado contra la pared en la que Maron le había empotrado, pero una pequeña mueca de satisfacción y tristeza cubría ahora su rostro- el tiempo ha empezado a correr... Itsuko. ¿a dónde habéis ido...?
Shinji: Natsuki...
Natsuki:- todo estaba oscuro- "¿dónde estoy? Que más dará... ahora todo ya, es igual... todo terminó... vuelvo a la soledad...
Voz:- se oía muy a lo lejos- ¡Finn! ¡¡Finn!
Natsuki: "¿quién eres? ¿por qué me llamas? No puedo verte..."
Voz:- cada vez se escuchaba más clara- ¡¡¡Finn! ¡¡Finn!- una sombra se iba diseñando entre la oscuridad, una forma humana, sobre ella...
Natsuki: esa voz... yo la he escuchado antes...
Voz: ven a mí... Finn Fishu.
Natsuki:- la figura se iba acentuando cada vez más, mientras empezaba a brillar la luz- esas palabras... me llevaron hasta ti... entonces... eres...
Voz: por fin has vuelto a mí, Finn... mi amada Finn...
Natsuki: entonces eres... ¿el rey de los demonios...?
Itsuko: ¡¡Natsuki!- Natsuki abrió los ojos. Frente a ella, y zarandeándola con fuerza, estaba Itsuko- ¡¡por fin despiertas!
Natsuki: ¿Itsuko? ¡¡Itsuko!- se lanzó sobre ella para abrazarla- ¡¡menos mal que estás bien! Tuve tanto miedo, tanto miedo a que no despertaras... ¡¡pero por fin estás bien!- de pronto, vio a su alrededor. Se encontraba en una cámara realmente grande, y tan solo estaban ellas dos- pero... ¿dónde estamos?- poco a poco, la memoria le fe viniendo de nuevo- es verdad, estábamos en el hospital, y estaban todos... y yo me despedí... pero...- cogió a Itsuko por los hombros, mientras se la quedaba mirando incrédula- ¿¿pero qué haces tú aquí? ¡¡deberías estar en el hospital! ¿por qué estás aquí, Itsuko?
Itsuko: Natsuki... yo...- no la dejó acabar. Se levantó y se puso a chillar a los cuatro vientos.
Natsuki: ¡¡esto no fue lo acordado! ¡¡ella no tiene nada que ver en todo esto! ¡¡devuélvela al hospital ahora mismo! ¡¡yo tengo que pagarte, no ella! ¡¡déjala ir en paz!
Itsuko: Natsuki, déjame explicarte...
Natsuki:- se agachó hasta estar a la altura de Itsuko, mientras le ponía una mano en el hombro- Itsuko, no te preocupes... debe haber un malentendido, enseguida podrás volver con todos... volver con Shinji...- bajó la cabeza- estar... a su lado por mí... ser feliz a su lado...
Itsuko:- la abrazó- no digas esas cosas... recuerda que te lo dije, no te dejaré sola, Natsuki, siempre me vas a tener a tu lado...
Natsuki: Itsuko, pero yo... tengo que pagar el precio... no tú... tú no tienes nada que ver en esto, no tienes porqué estar aquí, conmigo...- también la abrazó- te quiero mucho, y quiero que seas feliz... tienes que volver...
Itsuko: no Natsuki... tú y yo... siempre estaremos juntas... más allá de la muerte, del tiempo... siempre a mi lado... Finn.- Natsuki abrió los ojos. De repente, un miedo le entró en el cuerpo, un terrible horror a confirmar lo que se acababa de pasar por la mente...
Natsuki:- tenía los ojos abiertos como platos. No podía vocalizar sonido alguno, y apenas se atrevía a moverse- "no puede ser... posible... no, no puede... ser..."- muy lentamente, y mientras sus manos temblaban, Natsuki fue separando su cuerpo al de Itsuko, teniendo la cabeza agachada. Pero cuando la levantó, no fue a Itsuko a quien vio, sino a...- a... amo...
