Estar por encima de los demás es duro a veces. Creo que lo es, no importa cuántos raritos digan lo contrario. Si soy honesta, estar tan arriba tiene sus propias complicaciones que aquellos que están abajo nunca tienen que lidiar.
Hikio, por ejemplo, es un don nadie que recientemente está volviéndose alguien, pero puede seguir actuando como le plazca. Hace lo que quiere, a veces dice lo que quiere y no le preocupan las consecuencias de sus acciones. Es de cierta manera un alma libre. Él se la puede pasar bien siendo honesto con lo que cree, sin preocuparse si trae consecuencias.
Yo no soy así. No puedo ser así debido a mi estatus que mantener.
En cierto modo lo sé, ¿saben? Sé que varias veces la gente como yo, los que están a mi alrededor incluso, no son tan genuinos como queremos aparentar. Sé que Hina tiene un lado oculto, que Yui tiene sus propios pensamientos que no comparte y que Tobe no es tan tonto como parece. Pero ocultamos esa parte de nosotros para mantener las apariencias.
Los amigos, siento yo, tienen que esforzarse un poco en ocultar lo que pueden sentir. Si no lo haces, puedes enfadarlos y eso puede acabar la amistad. Creo que lo que hacemos es necesario, lo correcto y que Hikio es un idiota por preferir campar a sus anchas gritando lo superior que es por mentir que nosotros.
Pero él miente. Sé que no es tan honesto como quiere parecer. Creo que Hikio oculta algo, pero que no puedo tener ni una pista de qué esl. Aun así, tampoco es que sea malo. Mis pensamientos sobre ocultar algunas cosas por el bien de los demás también se aplica a él y por eso creo que Hikio tiene una oportunidad de ser salvado. Hikio puede cambiar, no mantenerse así, y dejar de lastimar a Yui.
Entiendo que puede ser molesto tener que mantener las apariencias, decir mentiras piadosas por el bien de los demás y a veces sentir que tus vínculos no son tan cercanos como la mayoría, pero si la alternativa es volverse un adulto triste que no tendrá ningún amigo, ¿no es mejor solo... aguantar un poco? Hikio no se va a morir por mentir, y el amor que le tiene Yui es sincero. Estoy segura de que él estaría encantado de tener a una chica tan linda como Yui de novia.
Es prácticamente el sueño impensable de todos los que son como él.
Solo... Si, digo y creo todo esto, pero también puedo entender el lado de Hikio. Ahora, más que nunca, puedo entender por qué él rechaza tanto ser como nosotros, ser normal. Con lo que me está pasando ahora, hasta siento un poco de envidia de alguien como él, que no tiene que lidiar con nada de esto. Que puede rechazar pasar por todos estos problemas y vivir su día con una sonrisa.
'Voy a hacerte pagar' es lo que me dijo esa chica que hasta ahora no he registrado. Habló con mucha gente, pero solo recuerdo a quienes me importan de verdad, mis amigos. Todos los demás casi que ni me atrevo a recordar sus nombres. Si recuerdo a Hikio incluso antes de que empezara a ganar popularidad es porque sencillamente él era demasiado notorio para que no lo notara.
En el mal sentido, obvio. Era un bicho raro entre los bichos raros. Era casi aterrador verlo mirar a todos y actuar como si nadie lo notara. De verdad que me daba tanto asco en ese entonces que mi mente no pudo olvidar su cara. Y por eso le di un nombre. Es debido a la impresión tan fuerte que me generó.
Por eso... creo que de cierta forma es mi culpa que esto pasara. Si solo me importan mis amigos y aquellos que me causan una impresión tan fuerte, es natural que me olvidara de todos los otros a los que le hablé pero olvidé. Es mi culpa haber dejado una presencia tan marcada en varios y solo recordar a unos pocos.
Por eso, este es mi castigo. Estoy sufriendo debido a mis malas acciones del pasado, cuando perjudiqué a quien no se lo merecía solo porque estorbaba en mi camino. Me olvidé de ella, sin importarme cuánto daño le hice por mis deseos egoistas y ahora, por eso, todo lo que he construido, la imagen que tanto me costó mantener, se está rompiendo.
