Capítulo 60: propuestas opuestas...
Natsuki se encontraba en una habitación amplísima. En ella, se encontraba todo lo necesario para la vida diaria: una cama, una puerta que llevaba a un baño, un espléndido sofá, una mesa... Sin embargo, esta habitación no tenía salida. Tan solo unos grandes ventanales daban con el exterior, a un balcón que miraba al inframundo. En un rincón, agazapada, Natsuki permanecía callada.
Natsuki: "¿por qué estoy aquí? ¿para qué me habrán traído?"- De la pared opuesta, una puerta apareció, y por ella entraron varios demonios acompañando a una figura oscura. Natsuki se levantó.
Demonio1: el señor de los infiernos ha venido personalmente a hablar con usted, señorita...- una mano le interrumpió. La figura oscura mostró su rostro, pero no hacía falta ese gesto para saber de quien se trataba. La adorable, la valiente, y la traidora Itsuko miraban fijamente a Natsuki.
Itsuko: podéis dejarnos a solas...
Demonio2: ¡¡pero señor!
Itsuko: ¡¡esperad afuera, os ordeno!- los demonios, aunque reacios, acataron la orden y salieron por la puerta. Antes de que pudiera pensar siquiera en salir por ella, Natsuki vio como la puerta se desvanecía, dejándola a solas con el monstruo que había descubierto era su amiga. Lentamente, ésta empezó a hablar- Espero que estés bien hospedada en esta habitación. Tiene de todo... y si, por algún motivo faltara de algo, no te estés de pedirlo en voz alta y te lo traerán...
Natsuki: lo único que quiero ahora mismo es una explicación.- toda ella temblaba, y sus ojos mostraban una rabia contenida hacia el ser que tenía delante. Sin embargo, no vacilaba.- ¿por qué? De momento, tan solo quiero eso.
Itsuko:- suspiró profundamente, y empezó a soltar lo que parecía un discurso anteriormente preparado- Creo que te lo dije, Natsuki, que te quería a ti... es el pacto que hicimos, ¿no? Devolví a Maron a la vida a cambio de ti...
Natsuki:- se abalanzó sobre ella y le pegó una bofetada- ¿por qué me mentiste? ¿por qué, durante todo este tiempo, estuviste a mi lado como Itsuko? ¿por qué me coaccionaste de esa manera? ¿por qué me has traído aquí? ¿por qué...- su voz se frenó, mientras su mano empezaba a sangrar, pera de la fuerza con que apretaban los dedos- no pudo seguir todo como hasta ahora?- Itsuko se lanzó sobre ella y la abrazó.
Itsuko:- se acercó a su oreja y le susurró- porque tú eres mía, Finn... sólo puedes ser mía- se apartó y la miró a los ojos- necesito que sólo seas mía.- Natsuki la miraba sin entender, mientras Itsuko se iba paseando arriba y abajo de la cámara- si estuve a tu lado hasta este momento fue para vigilarte, para protegerte... y para saber cómo podía conseguirte. Jamás quise ser algo importante para ti... más que lo que soy como lo que soy, como el rey de los demonios.- Bajo la cabeza- Pero tú... por mucho que te lo dije... no recordaste... no entendiste...- miró a Natsuki, con una mirada seria, penetrante- ¿No has abierto la puerta, verdad?
Natsuki: No... no la he abierto.
Itsuko:- se acercó a Natsuki, cogió su rostro con las manos y la miró afectuosamente- cuando abras esa puerta... lo entenderás- unió sus labios a los de Natsuki, que le pegó un empujón.
Natsuki: ¡¡No pienso abrirla! ¡no pienso abrir esa puerta! ¡¡¡NUNCA!
Itsuko:- Sonrió tristemente a Natsuki- entonces tan solo me queda ver cómo te consumes... al mismo tiempo que somos destruidos.- dicho esto, desapareció.
Natsuki: Itsuko... ¿qué quisiste decir con eso?
Maron:- estaba recostada sobre el hombro de Chiaki, sentados ambos en el sofá de casa. Frente a ella, Shinji, Momoko y Toshiki permanecían callados. En un instante, las puertas del balcón se abrieron, dando paso a un hombre de larga capa oscura.
Noin: ¿por fin se durmió?
Chiaki: sí... así está más calmada. ¿has conseguido algo?
Noin: sí... por desgracia, sí.
Maron: ¿por qué por desgracia?- sus ojos se abrieron de par en par, y se irguió. Miró a Chiaki- ¿en serio piensas que puedo dormir ahora? Tan solo cabeceaba...