Rey de los demonios:- cogió las temblorosas manos de Natsuki, mientras ésta no podía dejar de mirar sus ojos, negros como la oscuridad más profunda... subió lentamente las manos de Natsuki hasta que rozaron su rostro- por fin... vuelves a mí... -una amplia sonrisa se dibujó en el rostro del rey, pero no una risa diabólica, sino más bien de suma felicidad, mientras una lágrima tocaba los finos dedos de Natsuki, que se deslizó hasta el suelo quedando inconsciente... pero ya no era el cuerpo de Natsuki lo que caía, sino el de un ángel caído de pelo verde llamado Finn Fishu...
Shinji:- estaba sentado en la sala de estar, con Momoko, Toshiki y Shuichi- me pregunto... qué es lo que ha pasado... no entiendo nada, Natsuki e Itsuko han...- calló en ese momento, pues Chiaki apareció en la sala- ¿cómo se encuentra?
Chiaki:- se sentó lentamente en una silla, mientras no dejaba de mirar al suelo- físicamente está bien, no tiene absolutamente nada... pero hemos tenido que inyectarle un sedante muy fuerte, puede que no despierte en días... no había otra forma de tranquilizarla, no dejaba de gritar... bueno, vosotros mismos lo habéis visto...
Momoko: Maron...- miró al suelo- que tan terrible puede ser este sentimiento de soledad, de pérdida... la ha llevado al borde de la locura... Natsuki ha... desaparecido delante de nuestros ojos... sin dejar rastro...
Shinji:- pegó un puñetazo a su propia pierna- ¿acaso no vamos a poder hacer nada por ayudarla? ¿nos tenemos que quedar aquí plantados sin más? Al menos Maron... luchaba... yo ni siquiera pude... entender qué quería decirme...- su voz sonaba cada vez más apagada, e iba agachando la cabeza cada vez más y más.
Chiaki: Maron llegó a extremos muy altos...- miró hacia la salida- mírala, parecía una loca, intentando estrangular a la pobre Itsuko... culpándola... nadie de nosotros tiene la culpa de lo que ha pasado.
Shuichi:- un tono cortante salió de su boca, mientras se estiraba por el cansancio- nadie puede parar las riendas del destino...
Momoko: ¿qué?
Shuichi:- se levantó- miradlo por este lado, ¿queréis? ¿por qué os pensáis que Natsuki no os había comentado nada de lo que iba a pasar? ¿por qué no os había dicho que el precio que tenía que pagar era ella? ¡pues precisamente, porque no quería veros así! ¡¡ella sabía perfectamente que no había otra opción! –de repente, su tranquila cara se vio contorsionada por la rabia- ¿debemos resignarnos, dices? ¡¡no nos estamos resignando! ¡¡al fin y al cabo, es ella la que ha pagado las consecuencias!- lanzó un jarrón al suelo, provocando un gran estrépito- es ella la que ha decidido su propio camino... nosotros no podemos cambiar eso.
Shinji:- se levantó, encarándose a Shuichi- ¿qué ella decidió su propio camino? ¿pero que sandeces sueltas tú ahora? ¿acaso ella decidió desaparecer, abandonarnos a todos? ¿acaso ese camino lo escogió ella?
Shuichi:- lo miró con gran rabia en los ojos- bajo la coacción, hasta el más bello de los ángeles puede acabar haciendo locuras...- bajo la cabeza- sino... mira a Maron...
Chiaki:- levantó el rostro- ¿bajo la coacción? ¿qué quieres decir?
Shuichi: pues exactamente eso. Natsuki estaba coaccionada al tomar esa decisión, por eso decidió ese camino y no otro.
Momoko: ¿pero con qué? ¿por qué decidió ese camino? ¿qué pasaba si no accedía a desaparecer?- rápidamente, la puerta se abrió, dando paso a una dama vestida con una túnica de hospital, arrastrando tras ella un par de tubos que llevaba incrustados en los brazos. Su voz era cortante.
Maron: dejad de decir sandeces. Desaparecer, desaparecer... ¿quién narices ha dicho que Natsuki ha desaparecido?- todos quedaron alucinados.
Chiaki: ¡¡¡¡MARON!- se levantó sobresaltado, y cogió rápidamente a su mujer, que en esos momentos caía al suelo, abatida- ¡¡dios! ¿pero como has podido levantarte en tus condiciones? ¡¡pero si el suero que te he inyectado debía mantenerte dormida mínimo diez horas!- Maron se apoyó en él para erguirse de nuevo.
