Disclaimer: Los personajes y el universo le pertenecen a JK Rowling.
Solo la trama es mía.
No obtengo ningún beneficio económico ni lucrativo de algún tipo al escribir este fic.
Aviso: Este fic participa en el Reto #76: "Celebrando los 500,000 posts" del foro Hogwarts a través de los años.
La palabra escogida es Progenie.
¿Quiénes son los monstruos?
Harry estaba lívido de furia. Había vigilado a los Dursley por si algún simpatizante de Voldemort quedaba por ahí y trataba de llegar hasta ellos y por si tenían un descendiente mágico. No quería que otra persona pasara por lo mismo que él.
Había sabido que Marge había muerto por un ataque de un perro y que Dudley se había casado con la hermana de Pierce y habían tenido cinco hijos. Rose y Ryan no habían tenido magia. Sus undécimos cumpleaños pasaron sin cartas.
Pero Rowan era distinto. Tenía ocho años y según averiguó Harry, hizo levitar un tarro de galletas y Dudley le echó de su casa. Harry tardó tres semanas en enterarse porque había estado en una misión diplomática fuera del país.
No podía comprender cómo su primo podía hacerle eso a su progenie. Era algo que jamás comprendería.
Harry se encargaría de Rowan. No iba a enviarlo con familiares muggles ni pocionado.