Noin: en fin... las noticias que traigo no son buenas. Sé donde está Natsuki.
Shinji:- se levantó- ¿Dónde está? ¡¡vayamos a buscarla enseguida!
Noin: el problema es precisamente ése... está en los aposentos reales del inframundo, en una cámara de seguridad especial. Como lo diría... es una sala mágica, controlada por la mente. Todo lo que se quiere, aparece en esa sala, todo... pero sólo una mente controla esa sala.
Toshiki: la de Itsuko, ¿no?
Noin: exacto. El problema, es que esa sala es normal en todo excepto en una cosa... nunca, jamás, ha tenido puerta.
Shinji: ¿qué? ¿entonces como se entra?
Maron:- estaba muy, muy seria- a voluntad de Itsuko... ¿no hay otra forma de entrar?
Noin: no... la única forma de comunicarse si no es a través de la puerta es por el balcón, pero... no se puede entrar o salir por allí. Tan solo podríamos hablar con Natsuki. Si tan solo pudiéramos sacarla de esa sala... el resto sería bastante más fácil.
Momoko: ¿para qué inventaron una sala así?
Chiaki: supongo que para que no molestarán al rey de los demonios... además, es una celda perfecta. Ahí no puede interferir nada...
Noin: bueno, de hecho, en principio fue diseñada para encerrar a Eva hace años... hasta que se descubrió que allí no se podía más que encerrar a gente, los poderes no se perdían ni nada así... así que, de hecho, tan solo es una celda sin cerradura.
Momoko: pero si no hay cerradura, no podemos entrar...
Maron: pero sí salir- todos se la quedaron mirando- Tan solo debemos convencer a Natsuki para que salga en el momento oportuno... y rescatarla. Noin... ni yo ni ninguno de los que estamos en esta sala puede entrar sin ser notado en el inframundo... tan solo tú. Quiero que le des un mensaje a Natsuki de mi parte... Dile que escape, que escape de esa habitación, sea como sea, seguro que ella puede encontrar la manera. Día y hora, nosotros haremos el resto.
Noin: así haré...- y desapareció.
Shinji: ¿crees que será tan fácil, Maron?
Maron:- miró al oscuro cielo nocturno- por supuesto que no, Shinji... pero quiero confiar en esta posibilidad. Porque si no resulta, si no funciona... me veré obligada a ser egoísta. Y entonces saldremos perdiendo todos...
Natsuki: ¡necesito comer!- frente a ella apareció una larga mesa llena de alimentos- ¡uah! Realmente esta sala está bien preparada...- cogió una manzana y le pegó un mordisco- ¡¡y la comida está muy rica! Pero...- miró la larga mesa- comer sola... nunca me ha gustado...- tiró la manzana al suelo, mientras ella le seguía. Al abrir los ojos, volvió a esa oscura sala sin nada, tan solo provista de una puerta, una gran e inmensa puerta que deseaba ser abierta... Natsuki la miró firmemente, decidida a no abrirla...
Voz:- provenía de la puerta- Así... jamás volverá a estar solo...
Natsuki:- se acercó a la puerta- ¿quién es? ¿quién habla?
Voz: Natsuki... Natsuki... sálvame... déjame salir... de aquí dentro...
Natsuki:- cayó al suelo- ¿quién eres? ¿de qué te tengo que salvar? Yo... no puedo abrir esta puerta...
Noin: ¡¡¡Natsuki!- Natsuki despertó. En el balcón, la inconfundible capa de Noin ondeaba al viento, mientras el golpeaba el cristal.
Natsuki: ¡Noin! ¿qué haces aquí?- intentó abrir el ventanal, pero fue en vano, ya que no tenía pomo.
Noin:- sonrió- he venido a buscarte.- Natsuki lo miró con lágrimas en los ojos.
Natsuki: pensé... que ya no había marcha atrás, que ya no había salida...
Noin: yo ayudé a Itsuko... porque entiendo sus razones. Sin embargo, tampoco puedo negarme a Maron... y temo por tu vida. Así que... necesito que me ayudes.
Natsuki: ¿mi madre?
Noin: sí... estaba al corriente de todo, y está decidida a salvarte a toda costa. Ahora escúchame... si me atrapan, será el fin de todo. Necesito que salgas de esta sala. La puerta tan solo puede abrirla Itsuko... necesito que me digas una hora en que te veas segura de salir. Te estaré esperando fuera, y juntos nos iremos- Natsuki se entristeció.