¨Está sola...¨
¨¿Crees que sus amigos saben algo? ¿Por qué sino la dejarían atrás?¨
¨Como se esperaba de Hayama-san. Él puede ver a través de todo¨
¨¿Entonces ella sí hizo eso? Dios, que asqueroso. Y yo pensaba declararmele¨
¨Que bueno que no lo hiciste. Ella no vale la pena¨
¨Ella siempre fue mala. Me alegro que ahora todos se estén dando cuenta¨
Ya llevaba un par de días esto, pero el rumor finalmente se extendió a toda la escuela. El rumor, que era verdad, de que le hice algo horrible a una chica inocente y que me olvidé hasta que ella me lo recordó. Fueron sus palabras las que me trajeron a la mente recuerdos que habría preferido olvidar, que me hice olvidar.
Este es mi castigo. Por eso quiero sufrir esto, al menos un poco más, antes de recibir el apoyo de mis amigos. No quiero empañar la reputación de Hayato. Sé cuanto le importa la imagen que da al mundo y no voy a permitir que yo lo arruine. Como la chica que eventualmente será su novia, me niego a hacerlo pasar mal. Por eso yo... aguantaré un poco más.
Esto eventualmente se olvidará. Siempre pasa lo mismo con los rumores. Solo necesito ser fuerte, recibir mi castigo y luego, cuando todo se olvide, ahí podré recibir el apoyo de mis amigos. Por mucho que no seamos tan genuinos, sé que nuestro cariño lo es. La amistad que tenemos no es tan fuerte, pero sé que podrá durar esto.
Sé que todo saldrá bien. De esta forma todos ganamos. Todo acabará bien así.
¨...¨
Sentí que la mirada de Hikio, que siempre iba rodando de un lado a otro, se detuvo en mí más de la cuenta. Es raro que él esté comiendo aquí estos días: desde que hizo popular, siempre se va a hacer sus cosas en cualquier otro lado. Como el bicho raro que sigue siendo, escapa de la buena voluntad de los demás, seguramente pensando en que todos son muy molesto y que aguantar la popularidad es un dolor.
... Y no puedo culparlo. Digo, la popularidad es en parte lo que volvió a todos tan ansiosos de castigarme. Me lo merezco, pero sé que si no tuviera mi reputación anterior, esto no se habría hecho tan grande. Tan grande que opacó rápidamente lo que venía logrando Hikio, al menos por un tiempo... y quizás es por eso que ahora se anima a comer en clase.
De verdad, Hikio, eres un bicho raro.
... Pero supongo que ser un bicho raro no te hace mala persona. Esta es tu forma de cuidarme, ¿verdad? Mirarme, ver cómo estoy tomando la situación y pensar en si debes meterte o no. Veo las ganas de querer ser el héroe en ti, Hikio, y aunque normalmente pensaría que eres un asqueroso, con todo lo que he aprendido de ti... supongo que debo agradecerte.
Gracias, por ser quien eres. Como estás tan alejado de todo esto, puedes ser tú mismo, ir contra la corriente, incluso cuando el peso nos puede aplasta sin esfuerzo. No somos amigos y todavía creo que tienes que cambiar para que Yui pueda estar contigo, pero aún así, aprecio mucho el sentimiento. Si tú, que no eres cercano a mí, puede compadecerse de mí, seguro que los demás también.
No eres tan bueno como Hayato, pero te ganaste puntos por esfuerzo.
Eso me recuerda... Tienes que ayudarme a seguir intentando conquistar a Hayato. Sé que no es el mejor momento, pero definitivamente no dejaré que te escapes. Apenas se calme la situación, te obligaré a trabajar. ¿Y quién sabe? Quizás todo esto pueda tener su lado bueno. Como Hayato va a estar muy preocupado por mi salud, quizás podamos idear algo que golpee más fuerte.
Si... Eso suena bien. Esperalo, Hikio.
Me voy a reponer enseguida. Esto es solo temporal.
