CLII
Dos años, seis meses y seis días luego de la desaparición de Henry
Del Laboratorio Nacional de Hawkins solo quedan los restos de sus cimientos. El lugar donde ella y Henry hubieron pasado todos esos años encerrados, siendo manipulados y sufriendo experimento tras experimento para alimentar los desvaríos de un narcisista ya no es más que escombros, un misterio más encubierto por el Gobierno.
Su padre debe saber el tipo de pensamientos que la aquejan, pues coloca su mano sobre su hombro izquierdo y se agacha levemente para murmurarle al oído:
—Ey. Hoy vas a hacer algo muy bueno.
Ella lo mira y no ve más que un sincero afecto en sus ojos. Esto le roba una sonrisa.
—¿Lista, corazón? —pregunta entonces su madre, quien va a pararse a su derecha con un arma en la mano—. Estaremos contigo en todo momento.
Antes de responder, Eleven se toma un momento para mirar hacia atrás: a unos pasos de sí, Jonathan, Nancy y Robin, vestidos con varios atuendos entre negro y patrones de camuflaje militar, la observan ansiosos. Están al tanto de su papel en todo esto, mas nunca la han visto en acción.
Espera que no piensen mal de ella luego de hoy.
Inspira hondo y finalmente retorna la vista hacia su madre, la determinación evidente en su rostro.
—Lo estoy.
Abrir el portal es sumamente sencillo, risible incluso: apenas un chasquido de sus dedos y allí se encuentra la ominosa puerta que conecta a la otra dimensión. Detrás de sí oye algunos murmullos apagados en los que detecta más que nada asombro. Bueno, es preferible a que la teman.
—Recuerden —ordena su padre a la par que adopta una postura defensiva, un revólver firmemente sujeto entre ambas manos y apuntando al frente, hacia ese hipnotizante rojo espectral que parece invitarlos a adentrarse en una trampa—: nuestra misión es únicamente recuperar a Steve Harrington. Una vez localizado nuestro objetivo, emprenderemos la retirada. Asimismo, debemos asumir que el enemigo ya sabe que venimos. No se confíen y manténganse unidos.
—Entendido —murmuran todos en respuesta a la par que se ponen en guardia: Jonathan y Joyce con un revólver, Nancy con una pistola, y Robin —quien sostiene una botella de whiskey en la mano— situándose detrás de Joyce.
El lugar de Eleven es en la retaguardia, al lado de Robin, desde donde espera poder responder adecuadamente a cualquier ataque y velar por la seguridad de los demás.
Eleven recuerda el mundo que alguna vez le hubo mostrado Henry: un lugar árido, hostil, plagado de inestables rocas y cubierto por espesas nubes negras. Sin embargo, advierte también una diferencia fundamental entre el lugar que Henry le hubo mostrado y este.
—No hay monstruos aquí —murmura con tono solemne.
—Eso es bueno, ¿no? —Como nadie secunda las palabras de Robin, la muchacha busca las miradas de sus compañeros, ansiosa—. ¿No lo es?
Es Hopper quien le responde:
—Demasiado bueno como para no ser una trampa. Movámonos.
—Carajo —masculla Robin, apurando el paso y pegándose más a Joyce.
El alivio les dura poco tras abandonar las planicies donde todos se hubieron sentido sumamente expuestos.
Después de todo, encontrar una dimensión secreta con un Hawkins distorsionado y destruido no es cosa de todos los días. Eso sin mencionar las nubes negras que se han ido abultando más y más hasta convertirse en furiosas nubes de tormenta.
—¿Podría Steve estar en su casa? —cuestiona Robin.
—Sería demasiado obvio —replica Nancy secamente sin despegar los ojos de las residencias más próximas a ellos.
—No conozco a este «otro» Henry (ni al original, a decir verdad), pero ¿si se tomó la molestia de crear un Hawkins de mentiras no sería lógico que jugara a la casita de muñecas con él? ¿Qué mejor lugar para colocar una muñeca que en su propio hogar? —insiste.
Todos guardan silencio por un momento.
—Tiene sentido —dice al fin Joyce con una mueca de disgusto al pasar demasiado cerca de una carnosa liana.
—No tenemos otras pistas… Voto por intentarlo —sugiere Jonathan con un dejo de timidez.
—De acuerdo —acepta Hopper, señalando con la palma de su mano izquierda hacia esa dirección.
La dirección —supone Eleven— donde debe hallarse la residencia de Steve.