Natsuki: ¿y qué pasará con Itsuko? ¿acaso no intentará conseguirme de nuevo?
Noin: lucharemos. Esta vez, todos juntos, y te protegeremos...- Natsuki le miró mientras temblaba, de pies a cabeza.
Natsuki: no puedo... Noin, no puedo... volver a ver a mi madre así, tan desesperada... no puedo volver a poneros en peligro, y menos si puedo evitarlo... debe haber otra manera... no puedo consentir que el resto del mundo llore por mi felicidad. Lo siento...- cayó al suelo, sollozando- lo siento... ¡¡pero no puedo ser tan egoísta!- en su mente vio de nuevo la puerta. Se levantó- Mira... habrá esperanza hasta que abra la puerta... creo que aguantaré. Hasta entonces... debemos descubrir qué quiere exactamente de mí Itsuko... ella me lo dijo... me dijo que seríamos destruidas si no abría esa puerta. Si logro darle lo que quiere... podré volver, ¿no?
Noin: pero ella te quiere a ti, en todo su ser...
Natsuki: escúchame, Noin. Tú lo sabes como yo... tiene que haber alguna razón...- miró fijamente a Noin- debe haber algún modo de que ella no me persiga si me marcho. Encontrarlo será vuestra forma de salvarme. ¿De acuerdo? Por favor...
Noin:- suspiró- tan cabeza hueca como siempre...- se sonrojó- no sé por qué sigo enamorado de vosotras. En fin... pero quiero que me prometas una cosa.
Natsuki: ¿sí?
Noin: prométeme que, si la próxima vez que venga has estado o estás en peligro, más del que estás ahora, te vendrás conmigo, aunque sea egoísta por tu parte, lo abandonarás y escaparás. ¿Prometido?
Natsuki:- bajó la cabeza- de acuerdo... de acuerdo.- al alzar la cabeza, vio la figura de Noin desaparecer en el firmamento...- "¿dónde está el pomo de esta puerta?"- frente a ella, apareció el pomo, con el que abrió la ventana y salió al balcón- salir de aquí... sería tan simple... pero ella sabe como soy...- apoyó sus brazos en la barandilla, mientras se dejaba caer atrás- ¿es por eso que me dejas salir? ¿porqué sabes que no me escaparé? Itsuko... ¿qué quieres de mí?
Demonio: podéis pasar- Abrió un puerta. A su lado, Izumi y Meroko avanzaban lentamente, ambos serios, sin dirigirse la palabra. Frente a ellos, una figura encapuchada esperaba sentada de espaldas a ellos, mirando hacia un balcón donde una bella silueta se postraba abatida.
Izumi: ¡oh, gran señora de los infiernos! ¿ha sido usted quién ha mandado llamarnos?
Itsuko:- se giró, mirando fijamente a Meroko- así es. Tenía que hacerles... una consulta.- Izumi, al ver que Meroko se estaba sonrojando por la inquietante mirada de Itsuko, se puso delante de ella, con lo que Itsuko apartó la mirada.
Izumi: ¿y bien, qué consulta es esa?
Itsuko:- ahora miraba amenazadoramente a Izumi- se trata con algo relacionado con una puerta... una que aparece en los sueños de la reina- en ese momento, Meroko dejó ir un chillido de culpabilidad, cosa que hizo que Itsuko se levantara furiosa, amenazándola con el dedo- ¡¡así que fuiste tú! ¡¡DIME QUÉ LE DIJISTE! ¡¿QUÉ LE DIJISTE ACERCA DE LA PUERTA! ¡¡¡¡RESPONDE, MALDITA IRRESPONSABLE!- la ira que desprendían sus palabras no tenía ni pizca de compasión, y Meroko, que había mantenido los ojos como platos, cayó desmoralizada al suelo, llorando del miedo y aferrándose a la pierna de Izumi. Éste, por su parte, se había quedado sin habla.
Meroko: snifff, sniff... yo, solo... yo solo...- pero no podía pronunciar nada más, ya que su miedo no le permitía decir más de dos palabras seguidas. Fue Izumi el que habló.
Izumi:- se inclinó, servicial- siento profundamente que le haya incomodado el error garrafal que mi compañera ha cometido. Sin embargo, puedo asegurarle que mi pequeña irresponsable no le ha desvelado nada irrelevante a esa... muchacha...