Maron: gracias Chiaki, pero debo mantenerme en pie... no puedo dejarme vencer...
Chiaki: pero es imposible...- miró el brazo por donde le había inyectado el suero, y se sorprendió al verlo todo morado, inerte por la falta de sangre producida por un torniquete que se había hecho Maron. Por el diminuto agujero sometido, el suero iba saliendo lentamente...- ¡Maron, tu brazo!
Maron: no puedo dejar que me empotres en una cama durante diez horas, Chiaki... no hay tanto tiempo...- Chiaki la tumbó en el suelo, mientras el resto miraban despavoridos la escena.
Chiaki: está bien... pero no hagas más locuras... dios, no sé como voy a poderte recuperar este brazo...- le intentó deshacer el torniquete, pero Maron puso la mano, en señal de negación.
Toshiki:- se acercó a Maron- no te preocupes, yo me encargo de quitarte el suero... ¡!- puso las manos sobre el pequeño agujero por el que se le había inyectado, y acto seguido el suero salió disparado hacia fuera- ¿ves? Ya todo ha pasado...
Maron: gracias...- apartó la mano, dejando que Chiaki se ocupara del resto.
Shinji: Maron... ¿qué has querido decir antes? Natsuki ha desaparecido delante de nuestros ojos...
Maron: no.. aigh!- se quejaba del dolor del brazo, que al moverse se había quedado en una posición un tanto desconocida- ¡¡no ha desaparecido! ¡¡se la ha llevado! ese maldito bastardo... ¡¡engañó a Natsuki prometiéndole que si volvía a su lado devolvería a Itsuko a la vida! ¡¡todo fue una sucia trampa!
Momoko: ¿una... trampa? ¿eso quiere decir que, si Natsuki no hubiera accedido, Itsuko habría muerto?
Maron:- sonrió irónicamente- je... ilusa... ¡¡ilusos!- su rostro menguaba entre la ironía y el dolor, cuando clavó sus ojos en Shuichi- ¿por qué no se lo cuentas tú, Noin? ¡¿por qué no les dices la verdad!
Shuichi:- se echó hacia atrás al notar las miradas de todos- yo no... no sé qué quieres decir... con eso...- Maron le miró fríamente, atravesándole el cuerpo y el alma de una sola mirada, como si esa fuera la última cosa que pudiera ver en toda su vida, arrastrándolo hasta la verdad más oculta de su corazón.
Maron: ¿por qué no le dices la clase de trampa que le ha montado tu señor a todos ellos? O debería decir... ¿tu señora?- todos, incluido Chiaki, se quedaron sin habla, sin ser capaces de entender qué estaba intentando decir Maron.
Shinji: ¿pero q...?
Maron:- se levantó- ¡vamos, Noin! ¿por qué no se lo dices? ¡¿¡¿por qué no les dices la verdad, que tu puñetera novia, aquella maldita policía indefensa que no tenía nada que ver con esto es, en realidad, la maldita escoria que se ha llevado a mi hija! ¡¡responde Noin!
Momoko:- se había quedado helada- no... no puede ser...
Maron: ¡¡díselo! ¡¡diles quien es en verdad Itsuko! ¡¡la puñetera reencarnación de ese maldito ser despreciable que se llevó a Finn por delante una vez! ¡¡el rey de los demonios! ¡¡la abominación que lleva maldiciendo nuestras vidas desde que nació! ¡¡¡¡¡LA ÚNICA CULPABLE DE TODO ESTO!
El silencio que siguió fue sepulcral. Todos no daban crédito a lo acababan de escuchar. Shuichi cayó al suelo, clavado aún por la fría mirada de Maron, que aún seguía erguida mirándolo... en un lugar lejano, y ajena a todo esto, un pequeño ángel caído dormía plácidamente, soñando con los momentos que jamás volvería a tener...
Itsuko:- acariciaba la cabeza de Natsuki, mientras esta dormía plácidamente- ahora duerme, ten dulces sueños... pronto despertarás a la fría realidad.
"Será entonces, y solo a partir de entonces... cuando todo el amor hacia mí se convertirá en un odio irrefrenable contra la que fue tu amiga... contra la que seguirá siendo tu amiga hasta el momento en que despiertes de ese hermoso sueño..."
Fin capítulo 58