Mi padre es... Él es un hombre extraño: eso es algo que pensé incluso cuando era niña.
Era un hombre serio, respetable y que se preocupaba por quienes le importaban. Fue un padre ejemplar dentro de lo que pudo ser, siempre atento de mis sentimientos y dejándome vivir sola a pesar de la negativa de mi madre. Él me quería, lo sabía bien, y también su aprecio era mutuo: yo quería a mi padre, valoraba lo buen hombre que es y aspiraba a que mi esposo fuera al menos la mitad de buen hombre que es él.
Pero... él es raro. Él es... como Hikigaya-kun.
No en personalidad, claro. Mi padre siempre se aseguro de mantener las apariencias, estar acorde al ambiente y siempre decía lo mejor para la otra persona. Era un maestro del contacto social, todo lo contrario del paria social Hikigaya-kun. Mi compañero forzoso de club no podría estar más lejos de mi padre en todo lo que hace a un ser humano alguien decente: la mera comparación haría que cualquiera se sintiera ofendido.
Pero... hay similitudes. Muchas más de las que me siento cómoda nombrando.
Ambos son tercos, ambos siempre creen tener la razón, ambos son apasionados, a ambos les gusta el mismo café basura, ambos siempre parecen pensar mucho más de lo que dicen y estoy bastante seguro de que ambos disfrutan de contenido literario cuestionable a juzgar por la reacción de mi madre cuando se enteró qué clase de 'literatura' estaba consumiendo.
Nunca me enteré ni tampoc Haruno: madre se aseguro de que aquello fuera enterrado para siempre. Pero el ver lo que consume Hikigaya-kun y que me sienta lo que yo creo es algo parecido a lo que vivió mi madre me da una idea. Una idea asquerosa y que me hace sentir aún más rara hacia mi padre.
Yo... yo quiero a mi padre: sé que lo hago. No lo odio... No lo odio, pero... hay momentos en los que siento que él es desagradable, alguien con quien no debería interactuar, una persona que oculta cosas muy malas detrás de su actitud perfecta. Sé que todos en mi familia lo hacen, sé que mamá es experta en ocultar como se siente y mostrarse perfecta, pero siento que mi padre es... algo más.
Algo que veo en Hikigaya-kun, como si hubiera una... presencia extraña a su alrededor, un aura que por más que me esfuerzo no logró explicar. Algo raro. Y peligroso.
Una tontería, lo sé, pero es una sensación tan arraigada en mí que me hace prestarle más atención de la debida a Hikigaya-kun, tratando de, mediante él, descubrir qué es lo que oculta mi padre.
¨...Jejeje~¨
¨...¨
Aunque de verdad es difícil. Verlo reírse leyendo... eso, me da asco. Es un insulto a las mujeres.
Luego de un día en el Club de Servicio que se pudo resumir en Yukinoshita siendo Yukinoshita y obligándome a tomar su té en pos de mi café glorioso, estaba pedaleando hacia casa, para nada emocionado de volver a pasar por la molestia de no poder ni hablar con Komachi. No solo porque quiero hablar con ella, sino porque perder tiempo de mi vida no me pone de buen humor precisamente.
La situación con este juego de porquería sigue siendo tan horrible como siempre. La satisfacción de haberle ganado a Hayama y dejar bien en claro que yo estoy arriba en la relación todavía está presente, pero ha menguado en su habilidad para mantenerme de buen humor. El tiempo pasa, ese momento pasa a ser un grato recuerdo y ahora tengo nuevas cosas de las que preocuparme.
¨... Tch¨
La charla con ese tipo me aclaró algunas cosas, pero aparte de dejarme un montón de dudas sobre mi futuro, también se quedaron en el tintero cosas que no entendí y no me explicó tan bien como querría. Al parecer él tampoco entiende taaanto de esto debido a que, al parecer, dos años es relativamente poco en comparación a cuanto lo llevan teniendo ciertas personas que, parece ser, no son buenas.
Encantador. Ahora me debo enfrentar a gamers. ¿Qué sigue? ¿Otakus? ¿Amantes de los juegos de rol? Cualquiera de los dos que sea, sé que olerá muy mal.