Itsuko:- al escuchar las palabras de Izumi "esa muchacha" se encorelizó- ¡¡¡¡¡NI SE TE OCURRA LLAMARLA ASÍ! ¡¡¡¡NO ES UNA "MUCHACHA", INSENSATO SHINIGAMI, ES LA REINA DE ESTA TIERRA QUE PISAS! ¡¡¡¡ASÍ QUE VIGILA TUS PALABRAS!
Izumi:- reculó un paso atrás, mientras seguía con la reverencia- siento que le haya molestado... pensé que aún no podía ponerle ese título, ya sabe, por las circunstancias...- al ver que Itsuko iba a enfurecerse de nuevo, prosiguió- pero como le decía, Meroko no le ha desvelado nada importante a la reina. Yo mismo escuché la conversación...- calló al notar que Meroko ya no le cogía la pierna. Una mano negra la agarró por el cuello, la levantó del suelo y la llevó frente a Itsuko, a solo unos centímetros de distancia. La mano iba agarrándole cada vez más fuerte el cuello.
Itsuko: ¿nada irrelevante, eh? ¿entonces como fue que estaba tan convencida que no debía abrir la puerta? ¿qué le dijiste exactamente?
Meroko: tan solo le dije... que no... la... abriera...- le costaba hablar, y su rostro sudado empezaba a amoratarse. De repente, la mano soltó. Ella respiró hondo, y, lanzándole una mirada despreciable a Itsuko, agregó- le dije la verdad... que mientras no la abra... habrá esperanza...
Itsuko:- sonrió maliciosamente- je... veo que, pese a que eres una llorona, tienes agallas... pronto pasarán- le pisó la mano que la sujetaba en el suelo, mientras en su mano aparecía un cuchillo- ¿acaso te piensas que no sé hacer sufrir a un shinigami?- Meroko la miraba despavorida- parece que sí que me entiendes... ahora pagarás por tu rebeldía. Te haré entender que a mí no se me debe desobedecer... tu castigo será lo único que teméis los shinigami...
Meroko: ¡¡no, por favor! ¡¡lo he entendido! ¡¡le juro no volveré a hacerlo! ¡¡por favor, nooooooo! ¡¡¡¡IZUMIIIIIIIIIII!- lloraba desesperada, mientras luchaba por soltar su mano de Itsuko, que la tenía agarrada...
Izumi: ¡¡no lo haga, por favor! ¡¡¡¡POR FAVOR!
Itsuko:- una sonrisa maléfica se mostraba en su rostro, la del diablo- ... la muerte que tuvisteis... –bajó lentamente el cuchillo hasta la muñeca de Meroko...
Meroko: ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡NO, NO, NOOOOOOOOOOOO, NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO! ¡¡¡¡¡AGHHHHHHHHHHHHHHH!
Itsuko:- el cuchillo se reposó suavemente en la muñeca de Meroko... "Itsuko..."- en su mente escuchó la voz de Natsuki, justo antes de clavarle profundamente el cuchillo a la conejita. Zarandeó la cabeza para quitar esa voz, pero se repetía una y otra vez... lanzó el cuchillo y empujó duramente a Meroko, que tenía el rostro contorsionado del pavor. Izumi la sujetó por los hombros- Por esta vez, te escapas... pero como vuelvas a hacer algo en mi contra... ese cuchillo te perforará... ugh... estás avisada- dicho esto, desapareció.
Izumi: ¡¡Me-chan, Me-chan!- zarandeó con fuerza a una Meroko despavorida, hasta que empezó a recobrar algo de color. La abrazó- ya pasó todo...
Meroko: como le odio... le odio, Izumi... no quiero que le haga esto a Natsuki...
Izumi:- le miró fijamente- deja de preocuparte por Natsuki, Me-chan. ¿Acaso no te diste cuenta?
Meroko: ¿de qué?
Izumi: Con la única persona que el rey de los demonios deja de ser el diablo es con ella... con Finn Fishu.
Meroko: ¿qué quieres decir con eso?
Izumi: está claro... esta vez te has salvado por ella. Y si hay esperanza... si realmente hay esperanza... solo puede ser a través de ella. El señor de los infiernos se ha vuelto indulgente y protector... y por eso, sólo por eso, no te ha castigado.- miró hacia el balcón donde antes habitaba la figura de Natsuki, ahora vacía y solitaria- lo único que temo... es que la esperanza del rey y la de la reina son muy distintas... y demasiado opuestas... y si una se realiza... la otra perecerá.
Por el inframundo, una figura oscura volaba rápidamente hacia una sala en lo alto de un torreón, donde un ángel esperaba pensando...
Fin capítulo 60