Pero por más que esa charla no haya terminado siendo tan productiva como me gustaría y de hecho me haya amargado aún más sobre este kusoge, no quiere decir que el conocimiento que me dieron fuera inútil. Al contrario, hay un par de cosas que me ayudaron mucho a qué esperar en el futuro y también comprendí mejor cuales son las capacidades auténticas de esta bolsa de basura hecha datos.
[No me llames bolsa, bolsa de carne]
Una de las cosas que me dijo y que me permitió tomar con más calma la situación fue aquello que me dijo sobre las chicas que esté sistema encadenó conmigo. Es por eso que tuve el tiempo suficiente para pensar qué iba a hacer y lo he estado llevando a cabo diligentemente. Por mucho que ella esté sufriendo por todo esto, no la quiero tanto como para hacer algo.
Miura Yumiko está siendo metida a la fuerza en esto, y por mucho que sea mi culpa, la consecuencia de intentar arreglar esto serán catastroficas para mí. He estado luchando un montón para enfrentarme a este kusoge, y aunque creí iba a ser una batalla perdida con cada minuto que pasaba, ahora finalmente encontré la forma de ganar la pelea, uno solución asquerosa, pero apropiada para Hikigaya Hachiman.
[Tienes que salvarla. Heroína Miura Yumiko está sufriendo y es tu deber rescatarlo. ¡Hazlo para hacer un gran avance en su relación!]
Cuando recibí ese mensaje en aquel momento, los sentimientos que pasaron por mi cabeza fueron variados, pero al final me aferré a los que me hicieron no querer hacer nada. A dejar que las cosas pasen. Después de todo, ¿por qué tengo que ayudar a Miura cuando no la quiero y encima parece ser que es su culpa? Si ella hizo esto, esté toda la situación siendo influenciada por el juego basura o no, no estoy obligado a hacer nada.
Soy un solitario. No quiero tener vínculos, mucho menos los que son falsos. Incluso si Miura no es tan mala como parecía y si incluso ella me quiere ayudar a su modo equivocado, si para acercarme a ella tengo que verme forzado a usar este kusoge, entonces es un vínculo que no vale la pena. Si para mantener mis principios ella tiene que sufrir un poco, por mí encantado.
Después de todo, ella tiene amigos, ¿no? Si su vínculo es tan poderoso como ella quiere creer, ellos la van a ayudar. No es mi asunto.
[Puedes intentar convencerte a ti mismo de eso, pero sé que te sientes culpable. Sé que quieres ayudarla]
...
...
Incluso si es así, no lo haré.
¨No soy un [MC]. Soy genuino¨
No sé qué diablos llevo a que te anclaras a mí, kusoge, pero te puedo asegurar que se equivocaron de idiota. Yo no quiero ni puedo vivir todo esto. No solo por mis creencias: es que, sencillamente, no puedo vivir todo esto. Escapa a mis posibilidades e incluso si no lo hiciera, alguien como yo no debe tener esto.
No soy un héroe, ni un chico popular ni alguien que posee tanta empatía. Fue divertido jugar a ser un protagonista shonen con Hayama, pero ya es suficiente. Todo juego debe llegar a su final algún día, y ahora le ha tocado a esto. Ahora, esta tontería finalmente puede tener el final que se merece. Como alguien genuino, te puedo asegurar que creo todo eso, kusoge.
[Dices eso, pero sé que vas a ayudar. Sé que te importa. Puedes aparentar todo lo que quieres, pero la verdad es que eres demasiado emocional, mucho más empático de lo que quieres creer. Trata de huir si es lo que quieres, pero sé que la salvarás. Eres un [MC] por una razón]
Cree lo que quieras, pero me niego a dejarme ser guiado por este sistema más de lo necesario. Esta mierda tiene una fecha de caducidad, y ya se ha pasado. Se ha pasado por mucho.
Soy Hikigaya Hachiman: ese es el nombre de alguien que se niega a ser una mentira, no el nombre de un burdo protagonista harem.
No ayudaré a Miura. Dejaré que se hunda hasta que su grupito arregle la situación y entonces me quitaré ese problema de encima. Hayama va a salvarla: ese es su deber, y entonces toda esa mierda de que me ame se puede ir a la basura.
Yo no haré nada. Dejaré que todo pase. Yo...
¨Soy genuino...¨
[¿Entonces por qué te mientes?]
Mientras pedaleaba ya a punto de llegar a mi casa, traté de pensar en una respuesta, algo que le quitara esa presuntuosidad al juego mugriento. Algo que me diera la victoria, que demostrara que tengo razón.
¨...¨
No se me ocurrió nada.
Capítulo corto, pero bueno, es un Prólogo. Es más que nada presentar los elementos que tendrán peso en estos siguientes capítulos. Por si no quedo claro, como trato a esto como una novela ligera, podríamos considerar a este volumen como ¨La historia de Miura¨, donde ella tendrá protagonismo. Y así iremos con cada chica, por lo menos las principales.
Esta es la segunda etapa de esta historia y quizás la más larga, pero supongo que al menos hará un poco más de honor a la sinopsis que planteé desde un comienzo. Todo bien con la esencia shonen, pero es hora de centrarnos más en las heroínas. Espero poder completar al menos este volumen antes de perder mi tiempo libre.
En fin, no creo que haya mucho que decir salvo que espero poder hacer bien lo que viene.
A los comentarios.
DatGuy1er:
¡Eh, un comentario en inglés! Me alegro que te haya interesado lo suficiente para leer esto. Y si, me alegro que te guste el enfrentamiento con Hayama. Me divertí mucho escribiéndolo y si no perdí favoritos asumo que por lo menos ustedes lo toleraron XD. Y de verdad me alegra que tuvieras esa suerte: no me ha pasado mucho, pero cuando me ocurrió, la alegría fue inmensa. Es un lindo sentimiento como lector.
Cuídate y espero que sigas a bordo.
Sebas602:
El problema con Yui, y las chicas en general, es que ninguna está lo suficientemente cerca de Hachiman. Ninguna, ni siquiera Yukino. Si te has fijado, pese a esto ser un Eroge, todo el avance que Hachiman hizo con las Heroínas fue accidentado. No avanzó en ninguna ruta y planteé esta historia en parte como una Novela Ligera también: las chicas tienen problemas y Hachiman tiene que ayudarlas a mejorar... El tema es que no lo hace.
Él tiene que ¨salvarlas¨. Quizás no de temas demasiado fuertes... aún, pero es lo que debe hacer. Hasta entonces, no habrá avances.
Lo que quiere el otro MC es algo que ya insinué: es el otro MC que apareció al final del capítulo, creo, 13. En el que apareció Iroha. Sus intenciones son respecto a ella, pero eso no es todo. Pero tranquilo, falta un tiempo para que él cobre importancia. Y cuando lo haga... nada será igual.
Komachi... Lo tiene difícil. Muy. Y Hachiman ni siquiera está del todo enterado de su sufrimiento porque no pueden hablar ni casi verse. Este volumen se centrará en menor medida ya en el drama familiar. De hecho el siguiente capítulo eso será un foco importante... aunque no como podrías pensar.
Espero te haya gustado este Prólogo. Sé que venimos de capítulos un poco cortos, pero tranquilo que volveremos a la cantidad tradicional en el siguiente. Es lo que tiene esta estructura. Intenté agregarle algunas cosas, pero si agregara más perdería un poco eso de ser un Prólogo.
En fin, gracias por siempre estar aquí leyendo. Me das ánimos de continuar. Ya pasé esa etapa de esperar comentarios cada día, pero bueno... siempre es lindo leer una opinión, ¿no?
En fin, cuídate y espera mi otra historia de Oregairu, que actualizaré mañana o el Domingo.
...
No sé cómo saldrá esto. Se aleja mucho de todo lo que ha sido la historia hasta ahora. Pero bueno, hay que arriesgar de vez en cuando. La historia tiene que crecer.
Cuídense. Nos vemos pronto.
